Razas autóctonas: Herramienta de Sostenibilidad

RAZAS AUTÓCTONAS:
HERRAMIENTA DE SOSTENIBILIDAD
“Juegan un papel esencial en la lucha contra el cambio
climático y contribuyen a la creación de empleo y a la
vertebración del medio rural, al estar íntimamente ligadas
a modelos de explotación ganadera de carácter familiar”
La utilización de animales por parte del hombre con fines ganaderos se remonta a
más de 7000 años, existiendo desde entonces una clara influencia del productor
sobre la caracterización del ganado. En cada región del planeta se han ido
definiendo animales con unas características que permiten su adaptación al medio
natural, de tal manera que han ido surgiendo
diferentes razas perfectamente acopladas a su
entorno. Todo ello
ha permitido un
aprovechamiento racional de los recursos
naturales y unas prácticas ganaderas
sostenibles
económicas,
social
y
medioambientalmente.
Este sistema de utilización de razas
autóctonas, que ha demostrado su validez a lo
largo de siglos, se encuentra amenazado en
los últimos decenios. Según la FAO, Organización de las Naciones Unidas para la
Agricultura y la Alimentación, existen actualmente en el mundo más de 7500 razas
de las que alrededor de 6500 son consideradas locales. Pese a que no se tienen
datos de alrededor de un 36% de ellas, este organismo destaca que más del 20%
de las mismas se encuentran en peligro de extinción y que en el periodo 20002006 se perdieron 62 razas en el mundo, casi una pérdida por mes.
Son numerosas las causas que explican este deterioro de la diversidad genética en
la ganadería, pero principalmente habría que destacar, según la propia FAO, la
rápida y uniforme dispersión de la producción intensiva a gran escala y la
puesta en marcha de políticas de desarrollo y estrategias de gestión
inadecuadas.
Este hecho es particularmente llamativo en Europa, región con el mayor número de
razas en peligro de extinción. En los últimos cincuenta años se han desarrollado
industrias altamente especializadas en las que predomina el modelo intensivo
basado en la utilización de un número reducido de razas. Las políticas
implementadas en la Unión Europea han fomentado sistemas ganaderos en
los que primaba la consecución de altos rendimientos a bajo coste, muchas
veces sin tener en cuenta los daños asociados a tales prácticas. Este fenómeno ha
ido íntimamente ligado al desarrollo de estrategias de comercialización que han
“Acción gratuita cofinanciada por el FSE”
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excluido sistemáticamente a una buena parte de la producción basada en el uso de
razas autóctonas europeas, con su consiguiente desaparición.
Si bien en Andalucía hemos seguido esa misma dinámica, es cierto que este
fenómeno no se ha producido con la misma intensidad que en el resto del
territorio europeo. Nuestras condiciones geográficas, climáticas, sociales e incluso
culturales han permitido mantener en nuestro territorio una importante actividad
ligada a modelos de ganadería extensiva y al empleo de razas autóctonas. Pese a
que varias de ellas se encuentran en peligro de extinción (ver tabla) y existen
evidentes amenazas que debemos neutralizar, aún mantenemos significativos
censos de animales que participan en el desarrollo de una importante actividad
económica, algunos de ellos perfectamente adaptados a modelos más intensivos.
RAZAS PURAS EN PELIGRO DE EXTINCIÓN EN ANDALUCÍA
• Especie bovina: Berrenda en colorado, Berrenda en negro,
Cárdena andaluza, Marismeña, Negra andaluza, Pajuna.
• Especie ovina: Churra lebrijana, Merina de Grazalema,
Montesina, Lojeña.
• Especie caprina: Payoya, Blanca andaluza o serrana, Negra
serrana, Florida, Blanca celtibérica.
• Especie caballar: Marismeña, Hispano-Bretón.
• Especie Asnal: Andaluza.
• Especie aviar: Andaluza azul, Utrerana.
• Especie porcina: Ibérico en las variedades Torbiscal, Lampiño y
Manchado de Jabugo.
La importancia de las razas autóctonas
Pese a toda la problemática expuesta anteriormente, el contexto económico,
político y geoestratégico actual dibuja un escenario en el que los modelos
ganaderos ligados a las razas autóctonas pueden suponer una herramienta de
gran utilidad. Por lo tanto, se abre un periodo de oportunidades que el sector y
nuestras administraciones deben ser capaces de aprovechar. En este sentido,
podríamos destacar los siguientes elementos:
- En un contexto de crisis alimentaria mundial cada vez cobra más importancia el
concepto de no competencia con la producción de materias primas
destinadas a la alimentación humana. Los modelos extensivos ligados a razas
autóctonas disminuyen la dependencia de insumos externos para la alimentación
transformando los recursos pastables en proteína de origen animal. Esto supone
una enorme ventaja para el productor, que reduce su dependencia de los
mercados mundiales de piensos y para la sociedad en general, pues se liberan
enormes superficies para dedicarlas a la producción de alimentos destinados a la
población. La perfecta adaptación al medio de nuestros animales supone una
enorme fortaleza.
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- Las razas autóctonas juegan un papel esencial en las estrategias de lucha
contra el cambio climático. Tienen una mayor capacidad de adaptación a los
fenómenos que se están produciendo en los últimos años, tales como
enfermedades emergentes, temperaturas extremas, modificación en los
regímenes hidrológicos, etc. Además, son elementos fundamentales en las
estrategias de mitigación a través de la prevención de incendios forestales, la
gestión más sostenible de los recursos, el mantenimiento de biodiversidad, etc.
- Desde un punto de vista social, las razas autóctonas están íntimamente
ligadas a modelos de explotación ganadera de carácter familiar, que
contribuyen a la creación de empleo y a la vertebración del medio rural andaluz,
sobre todo en zonas marginales en las que no existen alternativas viables.
- Una parte cada vez mayor de nuestra sociedad demanda alimentos de calidad
diferenciada, que lleven aparejados conceptos como el respeto al medio
ambiente, la producción tradicional o el mantenimiento de nuestra cultura
gastronómica. Los canales cortos de comercialización potencian estos
elementos y no someten a los agricultores y ganaderos a presiones relacionadas
con la homogeneidad de producciones, los bajos precios en origen, etc. Así, los
productos procedentes de razas autóctonas pueden enmarcarse en un modelo
de consumo cada vez más demandado y valorado por la ciudadanía.
No podemos olvidar que todos estos elementos se encuentran dentro de los
objetivos formulados por la Comisión Europea para la nueva PAC más allá de
2013. Cabe destacar entre estos objetivos la importancia de una gestión sostenible
de los recursos naturales, garantizar las técnicas de producción sostenible,
fomentar el crecimiento verde o perseguir actuaciones de mitigación del cambio
climático. Además, se incluye la necesidad de contribuir a un desarrollo territorial
equilibrado, la mejora de la rentabilidad de las pequeñas explotaciones o el fomento
de los mercados locales como alternativa al modelo comercial predominante.
Como conclusión, podemos afirmar que la utilización de razas autóctonas da
respuesta a las demandas de la sociedad europea y, por lo tanto, estas razas
deben ser apoyadas de manera activa, estableciendo actuaciones de fomento de
las mismas, con especial incidencia en aquellas que se encuentran en peligro de
extinción.
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AYUDAS EN ANDALUCÍA
• Ayuda Agroambiental para razas autóctonas en peligro de extinción.
El objetivo de la medida es conservar la riqueza genética y la diversidad de las poblaciones ganaderas de
Andalucía, especialmente de las razas autóctonas en peligro de extinción. Para ello, se conceden ayudas
a los ganaderos que críen a estos animales, para compensarles por los menores rendimientos que
obtienen y los mayores costes en comparación con los de las razas más productivas.
Requisitos: poseer efectivos ganaderos de esas razas y pertenecer a una Asociación de defensa de la
raza. Además se deben cumplir unas condiciones de manejo, mantenimiento de porcentaje de animales,
etc. Se conceden a todas las razas autóctonas en peligro de extinción (ver cuadro 2).
Cuantía: En compromisos de cinco años de duración, la prima es de 120 €/UGM, salvo para especies
avícolas que se establece en 200€/UGM. Está sujeta a degresividad.
• Subvenciones destinadas al fomento de sistemas de producción de razas ganaderas autóctonas
en regímenes extensivos.
El objetivo de la medida es el fomento de sistemas de producción de razas autóctonas compatibles con
los recursos naturales disponibles, a través de la utilización racional de los mismos, con el fin de obtener
productos de calidad y mejorar la cabaña ganadera española.
Requisitos: respetar unas cargas ganaderas en la explotación, llegar al 40% de animales en raza al
finalizar el compromiso o reponer con animales de la propia explotación salvo que se haga con animales
inscritos en libros genealógicos.
Cuantía: Tienen carácter plurianual, con una duración estimada de cinco años. La prima es de 100€/UGM
para razas de fomento y de 130€/UGM de razas de protección especial. Se impone un máximo de 6.000 €
anuales (7.200 € en determinados casos).
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CONCEPTOS Y DEFINICIONES
Razas autóctonas españolas: las que se han originado en España, catalogándose en:
Razas de fomento. Aquéllas que por su censo y organización se encuentran en expansión.
Razas en peligro de extinción. Aquéllas que se encuentran en grave regresión o en trance de
desaparición.
Asociaciones de criadores de animales de razas ganaderas: aquéllas oficialmente reconocidas
para la creación o la gestión de los libros genealógicos y el desarrollo de los programas de mejora.
Libro genealógico: el gestionado por una asociación de ganaderos reconocida oficialmente o un
servicio oficial en el que se inscriban o registren animales de una raza determinada, haciendo mención
a sus ascendentes.
Programa de mejora: conjunto de actuaciones desarrolladas por una asociación de razas o servicio
oficial, orientado a la conservación, mejora y/o fomento de la raza correspondiente. Puede ser:
Programa de selección. Tiene por objeto la elección de los mejores reproductores de una raza
con el fin de que las características deseables definidas en los objetivos sean transmitidas a su
descendencia.
Programa de conservación. Tiene por objeto el mantenimiento de la diversidad genética para
garantizar la conservación de una raza y evitar su extinción o para aumentar sus censos.
“Acción gratuita cofinanciada por el FSE”
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