Señalan relación entre la diabetes tipo 1 o juvenil con la enfermedad celíaca Hace algunos años se viene señalando la interrelación entre la diabetes tipo 1 y la enfermedad celíaca, lo cual ha sido investigado y comprobado en nuestro país por investigadores del IPK y del Instituto Nacional de Endocrinología. La diabetes tipo 1 y la enfermedad celíaca, también conocida como intolerancia al gluten, comparten al menos algunas raíces genéticas, informaron investigadores.Este hallazgo conduciría a nuevos tratamientos para esas enfermedades autoinmunes, que se producen cuando el sistema inmunológico del organismo destruye equivocadamente el tejido saludable. El estudio, publicado en New England Journal of Medicine, también mencionó algunos disparadores ambientales que causan ambas condiciones. "Estos hallazgos sugieren mecanismos comunes que provocan tanto la celiaquía como la diabetes tipo 1. No esperábamos ver este grado tan elevado de factores de riesgo genéticos compartidos", dijo en un comunicado David van Heel, del Hospital St. Barts y la Escuela de Medicina y Odontología de Londres. El equipo internacional estudió a 9.339 personas saludables, 8.064 pacientes con diabetes tipo 1 y 2.560 celíacos. Los autores hallaron cuatro mutaciones genéticas de la enfermedad celíaca que también suelen aparecer en los diabéticos tipo 1 y dos variaciones de la diabetes juvenil que también aumentarían el riesgo de celiaquía. La diabetes juvenil o de tipo 1 es causada por la destrucción de las células beta del páncreas, las cuales producen la insulina necesaria para regular los niveles de azúcar en sangre. La condición es diferente a la diabetes tipo 2, más común, que está fuertemente relacionada con la mala alimentación y la falta de ejercicio. La celiaquía, que también es un desorden autoinmune, ataca el intestino delgado y vuelve a los pacientes intolerantes al gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Entre los síntomas de los celíacos se encuentran la hinchazón, el dolor abdominal, las náuseas, los problemas en la piel, la depresión, el dolor articular u óseo y los problemas nerviosos. "El próximo paso es comprender cómo esta susceptibilidad genética afecta el sistema inmune y seguir investigando los factores ambientales que alterarían el riesgo de diabetes tipo 1, que resulta de una interacción compleja entre la naturaleza y la crianza", dijo John Todd, de la University of Cambridge. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), al menos 171 millones de personas en todo el mundo padecen diabetes. Entre un 5 y un 10 por ciento tiene la de tipo juvenil. En tanto, la enfermedad celíaca afecta a alrededor del 1 por ciento de las personas con antepasados europeos. Fuente: Reuters 11 de diciembre 2008