evaluación paleoepidemiológica de la frecuencia de espina

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UNIVERSIDAD DE CHILE
Facultad de Ciencias Sociales
Departamento de Antropología
EVALUACIÓN PALEOEPIDEMIOLÓGICA DE LA FRECUENCIA
DE ESPINA BÍFIDA OCULTA Y SU POSIBLE RELACIÓN CON EL
ARSÉNICO AMBIENTAL EN LA QUEBRADA DE CAMARONES
(NORTE DE CHILE)
Memoria para Optar al Título de Antropóloga Física
VERÓNICA PATRICIA SILVA PINTO
Profesor Guía:
SR. EUGENIO ASPILLAGA FONTAINE
Universidad de Chile
Profesor Tutor:
DR. BERNARDO ARRIAZA TORRES
Universidad de Tarapacá
Santiago, Chile
2010
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
ALTU
URAS DE
E MACHU PICCH
HU CANT
TO III
“E
El ser como el maíz se ddesgranaba en
e el incansaable
gran
nero de los hechos
h
perddidos, de loss acontecimiientos
miserrables, del un
no al siete, al
a ocho,
y no una muerte, sino muchas muertes llegaba
l
a cadda uno:
m
pequeeña, polvo, gusano,
g
lám
mpara
cadda día una muerte
q se apagaa en el lodo del
que
d suburbio
o, una pequeeña muerte dde alas gruessas
entraba en cada hombre como un
na corta lanzaa
mbre asediaddo del pan o del cuchillo
o,
y era el hom
el ganaddero: el hijo de los puerttos, o el capiitán oscuro del arado,
l calles esp
pesas:
o ell roedor de las
todos deesfallecieron
n esperando su muerte, su
s corta mueerte diaria:
y su quuebranto acciago de cadaa día era
como una copa negra que bebían temblando.””
PABLO N
NERUDA
CANTO GE
ENERAL, 19950
iii
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
A mi
m hija y mi
m madre, por
p todo el tiempo
t
quee dediqué a
loss muertos más
m que a lo
os vivos…
iiii
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
AG
GRADEC
CIMIENT
TOS
A Eugenio Aspillaga
A
pro
ofesor guía de la presen
nte memoriaa, por sus correcciones
c
s,
sugerenciaas y apoyo co
ontinuo.
A Dr. Bernaardo Arriazaa tutor de esta
Al
e memoriia, por su in
nvitación a participar
p
dee
sus proyecctos, su valio
osa crítica y en especial por acogerm
me como paarte de su prropia familiaa
durante miis primeros meses en Arica.
A
A Vivien Staanden por su constantte entrega de
d conocimiiento, su paaciencia, suss
correccion
nes a mis maanuscritos y por su aco
ogida en el Laboratorio
L
de Antropo
ología Físicaa
del Museo
o Universidaad de Tarapaacá-San Migguel de Azap
pa de Arica, donde me dio un lugarr
más allá dee un mero espacio físico
o.
A Lorena Cornejo
C
y su equipo por la ayuuda prestadda en la búsqueda
b
dee
antecedenttes y por suss recomendaaciones al prresente estudio.
A Dr. Markk Hubbe po
Al
or sus enseñ
ñanzas y ayuuda en el difícil y extreemadamentee
necesario campo
c
de laa estadística.
A Dr. Jamess Watson po
Al
or la traducciión del resum
men al ingléés.
A la Dra. Marietta
M
Orttega, Directo
ora del Dep
partamento de Antropología y deel
Museo Un
niversidad de
d Tarapacáá-San Migueel de Azapaa de Arica, por hacerm
me parte deel
cuerpo doccente y en especial
e
por hacerme seentir parte in
ntegrante dell propio muuseo.
A la Dra. An
na María Caarrasco, Liliaana Ulloa, Dra.
D Julia Có
órdoba y Maariela Santoss,
por su amiistad, apoyo y por la con
nfianza que depositaron
n en mi y en mi trabajo.
A la Dra. Marcela
M
Sep
púlveda, porr posibilitar con su geenerosidad, confianza y
amistad m
mi estadía en Arica y porr colaborar con apoyo logístico dirrectamente al desarrollo
o
de esta meemoria de títtulo.
ivv
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
A Leticia Lattorre, Octavvio Lagos y Maritza Esp
pinoza, por el continuo
o apoyo a mi
m
labor, su generosidad
d, colaboracción y por hacer de cada día qque comparttimos en el
e
Laboratoriio de Antrop
pología Físicca un agradaable momen
nto.
A todo el peersonal del Museo
M
Univversidad de Tarapacá-San Miguel de
d Azapa dee
Arica y dell Departameento de Anttropología, funcionarios
f
s y profesorees, en especiial a Soledad
d
Palma por la acogida y por hacerm
me sentir parrte de esta gran
g familia que conform
man.
A mi padre Dr.
D Robinso
on Silva, porr su apoyo en
e momento
os difíciles cuando
c
todo
o
parecía im
mposible y también en
n los bueno
os, por su constante estímulo, sus
s consejoss
profesionaales en el ám
mbito de la raadiología y la edición deel manuscrito
o final.
A mi herman
no Sebastian
n Escobar, estudiante de
d arqueolo
ogía, por su ayuda en laa
edición de los manusccritos y en esspecial por sus
s correccio
ones a la bib
bliografía.
F
Finalmente,
un especial agradecimiento a Man
nuel Alarcón
n, comunicaador gráfico
o,
no sólo po
or su apoyo
o y compren
nsión en m
momentos en
n que sólo tenía mi ateención en el
e
trabajo y eel desarrollo
o de la tesis,, sino tambiién por las fotografías y la edición
n de textos y
figuras de esta memorria.
E
Esta investiggación se lleevó a cabo con el patro
ocinio econ
nómico de CONICYT
C
a
través del proyecto FONDECY
F
YT Nº 1070575 a cargo
o del investtigador resp
ponsable Drr.
Bernardo Arriaza
A
y lass coinvestigaadoras Vivieen Standen y Lorena Co
ornejo.
v
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
INDIICE DE CONTEN
C
NIDOS
Pag.
Resumen
x
Abstract
xi
Prólogo
xii
ucción
I. Introdu
1
II. Objetivvos
2.1
Objetivo prrincipal
5
2.2
Objetivos específicos
e
5
III. Probllema de Invvestigación
n
3.1
Paleoep
pidemiologiaa de la espin
na bífida ocuulta
3.2
Arsénicco y Paleopaatología
6
8
IV. Marco Teórico
4.1
Desarrrollo normall del tubo neeural y la collumna verteebral
10
4.2
Malforrmaciones co
ongénitas y defectos dell tubo neuraal
11
4.3
Arsénico
o Ambientall
14
4.4
El Arsén
nico como Agente
A
Teraatógeno
19
v
vi
UNIVERSID
U
DAD DE C
CHILE V.
Maarco Geogrráfico Cultu
ural
5.1
Contexto Geográfico
G
21
5.2
Contexto CronológicoC
-Cultural
26
5.3
Los sitios
31
VI.
Hiipótesis
6.1 Hipótesis nulaa
33
6.2 Hipótesis alterrnativa
33
VII.
Meetodología
7.1
Material
34
7.2
Método
34
VIII. Reesultados
37
IX.
Diiscusión y Conclusion
C
nes
38
X.
Reeferencias Bibliográfic
B
cas
43
XII.
An
nexo
12.1
Ficha de reggistro y anállisis
68
viii
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
INDICE
E DE TAB
BLAS Y FIGURAS
F
S
Tabla 1. Niveles
N
de co
oncentración
n de arsénico
o en los vallees
54
Tabla 2. Seegmentos affectados en el
e sacro por espina bífid
da oculta.
54
Tabla 3. Po
osibles variaantes de hiatto sacro.
54
por sexo y sitio
Tabla 4. Distribución
D
poblacionall de adultos p
s
55
Tabla 5. Ocurrencia
O
de espina bífiida oculta saacra por sitio
o y segmentos afectadoss
55
Figura 1. M
Mapa satelitaal de los vallles occidentaales
55
Figura 2. F
Fotografía paanorámica del
d valle de L
Lluta
56
Figura 3. F
Fotografía deel humedal en
e la desembocadura deel río Lluta
56
Figura 4. F
Fotografía deel valle de Azapa,
A
vista ddesde el sitio
o San Loren
nzo
57
Figura 5. F
Fotografía paanorámica de
d la Quebraada de Camaarones
57
Figura 6. F
Fotografía dee laguna acuuifera en la Quebrada
Q
dee Camarones
58
Figura 7. M
Mapa satelitaal de los sitio
os Lluta 54 y Azapa 1400
58
Figura 8. M
Mapa satelitaal de los sitio
os Camaron
nes 8 y Camaarones 9
59
Figura 9. F
Fotografía deel sitio Llutaa 54, sector del Huaylaccan
59
Figura 10. Fotografía sitio
s
Lluta 54, sector Huuaylacan
60
Figura 11. Fotografía sitio
s
Azapa 140, ladera Sur
S del Vallee de Azapa
60
Figura 12. Fotografía de
d contextos funerarioss destruidos,, por acción de huaqueo
o
61
d sitio Cam
marones 8
Figura 13. Fotografía del
61
viiii
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 14. Fotografía del
d sitio Cam
marones 9
62
Figura 15. Dibujo esquuemático dee sacros en vista
v
posterio
or
62
Figura 16. Dibujo esquuemático dee variantes normales
n
dell hueso sacro
o
63
Figura 17. Espina bífid
da oculta saccra. Sitio Caamarones 8 Tumba
T
A2
63
Figura 18. Espina bífid
da oculta saccra. Sitio Caamarones 9 Tumba
T
12
64
Figura 19. Espina bífid
da oculta saccra. Sitio Caamarones 9 Tumba
T
39
64
Figura 20. Espina bífid
da oculta saccra completa. Sitio Azap
pa 140 Tum
mba 36
65
Figura 21. Gráfico com
mparativo de
d la frecuencia de espin
na bífida ocuulta por sitio
65
Figura 22. Hueso sacro
o vista posteerior. Sitio Lluta
L
54 tum
mba 20
66
Figura 23. Hueso sacro
o vista posteerior. Sitio Azapa
A
140 tuumba 38
66
Figura 24. Gráfico com
mparativo de
d la frecuencia de espin
na bífida ocuulta
67
ixx
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
RESU
UMEN
La quebrada de
d Camaron
nes, ubicada en la XV Región
R
de A
Arica y Parin
nacota en el
e
extremo norte
n
de Chiile, se caraccteriza por su
s ambiente desértico, m
marcadamen
nte arsenicall,
poblacionees habitando
o el área hacce más de 7.0000 años y evidencia
e
dee arsenicismo
o crónico en
n
las poblaciiones prehisspánicas y actuales.
a
La exposición
n crónica al arsénico prroduce daño
o
multisistém
mico, y puede inducir malformacio
ones congén
nitas especiialmente relacionadas al
a
desarrollo del tubo neural, entre laas cuales la espina
e
bífidaa es una de llas más com
munes.
na muestra prehispánicca de 120 individuos adultos, en busca dee
Se analizó un
evidencia de espina bífida
b
oculta sacra en las coleccio
ones: Camarones 8, Caamarones 9,
9
Azapa 1400 y Lluta 544, depositad
das en el Museo
M
Univeersidad de T
Tarapacá dee Arica- San
n
Miguel de Azapa. El diagnostico se consideró positivo cuando se encuentran afectadas al
a
menos la S1,
S S2 y/o S3. Se propone como hip
pótesis que la
l frecuenciaa de espina bífida ocultaa
está relacio
onada con laa exposición
n crónica al aarsénico amb
biental.
Lo
os resultadoss arrojan quue la muestra en estudio proveniiente de la costa de laa
quebrada de
d Camaron
nes registra una frecuen
ncia en porrcentaje de espina bífid
da oculta deel
13,5%, freente a la mueestra contro
ol de los valles Azapa y Lluta
L
con un
n 2,4 % dell total de loss
adultos esttudiados. Dado que se trata de muuestras conttemporáneass (700 al 1.5540 d.C.), en
n
teoría no existirían diferencias
d
significativaas en dieta o conducttas que puudieran estarr
generando
o tales diferrencias, lo que junto a los datoss obtenidos respaldan la hipótesiss
ambiental propuesta.
x
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
ABST
TRACT
Th
he Camaronees River Vaalley, locatedd in Region XV of Aricca and Parin
nacota in thee
extreme no
orth of Chille, is characterized by itts arsenic marked
m
envirronment and
d arid deserrt
with human inhabitation for th
he past 7,0000 years. Evvidence exists for chro
onic arsenicc
poisoning in both preh
hispanic and
d present po
opulations reesiding in th
he area. Chrronic arsenicc
exposure causes muulti-systemic problems, and can induce con
ngenital maalformationss,
especially associated
a
w the devvelopment o
with
of the neurall tube, of w
which spina bifida
b
is onee
of the mosst common forms.
On
ne-hundred and twenty prehistoric adult individ
duals were aanalyzed forr evidence of
spina bifidda occulta of
o the sacruum in skeleetal sampless from the sites of Caamarones 8,
8
Camarones 9, Azapa 140 and Llluta 54, helld in repository at the Museo Universidad dee
Tarapacá de Arica- San
S Miguel de Azapa.. A diagnossis was con
nsidered po
ositive when
n
minimally S1, S2 and/
/or S3 weree affected. T
The hypothesis tested iis that the frequency
f
of
spina bifidda occulta in
n these samp
ples is the result
r
of elevvated expossure to arsen
nic from thee
environmeent.
Th
he results identify samp
ples from th
he Camarones coast witth a frequen
ncy of spinaa
bifida occuulta of 13.5%
%, compareed to the co
ontrol samplle from the Lluta and Azapa
A
Valleyy
with a frequency of 2.4%.
2
Giveen that thesse were con
ntemporaneo
ous sampless (700-1,5400
A.D.), therre should not
n have beeen any signiificant differrences in diiet or other factors thaat
would havve produced
d such differrences in frrequencies. The
T results support thee hypothesiss
for an asso
ociation with
h environmeental exposuure.
x
xi
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
PRÓL
LOGO
Esta memoria de título see enmarca ddentro del proyecto FO
ONDECYT Nº 10705755
denominad
do “Bioaqueología de Poblacioness Chinchorrro, Norte de Chile: Estudio de lass
Condicion
nes de Saluud en Ambientes Eccotóxicos, Mediante
M
ell Análisis Arsenical y
Osteopato
ológico en Restos
R
Mom
mificados y Esqueletalees” de los in
nvestigadorees Bernardo
o
Arriaza, V
Vivien Stand
den y Loren
na Cornejo. Proyecto que
q busca verificar
v
los efectos a laa
salud de laas poblacion
nes humanass prehistóriccas de la pro
ovincia de A
Arica, por la presencia
p
dee
arsénico en
n el ambien
nte, a través del estudio
o de los niveles de arséénico actualees, en aguass,
suelos y plantas
p
de lo
os valles dee Lluta, Azaapa, Vitor y Camaronees, contrastándolas con
n
distintas muestras
m
d momias y a travéés análisis de paleopaatologías óseas
de
ó
como
o:
malformacciones congéénitas, anem
mias y probleemas en el crrecimiento y desarrollo óseo.
La presente memoria
m
de título inten
nta aportar al proyecto
o antes meencionado, a
través de la
l formulaciión de una problemáticca puntual dentro
d
de laa gran gamaa de posibless
patologías producidass por el arrsenicismo crónico. Paara ello se realizó unaa exhaustivaa
revisión biibliográfica sobre las co
onsecuenciaas del arseniicismo crón
nico, concluyyéndose quee
las patologgías mejor relacionadas
r
al arsenicissmo crónico
o son las refferidas a un
na falla en el
e
desarrollo del tubo neeural y de esttas la más frrecuentes ess la espina bíífida oculta,, que aunquee
parece fáciil de analizarr presenta im
mportantes desafíos a nivel
n
metodo
ológico, debido a la faltaa
de consensso en ese ám
mbito.
xiii
UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
I.
INTRO
ODUCC
CIÓN
Ho
oy en día sab
bemos, graciias a estudio
os epidemiollógicos, que existe un siinnúmero dee
contaminaantes ambientales, que acarrean ddesfavorables consecuen
ncias a la salud
s
de lass
poblacionees afectadas. Muchos de estos contaminan
ntes son p
producto dee la acción
n
antropogén
nica (actividdad minera, industrial y uso de peesticidas, en
ntre otros), a las que see
suman sustancias tóxiccas de origen natural, deentro de las cuales el metaloide arséénico es uno
o
de los máss comunes (C
Castro, 20044; Cornejo ett al., 2003; Figueroa,
F
2001; WHO, 2005).
2
Un
na de las áreas más ecottóxicas de Chile, corresp
ponde a la qquebrada de Camaroness,
ubicada en
n el extremo
o Norte del país en la X
XV Región de
d Arica y P
Parinacota; se caracterizaa
por su am
mbiente marrcadamente desértico, con
c niveles de arsénico
o en el aguaa que varían
n
según la ép
poca del año
o y el sectorr a lo largo del valle, en
n un rango dde 1.000 a 5.100
5
μg L−11.
Estos valo
ores son muuy superiorres a los 100 μg L−1 dee arsénico een agua de bebida, quee
establece la Norma Ch
hilena 409/1.Of2005, een concordancia con loss límites estaablecido porr
la OMS y la Unión Europea
E
a trravés de la Directiva 988/83/EC (B
Bundschuh et al., 2008))
(Tabla 1).
La ruta más común
c
de in
ngreso del arsénico
a
al organismo
o
h
humano,
es a través deel
agua de beebida, el con
nsumo de allimentos contaminados y la inhalacción por víaa respiratoriaa
(WHO, 20001), ocasion
nando daño multisistém
mico, afeccio
ones a la piel, desordenees vascularess
periféricoss, neuropatíías, anemia,, hepatomegalia, hiperrpigmentació
ón, diarreass crónicas e
incremento
o del riesgo a contraer cáncer
c
(Borggoño et al., 1977;
1
Centen
no, 2002; Cornejo et al..,
2003; Man
nsilla y Corn
nejo, 2001). Además
A
traee consecuen
ncias a la rep
producción, crecimiento
o
y desarrolllo humano, ya
y que puedde inducir ab
bortos espon
ntáneos, muuerte perinatal, bajo peso
o
al nacer y malformacio
m
ones congén
nitas (Hopen
nhayn-Rich et
e al., 2000, 2003).
Alggunos elemeentos tóxico
os son definiidos como mutagénicos
m
s, cuando acctúan a niveel
celular alteerando el ADN
A
o teratógenos, cuuando interffieren con eel normal deesarrollo deel
embrión o el feto. La
L etapa de
d mayor suusceptibilidaad frente a la acción de agentess
1
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
teratógeno
os, corresponde a los períodos
p
som
mítico y preefetal, entre la 3ª y 8ª semanas deel
desarrollo embrionariio, tiempo durante el cual se pro
oduce la orrganogénesis (Posada y
Leyton, 19999).
Seggún los mod
delos propuuestos, el arssénico inorggánico cruzaa la barrera placentaria
p
y
se acumulaa selectivam
mente en el neuroepiteli
n
io, incidiend
do directameente en el desarrollo
d
dee
malformacciones conggénitas, esp
pecialmente relacionadaas con el ccierre del tubo neuraal
(Desesso, 22001; Fem, 1977; Mach
hado et al., 1999; Martin
n et al., 2003)).
Lass malformacciones congéénitas se deffinen como alteracioness estructuralles presentess
al nacimieento, resultaantes de una falla, deteención o deesviación deel desarrollo
o durante laa
embriogén
nesis. Las allteraciones estructurales
e
s pueden seer tanto a n
nivel molecuular, celularr,
tisular u orgánico
o
(Po
osada y Leyyton, 1999), siendo un
na de las fo
ormas más comunes
c
dee
malformacciones congéénitas, los defectos
d
del tubo neuraal. Estos invvolucran unaa gran gamaa
de malformaciones, relacionadas
r
s a las estruucturas de soporte y ccontención del sistemaa
ña et al., s.a.).
nervioso central (Acuñ
na de las maalformacionees más comuunes del tub
bo neural ess la espina bífida, ésta see
Un
produce por una fallaa en el proceeso de form
mación y cierrre del tubo
o neural, origginando unaa
apertura en
n la línea media
m
del arcco neural po
osterior de las vertebraas y la expossición de lass
estructurass neurales. Se
S diferenciaan dos categgorías: espin
na bífida abiierta o císticca, en dondee
la médula y/o
y las men
ninges protruuyen hacia eel exterior y la
l espina bíffida cerrada u oculta, sin
n
protrusión
n de las esttructuras neeurales pressentándose más frecueentemente en
e la región
n
lumbo-sacra (Aufderh
heide y Rod
dríguez-Marttin, 1998; Albrecht
A
et al.,
a 2007). En
E general laa
d
es esporádica y rara vez consecueencia de an
normalidadess
aparición de estos defectos
micas o rasgo
os heredadoss (Nye et al., 1999; Posaada y Leyton
n, 1999).
cromosóm
En
n algunos caasos la espin
na bífida ocuulta es desccrita como uuna anomalíía anatómicaa
que no pro
oduce maniffestaciones clínicas,
c
pud
diendo pasarr desapercib
bida durante toda la vidaa
del individ
duo afectado (Aufderheide y Rod
dríguez-Marttin, 1998; B
Boone et al.., 1985). Sin
n
embargo, la
l mayoría de
d los estudios concuerd
da en que la espina bífidda oculta com
mo tal, suelee
2
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
relacionarsse a una sin
ntomatologíía específicaa que incluuye: dolor, ddebilidad, sensación dee
hormigueo
o y/o entum
mecimiento
o de espalda y/o piern
nas; deform
midades orto
opédicas en
n
piernas, pies y/o espallda; y cambiios en la fun
nción intestin
nal, urinaria y/o sexual.
Esp
porádicamente se pressentan man
nifestaciones externas en
e la piel de
d la región
n
afectada por
p espina bífida, talees como: co
oloraciones o decoloraaciones, vellosidad, un
n
abultamien
nto por quisstes sebáceo
os o una hen
ndidura dérm
mica (Albreecht et al., 2007; Barness,
1994; Galloway y Tain
nsh, 1985; Gordon,
G
19977; Kinsman,, 2007; Saluja, 1988).
dios paleopaatológicos de
d espina b
bífida ocultaa sacra, son
n
Grran parte de los estud
netamentee descriptivo
os y aunque intentan teener un enfo
oque epidem
miológico, all determinarr
ocurrenciaa y posibless causas, no
o utilizan un
na metodollogía de diaagnóstico reeplicable. Ess
común, po
or tanto, enccontrar trabaajos que inco
orporan cassos con hiato
o sacro u otrras variantess
a la ocurreencia total de
d la patolo
ogía, sobrevvalorando suu aparición e impidiend
do definir laa
posibles caausas de su origen
o
(Barn
nes, 1994; Issidro y Malggosa, 2003).
Este estudio tiene
t
por ob
bjetivo prin
ncipal determ
minar la ocurrencia, diistribución y
c
de la espina bífida ocuulta en el hueso saccro, bajo un
u enfoquee
posibles causas
paleoepideemiológico. Para ello see propone como
c
criteriio metodoló
ógico, considerar cuatro
o
factores lim
mitantes parra su diagnó
óstico: 1) Exxiste dificulltad para esttablecer su presencia
p
en
n
infantes; 2)
2 Diferenciaar entre espiina bífida cíística versuss oculta; 3) D
Diferenciar entre espinaa
bífida ocuulta y otras anomalías producidas
p
e el crecim
en
miento y dessarrollo del arco neuraal
posterior, que no invo
olucran al tuubo neural; 44) Estableceer la presenccia del hiato sacro como
o
una varian
nte normal en
n S4-S5 y S55 por sí solaa.
Teniendo en cuenta que la etiologíaa de la espiina bífida, es
e preponderantementee
multifactorrial (genéticca, dieta y factores am
mbientales), con un siggnificativo componente
c
e
ambiental y consideran
ndo el efectto teratógen
no del arséniico; se propo
one como hipótesis
h
quee
na bífida ocuulta en el saccro de la muuestra de Caamarones ess mayor, con
n
la ocurrenccia de espin
una difereencia estadíssticamente significativa
s
, en compaaración con la muestraa control dee
3
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Lluta y Azzapa, dondee los niveless de arsénico
o, se acercan más a la norma de 10
1 μg/L-1 dee
agua.
Esta hipótesiss ambiental propuesta difiere de las teorías tradicionalees sobre lass
na mayor occurrencia dee espina bífiida oculta y busca entrregar nuevoss
posibles caausas de un
antecedenttes paleopattológicos al estudio de la problem
mática del arrsénico amb
biental en laa
región.
4
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
I
II.
2.1.
OB JETIVO
OS
Ob
bjetivo geneeral:
Esta investigaación tienee como ob
bjetivo principal deteerminar la ocurrenciaa,
distribució
ón y posiblees causas dee la espina bífida ocultta en el huueso sacro. Se evalúa laa
posible relación entree niveles dee arsénico en el ambiente del vaalle de Cam
marones y laa
r
va de resto
os humanoss
ocurrenciaa de espinaa bífida ocuulta en unaa muestra representativ
prehispániicos proveniiente de los sitios Camaarones 8 y 9; para ello se compara la
l frecuenciaa
de espina bífida ocultta con una muestra
m
con
ntrol, proven
niente de lo
os sitios AZ 140 y Llutaa
54.
2.2.
Ob
bjetivos esp
pecíficos:
2.2.1. Analizar seexo y edad y la distribución de estaas variables en la muestrra y muestraa
control.
2.2.2. Analizar la presenciaa y frecuenccia de Espiina bífida o
oculta en laa muestra y
muestra co
ontrol.
2.2.3. Comparar la ocurren
ncia de Espina bífida oculta
o
entree la muestraa y muestraa
control.
2.2.4. Proponer una metodo
ología repliccable para laa observación y estudio de la espinaa
bífida ocullta en esquelletos y mom
mias.
5
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
III. PROBL
LEMA DE
D INVE
ESTIGAC
CIÓN
3.1.
Paaleoepidemiología de la
l Espina B
Bífida Ocullta
La paleoepidemiología en
n una discip
plina científica que estuudia, aplican
ndo métodoss
de la epideemiología, laa distribució
ón, ocurrenccia y determiinantes de lo
os factores relacionados
r
s
con la sallud y enferrmedad de las poblacciones humaanas del paasado. Al igual
i
que laa
epidemiolo
ogía clásica estudia
e
la reelación causaa-efecto entrre exposició
ón y enfermeedad, bajo laa
premisa dee que las en
nfermedades no se pro
oducen de forma
f
aleato
oria; y por tanto deben
n
tener una causal,
c
que puede
p
ser dee origen sociio-cultural o natural (Ro
othman, 19887).
En
n general la paleoepidem
miología apllica el métod
do científico
o formuland
do hipótesiss,
que intentta contrastarr a través de metodolo
ogías replicab
bles. Sin em
mbargo, en relación
r
a laa
epidemiolo
ogía, la paleeoepidemiolo
ogía tiene im
mportantes limitantes qque son inh
herentes a laa
naturaleza del materiaal de estudio
o y a los méétodos de ob
bservación y diagnósticco utilizadoss.
Los métod
dos de muesstreo estadísstico tienen limitaciones
l
s y no siemp
pre pueden ser
s aplicadoss
en contexttos arqueoló
ógicos, debiido a que só
ólo contamo
os con una muestra red
ducida de laa
población.. Como reggla general, nunca se exxcavan los sitios cemen
nterios por completo y
po etáreo, dee
además, puuede existir diferenciaciión de los seectores de entierro, ya ssea por grup
género, clases socialees, castas, entre
e
otros, a los que se suman o
otros factorres como laa
reutilizació
ón de los sittios, entierro
os aislados, mala conseervación de éstos, etc., todo lo cuaal
dificulta laa representattividad de la muestra (A
Arsuaga y Perrez, 1979, W
Wood et al., 1992).
1
El material ossteológico co
onstituye, ddebido a la escases
e
de m
material mo
omificado, laa
primera fuuente de in
nformación para la in
nvestigación
n paleopatollógica, sin embargo laa
inespecifiddad de las lesiones óseas
ó
al utilizar
u
méto
odos y téccnicas de observación
n
macroscóp
pica y radioló
ógica, hace que
q los límittes entre no
ormalidad y aanormalidad
d no siempree
sean claros, los fenóm
menos pato
ológicos se confunden
c
con la variaabilidad o con
c factoress
tafonómicos que pueden simullar una pattología o enmascarar
e
otra (pseud
dopatología))
o, 1999; Orttner y Putch
hard, 1981).. Es necesarrio entoncess
(Arsuaga y Perez, 19779; Campillo
utilizar un
na metodolo
ogía consen
nsuada en paleopatolog
p
gía, que puueda ser rep
plicada, quee
6
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
permita determinar
d
la
l verdaderra ocurrenciia de afeccciones óseaas y posibillite llegar a
conclusion
nes sobre su etiología.
Lo
os estudios paleoepidem
p
miológicos deeben idealmente, contrib
buir al mejo
oramiento dee
las condiciiones de saluud de las po
oblaciones acctuales, al menos
m
al dar una voz de alerta sobree
las afeccion
nes a la saluud, que por parentesco
p
ggenético o por
p condicio
ones ambientales símiless,
pueden esstar afectan
ndo a las poblaciones
p
del presen
nte como en
n el pasado
o (Castro y
Aspillaga, 22004).
En
n contextos bioarqueollógicos mucchos casos de espina bífida ocullta han sido
o
reportadoss en diversaas regiones del
d mundo: Norte de África,
Á
Próxiimo Orientee, América y
Europa en
n diferentes períodos. En
E contrastte con los pocos
p
casoss informado
os de espinaa
bífida cístiica (Aufderh
heide y Rodrríguez-Martiin, 1998; Tuurkel, 1989). Ejemplo dee esta últimaa
es el reporrte de Dickkel y Doran (1989) quee presentan un probablle caso de espina
e
bífidaa
cística quee abarca de L3 a S2 en
n un subaduulto, con un
na data de 5500 a.C, éste
é presentaa
severos traastornos relaacionados a la patologíaa entre los quue destaca eescoliosis y atrofia
a
difusaa
en huesos largos. Otrro caso es el
e de un infa
fante (6 años) reportado
o por Castro y Bonaviaa
on una data de 3000 a.C
C., presenta el arco neural posteriorr
(1980) de Perú precollombino, co
do una 6a lum
mbar (adicio
onal) y todass
abierto dessde la 5a vérrtebra lumbaar hacia cauddal, afectand
las vértebrras sacras.
La espina bífi
fida oculta sacra
s
en co
ontextos bio
oarqueológiccos ha sido
o en generaal
dogámicos y a aislamien
nto biocultuural, ésta exp
plicación se presenta en
n
asociada a grupos end
os de Ferem
mbach (19633) para una población de
d Taforalt en Marrueccos, con unaa
los trabajo
data de 100070 a 85000 a.C. que presenta
p
unaa ocurrenciaa de espina bífida ocultta cercana al
a
33%; Rodrríguez- Marttin (1995) reeporta que el
e 30% de la población G
Guanche dee Tenerife en
n
Islas Canarrias, presentta espina bíffida; Mas-Paascual et al. (2003) para la población del Hierro
o
también en
n Islas Canaarias reporta una ocurren
ncia de 28,7 %.
Parra la población prehispánica del valle de Azapa
A
en Arrica y de Ica en Perúú,
Gerszten et
e al. (2001)) reporta un
na ocurrenccia de espinaa bífida ocuulta de 92%
%, así mismo
o
7
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Allison y colaborador
c
res (1982) reeportan quee más del 600% del totall de individuuos del sitio
o
Azapa 1400 del valle de
d Azapa en Arica, presentan espina bífida ocuulta. Ésta altta frecuenciaa
se observa en poblaaciones agro
oalfareras y en menor frecuencia en poblaaciones máss
A
19889; Bordach
h, 2006). Co
omo en todo
os los casoss
tempranas (Allison ett al., 1982; Allison,
ncionados, se
s propone que la end
dogamia sería la princcipal causa de esta altaa
antes men
ocurrenciaa.
3.2.
Arsénico y Paaleopatolog
gía
Un
no de los esttudios pioneeros en la prroblemática paleopatoló
ógica sobre la
l ingesta dee
arsénico duurante la preehistoria, co
orresponde al
a trabajo dee Borgoño y Greiber (19971), quieness
analizaron 51 muestraas extraídas de 35 mom
mias naturalees. El estudio
o dio por reesultado quee
el pelo de las momiass presentabaa concentracciones en un
n rango de 0,8-3,8 mg. de arsénico
o
por cada 1100 g. del espécimen (8--38 ppm); laa muestra dee músculo dio un rango de 0,5 a 0,99
ppm; la muuestra de huueso compaccto 9,0 ppm
m; la de hueso
o esponjoso
o 24,8 ppm; y los dientess
niveles de 1,2 ppm (A
Aufderheidee y Rodrígueez-Martin, 1998).
1
Considerando quue se debían
n
consumir cerca de do
os litros de agua diarios y que éstaa es la princcipal vía dee ingreso deel
a organismo
o, la ingestta debía serr aproximad
damente de 2 mg de As por díaa,
arsénico al
concluyénd
dose una alta
a ingesta de arsénico
o durante laa prehistoriia (Borgoño
o y Greiberr,
1971).
olaboradoress (1988) deccidieron abo
ordar la pro
oblemática del arsénico
o
Figgueroa y co
desde la paaleopatologíía, consideraando que el ambiente deel valle de C
Camarones se caracterizaa
por sus alltos niveles de de arsén
nico, se anaalizaron 31 momias naaturales del Cementerio
o
Camarones-9 perteneccientes al peeríodo tardío
o (Inca). Loss resultados indican que el 83,9% dee
u alta corrrelación con
n la edad y el
e
las momias presentabaa alguna lesiión en la pieel, teniendo una
on en men
nor porcenttaje órganoss
grado de severidad de estas leesiones; se presentaro
nes una corrrelación con
n la edad. See determinó
ó,
lesionadoss, no enconttrándose en éstas lesion
además, quue el 100% de las mom
mias presentaaba niveles de
d arsénico significativo
os en gradoss
variables dependiendo
d
o del órgano
o analizado, con un ran
ngo que va dde 0,009 a 0,59
0 μg/g., a
8
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
través de este estudiio se verifiicó la preseencia de arrsenicismo crónico
c
en el valle dee
Camarones durante la prehistoria (Figueroa et al., 1988).
Arrriaza (2005b
b) ha postullado que la práctica
p
de momificació
m
ón artificial Chinchorro
o,
la más anttigua del mundo,
m
tendrría su origeen en un arsenicismo ccrónico de la
l población
n
costera dell valle de Caamarones. Esta
E teoría se sustenta en
e el supuesto de que laa alta ingestaa
de arsénico
o habría ten
nido como consecuenccia altas tasaas de aborto
os espontáneos, nacidoss
prematuro
os, y muertee prenatal, neonatal, postneonatal
p
l e infantil,, con una consecuentee
reacción cuultural de la población, que los llevaría a momiificar intenciionalmente a sus fetos e
infantes en
n función de
d preservarr y manteneer a los ind
dividuos den
ntro del gruupo familiarr.
Práctica mortuoria
m
quee luego se exxtendería deentro de la población,
p
a otros grupo
os etáreos.
El arsenicismo
o crónico ha
h sido utilizzado en invvestigacioness arqueológi
gicas, incluso
o
marcador migracional,
m
que indicarría la residen
ncia en el vvalle de Cam
marones porr
como un m
más de 4 años, tiem
mpo que demorarían
d
en manifesstarse clíniccamente lass afeccioness
relacionadaas al consum
mo crónico de
d arsénico (Allison, 1989).
Estudios paleo
opatológico
os no han iidentificado lesiones essqueletales que puedan
n
d arsenicismo crónico
o (Aufderheiide y Rodrígguez-Martin
n,
clasificarsee como caraacterísticas del
1998), sin
n embargo, las altas co
oncentracion
nes de estee metaloidee, a las quee estuvieron
n
expuestas las poblacio
ones que habitaron
h
el valle de Camarones
C
ddurante la prehistoria
p
y
c
as teratógen
nas del arsén
nico, que afeecta en especcial el norm
mal desarrollo
o
dadas las característica
del tubo neural,
n
se essperaría obsservar una mayor
m
frecuuencia de esp
pina bífida oculta en laa
quebrada de
d Camaron
nes que en los
l valles dee Lluta o Azzapa, dondee los niveles de arsénico
o
son más ceercanos a la norma. 9
9 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
IV.
4.1.
MARC O TEÓR
RICO
Deesarrollo Normal del Tubo
T
Neurral y la Colu
umna Verteebral.
Duurante la cuaarta semana de gestación se forman
n los primorrdios de los órganos y laa
conformacción de la esstructura verrtebrada bássica, a partirr de la difereenciación dee los somitoss
y del sisteema nerviosso. Durantee este proceso los som
mitos se divviden en trres tipos dee
primordioss mesodérm
micos: escleerotomos, m
miotomos y dermatom
mos. Los esclerotomos
e
s
originan lo
os cuerpos y arcos verteebrales y con
ntribuyen a la formació
ón de la basee del cráneo
o,
los mioto
omos se diferencian en
e la muscculatura seggmentaria de
d la espald
da, y pared
d
anterolaterral del cuerrpo y los dermatomos
d
s dan lugarr a parte dde la dermiis del cuero
o
cabelludo, del cuello y del tronco (Larsen, 20003; Otárola y Rostion, 2007).
Ap
principios de
d la cuarta semana (22 a 23 días) se
s inicia la n
neurulación,, proceso dee
transformaación de la placa neurral en tubo neural, quee ocurre m
mediante un proceso dee
plegamientto hacia veentral y fussión de loss pliegues neurales
n
en
n la línea media,
m
estoss
establecen su primer contacto ell día 22. Esta fusión see produce een direccion
nes craneal y
caudal en la futura región cervvical del em
mbrión, don
nde se desaarrollaron lo
os primeross
q
so
olamente unaas pequeñass zonas no fusionadas
f
een ambos exxtremos. Lass
somitos, quedando
zonas no fusionadas se denomin
nan neuroporos craneaal y caudal. La aberturra craneal see
cierra alreddedor de loss días 24 o 25
2 de gestaciión y el neurroporo cauddal lo hace ell día 27 o 288
a nivel del somita 31 (Larsen,
(L
20003; Otárola y Rostion, 2007).
2
Haacia la octavva semana see produce laa denominad
da neurulación secundaaria, proceso
o
de formacción de la porción
p
máss caudal dell tubo neurral, que invo
olucra los niveles
n
sacro
o
inferior, co
occígeo y la extensión caudal de las cubiertas dee la médula espinal que se forman a
partir de laa prominenccia caudal (L
Larsen, 20033; Otárola y Rostion, 20007).
10
0 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
4.2.
Maalformacion
nes Congén
nitas y Defe
fectos del Tubo
T
Neuraal.
Lass malformacciones congénitas se deffinen como alteracioness estructuralles presentess
al nacimieento, resultaantes de una falla, deteención o deesviación deel desarrollo
o durante laa
embriogén
nesis. Las allteraciones estructurales
e
s pueden seer tanto a n
nivel molecuular, celularr,
tisular u orrgánico (Possada y Leyto
on, 1999).
Seggún la Orgaanización Muundial de la Salud (OM
MS) se estimaa que entre el 3 y el 5%
%
de los naacidos vivo
os presenta alguna malformación
n congénitaa, constituyendo en laa
actualidad una de las principales causas de mortalidad
m
neonatal
n
en llos países deesarrolladoss.
bortos y mo
ortinatos pro
oducidos po
or problemass
Este porceentaje estimado no incluye a los ab
durante el desarrollo embrionario
e
o, que podríía ascender a cerca del 68% (Posad
da y Leyton
n,
1999).
Lass malformacciones conggénitas tienen
d
puddiendo ser causados
c
porr
n etiología diversa,
factores ggenéticos, ambientaless y mixto
os o multtifactoriales,, que invvolucra unaa
predisposición genéticca y condicciones ambieentales deseencadenantees. Las caussas genéticass
onsables de alrededor del 18% dee las malforrmaciones ccongénitas, en
e tanto loss
son respo
factores am
mbientales sólo
s
explicarrían el 7%, las
l causas multifactorial
m
les son responsables deel
25% y el 50%
5
restantee es de etiolo
ogía descono
ocida (Posad
da y Leyton,, 1999).
La tasa de mallformacionees congénitaas de causa genética
g
ha ido en aum
mento a niveel
mundial, gracias a un mejor diagnóstico
o, distinguiéndose principalmentee anomalíass
a
c
cromosómic
cas. Las an
nomalías monogénicas
m
s
monogéniccas (mutacciones) y anomalías
involucran
n: fallas en los genes autosómicos
a
s dominantees, en geness recesivos y ligadas al
a
cromosom
ma X o Y. Un
U gran núm
mero de anom
malías son resultado
r
dee la acción de
d productoss
mutágenoss, que puedeen poner en
n riesgo la viiabilidad dell embrión o generar sín
ndromes con
n
diversos siignos clínicos. Las ano
omalías crom
mosómicas pueden afeectar a los cromosomas
c
s
sexuales yy/o autosómicos, exissten alteracciones crom
mosómicas numéricas, estructurass,
mosaicos y quimeras, que van a generar
g
diferrentes cuadro
os clínicos ddependiendo
o del tipo dee
alteración y a qué crom
mosomas afe
fecta (Posadaa y Leyton, 1999).
1
11
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Un
na de las forrmas más comunes de malformaciiones congéénitas corressponde a loss
defectos del
d tubo neuural, que alteeran a las esstructuras del sistema m
músculo-esqquelético quee
dan proteccción al sisttema nervio
oso central, pueden ocuurrir en form
ma aislada o formando
o
parte de uun síndrome. Estos deesordenes in
nvolucran una
u gran gaama de malformacioness
relacionadaas a las estruucturas de so
oporte y con
ntención dell sistema nerrvioso centrral (Acuña et
al., s.a.).
o
Deentro de las fallas del tuubo neural los grados de severidadd pueden vaariar, siendo
muchas dee estas incom
mpatibles co
on la vida. C
Cerca de la mitad de lo
os casos corrresponden a
anencefaliaa, la que consiste en auusencia o deesarrollo defficiente de ggran parte de
d la bóvedaa
craneana y por tanto la gran mayo
oría de los in
nfantes naceen muertos o mueren al corto plazo
o.
La otra miitad de los caasos corresp
ponden a falllas en el cierrre a lo largo
o del tubo neural,
n
el quee
se producee en direcció
ón céfalo-caaudal, que ddependiendo
o del nivel aafectado pueede producirr
malformacciones como
o encefaloceele, al afectarr el desarrolllo de los huuesos craneaales o espinaa
bífida cuan
ndo afecta all conducto raquídeo
r
(Acuña et al., s.a.).
s
La espina bífid
da consiste en el cierre incompleto
o en la líneaa media del arco neurall,
orías: Espina bífida abieerta o císticaa y espina bíífida cerradaa
pudiendo ddiferenciarsee dos catego
u oculta (A
Aufderheide y Rodríguez-Martin, 19998; Ghi et al., 2006). L
La espina bíffida abierta o
cística (SB
BA) es la fo
orma más severa
s
y puuede ser fattal, dentro de esta classificación see
reconocen
n tres grados de severid
dad: a) Men
ningocele: laas meninges y las raíces nerviosass
protruyen a través dee la aperturra defectuosa del arco
o neural possterior, pero
o la médulaa
M
gocele: la m
medula espin
nal junto con
n
espinal perrmanece en el canal verrtebral; b) Mielomening
las meningges protruyeen a través del
d área defeectuosa; y c)) Mielocele: La piel y laa dura madree
no cierran en el lugar del defecto
o, pudiendo ocasionar la muerte deel infante po
or infección
n,
Aufderheide y Rodríguezz-Martin, 1998; Ghi et al.,
a 2006).
ocurrida duurante el nacimiento (A
La espina bífid
da oculta (SSBO) se defi
fine como laa incompletaa fusión dell arco neuraal
mentos sacro
os. Generallmente las meninges o
posterior, que involuucra uno o más segm
n y el defecto puede passar inadvertiido durante toda la vidaa
estructurass neurales no protruyen
12
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
del individduo afectado
o. En generaal esta categgoría tiene mucho
m
mejo
or pronóstico
o, siendo en
n
muchos casos una patología
p
asiintomática, solo detecttada en exáámenes radiiológicos dee
rutina. La prevalenciaa de espina bífida en S1 es alta, prresentándosse en un 5 a 25% de laa
de y Rodríguuez-Martin, 1998).
población (Aufderheid
n
La espina bífida tiene una causa preponderrantemente multifactorrial con un
ntal (Nye ett al., 1999).. En generaal la aparición de estoss
significativvo componeente ambien
defectos ees esporádica y rara vezz consecuen
ncia de anorrmalidades ccromosómiccas o rasgoss
heredados,, aunque se ha determiinado que in
ncrementa el
e riesgo quue un infantte nazca con
n
espina bífida si en su familia
f
existeen anteceden
ntes de esta malformaciión (Acuña et al., s.a.).
Deentro de loss factores ambientales
de riesgo destaca
a
d
el eestado nutriicional de laa
mujer antees y durante el embarazo
o, la deficien
ncia de folattos en la dietta es causa directa
d
de un
n
gran porceentaje de maalformacionees del tubo neural.
n
El accido fólico sse encuentraa presente en
n
forma natuural, según orden de importancia en: cereales, legumbrees, frutas cíttricas, coless,
verduras dde hojas verd
des y oscuraas, en hígad
do de ave y vacuno,
v
y en
n menor prroporción en
n
carnes rojaas, blancas y en mariscos (Acuñaa et al., s.a.)). En Sudam
mérica precolombina el
e
acceso al acido fólico
o debió ser a través del consumo
o de alimen
ntos cultivad
dos como el
e
Phaseolus vulggaris), la quíínoa (Chenoppodium quinuua) y el maaíz (Zea mayys), y de loss
poroto (Ph
productos carneos y de
d mariscos.
obado que incorporar a la dieta alimentos ricos
r
en áciido fólico o
Se ha compro
os de este, disminuye
d
eenormementte el riesgo de aparició
ón de espinaa
consumir suplemento
maciones co
ongénitas en
n general (A
Acuña et all., s. d.). Essto ha sido
o
bífida y otras malform
ones del Centro
C
paraa el Contro
ol y la Preevención dee
demostraddo por las investigacio
Enfermedaades (CDC)), donde see calcula quue si toda mujer en condicioness de quedarr
embarazad
da consumieera diariamen
nte 400 mg. de ácido fó
ólico, se prevvendrían el 50
5 a 70% deel
total de casos de espin
na bífida y an
nencefalia (A
Acuña et al.,, s.a.).
Ottro importan
nte factor de
d riesgo am
mbiental es la exposició
ón de la mujer
m
antes y
durante el embarazo a agentes terratógenos, dentro
d
de esstos se distin
nguen agentes químicoss,
13
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
físicos e in
nfecciosos entre
e
otros,, que puedeen ser de orrigen naturaal o consecuuencia de laa
acción antrropogénica.|
4.3.
Arsénico Amb
biental
En
n Sudaméricaa las zonas más
m afectadaas por la preesencia de arrsénico corrresponden al
a
norte chileeno, noroestte argentino
o, sur peruan
no y suroestte boliviano
o, entre el paaralelo 14º y
28º sur. T
Tiene su origgen en la co
ordillera de Los Andes, encontrán
ndose princip
palmente en
n
napas freááticas, ríos y lagos, con
n una disperrsión definid
da y focalizada aunquee diseminadaa
regionalmeente y con concentracio
c
ones muy variables
v
(Caastro, 2004, 2006; Fernáández-Turieel
et al., 20055; Figueroa, 2001; WHO
O, 2005).
El norte de Chile,
C
entre los
l 17°30’S y 28°30’S, tiene un áreea de aproxximadamentee
k
de loss cuales 35..000 km2 corresponden
n a rocas cuaternariass, existiendo
o
250.000 km2,
también en
n esta zona 420 volcanees, algunos de
d los cualess se encuenttran activos (Bundschuh
h
et al., 20008). Esto condiciona algunas
a
de las caracterrísticas tóxiicas del aguua, como laa
presencia de
d boro, flúo
or, sílice, vanadio, litio y arsénico, entre
e
otros.
El arsénico en
n su forma orgánica
o
e iinorgánica tiene
t
un origgen natural en Chile, see
os de agua a través de procesos biodisuelve deesde los sueelos movilizáándose haciaa los cuerpo
geoquímicos, cambioss en el pH,, volcanismo y acción microbiológgica (Bundsschuh et al..,
n aguas subterráneas y superficialess, en los sueelos, plantass, animales y
2008), se eencuentra en
aire (Castro, 2004, 20006).
El arsénico in
norgánico se encuentraa presente en forma n
natural en los
l distintoss
ecosistemaas de los vallles de la Reegión de Arrica y Parinaacota, condiicionando laa salud de laa
población que habita la zona dessde hace 100 mil años hasta
h
la actuualidad (Arriiaza, 2005a).
Los ríos de los vallles de Azaapa, Lluta y Camarones presentaan distintos niveles dee
o Azapa el que
q presentaa concentracciones más cercanas
c
a laa norma con
n
concentracción, siendo
aproximaddamente 20 μg L−1; Cam
marones en el otro extrremo presen
nta un rango
o de 1.000 a
5.100 μg L−1, esto ess cien a quiinientas vecces más arséénico de lo
o normado como límitee
14
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
máximo, encontrándo
e
ose ademáss, en sustraatos del suuelo y en vvegetales cuultivados dee
comunidaddes rurales que
q utilizan el
e agua del río
r para regaadío (Bundscchuh et al., 2008).
2
Daado que loss efectos deel arsénico tienen una alta correlaación dosis--respuesta, a
mayor nivel de concentración de arsénico en
n el ambientte mayor vaa a ser la inggesta, mayorr
acumulació
ón en los tejjidos y por tanto
t
efectos más severo
os. Al mism
mo tiempo exxiste una altaa
correlación
n entre el tiempo de exxposición y los efectos en la salud,, es decir, mientras
m
máss
viva una persona
p
en una
u región arrsenical, preesentará mayyor número de patologíías asociadass
al arsenicissmo y mayor gravedad de
d las lesion
nes desarrollladas (Figuerroa et al., 19988; Rivara y
Corey, 19995; Ferreccio
o et al., 19988, 2000).
En
n el agua el arsénico
a
se encuentra
e
esspecialmentee en su form
ma reducida o trivalentee,
el arsenito (AS III) quue predomin
na en aguas p
profundas y en forma oxxidada o pen
ntavalente el
e
Arseniato (AS V) quue predomiina en aguaas superficiiales. En geeneral, los compuestoss
óxicos que los
l orgánico
os y el arsen
nito es más tóxico
t
que el
e
arsenicaless inorgánicos son más tó
arseniato (WHO,
(
20011). En Camaarones se prresenta princcipalmente A
Arseniato (A
AS V) lo quee
disminuye el impacto a la salud de
d la poblacción a nivel epidemiológico, si se compara
c
porr
on regiones de Argentiina que tien
nen concentrraciones de arsénico menores
m
pero
o
ejemplo co
con efecto
os para la población máss severos (Buundschuh ett al., 2008).
La ruta más común de in
ngreso del arrsénico inorrgánico al o
organismo humano, es a
bida, del consumo de alimentos
a
co
ontaminadoss y de la inh
halación porr
través del agua de beb
vía respiraatoria (Fern
nández-Turiiel et al., 22005). El arsénico
a
inggerido es absorbido
a
y
eliminado gradualmen
nte por mettilación, sien
ndo filtrado
o en los riñ
ñones y excrretado en laa
m
que los excretaados, este see
orina. Cuaando los nivveles de arssénico ingerridos son mayores
acumula en
n el tejido ectodérmico
e
, cabello, uñ
ñas, piel, huuesos, múscuulos y en meenor medidaa
en hígado y riñones (Castro, 20004, 2006; Centeno et al.,
a 2002). L
La exposición crónica al
a
arsénico in
norgánico prroduce múlttiples efectos nocivos a la salud, quue se han agrrupado en lo
o
que se den
nomina Arssenicosis o Hidroarsen
nicismo crón
nico regionaal endémico
o (HACRE),
pudiendo ser
s ordenadas según el sistema
s
afecctado:
15
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
4.3.1. Sistema
Resspiratorio:
Coriza
c
crónica,
s
sinusitis,
ffarigotraqueeobronquitiss,
onquiectasiaa, neumoníaa crónica y cáncer bro
oncopulmon
nar (Puga et
e al., 19733;
bro
Ferrreccio et all., 1998, 2000; Hopenhaayn-Rich et al.,
a 1998).
4.3.2. Sistema Digesstivo: Diarrreas crónicaas, dolor abdominal,
a
cirrosis, fallla hepáticaa,
diaabetes mellittus, carcinom
ma y angiosaarcoma (Pugga et al., 19773; Borgoño
o et al., 19777;
Ceenteno et al.,, 2002).
4.3.3. Pieel: Melanodeermia con puntos
p
leuco
odermicos, principalmeente en las zonas
z
axilarr,
ingguinal y áreeas de flexión en los miembros. Además see incluye accrodermatitiss
atrrófica,
quueratosis,
hiperqueraatosis,
paaraqueratosiss,
hipopiigmentación
n,
hip
perpigmentaación, carcin
noma de céluulas escamo
osas, carcino
oma de céluulas básales y
fib
brosis (Puga et al., 1973; Smith et al.., 2000a; Ferrnández et aal., 2005).
4.3.4. Sistema Nervvioso: Polineuritis, Neuuropatías y Retinopatíías (Puga et
e al., 19733;
Ceebrián et al., 1994).
, arterioscleerosis, card
4.3.5. Sistema cardio
ovascular: hipertensión
h
diopatías, en
nfermedadess
vassculares perriféricas, en
ndoangeítis, arteritis obstructiva,
o
síndrome de
d Raynaud
d,
isqquemias, enffermedad dee pie negro,, gangrena en
e las extreemidades, en
nfermedadess
miicrovascularees y anemiaas, (Cebrián
n et al., 19994; Puga et al., 1973, Chiou
C
et al..,
20005).
4.3.6. Sistema Urinaario: Fallas renales,
r
nefr
fritis túbuloiintersticial, ccánceres vesical y renaal
openhayn-Riich et al., 1998; Vanholdder et al., 2002).
(Riivara y Coreey, 1995; Ho
4.3.7. Sistema reprod
ductor: Altaa incidencia de abortos espontáneo
os, nacidos prematuross,
ngénitas (Ah
hmad et al..,
naccidos muerttos, bajo peeso al naceer, malformaciones con
20001; Hopenh
hayn-Rich et al., 2000).
En
n Antofagastta, II Región del norte de Chile lo
os niveles de arsénico entre
e
1955 a
1970 preseentaron unaa concentracción media ponderada de 598 μg//L-1, con un
na población
n
16
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
total expueesta de 265..000 person
nas por más de 12 años y en comuunidades ruraales por cassi
40 años (C
Cebrián et al., 1994). Duurante 1960 fueron detectadas las prrimeras man
nifestacioness
dermatológgicas, especcialmente en
n niños, seeveros casos de patolo
ogías sistém
micas fueron
n
atribuidas al arsenicismo, entre las que destacan: bro
onquiectasiaas, melanossis arsenicall,
d (episodioss
trombosis mesentérica, infarto all miocardio, isquemia y síndrome de Raynaud
vasoespástticos isquém
micos en man
nos y pies, qque se caraccteriza por cambios en la
l coloración
n
cutánea diistal, como cianosis o palidez seguuida de rub
bor intenso) (Borgoño et al., 19777;
Puga et al., 1973).
e
1994 a 1996, en laas provinciaas de Arica e
Estudios epideemiológicos realizados entre
A
y Copiapó (XV,
(
I, II y III Regionees), han con
ncluido que existe fuertee
Iquique, Antofagasta
evidencia de una relaación “dosiss-respuesta” entre el prromedio dee arsénico in
ngerido y el
e
nceres intern
nos (Vesicall, broncopuulmonar y rrenal), aumeentando estee
riesgo a contraer cán
oporcionalmente al tiem
mpo de exposición y a la dosis inggerida (Ferrreccio et al..,
riesgo pro
1998, 20000; Rivara y Corey,
C
1995).
Por otro lado
o Smith y colaboradorres (2000b) han postuulado que la población
n
na resistenccia adaptativva a los effectos en laa salud quee
indígena aatacameña, presenta un
producen llos altos nivveles de arséénico en el agua
a
de bebiida, productto de cientos de años dee
exposición
n. Para estuudiar esta hipótesis
h
Sm
mith y su eqquipo realizzaron un esstudio sobree
lesiones en
n la piel a on
nce familias residentes en
e la zona dee Chiu Chiuu, provincia de Atacamaa,
donde el agua
a
de bebiida conteníaa 750 a 800 μg/L-1 de arsénico,
a
estte grupo fuee comparado
o
con ocho familias
f
de la
l villa de Caaspana como
o grupo con
ntrol.
Dee acuerdo a los resultado
os obtenido
os se determ
minó que cuaatro de los seis
s hombress
que estuviieron expuestos al arsén
nico en aguua de bebidaa por más dde 20 años, presentaban
n
lesiones en
n la piel; no registrándose casos de mujeres maayores afectaadas y sólo dos
d casos en
n
adolescenttes. A pesarr de que la población A
Atacameña ha estado expuesta
e
a un
u consumo
o
crónico dee arsénico por largos períodos dde tiempo, no
n presentaa un númerro de casoss
alarmantess, lo que hacce plantear a los investiggadores, quee más que un
n fenómeno
o adaptativo
o,
17
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
tendría rellación a una buena nuutrición y a la ingesta de vitaminaa A en la dieta,
d
lo quee
permitiría una mayor resistencia a los efecto
os del arsén
nico. Esto quue ha sido interpretado
o
como una respuesta cultural
c
de laa población hacia un fen
nómeno end
démico que ha afectado
o
mith et al., 20000b).
la salud dee la población por generraciones (Sm
En
n 1998 a nivvel estatal se realizó un p
proyecto de desarrollo dde la línea base
b de aguaa,
alimentos y aire, el quue incluía un
n estudio de análisis de riesgo a la ssalud relacio
onado con laa
n al arsénico, la toma dee muestras para
p el agua y los alimen
ntos se realizzó en todo el
e
exposición
país y el muestreo
m
de aire sólo en
n la zona no
orte y centrro de Chile. A través dee un estudio
o
ecológico de casos y controles see relacionó las tasas dee muertes po
or cánceres internos dee
ñón, con loss niveles de arsénico. L
Los resultado
os indicaron
n
pulmón, vvejiga, hígado, piel y riñ
que la víaa de ingreso
o más comúún del arsén
nico al orgaanismo hum
mano en la zona nortee,
correspond
de al agua potable (41,7% a 85,,3%), obserrvándose un
n fenómeno
o similar en
n
Santiago y Rancaguaa (72,7% y 69,3%), para el Suur, en cam
mbio, la exxposición ess
principalm
mente a traavés de laa dieta. Laa contribucción del aiire es en general dee
aproximaddamente el 1%,
1 con excepción de laa ciudad de Copiapó do
onde esta ciffra se eleva a
un 12,2%. La mayor tasa
t de mortalidad por cánceres dee pulmón, piiel y vejiga se
s encuentraa
en la zona norte, demo
ostrándose con
c ello quee estas elevad
das tasas de muertes son atribuibless
a la expossición crónicca al arsénicco. Se concluyó que exxiste un riessgo relativo de contraerr
cánceres de
d vejiga urrinaria, pulm
món, hígado
o, riñón y laringe,
l
así también, en
nfermedadess
cardíacas, isquemias, enfermedad
des respiratorias cróniccas y dermaatosis arsen
nical crónicaa
(Castro, 20004, 2006).
En
n la reproduucción humaana diversoss estudios han
h sido reaalizados paraa determinarr
las conseccuencias dell consumo crónico dee arsénico, tanto en estudios de poblacioness
afectadas como
c
en an
nimales de experimentacción, los ressultados son
n bastante concluyentess:
aumenta laa tasa de abortos espon
ntáneos, nacidos prematturos, malfo
ormaciones congénitas
c
y
muerte prrenatal neon
natal y neon
natal. A travvés de un análisis
a
retro
ospectivo, se
s evaluaron
n
patrones de
d tiempo y localización de la mortandad infa
fantil entre 11950 y 19966, utilizando
o
estadísticass univariantees, técnicas gráficas y an
nálisis de reggresión lineaal de Poison
n. Al analizarr
18
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
las tendenccias de morttandad infan
ntil asociado
os a la expossición al arséénico en las ciudades dee
Antofagastta, por sus históricos y elevados niveles de este metalo
oide y Valpaaraíso como
o
muestra co
ontrol por presentar
p
niiveles de 1 μg/L. Los resultados iindicaron alltas tasas dee
mortalidad
d fetal, neon
natal y postn
neonatal en
n Antofagastta, en comp
paración a lo
o observado
o
para Valpaaraíso. El an
nálisis de reggresión lineal indicó un
na asociación entre la exposición
e
a
al
arsénico y la mortan
ndad fetal, neonatal
n
y postneonatal, disminucción del crrecimiento y
desarrollo fetal (Hopenhayn-Rich et al., 2000,, 2003).
El arsénico in
ngerido a traavés del aguua o los alim
mentos cruza la barreraa placentariaa,
afectando el normal desarrollo
d
deel embrión, causando malformacio
m
ones congéniitas (Ahmad
d
et al., 20001; Centeno
o et al., 20002). Adem
más como ya
y se ha mencionado,
m
incrementaa
evidentem
mente el riesggo de aborttos espontán
neos, nacido
os prematurros, bajo peeso al nacerr,
daño sistém
mico en neo
onatos y muuerte de inffantes (Milto
on et al., 2005; Ahmad et al., 2001;
Hopenhayyn-Rich et all., 2000, 20003). También el arsénico es traspassado de la madre
m
al hijo
o
en la lecche durantee el amam
mantamiento
o, producién
ndose en lactantes laas primerass
manifestacciones patollógicas, con trastornos digestivos agudos y crrónicos, segguido de toss
persistentee y signos caatarréales brronquiales, llo que al agrravarse puedde conducirr a la muertee
del lactantee (Puga et all., 1973, Ceb
brián et al., 11994).
4.4.
El Arsénico como
c
Agente Teratógeeno
En
n general se acepta que el aarsénico esttá relacionado al deesarrollo dee
malformacciones congéénitas, que afectan espeecialmente el
e tubo neurral y sus derivados, quee
s de costillaas y síndrom
incluyen deformidade
d
mes. La acciión teratógeena del arsén
nico ha sido
o
un tema dee controverssias, debido a que la graan mayoría de
d los modeelos propuesstos se basan
n
en estudio
os en animaales, a los cuuales se les inyecta vía intravenosaa e intraperritoneal altass
dosis de arrsénico inorgánico duraante el períoddo de cierree del tubo neeural, con ell objetivo dee
investigar la patogéneesis de los defectos
d
del tubo neurall. Los resulttados y conclusiones dee
h sido cuuestionados por los pro
otocolos utiilizados (Deesesso, 2001;
estas invesstigaciones han
Ferm, 1977).
19
9 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Ottros estudioss en animalees, administtran el arsén
nico por vía oral a travéés del agua y
los alimen
ntos y los reesultados haan indicado una relación
n directa en
ntre malform
maciones deel
tubo neuraal y el consuumo de arsén
nico, aunque la severidaad de las maalformacionees es menorr,
en comparración con la
l administrración vía in
nyectable dee compuesto
os arsenicalees (Desesso
o,
2001; Ferm
m, 1977).
A pesar de lo
os estudios experimen
ntales, aún no
n es aceptado del to
odo que loss
propuestos, puedan
p
aplicarse a los sseres human
nos, principaalmente deb
bido a que laa
modelos p
mayoría dee los estudio
os poblacion
nales, no lleegan a resulttados concluuyentes por la dificultad
d
que repressenta testearr cada caso e incluso detectar
d
la prresencia de espina bífid
da (Desesso
o,
2001; Ferm
m, 1977).
A pesar
p
de las controversiias el arsénicco consumid
do en altas ddosis de form
ma crónica o
en los perríodos críticcos de la em
mbriogénesis, es aceptaado como uun elemento
o teratógeno
o
fuertemente vinculado
o al desarro
ollo de defecctos del tub
bo neural (F
Ferm, 1977; Machado et
n estudios epidemioló
ógicos deteerminantes, para áreass
al., 1999), sin embargo, faltan
nicales como el Norte de
d Chile.
reconocidaamente arsen
20
0 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
V.
5.1.
MARCO
O GEOG
GRÁFICO
O CULT URAL
Co
ontexto Geo
ográfico
Seggún la divissión político
o administraativa de Chiile, desde el 8 de abrill de 2007 laa
provincia de Arica ess parte de la XV Regiión de Aricca y Parinaccota (antes I Región dee
Tarapacá), localizada en el extreemo Norte de Chile en
n la denom
minada Área Centro Surr
Andina dee América del Sur (L
Lumbreras, 1981). Com
mprende lass comunas de Arica y
Camarones, la primeraa alberga la mayor densidad poblaccional, con eel 97,5% de la población
n
total de la región (INE
E, Censo 20002).
La provincia de Arica, seegún las fro
onteras políítico geográáficas actualles, limita al
a
Norte con
n la Provinciia de Tacna en el Perú; al Sur con la
l provincia de Iquique;; al Este con
n
la provinciia de Parinaacota; y al Oeste
O
con ell Océano Paacífico, todaas del territo
orio chileno
o.
En cuanto
o a las cond
diciones clim
máticas prep
ponderantess de la zon
na, en generral, el Nortee
Grande se caracteriza por su extreema aridez, con
c un 70%
% de superficcie de desierrto absoluto..
5.1.1.Unidades
U
O
Orográficas
La provincia de Arica, específicame
e
ente, se carracteriza po
or presentarr tres zonass
das: la franja costera, la ccordillera dee la costa y laa
ecológicas o unidades orográficas diferenciad
depresión intermedia.
5.1.1.1. Franja Co
ostera:
En
n la costa impera el
e desierto absoluto con casi nulas precipitacioness,
conformán
ndose verdaaderos oasiss en las zon
nas de deseembocaduraa de ríos o gracias a laa
existencia de napas freáticas llamadas
l
C
Chimbas (Saantoro, 20001). La veegetación ess
principalm
mente de tipo
o xeromorfa
fa, como el churco,
c
cacttáceas, palo negro y yuyyo, abundan
n
aves marin
nas y terresstres como pelícanos, aalcatraces, cormoranes
c
y piqueros,, además, see
presentan mamíferos como lobo
os marinos, chungungoss, chillas y m
murciélagos entre otross
(Carmona,, 2006). Se presentan
p
am
mplias playaas sólo interrrumpidas po
or el farellón
n costero dee
21
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
la cordillerra de la costta que cae abrupta
a
al m
mar, el interm
mareal preseenta zonas de
d roqueríoss
donde se albergan grran cantidad
d de mariscos y crustácceos, graciaas a la corriiente fría dee
Humboldtt y a los co
omponentes orgánicos aportados por
p los ríoss y quebrad
das, abundan
n
además, grran variedad
d de peces como la an
nchoveta, jurrel, atún, alb
bacora, cabrrilla, caballaa,
lenguado, etc. (Carmo
ona, 2006; Saantoro, 20011).
5.1.1.2. Cordilleraa de la Costta:
Maacizo muralllón montañ
ñoso que naace en el ceerro Camaraaca a 20 Km
m. al sur dee
Arica, con una altura media
m
de 20000 m.s.n.m.. Su frente oriental
o
emp
palma suavem
mente con laa
q el occiddental cae ab
bruptamentte al mar im
mpidiendo laa
depresión intermedia,, mientras que
n de las plan
nicies costeraas (Carmonaa, 2006). Laa gran alturaa del cordón
n montañoso
o
formación
actúa com
mo un biom
mbo impidieendo el passo de las neblinas
n
cossteras haciaa el interiorr,
acentuando
o las condiiciones de aridez. El frente occidental presenta vegetaación dondee
predominaan las cactááceas y albeerga animalees como ell zorro, avees, lagartijass e insectoss,
gracias a laa presencia de
d neblina co
ostera o cam
manchaca (Santoro, 2001).
5.1.1.3. Depresión
n intermed
dia:
Se caracteriza por presen
ntar ampliass planicies o pampas qque aumentaan en alturaa
suavementte hacia el oriente hassta encontraarse con la precordilleera, presentaa una alturaa
media apro
oximada de 1400 m.s.n
n.m. y un an
ncho promed
dio de 30 K
Km., con con
ndiciones dee
hiperaridezz debido a las nulass precipitacciones, la única hum
medad proviiene de lass
camanchaccas que perm
miten la exisstencia de un
n mínimo de vegetación
n como el cllavel del airee
(Carmona,, 2006; Santo
oro, 2001).
En
n la provinccia de Arica el desierto absoluto de
d la pampaa es cortado
o por cuatro
o
quebradas o valles trransversales creados po
or el curso de los ríoss Lluta, Azaapa, Vitor y
p
que desemb
boca al marr,
Camarones, de los cuuales sólo el río Lluta lleeva caudal permanente
d presenttan un curso
o intermiten
nte con bajaada de caud
dal en época estival. Laa
los otros dos
existencia de los vallles y quebrradas brind
dan agua duulce y posib
bilitan la existencia dee
22
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
vegetación
n como la to
otora, el tom
matillo, el chañar, el alggarrobo del norte y el pimiento, laa
presencia de
d fauna como culebrass, pequeños marsupiales, batracios,, murciélago
os y lagartoss,
aves como
o el caudillo
o de cresta blanca
b
y la dormilona
d
d nuca rojizza del nortee, entre otrass
de
(Carmona,, 2006; Santo
oro, 2001).
5.1.2. Los Valles Transverssales
Deebido al esp
pecial interéss de este estudio por trres de los vvalles de la provincia
p
dee
Arica, el valle
v
de Lluta, Azapa y la quebradda de Camaarones (Figuura 1), serán
n descritos a
continuaciión:
5.1.2.1.
El Vallle de Llutaa
Es una cuencaa hidrográficca con una hoya
h
de 34550 Km2, enttre las coord
denadas 18°18°30' S. y 70°20'-699°22' W. Naace en la co
ordillera de Los Andes a los piess del volcán
n
d
recibee distintos afluentes
a
quee
Tacora, deescendiendo hacia el surr por más dde 80 Km. donde
le permiten
n mantener un caudal permanente
p
que desemb
boca al marr (Santoro et al., 2000a).
El Lluta es
e el único río
r exorreico de la provvincia, alcan
nza sus mayores crecidaas durante laa
época estivval producto
o de las precipitacioness alto andinaas, sus princcipales tributarios son el
e
río Azufre y las Quebrradas de Carracarani, Co
olpitas y Soco
oroma.
or del valle de Lluta el clima es hip
perárido, con
n marcadas oscilacioness
Haacia el interio
térmicas en
ntre el día y la noche. See encuentra conformado
o por estrecchas terrazass expuestas a
constante erosión, alcanzando un
na altitud aprroximada dee 1800 m.s.n
n.m., el suello es de tipo
o
a
arrasttran consigo
o gran cantiidad de salees y mineraales como el
e
limoso, saalino y sus aguas
boro, merrcurio y arsénico, entree otros. A medida quee el valle see acerca a la costa, lass
condicionees son much
ho más favo
orables, con
n temperaturras estables y mayor huumedad, con
n
tierras férti
tiles que posibilitan la aggricultura, quue en la actuualidad se exxtiende por más
m de 27000
hectáreas ((Santoro et al.,
a 2000a ) (Figura
(
2).
En
n la costa la desembocadura crea un
n humedal, en el sectorr denominad
do playa Lass
Machas, 10 kilómetro
os al norte del centro de la ciudaad de Aricaa, abarca un
na superficiee
23
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
aproximadda de 300 heectáreas. Su fuente hídrrica la consttituye el Río
o Lluta y aguuas freáticass
que formaan pequeñas vegas, la temperatura p
promedio an
nual alcanzaa los 18º C. La
L flora estáá
constituidaa por 20 esp
pecies entree las que desstacan la Grrama salada (Distichlis sppicata), Aliso
o
(Tessaria intergrifolia),
i
Chingoyo (Pluchea chiingoyo), Toto
ora (Scirpuss sp.), Chilcca (Bacchariis
petiolata), C
Cola de cabaallo (Equisetuum giganteum)) y Cola de zorro (Cortaaderia speciosaa) (Figura 3),
además, alb
berga una grran diversid
dad de especiies de avifaauna acuáticaa local y/o migratoria.
m
El agua del río
o Lluta es saalobre, con alto
a contenido de arsén
nico y boro del
d orden dee
l calidad dde los suelos y limita el
e
hasta 200 y 40 mg L-1 respectivaamente, lo que afecta la
p
de la mayor dispo
onibilidad de
d agua paraa riego, debido a que laa
desarrollo agrícola a pesar
dad a partirr de una co
oncentración
n
mayoría de los cultivos presentaan problemaas de toxicid
o. El arsén
nico por su parte limita el uso deel agua paraa
superior a los 3 mg L-1 de boro
consumo humano,
h
todo lo cual crea
c una desventaja de Lluta respeecto a Azapaa a pesar dee
compartir característiccas similares en cuanto a clima y sueelo (Bundsch
huh et al., 2008).
5.1.2.22.
El Vallle de Azap
pa
El suministro hídrico del valle de Azzapa provien
ne del río SSan José, quue nace en laa
oniente del Altiplano
A
A
Andino.
Haccia el interio
or los cursoss
cordillera Central en el límite po
c
por presenttar cauces estrechos,
e
en
ncajonados y sinuosos y
superiores del río se caracterizan
ducidas, rod
deado de un clima hiperárido. En suu
un caudal permanentee pero en cantidades red
de su caudaal permanen
nte, presenttando napass
curso meddio el cauce se ensanccha y pierd
subterráneeas que perm
miten la form
mación de suuelos fértiless limo- aren
nosos. Sólo en
e los mesess
estivales del
d invierno altiplánico, el caudal del
d río en fo
orma de torrrente lograa alcanzar suu
curso inferrior y llegar al mar (Cam
mpos et al., 2007).
2
En
n el curso medio
m
e infeerior del río
o San José en el valle de Azapa, las
l benignass
temperaturras de aproxximadamentte 19,3°C en
n promedio, la humedad
d provenientte de la costaa
y un climaa con influen
ncia tropicall, posibilitaan el cultivo de diversoss productos tropicales y
subtropicaales como yuuca, porotos, camotes, zapallo, ají, tomate, alggodón y árb
boles frutaless
como el palto
p
y el oliivo (Carmon
na, 2006) (F
Figura 4). Cabe
C
destacar que las aguas
a
del río
o
24
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
presentan las menoress concentracciones de arrsénico y bo
oro de la reggión (Bund
dschuh et al..,
2008).
5.1.2.33.
La Qu
uebrada de Camaronees
Es un profund
do y largo cajón
c
confin
nado entre paredes
p
de m
más de 1000 metros dee
ordillera de la costa, co
on un ancho
o variable dee 700 a 10000
altura que cortan la paampa y la co
or 17 km., su
s suministrro hídrico proveniente
p
del río Cam
marones, quee
m. que se extiende po
olivia en la cordillera de
d los Andees, con el ap
porte de loss
nace en laa zona limítrofe con Bo
arroyos A
Anocarire, Sorosura,
S
S
Surire
o C
Choquenantaa, Yorusca,, Mullure, Orcume y
Guayguasee. En el currso medio de
d la quebrrada se encuuentran sem
mbrados y una
u mina dee
arsénico h
histórica, en
n sus último
os 10 Km de Cuya al mar, manttiene rumbo
o a WSW y
conserva ssus caracteríísticas de caajón confinado entre altas
a
paredess hasta llegaar a la costaa
(Shiapacasse y Niemeyyer, 1989) (F
Figura 5).
e recurso hídrico
h
más importan
nte de la zona
z
siendo
o
El río Camarrones es el
humano. Nace
N
de loss
fundamenttal para la actividad agrícola, ganadera y consumo h
tributarios, ríos Ajataama y Caritaya, de la cabecera altiplánica
a
y es un currso de aguaa
o, con un caaudal y escurrrimiento quue no siemp
pre alcanza a desembocaar en el marr.
endorreico
Es un sisttema hídrico
o cuyo caud
dal y caracteerísticas fisiccoquímicas varían estaccionalmentee,
además, existen variaaciones en distintos puuntos de suu curso deb
bido a la presencia
p
dee
menores, prrincipalmentte, vertientess (Bundschuuh et al., 20008). Desem
mboca al marr
afluentes m
en una lagguna litoral o albufera que
q sólo com
munica superficialmentte con el maar cuando el
e
escurrimiento del río alcanza
a
el mar
m (Figura 6).
6 La desem
mbocadura se ubica a 1000 Km al surr
denadas 19° 12’ S y 70° 17’ W. don
nde se encueentra una pllaya de 14000
de Arica, een las coord
m de longgitud. Hacia el norte destaca com
mo acciden
nte geográficco una pun
ntilla rocosaa
denominad
da Punta No
orte y haciaa el sur la prresencia de roqueríos
r
y acantilados,, que son en
n
conjunto laa extensión más occiden
ntal de la quuebrada (Shiapacasse y N
Niemeyer, 19989).
Acctualmente la
l quebrada presenta poblados disspersos con una poblacción que no
o
supera los 60 habitanttes. Entre esstos poblado
os se cuentaan Esquiña, Illapata y Camarones,
C
y
25
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
las localidaades de Talttape y Huan
ncarane. Aun
nque todos habitan
h
la quuebrada, la magnitud
m
dee
la exposicción al arsén
nico por ell agua de b
bebida es muy
m diferen
nte en cada una de lass
localidadess, la poblaciión de Esquuiña consum
me agua principalmente de vertientees, de menorr
contenido de arsénicco, mientras que la p
población de
d Illapata, Camaroness, Taltape y
ne consume mayormentte agua del rrío Camaron
nes, con alto
o contenido de arsénico
o.
Huancaran
En ambas localidades,, la concentrración de esste elemento
o en agua dee bebida sob
brepasa entree
6 a 125 veeces los valo
ores recomeendados porr la OMS y la NCh 4099/1.Of2005 (10 μg L-1))
(Bundschuuh et al., 20008).
5.2. Contexto
C
Crronológico--Cultural
La prehistoria en la proviincia de Aricca se remon
nta hace más de 9000 años,
a
cuando
o
los primerros grupos humanos se estableccen en la costa,
c
especcialmente en
n zonas dee
desembocaaduras con una
u econom
mía mixta cazzadora-reco
olectora depeendiente priincipalmentee
de los reccursos maríítimos y dee ave-faunaa (Standen, 1997). Los recursos de valles y
quebradas fueron exp
plotados tem
mpranamentte por las poblaciones
p
n
costeras quue realizaban
circuitos trranshumántticos hacia el
e interior usando
u
estoss corredoress naturales, pero no fuee
hasta el co
omienzo de la
l agricultura hace unos 3000 años que se posiibilitó el estaablecimiento
o
de las pobllaciones hum
manas al inteerior de los valles.
Alrrededor del 500 d.C. see consolida el
e desarrollo
o agrícola co
on el estableecimiento en
n
los valles, especialmen
nte Lluta y Azapa,
A
de viillorrios y caaseríos dispeersos asociad
dos a cursoss
q posterio
ormente se consolidan
n como aldeas con un
na economíaa mixta quee
de agua, que
explotaba de forma efficiente los recursos
r
dell mar y desaarrollaba la aagricultura con
c sistemass
ntoro et al..,
simples peero eficientees de irrigaación (Chacama, 2001; Santoro, 22001, en San
2001). Haccia el 1100 al 1470 d.C
C. y 1471 aal 1535 se suceden
s
en Arica los denominados
d
s
períodos IIntermedio Tardío y Taardío respecctivamente, caracterizaddos por la presencia
p
dee
grupos loccales de orgganización social
s
segmentada que controlaban
n la zona de
d los valless
desde el littoral al interrior, con una economía mixta agro--marítima quue incluyó el
e cultivo deel
26
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
maíz, ají, p
poroto, man
ndioca, cam
mote y zapalllo con la explotación
e
de la gran variedad dee
peces, y m
mariscos de laa costa (Santtoro et al., 22000a; Santo
oro, 2001, en
n Santoro et al., 2001).
A partir del período formativo
f
e los And
en
des se desarrolla un sistema dee
q permitió
ó el intercam
mbio de prodductos de distintos pisoss
complemeentariedad ecconómica, que
ecológicoss y el establlecimiento de
d relacionees interétniccas y de paarentesco. Esto
E
ha sido
o
explicado a través de modelos
m
de movilidad eentre los quee destacan:
5.2.1. Mo
odelo de veerticalidad (Murra, 19975): Modeelo basado en datos etnohistóricoss
sob
bre la comuunidad Lupacca (Oeste deel lago Titicaca), que se basa en la capacidad
c
dee
exp
plotar en fo
orma directta distintos pisos ecoló
ógicos (arch
hipiélagos), a través deel
envvío de colon
nos hacia diversas
d
regio
ones, princiipalmente por medio del tráfico dee
carravanas de recuas dee llama (Laama glama) (autosuficiiencia), perrmitiendo laa
obtención de gran
g
variedaad de recurssos que lueggo son remiitidos al cen
ntro políticoministrativo
o de la comuunidad, las caravanas servían
s
las n
necesidades internas deel
adm
gruupo étnico.
5.2.2. Mo
ovilidad Giratoria
G
(D
Dillehay y Núñez, 1995):
1
Es un modelo
o diacrónico
o
deffinido para los diferenttes períodoss y fases dee la cronología del áreaa Centro-Surr
An
ndina, que funciona a través de Asentamieentoss-ejes (polos de estabilidad).
Pro
opone un sistema aggroganadero
o, con cap
pacidad de producir, trasladar e
inttercambiar
productos
Co
omplementación
interregio
onalmente,
nómica
econ
entre
posibilitaddo
pasttoreo
y
a
travvés
caravaneo
de
laa
(dualidad
d
reb
baño/caravaana).
El Principio Giratorio
G
p
plantea
la exxistencia dee ejes princcipales alimeentados porr
circuitos entrre ejes secuundarios (m
movimiento en espirall), en donde los ejess
mbio o capttación de reecursos y loss
priincipales acttúan como lugares paraa el intercam
ejees secundariios como lugares
l
de apoyo logíístico para la mantención de lass
carravanas.
27
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Deebido a quue las mueestras estud
diadas correesponden a los períodos Medio
o,
Intermedio
o Tardío y Tardío
T
estos serán descrritos con maayor profund
didad a conttinuación:
5.2.3. Período Medio
M
u Ho
orizonte Tiw
wanaku (5000 - 1.000 d.. C.).
Haacia el 5000 d.C. las comunidad
des agropasstoriles quee habitaron
n los valless
occidentalees de la provvincia de Arrica, en espeecial Azapa, se caracteriizan por preesentar en suu
economía y manifesstaciones esstilístico-cultturales unaa fuerte inffluencia de la Culturaa
Tiwanaku, la que se desarrolla
d
en
n la cuenca del lago Titikaka.
T
Su iinfluencia se manifiestaa
mente con un
u mayor desarrollo
d
a
agrícola
gan
nadero y co
on la incorp
poración dee
principalm
elementos altiplánicoss, aunque no
o está claro si
s se trata dee colonias T
Tiwanaku quue se instalan
n
blaciones locales que adoptan
a
loss patrones estilísticos
e
y
en el vallee de Azapaa o de pob
diversifican
n sus modo
os de produucción y adqquisición de bienes de p
prestigio a través
t
de loss
contactos con el altiplano circum--Titikaka.
La primera fasse denominaada Cabuza (500 – 1000 d.C.) se caracteriza por presentarr
m similaress a la culturra Tiwanakuu. Hacia el 700 d.C., suurge una fasee
patrones eestilísticos muy
denominad
da Maytas (700 – 10000 d. C.), que
q coexistte con la faase Cabuza. Maytas see
caracterizaa por un esstilo cerámicco con deco
oración tríccoma, donde se utilizan
n elementoss
presentes en
e la cerámiica Cabuza pero con caaracterísticass locales. Duurante la fasse Maytas see
produce un
u proceso de reocupacción de la costa
c
y zon
nas bajas de los valles, así como laa
reexplotaciión de prod
ductos marin
nos complem
mentando la economía agropastoril
a
fuertementee
desarrollad
da en este período (Berenguer y Daauelsberg, 1989; Chacam
ma, 2001, en
n Santoro et
al., 2001).
Lo
os patroness de asentamiento presentan
p
a
agrupamient
tos de vivviendas quee
conforman
n aldeas bien
n planificadas, áreas de cultivos y cementerios
c
. El patrón funerario see
caracterizaa por presen
ntar individuuos flectado
os o hiperfleectados en ffosas cilíndriicas. Una dee
las princip
pales caracterrísticas del patrón
p
de en
ntierros, es la presenciaa de infantess y placentass
en urnas fuunerarias (C
Carmona, 20006).
28
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
5.2.4. Período In
ntermedio Tardío o Desarrollos
D
Regionaless (1.100 - 1.4470 d. C.)
Haacia el 1.1000 d.C. se iniccia el períod
do de la culttura Arica qque compren
nde las fasess
San Migueel y Gentilarr, estos grup
pos humanos ocuparon la costa, vaalles y sierra,, explotando
o
los recurso
os marinos y agropasttoriles, intro
oduciendo mejoras
m
en las técnicass de riego y
cultivo en terrazas, en
n general, el surgimiento
o de diferentes etnias quue interactúan entre sí a
u patrón de
d asentamieento núcleo
o-periferia generalizado,, mantenien
ndo patroness
través de un
identificatiivos que dife
ferencian un grupo de otro. Se evideencia una allta movilidad
d a través dee
mecanismo
os como el
e tráfico caravanero
c
y el establlecimiento de ferias, entre otross
(Schiappaccasse et al., 1989).
1
La agricultura, con técniccas especialles de riego
o, fue de grran importaancia para el
e
mantenimiiento de un
na población
n bastante densa
d
asenttada en los valles. El grueso
g
de laa
población habitaba en
n el sector medio
m
del vaalle, debido a su mayorr productivid
dad agrícolaa,
n en la costta residía un
n número importante
i
de habitanttes (Santoro
o,
sin embarggo, también
2001).
do Complejo
o
El desarrollo cultural preedominante en este perríodo se ha denominad
Arica integgrado por laas fases San Miguel y Gentilar, caracterizados p
por los estilo
os cerámicoss
policromos del mism
mo nombre y un estilo de transiciión llamado
o Pocoma. La
L fase San
n
ntilar alreded
dor del 1.3000 d.C. Los contextos
c
see
Miguel se inicia hacia el año 10000 d.C. y Gen
a
y laas ofrendass funerariass,
han caraccterizado prrincipalmentte a travéss de los ajuares
destacándo
ose por su variedad
v
y riqqueza. Llam
ma la atención el fuerte ddesarrollo dee la industriaa
textil, la taalla en maderra y los artefactos orien
ntados a la caaza y pesca en el litoral,, a diferenciaa
n presenta gran desarro
ollo (Schiapp
pacasse et all., 1989).
de la metallurgia, que no
Lass sepulturass son subterrráneas, cilííndricas o ampollares,
a
a
dee
con o sin apéndice,
acuerdo a los tipos dee terreno. Estas
E
manifeestaciones cuulturales derrivan de la fase Maytass,
or un estilo
o cerámico policromo
o.
previa al Complejo Arica, caraacterizada ttambién po
1
(Schiappaccasse et al., 1989).
29
9 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
La cerámica San
S Miguel se caracterriza por forrmas de graandes jarross de cuerpo
o
base plana, asas lateralees y cuello eestrecho, cilííndrico, cánttaros de unaa o dos asass;
globular, b
keros o vaasos con figuuras modeladas en los b
bordes, jarro
os antropo y zoomorfoss y pequeñoss
recipientess globularess, además de piezas miniaturas. Su decorración es de motivoss
geométrico
os de color negro
n
o rojo
o y negro ap
plicados sobrre una superrficie engobada de colorr
blanco maate. Son típicos los mottivos de líneeas paralelass y quebradaas con gancchos, volutass
entrelazadaas, líneas on
nduladas y rombos
r
con
ncéntricos. La
L decoració
ón se agrupaa en paneless
que forman pares opuuestos con op
posición de color (Schiaappacasse ett al., 1989).
G
es más
m fina y mejor elaboraada que la ceerámica San Miguel. Loss
La cerámica Gentilar
jarros pressentan cuelllos divergen
ntes, en emb
budo y los cántaros so
on de cuerp
po chato. Laa
decoración
n se presen
nta en colo
ores negro, blanco y rojo
r
sobre una superfi
ficie bruñidaa
engobada de color ro
ojo. Se destaaca por la vvariedad y caantidad de m
motivos, en
n su mayoríaa
curvilíneoss y de líneas dentadas, con gancho
os y espiralees. También
n presentan motivos dee
cruces, figuuras zoomo
orfas y antro
opomorfas. La
L decoració
ón se dividee en camposs opuestos y
bipartitos (Schiappacaasse et al., 19989).
d
a Pocoma ees un estilo de transición entre Saan Miguel y
La cerámica denominada
n paneles dee fondo rojo
o
Gentilar, ssus superficiies son puliidas y la deccoración se dispone en
claro o an
naranjado, separados po
or franjas verticales.
v
L motivos en color rojo
Los
r
y negro
o
generalmen
nte se agruupan en un
n círculo central. El complejo A
Arica tiene una ampliaa
dispersión, encontránd
dose desde el río Osmo
ore (sur del Perú) por eel norte, hasta el río Loaa
oral, su cerám
mica alcanzaa hasta Taltaal (Schiappaccasse et al., 1989).
1
hacia el surr. Por el lito
La navegación
n permitió exxtender el áárea de explo
otación marrina incorpo
orando pecess
e congrio como parte dde la dieta y producto de intercamb
bio en estado
o
de mar abiierto como el
seco. Las rutas marítiimas se con
nectaban con las terrestres en un sistema de intercambio
o
organizado
o. De gran importanciia eran las actividades de extracciión de guan
no y sal. Laa
agriculturaa constituía la
l principal actividad paara sustentarr el crecientee número dee habitantess,
se cultivab
ban especies subtropicales especiaalmente el maíz,
m
ají, porotos, zap
pallo, yuca y
30
0 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
camote deel complejo cordillerano
o. Una variedad de quín
noa adaptadaa a los vallees cálidos. See
ha documeentado, además, la reco
olección de las semillas y frutos dee algarrobo, tamarugo y
llaro. En la
l sierra se cultivaba papa, oca, ullluco, quíno
oa y cañahuua, y posibleemente cocaa
(Schiappaccasse et al., 1989).
1
5.2.5. Período Tardío
T
o de Influenciaa Incaica (1471– 1535 d
d. C.)
Debido a la expansió
ón del impeerio Inca, grradualmentee se incorpo
ora la zona de Arica al
a
imperio a través de los señoríos altiplánicos,
a
esto trajo co
onsigo una ampliación de las zonass
l recursoss,
de cultivo y la aplicaciión de nuevvas tecnologíías para unaa mejor expllotación de los
os costeross, se introd
ducen, adem
más nuevoss estilos en
n textilería y cerámicaa
incluido lo
(Berenguerr, 1997). See intensifica el pastoreo
o y la domeesticación dee perros y cuyes
c
en lass
cabeceras de los valles, se inten
nsifica el caarácter comp
plementario
o en los disstintos pisoss
v
y sierraa, a través de
d mecanism
mos de reciiprocidad e intercambio
o
ecológicoss de costa, valle
(Schiappaccasse et al., 1989).
1
5.3. Los
L sitios
Lo
os cementeriios estudiados provieneen de los sitiios Lluta 544, Azapa 1400 (Figura 7),
Camarones 8 y Camarrones 9 (Figgura 8) cuya ubicación y adscripción
n cronológicca cultural see
ón:
describe a continuació
5.3.1. Lluta 54
El sitio Lluta 54 se ubicaa en el curso bajo del río Lluta en
n el sector denominado
d
o
n (Figuras 9 y 10), corrresponde a un cementterio excavaado en 19855 por Percyy
Huaylacán
Daulsberg, desde donde se resccataron un total de 30 cuerpos (momias y esqueletos))
o Tardío (1471-1535).
adscribiblees a la fase cultural Inka del período
5.3.2. Azapa 1400
Se ubica a 2000 msm, en el
e km 14 lad
dera sur dell valle de Azzapa, a uno
os 500 m deel
n Lorenzo (Figura 11),, correspond
de a un cem
menterio preehispánico excavado
e
en
n
Pukara San
31
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
1981 por Guillermo Focacci, deesde dondee se recuperaron un to
otal de 1499 individuoss
c
de las fases Maytas deel periodo Medio y San
S
Miguell,
asociados a restos culturales
o Tardío, co
on datacionees cronológiccas entre 966 y 1420 d.C
C.
Intermedio
En
n la actualidaad es posiblle observar evidencia de
d huaqueo ssistemático de los sitioss
cementerio
os del valle de
d Azapa, quue afecta la conservació
ón de éstos y provoca laa destrucción
n
total de loss contextos funerarios (Figura 12).
5.3.3. Camaronees 8
Se ubica a 1000 Km. al surr de Arica en
n la desemb
bocadura dell río Camaro
ones, en unaa
quebradillaa seca perp
pendicular a la quebrad
da en la terrraza sur dee esta (Figuura 13). Fuee
excavado por Dauelsberg en 1985 desde donde
d
se reccuperaron uun total de 33 cuerposs
o
(momias y esqueletos)), con un contexto arteffactual adscrribible a la faase Gentilarr del período
Intermedio
o Tardío.
5.3.4. Camaronees 9
Se ubica en laa desemboccadura del valle
v
de Camarones, 1000 km al sur de Aricaa,
o sobre un antiguo
a
concchal preceráámico, a 1000 m. al oestee del sitio Camarones
C
8,
8
emplazado
en la terrazza sur de la quebrada. Fue
F excavado
o por Dauellsberg en 19961-62 y possteriormentee,
por Dauellsberg y Staanden en 19985, desde donde
d
se reecuperaron un total dee 46 cuerpo
os
(momias y esqueletos), asociados a material cuultural de la fase Inka del período Tardío.
T
En
n el sitio Caamarones 9 estuvo insttalado un campamento
c
o, producto de toma de
tierras, quue alberga unas
u
20 fam
milias. Éstas fueron trassladadas un
nos 200 mettros hacia el
e
noroeste del
d sitio, sin
n embargo hasta
h
enero de 2010, aúún se encon
ntraba una casa ubicada
sobre el sittio, afectand
do su conserrvación (Figuura 14).
32
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
V
VI.
6.1.
HIP
PÓTESIIS
HIIPÓTESIS NULA:
En
n base a loss anteceden
ntes de alta ocurrencia de espina bífida ocullta sacra, en
n
poblacionees agroalfarreras, no exxisten difereencias estad
dísticamente significativvas entre lass
frecuencias observadaas de espina bífida ocultaa sacra en laa muestra y m
muestra con
ntrol.
6.2.
HIIPÓTESIS ALTERNA
ATIVA:
Co
onsiderando el efecto terátogeno del
d arsénico, se propon
ne que la frrecuencia dee
espina bíffida oculta en la muesstra analizadda, está relaacionada co
on los altoss niveles dee
arsénico ddel ambientte del vallee de Camaarones. Porr tanto, se espera una diferenciaa
estadísticam
mente significativa entrre la frecuen
ncia observaada de espin
na bífida ocuulta sacra en
n
la muestra versus la muestra
m
contrrol.
33
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
VIII. METO
ODOLO GÍA
7.1
Maaterial
Se analizó un
na muestra prehispánicca total dee 255 indivviduos esqueletizados y
parcialmen
nte momificados de las coleccioness: Camaronees 8 (n= 33)), Camaronees 9 (n= 41),
Lluta 54 (n=
(
30) y Azapa
A
140 (n=
(
151), to
odas depositadas en el Museo Universidad dee
Tarapacá dde Arica- Saan Miguel de Azapa. See seleccionarron sólo loss individuos mayores dee
19 años dee edad al mo
orir, que corrresponden a un total de 120 indiviiduos: Camaarones 8 (n=
=
16) y Camarones 9 (n=
= 21) como muestra de estudio, Lluuta 54 (n= 110) y Azapa 140 (n= 73))
como mueestra controll.
La muestra fuue seleccionaada por su provenienci
p
a geográficaa y temporo
o-cultural, suu
disponibiliidad para ell estudio, po
or el buen estado de conservación
c
n, por los antecedentes
a
s
previos dee espina bíífida oculta en Azapa 140 (Alliso
on et al., 1982) y arseenicismo en
n
Camarones 9 (Figuero
oa et al., 1988; Figueroa,, 2001)
7.2
Méétodo
7.2.1
An
nálisis Diag
gnóstico
Co
omo parte de la meto
odología ap
plicada, se aplicó
a
una ficha de registro,
r
see
determinó la edad anaagráfica y ell sexo de los individuoss, utilizando
o indicadorees estándaress
n
(Bass, 1995; Buikstrra y Ubelaaker, 1994;; Ubelaker,, 1989). SSe realizó observación
pica y radilógica a fin dee detectar laa presencia de
d espina bíffida oculta a nivel sacro
o,
morfoscóp
se elaboró una escala basada en niveles
n
de seegmentos saacros con faalla en la fussión del arco
o
neural, differenciando los rasgos patológicoss de la variiabilidad an
natómica (Taablas 2 y 3,
3
Figuras 15 y 16).
mo metodolo
ogía de diaggnóstico parra la espina bífida
b
ocultaa
Este trabajo propone com
q dificultaan el diagnósstico: 1) Falssos positivoss en infantess
sacra, conssiderar cuatrro factores que
(Isidro y Malgosa, 2003), 2) Diferenciarr espina bíífida císticaa de oculta en casoss
34
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
arqueológiicos (Morsee, 1978; en Aufderheid
de y Rodrígguez-Martin
n, 1998), 3) Diferenciarr
espina bífiida oculta dee fallas en ell crecimientto y desarrolllo del arco neural posterior que no
o
involucran
n al tubo neural (Barness, 1994) y 44) La presen
ncia del hiato
o sacro quee en trabajoss
paleopatollógicos es muchas
m
veces incluido a la ocurrenccia de espin
na bífida ocuulta (Barness,
1994; Isidrro y Malgosaa, 2003).
An
nalizando caada uno de los puntos, en primerr lugar debeemos consid
derar que el
e
diagnóstico
o de la esp
pina bífida oculta
o
en el sacro, no ess posible dee realizar con
n certeza en
n
infantes, yaa que el cierrre del arco neural posteerior de S1 a S3 se realiza a partir de
d los 6 añoss
y se comp
pleta en la puubertad (11-16 años) (B
Bass, 1995; Buikstra y Ubelaker,
U
19994; Isidro y
Malgosa, 2003),
2
por lo
o tanto, diaggnosticar anttes de comp
pletada la etaapa de desarrrollo podríaa
resultar en
n un falso po
ositivo.
El segundo puunto a anallizar es la diferenciació
d
ón entre esp
pina bífida cística de laa
mbas pueden
n producirse en la reggión lumbo--sacra y su diferencia radica en laa
oculta, am
protrusión
n o no de las estructturas neuraales, según Morse (19978; en Auufderheide y
Rodríguez-Martin, 19998) la esp
pina bífida abierta tien
ne severos síntomas neurológicos
n
s
bles con la vida
v sin los avances
a
actuuales de la medicina,
m
con
nsiderándose el hallazgo
o
incompatib
en contexttos arqueoló
ógicos como
o sinónimo de
d espina bíífida oculta (Morse, 19778; en Isidro
o
y Malgosa,, 2003). Por otro lado Barnes
B
(19944) sostiene quue la espinaa bífida ocullta resultantee
de una fallla en el cierrre del tubo
o neural, esttá relacionad
da con espin
na bífida císstica aunquee
esta no puueda observaarse externam
mente, por lla presencia de una capa extra de grasa
g
llamadaa
lipoma, quue puede contener y con
nstreñir la cauda
c
equinaa y las meniinges, las formas menoss
severas invvolucran la presencia
p
dee masas de tejido lipofrribromatoso
o que constrriñen la duraa
madre en el filum teerminale y que por co
onsiguiente están asociiados necessariamente a
máticas (Alb
brecht et al.,, 2007; Barn
nes, 1994; Galloway
G
y Tainsh,
T
19855;
manifestacciones sintom
Gordon, 1997; Kinsm
man, 2007; Saaluja, 1988).
omo tercer punto
p
siguien
ndo lo plantteado por Barnes (1994)) se propone diferenciarr
Co
entre espin
na bífida ocuulta y defecttos en el dessarrollo del arco neural posterior, estos
e
últimoss
35
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
pueden prroducir unaa apertura completa
c
deel arco neuural posterio
or, pero se observa un
n
espacio dee apertura reducido
r
y un
u doble proceso espiinoso, estan
ndo relacion
nado con un
n
desarrollo deficiente del
d mesoderm
ma paraxial y no del tub
bo neural; m
mientras que en la espinaa
neural, se ob
bservaría unaa
bífida ocullta resultantee de una fallla en el procceso de cierrre del tubo n
apertura eensanchada y los bordees hacia fueera por la presión
p
que ejercen lass estructurass
neurales (B
Barnes, 19944; Isidro y Malgosa,
M
2003).
El cuarto y úlltimo punto a consideraar es la presencia del h
hiato sacro inferior,
i
unaa
n el arco po
osterior de S4-S5
S
y S5 solamente, que
q en la litteratura especializada ess
abertura en
considerad
do una variaación epigenética o un
n rasgo de variabilidad anatómica por su altaa
ocurrenciaa en la poblaación adultaa y por no reepresentar un
u problemaa a la salud (Albrecht et
al., 2007; Barnes,
B
19944; Isidro y Malgosa,
M
2003).
7.2.2
An
nálisis estad
dístico
Parra estudiar lo
os datos se establece
e
la hipótesis nuula (H0) y la hipótesis altternativa
(H1) expliccadas en el capítulo
c
VI, que se resum
men como sigue:
s
7.2.3
H0: No existeen diferenciias estadístiicamente siggnificativas entre la frrecuencia dee
esp
pina bífida oculta
o
en la muestra
m
verssus la muesttra control.
7.2.4
H1: Existen diiferencias esstadísticameente significaativas entre la frecuenccia de espinaa
bíffida oculta en la muestraa versus la muestra
m
conttrol.
Se analiza la diistribución de
d la muestrra según sexxo y edad y sse segrega de
d la muestraa
ños. Con lo
os individuoss adultos (>
>19 años) see realiza unaa
a analizar a los menorres de 19 añ
f
observadas de espina bífida ocullta, se graficca en porcentajes y see
tabla de frecuencias
compara laa muestra co
on la muesttra control. Considerand
C
do que las m
muestras son
n de tamaño
o
reducido se
s comprueeba la signifficancia de la diferenciia estadísticaa empleand
do la pruebaa
exacta de F
Fisher a travvés del softw
ware MINIT
TAB V15.
36
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
VIIII.
RES
SULTAD
DOS
La distribución
n de la pobllación de la muestra y muestra
m
conttrol por sexo
o se observaa
en la Tablaa 4. La mueestra de Cam
marones 8 presenta
p
unaa ocurrenciaa de espina bífida
b
ocultaa
sacra de 122,50%, regisstrándose do
os casos massculinos (Figgura 17); Caamarones 9 presenta
p
unaa
ocurrenciaa de 14,28% registrándo
ose dos casos masculinos y uno fem
menino (Figuuras 18 y 19);
Lluta 54 no presenta casos
c
y Azap
pa 140 preseenta una ocuurrencia de 22,7%, presentándose un
n
individuo masculino y uno femen
nino afectaddos (Figura 20).
2 En la ttabla 5 y el gráfico
g
de laa
s compara la frecuenciia de espina bífida ocultaa por sitio.
Figura 21 se
La muestra co
ostera de Caamarones 8 y 9 en con
njunto, pressenta una occurrencia dee
d 13,5% reegistrándosee cuatro cassos en mascculinos y un
no femenino
o
espina bífiida oculta del
(Figuras 17-19). En la
l muestra control pro
oveniente de
d los valless de Lluta y Azapa see
observó uuna ocurren
ncia del 2,4%. Uno dee los casos presenta laa patología con mayorr
severidad, ya que la falta
f
de fusiión del arco
o neural posterior afectta todos loss segmentoss
nta vértebra lumbar (Figgura 20).
sacros, inccluida la quin
E
Evaluando
c
casos
que fuueron descarrtados, en Lluta
L
54 tum
mba 20 obsservamos un
n
subadulto (15-18 añoss) con falta de fusión een parte de S3
S y desde S4 a S5 (Figgura 22), sin
n
embargo el
e sacro no había
h
complletado su desarrollo y po
or tanto exisste la posibiilidad de quee
una vez teerminado este proceso el
e cierre se habría comp
pletado al m
menos en S33. Otro caso
o
observado correspond
de a Azapa 140 tumbaa 38, se tratta de un addulto en quee la falta dee
n
y no a
fusión de S1 parece corresponderr a una fallaa en el proceeso de cierree del arco neural
una malforrmación del tubo neurall (Figura 23)).
L análisis estadísticos
Los
e
indican que la muestra costera (Cam
marones 8 y 9) presentaa
una frecueencia de esp
pina bífida oculta en eel sacro, cassi seis vecess mayor quee la muestraa
control dee los valles (L
Lluta 54, Azzapa 140) (F
Figura 24). El
E resultado de la Prueb
ba Exacta dee
Fisher p= 0,0284 indiica que hay diferencias estadísticam
mente signifiicativas entrre la muestraa
y la muestra control. Por tanto se refuta lla hipótesis nula, lo quue refuerza la hipótesiss
alternativa propuesta.
37
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
IX.
DISCU
USIÓN Y CONC
CLUSION
NES
Se estima quee en la actuualidad alred
dedor de 8.000 person
nas del Norrte de Chilee
(Regiones XV, I, II y III),
I se encuuentran aún afectadas po
or altas conccentracioness de arsénico
o
C
se han tomaado medidass
en el agua de bebida y los alimenttos. En la quuebrada de Camarones
sanitarias para
p mitigarr los efectoss del arsénicco en la saluud de la pob
blación, com
mo la entregaa
de agua potable
p
provveniente de Azapa a trravés de caamiones aljib
bes. Sin em
mbargo estass
medidas no
n logran serr suficientess para evitarr que la pob
blación siga utilizando el
e agua locaal
como aguaa de bebida,, además de su utilizació
ón en el rieggo de los cuultivos y beb
bida para loss
animales, iincorporánd
dose el arsén
nico a la cad
dena trófica e ingresando
o al organismo humano
o
a través dee los alimenttos contamin
nados.
La exposición crónica de la
l población
n actual de Camarones
C
a arsénico ambiental,
al
a
haa
provocado
o el desarro
ollo de pato
ologías com
mo melanodeermia, leuco
odermia y/o
o queratosiss
palmoplan
ntar y otras afecciones
a
attribuidas a arsenicismo
a
crónico. Deebido a su orrigen naturaal
el arsénico
o se encuen
ntra presentte en los eccosistemas relacionados
r
s a la cordilllera de Loss
Andes, dessde su form
mación iniciaal en la era terciaria
t
y cuuaternaria, p
por lo que representaría
r
a
un probleema atempo
oral. En estudios
e
muultidisciplinaarios previo
os (paleopaatológicos y
químicos) se detectaro
on afeccionees a la piel rrelacionadass al arsenicissmo crónico
o en momiass
marones 9, comprobán
ndose además, la presen
ncia de alto
os niveles dee
naturales ddel sitio Cam
arsénico en
e los tejido
os y pelo de
d estas y otras mom
mias prehispáánicas de Arica.
A
Se haa
propuesto también, arsenicismo crónico en momias naaturales de A
Antofagasta,, una región
n
caracterizaada por suss altos nivelles de arsén
nico en el ambiente, llo que refleejaría que laa
contaminaación ambien
ntal por arséénico en la zona, es un
n problema eendémico que se remitee
al poblamiiento tempraano de estoss ecosistemaas hace más de 10000 añ
ños.
38
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Auunque no pueden
p
desscartarse feenómenos de
d diagénessis1, que puueden estarr
contribuyeendo al hallaazgo de altaas concentraaciones de arsénico
a
en llos tejidos de
d momias y
esqueletos (Arriaza et
e al., 20100), la diagén
nesis no exxplica la frrecuencia dee patologíass
mo crónico
o halladas en
n momias de
d la quebrrada de Cam
marones, assí
asociadas al arsenicism
mpoco expliccan las frecuuencias obseervadas de espina bífidda oculta paara el mismo
o
como tam
sector.
os resultadoss indican un
na alta freccuencia de espina
e
bífidda oculta en
n la muestraa
Lo
costera de la quebradaa de Camaro
ones (13,5%)) y una baja frecuencia een la muestrra control dee
los valles (2,4%),
(
pressentándose una
u diferenccia estadísticcamente sign
nificativa en
ntre ellas. Laa
muestra y muestra co
ontrol provieenen de secctores geogrráficos distin
ntos, costa e interior dee
mentos podrría ser difereenciado, con
n
los valles rrespectivameente, por lo que el acceeso a los alim
enfásis en productos del
d mar en la
l costa y cuultivos en el interior. Sin
n embargo, las muestrass
son crono
ológicamentee contempo
oráneas del 700 al 1530 d.C., duurante este período lass
poblacionees humanass explotabaan de form
ma eficientte los distiintos pisos ecológicoss
posibilitan
ndo la existeencia de unaa economía mixta agro--marítima (C
Chacama, 20001; Santoro
o
et al., 20000b; Santoro, 2001; Santo
oro et al., 20003; Shiapacaasse y Niem
meyer, 1989)..
Este tipo de economía
e
h sido expllicado a traavés del mo
ha
odelo de verrticalidad dee
m
que ha sido fuundamental en la arquueología, etn
nohistoria y
Murra (19972), un modelo
antropologgía Andina y que hab
bría permitid
do no sólo
o la explotaación de reccursos, sino
o
también, laa interacción
n entre los distintos
d
gruupos socialess existentes a través de mecanismoss
como el ttrafico caravvanero, las ferias de iintercambio y el establlecimiento de lazos dee
parentesco
o entre las diistintas etniaas por medio
o del traslad
do de individduos de un grupo
g
a otro
o
(Santoro eet al., 2003; Shiapacasse
S
y Niemeyerr, 1989). Estte modelo fu
fue adaptado
o por Núñezz
1
Diaggénesis entend
dida como el intercambio de elementoss químicos, eentre el cuerpo enterrado y
los sedimen
ntos que lo ro
odean y no en
n su connotacción geológicca.
39
9 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
y Dillehay (1995), paraa el área Cen
ntro-Sur An
ndina, adquirriendo las reelaciones de intercambio
o
otación máss interetnicaa, con ejes de movimiiento en esp
piral que peermitirían el
e
una conno
contacto eentre individ
duos de regio
ones tan disstantes como
o la puna co
on la costa y viceversa o
de la puna con la seelva selva, permitiendo
p
o no sólo in
ntercambiar bienes, si no también
n
ntesco, que en termino
os biológico
os se traduccen en flujo
o
establecer nuevos lazos de paren
génico.
Auunque la dietta es un facttor de gran relevancia para
p la aparicción de malformacioness
como la esspina bífida,, ésta por si misma no podría
p
expliicar las diferrencias observadas entree
la muestraa de la costaa y los vallees. El ácido
o fólico es considerado
c
un elemento protectorr
frente al desarrollo de malfo
ormaciones congénitass, en especial del tuubo neurall,
dose en form
ma natural en
e algunos aalimentos dee origen am
mericano com
mo el poroto
o
encontránd
(Phaseolus vulgaris),
v
la quínoa
q
(Chennopodium quiinua) y el maíz (Zea mayys), por lo que
q el mayorr
consumo dde éstos pod
dría contribuuir a una disminución dee fallas en ell cierre del tubo
t
neural.
Ho
oy en día a pesar de laa disponibilidad que exiiste a una ggran gama de
d alimentoss
ricos en áccido fólico y que son de fácil acceso
o a la mayoríía de la pobllación chilen
na, la tasa dee
espina bífiida estuvo en
e aumento,, hasta la fortificación de
d la harina de trigo con 220 μg dee
ácido fólicco por cada 100 g de harrina a partir del año 20000, con lo quue se logró disminuir suu
incidencia en un 30 a 50%
5
(Mitch
hel, 2005; Naazer et al., 20007).
oblaciones prehispánicaas de los valles
v
hayan tenido mejjor acceso a
Auunque las po
productos de cultivo y en la costa a los prod
ductos del mar,
m esto no
o explica porr si solo unaa
ocurrenciaa seis veces mayor
m
de espina bífida oculta
o
en Caamarones quue en Lluta y Azapa. Sin
n
embargo, si en la dietta incluimoss altos nivelles de arsén
nico ingerido
os en formaa períodica a
mentos conttaminados, es probablee que se deesencadenen
n
través del agua de beebida y alim
a desarrollo
o del tubo neural, efecto
o
malformacciones congéénitas especcialmente rellacionadas al
teratógeno
o del arsénicco que ha siido comprob
bado en exp
perimentos con animalees y a travéss
de estudio
os epidemiollógicos en seres
s
human
nos (Desessso, 2001; Feerm, 1977; Hopenhayn
H
Rich, 20000, 2003; Macchado et al., 1999; Martiin et al., 2003; Wlodarczzyk, 1996).
40
0 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Lass diferenciaas observadaas entre loss resultadoss de este esstudio con un
u 2,7% dee
ocurrenciaa de espina bífida
b
oculta para el sittio Azapa 1440 y lo repo
ortado por Allison
A
et all.
(1982) parra el mismo
o sitio con más
m del 60%
%, se debe a diferenciaas en la mettodología dee
diagnóstico
o, siendo prrobable quee lo reportaado por Gerrszten et al. (2001) paraa el valle dee
Azapa tam
mbién esté so
obrevalorado
o. Esto indiica que al ap
plicar una m
metodología capaz de serr
replicada, es posible obtener
o
resuultados quee indiquen la
l real ocurrrencia de un
na patologíaa
dentro de una poblaación, que permita
p
teorizar sobre su etiologíía, nosologíía y llegar a
nes paleoep
pidemiológiccas, que in
ncluso pued
dan tener repercusion
nes para laa
conclusion
población moderna.
or ocurrencia de espinaa
La propuesta de Allison et al. (1982)) que explicca una mayo
l población
n,
bífida ocullta en poblaaciones tardíías de Arica por las práccticas endoggámicas de la
no tiene un
u sustento
o en las teo
orías arqueo
ológicas pro
opuestas para el área geográfica
g
y
período crronológico estudiado.
e
E lo obserrvamos más graficamen
Esto
nte con lo quue sucede en
n
los sitios de Camarrones, dond
de no enco
ontramos diferencias
d
significativaas entre lass
na bífida occulta en Caamarones 8 y 9, a peesar de quee
frecuencias observadaas de espin
den a perío
odos distinto
os. Camaron
nes 9 corresponde al período
p
Inca, por tanto
o
correspond
consideran
ndo el tipo de
d relacionees que establlece el inca en los territtorios anexaados, es fáciil
suponer que
q habría fllujo génico, lo que perm
mitiría una mayor variaabilidad biológica y porr
tanto una disminuació
d
ón de las pattologías conggénitas derib
badas de la eendogamia.
A pesar de lo
l anteriorm
mente mencionado lass deficiencias dietarias y posibless
e
s, aunque no puede desscartarse táccitamente co
omo probab
bles causaless
prácticas endogámicas
de espina bífida
b
ocultaa, se contrad
dicen con ell modelo dee explotación
n e interacciión social dee
los distinto
os pisos eco
ológicos pro
opuesto parra estas pob
blaciones en
n la prehisto
oria y con laa
evidencia. Los anteced
dentes preseentados y lo
os resultados del presen
nte estudio, refuerzan laa
p
y permiten proponer que el mettaloide arséénico es un
n
hipótesis ambiental planteada
nte ambientaal que podríía ser la priincipal causaa de la mayyor frecuenccia de espinaa
componen
bífida ocuulta, lo que debiera serr evaluado en otras po
oblaciones p
prehispánicaas e incluso
o
actuales.
41
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Quueda por exp
plorar las hipótesis
h
de dieta, endoggamia y mo
ovilidad, las que podrían
n
ser abordaadas por meedio de estuudios molecculares, cran
neométricos,, de isotopo
os estables y
elementos traza. Algunos de estos tópicos seerán abordad
dos en un próximo
p
estuudio para mi
m
oral, que esp
pera complettar y compleementar el presente
p
estuudio.
tesis docto
42
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
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d
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Problems o
of Inferring Health
H
from Prehistoric
P
Skkeletal Samplees. Current Annthropology 33 (4): 343-370.
53
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
XI.
TABLA S Y FIG
GURAS
Tabla 1. Niveles
N
de concentraciión de arséénico en los valles de la Región de Arica y
Parinacotaa (Bundschuuh et al., 2008).
Área
Arsénico
o en agua
Lluta
30 a 280 μg
μ L−1
Azapa
20 μg L−1
Camaroness
1.000 a 5.100 μg L−1
Nº de
d veces que sobrepasa la norma
3-28
2
100-500
Tabla 2. Seegmentos affectados en el
e sacro por espina bífid
da oculta.
Vértebrass sacras
Deescripción
S1
Ap
pertura compleeta del arco neuural de la 1a veertebra sacra.
S1-S2
La apertura en S1 se dirige haccia caudal y alccanza la apófissis espinosa dee S2 o la dividee
porr completo alccanzando la S33.
S1 -S3
La apertura en S1 se dirige haccia caudal y alccanza la apófissis espinosa dee S3 o la dividee
porr completo alccanzando la S44.
S1-S4
La apertura en S1 se dirige haccia caudal y alccanza la apófissis espinosa dee S4 o la dividee
porr completo alccanzando la S55.
S1-S5
El Sacro presentta un surco en
n su cara posteerior en lugar de la cresta saacra media con
n
os hacia afuera y sin apófisis espinosas dob
bles.
borrdes orientado
S2-S5
Ap
pertura en S5 que se dirige hacia cefálico y alcanza la aapófisis espino
osa de S3 o laa
divvide por complleto alcanzanddo la S2.
S3-S5
Ap
pertura en S5 que se dirige hacia cefálico y alcanza la aapófisis espino
osa de S2 o laa
divvide por complleto alcanzanddo la S1.
Tabla 3. Po
osibles variaantes de hiatto sacro.
Vértebras Sacras
Deescripción
S4-S5
Ap
pertura en S5 que
q se dirige hacia cefálico y alcanza la apófisis
a
espino
osa de S3 o laa
divvide por complleto alcanzanddo la S2.
S5
Ap
pertura compleeta o incompleta del arco neuural de la 5a veertebra sacra.
Cierre com
mpleto
El sacro presentaa en su cara po
osterior la crestta media comp
pletamente cerrrada.
54
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Tabla 4. D
Distribución
n de adultos por sexo y ssitio. Sexo
o
C
Camarones
8
Camaarones 9
Azapa 1140
Lluta 54
Masculiino
5
11
25
5
Femeniino
9
9
48
5
Indetermiinado
2
1
0
0
Totall
16
21
73
10
Tabla 5. Frrecuencia dee espina bífida oculta saacra por sitio
o y segmento
os afectadoss.
Segmento
os
Lluta 544
%
A
Azapa
140
%
Camarrones 8
%
Camaron
nes 9
%
S1
0/10
0
1/73
1,36
1/16
6,255
1/21
4,76
S3-S5
0/10
0
0/73
0
1/16
6,255
2/21
9,52
S1-S5
0/10
0
1/73
1,36
0/16
0
0/21
0
Total
0/10
0
2/73
2,76
2/16
12,55
3/211
14,288
afectados
Figura 1. M
Mapa satelitaal de los vallles transverssales de la Región
R
de Arrica y Parinaacota (googlee
maps, 20088).
55
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 2. Fotografía panorámicaa del curso medio del valle de Lluta (Foto: M.
M Alarcón
n,
2010).
Figura 3. F
Fotografía deel humedal en
e la desembocadura deel río Lluta ((Foto V. Silvva, 2008).
56
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 4. Fotografía
F
d valle de Azapa, vistta desde el sitio San L
del
Lorenzo (Fo
oto: V. Silvaa,
2008).
Figura 5. Fotografía panorámicca de la Quebrada dee Camaronees, vista deesde el sitio
o
Camarones Punta Norrte en la cossta (Foto: V.. Silva, 2008))
57
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 6. F
Fotografía dee la laguna acuifera
a
en laa desemboccadura de la Quebrada de
d
Camarones (Foto: V. Silva,
S
2008)..
Figura 7. M
Mapa satelitaal de los sitio
os Lluta 54 y Azapa 1400 (google earrth, 2009).
58
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 8. M
Mapa satelitaal de los sitio
os Camaron
nes 8 y Camaarones 9 (go
oogle earth, 2009).
2
Figura 9. F
Fotografía deel sitio Llutaa 54, sector del Huaylaccan (Foto: M
M. Alarcón, 2009).
2
59
9 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 10. Fotografía sitio
s
Lluta 54, sector Huuaylacan (Fo
oto: M. Alarcón, 2009).
Figura 11. Fotografía sitio
s
Azapa 140, ladera Sur
S del Vallee de Azapa (Foto: V. Sillva, 2008).
60
0 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 12. Fotografía de
d contexto
os funerarioss destruidos,, por acción de huaqueo
o sistemático
o
en sitos deel valle de Azzapa (Foto: V. Silva, 2008).
Figura 13. Fotografía del
d sitio Cam
marones 8, lladera sur dee la Quebradda de Camarones (Foto
o:
V. Silva, 20010)
61
1 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 14. Fotografía del
d sitio Cam
marones 9, n
nótese la cassa que se en
ncuentra sob
bre el sitio (aal
da parte deel campamen
nto de pesccadores arteesanales (Foto: V. Silvaa,
centro) y a la izquierd
2010)
d sacros en
n vista posteerior. Posiblles segmento
os afectadoss
Figura 15. Dibujo esqquemático de
bujo: V. Silvva).
por espinaa bífida ocultta sacra (Dib
62
2 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 16. Dibujo esqquemático de
d variantess normales del hueso ssacro en vissta posteriorr
V Silva).
(Dibujo: V.
Figura 17.. Espina bífi
fida oculta saacra. Sitio C
Camarones 8 Tumba A22. Masculino, 38-42 añoss
de edad. A
A. Sacro y co
oxal derecho
o articuladoss vista posterrior. B. Radiiografía de sacro
s
y coxaal
en vista an
ntero-posteriior (Fotos: O.
O Lagos, 20008). 63
3 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 18. Espina bífid
da oculta saccra. Sitio Caamarones 9 Tumba
T
12. F
Femenino, 35-40
3
años
A. Pelvis articculada vista posterior. B
B. Radiograffía de la pelvvis en vista anteroa
de edad. A
posterior (Fotos:
(
O. Lagos,
L
2008).
Figura 19. Espina bífiida oculta saacra. Sitio C
Camarones 9 Tumba 39. Femenino,, 35-40 añoss
de edad. A
A. Hueso sacro vista posterior. B. Radiografía hueso sacro en vista
v
anteroposterior (Fotos:
(
O. Lagos,
L
2008).
64
4 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 20. Espina bífid
da oculta saccra completa. Sitio Azap
pa 140 Tum
mba 36. Femeenino, 19H
sacro vista
v
posteriior. B. Radio
ografía hueso sacro en vista
v
antero-22 años dee edad. A. Hueso
posterior (Fotos:
(
O. Lagos,
L
2008).
Figura 21. Gráfico com
mparativo de
d la frecuencia de espin
na bífida ocuulta por sitio.
65
5 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 22. Hueso sacrro vista possterior. Sitio
o Lluta 54 tuumba 20. Feemenino, 155-18 años dee
p
de desarrollo
d
y cierre del arrco neural p
posterior dell sacro no see
edad. Nóteese que el proceso
completó al
a momento
o de la muertte (Foto: V. Silva, 2008)).
Figura 23. Hueso sacro
o vista postterior. Sitio A
Azapa 140 tumba
t
38. M
Masculino, 400- 45 años
de edad. N
Nótese la esp
pina de la S1 doble y cassi cerrada (F
Foto: V. Silvaa, 2008).
66
6 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
Figura 24. Gráfico com
mparativo de
d la frecuen
ncia de espin
na bífida occulta entre laa muestra en
n
ol (Lluta 54 y Azapa 1400).
estudio (Camarones 8 y 9) y la muuestra contro
67
7 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
XII. ANEXO
A
12.1. Ficha
F
de reg
gistro bioan
ntropológicco:
FICH
HA BIOAN
NTROPOLÓ
ÓGICA
1.
INFORMACIÓN
N GENERAL
L
Sitio:_______________________________ Tumba Nº:___________________Individuuo Nº:______
_________________
Procedencia G
Geográfica________________Período/Fasee:________________Excavaado por:_________________
_____
Analizado por:_______________________Fecha de Annálisis:___/_____/___Almaceenamiento acttual:______________
2.
TADO DEL MATERIAL:
M
EST
Momificaciónn Natural
Momificaación parcial
Esqueeletizado
Buen Estado
Moderadoo Estado
Mal Estado
E
mpleto
Incom
Completo
F
Fragmentado
_____
Observacionees:________________________________________________________________________________
___________________________________
_______________________________________________
________________
3.
PER
RFIL BIOLÓ
ÓGICO
Edad Estimadda: ____± __aaños Adulto >19
> á
Suubadulto 12-19á
Infannte 1-12á
Feto/neonatto
Edad Basada en:__________________________________Largo máx. cuerpo________ Ancho mááx. cuerpo____
_____
Largo máx. F
Fémur Izq.______Estatura:________________Estatura bassada en:_________________
_________________
Sexo Femeninno
Sexoo Masculino
Espina bífida oculta:
Sexo inddeterminado
N
No
Si
Sexo baasado en: ____
__________________
Probable
Nivel afectaddo:_______________________Observacionnes Rx:______
____________
______________________________
___________________________________
_______________________________________________
__________________
4.
ODO
ONTOGRAM
MA (marque loos símbolos en los registross dentales, seggún corresponnda)
18
117
16
15
14
13
12
2
11
21
22
23
24
25
26
27
28
48
447
46
45
44
43
42
2
41
31
32
33
34
35
36
37
38
Sup
Inf.
P: Presente X: Ausente prem
mortem *: C
Caries A: Ausente posttmortem F: Fracturado #: Agenesia 68
8 UNIVERSID
U
DAD DE CHILE
C
5.
INV
VENTARIO MATERIAL
M
BIOANTRO
OPOLÓGICO
O: Marque en lla figura los elementos
e
pressentes
Cabeza:____________________________
__________________________________
Bóveda craneeana:________
___________
____________
____________
____________
______
Cara Ósea: ______________
___________
____________
____________
_________________
Tronco:________________
____________
_______________________
____________
_______
Vétebras:_______________
____________
____________
_______ ____
___________________
Costillas:____
___________
____________
________________________
__________________
Esternón:_______________
____________
____________
____________
__________________
Miembro sup
perior:______
___________
____________
____________
__________________
Clavículas:__
____________
____________
_______________________
___________________
Escápulas:___
___________
____________
________________________
__________________
Brazos:_____
____________
____________
________________________
____________
_______
Húmeros:_______________
____________
_______________________
___________________
Antebrazos:_____________
___________
____________
____________
____________
______
Ulnas:__________________
___________
____________
____________
___________________
Radios:_____
____________
____________
_______________________
___________________
Manos:_________________
___________
____________
____________
____________
______
Huesos de maanos:_______
____________
________________________
__________________
Miembro infferior:______________________________________________________
Pelvis:______
___________
____________
________________________
_______________
Coxales:____
____________
____________
_______________________
___________________
Hueso sacro:_
____________
___________
____________
____________
__________________
Muslo:_________________
____________
_______________________
___________________
Fémures:____
____________
____________
________________________
____________
_______
Patellas:________________
____________
____________
___________
___________________
Piernas:____
____________
____________
_______________________
___________________
Tibias:______
___________
____________
________________________
__________________
Fíbulas:_____
____________
____________
________________________
____________
________
Pies:___________________
____________
_______________________
__________________
Huesos de piees:_________
____________
_______________________
Observacionees:__________
___________
____________
____________
_______________________
____________
______
___________
____________
____________
_______________________
________________________
___________
______
69
9 
Descargar