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Quienes somos?
La Sociedad Nacional de Radio y Televisión, es una persona jurídica sin
fines de lucro, que representa a las más importantes cadenas nacionales
privadas de radio y televisión de señal abierta.
Las radios y canales de televisión abierta, son medios de comunicación
de alcance libre y gratuito para toda nuestra población; brindando cultura,
información y entretenimiento.
Somos empresas de capital 100% privado, que cumplimos nuestras
obligaciones frente al Ministerio de Transportes y Comunicaciones y el
Estado. Nuestro único ingreso es la publicidad comercial que difundimos.
Quiénes somos?
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Frecuencia Latina
América Televisión
Panamericana Televisión
Andina de Radiodifusión – ATV
Global Televisión
Radio Mágica
Radio Felicidad
RPP Noticias
La Zona
Studio 92
Ritmo Romántica
La Inolvidable
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Corazón FM
Radio Capital
Radio Moda
Radio Oasis
Oxígeno
Radiomar
Nueva Q
Radio Planeta
Radio Inka AM
Los titulares de los servicios de radiodifusión realizamos una importante
inversión para llevar nuestras señales a todo el país. En el caso de la
televisión, nuestros asociados han llevado adelante la inversión necesaria
para la implementación de la Televisión Digital Terrestre – TDT, en un plan
establecido por el Estado y que se ha cumplido a cabalidad; siendo ejemplo
para otros países. No hemos necesitado apoyo económico alguno por parte
del Estado.
Desarrollamos en forma permanente campañas sociales a favor de diversos
sectores de la población en situación de emergencia y apoyamos
difundiendo campañas de bienestar social. Todos los años se difunden vía
nuestras señales asociadas las campañas “De buena onda” y “Teletón”, con
importantes montos recaudados.
Somos un servicio regulado por el Estado, de acuerdo a lo señalado por la
Ley de Radio y Televisión y su Reglamento.
En cumplimiento de la Ley, todos los medios de comunicación deben cumplir
con el horario familiar (de 6.00 a 22.00 horas) y dentro de éste, establecer un
horario de protección al menor.
La Ley también obliga a las radios y canales de televisión de señal abierta, a
contar con un Código de Ética y un procedimiento de atención a los reclamos
que pudieran presentar nuestros usuarios (televidentes u oyentes);
procedimiento que debe ser agotado antes de iniciar las denuncias ante el
Ministerio de Transportes y Comunicaciones. El Estado entonces, promueve
la autorregulación.
En el caso de los asociados de la SNRTV, además de contar con el Código
de Ética, el primero que mereció la aprobación del MTC; contamos con un
Pacto de Autorregulación, marco para el desarrollo de nuestras actividades.
Son criterios adicionales a los que impone la Ley de Radio y Televisión y que
resultan de obligatoria observancia para todos nuestros asociados.
Contamos con un mecanismo de atención de reclamos y quejas que opera
con absoluta independencia y que cuenta con dos instancias. Es un
procedimiento rápido y eficiente que ya ha emitido sendas Resoluciones
imponiendo sanciones y estableciendo criterios que nuestros asociados han
acatado en forma estricta y sin reparos.
La autorregulación funciona.
Hace unos meses, suscribimos la Declaración de los Principios sobre los
Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes en los Medios de
Comunicación; los que reafirmamos en este Acto.
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En cuanto al respeto a la dignidad de los niños, niñas y adolescentes,
estamos trabajando en la implementación de criterios firmes, objetivos y
concretos sobre el tratamiento de la noticia cuando involucra a niños,
niñas y adolescentes; en el caso específico de delitos de violación,
manteniendo en reserva su identidad no solo a nivel público sino de su
entorno. Lo mismo para el tratamiento de noticias en los que la comisión
del acto delictivo involucra a niños, niñas y adolescentes, siendo firme el
compromiso de nuestra Organización porque estos lineamientos se
establezcan en el más breve plazo.
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En cuanto al respeto al derecho a la no discriminación, somos firmes en
repudiar cualquier forma de discriminación de cualquier tipo; habiendo
actuado en forma severa contra los espacios televisivos que hayan
incurrido en un supuesto de discriminación.
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En cuanto a la difusión de contenidos, todos nuestros asociados cumplen
de manera irrestricta en incluir un aviso al inicio de cada secuencia, dando
cuenta si se trata de un espacio apto para todo público o en el que se
aconseja la guía paterna. Han existido sanciones ante la inobservancia de
este criterio, pero más importante que ello, existe la voluntad del medio
por autorregularse y no volver a cometer estos actos.
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En cuanto a la difusión de escenas de contenido violento, al igual que el
caso anterior, éste tipo de escenas se reservan para horarios fuera del
horario de protección al menor y el horario familiar.
En todo lo referido a los contenidos, se tiene que reconocer el importante rol
que cumple el Estado, la familia y los medios de comunicación privados.
El Estado cuenta con una licencia en cada una de las bandas existentes,
debiendo utilizar dichas licencias para difundir contenidos que promuevan la
identidad nacional y la participación de las distintas voces que integran
nuestro país.
La familia, en la enseñanza de los valores fundamentales que permitirán al
niño desarrollarse y desenvolverse en la sociedad. El respeto a los padres y
a su autoridad, para el cumplimiento de las reglas que éstos consideren
necesario impartir; el respeto a la ley y a los derechos de las demás
personas; y los patrones morales propios de cada familia.
Los medios privados, cumpliendo con la ley y ejerciendo sus actividades
dentro del marco establecido por ésta. Actuando con objetividad y veracidad;
y cumpliendo con sus deberes como empresas.
Es siempre importante recordar que la radio y la televisión se sustentan en la
credibilidad que merecen de la población. Somos medios de comunicación
regulados, que competimos por la preferencia de los consumidores con otras
plataformas de comunicación, que la tecnología ha permitido que se
encuentren al alcance de todos y que en muchos casos cuentan con mayor
preferencia por parte de los niños, niñas y adolescentes.
El acceso de los niños a las redes sociales, a páginas web de origen
desconocido y la preferencia de éstos por los canales, nos enfrentan a
plataformas de comunicación que no tienen regulación alguna.
Existen criterios técnicos por los que se puede impedir el acceso a
determinados contenidos por internet en cabinas electrónicas, recordando
que más del 80% del tráfico de internet en nuestro país, se produce desde
dichas cabinas. Lo mismo en cuanto a los contenidos de la televisión por
cable. Son plataformas desreguladas que hoy gozan de la preferencia de los
niños y sobre las que ya no existen barreras de acceso.
Por parte de la radio y la televisión, reafirmamos nuestro compromiso por la
defensa de los derechos del niño y el cumplimiento de los Principios
suscritos en noviembre pasado. Reafirmamos también nuestra disposición
para establecer criterios que coadyuven a cada vez lograr una mejor
televisión y una mejor radio.
Creemos en la autorregulación, la misma que debemos fortalecer y
promover.
Muchas gracias