ELIMINACIÓN DEL ARRAIGO, PENDIENTE

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11 de marzo de 2014
ELIMINACIÓN DEL ARRAIGO, PENDIENTE
La ocasión de la publicación del Código Nacional de Procedimientos Penales en el
Diario Oficial de la Federación vale aprovecharla para hacer una serie de reflexiones
someras en torno al cambio de paradigma que significa la transición en nuestro país
de un sistema de justicia predominantemente inquisitivo a uno de corte acusatorioadversarial. Sus luces, sus sombras y sus retos pendientes.
En notas anteriores1 comentábamos que el Código Único responde a las tareas para
la implementación de la reforma constitucional de 2008 en materia de seguridad y
justicia, mediante la cual se sentaron las bases para un sistema de justicia penal que
persigue el fin de esclarecer los hechos, proteger al inocente, procurar que el culpable
no quede impune y que se reparen los daños causados por el delito; que los principios
rectores del proceso penal son los de publicidad, contradicción, concentración,
continuidad e inmediación. En conjunto, bajo este paradigma debería poderse contar con
una justicia más expedita, transparente e imparcial; habría equidad entre las partes y la
presunción de inocencia sería una realidad.
Sin embargo, la sombra del arraigo permanece, enturbiando los aciertos que este
nuevo modelo podría significar. La figura del arraigo que inició su camino en nuestra
legislación procesal penal en la década de los ochenta del siglo pasado, y que más
tarde fue declarada inconstitucional en 1999 por la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, se llevó directamente al texto constitucional en la citada reforma de 2008 en
términos muy amplios, se estableció que podrá ser arraigada cualquier persona
cuando ello sea necesario para el éxito de la investigación, la protección de personas
1
Dicha nota, intitulada “Código Nacional de Procedimientos Penales, publicado el 5 de marzo en el Diario Oficial de la
Federación” puede leerse en la página web del Observatorio de Política Social y Derechos Humanos:
http://observatoriopoliticasocial.org/wordpress/wp-content/uploads/2014/03/5-de-marzo-C%C3%B3digo-Penal.pdf
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o bienes jurídicos, o cuando exista riesgo fundado de que pueda el inculpado
sustraerse de la acción de la justicia.
En un informe acerca del impacto del arraigo en México presentado ante la Corte
Interamericana de Derechos Humanos por varias OSC, entre ellas la Comisión
Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH) y el Centro
por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL), se denuncia que desde 2008 el
arraigo ha sido una de las “técnicas” de investigación criminal más utilizadas en el
país. Explican que dicha regularidad en su uso configura una mixtificación entre el
sistema de justicia penal y el de seguridad pública, volviéndose el primero una mera
herramienta del segundo “…de ahí la pertinencia de caracterizarlo como un
subsistema de excepción consistente en la aplicación de una pena precondenatoria,
que flexibiliza las garantías judiciales de las personas, colocándolas en un limbo
jurídico en el que no son ni indiciadas ni inculpadas”2. La persona que ha sido
arraigada no está vinculada a un proceso penal, se le ha detenido primero para luego
investigar; así, cómodamente el Ministerio Público tiene amplias posibilidades para
solicitar el arraigo, y la profesionalización de las investigaciones que tiene a su cargo
sale perdiendo gracias a ello3.
Amnistía Internacional también se ha pronunciado enfáticamente ante la subsistencia
del arraigo en el país. Según el informe presentado por esta ONG a la ONU para el
último Examen Periódico Universal (EPU) a México, durante la pasada administración
cerca de 8,000 personas estuvieron bajo arraigo en la jurisdicción federal. Hubo
denuncias de tortura, malos tratos y de violaciones del derecho a un juicio justo de
2
Informe sobre el impacto en México de la figura del arraigo penal en los derechos humanos, presentado ante la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, elaborado por Organizaciones de la Sociedad Civil mexicana, entre
ellas la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, Centro por la Justicia y el Derecho
Internacional y la Federación Internacional de Derechos Humanos, Washington, D.C., 28 de marzo de 2011, puede
consultarse en: http://cmdpdh.org/wp-content/uploads /2013/03/Informe-CIDH-sobre-el-impacto-en-Me%C3%ACxicode-la-figura-del-arraigo-penal-en-los-derechos-humanos-FINAL.pdf
3
Ibidem, Pág.6
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personas que permanecieron bajo arraigo. Entre las recomendaciones que formula
Amnistía Internacional a México está la de abolir esta figura4.
En igual tenor fueron otras recomendaciones que se hicieron al Estado Mexicano en
el EPU por parte de países como Francia, Austria, Bélgica y Alemania, precisamente
por ser el arraigo contrario a las normas internacionales de derechos humanos5.
Siguiendo con el tema de las obligaciones a que está sujeto el Estado Mexicano en el
plano de las normas internacionales de derechos humanos, vale la pena hacer
referencia a las observaciones finales que el Comité contra la Tortura de las Naciones
Unidas formuló a México en Noviembre de 2012, en las que expresa su preocupación
por las denuncias de actos de tortura y malos tratos a personas arraigadas, algunas
de ellas inclusive en instalaciones militares; el Comité señala que el arraigo ha
fomentado el uso como prueba de confesiones presuntamente obtenidas bajo tortura6.
El Comité también hizo referencia a la Recomendación 2/2011 de la Comisión de
Derechos Humanos del Distrito Federal en el que se denuncia la inobservancia de las
medidas de control del arraigo, la falta de control efectivo sobre las actuaciones del
Ministerio Público y la falta de criterios de proporcionalidad en la determinación del
periodo de arraigo.
De esta forma, a la luz de la interpretación del artículo 2 de la Convención contra la
Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, el Comité reitera a
México que debe eliminar la figura del arraigo tanto en la legislación como en la práctica y
a nivel federal7 y estatal.
4
AMNISTÍA INTERNACIONAL, Información de Amnistía Internacional para el examen periódico universal, EPU, de la
ONU, 17° sesión del grupo de trabajo para el EPU, octubre-noviembre 2013, p.7.
5
El Informe del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal realizado a México en octubre de 2013 se puede
consultar en: http://www.hchr.org.mx/files/informes/EPU2013/InformeGpoMxEPU_ES.pdf
6
CONVENCIÓN CONTRA LA TORTURA Y OTROS TRATOS O PENAS CRUELES, INHUMANOS O
DEGRADANTES, Observaciones finales sobre los informes periódicos quinto y sexto combinados de México, adoptadas
por el Comité en su 49° periodo de sesiones (29 de octubre a 23 de noviembre de 2012), Pág. 4, párr. 11
7
En días pasados la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió que sólo el Congreso de la Unión tiene
facultades para legislar en materia de arraigo. En próximas sesiones la Corte seguirá dando discusión en
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Es confuso (y lamentable) que existan de manera simultánea esfuerzos en una supuesta
tónica de principios de Estado democrático de derecho; por un lado, determinar mayores
garantías para víctimas, para imputados y por otro lado pervivan en nuestro sistema
jurídico instituciones anómalas en términos de derechos humanos. El derecho a la libertad
personal y a la circulación, a la presunción de inocencia, el principio de legalidad, el
derecho a un debido proceso, el derecho al honor y a la reputación, a un recurso legal
efectivo y a la integridad física y mental de las personas, todos ellos reconocidos en
tratados internacionales de los que el Estado Mexicano es parte, quedan en abierto
choque con la figura del arraigo.
torno a algunos amparos en revisión que tienen que ver con arraigo, por lo que conviene seguir con atención
las argumentaciones que vayan construyéndose acerca del tema.
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