GAT Fertilíquidos, S. A. Crta. Niebla-Bonares, Km 1,8 – 21840 Niebla (Huelva) Tel oficina: 9-59-362002 Fax oficina: 9–59-362142 Tel pedidos: 9-59-362007 Fax pedidos: 9-59-363036 www.gatfertiliquidos.com PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO DE OBSTRUCCIONES DE LOS GOTEROS El problema de la obstrucción de los goteros preocupa a nuestros clientes y más de una vez nos consultan cómo encarar este tema. A continuación se intenta resumir las medidas a seguir para prevenir y tratar las obstrucciones de los goteros. OBSTRUCCIONES FÍSICAS Son producidas por partículas sólidas que se acumulan en los goteros. Estas partículas pueden ser de arcilla, limo, arena, plástico, etc. que pasan los filtros o que se introducen en el sistema a la hora de instalarse o de repararse. Para prevenirlas se debe tener especial cuidado en el diseño de las balsas de decantación y el filtrado, de acuerdo con el origen y la calidad del agua. En la entrada del agua a la balsa se colocarán unos coladores para eliminar materias sólidas extrañas. En caso de bombear el agua de una balsa de decantación, la toma de agua debe estar ubicada en un punto que evite la introducción de partículas al sistema. Generalmente el punto de aspiración se ata a una boya para que esté cerca de la superficie. La presencia de arena en el agua obliga a instalar hidrociclones, cuya misión es separar la arena. Éstos se instalan a la entrada del agua al cabezal. Al finalizar la instalación o la reparación de un sistema de riego, y antes de ponerlo en marcha, se deben dejar los finales de las líneas abiertos, para hacer un buen lavado de todas las partículas que se acumularon en las tuberías. Esta operación de lavado debe repetirse de vez en cuando, dependiendo la frecuencia de la limpieza del agua. OBSTRUCCIONES BIOLÓGICAS Son producidas por organismos como algas, bacterias y hongos. Las algas se reproducen rápidamente en aguas superficiales. Es recomendable cubrir la balsa con un plástico oscuro para evitar su formación. Hay quien recomienda incorporar a la balsa carpas. Los filtros de arena son los indicados para evitar el paso de las algas al sistema de riego. Algunas consiguen pasar los filtros y se reproducen en el interior de las conducciones, sobre todo si hay partes del sistema que permiten el paso de la luz. GAT Fertilíquidos, S. A. Crta. Niebla-Bonares, Km 1,8 – 21840 Niebla (Huelva) Tel oficina: 9-59-362002 Fax oficina: 9–59-362142 Tel pedidos: 9-59-362007 Fax pedidos: 9-59-363036 www.gatfertiliquidos.com Uno de los productos químicos más baratos, seguros y eficaces para evitar su formación es el sulfato de cobre. La dosis recomendada es de 2 a 3 gramos por m3 de agua embalsada. Otro producto de uso común es el permanganato de potasio. La dosis recomendada es de 5 a 10 gramos por m3 de agua embalsada. Por supuesto, con ambos productos hay que volver a tratar cada vez que se cambia el agua. Si el agua permanece embalsada se debe tratar periódicamente: todas las semanas en verano y una vez por mes en el invierno. Los microorganismos más frecuentes son bacterias, hongos y algas microscópicas. Estos se reproducen en las tuberías formando depósitos gelatinosos en las paredes y en los goteros. Existen bacterias filamentosas que forman masas gelatinosas, cuando el agua contiene una concentración alta de hierro. Las bacterias ferrosas provocan precipitaciones de óxido férrico. Las bacterias sulfurosas producen precipitaciones de azufre. Para la prevención y control de microorganismos en el agua de riego se usa el hipoclorito sódico (concentración de cloro activo del orden de 12%) a una dosis de 15-20 cm3 por m3 de agua. Se aplica al final del riego, en los últimos 10 minutos, de tal forma que la solución quede retenida en la tubería hasta el próximo riego. La solución debe inyectarse al sistema de riego antes de los filtros de arena. Siempre es preferible hacer tratamientos preventivos, pero en el caso que se hayan formado masas gelatinosas se debe aplicar una dosis de 2-3 litros de hipoclorito sódico por m3 de agua, manteniendo esta solución durante 12 horas en las tuberías. El lavado debe hacerse con abundante agua, ya que el cloro residual concentrado puede afectar a las plantas. Nunca se debe mezclar hipoclorito sódico con ácidos, ya que se desprende cloro en forma de gas, que es sumamente tóxico para las personas. GAT Fertilíquidos, S. A. Crta. Niebla-Bonares, Km 1,8 – 21840 Niebla (Huelva) Tel oficina: 9-59-362002 Fax oficina: 9–59-362142 Tel pedidos: 9-59-362007 Fax pedidos: 9-59-363036 www.gatfertiliquidos.com OBSTRUCCIONES QUÍMICAS Son producidas por la formación de precipitados de origen químico en las tuberías y/o por evaporación de agua en las aperturas de los goteros. El riesgo es mayor cuando se riega con aguas alcalinas. Estos precipitados pueden ser de diferente origen: Precipitados de hierro se forman cuando existen en el agua de riego concentraciones de hierro superiores a 0.2 gramos por m3 y el pH es superior a 7.5. Se puede evitar que los precipitados de hierro se formen dentro de las tuberías, provocando la formación de sales insolubles antes de los filtros mediante la oxigenación del agua, por floculación con floculantes específicos o clorando el agua. Las sales insolubles que se forman deben ser retenidas por los filtros. El método más accesible es el clorado del agua. La cantidad de cloro a inyectar se calcula según : ppm de Fe en el agua x 0.65 = ppm de cloro Precipitados de carbonato cálcico se producen si las aguas calcáreas llevan en disolución el ion bicarbonato (HCO3-) en una concentración mayor a 130 mg/L y pH mayor de 7.5. Las obstrucciones por precipitados de carbonato cálcico se pueden prevenir con el uso de fertilizantes ácidos, de tal forma que se obtenga un pH del agua de riego de 5.5-6.5. Para verificar el pH del agua de riego con el fertilizante incluido se pueden usar tiras de papel de tornasol o traer una muestra del agua del cliente a nuestro laboratorio. No se recomienda el uso de los pH-metros de bolsillo, ya que no se puede fiar de su lectura si no se calibran diariamente. En caso que se hayan formado precipitados de carbonato de calcio o de magnesio y se quiera proceder a su disolución hay que hacer un tratamiento en base a ácidos. El ácido nítrico es el más utilizado para este fin por los agricultores, diluido al 56% o 65%. Este ácido es sumamente peligroso por su alta corrosividad y puede provocar quemaduras graves en contacto con la piel. Para determinar la concentración de ácido nítrico a aplicar se recomienda hacer una prueba. A un cubo de agua de 15-20 litros se le va agregando cantidades medidas de ácido nítrico, hasta que se llegue a un pH de 3. Luego se calcula por regla del tres la cantidad de ácido necesaria para el caudal de agua preciso. GAT Fertilíquidos, S. A. Crta. Niebla-Bonares, Km 1,8 – 21840 Niebla (Huelva) Tel oficina: 9-59-362002 Fax oficina: 9–59-362142 Tel pedidos: 9-59-362007 Fax pedidos: 9-59-363036 www.gatfertiliquidos.com El tratamiento se realizará de la siguiente manera: 1. 1. Se aplica agua hasta llegar a la presión de trabajo normal. 2. 2. Se trata durante 30 minutos con ácido reduciendo la presión de trabajo a 0.5 atmósferas 3. 3. Se procede al lavado del sistema a presión normal, abriendo los finales de las líneas, para dejar salir por ellos la suciedad acumulada. En el caso que el nivel de obturación sea grave se debe hacer un tratamiento con una dosis de 2 litros de ácido nítrico por m3 de agua, manteniendo esta solución durante varias horas dentro del sistema, lavando después con agua abundante para evitar posibles daños a los cultivos. Es conveniente diluir el ácido antes de inyectarlo a la red de riego. Echar siempre el ácido sobre el agua porque la mezcla libera calor e incluso puede ser explosiva. En algunos casos se emplea el ácido fosfórico, diluido al 75%. Se usa en concentraciones de 250-500 cm3 por m3 de agua. No es conveniente pasar esta concentración cuando el agua de riego contiene mucho Ca y Mg, lo que podría provocar precipitados. También el ácido clorhídrico se suele utilizar, diluido al 32% o 36%. Para tratamientos preventivos se aplican cantidades de 500-1000 cm3 por m3 de agua. Cuando ya hay obturaciones de goteros es necesario aplicar 5 a 10 litros de ácido clorhídrico por m3 de agua, procediendo como se indicó para el ácido nítrico. Este ácido no debe usarse cuando el agua contiene concentraciones de Fe superiores a 0.2 gramos por m3 de agua, lo que puede formar cloruro férrico insoluble. GAT Fertilíquidos, S. A. Crta. Niebla-Bonares, Km 1,8 – 21840 Niebla (Huelva) Tel oficina: 9-59-362002 Fax oficina: 9–59-362142 Tel pedidos: 9-59-362007 Fax pedidos: 9-59-363036 www.gatfertiliquidos.com CONSIDERACIONES GENERALES • • • • • Cuando se pone en marcha una nueva instalación o después de reparar una avería se deben abrir los finales de las líneas antes de abrir el agua, para proceder al lavado de materias extrañas. Realizar lavados periódicos, abriendo los finales de las líneas. Llevar a cabo revisiones y limpieza periódicas de los filtros de mallas y de anillas. Si se observan obturaciones por carbonatos introducir éstas en una solución de ácido nítrico al 3% durante 30 minutos. Asegurar que no quede abono en las tuberías al finalizar el riego. El color de las obstrucciones difiere según sea su origen: blanco cuando son originadas por carbonatos; negro grasiento con textura gelatinosa cuando son originadas por microorganismos; ocre rojizo cuando son originadas por precipitados de hierro. Departamento Agronómico de Gat Fertilíquidos