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EL VINCULO.
Variedades.
Ds l a « I l u s t r a c i ó n A r t í s t i c a » t o m n m o s la seg u n d a p a r t e de u n n o t a b l e a r t i c u l o t i t u l a d o :
LA
SOMBRA
ANTE LA CIENCIA
MODERNA.
ricos y variados colores. Las fiases, criadas en la o. puridad, tienen también colores, hasta el punto de que
los naturalistas han llegado á admitir una materia
colorante independiente de la luz: el cromógeno que
encierra en germen el color de la flor.
También la ciencia, ha examinado recientemente el
cílbr de la sombra, fenómeno curioso que dejó consignado Leonardo de Vinci, observando que las sombras producidas sobre una pared blanca, por la luz
del sol próximo al horizonte, son azuladas.
La mayoría de los físicos opina que cada luz produce una sombra de color complementario; y cn efecto,
la observación demuestra que la luz verde las produce rosadas; la rosada, verdes; la amarilla, violetas, y
la violeta, amarillas. Pero en cuanto á la explicación
de este fenómeno ya no están acordes, admitiendo
mas que la sombra toma efectivamente ese color, y
otros que es un efecto do la luz sobre nuestra vista.
De todos modo.í, la ciencia ha venido á explicar el secreto de'hi belleza y realidad de las sombras qus han
producido en sus cuadros los grandes pintores, em.pleando páralos colores fresco, sus complementarios.
Pero uo contentos cou esto, los físicos modernos hcn
comenzado el estudio de las tinieblas, de la oscurida ;
más completa y permanente que en la tierra se concce: la de las cavernas, donde no llega jamás luz alguna.
Desde los tiempos mas antiguos es conocida la
•.•vacion de que la oscuridad de las cuevas y cave;
iias no es como las demás oscuridades. Cuentos y ]>
yendas popularísima en España, donde existen cuev,
rodeadas de tradiciones, demuestran que la luz •
alumbra en ellas como en los demás sitios osear-
El renacÍJíiiento ceintífico comenzó & estudiar la
sombra c o i í u j negación y ausencia de la luz; del mismo modo que el frió como negación ó ausencia del
calor. Así estudió y midió la gigantesca sombra có'•'caque los astros forman detrás de si en el espacio
uenso, y que les sigue en su acompasado inoviliuento co"mo majestuosa cola, produciendo los eclipses.
Pero estaba reservado al riquisim.o análisis modery á la infatigable investigacien de la ciencia de
ísíros días explorar esa regáon de lo desconocido,
c.ií.udiar sus misterios y buscar la vida y el cumplimiento de las leyes naturales allí donde no j ü creía
que existiera mas que la muei'te.
Ante todo, la ciencia moderna ha tenido que fijar
la exacta significación de las palabras noche, sombra, oscuridad, opacidad y tiniebla; uo, sin disputar
con los gramáticos y con los filósofos.
Noche es lo opuesto al dia; la inmension de un
hemisferio de la tierra en la sombra, producida por
la opacidad de esta. De modo, quo ia noche no es la
sombra sino hija de la sombra. Opaco quiere decir,
censo, y por lo tanto esta palabra expresa cou gran
actitud la i d e a d e u n c u e r p o q u e p o r s u den»i<i«J> l-piiaadq t » n a ci'»eu<jii* de u u o s t r o s í i l t l e a n o s y - c a m p e c
; O deja pasar la luz. Oscuro es simplemente ua tér- nos que la luz no puede romper la densidad de f
luino de comparaciúu, que quiere decir oculto, y cu- tinieblas.
Tyudáll y otros físicos han demostrado todo lo ce
yo superlativo son las tinieblas, ausencia de toda
iuz; palabra derivada de teneo, porque en su región trario. Las paredes de las cavernas están cubier'..
se contiene, se íuciei-ra v se oculta todo á la vista cdutinuamente de una especie de meho ó musgo, q .
condensa los corptisculos que flotan en aquel es;;.humana.
Del mismo modo la ciencia ha venido á admitir cío, y que la humedad hace más deusos obligánd opiniones contrarias á las antiguas respecto á la vi- los á descender al suelo: por lo tanto hay un va.'
sibilidad de la luz y la sombra. La luz no - • v o : corpuscular, desconocido en la artmósfera, que evi.
ncce.sita un cuerpo que la refleje para que se haga la reflexion de la luz. Por eso allí la luz apen.
visible: los rayos más intensos y deslumbrantes pue- alumbra. Por eso también .se aumenta extraordin;
den pasar ante nuestros o j i j s sin s e r visibles. El rayo riamente su efecto haciendo flotar en el aire, y ea
del sol que penetra en una sala oscura no es v"ipible derredor, polvo muy fino, líutónces desaparr •
si no da cn la pared ó en el suelo; no le de.scubriria- densidad de las tinieblas.
mos si no se reflejara en los corpú.sculos que flotan
Por último, un nuevo estudio de la oscuríSad. <5..
en el aire, formando ese vis'o azulado, que tan ades mas que una ocultación relativa de los objete
- mirablemonte han sabido copiar en sus cuadros ali) la cual existen de la misma manera, pero sin gunos pintores. Si en el espacio inmenso que media sensible su existencia á la vista humana, ha perni.entrí? astro y astro no bay átomo, ni materia cósmi- tido á uu fjtógrafo español concebir el proyecto
ca, reinará alli una profunda oscuridad. Por el con- hacer fotografías en "la oscuridad, empleando snstrario las tinieblas, pueden decirse que son visible; la íanciiis ü; l / i ;nás sensibles quo la vista del homvista humana ve su oscuridad. ¡Cuan cierta es la fra,- bre.
de que han abusado nuestros müvelisías, diciendo
]ii-o.yecto llegase á ser una reaiiuaü. i a
•.'una luz, eu un espacio inmenso sirve tan sóio
,i, ..i, habria llegado al último punto de perfección
j u i r a hacer mas visible las tinieblas!
en e.st,a materia, á reemplazai la vista en la osear La observación ha demostrado que existe la vida y d a d ,
visibles las tiniebla.s.
el color en la sombra. A gran profr.udidad de la tierra sombra.
viven anélidos eu perfecta oscuridad. En las costas de
Í''ELU>U PiCATOSfE.
Supcia y de Noruega, á 2,000 metros debajo de agu:;.
donde reinan las tinieblas, se han encontrado animales y plantas, que no solo viven, sino que presed'an