Balanza comercial: se cumplió el fin ¿se justifican los

Anuncio
 Balanza comercial: se cumplió el fin ¿se justifican los medios? Autores: Nadin Argañaraz Ariel Barraud INFORME ECONÓMICO Nº 200 14 de Enero de 2013 Juan Cruz Varela 2255 (5009) Ciudad de Córdoba www.iaraf.org ‐ Tel. (0351) 4815037 / 4825661 / 4824859‐ e‐mail: [email protected] ISSN 2250‐7329 0 Balanza comercial: se cumplió el fin ¿se justifican los medios? En el pasado año uno de los principales objetivos de política económica fue la consecución de un superávit de balanza comercial superior a los USD 10 mil millones. Tal objetivo se cumplió con creces al finalizar el año, no obstante lo cual surge el interrogante acerca de cómo se llegó a tal resultado. Esto ocurre puesto que la fijación como objetivo de un valor puntual podría haberse logrado de manera trivial cerrando completamente las fronteras al ingreso de productos extranjeros desde el 1 de enero de 2012, tomando un ejemplo extremo, unos días antes de febrero del pasado año, ya que para esa fecha ya se había exportado por USD 10 mil millones. Claramente, lo que interesa es cómo afecta a las variables económicas relevantes (crecimiento, empleo, salarios) la estructura del comercio internacional argentino, tanto de los bienes y servicios que vendemos al resto del mundo, como de los que compramos de nuestros socios comerciales, en el marco de una economía global en la que los países se vinculan crecientemente a través de sus transacciones económicas. Hay cierto consenso en la teoría económica acerca de que el comercio internacional es una herramienta que tiene el potencial de resultar decisiva para el desarrollo económico, aunque los argumentos en defensa de las ventajas que un comercio liberalizado aporta al crecimiento de todos los países se encuentran en debate dada la configuración fuertemente desbalanceada de la geografía económica actual. En nuestro país, lo que se pudo observar el pasado año, fue una pronunciada caída en el grado de apertura de la economía, medido como el cociente entre el comercio con el resto del mundo y el producto bruto argentino. Dicho indicador tomó uno de sus valores más elevados en 2008, cuando la suma de las exportaciones más las importaciones argentinas equivalieron a casi el 40% del PBI, y en 2012 se habría reducido al 30% (la más baja desde 2002) ante los bajos valores relativos de exportaciones e importaciones, cuyos valores en dólares se habrían ubicado por debajo de los de 2011. Es decir, la menor apertura o “cierre” de la economía provino de ambas variables: las exportaciones pasaron del 18% del PIB en 2011 al 16% en 2012, mientras que las importaciones pasaron del 16% al 14% del PIB entre ambos años. 1 45%
40%
Importaciones
35%
25%
15%
10%
8,9%
10,9%
20%
15,4%
11,9%
10,9%
13,8%
10,9%
11,2%
11,4%
16,9%
11,6%
10,7%
11,8%
12,6%
14,5%
15,9%
17,5%
19,4%
19,3%
17,2%
18,2%
17,4%
Exportaciones
30%
35,6%
34,3%
37,6%
38,1%
38,0%
38,7%
39,3%
30,9%
32,7%
34,1%
30,1%
Grado de Apertura de la Economía Argentina. (Exportaciones + Importaciones como % del PIB) 5%
1980
1981
1982
1983
1984
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012 (est)
0%
Fuente: IARAF en base a datos de MECON y FMI. Cómo se llegó al objetivo En un año que se presentó con una importante caída en la demanda mundial ante la crisis económica en los países centrales, la previsión de una desaceleración en el valor de las exportaciones argentinas por menores cantidades embarcadas al exterior (aún cuando se dieran elevados precios para los principales productos exportados), llevó a que la respuesta de corto plazo para lograr el objetivo numérico arriba enunciado fuera una política de freno a las importaciones de bienes y servicios, a través en general de instrumentos no arancelarios y trabas al circuito para acceder al cierre de estas operaciones. Se puede destacar uno de los principales efectos de la política de restricciones impuestas a la importación, sobre variables relevantes para la mejora del potencial económico de una nación, como lo son la capacidad productiva y la inversión. Uno de los principales efectos de la política de restricciones impuestas a la importación fue su impacto sobre la producción de corto plazo y la capacidad de producción de largo plazo (inversión). 2 Del total de lo que compramos al resto del mundo, un 80% corresponde a productos necesarios para poder llevar a cabo la producción local: insumos, combustibles y lubricantes, bienes de capital. Variación interanual del valor de las importaciones. Vehículos automotores para pasajeros 23%
‐1%
Bienes de consumo 27%
‐11%
Piezas y accesorios para bienes de capital 36%
‐7%
Combustibles
97%
1%
Bienes intermedios 28%
‐10%
Bienes de capital 27%
‐17%
Total general
36%
‐8%
‐40%
‐20%
0%
20%
40%
60%
80%
100%
a septiembre 2011
a septiembre 2012
Fuente: IARAF en base a datos de MECON. En este sentido, resultan particularmente preocupantes las menores importaciones de los últimos, dado que constituyen parte importante de la inversión, la cual resultó afectada negativamente el pasado año. El último dato oficial disponible de inversión bruta interna fija (IBIF) mostraba una caída interanual del 15%, verificándose que el rubro equipo durable de producción (el cual representa la mitad de la IBIF) tenía una baja del 27%, compuesta por equipos nacionales creciendo apenas un 4%, frente a importados cayendo un 42%. Variación interanual del rubro Equipo durable de Producción. 80%
total
60%
nacional
importado
40%
20%
II 12
I 12
IV 11
III 11
II 11
I 11
IV 10
III 10
I 10
II 10
IV 09
III 09
II 09
I 09
IV 08
III 08
II 08
I 08
III 07
‐20%
IV 07
0%
‐40%
‐60%
Fuente: IARAF en base a datos de MECON. 3 Indicadores de inversión. 40%
Inversión. Var. Interanual del acumulado parcial
30%
20%
10%
0%
‐10%
‐20%
‐14.7%
IBIM
‐31.1%
‐30%
‐40%
‐50%
Eq durable de prod. importado
Ene‐07
Mar‐07
May‐07
Jul‐07
Sep‐07
Nov‐07
Ene‐08
Mar‐08
May‐08
Jul‐08
Sep‐08
Nov‐08
Ene‐09
Mar‐09
May‐09
Jul‐09
Sep‐09
Nov‐09
Ene‐10
Mar‐10
May‐10
Jul‐10
Sep‐10
Nov‐10
Ene‐11
Mar‐11
May‐11
Jul‐11
Sep‐11
Nov‐11
Ene‐12
Mar‐12
May‐12
Jul‐12
Sep‐12
Nov‐12
‐60%
Fuente: IARAF con datos OJF. Otro aspecto relevante para la infraestructura productiva agregada es la evolución reciente de la Balanza Energética. Las exportaciones argentinas de Combustible y Energía –principalmente petróleo – llegaron a su máximo en el año 2006, a partir de ese año comenzaron a estancarse, y mantuvieron su valor en dólares relativamente estable. Por el contrario, las importaciones de Combustibles y Energía ‐principalmente gas‐ han seguido una senda exponencial de aumento, sólo interrumpida en el año 2009 como resultado de la menor demanda interna de energía derivada de la desaceleración económica que afectó al país en dicho año. Luego, las compras externas de energía retomaron su senda ascendente, llegando en el año 2012 a unas importaciones estimadas de casi diez mil millones de dólares. Asimismo, la Balanza Energética fue cobrando cada vez mayor importancia con respecto a la Balanza Comercial. De hecho, en el año 2006 la Balanza Energética aportaba casi el 50% del superávit comercial, mientras que en el año 2012 representó un “peso” para la Balanza Comercial, con un déficit de unos USD 3.500 millones, con perspectivas que dicho déficit sea creciente debido a la falta de inversiones de envergadura en la materia, restando a la economía una materia prima esencial para mantener durante 2013 elevado el consumo: los dólares. 4 Evolución de las exportaciones e importaciones de Combustibles y Energía 10,000
9,000
Exportaciones de CyE
Millones de US$
8,000
Importaciones de CyE
7,000
6,000
5,000
4,000
3,000
2,000
1,000
2012e
2010
2008
2006
2004
2002
2000
1998
1996
1994
1992
1990
1988
1986
1984
1982
1980
0
Fuente: Elaboración propia sobre la base de INDEC. Evolución de la Balanza Comercial y la Balanza Energética 20,000
Balanza comercial
15,000
Balanza energética
Millones de US$
10,000
5,000
0
‐5,000
2012e
2010
2008
2006
2004
2002
2000
1998
1996
1994
1992
1990
1988
1986
1984
1982
1980
‐10,000
Fuente: Elaboración propia sobre la base de INDEC. Más allá del horizonte (de corto plazo) El freno a las importaciones blindó la consecución del monto del superávit comercial anhelado, y ha protegido a corto plazo a sectores productivos cuyo grado de competitividad es relativamente bajo. Sin embargo, el principal desafío que plantea este tipo de políticas es que los cambios de estructuras productivas sólo se producen en un plazo mediano a largo. En lo inmediato, se hace 5 difícil reemplazar por bienes domésticos (si es que los mismos están técnicamente disponibles) a aquéllos insumos y bienes de capital que antes se obtenían del resto del mundo a través del intercambio comercial internacional, pagándolos con los dólares generados por los sectores cuya competitividad les permitía ser exportadores. Un análisis económico de las medidas proteccionistas descriptas muestra que de cualquier modo y en cualquier plazo considerado, la estructura económica se torna menos competitiva ante las distorsiones producidas en los costos y precios relativos, lo que en definitiva afecta tanto a los sectores exportadores como a los consumidores domésticos. La inversión se resiente, con lo cual el potencial de crecimiento también resulta menor. El efecto positivo sobre los niveles de empleo se ve amenazado así tanto por el deterioro del poder de compra de los salarios, como por el cierre “hacia adentro” de los mercados para los productos y servicios que ocupan a esos trabajadores. En el contexto mundial Argentina es, a excepción de algunos bienes, lo que en economía se denomina país pequeño, en tanto que el tamaño de su mercado es reducido. El objetivo1 de tener superávits comerciales superiores a un determinado valor puede calificarse de simbólico, y si se lo toma como una meta inflexible puede generar situaciones en las cuales su consecución entraña más riesgos que cuestiones positivas. El próximo desafío es que los distintos sectores productivos ganen competitividad genuinamente, amplíen y diversifiquen sus mercados, y permitan una generación duradera de empleo. Nuestro “país pequeño” aún cuenta con las potencialidades para ello. Probablemente “el número no cierre” en algún periodo, pero esto no será tan relevante ya que el objetivo será otro, más trascendente para el bienestar argentino. 1
En realidad la teoría de la política económica designa a los superávits fiscales o comerciales como variables intermedias, o cuasi‐objetivos (variables intermedias “ascendidas” al rango de objetivos). 6 
Descargar