SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 1193/2015-S2 Sucre, 11 de noviembre de 2015 SALA SEGUNDA Magistrado Relator: Juan Oswaldo Valencia Alvarado Acción de libertad Expediente: 11421-2015-23-AL Departamento: Santa Cruz En revisión la Resolución 6/2015 de 12 de junio, cursante de fs. 72 a 74 vta., pronunciada dentro de la acción de libertad interpuesta por Damián Mamani Llanto contra Willzon Arebalo Coria, Juez Segundo de Instrucción, Mixto y cautelar; y, Juan Carlos Villafuerte Flores, Director del Centro Penitenciario, ambos de Montero del departamento de Santa Cruz. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA I.1. Contenido de la demanda Por memorial presentado el 11 de junio de 2015, cursante a fs. 5 y vta., el accionante, expresó los siguientes fundamentos de hecho y de derecho: I.1.1. Hechos que motivan la acción Dentro del proceso de asistencia familiar seguido por Juana Coca Lazarte contra Damián Mamani Flores, se emitió el Auto Definitivo 164/10 de 6 de diciembre de 2010, disponiendo que el demandado otorgue una pensión mensual de Bs150.- (ciento cincuenta bolivianos) a favor del menor NN, habiendo la autoridad judicial demandada emitido el 4 de mayo de 2015, mandamiento de apremio contra el señalado; sin embargo, sin observarse correctamente su identidad personal, el 9 de junio de ese año a horas 11:30, fue detenido por efectivos policiales, siendo conducido a la Carceleta de Montero, a pesar que su persona les explicó que él no es Damián Mamani Flores sino Damián Flores Llanto; vale decir, el mandamiento de apremio estaba dirigido a otra persona, puesto que no fue citado con ninguna demanda de asistencia familiar ni liquidación de pensiones; encontrándose actualmente detenido sin existir ningún proceso previo en su contra; por lo que, los funcionarios policiales incurrieron en el delito de privación de libertad sancionado por el art. 292 del Código Penal (CP). Finalmente refiere que, por el certificado de nacimiento adjunto al proceso de asistencia familiar se advierte que el padre del menor NN es Damián Mamani Flores, y el hecho que coincida con su nombre y apellido paterno no significa que tenga que asumir el pago de la asistencia familiar. I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados Alega la lesión de su derecho a la libertad, citando al efecto los arts. 22 y 23 de la Constitución Política del estado (CPE). I.1.3. Petitorio 1 Solicita se conceda la tutela disponiendo se restituya su derecho a la libertad. I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías Celebrada la audiencia pública el 12 de junio de 2015, según consta en el acta cursante de fs. 68 a 71 vta., se produjeron los siguientes actuados: I.2.1.Ratificación y ampliación de la acción El abogado del accionante se ratificó en el tenor íntegro de la acción de defensa presentada y en audiencia amplió sus fundamentos señalando que: a) Respecto a la falta de presentación de cédula de identidad, en el momento de ejecutarse el mandamiento de apremio, aducido por el efectivo policial demandado, cabe referir que si bien podría existir algún error al momento de capturarlo; empero, no al ingresarlo al Centro Penitenciario de Montero; b) Existió incumplimiento de los requisitos formales para la restricción de la libertad del accionante, puesto que se lo detuvo sin haber sido parte del proceso de asistencia familiar, ya que no fue notificado con la demanda ni con la liquidación de este beneficio, encontrándose obligado a cumplir la misma; y, c) El art. 23.VI de la CPE, establece que los responsables de los centros penitenciarios deben llevar un registro de las personas detenidas al momento de ingresar al recinto; razón por la cual, en ese momento, el impetrante de tutela señaló a los efectivos policiales que él no era Damián Mamani Flores, exhibiendo su cédula de identidad y su certificado de nacimiento para tal efecto; por lo que, no se cumplió con el citado mandato constitucional, ocasionando un daño inminente e irreparable a los derechos de la dignidad y libertad del accionante. I.2.2. Informe de las autoridades demandadas Willzon Arebalo Coria, Juez Segundo de Instrucción, Mixto y cautelar de Montero del departamento de Santa Cruz, a través de informe cursante de fs. 9 a 10 señaló que: 1) Desde el momento de presentación de la demanda de asistencia familiar figura como demandado Damián Mamani Flores y no Damián Mamani Llanto, por lo que el mandamiento de apremio se dictó contra el primero, puesto que se identificó en todas las actuaciones procesales como padre del menor NN; 2) El suscrito Juez, en ningún momento lesionó el derecho a la libertad del accionante, puesto que no fue él quien ejecutó el mandamiento de apremio, y si bien los efectivos policiales en su afán de dar cumplimiento al mismo, lo aprehendieron, esta situación no es atribuible a su persona, tomando en cuenta que el mismo fue librado contra Damián Mamani Flores; y, 3) En caso que el demandado se hubiere cambiado de nombre con la finalidad de evadir su responsabilidad como padre del menor NN, se deberá remitir antecedentes ante el Ministerio Público, a efecto que se realice una investigación sobre la identidad de Damián Mamani Flores y verificar si se trata de la misma persona, toda vez que la asistencia familiar es un derecho constitucional que tiene el menor. Juan Carlos Villafuerte Flores, Director Centro Penitenciario de Montero a través de oficio 08/2015 de 12 de junio, cursante a fs. 11, remitió el informe de los efectivos policiales que intervinieron en la ejecución del mandamiento de apremio, haciendo conocer que el accionante a momento de la detención no presentó su 2 cedula de identidad, ni hizo conocer a los mismos el presunto error de identidad; en ese sentido: i) Antonio Camacho Rodas, efectivo policial, hizo conocer que el 9 de junio de 2015, se encontraba haciendo su patrullaje por inmediaciones de la plaza Ignacio Warnes cuando aproximadamente a horas 10:00 se le acercó Juana Coca Lazarte, quien le indicó que tenía un mandamiento de apremio para Damián Mamani Flores, por lo que una vez identificado el mismo por la prenombrada, se procedió a su detención siendo conducido a la Policía de Warnes y posteriormente a la Carceleta de Montero; y, ii) Rene Apaza Huallpa, efectivo policial de guardia del Centro Penitenciario de Montero, a través de informe de 12 de igual mes y año, señaló que Damián Mamani Flores ingresó al citado Recinto Penitenciario con mandamiento de apremio emitido por el Juez Segundo de Instrucción, Mixto y cautelar, sin dejar ninguna documentación personal que refleje su identidad. I.3.3. Intervención de la tercera interesada Juana Coca Lazarte, en audiencia a través de su abogado refirió que: a) Si bien el accionante refiere ser Damián Mamani Llanto, empero, en la Brigada de Protección de la Familias -hoy Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV)- el 2008, dio el nombre de Damián Mamani Flores, fue a raíz de ese dato que se interpuso la demanda con ese nombre, sin embargo, ahora con la finalidad de evadir su responsabilidad utiliza esta acción constitucional para privar a su hijo de los derechos que le asisten, más aun cuando el Estado garantiza el interés superior del niño, niña y adolescente frente a cualquier otro derecho; y, b) En respuesta a las preguntas formuladas por el Juez de garantías, la demandante señaló que el accionante es el padre de su hijo menor NN, refiriendo que no conocía el segundo apellido del impetrante de tutela y que éste desapareció desde que tenía tres meses de gestación, empero, estos últimos días le llamó para arreglar la situación de su hijo. I.3.4. Resolución El Juez Cuarto de Partido Mixto y de Sentencia Penal de Montero del departamento de Santa Cruz, constituido en Juez de garantías, pronunció la Resolución 6/2015 de 12 de junio, cursante de fs. 72 a 75, por la que denegó la tutela, en base a los siguientes fundamentos: 1) Conforme determina la SC 1796/2011-R de 7 de noviembre, el Estado garantiza el interés superior del niño, niña y adolescente, por lo que, cualquier cambio de apellido del padre en un proceso de asistencia familiar no puede afectar al interés de beneficiario, puesto que el menor requiere ser asistido por su padre, un entendimiento contrario resultaría una burla a los derechos del hijo; 2) En base al principio de verdad material, se llegó a la conclusión de que el accionante y el demandado son la misma persona, ya que e la audie ia de a ió de li e tad Jua a Co a Laza te afi ó ue Da iá Ma a i fue quien inscribió al menor NN en la oficina de Registro Civil dando su nombre completo, más aun cuando éste le llamó varias veces para arreglar la situación del menor; y, 3) En cuanto al nombre del demandado, esta situación se debe regularizar ante el Juzgado ordinario que lleva la causa y que tiene jurisdicción y competencia para este tipo de trámites, toda vez que el derecho a la libertad no se puede contraponer al derecho de asistencia familiar que tienen los hijos, el cual es de interés superior del Estado, teniendo prevalencia frente a las normas que regulan el derecho a libertad en la vía ordinaria. II. CONCLUSIONES Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en el expediente, se establece lo siguiente: 3 II.1. Cursa denuncia de 31 de mayo de 2008 ante la entonces Brigada de Protección a la Familia interpuesta por Juana Coca Lazarte contra su enamorado quien se identificó como Damián Mamani Flores, donde la denunciante hizo conocer que se encontraba embarazada de tres meses, por lo que el denunciado se comprometió a pasar una pensión mensual de Bs100.- (cien bolivianos) para los medicamentos hasta que el niño nazca y posteriormente se efectuaría una prueba de ácido desoxirribonucleico (ADN) (fs. 65). II.2. El 21 de octubre de 2009, Juana Coca Lazarte planteó demanda de asistencia familiar a favor de su hijo e o NN o t a Edua do Ma a i Flo es, de a da ue fue o se vada po p ovide ia de de igual es y año, debido a que no coincidía el nombre del demandado con el del padre que cursa en el certificado de nacimiento; razón por la cual, mediante escrito de 30 del mismo mes y año, la demandante corrigió el nombre refiriendo que es Damián Mamani Flores (fs. 18 a 20). II.3. Cursa acta de juramento por desconocimiento de domicilio, por lo que el Juez de la causa dispuso la citación por edictos de Damián Mamani Flores (fs. 22 a 25). II.4. A través de Sentencia 164/10 de 6 de diciembre de 2010, el Juez Segundo de Instrucción Mixto de Montero del departamento de Santa Cruz, declaró probada la demanda, debiendo Damián Mamani Flores pasar una asistencia familiar mensual de Bs150.- (ciento cincuenta bolivianos) a favor del beneficiario NN (fs. 42 y 44 vta.). II.5. Mediante memorial de 6 de febrero de 2015, Juana Coca Lazarte solicitó nueva liquidación de pensiones; razón por la cual, la Secretaria del Juzgado Segundo de Instrucción Mixto de Montero a través de informe de la misma fecha señaló que Damián Mamani Flores, hasta el 14 de febrero de 2015 adeuda la suma de Bs7950.(siete mil novecientos cincuenta bolivianos); consecuentemente a través de decreto de igual fecha el Juez de la causa intimó al obligado para que cancele hasta el tercer día de su notificación, bajo apercibimiento de apremio en caso de incumplirse, procediéndose a su notificación a través de edictos (52 a 55). II.6. Juana Coca Lazarte mediante memorial de 27 de abril de 2015, impetró se emita mandamiento de apremio contra Damián Mamani Flores toda vez que no canceló la pensiones devengadas, en consecuencia el Juez demandado, por decreto de 28 de igual mes y año ordenó que por Secretaría se libre el correspondiente mandamiento de apremio contra Damián Mamani Flores (fs. 63 y vta.). II.7. Cursa mandamiento de apremio de 4 de mayo de 2015, contra Damián Mamani Flores, para que se lo detenga y sea conducido al Centro Penitenciario de Montero hasta que cancele la suma adeudada de Bs7950.(fs. 64). III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO El accionante refiere que se vulneró su derecho su derecho a la libertad, toda vez que sin observar correctamente su identidad, los funcionarios policiales ejecutaron el mandamiento de apremio emitido contra Damián Mamani Flores, procediendo a conducirlo a la Carceleta de Montero a pesar que hizo conocer que él no era esa persona sino Damián Mamani Llanto, más aun cuando jamás fue citado con la demanda o liquidación de asistencia familiar, por lo que no tiene la obligación de cumplir con la asistencia familiar fijada por el simple hecho de coincidir su nombre y apellido paterno con el del demandado. 4 En consecuencia, compele en revisión verificar si tales extremos son evidentes, a fin de conceder o denegar la tutela impetrada. III.1. Sobre la legitimación pasiva en la acción de libertad La SCP 0333/2015-“ de de a zo, p e isó ue la legiti a ió pasiva: …es la apa idad ju ídi a otorgada a la autoridad, funcionario público o particular para comparecer ante el juez o tribunal de garantías constitucionales a efectos de que emita un informe sobre los actos o hechos que presuntamente vulneran derechos fundamentales y los cuales se encuentran alegados en la acción constitucional. Si bien no está explícitamente prevista por la Constitución Política del Estado ni la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional (Ley 027), sin embargo, de un análisis objetivo a las mismas en lo pertinente, se entiende que la acción de libertad se deberá plantear contra: a) La autoridad o funcionario público que amenace, restrinja o suprima los derechos fundamentales tutelados. b) La persona particular que amenace, restrinja o suprima los derechos tutelados. … Bajo esta lupa, la jurisprudencia constitucional ahora aplicable, ha establecido para plantear la acción de libertad, entre otras cosas que: 1) La acción sea dirigida contra la autoridad que impartió o ejecutó la orden que dio lugar a la persecución, aprehensión, detención, procesamiento o apresamiento indebidos o ilegales (SC 1651/2004-R de 11 de octubre y reiterada por la jurisprudencia emitida por el Tribunal Constitucional del 2010 y 2011). 2) De a e a ge e al, esta le ió ue legiti a ió pasiva …se ad uie e po la oi ide ia ue se da entre la autoridad que presuntamente causó la violación a los derechos y aquélla contra quien se dirige la a ió … “C / -R de 10 de mayo y SC 0691/2001-R de 9 de julio). Al margen de lo anotado esta acción se rige por su carácter de informalismo, que es inherente a su naturaleza jurídica en función a los derechos que protege; en coherencia con ello, también se estableció que cuando la acción se dirige, por error, contra una autoridad diferente a la que causó la lesión, pero de la misma institución, rango o jerarquía e idénticas atribuciones, es posible conceder la tutela, si se verificase lesión al derecho a la libertad personal. La aplicación del referido razonamiento, no es viable cuando la presunta lesión de restricción de libertad o su amenaza, hubiese sido dispuesta u ordenada, por una autoridad distinta a la demandada y que además no pertenezca a la misma institución o fuera de rango, jerarquía o atribuciones distintas que el demandado (Razonamiento asumido por las SSCC 0790/2010-R y 1094/2010-‘ las eg illas son nuestras). III.2. Sobre el error de la identidad de la persona La identidad personal como instituto jurídico, tiene por objeto individualizar a las personas, estando comprendido por el nombre y los apellidos paterno y materno, los cuales deben ser consignados en la cédula de identidad, kárdex y otros registros oficiales, en ese entendido, la SC 0027/2010-R de 16 de abril, señaló ue: …El a t. 9.I del Código Civil CC , dete i a ue toda pe so a tie e de e ho al o e ue le corresponde con arreglo a la ley y comprende el nombre propio o individual y el apellido paterno y materno; ahora bien, conforme lo señala Morales Guillén: 'El nombre y el apellido establecen la identidad de un sujeto determinado como tal, ya que de ellos depende su personalidad en concreto y el status correspondiente. La identidad es así, el elemento más importante de la personalidad. Cumple una función individualizadora y constituye la manifestación principal del derecho subjetivo a la identificación que se exterioriza frente a todos y en cualquier contingencia de la vida social' (Carlos Morales Guillén. Código Civil Concordado y Anotado); de lo expuesto, se concluye entonces que el nombre y apellido de la persona forman un todo que la individualizan; es decir, hacen a la identidad de la perso a o o u at i uto espe ífi o de la pe so alidad (las negrillas son nuestras). Ahora bien, con relación al error en la identidad personal en los mandamientos de apremio o aprehensión, la SC 2290/2010-‘ de 9 de ovie e, esta le ió ue: …el a io ante refiere la existencia de error en la identidad de la persona cuyo nombre se consigna en el mandamiento de apremio, orden instruida y proceso de declaración judicial de paternidad, con su persona; por cuanto, solicita la tutela constitucional, a través de la acción de libertad. Al respecto y en un caso similar, la jurisprudencia constitucional, señaló: 'En ese contexto legal y de jurisprudencia, se concluye que los reclamos e impugnaciones sobre los errores en la identidad de las personas no pueden ser analizados a través de la presente acción tutelar, sino que deben ser examinados 5 dentro del proceso principal que determine la identidad de la persona procesada, condenada, buscada o solicitada; ello, en razón a que tanto el recurso de hábeas corpus como la ahora acción de libertad, consagrada por el art. 125 de la CPE, han sido instituidos por la Constitución Política como una acción tutelar con un triple carácter: preventivo, correctivo y reparador, ampliando ahora además su naturaleza de acción de defensa oportuna y eficaz a la vida, en su relación a la libertad física y de locomoción. Precisamente, en ese marco de protección, a la presente acción tutelar no le corresponde conocer ni dilucidar problemáticas que son de competencia de la jurisdicción ordinaria, por lo mismo, es la autoridad judicial la que está obligada a esclarecer la identidad de una persona frente a la controversia que podría presentarse durante la ejecución de los mandamientos de aprehensión, detención preventiva o condena' (SC 0027/2010-R de 16 de abril, entre ot as el esaltado os pe te e e . De lo cual se deduce que no le corresponde a la jurisdicción constitucional definir los errores sobre la identidad de las personas, puesto que son situaciones de hecho que deben ser impugnadas y consideradas en la vía ordinaria a través de los mecanismos de defensa eficaces, idóneos y oportunos que prevé el ordenamiento jurídico. III.3. Análisis del caso concreto Dentro del proceso de asistencia familiar seguido por Juana Coca Lazarte a favor de su hijo menor NN o t a Da iá Ma a i Flo es se e itió a da ie to de ap e io; si e a go, los efe tivos poli iales si observar correctamente su identidad, habida cuenta que él es Damián Mamani Llanto, ejecutaron el citado mandamiento, procediendo a conducirlo a la Carceleta de Montero a pesar que les hizo conocer el indicado error. De la revisión de antecedentes se advierte que desde el inicio del proceso de asistencia familiar Juana Coca Laza te ide tifi ó o o de a dado a Da iá Ma a i Flo es , ha ié dose p o edido a su otifi a ió po edictos, previo juramento de desconocimiento de domicilio; razón por la cual, una vez concluido el proceso, el Juez demandado a través de Sentencia 164/10, declaró probada la demanda debiendo Damián Mamani Flores cancelar en forma mensual el monto de Bs150.- a favor del beneficiario; en ese entendido, la demandante el 6 de febrero de 2015, solicitó la liquidación de pensiones; estableciendo la Secretaria del Juzgado Segundo de Instrucción Mixto de Montero a través de informe de la misma fecha que el obligado hasta el 14 de igual mes y año adeudaba la suma de Bs7950.-; consecuentemente, la autoridad judicial demandada a través de decreto de igual fecha intimó al obligado para que pague dentro del tercer día de su notificación, bajo apercibimiento de emitirse mandamiento de apremio; sin embargo, al haberse incumplido el pago, Juana Coca Lazarte mediante memorial de 27 de abril de 2015, impetró se libre mandamiento de apremio contra el mismo; por lo que, a través de decreto de 28 de igual mes y año, el Juez demandado ordenó que por Secretaría se emita el correspondiente mandamiento de apremio contra Damián Mamani Flores. En ese contexto, de lo referido precedentemente se advierte que el Juez Segundo de Instrucción Mixto y cautelar de Montero, carece de legitimación pasiva para ser demandado, toda vez que si bien libró a da ie to de ap e io o t a Da iá Ma a i Flo es , e ase a los datos del p o eso de asiste ia familiar que fueron proporcionados por la demandante; empero, no fue él quien ejecutó el mismo sino los efectivos policiales, conforme indicó el propio accionante en su demanda de acción de libertad; consecuentemente, de acuerdo a los establecido en el Fundamento Jurídico III.1 de esta Sentencia Constitucional Plurinacional, no existe coincidencia entre la autoridad que ocasionó la vulneración al derecho a la libertad del impetrante de tutela y aquella contra quien se dirige la presente acción de libertad, más aun, cuando de los datos del proceso se advierte que el accionante no cuestiona la emisión del mandamiento de apremio, sino que el mismo se ejecutó de forma incorrecta ya que no se advirtió que su persona es Damián Ma a i Lla to, el itado a da ie to está di igido o t a Da iá Ma a i Flo es . Ahora bien, con relación a la actuación del Director del Centro Penitenciario de Montero, de la revisión del informe remitido por la indicada autoridad codemandada, se establece que el 9 de junio de 2015, Damián Mamani Llanto fue detenido por Antonio Camacho Rodas, efectivo policial que se encontraba realizando patrullaje por inmediaciones de la plaza Ignacio Warnes y aproximadamente a horas 10:00, se le acercó Juana Co a Laza te i di á dole ue te ía u a da ie to de ap e io o t a Da iá Ma a i Flo es , ue se encontraba en la citada plaza, por lo que una vez identificado, se procedió a su detención siendo conducido a la Policía de Warnes y posteriormente al Centro Penitenciario de Montero, donde Rene Apaza Huallpa, funcionario policial que se encontraba de guardia, registró al impetrante de tutela como Damián Mamani Flo es", ha ida ue ta o dejó i gu a do u e ta ió pe so al; e ese o te to, si ie el Di e to del Centro Penitenciario de Montero no fue quien ejecutó el mandamiento de apremio ni registró su ingreso en ese, empero, conforme dispone el art. 58 de la Ley de Ejecución Penal y Supervisión (LEPS) el director del 6 establecimiento penitenciario es el responsable de su manejo y funcionamiento; teniendo el deber de mantener actualizado el registro penitenciario (art. 59.9 de la LEPS), obligación que se encuentra en concordancia con el art. 2.8 del Decreto Supremo (DS) 26715 de 26 de julio de 2002, que establece que la ad i ist a ió de los e t os pe ite ia ios de e á : Ma te e i fo ación completa y segura sobre las personas privadas de libertad, incluyendo su identidad, las razones de su privación de libertad y la autoridad espo sa le, el día ho a de su ad isió puesta e li e tad , po lo ue, tie e la o liga ió de ve ifi a ue el mandamiento de apremio se ejecute en forma correcta, debiendo constatar para dicho efecto la identidad de las personas que se encuentran privadas de libertad. A pesar de lo anotado precedentemente, de acuerdo a lo referido en el Fundamento Jurídico III.2 del presente fallo, el Tribunal Constitucional Plurinacional no puede mediante esta acción de libertad ingresar a analizar el error de identidad denunciado por el impetrante de tutela, ya que es al Juez Segundo de Instrucción Mixto y cautelar de Montero a quien le compete dilucidar la identidad del accionante y sea por tanto quien defina si el impetrante de tutela es o no el obligado a pagar la asistencia familiar y por ende la persona contra quien se libró el mandamiento de apremio, valoración que se efectuará dentro del proceso de asistencia familiar a través de los medios de prueba que las partes aporten, puesto que no le corresponde a la jurisdicción constitucional y peor aún a esta acción de libertad definir situaciones de hecho; más aun cuando en la audiencia de la presente acción de defensa el Juez de garantías, en virtud del art. 36.6 del Código Procesal Constitucional (CPCo), que le otorga la facultad para hacer en la audiencia las preguntas que crea oportunas para resolver el caso, le preguntó a Juana Coca Lazarte si el accionante era el padre de su hijo menor NN, esta le respondió que sí y que en 2008, cuando lo denunció ante la entonces Brigada de Protección a la Familia el accionante se identificó como Damián Mamani Flores, conforme se advierte del acta de denuncia cursante a fs. 65, situaciones por las cuales este Tribunal no puede ingresar al análisis de fondo de la problemática planteada. Por todo lo expuesto, el Juez de garantías, al haber denegado la tutela impetrada, aunque con otros fundamentos evaluó en forma correcta los datos del proceso. POR TANTO El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y los arts. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional y 44.1 del Código Procesal Constitucional; en revisión, resuelve: CONFIRMAR en todo la Resolución 6/2015 12 de junio, cursante de fs. 72 a 75, pronunciada por el Juez Cuarto de Partido Mixto y de Sentencia Penal de Montero del departamento de Santa Cruz, y en consecuencia, DENEGAR la tutela impetrada. Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional. Fdo. Juan Oswaldo Valencia Alvarado MAGISTRADO Fdo. Dra. Mirtha Camacho Quiroga MAGISTRADA 7