“Amar la lectura es trocar horas de hastío por horas de inefable y deliciosa compañía.” John Fitzgerald Kennedy A continuación se exponen los relatos ganadores del I Concurso de Microrrelatos en la U.P. “Abreviarte”, esperamos, que a través de ellos, todo el mundo pueda encontrar en la Universidad Popular de Albacete esas “horas de inefable y deliciosa compañía”. Gracias por la participación HOY SOLO PEDIRÁ SU TURNO María Esther Zárate Moya (Primer Premio) Las manchas de grasa no le impedían leer con curiosidad el folleto rescatado entre la basura. Recorrían sus manos con avidez las páginas, sus ojos se abrían ante la posibilidad del sueño cumplido. Se aseó en la fuente observando la larga fila, nadie reparó en él, nunca lo hacían. Mientras se acercaba a “la Saramago” acarició el bolsillo, las monedas de todo el mes bastarían. Esperando su turno, era uno más. Sólo la risa desdentada de El Trucha al escucharle que estaba matriculado en la Universidad, le devolvió al cartón sobre el que dormirá imaginando la primera clase de Astronomía. TE CUENTO Francisco David Codina García (Segundo premio) Nos conocimos en las clases de la UP, y sin apenas darnos cuenta, tejimos una amistad que cristalizó en amor. Sentíamos el ardor de la juventud en la piel y en los labios. ¡Ah!, fue un sueño. Tanto que unimos nuestras vidas, disfrutando la pasión. Una noche llegó fatigado, refirió algo sobre una reyerta; yo estudiaba el guión y no le puse cuidado. Mas no fue a clase, tampoco vino a dormir. Le busqué incansable, llamé a la policía… −¿Y qué ocurrió? −preguntó Ana. Pues ahí estoy, intentando escribir el final, ¡ha de resultar impactante! AQUELLA TARDE Alicia Galiano Blázquez (Tercer premio) Morí ayer... una tarde de diciembre. Aparecí sentado junto a los restos de mis últimas palabras. Me volví loco observando las fotos desde el recuerdo. Alfileres de colores, martillos de delirios, dibujos envenenados y cenizas de traición. Me instalé en la colina donde los besos se regalan. Aquí me cuidan y por la tarde encuentro prestamistas de abrazos, labios de color oro y cordones de libertad. Baño mi rostro deslizando el frescor del aire y protejo mis ilusiones para que nadie se las lleve. Encuentro la frontera de la muerte y descubro que la vida no tiene guion. LA ALUMNA SECRETA Inmaculada Ortiz García (Primer Accésit) La ninfa, escondida tras un nenúfar, espera paciente hasta que la hambrienta rana se queda dormida. Libre al fin de su atenta mirada, puede alejarse del estanque y volar veloz hacia el edificio Saramago. Al llegar, se desliza por los conductos del aire acondicionado. Los conoce bien, pues todos los martes, a la misma hora, los recorre para llegar puntual a su destino. Cuando al fin lo hace, se asoma tímidamente a través de las rejillas y acomodándose, se prepara para soñar escuchando los relatos que aquellos humanos narran a su profesora. LA FIDELIDAD Fátima López Lázaro (Segundo Accésit) Soy un pincel abandonado, en el rincón de la última esquina del aula que hicieron llamar Cómic. Me escogiste tú con la ilusión del primer día. Al principio fue difícil, lleno de oleo me limpiaste en agua. Pasaron los meses y seguí manchado, pero con la emoción de verte feliz cada día que me elegías. Han pasado dos años, sigo siendo tu compañero de trabajo, hoy he sido bañado en disolvente. Estoy feliz, porque estás creciendo y yo contigo. Hasta la próxima amigo.