LA ASIGNATURA DE RELIGIÓN EN LAS LEYES INTERNACIONALES Como paso previo a la exposición del conjunto de textos que hacen referencia a la enseñanza de la Religión en la Escuela a nivel internacional, es imprescindible mirar a la Constitución de 1978, pues es entonces cuando se entiende perfectamente porqué nuestra Constitución se expresa de ese modo, al tiempo que todo adquiere plenamente su sentido. Así, Artículo 10.2. “Las normas relativas a los derechos fundamentales y a las libertades que la Constitución reconoce se interpretarán de conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos y los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias ratificados por España”. Artículo 96.1. “Los tratados internacionales válidamente celebrados, una vez publicados oficialmente en España, formarán parte del ordenamiento interno. Sus disposiciones sólo podrán ser derogadas, modificadas o suspendidas en la forma prevista en los propios tratados o de acuerdo con las normas generales del Derecho internacional”. Artículo 27 1. “Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza”. 3. “Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. 6. “Se reconoce a las personas físicas y jurídicas la libertad de creación de centros docentes, dentro del respeto a los principios constitucionales”. 9. “Los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los requisitos que la ley establezca”. Con estas premisas constitucionales, leamos la legislación internacional ratificada por España, es decir, que forma parte de nuestro ordenamiento interno, de modo que es de OBLIGADO CUMPLIMIENTO por parte del Estado. Declaración Universal de Derechos Humanos (1948) Artículo 18. “Toda persona tiene derecho (...) a la libertad de manifestar su religión o su creencia individual o colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica del culto y la observancia” Artículo 26.2. “La educación tiene por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tolerancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos”. Artículo 26.3 “Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos”. Protocolo Adicional número 1 del Convenio europeo para la protección de los derechos humanos y de las libertades fundamentales (4-11-1950) Artículo 2. “A nadie se le puede negar el derecho a la instrucción. El Estado, en el ejercicio de las funciones que asuma en el campo de la educación y de la enseñanza, respetará el derecho de los padres a asegurar esta educación y esta enseñanza conforme a sus convicciones religiosas y filosóficas”. Convención de la UNESCO contra las discriminaciones en la esfera de la enseñanza (14-12-1960) Artículo 5.1.b. “Los Estados Partes en la presente Convención convienen (...) en que debe respetarse la libertad de los padres o, en su caso, de los tutores legales: 1º de elegir para sus hijos establecimientos de enseñanza (...) y 2º de dar a sus hijos, según las modalidades de aplicación que determine la legislación de cada Estado, la educación religiosa y moral conforme a sus propias convicciones; en que, además, no debe obligarse a ningún individuo o grupo a recibir una instrucción religiosa incompatible con sus convicciones”. Pacto Internacional de Derechos civiles y políticos (19-12-1966) Artículo 18.4. “Los Estados Parte en el presente Pacto se comprometen a respetar la libertad de los padres y, en su caso, de los tutores legales, para garantizar que los hijos reciban la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. Pacto Internacional de Derechos económicos, sociales y culturales (19-12-1966) Artículo13.3. “Los Estados Parte en el presente Pacto se comprometen a respetar la libertad de los padres y, en su caso, de los tutores legales, de escoger para sus hijos o pupilos escuelas distintas de las creadas por las autoridades públicas, siempre que aquellas satisfagan las normas mínimas que el Estado prescriba o apruebe en materia de enseñanza, y de hacer que sus hijos reciban la educación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones”. Recomendación de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa a su comité de Ministros (2-2-1993) III) – “a procurar que las clases sobre las religiones y la moral figuren en los programas escolares, y a esforzarse para obtener una presentación diferenciada y cuidada de las religiones en los libros de texto (los libros de historia incluidos) y en la enseñanza a fin de mejorar y profundizar los conocimientos de las distintas religiones”. IV)- “ a recalcar que el conocimiento de la propia religión o de los propios principios éticos es una condición previa a toda auténtica tolerancia y puede asimismo servir como defensa contra la indiferencia o los prejuicios”. Resolución del Consejo de Europa, de 27 de enero de 1999 “La democracia ha demostrado ser el mejor marco para la libertad de conciencia, el ejercicio de la religión y el pluralismo religioso. Por su parte, la religión, por su compromiso moral y ético, por los valores que sustenta, por su enfoque crítico y su expresión cultural, puede ser un compañero válido de una sociedad democrática...” Con el fin de garantizar la libertad de conciencia y expresión religiosa; salvaguardar el pluralismo religioso en la sociedad, la cultura, la educación y los medios de comunicación(...), “el Consejo de Europa recomienda a todo gobierno de los Estados miembro: - Reforzar el aprendizaje de las religiones en cuanto conjunto de valores respecto de las cuales los jóvenes deben desarrollar un sentido crítico, en el marco de una educación de la ética y de la ciudadanía democrática. - Promover la enseñanza, en la escuela, de la historia comparada de las diferentes religiones, insistiendo sobre el origen, la semejanza de determinados valores y sobre la diversidad de costumbres, tradiciones, fiestas, etc. - Estimular el estudio de la historia y de la filosofía de las religiones y la investigación sobre estos mismos temas en la universidad, de manera paralela a los estudios teológicos. - Cooperar con las instituciones educativas religiosas para introducir y reforzar en sus currículos, los aspectos relativos a los derechos del hombre, la historia, la filosofía y la ciencia. - Evitar, en el caso de los niños, todo conflicto entre la educación sobre las religiones promovida por el Estado y la fe religiosa de las familias, a fin de respetar la libre decisión de las familias en este muy delicado terreno”. Proyecto de la Constitución Europea, junio de 2004 (Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión de 2000) Artículo II-14.3. “Se respetan, de acuerdo con las leyes nacionales que regulen su ejercicio, la libertad de creación de centros docentes dentro del respeto a los principios democráticos, así como el derecho de los padres a garantizar la educación y la enseñanza de sus hijos conforme a sus convicciones religiosas, filosóficas y pedagógicas”.