Investigación Fiscal 29 de febrero de 2008 • BOLETÍN DE LA COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN FISCAL Núm. 207 • Recuperación del Impuesto al Activo Pagado hasta 2007 PRESENTACIÓN De conformidad con lo establecido en la Ley del Impuesto al Activo, los contribuyentes señalados en dicha ley estuvieron obligados a determinar este impuesto hasta el ejercicio fiscal de 2007, el cual funcionó como un impuesto mínimo respecto del impuesto sobre la renta y era susceptible de ser recuperado posteriormente si en alguno de los diez ejercicios posteriores los contribuyentes causaban un impuesto sobre la renta superior al impuesto al activo causado en ese ejercicio. A través del Artículo Segundo Transitorio de la citada Ley se abrogó la Ley del Impuesto al Activo. La intención del presente boletín es dar a conocer al lector las disposiciones fiscales que regulan la posibilidad de que los contribuyentes recuperen las cantidades que pagaron en los diez ejercicios inmediatos anteriores al de 2008 por concepto de impuesto al activo, así como ciertas interpretaciones que se desprenden al amparo de lo establecido en dichas disposiciones. ISO 9001:2000 El 1º de octubre de 2007 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Decreto a través del cual se expidió la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, la cual entró en vigor el 1° de enero de 2008. CCPM Boletín de Investigación Fiscal 2008 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 ÍNDICE 2006-2008 C.P.C. Javier García Sabaté Palazuelos Presidente 1. ANTECEDENTES C.P.C. José L. Ibarra Posadas Vicepresidente de Desarrollo y Capacitación Profesional 2. DISPOSICIONES APLICABLES C.P. Juan Francisco Fernández Andrea Director Ejecutivo 2.1 Ley del Impuesto al Activo vigente hasta 2007 COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN FISCAL 2006-2008 2.2 Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única C.P. Mauricio Urrutia Schleske Presidente C.P.C. y M.A Raúl Tagle Cázares Vicepresidente INTEGRANTES Lic. Elías Adam Bitar C.P. José Gerardo Alfaro Osorio C.P. Eduardo Álvarez Guerrero C.P.C. Angelina Arellanos de López Lic. Mauricio Bravo Fortoul C.P. Arturo Carvajal Trillo C.P.C. Marcial A. Cavazos Ortiz C.P. José Antonio De Anda Turati C.P. Plácido Del Ángel Herrera C.P. Gerardo Domínguez Gómez C.P.C. y M.I. Jorge Marcos García Landa C.P. Héctor González Legorreta Lic. y C.P. Víctor Hugo González Martínez C.P.C. Ernest Haiat Khabie C.P.C. Pablo Alejandro Limón Mestre Lic. Mauricio Martínez D'Meza Violante C.P.C. Arturo Martínez Martínez C.P.C. Ruy Méndez Marimón M.A. y C.P. Guillermo Adolfo Merchant Vázquez C.P. Omar Miranda Escamilla C.P. Víctor Manuel Pérez Ruiz C.P.C. Juan Manuel Puebla Domínguez C.P.C. Alejandro Javier Sánchez Calderón C.P. Luis Sánchez Galguera C.P. Alejandro Solano González C.P.C. Manuel Tamez Zendejas C.P. Miguel Ángel Temblador Torres Lic. Ángel José Turanzas Díaz C.P. Julio Cesar Ugalde Davó C.P.C. y M.I. Elio Fernando Zurita Morales Lic. Grisell Fernández Mendoza Gerente de Afiliación y Servicios a Socios Comisión de Investigación Fiscal del CCPM, Año XVI, Núm. 207, 29 de febrero de 2008, Boletín Informativo edición e impresión por el Colegio de Contadores Públicos de México, A.C., Responsables de la Edición: Teresa Alamilla Jiménez y Lic. Francisco José Medina Ocampo, Bosque de Tabachines Núm. 44, Fracc. Bosques de las Lomas, Deleg. Miguel Hidalgo 11700. El contenido de los artículos firmados es responsabilidad del autor; tiraje de 6,500 ejemplares; prohibida la reproducción total o parcial, sin previa autorización. 3 a) Primera interpretación b) Segunda interpretación c) Método de interpretación auténtico de la ley 3. CONCLUSIONES Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 1. ANTECEDENTES El 1º de octubre de 2007 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Decreto a través del cual se expidió la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, la cual entró en vigor el 1° de enero de 2008. Dicho impuesto se presenta como un impuesto mínimo respecto del impuesto sobre la renta, y se determina sobre bases de flujo de efectivo. En el Artículo Segundo Transitorio de la citada Ley se establece que se abroga la Ley del Impuesto al Activo publicada en el Diario Oficial de la Federación el 31 de diciembre de 1988. El Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única señala que los contribuyentes que hubieran estado obligados al pago del impuesto al activo, que en el ejercicio fiscal de que se trate efectivamente paguen el impuesto sobre la renta, podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran efectivamente pagado en el impuesto al activo en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en el que efectivamente se pague el impuesto sobre la renta, siempre que dichas cantidades no se hubieran devuelto con anterioridad o no se haya perdido el derecho a solicitar su devolución conforme a la Ley que se abroga. Por otra parte, el segundo párrafo de la disposición transitoria en cuestión establece que la devolución a que se refiere el párrafo anterior, en ningún caso podrá ser mayor a la diferencia entre el impuesto sobre la renta que efectivamente se pague en el ejercicio de que se trate y el impuesto al activo pagado, sin considerar las reducciones del artículo 23 del Reglamento de la Ley del Impuesto al Activo, que haya resultado menor en los ejercicios fiscales de 2005, 2006 ó 2007 en los términos de la Ley que se abroga, sin que en ningún caso exceda del 10% del impuesto al activo a que se refiere el párrafo anterior por el que se pueda solicitar la devolución. En relación con lo dispuesto en los dos párrafos anteriores pudieran surgir las siguientes inquietudes: a) Si el impuesto al activo que los contribuyentes pueden solicitar en devolución es el que corresponde a los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en que se pague impuesto sobre la renta y, por tanto, que opera un periodo de caducidad de 10 años como lo establecía la Ley abrogada, lo cual pudiera generar que los contribuyentes pierdan el derecho a la devolución de ciertas cantidades en aquellos ejercicios en los que no se pueda recuperar todo el impuesto, ya sea porque no se generó impuesto sobre la renta suficiente en exceso al impuesto al activo para solicitar su devolución; o bien, porque no se pueda recuperar todo el impuesto por la limitante del 10% antes mencionada; y 1 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 b) Si la limitante del 10% del impuesto al activo que se pude solicitar en devolución debe determinarse sobre el impuesto al activo que se tenga derecho a solicitar en devolución a la entrada en vigor de la Ley; o bien, sobre el monto del impuesto al activo que se tenga derecho a recuperar en los diez ejercicios anteriores a aquél en que se pague el impuesto sobre la renta. Por lo tanto, a continuación se presenta un análisis de las disposiciones fiscales por virtud de las cuales los contribuyentes podrán solicitar la devolución del impuesto al activo que pagaron en los diez ejercicios inmediatos anteriores al de 2008. 2. DISPOSICIONES APLICABLES Con objeto de facilitar la comprensión del presente boletín, en primer lugar se analizarán de manera general las disposiciones contenidas en la Ley del Impuesto al Activo abrogada, relativas al derecho que tenían los contribuyentes de solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en los últimos diez ejercicios. Posteriormente se analizarán las disposiciones transitorias de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, con objeto de determinar la manera en que los contribuyentes del impuesto al activo podrán solicitar la devolución de dichas cantidades. 2.1 Ley del Impuesto al Activo vigente hasta 2007 El artículo 1° de la Ley del Impuesto al Activo vigente hasta el ejercicio de 2007 establece que las personas físicas que realicen actividades empresariales y las personas morales, residentes en México, están obligadas al pago del impuesto por el activo que tengan, cualquiera que sea su ubicación. El artículo 2 del mismo ordenamiento señala que los contribuyentes determinarán el impuesto por ejercicios fiscales aplicando al valor de su activo en el ejercicio la tasa del 1.25%. Por otra parte, el primer párrafo del artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo vigente hasta el ejercicio fiscal de 2007 menciona que los contribuyentes podrán acreditar contra el impuesto del ejercicio una cantidad equivalente al impuesto sobre la renta que les correspondió en el mismo, en los términos de los Títulos II o II-A, o del Capítulo VI del Título IV de la Ley del Impuesto sobre la Renta. El cuarto párrafo del mismo artículo establece que cuando en el ejercicio, el impuesto sobre la renta por acreditar en los términos del primer párrafo de dicho artículo exceda al impuesto al activo del ejercicio, los contribuyentes podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran pagado en el impuesto al activo en los diez ejercicios inmediatos anteriores, siempre que dichas cantidades no se hubieran devuelto con anterioridad. La devolución en ningún caso podrá ser mayor a la diferencia entre ambos impuestos. 2 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Adicionalmente, el artículo 9 de la ley en estudio señala que cuando el contribuyente no efectúe el acreditamiento o solicite la devolución en un ejercicio pudiéndolo haber hecho conforme a este artículo, perderá el derecho a hacerlo en ejercicios posteriores. Como se puede observar, la Ley del Impuesto al Activo vigente hasta el ejercicio de 2007 otorga al contribuyente la posibilidad de solicitar en devolución las cantidades de impuesto al activo que hubieran pagado en los diez ejercicios anteriores, siempre que el impuesto sobre la renta del ejercicio haya excedido al impuesto al activo del mismo ejercicio y hasta por un importe equivalente a la diferencia entre ambos impuestos. Si el contribuyente no solicitó la devolución del impuesto al activo pagado en un ejercicio pudiéndolo haber hecho conforme a lo antes mencionado, dicho contribuyente habrá perdido el derecho a solicitar su devolución en ejercicios posteriores. Es importante mencionar que la regla 4.9. de la Resolución Miscelánea Fiscal que estuvo vigente hasta el 31 de diciembre de 2007, permitía a los contribuyentes efectuar la compensación del impuesto al activo pendiente de recuperar en los términos antes mencionados contra el importe del impuesto sobre la renta correspondiente al ejercicio fiscal de 2007, o bien, en caso de no efectuar dicha compensación, el contribuyente podía efectuar la compensación contra los pagos provisionales del impuesto sobre la renta que deba efectuar en el ejercicio siguiente. Asimismo, el 31 de diciembre de 2007 fue publicada la Tercera Resolución de Modificaciones a la Resolución Miscelánea Fiscal para 2007, en la cual se señala a través de sus Artículos Sexto y Séptimo Transitorios, el procedimiento por medio del cual las sociedades controladoras y las sociedades controladas para efectos fiscales pueden obtener bajo ciertas circunstancias la devolución o compensar el impuesto al activo pagado por ellas en los diez ejercicios inmediatos anteriores. En resumen, hasta el ejercicio fiscal de 2007, los contribuyentes se encontraban en posibilidad de solicitar en devolución o compensar las cantidades de impuesto al activo que hubieran pagado en los diez ejercicios anteriores, cumpliendo los requisitos que para el caso en particular establecían las disposiciones fiscales. Ahora bien, como se mencionó en el apartado de Antecedentes, a partir del ejercicio fiscal de 2008 se abrogaron las disposiciones contenidas en la Ley del Impuesto al Activo, incluidas las que contenían el procedimiento por medio del cual los contribuyentes podían solicitar en devolución o compensar el impuesto al activo pagado en ejercicios anteriores. No obstante, los contribuyentes podrán solicitar en devolución las cantidades pagadas por concepto de impuesto al activo que tengan pendientes de recuperar, a través del procedimiento establecido en las disposiciones transitorias de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única vigente, las cuales serán analizadas en el siguiente apartado. 3 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 2.2 Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única El Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única establece textualmente en sus párrafos primero, segundo, quinto y octavo lo siguiente: “Los contribuyentes que hubieran estado obligados al pago del impuesto al activo, que en el ejercicio fiscal de que se trate efectivamente paguen el impuesto sobre la renta, podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran efectivamente pagado en el impuesto al activo en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en el que efectivamente se pague el impuesto sobre la renta, siempre que dichas cantidades no se hubieran devuelto con anterioridad o no se haya perdido el derecho a solicitar su devolución conforme a la Ley que se abroga. La devolución a que se refiere el párrafo anterior en ningún caso podrá ser mayor a la diferencia entre el impuesto sobre la renta que efectivamente se pague en el ejercicio de que se trate y el impuesto al activo pagado, sin considerar las reducciones del artículo 23 del Reglamento de la Ley del Impuesto al Activo, que haya resultado menor en los ejercicios fiscales de 2005, 2006 ó 2007 en los términos de la Ley que se abroga, sin que en ningún caso exceda del 10% del impuesto al activo a que se refiere el párrafo anterior por el que se pueda solicitar devolución. El impuesto al activo que corresponda para determinar la diferencia a que se refiere este párrafo será el mismo que se utilizará en los ejercicios subsecuentes. … Cuando el contribuyente no solicite la devolución ni efectúe la compensación pudiéndolo hacer hecho conforme a este artículo, perderá el derecho a hacerlo en ejercicios posteriores. … Los contribuyentes sólo podrán solicitar la devolución a que se refiere este artículo, cuando el impuesto sobre la renta efectivamente pagado en el ejercicio de que se trate sea mayor al impuesto al activo que se haya tomado para determinar la diferencia a que se refiere el segundo párrafo de este artículo.” 4 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 De una primera lectura se podría considerar que el artículo transitorio antes citado contempla en términos generales lo dispuesto en la Ley del Impuesto al Activo abrogada, en virtud de que el contribuyente tiene la posibilidad de recuperar el impuesto al activo pagado en los diez ejercicios previos a aquél en que pague de manera efectiva el impuesto sobre la renta. No obstante, de la lectura de los párrafos antes transcritos también es posible desprender varias interpretaciones. A continuación se analizan las dos que pudieran ser las más relevantes. a) Primera interpretación Una primera interpretación sería que el primer párrafo del Artículo Tercero Transitorio debe leerse en cada ejercicio (a partir del 2008) en el que el contribuyente pague impuesto sobre la renta; esto es, que en el ejercicio en que se pague el impuesto sobre la renta los contribuyentes podrán solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores en que haya estado vigente el impuesto al activo (hasta el ejercicio de 2007), en la medida en que dichas cantidades no se hubieren devuelto con anterioridad o no se hubiera perdido el derecho a su devolución. Lo anterior implicaría que si un contribuyente paga impuesto sobre la renta en el ejercicio de 2008 podrá solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores, esto es, en el periodo de 1998 a 2007; en caso de que el primer ejercicio a partir del 2008 en el que el contribuyente pague impuesto sobre la renta sea el de 2010, solamente podría pedir la devolución de las cantidades pagadas en el periodo de 2000 a 2007, perdiendo de esta manera el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo correspondiente a los años de 1998 y 1999, y así sucesivamente en cada ejercicio. Bajo esta interpretación, la limitante establecida en el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio, consistente en la facultad de solicitar la devolución de hasta el 10% del impuesto al activo a que se refiere el primer párrafo de dicho artículo, tendría que aplicarse año con año sobre una base distinta, ya que como se comentó anteriormente, año con año el impuesto al activo que se podría recuperar sería menor al ir caducando el derecho sobre los años anteriores. A fin de facilitar la comprensión de esta interpretación, a continuación se analiza un ejemplo en el que se muestra la afectación que tendrían los contribuyentes bajo esta interpretación al perder el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo conforme pasa el tiempo, considerando la limitante del 10% antes mencionada. 5 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Para estos efectos, se asume que un contribuyente pagó impuesto al activo en los años que se relacionan a continuación y por las siguientes cantidades: Concepto IA Pagado 1998 $100 1999 $30 2000 $0 2001 $10 2002 $0 2003 $10 2004 $0 2005 $10 2006 $20 2007 $20 Total $200 Asimismo, se parte del supuesto de que en el ejercicio de 2008 este contribuyente paga impuesto sobre la renta y, por tanto, en ese ejercicio genera el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en los últimos 10 ejercicios, esto es, del periodo comprendido de 1998 a 2007 en cantidad de $200. Ahora bien, para determinar el monto máximo que se puede solicitar en devolución en 2008 se debe comparar el impuesto sobre la renta pagado en este ejercicio, el cual se asume que es de 1 $110, con el impuesto al activo que haya resultado menor en los ejercicios de 2005, 2006 ó 2007, por lo que tendría que ser comparado contra la cantidad de $10 correspondiente al ejercicio de 2005 y, por tanto, podría en principio solicitar la devolución de $100. Como ya se mencionó, bajo esta interpretación el contribuyente no podría solicitar la devolución de $100, aun y cuando en el año de 1998 haya pagado esta misma cantidad ($100), ya que el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio establece que sólo se podrá solicitar en devolución el 10% del impuesto al activo pagado en los 10 ejercicios anteriores; esto es, $20 ($200 * 10%). Lo anterior implica un perjuicio para el contribuyente, ya que estaría perdiendo el derecho a solicitar la devolución en el futuro de los $80 restantes que fueron pagados en 1998 y que no podría obtener en devolución por virtud de la limitante del 10%, pues a partir del año de 2009 el ejercicio de 1998 quedaría excluido del periodo de diez años que bajo esta interpretación se podría solicitar en devolución. Asimismo, el contribuyente se vería perjudicado pues la base que serviría para determinar el 10% del impuesto al activo que se podría solicitar como máximo en devolución en ejercicios posteriores a 2008 se vería reducida en $100, que es el impuesto correspondiente al ejercicio que bajo esta interpretación caduca; es decir, 1998. Esto es, si el contribuyente pagara $110 por concepto de impuesto sobre la renta en 2009, al compararlo con el impuesto al activo que resultó menor en 2005, 2006 ó 2007, el cual es de $10 correspondiente al ejercicio de 2005, en principio podría pedir la devolución hasta por un monto de $100. Sin embargo, al aplicar la limitante del 10% sobre el impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél por el que se paga el impuesto sobre la renta, solamente podría considerar el impuesto al activo pagado en el periodo de 1999 a 2007; es decir, tendría que considerar una base de $100 y, por tanto, sólo podría recuperar hasta $10 de los $30 que se pagaron en 1999 y ya no hasta $20 como en el ejercicio anterior. 1 6 La regla 17.21. de la Resolución Miscelánea Fiscal establece que los contribuyentes que no hayan pagado el impuesto al activo en los ejercicios fiscales de 2005, 2006 ó 2007, para determinar la diferencia a que hace referencia el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio, podrán tomar el impuesto al activo pagado que haya resultado menor en cualquiera de los diez ejercicios fiscales inmediatos anteriores a aquél en el que efectivamente se pague impuesto sobre la renta, sin considerar las reducciones del artículo 23 del Reglamento de la Ley del Impuesto al Activo. Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Por lo tanto, en esta interpretación el contribuyente se vería afectado pues en sólo dos ejercicios (2008 y 2009) perdería el derecho a recuperar el 50% ($100) del total del impuesto al activo que al 31 de diciembre de 2007 tenía derecho a recuperar ($200), lo cual pudiera pensarse que no es la intención de las disposiciones transitorias de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única como se analiza en los siguientes apartados de este boletín. b) Segunda interpretación Esta interpretación consiste en que el primer párrafo del Artículo Tercero Transitorio solamente debe leerse en el ejercicio en que se pague por primera vez impuesto sobre la renta, con posterioridad al 31 de diciembre de 2007. En ese momento, los contribuyentes determinarían cuál es el monto total de impuesto al activo que se podrá recuperar en ese ejercicio y en ejercicios posteriores, sin que necesariamente vaya caducando el derecho a su devolución, y esta cantidad sería la que serviría de base para determinar la limitante del 10%, tanto en ese ejercicio como en todos los años futuros en los que se vaya generando el derecho a la devolución por haber pagado efectivamente impuesto sobre la renta (segundo párrafo del artículo transitorio). Es decir, una vez que los contribuyentes paguen en un ejercicio posterior a 2007 impuesto sobre la renta, en ese momento determinarían de manera fija el monto total por concepto de impuesto al activo que podrían recuperar en los ejercicios posteriores que sean necesarios (siempre y cuando no se haya perdido el derecho a la devolución conforme a la Ley del Impuesto al Activo abrogada en el ejercicio en que se pague el impuesto sobre la renta), y ese mismo monto sería el que serviría de base para determinar la limitante del 10% a que se refiere el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio. Si consideramos el mismo ejemplo analizado en el apartado anterior, se tendría que el monto total sujeto de devolución sería $200 (asumiendo que se paga impuesto sobre la renta en el ejercicio de 2008) y, por tanto, que el límite que se podría pedir en devolución en cada ejercicio sería en todos los casos de $20. En este sentido, considerando las mismas cifras que en el ejemplo anterior, este contribuyente podría pedir la devolución de $20 en 2008 y de $20 en 2009, quedándole pendiente de recuperar $160 en ejercicios futuros. 7 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Como se puede observar, en esta interpretación el contribuyente recuperaría en los ejercicios de 2008 y 2009 $40 en lugar de $30 que se recuperarían conforme a la primera interpretación. Asimismo, se tendría el derecho a recuperar $160 en el futuro en oposición a los $100 que se podrían recuperar conforme al primer escenario, los cuales como ya se mencionó no se podrían recuperar por el efecto combinado de la caducidad y de la aplicación de la limitante del 10% sobre una base cada vez menor. Es importante señalar que en la segunda interpretación solamente se perdería el derecho a la devolución del impuesto al activo por aquellos ejercicios que transcurran entre el 31 de diciembre de 2007 y el ejercicio en que se pague por primera vez impuesto sobre la renta; o bien, cuando el contribuyente pudiendo solicitar la devolución no lo hiciere o hubiera perdido el derecho a solicitar la devolución conforme a la Ley del Impuesto al Activo abrogada. Por las razones que se mencionan a continuación en este boletín, existen elementos razonables para sostener que la segunda interpretación del Artículo Tercero Transitorio es la que resulta más congruente con la intención del legislador. El artículo 5 del Código Fiscal de la Federación establece en su primer párrafo que las disposiciones fiscales que establezcan cargas a los particulares y las que señalan excepciones a las mismas, así como las que fijan las infracciones y sanciones, son de aplicación estricta. Se considera que establecen cargas a los particulares las normas que se refieren al sujeto, objeto, base, tasa o tarifa. Al respecto, es claro que el Artículo Tercero Transitorio no es una disposición que establezca cargas para los contribuyentes ni excepciones a las mismas, ni tampoco fija infracciones y sanciones, por lo que su interpretación no debiera ser estricta. No obstante, como se analizó anteriormente en este boletín, aun bajo una interpretación estricta, la segunda interpretación se desprende de la simple lectura del Artículo Tercero Transitorio, independientemente de que dicha disposición admita otras lecturas. Es importante tener en cuenta que el segundo párrafo del artículo 5 del Código Fiscal de la Federación establece que las demás disposiciones fiscales se interpretarán aplicando cualquier método de interpretación jurídica. En el caso en cuestión, dado que es posible atender a cualquier método de interpretación jurídica, se tomará en cuenta el método de interpretación auténtico de la ley para desentrañar cuál fue la intención del legislador al momento en que redactó el Artículo Tercero Transitorio. 8 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 c) Método de interpretación auténtico de la ley Este método de interpretación busca desentrañar el significado auténtico de la norma, en función a la intención de quien la hizo y se deriva de los órganos mismos que la establecen. Para estos efectos, cabe hacer referencia al artículo 72, inciso f) de la Constitución, el cual establece Io siguiente: "Todo proyecto de ley o decreto, cuya resolución no sea exclusiva de alguna de las Cámaras, se discutirá sucesivamente en ambas, observándose el Reglamento de Debates sobre la forma, intervalos y modo de proceder en las discusiones y votaciones. ... f) En la interpretación, reforma y derogación de las leyes o decretos, se observarán los mismos trámites establecidos en su formación". En este sentido, cabe hacer referencia al método histórico originado en la escuela subjetiva o de la voluntad del legislador, en donde se utiliza la gramática para examinar la forma y conexión sintáctica de la norma, lo cual incluso ha sido validado por nuestros tribunales, como se aprecia en el precedente que se transcribe a continuación: “INTERPRETACIÓN DE LA CONSTITUCIÓN. ANTE LA OSCURIDAD O INSUFICIENCIA DE SU LETRA DEBE ACUDIRSE A LOS MECANISMOS QUE PERMITAN CONOCER LOS VALORES O INSTITUCIONES QUE SE PRETENDIERON SALVAGUARDAR POR EL CONSTITUYENTE O EL PODER REVISOR. El propio artículo 14 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos autoriza, frente a la insuficiencia u oscuridad de la letra de la ley, utilizar mecanismos de interpretación jurídica. Al desentrañar el sentido y alcance de un mandato constitucional deben privilegiarse aquellos que permitan conocer los valores o instituciones que se quisieron salvaguardar por el Constituyente o el Poder Revisor. Así, el método genético-teleológico permite, al analizar la exposición de motivos de determinada iniciativa de reforma constitucional, los dictámenes de las Comisiones del Congreso de la Unión y el propio debate, descubrir las causas que generaron determinada enmienda al Código Político, así como la finalidad de su inclusión, lo que constituye un método que puede utilizarse al analizar un artículo de la Constitución, ya que en ella se cristalizan los más altos principios y valores de la vida democrática y republicana reconocidos en nuestro sistema jurídico. Amparo en revisión 2639/96. Fernando Arreola Vega. 27 de enero de 1998. Unanimidad de nueve votos en relación con el criterio contenido en esta tesis. Ausentes: Juventino V. Castro y Castro y Humberto Román Palacios. Ponente: Mariano Azuela Güitrón. Secretario: Ariel Alberto Rojas Caballero. 9 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 El Tribunal Pleno, en su sesión privada celebrada el veintitrés de marzo en curso, aprobó, con el número XXVIII/1998, la tesis aislada que antecede; y determinó que la votación es idónea para integrar tesis jurisprudencial. México, Distrito Federal, a veintitrés de marzo de mil novecientos noventa y 2 ocho”. En función de lo anterior, un elemento que se podría tomar en cuenta con objeto de interpretar el alcance de la disposición en estudio, es sin duda la Exposición de Motivos relacionada con la incorporación del Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única. Por lo tanto, a continuación se transcribe el Artículo Tercero Transitorio de la iniciativa de ley a través de la cual el Ejecutivo Federal propuso al Congreso de la Unión el establecimiento de la Contribución Empresarial a Tasa Única. Posteriormente se analizará la Exposición de Motivos en la que se explican las razones de la inclusión de dicha contribución. “Tercero. Los contribuyentes que hubieran estado obligados al pago del impuesto al activo, que en el ejercicio fiscal de que se trate efectivamente paguen el impuesto sobre la renta, podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran efectivamente pagado en el impuesto al activo, en los diez ejercicios inmediatos anteriores a la entrada en vigor de la presente Ley, siempre que dichas cantidades no se hubieran devuelto con anterioridad o se haya perdido el derecho a solicitar su devolución conforme a la Ley que se abroga. La devolución a que se refiere este párrafo en ningún caso podrá ser mayor al impuesto sobre la renta que efectivamente se pague en el ejercicio”. Como se puede observar, la redacción que propuso el Ejecutivo Federal difiere de la redacción del Artículo Tercero Transitorio en vigor, ya que en la iniciativa de ley se propuso que el impuesto al activo que se podría solicitar en devolución sería el pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores a la entrada en vigor de la nueva y no el pagado en los diez ejercicios anteriores al año en que se pague por primera vez el impuesto sobre la renta a partir del ejercicio de 2008. Lo anterior implica que en la versión del Artículo Tercero Transitorio propuesto por el Ejecutivo Federal no existía la posibilidad de que se perdiera el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores al ejercicio de 2008 (salvo que se perdiera conforme a la Ley del Impuesto al Activo abrogada), como sí puede suceder en la versión del artículo en vigor, en donde tanto en la primera como en la segunda interpretación analizadas en este boletín se puede perder el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo pagado con anterioridad al ejercicio de 2008, hasta en tanto no se pague impuesto sobre la renta desde este último ejercicio. 2 9a Época del Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Volumen VII, Abril de 1998, página 17 10 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Al respecto, resulta conveniente analizar la Exposición de Motivos de la iniciativa de ley propuesta por el Ejecutivo Federal al Congreso de la Unión. “Ahora bien, para no afectar los derechos adquiridos de los contribuyentes que hayan pagado el impuesto al activo, se propone establecer que podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran pagado en el impuesto al activo en los diez ejercicios inmediatos anteriores y que cuando el impuesto sobre la renta que se pague en el ejercicio sea menor a la contribución empresarial a tasa única, podrán compensar contra la diferencia que resulte las cantidades que tengan derecho a solicitar en devolución, estableciendo además las reglas aplicables para el caso de escisión de sociedades”. Como puede observarse, la intención del Ejecutivo Federal no era limitar la recuperación del impuesto al activo pagado por los contribuyentes, razón por la cual se estableció la posibilidad de recuperar el impuesto al activo pagado en los diez años anteriores a la entrada en vigor de la nueva ley, independientemente de cuál fuera el ejercicio en que se pagara por primera vez impuesto sobre la renta, para que de esta manera el impuesto susceptible de recuperarse no caducara en ningún momento. No obstante, la Cámara de Diputados modificó la redacción del Artículo Tercero Transitorio al establecer que el impuesto al activo que se puede recuperar es el que se haya pagado en los diez ejercicios anteriores a aquél en que se pague impuesto sobre la renta por primera vez a partir de 2008, y no como lo había propuesto el Ejecutivo Federal en el sentido de que el impuesto al activo por recuperar fuera invariablemente el pagado en los diez ejercicios anteriores a la entrada en vigor de la nueva ley. En virtud de lo anterior, conviene analizar la Exposición de Motivos de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados al modificar la ley propuesta por el Ejecutivo Federal, misma que fue aprobada por el pleno de la Cámara de Diputados y posteriormente por la Cámara de Senadores, con objeto de desprender cuál fue la intención de modificar dicha propuesta. “En este mismo sentido y en virtud de que el impuesto al activo no estaba concebido como un impuesto recaudatorio, los contribuyentes que hayan pagado el impuesto al activo, podrán solicitar la devolución de las cantidades actualizadas que hubieran pagado en el impuesto al activo en los diez ejercicios inmediatos anteriores y que cuando el impuesto sobre la renta que se pague en el ejercicio sea menor a la contribución empresarial a tasa única, podrán compensar contra la diferencia que resulte las cantidades que tengan derecho a solicitar en devolución, estableciendo además las reglas aplicables para el caso de escisión de sociedades. Es importante señalar que esta Comisión Dictaminadora observa que la intención de la disposición transitoria antes señalada tiene por objeto darle congruencia al sistema que operaba en la Ley del Impuesto al Activo, por lo que los contribuyentes podrán estar en posibilidad de solicitar la devolución de las cantidades pagadas por concepto de 11 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 darle congruencia al sistema que operaba en la Ley del Impuesto al Activo, por lo que los contribuyentes podrán estar en posibilidad de solicitar la devolución de las cantidades pagadas por concepto de impuesto al activo; sin embargo, conforme a lo que actualmente dispone el artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo, la devolución de dicho gravamen procede respecto del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en el que el impuesto sobre la renta por acreditar exceda al impuesto al activo y hasta por el monto de la diferencia entre ambos impuestos. En este sentido, con el objeto de que la disposición transitoria sea congruente con los requisitos que actualmente establece la Ley del Impuesto al Activo, se propone modificar el artículo tercero transitorio de la Iniciativa con el objeto de establecer que el impuesto al activo de los diez ejercicios inmediatos anteriores por el cual se podrá solicitar devolución será el que se pagó en dichos ejercicios anteriores a aquél en que efectivamente se pague el impuesto sobre la renta. Así mismo, se propone que la devolución del impuesto al activo que podrán solicitar los contribuyentes en ningún caso podrá ser mayor a la diferencia entre el impuesto sobre la renta efectivamente pagado y el impuesto al activo pagado que haya resultado menor en cualquiera de los ejercicios fiscales en 2005, 2006 ó 2007, con lo cual se respeta el mismo principio establecido hoy en día en la Ley del Impuesto al Activo que se abroga. … De igual forma, tal y como lo establecía la Ley del Impuesto al Activo, se propone que la devolución del impuesto al activo proceda cuando en el ejercicio en que se solicite ésta, el impuesto sobre la renta sea mayor al impuesto al activo que se hubiera tomado para determinar la devolución correspondiente, con lo cual el esquema transitorio de devolución de impuesto al activo se homologa al esquema de devolución que los contribuyentes aplicaban conforme a la Ley que se abroga”. Por lo tanto, la modificación que realizó la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados tenía por objeto hacer congruente la redacción del Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única con el derecho a la devolución que tenían los contribuyentes al amparo del artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo abrogada. 12 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 En efecto, la modificación realizada al texto del Artículo Tercero Transitorio propuesto por el Ejecutivo Federal consistió en contar el periodo de diez años por el cual se puede solicitar la devolución del impuesto al activo, no a la entrada en vigor de la Ley, sino a partir del año en el que se pague por primera vez el impuesto sobre la renta como ocurría al amparo del artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo abrogada, de tal suerte que el contribuyente podría perder el derecho a la devolución del impuesto al activo por aquellos años que fueran caducando en tanto no se pagara impuesto sobre la renta por primera vez a partir del ejercicio de 2008, situación que coincide con lo apuntado tanto en la primera como en la segunda interpretación analizadas en el presente boletín. No obstante, esto no necesariamente implica que una vez que se pague el impuesto sobre la renta y, por tanto, se determine la cantidad de impuesto al activo que se podría solicitar en devolución, esta última cantidad se tenga que recuperar en un periodo máximo de diez años como lo establecía el artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo abrogada, ya que como se mencionó en apartados anteriores, la Cámara de Diputados incluyó una limitante adicional consistente en que el contribuyente sólo puede solicitar en devolución hasta el 10% de la cantidad que se podría solicitar en devolución, situación que claramente contraviene lo dispuesto por el artículo 9 en lugar de homologarlo. Lo anterior en virtud de que si la intención del legislador hubiera sido limitar la recuperación del impuesto al activo que se podría solicitar en devolución en un periodo de diez años, así lo hubiera establecido textualmente, tal como lo hizo en el Artículo Sexto Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, en el que se otorgó a los contribuyentes un crédito respecto de las inversiones realizadas entre el 1° de enero de 1998 y el 31 de diciembre de 2007, consistente en el 5% del saldo pendiente por deducir que tuvieran dichas inversiones para efectos del impuesto sobre la renta, pero limitado a un periodo de diez años por disposición expresa del propio artículo transitorio. Con base en lo antes apuntado, existen argumentos razonables para sostener que la intención de la Cámara de Diputados al incluir el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, a través del cual se limita el derecho a la devolución hasta el 10% del impuesto al activo pagado en ejercicios anteriores susceptible de ser recuperado, en ningún momento fue que los contribuyentes perdieran el derecho a la devolución del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en el cual paguen por primera vez impuesto sobre la renta a partir del ejercicio de 2008, como claramente ocurre en la primera interpretación analizada en el presente boletín, sino solamente el diferir las cantidades que los contribuyentes pueden solicitar en devolución en un año. Lo anterior es así con base también en lo dispuesto en la Exposición de Motivos a través de la cual la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados explica las razones por las que se incluyó la limitante del 10%, como se muestra a continuación: 13 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 “Así mismo, dado que se propone que los contribuyentes consideren el impuesto al activo que hubiera resultado menor en cualquiera de los tres últimos ejercicios anteriores a la entrada en vigor de la Ley que se dictamina y con el objeto de que no se impacte de manera negativa la recaudación se propone limitar la devolución que se podrá solicitar a que no exceda de un monto equivalente al 10% del impuesto al activo total de los 10 ejercicios fiscales inmediatos anteriores por el que se tenga derecho a la devolución”. Como se puede observar, la inclusión de la limitante del 10% tiene como objeto el que no se impacte de manera negativa la recaudación del Fisco Federal, por lo que es válido sostener que en ningún momento se pretendió afectar los derechos adquiridos por los contribuyentes a solicitar la devolución de la totalidad del impuesto al activo que tengan derecho a recuperar, como sí ocurre en la primera interpretación analizada en este boletín; es decir, razonablemente es posible sostener que lo que se busca con la citada limitante es que el beneficio del impuesto al activo que los contribuyentes tengan derecho a recuperar no se materialice en un solo ejercicio, sino que se haga de manera gradual para no afectar de esta manera la recaudación del Fisco Federal. De no haber sido ésta la intención de la Cámara de Diputados se estarían afectando los derechos adquiridos por los contribuyentes y, por tanto, se estaría contraviniendo lo señalado por el Ejecutivo Federal en la Exposición de Motivos de la iniciativa de ley que se presentó a la Cámara de Diputados, situación que de haber sido el caso así se hubiera manifestado expresamente en los documentos elaborados por la Comisión de Hacienda de la Cámara Diputados, como sí lo hizo en otros apartados de la Ley en donde claramente manifestó su desacuerdo con la propuesta del Ejecutivo Federal. Un ejemplo de lo anterior es la variación a la tasa del impuesto empresarial a tasa única que realizó la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados a la propuesta presentada por el Ejecutivo Federal, como se explica en la propia Exposición de Motivos que se cita a continuación: “Por otra parte, esta Comisión no coincide con lo señalado por el Ejecutivo Federal respecto a establecer para el ejercicio fiscal de 2008 la tasa del gravamen al 16% y para los ejercicios fiscales de 2009 y subsecuentes la tasa del 19%, ya que estima necesario establecer una tasa impositiva que no impacte de manera negativa a los contribuyentes”. De la trascripción antes señalada es posible sostener que en el momento en que la Cámara de Diputados difiere de lo expuesto por el Ejecutivo Federal, así lo manifiesta expresamente en la Exposición de Motivos, como claramente lo hizo respecto de la tasa del gravamen aplicable en cada año. 14 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 Por lo tanto, es posible sostener que lo dispuesto por la Cámara de Diputados coincide con la segunda interpretación analizada en este boletín, ya que es razonable el asumir que su intención fue: a) Homologar lo dispuesto en el Artículo Tercero Transitorio a lo dispuesto en el artículo 9 de la Ley del Impuesto al Activo abrogada, en el sentido de que los contribuyentes perderán el derecho a solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en aquellos años que no se encuentren en el periodo comprendido en los diez ejercicios inmediatos anteriores a aquél en que se pague por primera vez el impuesto sobre la renta a partir del ejercicio de 2008, en tanto no generen impuesto sobre la renta; y b) Limitar de manera anual el derecho a la devolución hasta un 10% del total del impuesto al activo respecto del cual se genera el derecho a la devolución en el año en que se pague el impuesto sobre la renta por primera vez a partir del ejercicio de 2008, sin que esto implique que dicha base decrezca en los años subsecuentes, o bien, que el contribuyente tenga un periodo limitado para solicitar su devolución. Adicionalmente, se debe tomar en cuenta que la segunda interpretación contenida en el presente boletín incluso es compartida por las autoridades fiscales a través de la regla miscelánea 17.20., misma que se incluyó en la Tercera Resolución de Modificaciones a la Resolución Miscelánea Fiscal para 2007 publicada en el Diario Oficial de la Federación el 31 de diciembre de 2007, la cual señala textualmente lo siguiente: “Para los efectos del cómputo de los diez ejercicios inmediatos anteriores por los cuales se puede solicitar la devolución del IMPAC pagado a que se refiere el artículo Tercero Transitorio, primer párrafo de la Ley del IETU, se tomará como ejercicio base para efectuar el citado cómputo, el primer ejercicio a partir de 2008 en el que efectivamente se pague el ISR. En consecuencia, el IMPAC por el que se puede solicitar la devolución en los términos del artículo citado será el que corresponda a los diez ejercicios inmediatos anteriores al ejercicio base que se haya tomado para el cómputo referido. El último ejercicio que se podrá considerar para los efectos mencionados será el correspondiente al del ejercicio fiscal de 2017, en cuyo caso la devolución del IMPAC sólo procederá respecto del IMPAC pagado en el ejercicio fiscal de 2007. No obstante, el 10% del IMPAC a que se refiere el artículo Tercero Transitorio, segundo párrafo de la Ley del IETU, se calculará tomando en consideración el monto total del IMPAC por recuperar que se considere para el primer ejercicio base que se haya tomado para efectuar el cómputo a que se refiere el párrafo anterior”. De la lectura de la regla miscelánea antes citada es posible desprender lo siguiente: 15 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 a) Los contribuyentes considerarán como ejercicio base el primer ejercicio a partir de 2008 en el cual paguen impuesto sobre la renta. b) El ejercicio base determinado en los términos señalados en el inciso anterior servirá para cuantificar el importe del impuesto al activo pagado por los contribuyentes en los diez ejercicios anteriores a dicho ejercicio base susceptible de ser recuperado. c) El impuesto al activo por recuperar que se determine en el ejercicio base será el que los contribuyentes podrán solicitar en devolución y será el que servirá para calcular año con año el límite del 10% que los contribuyentes podrán solicitar en devolución. d) El último ejercicio que puede servir de año base es el ejercicio de 2017, ya que el periodo de diez ejercicios anteriores a éste comienza a computarse a partir del ejercicio de 2007, el cual es el último ejercicio en el que se pudo pagar impuesto al activo y, por tanto, ser sujeto de devolución. De lo señalado en los incisos a) y b) anteriores es posible ratificar lo señalado en las dos interpretaciones analizadas en este boletín, en el sentido de que en tanto no se pague impuesto sobre la renta, a partir del ejercicio de 2008 van caducando los ejercicios por los cuales los contribuyentes pueden solicitar la devolución del impuesto al activo pagado en ejercicios anteriores. Del inciso c) es razonable sostener que una vez que se pague impuesto sobre la renta, se deberá determinar el monto del impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores susceptible de ser devuelto, el cual será una cantidad fija que no se disminuirá conforme transcurran los años; es decir, no operaría la caducidad para solicitar su devolución, pues en ningún momento así lo establece de manera expresa la regla miscelánea en cuestión ni el Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única. Asimismo, este monto servirá de base para determinar el importe máximo que se puede solicitar en devolución en cada ejercicio (10%); es decir, el mismo no se iría disminuyendo conforme pasen los años (al no operar la caducidad) o conforme se vayan recuperando cantidades por concepto de impuesto al activo pagado en ejercicios anteriores. En resumen, existen argumentos razonables para sostener que la regla 17.20. de la Resolución Miscelánea Fiscal vigente debilita la primera interpretación sostenida en este boletín y fortalece la segunda, pues se reconoce que el monto del impuesto al activo se determina una sola vez; esto es, cuando se paga por primera vez impuesto sobre la renta a partir del ejercicio de 2008, por lo que una vez determinada la cantidad que se puede solicitar en devolución, ésta servirá de base en todos los ejercicios por los que se pueda solicitar una devolución de impuesto al activo pagado en ejercicios anteriores para determinar la limitante del 10% a que se refiere el segundo párrafo del Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única. Adicionalmente, dado que la citada regla no establece un periodo de caducidad para recuperar el impuesto al activo una vez que se hubiera determinado el importe susceptible de ser recuperado, existen elementos razonables para sostener que dicho impuesto se podrá recuperar en tantos ejercicios como sean necesarios para obtenerlo en su totalidad. 16 Boletín de Investigación Fiscal de febrero 2008 3. CONCLUSIONES a. De una primera interpretación a lo dispuesto en las Disposiciones Transitorias de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única, se desprende que el impuesto al activo que podrían recuperar los contribuyentes se deberá determinar en cada ejercicio en que se pague impuesto sobre la renta, considerando el impuesto al activo pagado en los diez ejercicios inmediatos anteriores a este último, y hasta el 10% de la cantidad que en cada ejercicio se determine como sujeta de devolución. b. Una segunda interpretación de la misma disposición es que los contribuyentes deberán determinar la cantidad total susceptible de devolución solamente en el primer ejercicio a partir del 2008 por el cual paguen impuesto sobre la renta, la cual servirá de base no sólo para determinar el monto total que el contribuyente puede solicitar en devolución, sino también para calcular el límite máximo del 10% que los contribuyentes pueden solicitar en devolución en cada ejercicio. Bajo esta segunda interpretación, una vez determinada la cantidad susceptible de devolución, los contribuyentes podrán recuperarla en su totalidad en tantos años como sea necesario. c. Existen elementos razonables para sostener que lo dispuesto en la regla 17.20. de la Resolución Miscelánea Fiscal vigente analizada en el presente boletín coincide con lo señalado en la conclusión 2 anterior. Sin embargo, no se deja de advertir que las autoridades fiscales pudieran derogar dicha regla en caso de no estar de acuerdo con esta interpretación, con independencia de que existen elementos para soportarla al amparo de lo establecido únicamente en el Artículo Tercero Transitorio de la Ley del Impuesto Empresarial a Tasa Única. d. En cualquiera de las interpretaciones señaladas en el presente boletín se debe tomar en cuenta que en caso de que no se solicite la devolución del impuesto pudiéndolo haber hecho, se perderá el derecho a hacerlo en ejercicios posteriores. 17 Este Boletín y los subsecuentes podrás consultarlos en nuestra página de Internet, www.ccpm.org.mx