Poder Judicial de la Nación CAMARA NACIONAL DE APELACIONES EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 5 CCC 36955/2014/CA3 “Vega, Julio César y otro s/ coacción” Juz. de Instrucción nro. 17 MM/14 ///nos Aires, 12 de agosto de 2015. VISTOS Y CONSIDERANDO: I. El juez de la instancia de origen resolvió decretar el procesamiento de Mirtha Alicia Sardine por considerarla autora del delito de amenazas coactivas agravadas por estar destinadas al abandono del lugar de residencia (hecho I) y ampliar el procesamiento de Julio César Vega por considerarlo autor de los delitos de amenazas coactivas agravadas por haber sido proferidas con el objeto de que la víctima abandone su lugar de residencia (hecho 1); lesiones graves (hecho 2); amenazas coactivas en concurso ideal con lesiones leves agravadas por la relación de pareja (hecho 3); y adecuar aquél constitutivo del delito de femicidio en grado de tentativa (hecho 4) todos los cuales concursan entre sí de modo material. Tal decisión decisión fue recurrida por la defensa oficial de los nombrados mediante el escrito de fs. 288/294vta. A la audiencia prevista por el artículo 454 del ceremonial, expuso agravios el Dr. Rodrigo Sanabria, defensor oficial del Cuerpo de Letrados Móviles de la DGN en representación de los intereses del imputado. Finalizada la deliberación, nos encontramos en condiciones de emitir pronunciamiento. II. A fin de lograr una mayor claridad expositiva nos referiremos a cada uno de los hechos de manera separada. Hecho 1: Se atribuye a Mirtha Alicia Sardine y a Julio César Vega el haber proferido a Myrna Soledad Leaño frases tales como “que si no se iba del barrio le iban a hacer cualquier cosa” (sic), suceso que habría tenido lugar el día 17 de junio de 2014, a las 17hs. aproximadamente, en la calle Moreno 2950, de esta ciudad. La defensa argumentó que nos encontramos frente a una situación de dichos contra dichos insuperables. En esa dirección, puso en duda el relato de Gabriel Darío Miño por la relación personal que tendría con la víctima. Los argumentos traídos a consideración por la defensa, resultan insuficientes para conmover el temperamento adoptado en la instancia de origen. El relato de la damnificada se encuentra corroborado con el testimonio del testigo Miño, quien aseguró que el día del hecho observó a ambos imputados que concurrieron al lugar donde trabaja junto a la damnificada, lugar donde la “insultaron”. Si bien el testigo en su relato no describió haber escuchado la concreta amenaza descripta por Myrna Leaño, lo cierto es que la situación de agresión que describió, permiten darle verosimilitud a la denuncia formulada por la nombrada. Fecha de firma: 12/08/2015 Firmado por: MIRTA L. LOPEZ GONZALEZ, JUEZ DE CAMARA Firmado por: MARIANO ALBERTO SCOTTO, JUEZ DE CAMARA Firmado(ante mi) por: MARIA MARTA ROLDAN, SECRETARIA DE JUZGADO Poder Judicial de la Nación CAMARA NACIONAL DE APELACIONES EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 5 CCC 36955/2014/CA3 “Vega, Julio César y otro s/ coacción” Juz. de Instrucción nro. 17 MM/14 Por otra parte, cabe señalar que a partir de las amenazas que recibió por parte del imputado Vega y Sardini (encargada del hotel en el que vivía) debió mudar su lugar de residencia (ver fs. 5/vta.), extremo que revela que, desde la perspectiva del sujeto pasivo, el mal que se anunció se presentó con entidad suficiente para doblegar su voluntad. En este sentido, lo puesto en consideración por la parte recurrente vinculado a los motivos por los que el juez valora un testimonio sobre otros, en todo caso, podrá zanjarse en la siguiente etapa procesal. Hecho 2: Se atribuye a Julio César Vega haber propinado dos golpes de puño en la nuca y uno en el rostro a Gabriel Dario Miño, que provocaron que se cayera al suelo donde le aplicó puntapiés en la cabeza y en el cuerpo. Este suceso habría tenido lugar el 20 de julio de 2014 a las 18:00 horas, en la puerta del trabajo del damnificado, sito en Moreno 2950 de esta ciudad. La defensa de Vega se aferró a la decisión que adoptó el titular del Juzgado Correccional nro. 10 -previo a la acumulación con estos actuados-. En ese sentido, adujo que no hay testigos que permitan colocar al imputado en el lugar del suceso y por lo tanto, resulta imposible afirmar que las lesiones constatadas en el cuerpo de Miño hayan sido provocadas por Vega. Si bien es cierto lo manifestado por la recurrente en cuanto a que el primer magistrado que intervino en las actuaciones dictó el archivo porque consideró que no había pruebas suficientes para vincular a Vega con los hechos denunciados, lo cierto es que bajo un análisis integral de todos los sucesos que se fueron acumulando en estas actuaciones no puede desconocerse la conflictiva en la que se encuentran inmersos los implicados. Bajo esta óptica debe ponderarse que Miño formalizó la denuncia por las lesiones recibidas el mismo día del hecho y contó lo sucedido al momento de brindar su testimonio como testigo presencial del suceso que había tenido lugar poco más de un mes atrás -hecho 1- (fs. 29/vta.), y sus relatos, se observan consistentes y resultan compatibles con las zonas del cuerpo donde se constataron sus lesiones y a las que hizo referencia al momento de ser atendido en el hospital Ramos Mejía (lesión cicatrizal de aproximadamente 9 cm de longitud y en región lumbar derecha, ver fs. 31/34 e informes de fs. 52/53). Por lo expuesto, la decisión adoptada en relación a este episodio también merece ser homologada. Hecho 3: Fecha de firma: 12/08/2015 Firmado por: MIRTA L. LOPEZ GONZALEZ, JUEZ DE CAMARA Firmado por: MARIANO ALBERTO SCOTTO, JUEZ DE CAMARA Firmado(ante mi) por: MARIA MARTA ROLDAN, SECRETARIA DE JUZGADO Poder Judicial de la Nación CAMARA NACIONAL DE APELACIONES EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 5 CCC 36955/2014/CA3 “Vega, Julio César y otro s/ coacción” Juz. de Instrucción nro. 17 MM/14 Se atribuye a Vega el hecho que habría tenido lugar el 2 de septiembre de 2014, a las 23.00hs en Moreno nro. 2950 de esta ciudad, consistente en haber tomado del cabello y arrojar al suelo a Leaño al tiempo que la insultaba y le refería frases como “perra, puta, seguro que andás con uno de la clínica” (sic), para luego propinarle puntapiés en el muslo y en la cabeza, indicándole “voy a ir a Salta a hablar con tu mamá y con tus hijos, te voy a hacer quedar mal allá” (sic). Ello, habría tenido lugar luego de que la víctima se negare a reanudar la relación de pareja. La recurrente sostiene que no existe constancia probatoria que determine que fuera Vega quien efectivamente lesionara a Leaño. Así como también cuestionó la tipicidad de las frases proferidas por aquél. Si bien, en principio, podría preguntarse si la frase supuestamente amenazante, por sí misma, podría encuadrar en la figura de coacción, lo cierto es que no puede ser analizada de manera aislada y sin evaluar el contexto general en que se produjeron. En este sentido, ponderamos los diversos hechos de violencia física y verbal que Leaño adjudicó al imputado y que -según explicó- todos ellos tenían como objetivo obligarla a retomar una relación sentimental. Así, ese contexto, es el que en definitiva, al menos en esta instancia, permite otorgarle relevancia típica. En tal sentido, también valoramos que mientras le profería la frase señalada le propinaba golpes en su cuerpo. Finalmente, no puede desoírse el Informe Interdisciplinario de Riesgo practicado en la sede de la O.V.D, que se encuentra glosado a fs. 13/14 y concluyó que la situación de la damnificada resulta de ALTO RIESGO y que “dicha valoración se sustenta teniendo en cuenta los tipos de maltrato enunciados y la descripción de la conducta del Sr. Vega, con notable incremento tanto en la frecuencia como en la intensidad” (sic). Este informe dejó a la vista la situación de vulnerabilidad en la que se encuentra la víctima, frente a las constantes situaciones de violencia padecidas que se pueden apreciar a lo largo de toda la investigación y que culminaron con el suceso del 12 de junio de 2015 por el cual el imputado se encuentra procesado como autor del delito de femicidio en grado de tentativa. HECHO 4: Ahora bien, respecto a la adecuación fáctica del hecho 4, dado que la defensa no presentó agravios sobre este nuevo aspecto no corresponde expedirnos sobre el particular. Fecha de firma: 12/08/2015 Firmado por: MIRTA L. LOPEZ GONZALEZ, JUEZ DE CAMARA Firmado por: MARIANO ALBERTO SCOTTO, JUEZ DE CAMARA Firmado(ante mi) por: MARIA MARTA ROLDAN, SECRETARIA DE JUZGADO Poder Judicial de la Nación CAMARA NACIONAL DE APELACIONES EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 5 CCC 36955/2014/CA3 “Vega, Julio César y otro s/ coacción” Juz. de Instrucción nro. 17 MM/14 En efecto, las críticas planteadas por la parte tienden nuevamente a cuestionar el elemento subjetivo del tipo penal que se le atribuye, aspecto que ya fue decidido por esta Sala -con una integración parcialmente diferente-, mediante la resolución obrante a fs.217 y donde se concluyó que los elementos con los que se contaban eran suficientes para afirmar que los actos desplegados por Vega tenían la entidad necesaria para provocar la muerte de su ex pareja. Así, no habiéndose incorporado ninguna otra prueba ni elemento que permita razonablemente variar el temperamento adoptado, los planteos de la defensa no merecen un nuevo análisis. De este modo, lo reseñado en los párrafos precedentes diluye los agravios expuestos por la defensa por lo que confirmaremos el auto apelado. Por los motivos expuestos el tribunal RESUELVE: CONFIRMAR los puntos I y IV del auto de fs. 268/276vta. en cuanto han sido materia de recurso. Se deja constancia que el juez Ricardo Matías Pinto no presenció la audiencia por hallarse en uso de licencia. El juez Mariano A. Scotto suscribe la presente en virtud de haber sido designado subrogante de la vocalía nro. 10 por decisión de la Presidencia de esta Cámara de fecha 26 de junio de 2015. Notifíquese mediante cédula electrónica. Devuélvase al juzgado de origen y sirva la presente de muy atenta nota. Mirta L. López González Mariano A. Scotto Ante mí: María Marta Roldán Secretaria Fecha de firma: 12/08/2015 Firmado por: MIRTA L. LOPEZ GONZALEZ, JUEZ DE CAMARA Firmado por: MARIANO ALBERTO SCOTTO, JUEZ DE CAMARA Firmado(ante mi) por: MARIA MARTA ROLDAN, SECRETARIA DE JUZGADO