Colegio de La Inmaculada Jesuitas – Lima Área de Ciencias Sociales 2014 HISTORIA Y REALIDAD PERUANA Profesor: Martín L. Zelaya A. Grado: 5º de Secundaria Bimestre: 4 Unidad: Primera García y Fujimori les dieron la gloria Fuente: Pérez, Melissa. García y Fujimori les dieron la gloria. En: Hildebrandt en sus trece, Año 2, N°92, Lima: 3-9 de febrero, 2012, p.6, 7 y 8. Narración de cómo el primer alanismo les sirvió en bandeja la planta de leche Gloria y cómo fue que con “el chino” la fortuna de los Rodríguez Banda creció exponencialmente. Pero son insaciables y acaban de comprar el 80% de las tierras subastadas en Olmos. Los hermanos Vito Modesto y Jorge Colombo Rodríguez Rodríguez son los hombres más lecheros del país. De ayudar en el negocio de camiones que su padre José Rodríguez Banda fundara en 1967, en Arequipa, brindando servicios de transporte a empresas mineras y a la fábrica “Gloria”, pasaron a convertirse en dueños de esa empresa en 1986. Hoy poseen decenas de empresas en el Perú, Argentina, Bolivia, Colombia, Ecuador y Puerto Rico en los sectores de lácteos, alimentos, cemento, papeles, agroindustria y transporte. Su mercado llega a casi 40 países en todo el mundo y su patrimonio familiar está estimado en 694 millones de dólares, convirtiéndose en la quinta familia más poderosa y rica del país. La buena estrella de los Rodríguez se inició en 1986 durante el primer gobierno de Alan García. Han sabido aprovechar su cercanía con los distintos gobiernos de turno y su éxito no ha parado. Sin embargo, su compra de 15600 hectáreas de las 193000 subastadas el 9 de diciembre pasado por Proinversión en el proyecto de irrigación Olmos, en Lambayeque, por 69 millones 649 mil dólares, para ganadería y plantación de caña de azúcar, ha sido cuestionada. En Olmos el Estado ha invertido más de 222 millones de dólares para regar miles de hectáreas lambayecanas con aguas traídas desde el río Huancabamba (Piura). Con su adquisición en Olmos los Rodríguez han acumulado más de 75 mil hectáreas de tierras agrícolas en la costa. Son los mayores latifundistas del país y manejan el monopolio de la leche y el azúcar. Además de las 15600 hectáreas en Olmos, los Rodríguez tienen tres agroindustrias azucareras y dos cañeras con un 1 total de 60977 hectáreas. En La Libertad tienen a Casa Grande (29383 has), Cartavio (11000 has), Chiquitoy (3200 has) y Santuco (1441 has) y en Ancash a San Jacinto (16000 has). Esta ambiciosa acumulación de tierras ha generado que José León Rivera, presidente de la Comisión Agraria del Congreso, presente un proyecto de ley que establece un máximo de posesión de 10000 has en la costa, 5000 en la sierra y 20000 en la selva. Los Rodríguez le deben lo que son a García. El economista Manuel Lajo Lazo, autor de libros sobre la agroindustria, contó que en enero de 1986 García lo invitó a tomar un desayuno para preguntarle cómo evitar que “Gloria”, entonces en manos de la familia Berckemeyer y los suizos de Nestlé, siguiera importando leche subsidiada. Nestlé tenía el monopolio lechero con una empresa al norte y con “Gloria”, lo cual atentaba contra la Constitución Política de 1979. Lajo le aconsejó a García que los trabajadores y ganaderos ingresen como accionistas de “Gloria”. El 28 de julio de 1986 García anunció la nacionalización de “Gloria” y dijo que los ganaderos serían los nuevos dueños de esa empresa. “Incluso nombró una comisión de transferencia de las acciones encabezada por el entonces ministro de Agricultura Remigio Morales Bermúdez, quien viajó a la planta de “Gloria” en Arequipa para negociar con los ganaderos. Yolo vi allí. Pero la jugada fue otra. En mayo de ese año los Rodríguez adquirieron el 40% de acciones de la familia Berckemeyer. Luego del anuncio de García, José Rodríguez Banda viajó a Suiza y compró el resto de acciones de Nestlé en solo 4 millones de dólares. Los suizos remataron una empresa que facturaba más de 80 millones de dólares al año. El 5 de agosto de 1986 José Rodríguez tomó el control de “Gloria”. Ni una sola acción se transfirió a los ganaderos. Fue la nacionalización “bamba” de García. “La comisión de Remigio Morales fue una pantomima y distracción mientras los Rodríguez compraban las acciones. Yo creí que Alan era serio. Se debe investigar cómo se hizo esa extraña transferencia” dijo Lajo. Increíblemente, en 1987, lejos de comprarles a los ganaderos locales, “Gloria” batió el récord de importación de leche en polvo usando los dólares MUC que el gobierno aprista repartía. “Esto demuestra que hubo un trabajo muy cercano entre García y los Rodríguez. En Arequipa mucha gente dice que el verdadero dueño de “Gloria” es Alan García porque presionó para que Nestlé la vendiera. Se favorecieron con la complicidad de García para someter a los productores lecheros y consumidores” agregó el ex congresista Lajo. En su libro Precios justos 2 al consumidor y productor agropecuario, que publicará próximamente, Lajo explica que los Rodríguez compran el litro de leche a menos de 0.90 céntimos cuando su precio real debería ser de 1,50 soles, pero venden el tarro de leche a 2,70 soles cuando debería costar 2,20 soles. En el 2007, 40 mil ganaderos protestaron contra “Gloria” pidiendo precios justos y sacrificaron cien vacas. “Mantienen en la pobreza a los ganaderos”, agregó Lajo. En los años 90 los Rodríguez compraron la Farmaceútica del Pacífico S.A., acionalización Empresarial S.A. (RACIEMNSA), D’Onofrio S.A., el Centro Papelero de Empresarios Privados, la empresa estatal Cementos Yura S.A., INDERLAC, Cemento Sur S.A., entre otras. En 1998 los Rodríguez compraron el 30% de cuatro empresas eléctricas estatales por 145 millones de dólares, 70% más que lo pedido en la licitación. Luego de dos años, solo pagaron 14 millones de dólares y renunciaron a la compra. Javier Diez Canseco, ex presidente de la Comisión Investigadora de Delitos Económicos y Financieros perpetrados entre 1990 y el 2001, dijo en abril del 2002 que los Rodríguez ocasionaron un prejuicio de más de 100 millones de dólares a las empresas, recuperaron más de su inversión, despidieron a 800 trabajadores y no pagaron penalidad por no haber cumplido con su deuda. Electroperú también informó en el 2001 que los Rodríguez no invirtieron nada en dichas empresas y realizaron operaciones financieras indebidas. Pero a los Rodríguez nada les afecta. El régimen fujimorista parecía blindarlos. Fujimori ya los había favorecido en 1992 al anular una ley que limitaba la importación de leche en polvo. Y los Rodríguez fueron agradecidos. Un vladivideo del 26 de noviembre de 1999 muestra a Vladimiro Montesinos narrando a los miembros de la cúpula militar la estrategia para financiar la campaña de la re elección con recursos del SIN aparentando donaciones de empresarios. “(Vito Rodríguez”. Me ha regalado diez carros para patrulleros en Arequipa y él va a pagar el millón de dólares que cuesta poner la papelería en Lima y Callao. Él va a dar la cara, dice yo estoy donando pero no va a donar ni medio. ¿Quién no va creer que la leche “Gloria”, que los Rodríguez Banda no ponen un millón de dólares al año?”, dijo Montesinos. Los Rodríguez admitieron en la Fiscalía que donaron 300 mil dólares en paneles publicitarios. Montesinos declaró en el juicio el 24 de mayo del 2002 que el hermano mayor de los Rodríguez Banda llegó al SIN con Ricardo Winitzky para simular la donación. Ante la comisión presidida por 3 Diez Canseco, Vito y Jorge Rodríguez admitieron haber aportado 970 mil dólares a la campaña de Fujimori. Los Rodríguez también tuvieron vínculos con la cúpula militar y testaferros de Montesinos que saquearon la Caja de Pensiones Militar Policial. El diario La República reveló en marzo del 2001 cómo entre 1992 y 1993 los Rodríguez vendieron 6 millones de dólares en acciones de la Financiera del Sur (Finsur) a los directivos de la Caja Militar. Entre 1994 y 1998 vendieron más acciones a Juan Valencia Rosas y Luis Duthurburu, testaferros de Montesinos. El resto del accionariado fue adquirido por la Compañía Industrial El Álamo, de los familiares de Víctor Alberto Venero Garrido, también testaferro de Montesinos. En poder del montesinismo, el banco fue usado para facilitar operaciones nada santas. En julio del 2002, Diez Canseco detalló los vínculos entre los Rodríguez y Fujimori. El informe de la comisión que él presidió tiene un acápite titulado “Participación de Vito Rodríguez y Jorge Rodríguez, principales accionistas de JORBSA (empresa Jorge Rodríguez Banda S.A.), en irregularidades detectadas durante el régimen de Alberto Fujimori”. Las investigaciones hallaron que Vito y Jorge Rodríguez avalaron un préstamo de la empresa Ingenieros Edificaciones al Banco Continental por 1 millón y medio de dólares para la compra simulada, en 1998, de un terreno en la calle Pinerollo en Surco, de Alberto Fujimori. El aval se dio al día siguiente de que los Rodríguez compraran el 30% de cuatro empresas eléctricas. Fujimori dijo que esa venta le permitió costear la cara educación de sus hijos. Montesinos diría después que esa venta fue ficticia. Vito Rodríguez también compró en el 2000 un lote en Chavimochic a Augusto Miyagusuku, ex presidente de Popular y Porvenir, por 200 mil dólares cuando Miyagusuku lo había comprado por un millón de dólares en 1994. Montesinos declaró en diciembre del 2001 que en 1995 entregó a Miyagusuku más de 700 mil dólares para la compra de dicho terreno en presencia de Fujimori. En el 2010 los Rodríguez se vieron envueltos en el presunto financiamiento del espionaje telefónico de Business Track (BTR) a sus empresas competidoras. A los marinos de BTR se les descubrió conversaciones del 2005 de Augusto Rubini Vargas, ex dueño de Trupal y expresidente de Cartavio, justo cuando negociaban la venta de Trupal y sus acciones a Cartavio, que terminaron en poder de los 4 Rodríguez, al igual que Chiquitoy, de su hermano. Los Rubini Vargas perdieron en estas ventas 30 millones de dólares. Coincidentemente, entre el 2004 y 2006 BTR trabajó para los accionistas de Cartavio vinculados con los Rodríguez. “Me espió quien quería comprar mis empresas a la fuerza. Y esos fueron los Rodríguez. Ellos planificaron todo. Perdí el 12% de mis acciones en Cartavio y Trupal. También compraron Chiquitoy, en el 2006, en forma hostil, a mi hermano Jorge. Él perdió 10 millones de dólares”, dijo Augusto Rubini, hoy dedicado a la minería. Los Rubini Vargas manejaban MPC del Perú, la empresa de papel y cajas más grande del país que competía con los Rodríguez. Augusto Rubini compró Trupal al Estado por 14 millones de dólares en 1997 y terminó rematándola en 4 millones a los Rodríguez en el 2005. Su perdición fue no contar con bagazo. Eso lo llevó a incursionar en Cartavio en el 2000. Durante un año y medio Cartavio, cuyo gerente general era Julio Bustamante Alonso, le dio bagazo pero luego se lo negó. Bustamante Alonso había sido puesto por Enrique Umbert, quien había comprado el 51% de acciones de Cartavio tres años antes gracias a un préstamos de 17 millones de dólares del Banco Wiesse. Lo increíble fue que luego de 15 días de esa operación Umbert se declaró en quiebra y dejó debiendo a los bancos 60 millones de dólares. “Querían hacerme quebrar. Buscaban vender Cartavio a los Rodríguez. Cuando necesitaba bagazo, Vito Rodríguez me pidió comprar el 50% de Trupal. Desayuné con él y su hermano en su casa diez veces. Vito me servía el azúcar en mi taza de café. Eran muy serviciales pero me hicieron una compra hostil. Confabularon para que Cartavio me niegue el bagazo, asfixiarme económicamente y comprar mis empresas. Cuando acepté no los vi más. Yo veía a Bustamante en las oficinas de los Rodríguez”, recuerda Rubini. Cuando aún era dueño de Trupal le impusieron una junta administradora encabezada por Pedro Rosell Grijalba, fundador del BTR, quien saqueó su empresa. En el 2005, el Banco Wiesse vendió, sin que lo supiera, sus acciones de Cartavio a Bustamante. “El banco las tenía en custodia por un préstamo de 10 millones. Pagué más de siete y refinancié el resto pero lo perdí todo. Después, Bustamante, que no invirtió un solo dólar, revendió el 51% de acciones a los Rodríguez en más de 90 millones de dólares a través de una compañía off shore, incluidas mis acciones”, agrega Rubini. 5 Rubini pidió investigar el origen de la fortuna de los Rodríguez. “Su crecimiento requiere de varias generaciones. Mi familia perdió 30 millones de dólares por culpa de los Rodríguez, devoradores de industrias. Ellos me chuponearon. Si aparezco muerto mañana ya sabrán quiénes me ha matado”, dijo Rubini. Pese a que el ex jefe de la Dirandro, general Carlos Morán, dijo en noviembre del 2011 que la ex gerente de BTR, Giselle Giannottim, le manifestó que los Rodríguez financiaban espionaje telefónico. No fueron incluidos en el proceso. Los marinos de BTR también espiaban a Agroindustrial Laredo. Laive y Cementos Otorongo, coincidentemente todas competidoras de “Gloria”. Durante la década pasada los Rodríguez compraron plantas lecheras en Puerto Rico, Bolivia, Argentina y Ecuador. En enero del 2006 compraron el 57% de acciones de la Empresa Agroindustiral Casa Grande, otrora primer ingenio azucarero de sud américa, a 1,50 soles cada acción cuando su precio real era de 10 soles. En julio del 2010 la Federación de Azucareros protestó contra el monopolio de “Gloria”, que abastece más del 70% del mercado lechero. Sin contar Casa Grande, el Grupo Gloria de los Rodríguez, factura anualmente alrededor de 1000 millones de dólares. Alan García los considera sus padrinos. 6