EL USO DE LAS TIC EN LA PRODUCCIÓN DE TEXTOS ORALES FORMALES Miguel Muñiz En estas páginas desarrollaremos una propuesta para integrar las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) en el proceso de enseñanza-aprendizaje en las áreas lingüísticas. Esta propuesta nace de la reflexión sobre la necesidad de alcanzar el reto educativo que se plantea en la Sociedad de la Información de ser capaces de (enseñar y aprender a) transformar la información en conocimiento. Para ello intentamos desde un enfoque didáctico determinado servirnos de las herramientas que nos proporcionan las TIC. También somos conscientes de que la generalización del uso de las TIC han puesto en evidencia nuevos escenarios de aprendizaje y nuevas formas de llegar al conocimiento. En esta nueva sociedad, quizá, el desafío más importante sea aprender a obtener la información, ser capaz de organizarla y darle un sentido, esto es, dotarla de significatividad. De hecho frente a una escuela tradicional que presenta el conocimiento (el saber) como algo definitivo, desde una perspectiva inmutable y con escasas fuentes de información, debemos situarnos en un entorno caracterizado por los cambios, en lugar de un universo cerrado, este debe ser abierto, sin límites y diverso, que es precisamente el que rodea al alumno. La escuela ha dejado de ser el único escenario de aprendizaje, la enorme fuerza de los medios ha provocado otros escenarios de aprendizaje a los que la escuela no puede ser ajena.. Aplicado a la educación se puede resumir en las palabras de Dewey1: “la educación es una constante reorganización o reconstrucción de la experiencia”. Esta 1 J. Dewey (1916) Democracia y educación. Introducción a la filosofía de la educación. Madrid. Morata. 1995 1 experiencia de la que hablaba Dewey, Aristóteles la entendía como el conocimiento de las cosas concretas, que era el paso previo para llegar a la “episteme,” (conocimiento de las causas y principios de las cosas), y al “nous” a la sabiduría. Hoy día se habla de datos definiéndolos como un conjunto discreto de hechos objetivos, pero por sí mismos carecen de sentido, describen parcialmente lo que sucede y no proporcionan juicio ni interpretación. Sin embargo, esos datos en un contexto determinado adquieren sentido, relevancia y se convierten en información. Esta información se convierte en conocimiento cuando es transformada mediante una serie de acciones: comparar, relacionar, inferir, poner en común (saber que piensan otros sobre...) Podemos volver a Dewey para encontrar propuestas metodológicas fértiles para llegar al conocimiento en la escuela: la resolución de problemas, en la que se plantea la enseñanza y el aprendizaje como un proceso de investigación en el que el educador tiene el papel de orientador; Kilpatrick2, método de proyectos, mediante el que se perseguía la realización de un estudio pluridisciplinar a partir de un tema o foco de interés. Más cercanas a nosotros son las propuestas de D. Cassany3 o Anna Camps4 a propósito de los proyectos de escritura o la propuesta de J. Dolz de secuencias didácticas, “pequeños ciclos de enseñanza y aprendizaje formados por un conjunto de actividades articuladas y orientadas a una finalidad, es decir, a la producción de un texto oral o escrito” que es el reflejo del conocimiento logrado por los aprendices. La propuesta que hacemos a continuación se basa en: 2 William H. Kilpatrick, The project method, Teachers college record (Nueva York), vol. XIX, nº 4, septiembre de 1918, págs. 319-35 3 Cassany, D. (1990), Enfoques didácticos para la enseñanza de la expresión escrita, CLE, 6, págs. 63–80. (Disponible en http://www.upf.es/personal/danielcass/enfoques.htm) Cassany, D. (1999), Construir la escritura, Barcelona, Paidós 4 Camps, A. (1990), Modelos del proceso de redacción: algunas implicaciones para la enseñanza. Infancia y Aprendizaje, 49 Camps, A. (1994), L’ensenyament de la composició escrita, Barcelona, Barcanova. Camps, A. (1996), Proyectos de Lengua: entre la teoría y la práctica, C&E, 2, págs. 43–57. 2 o El planteamiento de la enseñanza de la lengua oral formal que hacen Dolz y Vilà (1997) que implica cuestionar el tratamiento de la lengua oral y de la lengua escrita como compartimentos estancos. Lo que a su vez conlleva una visión compleja de la enseñanza-aprendizaje de la lengua en la que las cuatro habilidades lingüísticas se interrelacionan en una misma secuencia didáctica y en cuyas actividades la reflexión sobre la lengua también está presente. A propósito de la integración de las habilidades lingüísticas Camps y Vilá5 dicen: “...se habla para escribir y aprender a escribir, se lee y se escribe para producir discursos orales formales, se lee para escribir y se escribe para entender mejor lo que se lee, lo que se escucha, etc.” o La propuesta de secuencias didácticas que se enmarca dentro de la propuesta metodológica de trabajo por tareas, (Dewey) uno de los enfoques más fértiles tanto para enseñanza de composición escrita (Camps, 1994; Ribas, 1997), como para la enseñanza de la lengua oral (Dolz, 1994; Vilà, 2002). J. Dolz define así las secuencias didácticas: “Las secuencias didácticas consisten en pequeños ciclos de enseñanza y aprendizaje formados por un conjunto de actividades articuladas y orientadas a una finalidad, es decir, a la producción de un texto oral o escrito. Pretenden articular de forma explícita los objetivos, los contenidos y las actividades en un proyecto de trabajo o de producción verbal. Se proponen unos objetivos limitados y compartidos por los alumnos, y las actividades metalingüísticas y metadiscursivas que se presentan en estas secuencias están minuciosamente planificadas y adaptadas a cada situación educativa”. 5 Camps, A., Vilá, M.(2003), Proyectos para aprender lengua, en Camps, A.(Comp.), (2003) Secuencias didácticas para aprender a escribir, Barcelona. (Originalmentye publicado en Articles de Didáctica de la Llengua i de la literatura nº2, 1994. 3 Por otro lado, entendemos la integración de las TIC en la secuencia didáctica como un instrumento al servicio de la enseñanza y del aprendizaje, una herramienta para aprender y enseñar, que debe facilitar en este proceso la tarea del profesorado y del alumnado. Así, permitirán al profesor, en su papel de mediador, seguir el desarrollo y mantener una tutoría de la tarea con los alumnos, la posibilidad de la inmediatez en la corrección de los textos. A los alumnos les facilitarán el trabajo colaborativo, la corrección entre iguales, la autorregulación del aprendizaje, la utilización de la carpeta o portfolio para la evaluación y autoevaluación. Del mismo modo, el uso de las TIC no ha de plantear dificultades, es decir, no debe requerir por parte de profesorado y alumnado grandes conocimientos ni mucho tiempo para su aprendizaje, pues, si no es así, no tendría sentido su utilización. Otra condición para su uso es que el equipamiento informático ha de estar al alcance de cualquier centro educativo y no debe ser costoso, pues ningún centro educativo puede permitirse la actualización constante de hardware y software. Por ello, intentaremos mostrar como utilizando aplicaciones generales, esto es, aplicaciones de uso universal (en este caso MSWord y MSPowerPoint cualquier versión a partir MS Office 95 es válida), que no están especialmente diseñadas para ser utilizadas exclusivamente en el ámbito educativo, es posible “convertirlas” en útiles didácticos. Además, sabemos por recientes estudios sobre la utilización de las TIC por el profesorado que un tanto por ciento bastante elevado del mismo utiliza estas aplicaciones o está familiarizado con ellas. El uso de las T.I.C. en la producción de textos proporciona mejoras significativas para llevar a cabo el proceso de planificación y preparación de una exposición oral y facilita llevar a cabo ensayos de la exposición que permitirán la corrección entre iguales, el trabajo cooperativo y la autorregulación del aprendizaje. Esto es, facilitan las operaciones a las que nos hemos referido anteriormente para lograr el conocimiento. 4 Si bien, hemos de ser conscientes, como hace notar J. Adell6, de que los términos información y conocimiento no son sinónimos. “El conocimiento implica información interiorizada y adecuadamente integrada en las estructuras cognitivas de un sujeto. Es algo personal e intransferible: no podemos transmitir conocimientos, sólo información, que puede (o no) ser convertida en conocimiento por el receptor, en función de diversos factores (los conocimientos previos del sujeto, la adecuación de la información, su estructuración, etc.)”. Por tanto el protagonista debe ser el alumno y el proceso tendrá su foco en el aprendizaje. También se intentará que el conocimiento logrado se transmita como información al resto del alumnado. En el proceso de producción del texto oral podemos distinguir tres fases: planificación, preparación y exposición. En nuestra propuesta nos centraremos en las dos primeras, sobre todo, porque nos interesa mostrar la interrelación entre las habilidades lingüísticas básicas: hablar, escuchar, leer y escribir, y también, como es posible reflexionar sobre la lengua durante el desarrollo de la tarea. FASE DE PLANIFICACIÓN Esta fase implica un conocimiento del mundo o un saber enciclopédico que difícilmente podemos esperar de nuestros alumnos. Por tanto, se hace necesaria la búsqueda y selección de información para ampliar sus conocimientos sobre el tema propuesto, y sobre el tipo de texto o género textual. Para ello utilizaremos Internet como fuente de información y de ejemplos de modelos textuales (en la red confluyen todas las fuentes de información escritas y audiovisuales). Esta utilización de Internet tiene ventajas e inconvenientes. La gran ventaja es encontrar gran cantidad de información. Sin embargo, esta ventaja en realidad produce inconvenientes: el exceso de información desborda al alumno, fiabilidad de 6 J. Adell (1997), Tendencias en educación en la sociedad de las tecnologías de la información, EDUTEC(http://www.uib.es/depart/gte/revelec7.html) 5 las fuentes, dificultad de acceso a la información debido al diseño de las páginas web, y por otra parte hay que pensar que el tiempo de clase es limitado. Aún siendo conscientes de estas dificultades, creemos que en la llamada Sociedad de la Información (SI) en la que se insertarán nuestros alumnos es básico adquirir habilidades relacionadas con la información: utilizar sistemas de información, discriminar la calidad de las fuentes, precisar su fiabilidad, aplicar la información obtenida y comunicar la información encontrada. Veamos lo que sucedería en un supuesto real. Supongamos que el tema son los maremotos. Veamos que sucede introduciendo este tópico en un buscador de Internet. Como se puede observar en la imagen el buscador nos da 130.000 resultados, pero lo más importante es que nos indica que quizá sea mejor hacer la búsqueda por “terremotos” con lo que también se puede empezar a trabajar sobre los contenidos. También es conveniente utilizar la pequeña información que nos devuelve el buscador acerca de cada página, para poder discriminar aquellas que pueden interesar de las que no. En esta tarea, el papel del profesor como mediador-facilitador es fundamental y el conocimiento previo que tenga de las fuentes de información que utilicen los alumnos facilitará su tarea de guía. Además, con posterioridad le servirá 6 para poder evaluar la cantidad y la calidad de la información empleada y el uso que se hace de esta información en la producción del texto. A partir de los resultados dados por el buscador, supongamos que se seleccionan los siguientes: http://www.sinaproc.gob.pa/maremotos.htm del Gobierno panameño. http://revista.consumer.es/web/es/20041001/medioambiente/ de la Revista Consumer. http://www.angelfire.com/nt/terremotos/ una página personal. http://www.geo.ign.es/servidor/sismo/sismo.html El Instituto Geográfico nacional. http://es.wikipedia.org/wiki/Tsunami la enciclopedia colaborativa de la red. 7 Hemos elegido estas páginas entre los primeros 20 resultados. Nos parece que la información que aparece es: • Representativa de los distintos tipos de páginas que se pueden encontrar en Internet y por tanto también nuestros alumnos como fuente de información fuera de la escuela o en la vida adulta. • Los alumnos tienen información suficiente y es adecuada para comenzar su trabajo. • El género textual usado en ellas es expositivo, que también será el utilicen los alumnos, aunque la información se estructura de modo diferente y en diferentes soportes: texto, película, etc. Por supuesto, aquí no acaba la búsqueda de información, más tarde, en la medida en que se necesite será posible ampliar la búsqueda y al mismo tiempo utilizar otros procedimientos y otros tipos de buscadores. Una vez hecha una primera selección de la información será necesaria su manipulación. Dado que en todas las páginas tienen una estructura temática 8 similar, (definición, causas, escalas de medición, observación, zonas de riesgo, etc.), se puede distribuir a los alumnos en grupos para que dentro de cada grupo cada uno de los alumnos trabaje el mismo apartado en distintas páginas. Esto permitiría al profesor distribuir las páginas entre los alumnos atendiendo a su dificultad o a otros factores con el objetivo de tratar la diversidad, aunque todos los alumnos realicen el mismo trabajo. En este caso proponemos comenzar con una actividad de comprensión para discriminar las ideas principales de las secundarias del texto. Para que más tarde cada grupo de alumnos intercambie la información. De este modo, verán semejanzas y diferencias en la información, la contrastarán y podrán ser críticos con la información, por tanto, no debe preocupar que utilicen fuentes de información erróneas, pues tendrán herramientas para poder discriminarla.. El primer paso para utilizar la información contenida en páginas web es llevarla al procesador de textos. El procedimiento es muy sencillo, sólo tenemos que seleccionar aquello que nos interese con el cursor y copiarlo utilizando esta opción del menú contextual pulsando el botón derecho del ratón sobre la selección desde el mismo navegador. A continuación, se abre un archivo del procesador de textos y simplemente lo pegamos pulsando sobre el icono Pegar o utilizando la combinación de teclas Ctrl+V. De este modo ya tenemos disponible el texto para trabajar con él. Se puede comenzar a trabajar con el texto utilizando la herramienta Autorresumen del procesador de textos. La herramienta no realiza resúmenes perfectos, pero si funciona con corrección con textos expositivos y argumentativos. El comando Autorresumen lo encontramos en el menú Herramientas del procesador de textos. Al pulsar, aparecerá en pantalla un cuadro de diálogo con los datos del resumen y nos dará a elegir entre 4 presentaciones diferentes. De Resaltar estas puntos proponemos principales elegir por considerar que es la que más se adecua a nuestros propósitos. Después de pulsar el botón Aceptar, aparecerá en pantalla el texto con las ideas principales resaltadas con un marcador 9 amarillo. También aparecerá el menú flotante Autorresumen con el que podremos variar el porcentaje del texto del resumen con respecto al texto original. Veamos los resultados de una de estas páginas: El resultado es que los alumnos se encuentran con una propuesta que deben trabajar y verificar si es correcta. La experiencia nos dice que muchas ocasiones el procesador de textos no “distingue” correctamente entre las ideas principales y secundarias porque el texto es mejorable. Así, serán los alumnos quienes tendrán que decidir si el procesador “distingue” ideas principales de ideas secundarias, lo que les obligará necesariamente a reflexionar sobre la lengua, sobre todo si se preguntan por qué en unos párrafos realiza bien esta función y otros no.. Una vez realizada esta parte de la tarea, puede ser el momento de que los miembros de cada uno de los grupos pongan en común su trabajo, evalúen la información, qué información utilizarán, cuál desecharán, para qué la usarán y, decidan si necesitan más información y realizar nuevas búsquedas. 10 Una vez que hayan decidido cuáles son las ideas principales que van a utilizar en la tarea tendrán que organizarlas de acuerdo con las reglas sociocomunicativas subyacentes al tipo y género textual, es decir, construir la estructura del futuro texto. No podemos olvidar que los textos que han estado manejando tienen estructuras arquetípicas de textos expositivos, por tanto, se pueden utilizar para reflexionar sobre la lengua, también en este caso. Para la elaboración del guión con el procesador de textos se puede utilizar la Vista Esquema en el menú Ver (Muñiz, M. 2001). FASE DE PREPARACIÓN En esta fase cambiaremos de programa informático, dejaremos de trabajar con el procesador de textos y comenzaremos a trabajar con un programa de presentaciones, esto es, la utilidad adecuada para construir una exposición oral. El propósito es “convertir” esta aplicación en un instrumento didáctico que facilite la preparación de la exposición. El esquema construido con el procesador de textos se puede exportar al programa de presentaciones, lo que nos permitirá no perder nada de lo trabajado hasta el momento y nos facilita el entorno de trabajo adecuado para preparar la exposición. Para exportar el archivo del procesador de texto al PowerPoint, solamente tendremos que elegir la opción del menú Archivo Enviar a Microsoft PowerPoint. 11 Cada uno de los párrafos del esquema pasará a ser una diapositiva. De este modo llegamos al “escritorio” de PowerPoint que tiene tres espacios de trabajo diferenciados: o La ventana izquierda nos muestra cada una las diapositivas con el texto que contienen. En este espacio de trabajo se puede modificar el texto sin tener que trabajar sobre la diapositiva. Recomendamos esta opción, pues evita distracciones en cuanto al formato de la presentación, etc., que se puede trabajar posteriormente una vez acabada la preparación. o En la ventana superior de la derecha de la pantalla podemos visualizar la diapositiva, esto es, lo que verán los oyentes y apoyará la exposición oral. o En la ventana inferior de la derecha de la pantalla encontramos un lugar para escribir las “notas del orador”. Esta ventana la consideramos esencial para “atenuar la sobrecarga cognitiva” (Vilà, M. 2002). Proponemos que 12 estas notas estén a disposición del alumno durante el momento de la producción, pues se trata de la producción de un texto oral, no de memorizar y recitar. Quisiéramos hacer notar la complejidad cognitiva que requiere esta tarea, pues en realidad, el alumno tendrá 3 tareas diferentes que se corresponden con cada uno de los espacios de trabajo anteriormente señalados: Asimismo, habrá que añadir que los destinatarios de los textos son diferentes, en un caso serán sus oyentes y en otro será él mismo. o Planificar la estructura del texto oral. o Producir el texto de las diapositivas en el que apoyará su discurso oral. o Producir el texto de las notas del orador. En el “escritorio”, en la ventana derecha encontramos dos opciones que representan las pestañas Esquema y Diapositivas recomendamos utilizar Esquema y al mismo tiempo activar la barra de herramientas Esquema, lo que permitirá cambiar el orden de las diapositivas con simples clics de ratón. Esto facilitará el trabajo con la estructura del texto. Otra posibilidad es utilizar el Clasificador de diapositivas del menú Ver para estructurar el texto que vamos a presentar a los oyentes y que actuará como guía de la exposición. Podremos cambiar el orden de las diapositivas simplemente arrastrándolas al lugar deseado. Además de la planificación de la estructura del texto, se ha de trabajar otra estructura que hace referencia a la presentación del texto a la audiencia. Su equivalente en la un texto escrito sería la estructuración de un párrafo. Es decir, habrá que tomar decisiones sobre cada una de las partes del discurso aquella que los oyentes verán y lo que oirán. Siguiendo con nuestro ejemplo para explicar cómo se producen y desarrollan los maremotos o tsunamis, podrá utilizar un gráfico (tomado en este caso de la página de Wikipedia) para presentarlo a los oyentes y en el espacio de notas del orador la estructura que corresponde al discurso oral. 13 Esto permitirá que los alumnos reflexionen para identificar las características de la situación de comunicación en la que se producirá el texto para adecuar el mensaje a las misma, teniendo en cuenta la influencia en el enunciado del destinatario, del espacio y del tiempo compartidos con el destinatario, del canal utilizado y de la finalidad que persigue el mensaje que están elaborando. En esta fase de elaboración de borradores el comando Comentario del menú Insertar facilita la corrección entre iguales y el aprendizaje colaborativo, pues permite la inserción de notas sobre los textos. Esta herramienta también la puede utilizar el profesor para introducir comentarios que permitan reconducir el trabajo a los alumnos, hacer propuestas de mejora, en definitiva llevar a cabo una evaluación formativa. 14 Los comentarios se pueden introducir tanto en el texto correspondiente a la diapositiva como en el texto correspondiente a las notas del orador. En el primer caso aparecerá la llamada que indica el comentario junto al texto, en el segundo caso aparecerá en la parte superior izquierda de la diapositiva. Como se puede apreciar en la imagen cada comentario nos ofrece información nada despreciable: el autor del comentario y la fecha. Esto le permitirá al profesor evaluar a los alumnos por los comentarios hechos y trabajar el eje actitudinal del curriculum. También es posible utilizar este comando para que los alumnos a medida que vayan construyendo el texto vayan incluyendo notas sobre su trabajo (información que falta, revisión para más tarde de algún aspecto, dificultades con las que se han encontrado, etc. Esto permitiría trabajar la autorregulación del aprendizaje y al mismo tiempo permitiría al profesor ofrecer ayudas contextualizadas e individualizadas. 15 Para introducir un comentario, una vez seleccionado el texto, se elige la opción Comentario del menú Insertar y aparecerá un recuadro en que podremos escribir. Una vez introducido el comentario para cerrar con pinchar con el ratón fuera del cuadro es suficiente. Para ver los comentarios sólo hay que situar el puntero del ratón sobre la llamada. Igualmente, es posible editarlos para introducir modificaciones, eliminarlos, etc. Estas opciones aparecen en un menú contextual pulsando sobre la llamada del comentario con el botón derecho del ratón. FASE DE EXPOSICIÓN Las posibilidades multimedia que nos ponen al alcance de la mano las TIC nos permiten llevar a cabo ensayos de la puesta en escena de la exposición y obtener un borrador sobre el que se pueda trabajar más tarde para mejorar estos aspectos. Así se pueden utilizar: • Para La herramienta del sistema operativo: Grabadora de sonidos. activar la grabadora de sonidos del sistema operativo, que encontraremos en Archivos de programa / Accesorios / Entretenimiento. Su manejo es simple, los mandos están representados del mismo modo que los de cualquier reproductor de música. La grabadora de sonidos funciona en segundo plano, por tanto, seguirá funcionando aunque en pantalla tengamos las diapositivas de la exposición. • Webcam: periférico barato, de instalación y uso sencillo que añadiría la imagen y su reproducción posterior. Estos instrumentos servirían para analizar la exposición y llevar a cabo una evaluación formativa de la misma. Finalmente, el programa de presentaciones nos permite imprimir 3 diapositivas en cada hoja dejando un espacio a la derecha para recoger notas o apuntes de lo expuesto por el orador. 16 Consideramos que es un buen instrumento para lograr una escucha activa y de gran ayuda durante la actividad de la exposición. Pues, su lectura activaría los conocimientos previos de los oyentes y facilitando la comprensión de la exposición. Al mismo tiempo permite que durante la exposición oral los alumnos estén activos y tomen notas que posteriormente serán susceptibles de ser revisadas en sus contenidos por el el alumno que ha hecho la exposición como experto. BIBLIOGRAFÍA Cassany, D., Luna, M., Sanz, G., (1994): Enseñar lengua. Graó. Dolz, J.;Vila, M., (1997): L’oral formal. Articles de Didàctica de la Llengua y de la Literatura, nùm. 12 Dolz, J., (1994): Seqüències didàctiques i ensenyament de la llengua: més enllà dels projectes de lectura i d’escriptura. Articles de Didàctica de la Llengua i de la Literatura, núm. 2. Muñiz, M., (2001) El uso de las TIC en la producción de textos, Actas III Jornades Multimèdia Educatiu. (Ampliado en http://www.lenguaweb.net/tic/tic.htm) Ribas, T., (1997): L’avaluació formativa en el procés d’escriptura: un instrument per a l’aprenentatge. En Ribas, T. (Coord.) (1997): L’avaluació formativa en l’area de llengua. Graó. Vilà, M. (2002) La seqüència didàctica com a metodologia per a l’ensenyament i l’aprenentatge de la llengua oral formal. En Vilà, M. (Coord.) (2002) Didàctica de la llengua oral formal. Continguts d’aprenentatge y seqüències didàctiques. Graò. 17