JUAN 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz

Anuncio
CARTA DE JULIO DE 2012.
Amado hermano, agradezco a Dios por tu vida y por tu apoyo incondicional a este ministerio;
quiero exhortarte a que sigas adelante y permanezcas firme en la fe en medio de cualquier
circunstancia, sabiendo que Jesucristo es fiel y permanece contigo todos los días de tu vida.
Vivimos tiempos en los que las circunstancias que se presentan podrían hacer decaer nuestro
ánimo si lo permitimos; en el mundo todos los sucesos están destinados a generar confusión, aún
nuestro país acaba de pasar por un proceso electoral que ha generado incertidumbre. Cristo nos
confirma esto:
JUAN 16:33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis
aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”.
He venido diciendo que el pueblo de Dios no debe operar (accionar o actuar) como operan los
incrédulos; en el mundo se acciona conforme a la percepción de los sentidos, ellos son los que
captan la información, generando pensamientos para que el individuo actúe en consecuencia; en
especial, el hombre depende del sentido de la vista y el del oído.
Éste es el proceso del actuar del hombre natural: Lo que sus sentidos le informan es lo que acepta
como verdadero; podemos ver un hombre común, el cual está viviendo una crisis económica, sus
sentidos le informan que no tiene dinero y que por ende no va a poder pagar las cuentas del mes,
él acepta esta información como verdadera y la cree como tal, entonces empieza a hablar de que
está en crisis y que no va a poder pagar, ya que no tiene dinero, después de que este hombre
creyó esa información y la habló con su boca recibe la consecuencia del temor, la cual es el
fracaso.
Lo que la Escritura nos enseña acerca de cómo tenemos que actuar es todo lo contrario a eso.
Primero nos dice que la forma de accionar del justo es a través de la fe. Leamos lo siguiente:
ROMANOS 1:17 Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela POR FE Y PARA FE, como está
escrito: MAS EL JUSTO POR LA FE VIVIRÁ.
ROMANOS 4:16 POR TANTO, ES POR FE, PARA QUE SEA POR GRACIA, a fin de que la promesa sea firme
para toda su descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de
la fe de Abraham, el cual es padre de todos nosotros
EFESIOS 2:8, 9 Porque por gracia sois salvos POR MEDIO DE LA FE; y esto no de vosotros, pues es don
de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
HEBREOS 11:33, 34 (DHH) POR LA FE conquistaron países, hicieron justicia, recibieron lo que Dios
había prometido, cerraron la boca de los leones, apagaron fuegos violentos, se libraron de morir
a filo de espada, sacaron fuerzas de flaqueza y llegaron a ser poderosos en la guerra, venciendo
a los ejércitos enemigos.
La Escritura nos sigue confirmando que operemos de forma diferente al mundo:
EFESIOS 4:17, 18 (DHH) Así pues, en el nombre del Señor os digo y encargo que no viváis más
como los paganos, que viven de acuerdo con sus vanos pensamientos y tienen oscurecido el
entendimiento. No gozan de la vida que procede de Dios, porque son ignorantes a causa de lo
insensible de su corazón.
1 JUAN 2:15-17 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo,
el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los
deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo
pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.
Así mismo, la Palabra nos dice que nuestro vivir no debe ser guiado o basado en lo que vemos,
sino en la fe:
2 CORINTIOS 5:7 (porque por fe andamos, no por vista)
Dios nos entregó la herramienta llamada FE para movernos y actuar en este mundo, solamente
usándola podemos llevar a cabo la forma de vida del cielo en la tierra; la fe nos permite ver cosas
invisibles y llamarlas al mundo visible. Voy a tomar la cita de Hebreos 11:1 y a explicarla.
“Tener fe es tener la plena seguridad de recibir lo que se espera; es estar convencidos de la
realidad de cosas que no vemos”. (HEBREOS 11:1 DHH)
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. (HEBREOS 11:1
RVR60)
Estas dos versiones de la cita, nos confirman que la fe nos da la capacidad de ver lo invisible, y por
lo tanto podemos hablarlo, llamándolo así al mundo visible; lo invisible forma lo visible (“Por la fe
entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve
fue hecho de lo que no se veía”. Heb.11:3). No deben ser tus ojos la fuente de tu información y la
guía para tu andar, sino la palabra de Dios. El mundo te va a mostrar situaciones adversas, pero la
Palabra dice que nadie te puede hacer frente en todos los días de tu vida; así mismo, la Palabra ha
establecido una puerta abierta para que en tu vida prevalezca la prosperidad.
Es tiempo de que tus ojos estén puestos en Jesucristo (el Verbo, su Palabra), la cual está destinada
a establecer la realidad celestial en la tierra. Deja de ver los problemas o las cosas que suceden en
el mundo; al fijar tu mirada en la Palabra se producirán en ti los pensamientos de Dios, tu forma
de hablar será la de Dios, llamando lo invisible, para que venga a ser en lo visible.
“No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son
temporales, pero las que no se ven son eternas”. (2 CORINTIOS 4:18 RVR60)
“Porque no nos fijamos en lo que se ve, sino en lo que no se ve, ya que las cosas que se ven son
pasajeras, pero las que no se ven son eternas”. (2 Corintios 4:18 DHH)
El libro 2 Reyes 6:11-19 nos cuenta la historia del profeta Eliseo y su sirviente, en la cual, el rey de
Siria mandó a todo un ejército para prender y matar al profeta; la Palabra nos cuenta que, al
despertar, el criado del profeta vio como el ejército enemigo estaba rodeando la ciudad donde
estaban; el criado se angustió por lo que veían sus ojos e inmediatamente fue a dar aviso a su
señor. Yo puedo imaginarme los pensamientos que se daban en su mente por lo que estaban
viendo sus ojos, pensamientos de temor, desolación, desesperación y angustia (el diablo generaba
esclavitud a través de esos pensamientos). Pero cuando le informó la situación al profeta, éste
pronunció palabras que dejaron atónito al criado:
Eliseo le respondió:
—No tengas miedo, porque son más los que están con nosotros que los que están con ellos. (2
Reyes 6:16 DHH)
El criado no entendía lo que el profeta le había dicho; con base en lo que vieron sus ojos, él hizo
una operación matemática: ellos eran dos, y el rey de Siria mandó miles, ¿cómo podía ser que
para el profeta fueran ellos más que dicho ejército? Al ver la cara perpleja de su criado, el profeta
pidió a Dios algo:
“Y oró Eliseo al Señor, diciendo: «Te ruego, Señor, que abras sus ojos, para que vea.» El Señor
abrió entonces los ojos del criado, y éste vio que la montaña estaba llena de caballería y de
carros de fuego alrededor de Eliseo”. (2 Reyes 6:17 DHH)
El criado no usó la fe sino sus ojos, ya que si la hubiera usado se habría dado cuenta de que los
ángeles del cielo estaban guardando sus vidas.
Solamente la fe te da la capacidad de ver lo invisible. Esta capacidad la tenía Adán, pero cuando
éste se decidió por lo contrario a Dios, dicha capacidad fue declinando y el hombre dependió más
de su vista que de lo que Dios hablara.
Pero ahora, a través de la fe en Jesucristo, podemos aprovechar completamente esa facultad, y
así, vivir en paz y gozo.
Por tanto, decide hoy poner tu mirada en la Palabra de Dios, y Jesucristo se encargará de todo; no
pongas tu atención en lo visible, ni en las circunstancias. La palabra de Dios tiene todo preparado
de antemano para establecer su Justicia; las cosas visibles se describen como pasajeras, mas la
eternidad está en la Palabra; pon tu confianza en ella y háblala, de esa manera estarás llamando a
lo invisible para formar lo visible.
Descansa en la Palabra de Jesucristo; ella está destinada a hacer que su reino de bendición sea
extendido e impere en tu vida. Leamos y gocémonos con las siguientes citas bíblicas:
JUAN 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis
aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
ROMANOS 4:17 (como está escrito: Te he puesto por padre de muchas gentes) delante de DIOS, a
quien creyó, EL CUAL DA VIDA A LOS MUERTOS, Y LLAMA LAS COSAS QUE NO SON, COMO SI FUESEN.
HEBREOS 11:3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de
modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía
FILIPENSES 4:6, 7 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de
Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo
entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
COLOSENSES 1:16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que
hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean
potestades; todo fue creado por medio de él y para él.
De ahora en adelante, decide descansar en la Palabra de Dios, poniendo tu atención en ella, no en
los problemas, los cuales son sostenidos mientras tú les prestas atención y los hablas; pero al
mirar la Palabra, aceptarla como tu realidad y confesarla con tu boca, las situaciones adversas en
tu vida dejarán de ser, las que te rodean dejarán de afectarte y tú estarás en paz.
Te amo y declaro la bendición reinando y fluyendo en tu vida. Recuerda que no son tus ojos los
que te dicen cuándo sembrar, sino el amor de Dios, el cual produce fe; confía en Jesucristo,
prepara tu semilla, confiesa la bendición de la Palabra sobre ella y siémbrala; después espera una
abundante cosecha. Amén.
"JESUCRISTO, TU PALABRA ES PODER"
Israel Ruvalcaba.
Descargar