LA CIRCUNCICION BERIT MILA

Este es mi pacto, que guardaréis
entre mí y vosotros
y tu descendencia después de ti:
Será CIRCUNCIDADO
todo varón de entre vosotros.
Génesis 17:10
LA CIRCUNCICION
BERIT MILA
Por: Jorge G.
Etimológicamente la palabra circuncisión del hebreo H4135‫ מּול‬mul raíz primaria;
recortar, i.e. acortar (específicamente el prepucio, i.e. circuncidar); por implicación
cercenar; figurativamente destruir:- circuncidar, -cortar. Y H4139‫ מּולָה‬mulá de H4135;
circuncisión:- circuncisión.
En Israel se le conoce como BERIT MILA. El Berit Milá (hebreo,
, "el pacto de la
palabra", o B(e)rit a secas; los judíosaskenazíes lo pronuncian Bris) es la circuncisión ritual
que se practica al varón judío al octavo día de haber nacido, como símbolo del pacto (brit)
entre Dios y Abraham.
Este es el tercer pacto que Dios hizo con los hombres. Leamos:
Génesis 17:1-13 Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció Jehová y
le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé perfecto. Y pondré mi pacto
entre mí y ti, y te multiplicaré en gran manera. Entonces Abram se postró sobre su rostro, y
Dios habló con él, diciendo: He aquí mi pacto es contigo, y serás padre de muchedumbre
de gentes. Y no se llamará más tu nombre Abram, sino que será tu nombre Abraham,
porque te he puesto por padre de muchedumbre de gentes. Y te multiplicaré en gran
manera, y haré naciones de ti, y reyes saldrán de ti. Y estableceré mi pacto entre mí y ti, y
tu descendencia después de ti en sus generaciones, por pacto perpetuo, para ser tu Dios, y
el de tu descendencia después de ti. Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la
tierra en que moras, toda la tierra de Canaán en heredad perpetua; y seré el Dios de
ellos. Dijo de nuevo Dios a Abraham: En cuanto a ti, guardarás mi pacto, tú y tu
descendencia después de ti por sus generaciones. Este es mi pacto, que guardaréis entre mí
y vosotros y tu descendencia después de ti: Será circuncidado todo varón de entre
vosotros. Circuncidaréis, pues, la carne de vuestro prepucio, y será por señal del pacto
entre mí y vosotros. Y de edad de ocho días será circuncidado todo varón entre vosotros
por vuestras generaciones; el nacido en casa, y el comprado por dinero a cualquier
extranjero, que no fuere de tu linaje. Debe ser circuncidado el nacido en tu casa, y el
comprado por tu dinero; y estará mi pacto en vuestra carne por pacto perpetuo.
La circuncisión debía hacerse al octavo día después de haber nacido el varón, leamos:
Génesis 17:12 Y de edad de ocho días será CIRCUNCIDADO todo varón entre vosotros
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por vuestras generaciones; el nacido en casa, y el comprado por dinero a cualquier
extranjero, que no fuere de tu linaje.
Ese día era considerado día de reposo, leamos: Juan 7:22-23 Por cierto, Moisés os dio la
circuncisión (no porque sea de Moisés, sino de los padres); y en el día de reposo
circuncidáis al hombre. Si recibe el hombre la circuncisión en el día de reposo, para que
la ley de Moisés no sea quebrantada, ¿os enojáis conmigo porque en el día de reposo
sané completamente a un hombre?
Esto nos deja claro algo… que no es nuestra tema en esta oportunidad y es que cuando
hablamos del día de reposo no debemos pensar siempre que se refiere al día sábado el cual
es el día de reposo señalado en las Escrituras, sino que hay otros días que también eran
considerados días de reposo, y no era precisamente el sábado. Esto porque supongamos que
alguien nacía el día miércoles, ocho días después debía ser circuncidado y ese día era
considerado día de reposo según la declaración de Jesucristo mismo.
Volvamos a nuestro tema medular.
¿Si alguien no era circuncidado que pasaba?
Era cortado del pueblo, leamos: Génesis 17:14 Y el varón incircunciso, el que no hubiere
circuncidado la carne de su prepucio, aquella persona será cortada de su pueblo;
ha VIOLADO mi pacto.
No podía participar de la Pascua, leamos: Éxodo 12:48 Mas si algún extranjero morare
contigo, y quisiere celebrar la pascua para Jehová, séale circuncidado todo varón, y
entonces la celebrará, y será como uno de vuestra nación; pero ningún incircunciso
comerá de ella.
Beneficios de participar de la Circuncisión
Era una señal de ser parte del pueblo de Dios. Génesis 17:10-11 Este es mi pacto, que
guardaréis entre mí y vosotros y tu descendencia después de ti: Será circuncidado todo
varón de entre vosotros. Circuncidaréis, pues, la carne de vuestro prepucio, y será por
señal del pacto entre mí y vosotros.
Si alguien que no fuera parte del pueblo de Israel participaba de la Circuncisión venía a ser
parte del pueblo de Dios, aun cuando no haya sido Israelita según la carne, y por ende venia
ser parte del pueblo de Dios y ser reconocido como pueblo, leamos: Éxodo 12:48 Mas si
algún extranjero morare contigo, y quisiere celebrar la pascua para Jehová, séale
circuncidado todo varón, y entonces la celebrará, y será como uno de vuestra nación;
pero ningún incircunciso comerá de ella.
Veamos el caso de Moisés
Génesis 4:20-26 Entonces Moisés tomó su mujer y sus hijos, y los puso sobre un asno, y
volvió a tierra de Egipto. Tomó también Moisés la vara de Dios en su mano. Y dijo Jehová
a Moisés: Cuando hayas vuelto a Egipto, mira que hagas delante de Faraón todas las
maravillas que he puesto en tu mano; pero yo endureceré su corazón, de modo que no
dejará ir al pueblo. Y dirás a Faraón: Jehová ha dicho así: Israel es mi hijo, mi
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primogénito. Ya te he dicho que dejes ir a mi hijo, para que me sirva, mas no has querido
dejarlo ir; he aquí yo voy a matar a tu hijo, tu primogénito. Y aconteció en el camino, que
en una posada Jehová le salió al encuentro, y quiso matarlo. Entonces Séfora tomó un
pedernal afilado y cortó el prepucio de su hijo, y lo echó a sus pies, diciendo: A la verdad
tú me eres un esposo de sangre. Así le dejó luego ir. Y ella dijo: Esposo de sangre, a causa
de la circuncisión.
Moisés había crecido en Egipto y era un varón incircunciso, cuando Dios le encomienda
liberar a Israel de Egipto trata de quitarle la vida (vrs 24) Séfora entiende eso y circuncida a
su hijo (vrs 25) y es así que El Señor dejo ir a Moisés, pero deja claro que fue por la
circuncisión hecha en ese momento (vrs 26) esto nos muestra una sombra de lo que
Jesucristo nuestro Señor iba a ser por nosotros.
Jesús fue circuncidado
Lucas 2:21 Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por
nombre JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel antes que fuese concebido.
La circuncisión es un mandamiento de Dios el cual no ha sido abolido, pues de ser así
tendríamos que mostrar un texto de las Escrituras que digan claramente eso. ¿Entonces,
debemos circuncidarnos los cristianos? ¡Sí! A todos se nos exige la circuncisión, esto no
solo es para Israel pues Dios fue claro en decir que todo aquel que no fuera circuncidado
sea Israelita o Gentil (extranjero) debía ser circuncidado para entrar en el pacto de Dios y
que el incircunciso sea Israelita o Gentil debía ser cortado y era violador del Pacto de Dios.
Cuando nosotros aceptamos a Cristo como Señor y Salvador venimos a ser parte de la
Iglesia de lo cual dice la escritura: Colosenses 1:18 y él es LA CABEZA del cuerpo que es
la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo
tenga la preeminencia;
La Iglesia es el cuerpo de Cristo y los miembros de ese cuerpo somos todos los que nos
hemos rendido a los pies del único Salvador, Jesucristo. Leamos: 1 Corintios 10:17 Siendo
uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, SOMOS UN CUERPO; pues todos participamos
de aquel mismo pan. Leamos también: Efesios 5:30-32 porque somos miembros de su
cuerpo, de su carne y de sus huesos. Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y
se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo
esto respecto de Cristo y de la iglesia.
Nosotros fuimos introducidos al Cuerpo de Cristo, y el cuerpo de Cristo ya fue
circuncidado, leamos: Lucas 2:21 Cumplidos los ocho días para circuncidar al niño, le
pusieron por nombre JESÚS, el cual le había sido puesto por el ángel antes que fuese
concebido.
Es por eso que dice la Palabra de Dios. Colosenses 2:11 En él también fuisteis
circuncidados con circuncisión NO HECHA A MANO, al echar de vosotros el cuerpo
pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo;
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Si analizamos somos circuncisos por Jesucristo, así como a la manera en que el hijo de
Moisés fue circuncidado por él, nosotros la recibimos de Cristo. Esto nos deja claro que no
ha quedado abolida la circuncisión pues estamos en el cuerpo de Cristo el cual aunque era
Hijo de Dios fue circuncidado, pero al estar dentro de su cuerpo no necesitamos
circuncidarnos pues estamos dentro de un cuerpo que ya fue circuncidado. Pues escrito
esta: Colosenses 2:9-11 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la
Deidad, y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y
potestad. En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al
echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo;
La otra circuncisión la del Corazón
Jeremías 4:4 Circuncidaos a Jehová, y quitad el PREPUCIO de vuestro corazón, varones
de Judá y moradores de Jerusalén; no sea que mi ira salga como fuego, y se encienda y no
haya quien la apague, por la maldad de vuestras obras.
Deuteronomio 10:16 Circuncidad, pues, el PREPUCIO de vuestro corazón, y no
endurezcáis más vuestra cerviz.
Esta es otra circuncisión de la cual debemos participar todos, es menester poseer las dos
para entrar en el Nuevo Pacto con Dios, leamos: Romanos 2:25-29 Pues en verdad la
circuncisión aprovecha, si guardas la ley; pero si eres transgresor de la ley, tu
circuncisión viene a ser incircuncisión. Si, pues, el incircunciso guardare las ordenanzas
de la ley, ¿no será tenida su incircuncisión como circuncisión? Y el que físicamente es
incircunciso, pero guarda perfectamente la ley, te condenará a ti, que con la letra de la ley
y con la circuncisión eres transgresor de la ley. Pues no es judío el que lo es exteriormente,
ni es la circuncisión la que se hace exteriormente en la carne; sino que es judío el que lo es
en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en espíritu, no en letra; la alabanza del
cual no viene de los hombres, sino de Dios.
No podemos estar en el Pacto de Dios sin la circuncisión de carne hecha por Jesucristo a
nuestro favor, ni podemos andar en Él si no tenemos la del corazón, no debemos
equivocarnos y pensar que la circuncisión del corazón es la descrita en Colosenses 2, pues
la escritura es clara al declarar que son dos.
Prueba de eso es que el hombre puede recibir a Cristo en su vida y aun así andar en la vieja
naturaleza, esto es porque solo tiene una circuncisión la cual es la Señal del Pacto con Dios
y que lo hace parte de su Pueblo, es por eso que el Señor dice: Juan 8:31 Dijo entonces
Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra,
seréis verdaderamente mis discípulos;
La única forma de guardar la Palabra es con la circuncisión del Corazón. Pablo entendiendo
esto por el Espíritu declara lo siguiente: 1 Corintios 7:18-20 ¿Fue llamado alguno siendo
circunciso? Quédese circunciso. ¿Fue llamado alguno siendo incircunciso? No se
circuncide. La circuncisión nada es, y la incircuncisión nada es, sino el guardar los
mandamientos de Dios. Cada uno en el estado en que fue llamado, en él se quede. Esto es
porque algunos así como Pablo era circuncidado, otros no lo eran, pero ya no necesitaban la
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circuncisión de carne porque al ser introducidos dentro del Cuerpo de Cristo la circuncisión
de Cristo era y es más que suficiente.
¿Cómo y cuando recibimos la circuncisión del corazón?
Ezequiel 36:25-27 Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas
vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré corazón nuevo, y
pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra,
y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis
en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.
La circuncisión del corazón es la que genera obediencia a la Palabra leamos: Deuteronomio
10:12-16 Ahora, pues, Israel, ¿qué pide Jehová tu Dios de ti, sino que temas a Jehová tu
Dios, que andes en todos sus caminos, y que lo ames, y sirvas a Jehová tu Dios con todo
tu corazón y con toda tu alma; que guardes los mandamientos de Jehová y sus estatutos,
que yo te prescribo hoy, para que tengas prosperidad? He aquí, de Jehová tu Dios son los
cielos, y los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en ella. Solamente de
tus padres se agradó Jehová para amarlos, y escogió su descendencia después de ellos, a
vosotros, de entre todos los pueblos, como en este día. Circuncidad, pues, el prepucio de
vuestro corazón, y no endurezcáis más vuestra cerviz.
Teniendo todo este panorama claro leamos: Gálatas 5:1-6 Estad, pues, firmes en la libertad
con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud. He aquí,
yo Pablo os digo que si os circuncidáis, de nada os aprovechará Cristo. Y otra vez testifico
a todo hombre que se circuncida, que está obligado a guardar toda la ley. De Cristo os
desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído. Pues nosotros por
el Espíritu aguardamos por fe la esperanza de la justicia; porque en Cristo Jesús ni la
circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.
Si después de aceptar a Cristo nos queremos circuncidar no podremos porque estamos
espiritualmente sin prepucio que cortar, ya que un cuerpo solo puede ser circuncidado una
sola vez, la única forma de tener un prepucio que circuncidar es saliéndonos o
desligándonos del cuerpo de Cristo, al hacer esto estaríamos declarando que tenemos en
poco la circuncisión de Cristo, y el versículo 3 dice: Y otra vez testifico a todo hombre que
se circuncida, que está obligado a guardar toda la ley.
Lo cual nos resultara imposible pues la única forma de poder guardar la Tora (mal llamada
ley) de Dios es teniendo el corazón circuncidado y poseyendo el Espíritu Santo de Dios.
Leamos: Ezequiel 11:19-20 Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de
ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de
carne, para que anden en mis ordenanzas, y guarden mis decretos y los cumplan, y me sean
por pueblo, y yo sea a ellos por Dios. Y esta circuncisión solo la puede dar Dios quien es el
único que puede cambiar el corazón de piedra y colocar un corazón de carne.
En conclusión necesitamos participar de las dos circuncisiones.
Nuestros estudios no tienen derechos reservados pueden ser reproducidos sin autorización alguna lo
único que le solicitamos es que se le de el crédito a la TERCERA IGLESIA EVANGÉLICA AMIGOS,
la razón por la cual rogamos esto es para darnos a conocer a aquellos que no nos conocen.
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