CELEBRACIÓN DEL ENVÍO DE CATEQUISTAS 1.- INTRODUCCIÓN: Un domingo más nuestra comunidad se reúne en torno al altar para celebrar el banquete propio de la Eucaristía, en la cual Cristo mismo se hace alimento. La participación en la cena del Señor es siempre comunión con Dios que se ofrece en sacrificio al Padre por nosotros. Pero también es comunión con los hermanos, manifestado particularmente en el intercambio del signo de la paz. Como los primeros testigos de la resurrección, los cristianos convocados cada domingo a vivir y confesar la presencia del Resucitado están llamados a ser evangelizadores y testigos en su vida cotidiana. Este ministerio propio de la Iglesia, al cual todos estamos llamados en virtud del bautismo, lo ejercitan los catequistas en nombre de nuestra comunidad. • Este año se nos propone como lema “Color esperanza” Pintar lo que nos rodea, nos hace mejores, es como vivir hacia los demás en cosas importantes. Como catequistas estamos llamados a dar una pequeña pincelada en las catequesis con los niños y jóvenes. Dedicamos parte de nuestro tiempo a aportar algo de color a la familia, a mi grupo, clase, amigos, al mundo que me rodea. Hoy, en nuestra celebración, vamos a enviar a los catequistas que durante este curso tendrán la tarea de evangelizar a los niños y jóvenes de nuestro Colegio. Reconociéndonos humildes siervos del Señor, acojamos su invitación de salir a los cruces de los caminos para invitar a todos los que encontremos al banquete de bodas. CANTO DE ENTRADA OREMOS: Dios Padre, que has confiado a tu Iglesia la misión de anunciar el evangelio de Jesucristo a los hombres de todos los tiempos, envía tu Espíritu sobre estos catequistas, a fin de que todos ellos sean fieles dispensadores de la Palabra de la verdad, desempeñando a la perfección su ministerio. Infunde en sus corazones el amor y el celo de tu reino, pon en sus labios tu Palabra de salvación y concédeles la alegría de poder colaborar al crecimiento de tu Iglesia. Por Jesucristo nuestro Señor. AMÉN. Monitor: El catequista vive enraizado en la comunidad: En comunidad escucha la Palabra de Dios, comparte su fe, celebra y se compromete. Desde la comunidad se siente enviado y actúa en su nombre. Para la comunidad trabaja, y en el grupo de catequesis siembra comunidad. Unido a otros catequistas es signo de comunidad entre los hombres. Lectura bíblica: se pueden usar estas lecturas o bien las del domingo correspondiente. PRIMERA LECTURA: Is. 5, 1-8 Monición: Isaías nos narra su vocación y nos hace reflexionar sobre la vocación de todos aquellos que son llamados a ser profetas, mensajeros de Dios en medio de la comunidad. Si todo cristiano es un profeta, mucho más lo será el catequista, pues, a él, se le encomienda de modo especial mostrar el sentido profundo que la fe descubre en la historia y en los acontecimientos. CANTO INTERLECCIONAL: SEGUNDA LECTURA: I Tes. 1, 5-10 Monición: San Pablo explica a los cristianos de Tesalónica el valor del testimonio de fe tanto personal como comunitario. La fe de esta comunidad ha saltado las barreras locales y su fama se ha extendido por todas partes. Pablo es un evangelizador y conoce el valor y la importancia del testimonio. EVANGELIO: Mt 5, 13-16 Monición: La vocación del cristiano es ilustrada por Cristo en este texto evangélico. El horizonte es ampliado al máximo: “Tierra” y “mundo”. En la semejanza de la sal y de la luz, manifiesta la necesidad de influir en la vida de los demás y de iluminar a todos hasta testimoniar con su obrar el camino de encontrarse con el Padre. RITO DE ENVÍO Monitor: Ante esta exigencia, el catequista se siente animado. Todos los catequistas: NECESITAMOS COMUNIDADES CRISTIANAS ESTIMULEN Y APOYEN NUESTRO TRABAJO. QUE Gesto de envío (Monitor) La misión del catequista es de gran dignidad. Pero no debéis olvidar que vosotros realizáis vuestro trabajo no en nombre propio, sino en nombre de toda la Iglesia. Por eso: (Sacerdote) Yo en nombre de la Iglesia y de la comunidad religiosa os envío a proclamar la Palabra de Dios en medio de la comunidad. Como a los convidados al banquete el Señor os invito a vestiros con el traje de fiesta para ser dignos de la tarea que se os encomienda. Monitor: (un catequista en nombre de todo el grupo recibe los tres símbolos) - Para realizar la misión de catequista necesitáis una buena formación humana. Esta flor simboliza la alegría y el amor con que tenéis que realizar vuestra tarea. -Para realizar la misión de catequista necesitáis una buena formación espiritual. Esta luz simboliza el testimonio de vida con que queréis realizar vuestra tarea. -Para realizar la misión de catequista necesitáis una buena formación doctrinal. Esta Biblia simboliza el Evangelio de Jesús que has de anunciar en catequesis. Manifiesto Celebrante: ¿Queréis vuestra tarea de catequistas como una vocación? Todos: SÍ, QUEREMOS. Celebrante: ¿Queréis vivir vuestra tarea de catequistas dejándoos guiar por el Espíritu? Todos: SÍ, QUEREMOS. Celebrante: ¿Queréis vivir vuestra tarea de catequistas poniéndoos al servicio de todos los hombres? Todos: SÍ, QUEREMOS. Celebrante: ¿Queréis vivir vuestra tarea de catequistas como testigos de la Buena Nueva de Jesús? Todos: SÍ, QUEREMOS. Celebrante: ¿Queréis vivir vuestra tarea de catequistas en comunidad y en servicio a la comunidad? Todos: SÍ, QUEREMOS. PLEGARIA (Todos los catequistas juntos la recitan) Me has llamado, Señor, a continuar tu obra de anuncio del Reino que inauguró entre nosotros Jesús, tu Hijo y nuestro hermano. Con los profetas te quiero gritar: Mira, Señor, que no soy más que un joven que no sabe hablar. Pero, a pesar de todo, aquí estoy para hacer tu voluntad y proclamar a todos que Tú eres el Dios de la Vida el Dios de la Misericordia Tú, Señor, conoces muy bien toda mi vida y mis dudas; mis fragilidades y debilidades. Sólo quiero que mi vida esté a tu disposición como lo estuvo la de María, creyente sencilla y Madre buena. Señor, que sepa hacer resonar tu mensaje en mi comunidad, en el lugar donde vivo para que la buena noticia llegue a todos y el mundo crea en el Evangelio. Amén ORACIÓN DE LOS FIELES Oremos, hermanos, a Dios por las necesidades de la Iglesia y del mundo, por nosotros y, de modo especial, por quienes se dedican a la tarea de catequizar: Por la Iglesia, presente en todo el mundo, para que no cese en su empeño por anunciar el Evangelio a todos los hombres, ROGUEMOS AL SEÑOR. Por el Papa, los Obispos, los Presbíteros, los Diáconos y demás ministros de la Palabra, para que sean fieles transmisores de la misma y testigos de su fuerza salvadora, ROGUEMOS AL SEÑOR. Por todos los que trabajan en la obra de la evangelización y la catequesis, para que ni el fracaso los desanime, ni el éxito les envanezca, y puedan decir como S. Pablo «Todo lo puedo en aquél que me conforta, Cristo Jesús», ROGUEMOS AL SEÑOR. - Por todos los que han de ser catequizados, para que el Espíritu Santo los ilumine y los asista, ROGUEMOS AL SEÑOR. - Por todos los que nos hemos reunido, para que el Señor despierte y sostenga en nosotros el sentirnos Iglesia y la conciencia de la propia responsabilidad en la obra de la evangelización y de la catequesis, ROGUEMOS AL SEÑOR. ORACIÓN Escucha, Padre de todos los hombres, nuestra oración esperanzada. Te pedimos que todos seamos, cada vez más, servidores de la vida que tú has sembrado en nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Presidente: Queridos catequistas, al finalizar esta celebración eucarística con motivo de vuestro envío, os quiero transmitir el agradecimiento de toda la comunidad religiosa por vuestra inapreciable labor. En el nombre de Dios os quiero transmitir su especial ayuda para esta misión. Por eso disponeos para recibir la bendición: Que el Espíritu Santo vaya transformándoos día a día y os haga más parecidos a Jesús, os ayude en vuestro caminar y en vuestro esfuerzo por construir un mundo más fraterno. AMEN. Que el Espíritu Santo os ayude a vivir en lo esencial, a vivir en la verdad; que quite de nosotros la rutina, la pereza y el miedo, y haga brotar la vida en vuestro corazón para responder mejor a la misión recibida. AMEN. Id a anunciar la Buena Noticia y proclamad el amor de Dios con la palabra y el testimonio de la vida. Sentíos apoyados por la comunidad cristiana. AMEN. Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre vosotros. AMÉN. - El Señor os envía. Podéis ir en paz. CANTO FINAL: