Las maletas viajeras de literatura Algunas estrategias de promoción de lectura con la maleta de Literatura para personas mayores “Los años enseñan muchas cosas que los días desconocen”. Ralph W. Emerson Una caja o maleta viajera es una colección de obras–que pueden estar en diversos soportes o complementarse con videos u otros recursos–, que se presta a una institución con la que se acuerda el servicio por un periodo de tiempo determinado. Se trata de un recurso para permitir el acceso al servicio bibliotecario a aquellas comunidades que no tienen fácil acceso a las bibliotecas. Uno de los públicos que cuenta con más tiempo libre y que más puede gozar de la lectura son las personas mayores, ya que en los libros encuentran una forma de recrearse y estimular la imaginación. Esta es una de las poblaciones más retantes en lo que se refiere a la promoción de lectura en tanto que muchos no están alfabetizados y se preguntan “¿y ya para qué voy a aprender a leer?” porque asumen que leer es sólo decodificar, otros no ven y se cansan con la lectura o asocian los libros con malos recuerdos de la escuela. Por eso, con ellos lo más importante es darle protagonismo a las historias más allá del formato en que estas se presenten, mostrarles cómo es una manera entretenida de pasar el tiempo y de recrearse, de viajar a otros mundos, pero también de encontrarse con otras personas. El envejecimiento es un proceso natural que va desde el nacimiento hasta la muerte. Sin embargo, se considera que la vejez es un ciclo de vida que inicia cerca a los 60 años, aunque hay otra serie de factores que pueden hacer que una persona entre a esta etapa antes o después de esta edad (factores hereditarios, biológicos o sociales). Uno de los grandes problemas que enfrenta esta población son los prejuicios de infantilización y de enfermedad, lo cual lleva a que muchas personas mayores sean irrespetadas. Por ello, desde los años 90 la ONU ha promulgado el uso del término “envejecimiento activo” que propende por respetar los derechos de las personas mayores como sujetos activos y a quienes se les deben ofrecer posibilidades de bienestar físico, social, mental y cultural. 1 Con las sesiones de lectura buscamos apoyar a disminuir algunas de los problemas psicosociales a los que se enfrentan: apatía, resignación, miedo al rechazo, baja autoestima, sentimiento de que son inútiles. Por ello es muy importante que fomentemos el que tengan proyectos personales y que tengan actividades para manejar el ocio. En este sentido la Red de Bibliotecas del Banco de la República se ha propuesto apoyar la promoción de lectura con personas mayores con el fin de brindarles oportunidades de recreación y acceso a la cultura, sin dejar de mencionar que la lectura con esta población: 1. Ayuda a retrasar enfermedades cognitivas 2. Fomenta la socialización, el debate y la conversación entre las personas mayores 3. Eleva la autoestima y autonomía A continuación, presentamos algunas recomendaciones y estrategias para utilizar los materiales de la maleta viajera para personas mayores 1. Es usual que les gusten libros de literatura juvenil 2. Aunque los audiolibros son una buena estrategia es importante que se fije si son muy extensos, si la persona que lee tiene un tono de voz muy monótono o lee muy rápido porque esto puede distraer fácilmente a sus públicos. 3. Recuerde el valor de las canciones, las retahílas y los poemas, y use estos géneros para invitarlos a la lectura. 4. Busque temas que sean significativos para ellos, es importante pensar que a veces están cansados del oficio que desarrollaron toda su vida. Así, es posible que nos encontremos con un carpintero que no quiera volver a saber nada de la madera y esté interesado en la mecánica o en la música. 5. Las personas mayores suelen estar interesadas en entender qué les está pasando y cómo solucionar sus problemas de salud, invítelos a hacer sesiones de lectura relacionados con estos temas, con remedios caseros, lea artículos, lean libros, vean documentales sobre salud, etc. 1 Ver: Secretaria de integración social de Bogotá: Política pública social para el envejecimiento y la vejez (2010) disponible en http://www.integracionsocial.gov.co/anexos/documentos/polpublicas/VEJEZ%20FINAL%20vin.pdf 6. Recuerde que las películas que vean deben estar en español porque ellos no alcanzan a seguir los subtítulos. 7. Lea en voz alta cuentos cortos y fáciles de seguir 8. A las personas mayores les gustan mucho los cuentos sobre otras culturas, mitos y sobre historia 9. Léales los cuentos que ellos, probablemente, leyeron durante su infancia 10. Busque libros con letra grande para aquellos que son lectores autónomos 11. Haga tardes de poesía, recuerde que a las personas mayores les gusta mucho declamar y oír declamaciones 12. Invítelos a leer fábulas y coplas. 13. Aunque en algunos casos es difícil prestar libros porque se les olvida dónde los dejan o a quién se los prestan no deje de prestárselos y busque estrategias para que lean siempre en el mismo lugar: en una sala de lectura, en sus cuartos, etc. Foménteles la lectura con hábitos de tal forma que pueda tener control de los libros 14. Haga sesiones de lectura personalizada, si tiene muchas personas mayores en la misma institución busque voluntarios que le ayuden a leer a cada una de las personas mayores de forma individual. 15. Recuerde que la lectura es un acto de placer, no se preocupe por asegurarse que están entendiendo todo, preocúpese por asegurar un momento de lectura agradable, tranquilo y placentero 16. Evite estrategias escolares y que hagan que las personas relacionen la lectura con la obligatoriedad 17. Haga pausas en las que ellos puedan contar sus experiencias relacionadas con la temática de las obras: que hablen de sus abuelos, de sus sueños, etc. 18. Propicie los encuentros con otras generaciones, ya sea para que las personas mayores les lean o para que las otras generaciones lean a las personas mayores. Por ejemplo, sesiones en las que los abuelos les lean a los niños, sesiones en las que adultos leen poesía a los abuelos, entre ellos y sus allegados, etc. 19. Recuerde que las personas mayores no identifican bien los tonos brillantes, el verde, el azul y el violeta. Procure trabajar libros en los que haya muchos amarillos, rojos y negros. 20. Recuerde que las personas mayores no identifican los tonos muy altos. Procure hablarles en un tono normal pero despacio y con oraciones cortas. Disminuya sonidos exteriores que no les permitan escuchar bien la lectura 21. Diseñe actividades que sean placenteras, que mantengan la actividad mental, que los hagan sentirse autónomos y los ayuden en su autorrealización 22. Hágales saber en qué consiste la actividad, cómo se desarrollará y por qué es importante para ellos. 23. Seleccione lecturas cortas, amenas, no infantiles. 24. Recuerde que las personas mayores tienen tiempos de respuesta más largos 25. Repita las instrucciones varias veces, al inicio, durante y al final de la actividad 26. Aproveche los recursos audiovisuales, pero especialmente de imágenes fijas o muy lentas