BOLETÍN CUESTIÓN DE ÉTICA Comité de probidad y ética Correos electrónicos: [email protected] [email protected] [email protected] [email protected] [email protected] [email protected] Si desea realizar alguna denuncia o sugerencia puede comunicarse a [email protected] Estamos en el portal Institucional del fhis www.fhis.hn/etica INTERESANTE REFLEXIÓN Un anciano que vivía solo, quería (como todos los años) plantar patatas en su patio de atrás, pero arar la tierra era un trabajo demasiado pesado para un hombre de su edad. tierra. Su único hijo, Jose Ángel, quién solía ayudarlo, estaba preso por homicidio. El anciano decidió escribirle una carta a su hijo, explicándole su problema: Por el amor de Dios, papá, no vayas a remover la tierra del patio trasero. Querido Jose Ángel: Me siento mal porque no voy a poder plantar mi huerto con patatas este año. ““FORTALECIENDO NUESTROS VALORES” Estoy muy viejo para arar la parcela. Si tú estuvieras aquí, todos mis problemas RECUERDE QUE PUE- desaparecerían. Sé que me DE REALIZAR SUS DE- ayudarías removiendo la NUNCIAS O SUGERENCIAS EN EL BUZÓN DE ÉTICA INSTALADO EN LA RECEPCIÓN DE EDIFICIO PRINCIPAL. Te quiere, Papá. Pocos días después, el hombre recibió una carta de su hijo: Querido Papá: Precisamente allí es donde enterré uno de los CUERPOS (el que la policía nunca pudo encontrar). Te quiere, Jose Ángel. Al otro día, a las 4 de la mañana, la policía y agentes especiales irrumpieron en la casa del anciano, con una orden del juez y removieron toda la tierra del patio trasero, sin encontrar nin- VOLUMEN 1, Nº 1 AGOSTO 2011 VALORES gún cuerpo. Se disculparon con el anciano y se fueron. Ese mismo día, el hombre recibió otra carta de su hijo: ÉTICA Querido Papá: Ahora ya puedes plantar tus patatas. Disculpa las molestias, pero dadas las circunstancias, es lo mejor que pude hacer para ayudarte. Te quiere, tu Hijo Jose Ángel. Siempre hay la posibilidad de ayudar aun cuando las circunstancias que estemos viviendo digan lo contrario. 'Quien tiene ideas es fuerte, pero quien tiene ideales es invencible'. MISIÓN Y VISIÓN DEL COMITÉ DE PROBIDAD Y ÉTICA FHIS Nuestra Misión Apoyar al Gobierno, al FHIS y a la Sociedad Civil en el esfuerzo de impulsar procesos de transparencia, así como mecanismos de prevención control y combate a la corrupción por medio de la formación en valores, realizando periódicamente campañas de difusión en materia de ética, integridad, honestidad, y responsabilidad y atender denuncias de situaciones que afecten tanto al servidor público como a la institución en el ejercicio de sus funciones. Nuestra Visión: Ser un comité con liderazgo basado en principios éticos y de integridad que responda a la confianza depositada por el TSC y por el personal del FHIS, que logre formar conciencia en los empleados para que retomemos los valores éticos y morales y los adoptemos como un estilo de vida, lo cual contribuirá a un mejor desempeño de nuestras labores tanto dentro de la institución, como en el seno de nuestros hogares, y con ello propiciar la construcción de una nueva sociedad. La ética es una rama de la filosofía que abarca el estudio de la moral, la virtud, el deber, la felicidad y el buen vivir. Se dedica en sí, al estudio de los actos humanos, pero aquellos que se realizan de forma libre y consciente. Todo acto humano que no se realice por medio de la voluntad de la persona y que esté ausente de libertad, no ingresan en el estudio o campo de la ética. Para comprender un acto humano, primero hay que saber, qué es el hombre. Según la antropología, el hombre es una unidad sustancial de cuerpo y alma, es decir, todo hombre posee cuerpo y alma, la cual le provee una dignidad intrínseca. El hombre está llamado a realizar actos buenos, los que son guiados, por medio de la conciencia; ésta nos clarifica, qué actos son correctos e incorrectos, como ejemplo, la conciencia nos dicta, que el hombre es justo, por lo que todo ser humano rechaza un acto de injusticia y lo lleva a actuar justamente, pero un solo actuar como justo no cambia nada, sin embargo, si ese acto se repite EN ESTA EDICIÓN: constantemente se convertirá en un hábito. Repetir constantemente acciones buenas nos hace a la vez adquirir virtudes, las cuales nos brindan la capacidad de cumplir el bien de una forma fácil y gratificante. La ética señala que la felicidad es la finalidad del ser humano y ésta solo se alcanza mediante la perfección del actuar del hombre, es decir, por medio de la ética podemos guiar nuestros actos hacia aquellos que nos hagan mas virtuosos y felices. ÉTICA INTEGRIDAD VALORES MORALES ESTUDIANDO EL CÓ- DIGO DE ÉTICA CHEQUEANDO TU OPINIÓN ETI-CARICATURAS BUEN HUMOR INTERESANTE RE- FLEXIÓN MISIÓN Y VISIÓN INTEGRIDAD Dicho de una persona: Recta, proba, intachable. En la expresión popular se dice que algo es o está íntegro cuando aparece completo, es decir, no le hace falta nada y es aceptable como producto u objeto. La integridad se refiere a una capacidad o facultad en el individuo de actuar, pensar, sentir, en definitiva ser lo más completo posible. La integridad es uno de los valores más cercanos a la perfección, si acaso no es una de sus avenidas más directas. En este importante valor, tan extraño en la cotidianidad, confluyen otros valores que facilitan su vivencia y expresión: honestidad, rectitud, sinceridad, libertad, pureza, en fin, hacen a la persona digna de lo que es, así como confiable y ejemplo de vida para otros. La integridad es de carácter total; no puede pensarse que un individuo sea íntegro en unas cosas, entretanto, en otras no, pues dicho valor no admite puntos intermedios para justificarse cuando se debe ser íntegro o no. Tampoco puede confundirse la honestidad con la integridad; en la primera, las personas no toman posesión de lo que no es suyo y demuestran buen cumplimiento de las normas sociales y reglas diversas de comportamiento y relaciones interpersonales. En la integridad la persona hace extensivo su comportamiento ético a todas las situaciones en las que se ve inmerso o participante. Por ejemplo: alguien muy honesto puede devolver algo (dinero, bien) que no es suyo, pero ser desleal a su cónyuge, familia o amigos (no ser íntegro). De modo que podemos discernir que una gran parte de nuestra cultura, y los procesos en ella vivenciados están en su mayoría carentes de integridad. En realidad, la integridad implica un buen grado de madurez en el nivel ético y espiritual, que conducen a la persona a actuar lo mejor posible en todas las circunstancias, pues este valor afecta positivamen- te a todo su entorno. Las personas íntegras son confiables, delegables, irradian y comparten sabiduría, y son además facilitadoras de las relaciones interpersonales. La integridad es la respuesta a la doble moral que maneja la sociedad, donde las personas actúan de una manera relativa (a su conveniencia y acomodo), evitando todo tipo de compromiso serio con los demás, con la vida y con Dios. Doble moral que se caracteriza por ser bondadosa cuando se requiera (conveniencia), pero participa de actos denigrantes sin que otros se den cuenta de ello, por otra parte. De manera que, una persona íntegra responde a sus valores adquiridos, a sus convicciones más profundas, orientadas siempre hacia el bien y la construcción de la familia y la sociedad donde participa. La integridad es cierta evidencia de excelencia en el comportamiento integral de la persona. Frases de Ética: El mundo no está en peligro por las malas personas, sino por aquellas que permiten la maldad. Albert Einsten (1879-1955) Científico alemán La ambición suele llevar a los menesteres más viles: por eso para trepar se adopta la misma postura que para arrastrarse. Jonathan Switt Todos obedecen con gusto cuando el que manda es justo Proverbio castellano CUESTIÓN DE ÉTICA “FORTALECIENDO NUESTROS VALORES” Página 2 Una serpiente sigue a una luciérnaga, cuando está por devorarla, esta le pregunta: ¿Te he hecho algún mal? La serpiente responde: Ninguno, pero no soporto verte brillar! ¿ Que son los valores? MORALEJA: Recuerda que en la vida encontraras muchos que no soportarán tus éxitos, aunque los envidiosos te sigan no te canses nunca de brillar CHEQUEANDO TU OPINIÓN VALORES MORALES de vida, de una época de desaliento y desencanto, de confusión y de promesas incumplidas, de falta de horizontes... me parece que tiene una causa: falta de valores. no es lo mismo la gratitud que la ingratitud. no es lo mismo la responsabilidad que la irresponsabilidad. no es lo mismo la sinceridad que la insinceridad. las cosas no valen todas igual. las cosas tienen cada uno su propio peso. cada cosa es portadora de valores y hay que descubrirlos. ¿Que son los valores humanos? Vivimos en una sociedad donde los valores escasean, están de baja. Se oye decir mucho:"¡que mas da...!... ¡todo igual!". este encogerse de hombros y de energías ,singular reflejo de una crisis Valor es aquello que hace buenas a las cosas, aquello por lo que nos apreciamos , por lo que son dignas de nuestra atención y deseo. el valor es todo bien encerrado en las cosas, descubierto de mi inteligencia deseado y querido por mi voluntad. los valores dignifican y acompañan la existencia de cualquier ser humano. El hombre podrá apreciarlos si es educado con ellos. y educar con los valores es ser educado moralmente pues serán los valores los que enseñan al individuo a comportarse como hombre, como persona pero se necesita educar a una recta jerárquica de valores. El valor por lo tanto, es la convicción razonada y firme de algo que es bueno o malo y de que nos conviene más o menos. Los valores reflejan personalidad de los individuos y son la expresión del tono moral cultural social y marcado por la familia, la escuela la instituciones y la sociedad en que nos ha tocado vivir. ESTUDIANDO EL CÓDIGO DE ETICA. EL CONGRESO NACIONAL, CONSIDERANDO: Que la ética en el ejercicio de la función pública constituye una de las formas de prevenir y combatir más eficaz y eficiente la corrupción. CONSIDERANDO: Que la corrupción pone en peligro la convivencia y la paz social, socava los valores de la democracia y la moral y compromete el desarrollo económico, político y social del país. CONSIDERANDO: Que de conformidad con los numerales 1,2 y 3 del Artículo III de la Convención Interamericana Contra la Corrupción, Aprobada mediante decreto Legislativo No. 100-98 del 21 de abril de 1998, el Gobierno de Honduras está obligado a crear, mantener y fortalecer normas de conducta y mecanismos para su efectivo cumplimiento. CONSIDERANDO: Que de conformidad con el artículo 8, numerales 1 y 2 de la Convención de las Naciones Unidas Contra la Corrupción, aprobada mediante Decreto Legislativo No. 9-2005 del 3 de Marzo del 2005, el Gobierno de Honduras está obligado a aprobar códigos de conducta para el correcto, honorable y debido cumplimiento de las funciones públicas. CONSIDERANDO: Que es imperativa la emisión de un instrumento legal que contemple normas de conducta ética de los servidores públicos y que, a su vez prevea los mecanismos que hagan visibles y efectivas dichas normas. Por tanto, DECRETA EL SIGUIENTE CÓDIGO DE CONDUCTA ÉTICA DEL SERVIDOR PÚBLICO “La ética de una ciudad debe estar basada en la justicia y en la recta razón de un hombre que sea sabio y justo” TÍTULO I DISPOSICIONES GENERALES CAPÍTULO I Objeto ARTÍCULO 1. El presente Código establece un conjunto de deberes, prohibiciones e incompatibilidades aplicables, sin excepción a todas las personas que se desempeñen en la función pública en todos los Poderes, órganos e instituciones del Estado, niveles y jerarquías, en forma permanente o transitoria, por elección popular, nombramiento, concurso o por cualquier otro medio legal. El ingreso a la función pública obliga al servidor público a conocer y cumplir fielmente el presente Código. ARTÍCULO 2. La administración pública tiene por objeto promover el desarrollo de una sociedad política libre y democrática, económica y social- VOLUMEN 1, Nº 1 Página 3 mente justa que propicie la plena realización de la persona humana, dentro de la justicia, la libertad, la equidad, la seguridad, la estabilidad, el pluralismo, la paz, la democracia representativa y participativa y el bien común, de acuerdo a la Constitución de la Republica, los tratados y las leyes vigentes en Honduras. La maledicencia, la calumnia y el chisme Deseamos tocar en esta primera edición del boletín “Cuestión de ética” un tema que como el cáncer se está extendiendo de forma alarmante en nuestra sociedad.: La emisión de juicios, hablar de los demás es una práctica común, incluso aunque se tenga muy poca base y no tengamos argumentos, emitimos juicios en contra de las personas sólo por simples sospechas o por comentarios aislados, generados muchos por personas rencorosas y frustradas que se sienten aliviadas hablando mal de los demás. Primeramente definamos algunos términos que debemos tener bien en claro: De acuerdo al diccionario de la real academia de la lengua española, maledicencia es la acción o hábito de hablar en perjuicio de alguien denigrándolo. La calumnia es aquella acusación falsa hecha con el propósito de causar daño. El chisme se define como una noticia verdadera o falsa con que se murmura o se pretende difamar a una persona o en muchos casos a una institución. La envidia es la tristeza causada en uno por el bienestar de otro. Envidia es avinagrarse porque alguien la está pasando mejor que uno, lo que sea que esto signifique: más dinero, fama, talento, etc. Voy a empezar contándoles una pequeña historia que nos invita a reflexionar: Un sabio fue visitado por un amigo que se puso a hablar mal de otro amigo del sabio, y este le dijo: “Después de tanto tiempo, me visitas para cometer ante mí tres delitos: primero, procurando que odie a una persona a la que amaba; segundo, preocupándome con tus avisos y haciéndome perder la serenidad; y tercero, acusándote a ti mismo de calumniador y maledicente”. De la envidia nace el odio, la maledicencia, la calumnia, el chisme y la alegría causada por el mal del prójimo Tanto daño puede causar la maledicencia que los libros sagrados de las principales religiones tales como la Biblia, el Torá de los judíos y el Corán de los musulmanes la condenan. Santiago 4, 11; Efesios 4, 31; Pedro 3, 10; La maledicencia, la calumnia y el chisme son propios de sociedades poco evolucionadas y es la falta de ética lo que nos hace ocuparnos más de la vida de los demás que de la propia, tal es así que pareciera que el chisme se ha convertido en el deporte favorito de muchos de nosotros. Hay gente que se pasa horas hablando o murmurando de otras personas, y muchas veces sin darse cuenta del error que están cometiendo, y lo peor es que ellos juran que no son chismosos. Otras veces el “error” es premeditado. Existen artistas consumados en desprestigiar y hablar mal de los demás, y en hacer correr bolas contra quien les cae mal, sin considerar el daño que causan a las reputaciones y a la honra de las gentes. También hay los que chismean sin maldad aparente, sólo para sentirse importantes, (¿no sabes la última?), y otros lo hacen maliciosamente, con la intención de causar daño a alguien en particular; puede ser por rivalidad, celos, competencia, enemistad, oposición, antagonismo, pugna, envidia, etc., todo ello empujado posiblemente por un gran complejo de inferioridad. El daño causado por el chisme es muy difícil de reparar. No siempre nos damos cuenta del perjuicio. Se agravia, ofende y calumnia de manera increíble. Los chismes son informaciones deformadas, que tienen un ciclo similar a los rumores: nacen como si fueran seres vivos, se desarrollan y mueren. Incluso pueden reencarnarse con nuevos bríos o hasta con nuevo cuerpo. El chisme es producto de la convivencia social y se aprende con el tiempo, y todos de alguna forma lo hemos practicado. La estructura del chisme lo conforman: el chismoso, el receptor de la habladuría y la víctima, de que se habla en forma negativa y sin fundamentos. Esto puede ir desde una simple crítica hasta la invención de toda una historia en torno a un sujeto determinado. O sea, se juega también a intentar cambiar la realidad. Instituciones como la nuestra se convierten en verdaderos campos de espionaje entre sus trabajadores, la inseguridad se intensifica, se pierde la confianza entre los compañeros, se traicionan, se utilizan, compiten, se crean ambientes en los que se siente que se camina entre vidrios. El que murmura hace daño a tres personas, a él mismo, al que escucha sin desmentir al hablante, y a la persona de quien se murmura. Si se tiene algo que reprochar a alguien, él es la primera persona que debería escuchar el reproche, pero lamentablemente por la falta de sinceridad que nos caracteriza, el maledicente se encuentra con BUEN HUMOR el compañero, le sonríe y le saluda con palabras amables y hasta le adula, para después, apenas despedido, comenzar, de una manera u otra a hablar mal de él. En el caso de la calumnia, ésta es considerada como un modo de difamación que destruye a la persona afectada, no sólo por las heridas que produce, sino por la dificultad de repararlas. Aunque a uno le importe poco la opinión ajena, la calumnia abre las puertas a la duda. La calumnia tiene su mejor cómplice en el “piensa mal” y hace tambalearse hasta las más firmes convicciones acerca de la rectitud o la honradez de una persona, incluso una vez aclarada la mentira. Se sabe de amistades a prueba de bombas que han sucumbido al insidioso enredo de las maledicencias deliberadas; el veneno de la calumnia ha roto parejas y ha desmembrado familias, igual que ha provocado depresiones y sembrado discordias irreparables. Antiguamente el honor y la honra eran los bienes más preciados de las personas y su pérdida se consideraba irrecuperable, y cuando alguien ofendía el honor y la honra de un individuo, esta ofensa se lavaba con sangre generalmente en un duelo. En nuestros días estos conceptos pareciera que han quedado anticuados y lo que ofrecemos a nuestros jóvenes es una sociedad en la que todo se puede comprar y vender, donde prima la mediocridad y la falta de valores morales. Nada se expande tan rápido como la calumnia, nada se lanza con más facilidad, nada se acoge con más presteza ni se difunde más ampliamente” (Cicerón). Si queremos vivir una vida más significativa, debemos buscar la forma de dejar de “interesarnos” en las vidas ajenas y comenzar a preocuparnos más de nuestras propias vidas, es decir dedicarnos a mejorar y a corregir nuestros defectos. Debemos ser más sinceros cuando hablamos a las personas, y más tolerantes cuando hablamos de ellos. Si vemos algo con lo que no estemos de acuerdo o alguna cosa molestosa en alguno (incluidos nuestros jefes), debemos ir directamente a él y hablarle claramente demostrando nuestros argumentos. ¡Cuántos males, sufrimientos y rencores serían evitados si habláramos con sinceridad. Recuerda: esperamos tu opinión para la próxima edición CHISTES: “Durante el juicio le pregunta el juez al acusado: ¿ y cómo se las arregló usted para abrir la caja fuerte en tan sólo 15 minutos? Señor Juez, yo no doy clases gratis. Va un gerente de una institución de prestigio con su hijo a su hacienda ganadera, el niño le pregunta: ¿Papá, papá, todo lo que veo a mí alrededor es ganado? No hijo… es robado. Tomado del artículo del señor Jorge Luis Alcázar del Castillo - La male- ETI-CARICATURAS