IMPUESTO SOBRE LA RENTA. DEDUCCION POR PERDIDA Y

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800682. . Tribunales Colegiados de Circuito. Séptima Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen 133-138, Sexta Parte, Pág. 78.
IMPUESTO SOBRE LA RENTA. DEDUCCION POR PERDIDA Y COMO COSTO.
Conforme al artículo 20, fracción II, de la Ley del Impuesto sobre la Renta, de los ingresos
acumulables se puede deducir el costo de las mercancías o de los productos vendidos. Y
conforme al artículo 23, segundo párrafo, el importe de las mercancías en existencia, que por
deterioro u otras causas hubieren perdido su valor, deberá deducirse de los inventarios
durante el ejercicio en que esto ocurra, siempre que la secretaría autorice su destrucción o
donación. Si la pedacería hubiese sido utilizada en fabricar artículos en el horno y vendidos,
su valor se podría haber deducido como costo de producción; si no se utilizó para fabricar los
productos vendidos, y no hubiese perdido su valor, no se cargaría a costos, y se registraría esa
pedacería en los inventarios. Y si perdió su valor, sin haberse utilizado como costo de
producción de artículos vendidos, podría darse de baja en los inventarios. Pero no puede ser
deducida en el mismo ejercicio como costo de producción y, nuevamente, como pérdida en
los inventarios, pues esto implica una doble deducción de la misma pedacería. Luego la
resolución reclamada está ajustada a derecho al sostener que la pedacería no pudo legalmente
deducirse como pérdida en el inventario, por haber sido incluida como costo de producción,
en el mismo ejercicio. Pero la resolución administrativa eludió resolver concretamente la
cuestión que le fue planteada, si la autoridad no resolvió si el vidrio debió destruirse, y si
debió deducirse el valor del mismo, ya como costo, ya como pérdida, pues se limitó a
resolver que por haber sido deducido como costo, ya no podría autorizar su deducción como
pérdida. Pero no aclaró si se reservó el derecho de no aceptar la deducción como costo, pues
en caso de hacerlo así, vendría a efectuar después el cobro sin haber resuelto correcta y
legalmente sobre la procedencia de la destrucción como pérdida. En consecuencia, procede
conceder a la quejosa el amparo solicitado, para el efecto de que la Sala responsable dicte una
nueva sentencia en la que declare la nulidad de la resolución impugnada en el juicio fiscal,
para el diverso efecto de que la autoridad demandada dicte a su vez, con libertad de
jurisdicción, una nueva resolución en la que resuelva si por haber negado la deducción y
destrucción del vidrio, como pérdida, aceptó su deducción como costo; o si estima que
debieron rechazarse ambas deducciones. Y, en su caso, y respecto de la nueva resolución que
se dicte se deben dejar a salvo los derechos de la quejosa para plantear la procedencia de la
deducción, como costo o como pérdida, que estime legalmente procedente.
PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA ADMINISTRATIVA DEL PRIMER
CIRCUITO.
Amparo directo 524/79. Cristalería, S.A. 19 de marzo de 1980. Unanimidad de votos.
Ponente: Guillermo Guzmán Orozco.
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