Número 61 mayo - junio 2009 15500 ejemplares 06 Interpretaciones sobre la muerte vida cotidiana ISSN Nº 1390 - 3519 muerte en 10 Ladiferentes culturas drama no es 12 El“vivir o morir” 16 Vivir...muriendo de la muerte para 20 Sentido los cristianos: Desafíos CONSEJO DE PUBLICACIONES Luciano Bellini Fedozzi, sdb PRESIDENTE Eliécer Cárdenas Espinoza Javier Herrán Gómez, sdb José Sánchez Parga Reportaje sobre la moda 28 Del rostro a la máscara: la metamorfosis de Michael Jackson 30 conozca más Luis Álvarez Rodas EDITOR GENERAL CONSEJO EDITORIAL Rómulo San Martín, sdb Raúl Conza Barba, sdb Rubinsky Sánchez Andrade, sdb Rubén Bravo Castillo Liderazgo y Asociacionismo 34 Las IUS definen una propuesta formativa conjunta 36 DIRECTOR Daniel Fajardo Chunchi arte y cultura EDITOR Jorge Galán Montesdeoca DISEÑO E ILUSTRACIÓN Santiago Pazmiño Jorge Zaldumbide Wendy Cevallos 24 Gorilas Caravana Cultural 42 Bennedeti 46 FOTOGRAFÍA Santiago Borja IMPRESIÓN Ediciones ABYA-YALA experiencias 04 • UTOPÍA es una publicación bimensual de la Universidad Politécnica Salesiana del Ecuador. Las ideas y opiniones expresadas en las colaboraciones, son de exclusiva responsabilidad de los autores. 26 P. Javier Herrán Voluntariado y tiempo libre: experiencia de la UPS 50 Lo importante no es dónde vives, sino cómo vives 54 La sede Cuenca vivió su Semana Saludable 58 Si bien es cierto que varias culturas consideran a la muerte como una compañera de la vida, también es cierto que esta realidad genera temor, ansiedad y preocupación. Aries (2000) decía que vivimos en un período de negación de la muerte, sobre todo en la cultura occidental. En la sociedad actual, también se vive de espaldas a la muerte e impera una “ley del silencio”, provocando que el ser humano repentinamente se vea frente a ella sin haberse preparado antes (Hennezel & Leloup, 1998), o simplemente se busque evadir esta realidad por estar anclado en una cultura diferente, que no quiere cuestionarse ni afectar una vida de alegría y placer. Victor Frankl decía que para enfrentarnos a la idea de la muerte, primero debemos responder a la pregunta: ¿cuál es el sentido de la vida? No obstante, también podemos inferir que preguntarnos acerca de la muerte nos lleva a escudriñar por la vida y su sentido. Al respecto, Séneca afirmaba que: “Ningún hombre goza del verdadero sabor de la vida sino aquél que está dispuesto y preparado para abandonarla”. Daniel Fajardo Chunchi Desde una antropología cristiana, la vida va más allá del techo de la finitud y se proyecta hacia la trascendencia, porque a través de la resurrección de Jesucristo, todos caminamos hacia una vida en plenitud. Esta vida en plenitud se hace realidad en una comunidad que, desde la esperanza que nos trajo Cristo, enfrenta la cultura de muerte materializada en la inequidad, el egoísmo y la instrumentalización del ser humano; y promueve la globalización de la paz con justicia, del respeto y de la fraternidad. La muerte es una condición humana: todos moriremos. Esa es una de las pocas certezas con las cuales podemos contar. Es decir que nuestra situación vital es enfrentarnos a la certeza de nuestra muerte. La vida de los seres humanos está atada a ciertos elementos que tenemos y muchas veces no podemos explicar, son misterios: la vida misma, su sentido, la muerte, el mundo… Como humanos, tenemos que enfrentar esas dimensiones y dar respuestas válidas. Por ejemplo, frente a la existencia humana, a la vida que tenemos, damos respuestas religiosas o científicas. Frente a la muerte también debemos generar preguntas y, por lo tanto, respuestas. Pero no podemos tener experiencia de la muerte sino en otros. El otro que muere, nos acerca a lo que es la muerte. No podemos morir para saber lo que es esa realidad. Las preguntas surgen como condiciones existenciales que cada uno de nosotros y la humanidad en su conjunto tiene que responder: ¿Cómo entender la muerte? ¿Existe algo después de la muerte? Y si existe un algo, entonces, ¿qué es? Otras referencias culturales mantienen una interpretación en la que el sujeto que muere pasa a ser parte de un todo que se reconstruye en la vitalidad de los seres. Otra respuesta posible es que todo el sistema humano termina con la muerte, pasando a ser materia en el cosmos. Realmente podemos encontrar diversas respuestas. El humano, cuando se pregunta por la muerte, se enfrenta al sentido de la vida. Muerte y vida son una misma cosa, coexisten en nosotros y nos permiten sabernos humanos, ser humanos en este mundo dentro de nuestra finitud. Las culturas han trabajado respuestas posibles, que muchas veces se convierten en dogmas para los miembros de esos pueblos. Tenemos, por ejemplo, algunas respuestas religiosas que argumentan un más allá, que será mejor que lo que aquí podemos vivir. opinión 06 Darwin Reyes 07 Sin importar cuál sea la respuesta que demos a la condición humana de sabernos seres limitados en nuestra existencia, seres finitos, hay una constante al enfrentarnos a la muerte como hecho concreto de nuestra humanidad: el sentido de la muerte reconstruye el sentido de la vida. El humano, cuando se pregunta por la muerte, se enfrenta al sentido de la vida. Muerte y vida son una misma cosa, coexisten en nosotros y nos permiten sabernos humanos, ser humanos en este mundo dentro de nuestra finitud. El “sentido” o los “sentidos” son construcciones sociales, culturales, históricas que en sí mismas no se sostienen, sino que sólo cobran “referencialidad” en la medida que están insertas en un contexto, en la historia de un grupo humano. En nuestro ámbito, los sentidos e interpretaciones sobre la muerte y el más allá hacen referencia a las tradiciones judeo cristianas que han sido compañeras de la historia de “occidente”. No se trata de un acto individual en el que construimos las interpretaciones sobre la muerte, sino que nos vienen dadas desde la historia de nuestros pueblos. En definitiva, las interpretaciones y comprensiones sobre la muerte son colectivas, contextuales e históricas. En el fondo, queremos interpretarnos como humanos y nuestra existencia exige sentidos para lo que vivimos o creemos vivir. ¿Realmente podemos decir que lo humano tiene sentido? ¿Podemos, con certeza, darle un sentido a la muerte o a la vida? La condición humana nos coloca frente a nosotros mismos, en un mundo en el cual no podemos enfrentar el vacío, el sinsentido. Los pueblos y las personas construyen interpretaciones para sostener la cotidianidad y la historicidad, con una respuesta grupal, aceptada por muchos. Una interpretación sobre la muerte, convertida en verdad absoluta, sacralizada, sobre la cual no podemos ni dudar. lidades cotidianas: trabajo hasta el cansancio, bienes, sexo o cualquier otra cotidianidad que nos consuele y nos haga sentir más allá del enfrentarnos con las preguntas fundamentales. ma, nuestra muerte posible y nuestra forma de estar junto al otro? El sentido es como ese mar inmenso, abierto a posibilidades y abierto en el mismo tiempo y espacio a la muerte, a la destrucción. Dudar nos haría vulnerables y nos llevaría a destruir el sistema montado por siglos, de generación en generación. Lo más fácil en este punto es aceptar lo que ya se ha dicho, lo que otros han “dado pensando” sobre la muerte. Volver a buscar respuestas es cosa de locos. El sistema funciona mejor, si no nos preguntamos, si no nos atrevemos a generar la misma pregunta de siempre: ¿cómo entender la muerte y cómo entender la vida? La muerte nos deja un sabor a sin sentido. Siempre es una cuestión cuya respuesta nos deja con desconsuelo. Muchos seres humanos intentan llenar ese desconsuelo, ese pozo sin fondo con superficia- Pero, no hay consuelo, todo nos regresa al inicio: la pregunta por la vida y por la muerte. ¿Dónde encontramos lo humano? Acaso en el sentido que damos desde las sociedades “light” postmodernas, o en sentidos artificiales desde lo que suponemos es bueno y normal. ¿Ycuando la muerte nos acosa? El pensar la muerte nos invita a volver a nosotros mismos, no solamente como individuos, sino como grupos humanos. El bien, el mal se reinterpretan desde el recrear los imaginarios sobre la muerte. ¿No será que lo real es la muerte, que las interpretaciones que creemos son sentidos construidos para poder concretar nuestra vida mis- En el fondo, queremos interpretarnos como humanos y nuestra existencia exige sentidos para lo que vivimos o creemos vivir. ¿Realmente podemos decir que lo humano tiene sentido? ¿Podemos, con certeza, darle un sentido a la muerte o a la vida? La condición humana nos coloca frente a nosotros mismos, en un mundo en el cual no podemos enfrentar el vacío, el sinsentido. 08 09 se vuelve muy visible el Día de Difuntos, el 2 de noviembre. Las familias acuden al cementerio y se reúnen sobre la tumba en que descansan sus muertos. Allí comparten con ellos la comida y la bebida y conversan de lo que ha sucedido durante el año, para que los finados se enteren. La antropología, desde sus comienzos, ha dedicado un espacio notable al tema de la muerte. El hallazgo de entierros ha llamado siempre la atención de los estudiosos, que los han analizado minuciosamente, porque ofrecen preciosos indicios para entender lo que los diferentes grupos humanos han creído sobre el espíritu, la sobrevivencia, el más allá. Sobre la presencia de la muerte en la cultura mexicana, hay una literatura amplísima. Calaveras y esqueletos son muy visibles en el folklore. La presencia del “muertito”, no es algo dramático, sino muy familiar y casi amigable. La misteriosa y refinada cultura de los Etruscos (anterior a la de los Romanos) nos ha dejado, sobre todo, monumentos funerarios. No son otra cosa las imponentes pirámides de Egipto. en diferentes culturas En las últimas décadas los estudios sobre la muerte se han multiplicado. Sería absolutamente imposible ofrecer una síntesis, aunque apretadísima, de la manera cómo los diferentes pueblos han visto y ven la muerte. Lo que se puede hacer en un espacio tan reducido, es mencionar y describir sucintamente uno que otro ejemplo. opinión 10 Padre Juan Bottasso Hablando en general, en las culturas del continente americano, se puede observar que la muerte no es vista como un acontecimiento aislado, sino como parte de un proceso. Existe una enorme variedad de maneras de representar la situación de los muertos en el más allá, pero todos los pueblos están convencidos de que ellos siguen teniendo un influjo en la vida de los vivos. Los cuentos populares de todas las regiones están poblados de muertos que aparecen, deambulan, asustan, se vengan o claman justicia. Las culturas andinas, agrícolas y sedentarias, tienen un fortísimo sentido de la comunidad. Esta se compone de los que han caminado adelante (los muertos), los que ahora están caminando y los que vienen atrás (los niños que nacerán). Todos ellos conforman el “ayllu” y tienen una estrecha relación entre sí. Parte de esta visión se ha conjugado con elementos de la teología cristiana, en lo que se refiere a la sobrevivencia del alma. Pero a los andinos lo que les llama la atención, más que la creencia en la resurrección, es la preocupación por mantener bien sólidos los vínculos con los que se han ido. Esto Muy diferente es la visión que tienen de los muertos muchos amazónicos. Los shuar, por ejemplo, consideran casi vampiresca su presencia y, como tal, la temen. El muerto tiene nostalgia de la vida y siente envidia de quienes aún disfrutan de ella. Por esto quiere regresar, para llevarse a alguien, especialmente a los niños. Este es el motivo por el cual la casa del difunto, sobre todo si era una persona de autoridad y prestigio, es abandonada. Se cierran con espinas los caminos de acceso y se queman canastos viejos. Todo esto, para despistar al difunto e impedirle que encuentre la manera de volver allá donde había vivido. Los familiares, para que no sufra en el camino hacia el más allá, dejan comida y bebida alrededor del cadáver, así como ciertos atuendos y herramientas que había utilizado en vida. Los bororo, del Mato Grosso (Brasil), de los cuales se ocupó ampliamente el antropólogo C. Lévi-Strauss en su célebre “Tristes Trópicos”, se puede decir que viven su existencia orientados totalmente hacia la muerte. En sus malocas, pasan horas interminables preparando adornos de plumas, destinados a embellecer su propio esqueleto, para cuando mueran y éste sea liberado de los residuos de músculos y carne. A pesar de esto, no se puede decir que sean un pueblo triste. Se los definiría más bien un pueblo contemplativo. Lo pude constatar personalmente. Otra experiencia interesante que viví fue la de asistir al “sepelio” de una anciana del pueblo yanomami (Alto Orinoco – Venezuela, cerca de la frontera con Brasil). Un libro que describe su cultura, tiene por título: “Donde la tierra no acoge a los muertos”. Ellos en efecto no los sepultan. El grupo entero se había reunido en el “shabono” y en el centro del patio central habían preparado un montón de leña seca. Por toda la mañana se desarrolló un ceremonial impresionante, de la mayoría de cuyos detalles no capté el significado. Hacia el medio día, se prendió el fuego y el chamán, completamente desnudo, pintado de negro y con un hacha en la mano, dio dos vueltas alrededor del fuego, gritando desaforadamente. Entonces empezó una lucha entre el grupo de mujeres y el grupo de los varones, alrededor del cadáver, que había sido colocado en una hamaca. Las mujeres querían retenerlo y los hombres querían llevarlo hacia el fuego. Un misionero del lugar me explicó que las mujeres no quieren desprenderse de la vida, mientras que los hombres ceden a la fatalidad de la muerte. Finalmente, el grupo de los hombres venció, colocó el cadáver sobre la leña y empezó la cremación. Eso fue lo que vi. Sé que una vez que quedan solo los huesos los guardan y después de un tiempo, los muelen y los comen mezclados con plátanos. Es una manera plástica y elocuente para decir que, quien muere, sigue viviendo. Esto, en el fondo, es lo que dicen las sepulturas, los monumentos fúnebres, las plegarias, los cantos, los ritos que rodean la conclusión de la vida terrenal de cada individuo, en las diferentes culturas. La muerte es algo inevitable, pero el ser humano no la acepta como algo definitivo. 11 Estoy convencido que debemos ir más de fórmulas ya hechas para llegar más al significado de la vida humana. Esto me lleva a afirmar de manera tajante que el verdadero drama del hombre “no es o vivir, o morir”. El auténtico drama actual es “o vives para ti mismo” o “vives para los demás”. Es muy común escuchar en nuestra vida diaria: “o vives o mueres”: políticos que afirman desafiantemente: “o vivo o muere, pero prefiero morir en el intento”; economistas que reconocen que “una debacle económica lleva a la muerte del hombre”; pensadores de talla mundial que no tienen empacho en decir que “la existencia humana es para morir y todo termina en la muerte”. En fin, la lista podríamos engrosarse si daríamos oídos a tantas frases que se enarbolan en torno a la muerte, muchas de ellas, me parece, ya preconcebidas o “ya hechas” y que las repetimos “como loros”. En efecto, el individualismo galopante está llevando al hombre a encerrarse en “sus cuatro paredes”, a enfrascarse en sus propias ambiciones que muchas veces son “sueños de perro”, como decimos vulgarmente, y a no mirar más allá de sus propias fronteras. Podríamos decir que es el hombre se mueve en el solo “tener” y que irremediablemente levanta cercos eléctricos y muros alrededor de su vida. Esta situación existencial desemboca, sin duda alguna, en la angustia, el estrés contemporáneo y en el vértigo de la vida. No en vano el pensador ateo francés Jean Paul Sartre nos dirá: “la vida es una náusea” . Estoy convencido que debemos ir más de fórmulas ya hechas para llegar más al significado de la vida humana. Esto me lleva a afirmar de manera tajante que el verdadero drama del hombre “no es o vivir, o morir”. El auténtico drama actual es “o vives para ti mismo” o “vives para los demás”. El ascenso vertiginoso del elevado número de suicidios es una muestra evidente de la “asfixia” de la vida. Solamente en Ecuador, el año pasado, hemos pasado la suma de más de mil suicidios, sin contar los no contabilizados, por temor o respeto de la familia. opinión 12 Alejandro Saavedra sdb En cambio, “el vivir para los demás” es total apertura de nuestra vida que nos lleva a la participación social y, por la cual, somos capaces de formar comunidades y familias en donde no tenemos ningún reparo de compartir nuestros problemas, nuestras preocupaciones y nuestras inquietudes de humanizarnos mejor. 4 Una de sus obras cumbres precisamente se titula: La náusea, que es un verdadero reconocimiento al vómito y al mareo de la vida. Este pensador francés Premio de la Literatura plantea una existencia para la muerte, es decir, la vida termina en la disolución total. 13 En estas condiciones, nos movemos en la órbita del “ser” y ya no del “tener” porque buscamos romper barreras y obstáculos que nos impiden crear comunidades para llegar a crear espacio en donde cada uno se sienta acogido, valorizado y apreciado en su vida. Es la “amabilidad” en la cual insistió Don Bosco para todas sus obras y nuestra Universidad Salesiana no puede jamás echar a menos d esta exigencia: es decirle al joven universitario, al profesor, al administrativo, al personal de servicio con nuestras actitudes y conductas: “tú eres muy importante para mí”! Desde esta visión de servicio y de compromiso por el otro, sobre todo por el pobre y el indigente, podremos descubrir que nunca estamos solos en nuestra vida, sino que estamos llamados a compartir lo poco o lo mucho que somos para que nuestra vida sea más vida disponible y generosa. 5 Esta amabilidad se llamaba en italiano “amorevolezza” que es como un empaste de ternura, cordialidad, buen trato y valoración. 14 La situación de miseria, de injusticia, de corrupción, etcétera, en que estamos imbuidos, a veces, en nuestra sociedad, nos puede llevar, equivocadamente, a pensar en la esperanza de salir de este embrollo y de esta miseria humana. Este modo de pensar es totalmente absurdo porque nunca de la corrupción, de la injusticia, del fraude podrá nacer la esperanza de un mundo mejor. Nunca lo que es menos va a dar origen a lo que es más: de la injusticia nunca podrá nacer la esperanza. Jamás de la proclamada “lucha de clases” podrá venir el soñado “paraíso terrenal” del marxismo, pues, un conflicto traerá otro conflicto violento; como tampoco de un “egoísmo” salvaje e individualismo podrá nacer una convivencia fraterna y social, como plantea el capitalismo salvaje. Precisamente, me rebelo con todas mis fuerzas contra aquellos que piensan, por ejemplo, que “después de la guerra viene la paz”. No!, después de la guerra viene hambre, miseria, desolación; al máximo aceptaré “una paz de consenso” entre Estados pero, “no una paz de progreso y desarrollo humano”. La esperanza por la vida solamente puede nacer en el hombre que ha sido conquistado por “la vida plena de Aquél que ha vencido la muerte y destruido de una vez por todas la rupturas: Jesucristo”. Pues bien, la esperanza se fundamenta y tiene su base esencial solamente en Aquél que ya venció a la muerte y todos los signos que atan al hombre a la esclavitud de su egoísmo vencido plenamente por el amor. En realidad, Jesucristo ha transformado nuestras rupturas humanas en máximas comuniones con los hombres, ha transformado nuestro odio ante la traición del amigo Judas en amor y, ha transformado nuestras muertes en vidas. Desde esta perspectiva, el drama del hombre se soluciona en la total entrega de su vida a los demás, sobretodo a quien vive en la miseria, a quien está desposeído del pan material, a quien no “tiene voz” para pedir justicia porque no es escuchado. Se trataría de una existencia humana que jamás está llamada a morir sino a trascender en los demás y en esta trascendencia al otro, encontrar, tarde o temprano la cuestión fundamental: ¿para qué vivo?, ¿es posible que mi vida acabe totalmente aquí en la tierra?, ¿a dónde estoy caminando? y, finalmente ¿hacia dónde quisiera llegar?. Indudablemente que son preguntas abiertas porque implican la libertad del hombre, pero que de sus respuestas cuestionantes dependen todo el sentido que le quisiera dar a mi vida. Tomemos en serio estas preguntas, porque de sus respuestas, depende el “por qué” de nuestra existencia. A pesar de que traten sobre el “fin de nuestra vida”, de ellas depende todo nuestro modo de vivir: influirán en cada acto diario de nuestras decisiones, ejercerán mucho poder a la hora de ejercer nuestra libertad y repercutirán en nuestro modo de ver la vida. Sin duda que mi opción ya está dada: “vivir enraizado en Aquél ya venció la muerte, para vivir en bien de los demás”. El resto se nos dará por añadidura. Precisamente, me rebelo con todas mis fuerzas contra aquellos que piensan, por ejemplo, que “después de la guerra viene la paz”. No!, después de la guerra viene hambre, miseria, desolación; al máximo aceptaré “una paz de consenso” entre Estados pero, “no una paz de progreso y desarrollo humano”. 15 opinión 17 16 Rubén Díaz Peralta 18 19 Antes de abordar directamente el sentido de la muerte para el cristianismo, es importante hacer dos aclaraciones de gran importancia: Las imágenes de terror sobre la otra vida y la pretendida explicación del infierno, no parten de la revelación bíblica, sino que, por el contrario, son tomadas en su mayoría de la obra literaria “La Divina Comedia” del poeta Dante Alighieri (1265-1321) en la que se describe las torturas a las que son sometidos los pecadores. opinión 20 Freddy López Se ha dado mayor importancia a las ideas del pensador griego Platón (428-348 AC.), quien considera que el ser humano está dividido en dos partes contradictorias: el cuerpo y el alma. Para él, el cuerpo es cárcel del alma, de la que se libera al morir, porque el alma es inmortal y el cuerpo corruptible. Se tiene que afirmar con toda certeza que estas ideas están totalmente alejadas de la revelación bíblica, por ello cabe preguntarnos con seriedad. ¿QUÉ DICE EL CRISTIANISMO SOBRE LA OTRA VIDA? El cristianismo es la religión del amor absoluto, de la misericordia y la esperanza. El Dios que encontramos en la Biblia es un Dios que ha perdido la cabeza por el ser humano y hace lo imposible por lograr su realización total, su salvación, a tal punto que es capaz de entregar la suya para obtener nuestra salvación “ Yo soy el buen pastor, el buen pastor de la vida por sus ovejas” (Jn. 10,11). El Dios en el que creemos es el autor de la vida, no de la muerte, nos regala la salvación, nos inserta en la vida plena. 21 El sentido de la muerte, lejos de ser una tragedia como lo entiende la mayoría de personas, es el verdadero nacimiento del ser humano a la plenitud de su ser. Estamos seguros que la presencia de la muerte no puede anular lo extraordinario de la vida, lo grandioso de la persona El amor de Dios y de nuestros seres queridos, no pueden desaparecer en la nada en el absurdo o sin sentido de la existencia; sino que por el contrario llegan a su plenitud, adquieren su verdadera dimensión cuando entramos en la otra vida. 1. BOFF, Leonardo, Hablemos de la otra vida, Sal Terrae, S/A). 2. RATZINGER, Joseph, Escatología, Herder, 1984, Pág. 180). Con la muerte, la persona resucita y entra en la eternidad, en el ámbito de Dios. Sin embargo “… la resurrección no ha de ser interpretada como la reanimación de un cadáver y vuelta a una vida mortal, sino como la realización total y exhaustiva de las posibilidades latentes en el hombre, posibilidades de unión íntima e hipostática con Dios, comunión cósmica con todos los seres, superación de todas las esclavitudes y alienaciones que estigmatizan nuestra existencia terrena en proceso de gestación…”1. Seguramente, alguien podría decir: ¿con base en qué se atreve a decir estas cosas? Nadie ha regresado del más allá para que podamos decir en qué consiste. 22 La respuesta la encontramos en el acontecimiento, en la experiencia, en el evento de la resurrección de Jesucristo. Al hablar de la otra vida se parte totalmente de la resurrección de Cristo que es el fundamento de la fe cristiana, porque, como dice San Pablo: “si Cristo no hubiera resucitado, vana sería nuestra fe” (1 Cor 15,14.) Jesucristo se convierte en el fundamento de nuestra esperanza, todo lo que sucedió con él sucederá también con nosotros, él es el contenido, la certeza del cumplimiento de todas las promesas de Dios. Nuestro cuerpo, al igual que el de Jesús, será transformado, transfigurado hasta que sea apto para la eternidad. Así como Jesús resucitó en cuerpo y alma, de la misma manera también nosotros no abandonaremos nuestra realidad corporal: “la materia será algo propio del espíritu de una manera totalmente nueva y definitiva ya que el espíritu se unirá totalmente con la materia. Ese ser universalmente cósmico que se abre con la muerte, desembocaría en un intercambio universal, en una apertura universal y, en definitiva, en la superación de toda alienación”2. el Señor, el juez, es invocado aquí también como liberador, que puede cambiar el juicio en acto de salvación. Se podría decir que a él, el juez que viene, se le contrapone él mismo en cuanto salvador que ya vino Para lograr esta plenitud, seremos sometidos a un juicio de salvación, en el que va a triunfar la misericordia de Dios sobre el pecado, sobre la debilidad del ser humano. En este sentido, el cardenal Ratzinger, hoy Benedicto XVI, al referirse a la oración de la iglesia primitiva, manifiesta que: “el Señor, el juez, es invocado aquí también como liberador, que puede cambiar el juicio en acto de salvación. Se podría decir que a él, el juez que viene, se le contrapone él mismo en cuanto salvador que ya vino. “3. Esta cita de nuestro papa actual es realmente extraordinaria porque demuestra lo grandioso que es para el cristiano el final de los tiempos, la otra vida, la eternidad ya que el hombre por sí mismo no es merecedor de la salvación y el perdón, pero tiene la certeza de que aquel que entregó su vida en la cruz para salvarlo será quien le permita ser perdonado para entrar en la eternidad, en el banquete preparado por Dios. El proyecto de Dios es que todos nos salvemos que todos seamos merecedores del Reino. La visión cristiana de la muerte plantea a nuestra cultura actual grandes desafíos, tales como: Volver a la fuente bíblica despojándonos de ideas erróneas que aún permanecen en la gran mayoría de las personas con respecto al tema del sentido de la muerte. Vivir llenos de esperanza, con la certeza plena de que todas las dificultades y problemas personales y sociales que nos abruman no tienen futuro, porque la vida es la última palabra de Dios sobre la muerte en la que se encuentra inmersa nuestra sociedad actual. Aprender que Dios es misericordioso y que todos somos limitados, necesitados de una mano amiga que nos ayude a levantarnos en nuestros momentos de fragilidad, por ello debemos convertirnos en una fuente de misericordia, perdón y apoyo para todos los que nos rodean, nunca en jueces que condenan. El amor es el fundamento de la existencia de la persona, lo que permitirá cambiar este mundo injusto dándole un nuevo rostro humano. No se puede pretender erróneamente salvar las almas, sino la integridad de la persona inmersa en esta historia que debe convertirse en historia de realización personal y social de todos los seres humanos. Promover y defender la vida en todas sus manifestaciones, puesto que la muerte y desesperanza no tienen asidero alguno. 3. RATZINGER, Joseph, Escatología, Herder, 1984) 23 GORILAS Los pensábamos derrotados, relegados a sus cuarteles y a los desfiles patrios, pero con los gorilas nunca se sabe. En el rato menos pensado alguien les recuerda que el verdadero poder oculto en esta sociedad patas arriba suele venir de los fusiles, y entonces ellos se lo creen y se arman hasta los dientes con metralletas y mentiras, y salen a la calle disparando a las palomas por cagarse –dicen- con toda libertad en las estatuas de sus próceres. panorama de actualidad 24 David Barzallo Pero como las palomas no son suficientes, entonces deciden cargar contra las muchachas que cruzan por la calle porque la libertad de su cabello los molesta, y contra los desocupados que silban bajo los árboles porque su tiempo libre los irrita, y contra los estudiantes por sus mochilas llenas de esperanza, y contra los soñadores porque cada soñador les resta un arma, y contra los profesores de filosofía, y los músicos ambulantes porque nunca entendieron la ternura de las hojas y de las teclas. Y de vez en cuando, es decir cuando ya son bastantes y han sido bien amaestrados por sus titiriteros de oropel, entonces los gorilas deciden simplemente que ya está bueno de tanta democracia. No importa de dónde sean ni de dónde vengan, ni si en sus hombros cargan metralletas o bazucas; los gorilas funcionan igual bajo cualquier bandera, como si una deidad supranacional los controlara. El ejército tiene su razón de ser en el fascismo y la dictadura, dictatoriales son sus designios y autoritario su funcionamiento, y aún así, paradójicamente, son los encargados de tener en todo el mundo la última palabra sobre la democracia. Si el general de turno lo quiere, pues ella vive, si no, ahí nos queda Honduras como el último y más desgarrador ejemplo de hasta donde puede llegar la miseria humana de los oligarcas que, misteriosamente, suelen ser buenos amigos y excelentes proveedores para los gorilas y sus amos. El golpe de Estado en el país centroamericano nos recuerda que los verdaderos enemigos de la democracia son los que mas hipócritamente la invocan y “defienden”. A pesar de lo increíblemente absurda que resulta la excusa de los golpistas (al fin de cuentas resulta ahora que preguntar a la gente ha sido en Honduras un delito); a pesar de que utilizaron una treta adolescente al falsificar una firma que ni se parece a la original; a pesar de que hasta los mismos gringos han dicho que únicamente reconocen a Zelaya como presidente legítimo, a los gorilas hondureños y sus prósperos titiriteros de turno no les parece importar mucho y a estas alturas, Micheletti, el impostor presidencial, aprovechó la falsa legitimidad que cadenas como CNN le han brindado al calificar al golpe como “sucesión forzada” y aprovechando también el dominio que sus copartidarios tienen sobre las empresas privadas de radio y televisión. Los gorilas, por supuesto, animados por las promesas de su nuevo dueño, se han tomado las calles para dispersar o lo que es peor aplastar a la sociedad civil que se ha reunido para exigir que no les roben su democracia. Cosa extraña, por cierto, ya que algo bueno habrá tenido el presidente Zelaya para que haya quien se arriesgue a tomar su bandera y enfrentarse con ella a las bombas y a las balas. No recuerdo que nadie haya tenido ese patriotismo con Abdalá, Jamil o Lucio, tal vez porque a estos tres nefastos personajes los mandó sacando el pueblo desde las plazas y los barrios, desde las cacerolas y los pitos. El ejército tiene su razón de ser en el fascismo y la dictadura, dictatoriales son sus designios y autoritario su funcionamiento, y aún así, paradójicamente, son los encargados de tener en todo el mundo la última palabra sobre la democracia. En Honduras, en cambio, al pueblo lo madrugaron un puñado de banqueros, empresarios y generales, que durante mucho tiempo analizaron las experiencias de sus vecinos (debieron haber visto toda la información de la Venezuela del 2002) y finalmente se dieron cuenta de que cuando la gente se vuelve peligrosamente democrática, la única respuesta efectiva son los gorilas. 25 Mayra Valdivieso Una muestra de seriedad y tranquilidad, en un ambiente de paz, combinado con una mirada intensa y fría que en su interior refleja humildad y sencillez, fue el recibimiento que tuve en la oficina en donde labora el padre Javier Herrán, quien a los 65 años de vida, cumple 50 años de `profesión sirviendo al prójimo, y que desde el próximo ciclo lectivo asumirá el Rectorado de la Universidad Politécnica Salesiana. Nació en un pueblito llamado Villaescusa de Tobalina, en la Provincia de Burgos – España. Cerrando los ojos, el padre Javier se remonta a su infancia y cuenta que proviene de una familia pobre, de padres campesinos. De su padre tiene muy pocos recuerdos, uno de ellos, que era guardia forestal y que llegaba a la casa con peces y cañas que retiraba a los que infringían la ley; otro recuerdo, el último y muy triste, es que su padre fue herido en la guerra civil española de 1936 y lamentablemente murió, dejándole huérfano de guerra a los 4 años de edad. perfil de nuestro actual 26 rector De los 6 años de edad recuerda que su madre trabajaba de lavandera en el hospital militar de Burgos, estos recuerdos los tiene muy presentes, al igual de los años en los que vivió con sus abuelos, los de la escuela, la nieve, las ovejas, la trilla y los veranos en su pueblo. Admirado, y con una sonrisa como de asombro, dice que su primera comunión la hizo a los 6 años de edad, pero su recuerdo es tierno al revivir aquellos momentos: “en una iglesia muy bonita, románica, antigua, donde había monjitas de clausura, con mi trajecito de marinero, que, por cierto, me lo habían prestado, así recibí la comunión”; sonríe y piensa en las fotos que de algún sitio estarán para desempolvar, como desempolva la etapa cuando le tocó cambiarse de barrio. Un barrio muy popular de Burgos como es San Pedro, le abrió las puertas con cariño para acoger a su familia, y le dio la gran oportunidad de estudiar en la Escuela Marista y tener bellos recuerdos de una vaquería en donde jugaba junto con sus amigos: Marcelino y Fermín, para calentarse en los fríos inviernos. Ahí vivió algunas travesuras, que le marcan una sonrisa en sus labios y un brillos especial en sus ojos, al decir que se acuerda tan claramente de un mes de mayo, cuando quería llevar flores a la Virgen, y con sus amiguitos se les ocurrió ir a cogerlas del parque. Sin darse cuenta, un guardia municipal los sorprendió pero “yo me zafé y a correr se ha dicho”; y otra travesurita que no la olvida nunca es cuando en un invierno, en el rio congelado patinaba con sus amigos: “me pegue una caída monumental, que casi me deja sin sentido”. Una de sus ilusiones no realizadas fue el ser botones en un banco, ya que la mayoría de niños trabajaba en eso, entregando las cuentas; otra fue estudiar mecánica en la Escuela de Artes de Oficio del Padre Aramburo, pero, como el estado les pagaba la educación a los niños huérfanos de guerra, él salió sorteado, y, a los 10 años de edad se fue a Málaga a estudiar en el Colegio de Artes y Oficios San Bartolomé; su viaje de Burgos a Málaga duró tres días y fue al estilo de lo que se ve en las películas de la Segunda Guerra Mundial, ya que, como era en tren, le pusieron su nombre en el abrigo que llevaba puesto para que en cada cambio de estación y de guardia, le hicieran la entrega respectiva como si fuera un objeto y no una persona. Vivió de interno un año y en las misas recogía la limosna, y ayudaba hacer paquetes las monedas; un día de esos, cuando tenía 11 años, le dijo al director “quiero ser salesiano”, y le mandaron a Cadiz al aspirantado, pero como habían muchos aspirantes y no cabían todos, le mandaron a Morón de la Frontera, casa con mucha historia, quemada en la guerra. De esa época comenta: “en los estudios y en el deporte siempre fui bueno…, alguna cualidad debía tener”. En el año 1958 ya estuvo en el noviciado, y en el año 1959, a los 16 años de edad, profesó como salesiano. Javier Herrán llega al Ecuador cuando tenía 17 años, no recuerda si era un 30 o 31 de octubre, pero sí recuerda que llegó a Guayaquil, donde ahora está el reloj del Malecón, “pero en ese entonces no había más que una gradita”. Maravillado, cuenta que su viaje fue en un barco cuyo nombre era Américo Vespuchi y que se demoró 20 días desde Barcelona hasta Guayaquil. Su primera impresión que tuvo al llegar fue que el país se encontraba en elecciones y toda la ciudad estaba empapelada, “eso no la había visto nunca en España”, y se acuerda tan claramente que los papeles decía vote por Perico, del partido CFP (Concentración de Fuerzas Populares), otro de los candidatos era Guevara Moreno. Luego viajó a Quito, en un bus que tenía los asientos de madera y llegó “con el culo hecho piedra”. Sólo habían parado para cenar en Esperanza, en un restaurante antiguo, donde les sirvieron choclo, y en España el maíz sólo servía para alimentar a los cerdos, entonces pensó: “¿qué, somos puercos, a dónde hemos venido a parar”. En la ciudad de Quito estudió el sexto curso, al igual que el primero, segundo y tercer año en el Instituto Superior Salesiano, en donde obtuvo el título de Licenciado en Pedagogía, luego de hacer su tesis. A los 21 años llega a la ciudad de Cuenca al Colegio Agronómico Salesiano, en donde pasó tres años como profesor de matemáticas de todos los cursos: “mi sotana terminaba blanca, de tanto borrar pizarrones”. También jugaba futbol con sus alumnos contra el equipo de la Cruz del Vado, y no se olvida de los carnavales, mojándose con agua de acequia, y con la del río Yanuncay, que era muy fría. Tras permanecer siete años en el Ecuador, se regresa a Sevilla para estudiar en el Teologado Juan XXIII, para ser sacerdote, “el cambio mental de la Iglesia, era la opción por los pobres, la incidencia política”. Se ordenó el 31 de mayo de 1970, en una celebración a la que acudió su madre, Elena, y su hermana, Mari Carmen a quien después le celebró la misa de matrimonio; luego de esto, regresó a Cuenca, al Agronómico, en donde permaneció cuatro años. Posteriormente se unieron las inspectorías de Quito y Cuenca, por lo cual le enviaron al Técnico de Quito, en donde los muchachos lo molestaban “por el cantadito cuencano”. Luego de esto trabajó 10 años en Zumbahua y 15 en Cayambe, trabajando en las misiones indígenas, y realizando obras como: La Casa Campesina Cayambe, el Programa de Microcréditos, Radio Mensaje, Maternidad Mitad de Mundo, Centro de Capacitación Tainatehuasi. Tras desarrollar estas labores, en el año 1979 fue empleado del Banco Central y promotor de Desarrollo Rural Marginal de esa institución, en donde aprendió desarrollo y gestión. Allí trabajó hasta el día que cerraron el programa, a finales de 1992. En el año 2000 le piden que vaya al Economato de la Inspectoría de los salesianos en el Ecuador, donde se crea la Fundación Consultora Don Bosco, dentro de esa entidad gestiona proyectos para todas las obras salesianas del Ecuador, consigue financiamiento por un promedio de dos millones de dólares anuales. En este mundo de desarrollo que ha vivido por más de 35 años con organizaciones no gubernamentales, ve la necesidad de volver al aula para ver las metodologías, es por ello que, junto con la decana de Post Grados de la Universidad Politécnica Salesiana, Viviana Montalvo, organizaron un masterado en Desarrollo Local con mención en Proyectos de Desarrollo y él se apuntó, por ser uno de los promotores; actualmente está acabando la tesis para poder graduarse, pero dice que: “si hubiera sabido que la primera aplicación del masterado era ser rector, no hubiera comenzado”, ya que esta noticia le cayó como un jarro de agua fría, porque se hacia la ilusión de regresar a trabajar con los indígenas, o con los chicos de la calle; ya que su forma de ser y su experiencia, le han orientado a los sectores marginados y pobres. Su objetivo como nuevo rector de la Universidad Politécnica Salesiana es claro: “crear un ambiente universitario que facilite a los estudiantes construirse como ciudadanos de un país que necesita ser solidario, erradicar la pobreza, ejercer la libertad y construir el bienestar colectivo”. “La universidad se ha propuesto un nuevo camino, marcado y dirigido por la carta de navegación, que tiene un desafío académico, que al mismo tiempo implica nuevas propuestas de gestión y administración. El desafío académico de una universidad que centra su quehacer en el aprendizaje y que considera al estudiante como la razón de su existencia, requiere realizar cambios de mente, métodos, estructura y comportamientos”. El futuro rector aspira que la gente continúe haciendo su trabajo, “porque no van a bailar a otro ritmo”, su deseo es aportar y aprender de la parte académica; otra aspiración es invitar a los estudiantes a participar en este proyecto, “de hacer una casa de estudio, donde todos aprendamos a trabajar en equipo”. 27 ATRAPADAS MODA Piernas largas, blancas y gordas. Minifalda muy bajita, tacones largos y rojos que resaltan su abundante celulitis y un escote que muestra sus adolescentes senos. Fisonomía de fracciones toscas y un poco indígenas, con abundante maquillaje y falsos rayitos rubios, han convertido a Priscila en la más deseada de la Universidad Politécnica Salesiana, campus el Girón. por la vida cotidiana 28 Boris Durán Priscila tiene 22 años de edad y es una de las mejores estudiantes de Administración de Empresas, cursa el quinto semestre de su carrera. “No me gusta sentirme deseada”, comenta con voz frágil. “A veces es difícil, las personas sólo morbosean y me miran como un objeto sexual. La manera en que yo me visto y actúo es simplemente una forma de presentarme ante los demás, es una forma de cautivarlas a primera vista. Quiero estar a la moda, es la parte de mi vida en que alza mi autoestima y me hace sentir más bonita”. Al caminar por los pasillos de la Universidad Salesiana percibimos diferentes formas de hablar y vestir, según la carrera que siguen y el estatus económico que tienen los estudiantes. En carreras administrativas, preocupadas por el mercado, se puede encontrar que las mujeres dependen más de la moda y su apariencia. Por medio de una encuesta realizada a 50 chicas, podemos ver claramente que el 70% piensa que la moda es una forma de resaltar la belleza, como algo natural que debe ser valorado como tal. Mientras tanto, en las carreras humanas y de la educación, la realidad es otra; de entre 50 chicas, el 80% está en desacuerdo con la moda y la califica de absurda. Aquí las mujeres piensan en la belleza como una forma natural del ser humano, que no debe ser alterada ni mucho menos pisoteada con algo tan superficial como la moda y sus derivados. Sin embargo, es evidente que diversos grupos que coexisten en la Universidad Salesiana se han establecido a partir de la moda: metaleros, punkeros, hippies, aniñados, mujeres fashion…, en fin, mini clanes conformados a partir de un mismo gusto de música o ropa; es decir, asumidos por una estética que los identifica. Los supuestos valores de la tradición familiar o social, terminan por ceder frente a las exigencias, conscientes o no, que imponen estos grupos como requisito para admitir a un nuevo integrante. Entonces, la práctica de la moda en las mujeres de la UPS, más que un signo de autoestima o complemento para la belleza, es una forma de demostrar estatus económico y social, y de buscar aceptación social. “No todas las personas pueden comprar ropa de marca, ni pagar 100 dólares por unos zapatos que están a la moda”, comenta Samanta, un tanto sobrada, mientras mastica chicle y continúa: “las chicas en general somos vanidosas, nos gusta vernos bien y que nos traten bien. No me considero superficial, pero sí prefiero tener un enamorado que tenga dinero y que me invite a todo, a otro que no tenga donde caerse muerto y yo misma tenga que pagarme mis cosas. Lamentablemente, así me criaron, mi padre es así y aunque es un pensamiento machista, yo sí estoy convencida que el hombre es el que debe invitar y proteger a la mujer a cada instante”. Si bien es cierto que la moda es algo que ha estado, está y estará en nuestra sociedad, debe quedar claro que es una toma de decisión. No hace falta vestirse de tal o cual manera si, tarde o temprano, como decía el cantante, todos terminamos desnudos. 29 Michael Jackson la metamorfosis de Michael Jackson “Gregor pasaba las noches y los días casi sin dormir. A veces pensaba que al abrirse la puerta volvería a asumir los asuntos de la familia, como antes. Últimamente, después de mucho tiempo, aparecían en sus pensamientos el jefe, el apoderado, los compañeros y los aprendices, el criado tan lerdo, dos de sus amigos de otros negocios, una camarera de un hotel de la provincia; también un recuerdo fugaz y querido…” Muchos fanáticos dirán que M.J. era su ídolo. Aceptado como icono de la sociedad mediática y del arte escénico y de sus nuevos soportes virtuales y electrónicos. Fanatismo es sinónimo de fidelidad e idolatría; fetiche de sus vidas, un distractor de la realidad que el arte del canto y la danza evaden con entusiasmo. En el arte, la representación y re-construcción de la realidad se hace desde la ficción y no para verla o padecerla, sino para sublimizarla. Por eso esa construcción se vuelve atemporal, universal, se convierte en metáfora y mito. Del lexema de fanático surge fantasma, fantasía y fantástico; desde lo etimológico es idéntico a fenómeno, es decir, aparecido, un espectro, una imagen. A pesar de sus obsesiones y escándalos, Michael Jackson era artista vida cotidiana El arte es un ejercicio de libertad creadora; reconstruye y representa la realidad desde el ingenio de la imaginación que no supera a la vida porque ésta es su fuente e inspiración. Todo artista se rebela y trasgrede la norma; por eso son mal vistos; tildados de inmorales. Muchos artistas gozaron la vida, no pocos la sufrieron; algunos fueron racionales o místicos, otros promiscuos o locos; casi a todos les caracteriza el delirio de grandeza. Sensibles en su apasionamiento creador que, en algunos, sabe a egolatría incluso megalomanía, aunque se negaran a sí mismos, mutilaran y suicidaran. a la 30 Del Roberto Rangel Donoso Volando con alas de cera construidas por su padre para el escape, Icaro siente la inspiración de llegar al Olimpo, morada de los dioses. Tanto asciende que, sintiendo su proximidad, el dios del sol manda su potente rayo sobre las alas, por lo que, el joven Icaro desciende vertiginosamente. Derretidas sus alas, desvanecida su ilusión por voluntad divina que protege a una Olimpia amenazada, cae Icaro en la profundidad del océano, del que nunca será rescatado su cadáver. Aunque el rótulo en un templo lo inmortalizará. El anterior texto es de Frank Kafka en su obra “La Metamorfosis”, escrita en 1915; narra la inverosímil historia de Gregor Samsa, un buen hombre que despierta y se ve convertido en insecto. Obra en la que su protagonista aparece como víctima pasiva de las circunstancias que lo rodean a partir de su transformación. Al final está la cucaracha, el insecto, el bicho: residuo y recipiente de lo humano; evidencia de la negación y de la victimización que culpabiliza a los de su entorno. Recuérdese que, en Kafka, el insecto nunca perdió ni la sensibilidad ni el raciocinio humano. La aceptación de los artistas siempre es después de ellos mismos; como a los profetas bíblicos que primero mataron y después santificaron. Actitud provocada por el cambio del contexto y de posibilitar nuevas lecturas e interpretaciones que los cataloga, caracteriza o ubica en géneros para hacerlos comprensibles; así aparece la técnica y las reglamentaciones para emularlos; para intentar repetirlos. Al arte le sigue un vago sentido de soledad y melancolía, de unicidad. El genio creador siempre va primero; aunque lo ignora, lidera por su atrevimiento, no por su arrogancia. 31 Todo artista lleva una doble vida, dualista y ambigüa: la una, la propia, la íntima, la de ellos; la otra, la pública, la que se hace ver, que se fotografía, que se maquilla, que usa lentejuelas, la que sonríe y abraza; la que se exhibe y sube al escenario... En los artistas predomina la segunda, es la que genera toda una secuencia de creencias por la que se convierten en leyenda e icono, es decir, referente e inspiración de un género o de una época. En el arte importa el contenido y significado de la obra, no la vida del artista. El arte es amoral; se abstrae de su realidad inmediata para universalizar sus claves. 32 Michael Jackson hizo arte, entonces es artista y su seudónimo era “Rey del Pop”; iba tallando su escultura en la masa de su propio cuerpo; nada quedaba del rostro entusiasta del niño negro de corte afro en los años de los “Jackson 5” y en el que se ocultaba la realidad de un menor explotado y maltrato y con la ilusión del reconocimiento social; escultura tallada en el soporte de su propia historia que sabe a leyenda y en la que los medios y sus escándalos juegan un papel protagónico. Hoy su biografía y su arte constituyen el pilar de la “marca” multimillonaria que lleva su nombre; aquí su metamorfosis: del niño negro de rostro alegre a la vida del adulto blanco que lo niega mientras lo conserva o tortura; del rostro natural a una máscara de cirugías plásticas, convertidas en el “elixir de la eterna juventud”. Ilustrativo y metafórico es el slogans que concluye su vida mientras ensaya su nuevo espectáculo de relanzamiento mundial: “esto es todo” (“this is it”). Aunque esa frase es la de “Porky”, cerdo de los dibujos animados. En el periódico por Internet “elpais.com”, se lee que él quería la corona del rey –refiriéndose a Elvis Presley-; el periódico lanza el epílogo con matices de epitafio: “del rey heredó su muerte”. Muerte trágica pero que sigue la secuencia de la lógica vital que evade la fatalidad. Especulando, podríamos decir que su justificación era el hecho de querer ser histórico; si fue un propósito consciente, Michael Jackson se asemeja a la voluntad de poder de Calígula, como lo presenta la dramaturgia existencialista de Albert Camus: Calígula a la historia porque “todavía sigo vivo”. Sus fotos congeladas me hacen recordar la frase de Gabriel García Moreno: “Dios no muere”. Así lo entienden su propia familia y los albaceas de sus negocios y herencia, a la hora judicial de reinvertir en Michael Jackson muerto y mutado en producto, un bien de consumo. Porque decidió ese estilo de vida, pasó a la historia con tal impacto mediático planetario que le “compite a Cristo” en estos días; y dígase claro, solo por unos días; lo que muestra lo efímero del espectáculo. Pasado el frenesí del vértigo, todos terminamos agotados (antes del final todo cansa, por eso acaba). Presuntamente, después del agotador ensayo para sus 50 conciertos en Inglaterra, cuentan los diarios, había solicitado la inyección de Demerol (narcótico sintético similar a la morfina y que evita padecer el dolor: ¿dolor de cansancio físico o dolor de vivir?); aplicarse el evasivo lo mató. No importa ni quienes ni cuantos lo rodearon, él afirmaba que se sentía solo, decía que se sentía niño e incomprendido; de allí el consumo de analgésicos, calmantes, antidepresivos, etc. El, que ayudó a que otros a evadir su vida, no pudo enfrentar la propia. Deeprack Chopra, sostiene que muchos en Hollywood exageran el consumo de estas sustancias, prescritas por sus médicos. ¿Cómo vivía Michael Jackson? Especulemos; supongamos que escondido y temeroso de llevar amigos con niños a su casa porque lo denunciarían, o le robarían alguna pertenencia insignificante; aunque ahora, después de su muerte, podría costar miles y/o millones de dólares adquirirla. Son valiosos los datos de información para escribir y editar biografías, documentales, series, películas, comics. Vivía sin poder salir de su casa ni para comprar café en la tienda; sin poder llevar a sus hijos al cine y no poder comer una hamburguesa dentro de algún Centro comercial, ya que sería aprovechado por el marketing empresarial que, con aquella iniciativa, gana publicidad. Vivía con todas las comodidades y lujos que la sociedad del bienestar (estar –bien) puede proporcionar a los ricos y famosos, aun cuando tenía una deuda de casi 500 millones de dólares. Queriendo vender sus pertenencias para recuperarse. Vivía encandilado de los flash de los “paparazzy” sin escrúpulos, queriéndolo capturar en alguna escena escandalosa para vender la imagen, en miles de dólares, a los medios “rosa”, especialistas del espectáculo y que alimentan el “voyeur” y excentricidades exóticas de las celebridades, enriquecidas con el divertimiento. Vivía escondiendo a sus hijos en mantos y máscaras para que no los reconozcan, no los secuestraran, no los identifiquen; evadiendo las preguntas de algún indecente periodista indagando sobre por qué son blancos y nunca vieron a su madre. Vivía en su torre de marfil; quizá enterándose de la vida a través de pantallas planas o entreteniéndose mediante video-juegos o contemplando los videos de los nuevos artistas de moda, sobre los cuales influyó en canto, baile, música y diseño gráfico. Vivía sublimizando su debilidad en la apariencia de caridad a los necesitados, a los niños. Lo dicho no mata su espíritu, es célebre su contribución a la crisis africana que juntó cantantes y productores. Vivía extrañando la tensión del escenario, sus luces deslumbrantes, los gritos del público que lo ovacionan. Vivía estresado pensando en sus deudas; cuidando su nariz; saliendo con sombrilla para cubrirse del sol. Protegiendo a sus hijos. En los medios se lee que su familia denuncia de mal consejeros a los que lo rodearon. Sus amigos lloran haberse omitido en estos últimos años de vida, debido a sus compromisos, su escaso tiempo, la distancia, los intereses, las diferencias. Su funeral será en el estadio en el que realizó el último ensayo de su vida. Salve Michael Jackson, ya estás en el partenon; construiste tu propia efigie que te señala como un mito que habla de la vida y de la voluntad humana de querer ser dios a partir del siglo XXI, caracterizado por lo futurista de la tecnología, lo mediático, lo planetario inmediatista y la copia y reproducción mediática del internet; de hacer negocio y espectáculo hasta de la muerte. Terminaste siendo el Icaro postmoderno y el “Gregor Samsa” de inicios del milenio. Icono y efigie de una época que vive su semana de feria. 33 Con gran éxito se desarrolló el Primer Encuentro Nacional de Coordinadores, Subcoordinadores y Animadores del Asociacionismo Salesiano Universitario (ASU), edición “LIDERAZGO”, efectuado durante los días 7, 8 y 9 de mayo de 2009 en las instalaciones del Centro Salesiano de Espiritualidad de Baguanchi, Cuenca. Más de 80 jóvenes procedentes de Cayambe, Quito, Guayaquil, Macas y Cuenca, en representación de los diferentes grupos sociales, culturales, deportivos y académicos, se dieron cita a este encuentro para abordar los siguientes temas: a. Líderes del cambio, b. Modelos de liderazgo, c. El ASU en el nuevo modelo de gestión académica de la UPS, d. Significado del grupo dentro del carisma salesiano, e. Identidad de los grupos con respecto a la propuesta educativa salesiana, f. Rol de los jóvenes en los grupos y en la universidad, y, g. Propuesta de un Marco Referencial para el funcionamiento del ASU. En esta ocasión, contamos la presencia y el valioso contingente del padre Rafael Borges, SDB, quien es miembro del Dicasterio para la Pastoral Juvenil en América, así como de Javier Mauricio Velásquez y Luis Daniel Peralta, del Movimiento Estudiantil y Profesional Alfa y Omega del Ecuador (M.A.Y.O.). Con el uso de metodologías participativas, integrativas y lúdicas, y con una alta dosis de rigurosidad académico-científica, se concretaron cada uno de los temas antes indicados. Durante la jornada pudimos apreciar y valorar el alto potencial de liderazgo que poseen nuestros jóvenes universitarios (actitud positiva, predisposición para aprender cosas nuevas, apertura para asumir nuevos desafíos, solidarios y abiertos a los demás), hecho que nos da confianza plena para seguir apostando por la formación integral de nuestra población universitaria. Este evento tuvo una importancia especial para la institución, pues fue el primer paso contundente en lo que se refiere a la formación de jóvenes para la consolidación del proyecto del ASU, y se lo ha hecho precisamente en un momento en el que la gestión académica y administrativa de la UPS está repensándose y reconfigurándose en pro de conseguir mejores resultados en el servicio educativo que ofrecemos a la sociedad ecuatoriana. La formación centrada en la persona, es uno de los pilares que sostiene el ASU, y esperamos que el proceso iniciado siga teniendo el apoyo y motivación que ha tenido hasta ahora por parte de nuestras autoridades. Es también importante que todos los compañeros docentes de nuestra Alma Mater estimulen y respalden la participación de los jóvenes en las diferentes propuestas asociativas que tenemos; recordemos que el grupo es una experiencia privilegiada de la educación salesiana. conozca más 34 35 El Padre Rubinsky Sánchez, director de la Pastoral Universitaria, participó como delegado de la Universidad Politécnica Salesiana en la reunión de las Instituciones Salesianas de Educación Superior desarrollada en Roma, el pasado mes de mayo. En esta reunión a la que asistieron todos los representantes de las Universidades Salesianas del mundo se realizó la “Declaración del IUS Formatión-Ministry Group”, que tiene la motivación e inspiración en los documentos en los que la Congregación Salesiana ha definido el propio marco de referencia para su actividad en el campo de la educación superior. El IUS Formation-Ministry Group tiene como finalidad definir y llevar a término un modelo de formación y de pastoral universitaria salesiana que justifique la presencia de la Congregación Salesiana en la educación superior y asegure la realización de su finalidad educativo-pastoral, tal como se establece en los documentos del “Marco de referencia”, habida cuenta de los contextos sociales, culturales y religiosos particulares donde éstas se encuentran. Los objetivos del IUS FormationMinistry Group están orientados a definir las líneas comunes de orientación y acción para un modelo de formación y para la pastoral universitaria aplicable en los distintos tipos de centros académicos de las IUS. Además, de acuerdo con el carisma salesiano, busca generar modelos de intervención y de acompañamiento de formación y pastoral para toda la comunidad académica, más específicamente los directivos, los profesores, los estudiantes y el personal no docente. Otro objetivo se orienta a incentivar en las IUS, desde los valores del Evangelio, la praxis de reflexión, de acción y de transformación de la realidad cultural y social de los contextos en los cuales se encuentran. nes operativas que hagan viable la acción de formación y pastoral dentro de la misma. Tras la reunión de Roma, se ha definido un modelo de formación y pastoral universitaria salesiana, cuyo marco de referencia directo está dado en los documentos “Políticas para la presencia salesiana en la educación superior, 20032008”, teniendo como punto de partida el respeto a la naturaleza específica de la universidad, además de que caracteriza a las IUS por ser de inspiración cristiana, carácter católico e índole salesiana. Establece además, como un elemento de su identidad, la expresa finalidad educativa y pastoral, según las características de la pedagogía y de la espiritualidad salesiana. Dentro de este marco, la formación y la pastoral universitaria salesiana deben entenderse como una acción unitaria-aca- démica y de formación integral, dirigida a toda la comunidad universitaria y orientada por la concepción cristiana de la persona, en la que los planteamientos y las iniciativas inciden sobre cuatro áreas diversas y complementarias entre sí: el contexto histórico-social, el ambiente educativo, las tareas primordiales de las universidad y sus correspondientes procesos académicos, y la formación y la acción pastoral específicas. Además, plantea proponer acciones que ayuden a cada IUS a construir y asegurar las condicio- conozca más 37 36 tecnociencia 38 39 Marco Maldonado tecnociencia 41 40 Marco Maldonado Después de cinco años, se organizó la segunda “Caravana Cultural” que inicio el lunes 18 de mayo en Cuenca, bajo la coordinación general de Andrés de Santis, y con el apoyo del padre Luciano Bellini. Los 170 participantes que llegaron a ser parte de esta caravana, deleitaron a los estudiantes y al público de Cuenca, para luego trasladarse a Quito y Guayaquil. La cultura de los pueblos es uno de los valores que se han transmitido de generación en generación, dependiendo de las ideologías, formación y tradición de cada persona, familia, comunidad y sociedad. El día lunes los integrantes de los grupos de las distintas sedes se dieron cita en el coliseo de la UPS, sede Cuenca, para ultimar detalles en su ensayo de participación, luego de esto a las 17:00 comenzó el espectáculo artístico de música moderna, en el patio, donde se pudo ver claramente la asistencia y apoyo de los estudiantes. arte y cultura 43 42 Mayra Valdivieso La Universidad Politécnica Salesiana, para dar a conocer su labor en el desarrollo de la cultura, hace cinco años organizó la primera “Caravana Cultural”, en donde se dio a conocer las culturas de nuestro país, en homenaje a una década de Aniversario de la Universidad. A las 18:30 nos dimos cita en el coliseo universitario para deleitarnos con los grupos de música y danza folklórica, y tropical de Cuenca, Quito, Guayaquil y Macas, este evento tuvo la acogida necesaria para llenar el local, no solamente con los estudiantes sino con profesores, padres de familia y espectadores de fuera. El colorido de las trajes, las melodías de los ritmos, los aplausos y el entusiasmo de la gente, dejaron un mensaje claro: que la organización estuvo excelente, prueba de esto fue la puntualidad con la que se desarrollaban las actividades. Para finalizar la noche, nos dirigimos al Teatro Universitario “Carlos Crespi”, para acompañar a los coros de Quito, Guayaquil y Cuenca, en donde coincidimos con los amantes de la música y el arte. El martes 19 de mayo, se dio inicio con la actuación del grupo de teatro de Cuenca y Guayaquil, para luego disfrutar de la música con los coros de Cuenca, Quito y Guayaquil en el Teatro Universitario “Carlos Crespi”, y antes de que se acabe la mañana, nos divertimos con la música mucho en su director, al igual que todos sus compañeros. 44 moderna de los grupos de Cuenca y Quito en el patio, frente a la Parroquia Domingo Savio. Para comenzar a disfrutar de la noche, esta caravana se dio cita en el parque de San Sebastián de la ciudad de Cuenca, en donde inició el espectáculo a las 18:30, con la presentación del grupo de música folklórica de Quito, luego la danza folklórica de Guayaquil, nos deleitaron también el grupo de música y danza folklórica de Cuenca, el grupo de música y danza folklórica de Quito y su culminación fue a las 21:00 con el grupo de música Moderna de la Universidad Politécnica Salesiana, sede Cuenca. La acogida de la gente fue buena, pese al clima lluvioso que se presentó, la gente coreaba las canciones y con el ritmo de las melodías movían sus cuerpos, disfrutando de las danzas presentadas en la parte baja del escenario . Para culminar esta noche de intercambio cultural, vino la última presentación del grupo de música y danza ecuatoriana de la ciudad de Quito, quienes pusieron la nota de integración, ya que los integrantes sacaron a bailar a los espectadores. Los profesores, alumnos y público presente se retiraron con una sonrisa de felicidad y entusiasmo del lugar, ya que las críticas de la organización del evento fueron muy buenas, el sonido estaba excelente y, sobre todo, la entrega de cada uno de los integrantes de los grupos musicales y de danza se vio reflejado en sus rostros. Como muestra de esa entrega y felicidad, aprovechamos el instante para dialogar con Margarita Tapia, integrante del grupo de “Música y Danza Ecuatoriana” de la Universidad Politécnica Salesiana, sede Quito. Ella tiene 21 años de edad y estudia Contabilidad y Auditoria, en su diálogo manifiesta que ella baila desde que tiene 10 años de edad, que siempre le llamó la atención los aplausos, estar rodeada de gente y el arte en sí; añade que toda su vida sus padres le han apoyado al cien por ciento y más aún en esta etapa de su vida. Una de las palabras más sorprendentes de Margarita es que todo lo que ella entrega en el escenario es por amor al arte: la relación que tiene con los integrantes del grupo es muy buena, de fraternidad, unidad, respeto y, sobre todo, de amistad. Ella confía Las motivaciones que tuvieron para ser parte de la caravana es compartir y familiarizar con las sedes, que se revalorice las culturas ecuatorianas, darse a conocer como grupo y lograr la integración como personas. La experiencia de ser partícipes de actos así, es la enseñanza que nos dejan los bailes, la música y la entrega que da cada uno de los participantes de los grupos. Este tipo de programas, profundizan nuestros conocimientos; la música y el baile despejan nuestras mentes y nos llevan a un mundo fantástico, donde nos olvidamos de los problemas y sólo tenemos felicidad. 45 Lo conocí en un kiosco de periódicos. En una de esas fugaces colecciones literarias que de vez en cuando intercalan los diarios entre fascículos de dinosaurios y de gastronomía. Por diez mil sucres, creo, me llevaba el libro. En aquella época todo lo que tuviese más ceros que el rostro de Rumiñahui en los billetes de a mil constituían para mí un capital digno de banquero, por tanto pasé de largo. Días después volví a toparme con él en mi cuarto. Alguien cercano (mi abuelo de seguro) hizo el desembolso y lo llevó a vivir junto a mi cama, precisamente en un fabuloso vecindario variopinto repleto de clásicos universales y desconocidos relatos que mi solidaria familia engrosaba con fervor desde que descubrieron mi vocación para devorar libros. Lo abrí y lo cerré casi en seguida porque el único criterio literario que conocía a esa edad consistía en una brevísima búsqueda de las ilustraciones que contenían los volúmenes. Y éste, al no tener más que una pintura barroca en la portada y la foto del autor en el reverso, perdió súbitamente su encanto. Lo guardé con cuidado entre la colección semicompleta de las Selecciones del Reader´s Digest y un ejemplar borroso y antiguo de los Cuentos Completos del Pablo Palacios, que por carecer de dibujitos tampoco disfruté. Él no hablaba de ínfulas, o de cleptómanos, o de cogitaciones o cualquiera de esas palabras calamitosas que me obligaban a leer la poesía local con un diccionario al costado. Porque te tengo y no decía el libro, porque te pienso. Porque la noche está de ojos abiertos… y con ese par de líneas comenzó mi viaje. Cada vez más cercano, más familiar. sociológica), lo volví a ver con ojos distintos, con ojos que ya se habían maravillado de Macondo, con ojos que ya habían llorado junto a Oliverio y la maga, con ojos que ya habían fruncido el ceño por la doble y única mujer. Tres páginas después ya era un adicto: la forma tan sencilla, tan breve, tan cercana de cantar las cosas. Nunca me había topado con una literatura artesana y profunda al mismo tiempo, era como si el autor desconocido me estuviese conversando desde un café, o sentado junto a mí en el bus. Me sentí lleno, por fin encontré alguien que decía las cosas que yo siempre quise decir pero que nunca supe cómo, por haberme atorado en esa búsqueda inútil del refinado lenguaje con el cual me adoctrinaron que se debe nutrir un buen escritor. Porque te tengo y no decía el libro, porque te pienso. Porque la noche está de ojos abiertos… y con ese par de líneas comenzó mi viaje. Cada vez más cercano, más familiar. Nunca tuve el coraje mochilero para buscar el 1324 de la Avenida 18 de Julio que en Montevideo cobijaba del mundo y de la lluvia al autor que página a página había terminado convirtiéndose en mi compañero, pero siempre supe que ciertas cosas las escribió para mí. Y eso me bastaba para saber que era mi amigo. Ayer, cuando la pantalla indiferente devolvió la noticia de su muerte las palabras se atascaron resentidas y lloronas. No me bastó con saber que sus libros le sobreviven, no me bastaron las escusas de los vivos justificando a la muerte. Me sentí solo, desamparado, como si alguien apagara en algún lugar de mi cuerpo lo incandescente… entonces decidí tomarle la palabra, conversar con los sueños, defender la alegría, no salvarme, acercarme al próximo prójimo, tomar mi puedo y mi quiero, creer de nuevo en la utopía, abrir el tomo segundo. Junto a él aprendí que los vacíos no se llenan, se siembran. Gracias Benedetti arte y cultura BENEDETTI 46 47 David Barzallo Tenía 9 años, sueños de futbolista, amigos inseparables y un perro runa de pelaje amarillo. Pasaron los años y lo volví a ver, con ocho o nueve años más en mi equipaje y una noción un poquito menos infantil de la vida y de la muerte, a esas alturas ya había decidido que mi vocación futbolística daría paso a la vocación musical (que luego daría paso a la vocación entretenimiento 48 49 Al escribir este testimonio de apoyo misionero, vuelvo a vivir una emoción muy grande que conjuntamente con mi esposo e hijo de 10 años, lo disfrutamos con la gente de “Plan Grande”, una comunidad que queda a unos 40 minutos de Méndez. Este compartir lo hago con el fin de motivar a estudiantes y docentes a unirse al grupo pastoral de la Universidad Politécnica Salesiana, sede Cuenc, y como un homenaje a todas las personas que habitan en aquella comunidad, porque a pesar de sus limitaciones económicas, demostraron una riqueza espiritual, un corazón noble, generoso, abierto al diálogo y con profunda fe en Dios. Plan Grande es una planicie con una extensión de más o menos 10 kilómetros cuadrados, en donde habitan 25 familias, cerca de 70 personas, el 80% se dedica a la ganadería y un 20% a la agricultura, un alto porcentaje de personas provienen de la provincia del Azuay. Nuestra misión comenzó desde las 23:00 del miércoles 8 de abril, con un grupo de siete alumnos voluntarios y el licenciado Daniel Fajardo, con quienes viajamos al Oriente con la decisión de colaborar en la Iglesia de Méndez. Siempre tuve la ilusión de viajar a algún lugar para ayudar a la gente que lo necesita, ayudar a la medida de mis posibilidades; en esta ilusión incluí a mi esposo e hijo, porque estoy convencida que la familia que reza unida se mantiene unida, pero el rezar no es todo, el TODO está en el servicio al prójimo, a los demás, en dar, más que en recibir, porque no existe satisfacción más grande que el verdadero SERVICIO. que podían existir allí, en especial a las picaduras de insectos, porque soy alérgica; sin embargo, ésta era mi misión y mi deseo grande de servicio, acepté el reto y fue el mismo padre Angelito quien nos llevó a los tres a aquel lugar, nos recomendó a la familia Sánchez Borja, y con las palabras: “No les dejarán morir de hambre”, se fue de inmediato. Comenzamos nuestra labor visitando los hogares, haciendo presente nuestro apoyo en las ceremonias religiosas, e invitando a la “Cena Judía”, una tradición que la mantienen en conmemoración de la última Cena de Jesús. Debo confesar que cuando el padre Ángel Sánchez, párroco de Méndez, nos dio la misión de ser responsables de todas las ceremonias religiosas de Semana Santa en la comunidad antes mencionada, sentí primero temor, porque no tenía experiencia al respecto y, segundo, porque no conocía el lugar, tenía miedo de los animales experiencias y 50 51 Victoria Jara Cobos Cuando se quiere ayudar no importa el tiempo ni las incomodidades, la satisfacción que se alcanza luego del servicio a los demás es muy grande; por eso, si tienen el deseo de colaboración aunque sea en las cosas más sencillas, háganlo y no dejen para otro día lo que pueden hacer hoy. Quiero destacar que no solamente el compartir la fanesca a las siete de la noche fue una linda experiencia de vida comunitaria, sino también nuestra primera celebración del lavatorio de los pies, como signo de purificación y de amor, para después quedarnos en la adoración al Santísimo Sacramento hasta la media noche. El día viernes, a las 06:00, iniciamos con el rezo del Santo Rosario; a las 11:00, el Vía Crucis, en donde se oró por todas las familias que viven situaciones de crisis económica, social y poca práctica del Evangelio; a las 16:00 se procedió a la ceremonia de Adoración a la Cruz. El sábado nuestro día también comenzó a las 06:00 con el rezo del Santo Rosario, luego organizamos la pascua juvenil; promocionamos nuestro evento y tuvimos una gran acogida, cerca de 20 personas entre niños y jóvenes, hombres y mujeres, participaron en diferentes actividades como el baile de la silla, el baile del tomate; carreras e indoor; se entregó premios, todo bajo la responsabilidad de mi esposo e hijo. fuego nuevo desde una fogata ardiente en las afueras de la iglesia, se bendijo también el agua y terminamos casi a la media noche. Por mi parte, me encargué de organizar un grupo de coro para la noche, aunque no soy cantante, ni fue “cantando por un sueño”, sin embargo, éste se conformó con seis jóvenes voluntarias que participaron con entusiasmo en la Vigilia Pascual, que se realizó desde las 22:00. Nuestro apoyo a la comunidad terminó el domingo 12 de abril, cuando retornamos a Méndez para salir a Cuenca, fueron tres días en donde vivimos intensamente la fe en Cristo, crecimos espiritualmente y nos volvimos más sensibles a la realidad de mucha gente; de verdad, esto nos ha fortalecido como personas. La bendición del fuego nuevo y del cirio, la procesión de la luz y el pregón pascual, fueron también un nuevo aprendizaje; fue difícil encender el cirio pascual con el Doy gracias a Dios por la felicidad de mi familia y por la oportunidad que tuvimos de compartir estos momentos que lo vivimos y lo experimentamos intensamente, debo acotar que como católica he participado en estas ceremonias, pero nunca fui protagonista de las mismas. Con la bendición de Dios, todo nos salió bien, sin ningún inconveniente, no estuvimos en un hotel pero pudimos descansar sin problema, no teníamos en donde cocinar pero nunca nos faltó el alimento, porque fuimos invitados a compartir el desayuno, almuerzo y merienda de cada día, con la bondad de familias diferentes, quienes nos atendieron con mucho cariño. 52 Cuando se quiere ayudar no importa el tiempo ni las incomodidades, la satisfacción que se alcanza luego del servicio a los demás es muy grande; por eso, si tienen el deseo de colaboración aunque sea en las cosas más sencillas, háganlo y no dejen para otro día lo que pueden hacer hoy. 53 Llegué al mediodía, con un poco de miedo, y timidez, pero, al mismo tiempo, alegre y con toda la energía posible de transmitir la Palabra de Dios. Era la hora de encontrarme con Dios y conmigo misma, para poder evangelizar. Me hospedé en el calor del hogar de una familia muy amorosa, bondadosa y muy colaboradora, que me hizo sentir como en casa. Eran las 18:00, cuando, junto a David, un adolescente que entre pocos jóvenes hizo su primera experiencia misionera, y en conjunto con la comunidad, hablamos de dos temas: como del perdón y el compartir, a más de ello, participamos en la ceremonia del lavatorio de los pies, para luego comer la fanesca en unión con todos experiencias los miembros de la comunidad, en una tradición que mantienen desde hace muchos años. Amaneció el día Viernes Santo y vino la parte más bonita de la historia: conocí a don César, un hombre muy trabajador, colaborador que fomenta la unión en Yubimi; su devoción cada año es participar con el gasto de alquilar trajes con los personajes que intervienen en el Vía Crucis; para él, cargar una cruz que pesa cientos de libras, en un clima muy caluroso de poco viento, y recorrer algunos kilómetros, es nada, ya que lo más importante es que Dios lo proteja en todas las circunstancias de la vida y que le ayude a ser mejor persona cada día. Tuve la oportunidad de vivir una experiencia maravillosa de misiones en Semana Santa, gracias al Departamento de Pastoral de la Universidad Politécnica Salesiana, que me permitió ir hasta el cantón Méndez y sus comunidades, en la provincia de Morona Santiago. El grupo de voluntarios “Juventud en Acción” se hizo presente para colaborar en la Semana Mayor. El día lunes se visitó a colegios y escuelas, para hacerles una invitación a chicos y grandes a ser partícipes de una chiqui-pascua (niños) y una pascua juvenil (jóvenes), se realizaron juegos, concursos, cantos y dinámicas. 54 El Jueves Santo se me encomendó hacer mi labor misionera en la comunidad de Yubimi, aledaña al cantón, en donde viví mi mejor experiencia. Patricia Jara 55 En Yubimi, el Vía Crucis no sólo consiste en la caminata con las catorce estaciones, sino que se incluye la dramatización de la muerte de Jesús. Cuando llegamos a la iglesia, todos cansados y con ansias de beber agua o chicha de chonta, no se pudo, ya que era el día del ayuno. Enseguida se hizo la celebración de la adoración de la cruz y las siete palabras, esa noche también me sorprendí al ver a don César, que se quedó a velar al Santísimo toda la noche en la iglesia; su fe y su sacrificio lo hacen un hombre de ejemplo para la comunidad. 56 El Sábado Santo era el día de la vigilia, desde las 10:00 hasta las 13:00 estábamos con David colaborando en otra comunidad junto a Sonia y Eddy, jugando, compartiendo la alegría con los niños. En la tarde regresamos a Yubimi, conocí a Carmen una señora nativa de etnia shuar con una edad de 110 años, me narraba cómo fue su vida, ella estuvo casada con dos maridos, comía la carne de los animales silvestres, es más, ella recogía los peces pequeños en su boca para preparar el sabroso ayampaco, me invitó a tomar la deliciosa chicha de yuca y la de chonta, la bebida más natural y refrescante para un día de sol en el Oriente; también se trabajó con los jóvenes, se reflexionó sobre la sociedad y los jóvenes en el mundo actual, fueron partícipes de las lecturas en la vigilia, llevaron las velas y quemaron unos papeles donde habían anotado sus defectos. Esa noche ellos también resucitaban con Jesús para continuar una nueva lucha por la vida, un proyecto de joven y vivir sin rencores. Llegó el día domingo, el más triste, era la despedida, y tuve pocos minutos para conversar con la señora Delia, la dueña de la casa donde me hospedé, cuando la miraba observé en sus ojos una mirada profunda de tristeza, no era porque mi presencia era importante en la casa, sino porque era el último día en que había ruido y voces, pues ella me platicaba que se pasaba sola, su esposo salía a la finca en la mañana y su nieto Edwin, de 14 años, iba al colegio. En las mañanas, la mayoría de su tiempo lo dedicaba a sus hermosas plantas, tenía un bello jardín, con plantas ornamentales, medicinales, y hasta legumbres, y, lo mejor de todo, tenía el trapiche para moler la caña de azúcar y elaborar la miel. La abracé y me despedí con una profunda pena; en la camioneta de don Heriberto estaba un cartón con un obsequio de plátano, oritos, papayas, cañas, guabas, zapotes, en fin… las deliciosas frutas con sabor a Oriente, llegué a Méndez y, en seguida, tomé el bus de retorno a Cuenca. Recuerdo una frase de un señor en Yubimi: “lo importante no es dónde vives, sino cómo vives”. Gracias a todos. 57 Enmarcado en el proceso de fortalecimiento de la Universidad Politécnica Salesiana como universidad promotora de la vida saludable, desde un enfoque participativo y con el objetivo de aportar a la construcción de una cultura de la salud, se planteó desde el Proyecto “Juventud, Sobriedad y Vida” una programación llamada “Semana Saludable” del 15 al 19 de junio. Desde esta estrategia de promoción de la salud y la cultura física para el mejoramiento de la calidad de los miembros de la comunidad universitaria y juventud cuencana; le apostamos a favorecer participación en la ampliación del concepto de salud existente en los miembros de nuestra comunidad educativa y a integrar iniciativas a favor de este objetivo común; es así como el Vicerrectorado de la sede Cuenca, a través de la Dirección Nacional de Pastoral, Comunicación y Cultura, y la carrera de Cultura Física, unieron esfuerzos y fortalezas para construir esta posibilidad de encuentro para todos los miembros de la Comunidad Universitaria Salesiana. experiencias Propiciar prácticas saludables como la buena alimentación, el deporte, la recreación y el aprovechamiento del tiempo libre, teniendo en cuenta las decisiones individuales, desde el respeto a la libertad y abriendo posibilidades para optar por el desarrollo de habilidades como las propuestas del ASU (Asociacionismo Salesiano Universitario). Considerar la dimensión pedagógica, promoviendo espacios de reflexión que hagan posible que los/las jóvenes aprendan y no sólo se informen sobre los hábitos de vida saludables. Para lograr esto, el reto implica el diseño conjunto de propuestas metodológicas que faciliten a los asistentes aproximarse desde una vivencia de la integralidad de la salud a una posibilidad de ser saludable. Favorecer conciencia de que lo trascendente es lo más saludable de la vida, porque está articulado a ella, dándole sentido. El énfasis en este punto está dado por la integración de la dimensión trascendente a la vida cotidiana y la movilización que se pretende favorecer de la vivencia de ésta como una dimensión paralela, articulándola a la esencia misma de la vida. Promover el aprovechamiento de los recursos existentes en la universidad desde una visibilización, ubicación, conocimiento y posibilidad de elegir a favor del propio cuidado de la salud. 58 La sede Cuenca vivió su Kléber Zuna Serrano Con esta propuesta se ha procurado: Trascender el concepto de salud como prestación de servicios desde el cual se asume que es otro el que nos resuelve los problemas y quien realiza actividades a favor de la salud, favoreciendo así el cuidado de la propia salud, el empoderamiento y la autonomía en el mantenimiento de la salud. “habilitar y empoderar a los miembros de la comunidad universitaria para que asuman el control y mejoren los factores determinantes de la salud” El evento Semana de la Vida Saludable, la UPS-Cuenca lo asumió también como un momento de celebración por los 15 años de su creación. En este espacio se ha procurado evidenciar que la universidad pone en juego todos sus recursos para favorecer sinergias que promuevan la construcción de una cultura saludable. Desde este evento, asumimos el reto de iniciar y reforzar año a año el proceso de avance en la movilización de imaginarios, conscientes de que éste es un camino que se irá abriendo, a medida que lo vayamos transitando y aprendiendo de él.