25 DE NOVIEMBRE DIA DE LA ELIMINACION DE CUALQUIER FORMA DE VIOLENCIA CONTRA LA MUJER Quizá a esta altura del año, nadie recuerde a ROSA ELVIRA CELY y le sea extraño el nombre de Javier Velasco, pues desafortunadamente vivimos la noticia del día y este hecho execrable y repudiable se pudo haber borrado de nuestra memoria. Lo cierto es, que el FEMINICIDIO es uno de los más graves problemas de América Latina, definido como la forma más extrema de violencia contra la mujer, motivado por su condición de mujer. Titulares como: “mujer asesinada de 11 puñaladas”, “niña violada y descuartizada”, “jovencita pierde la vida por celos de su novio”, “violaba a sus hijas mientras las cuidaba”, “se suicidó por amor”, son hechos de esta cruda realidad que corroboran, que los asesinatos de mujeres son en su mayoría causados por personas con quienes las víctimas mantenían un vínculo afectivo o social; son familiares, parejas, enamorados, cónyuges o amigos; además, se reafirma, que el 80% de las violaciones las perpetran miembros de la familia de la víctima, a edades muy tempranas, por parte de padres, abuelos, tíos, padrastos, con los cuales las niñas tienen una relación cercana. El origen de la violencia contra la mujer, está ligada a patrones socioculturales discriminatorios, basados en relaciones de poder, que hacen que la víctima se encuentre en situaciones de subordinación frente a su agresor, generándole temor, miedo, vergüenza e incapacidad para enfrentarlo, ligado al alto grado de permisividad que la sociedad tiene hacia los agresores y victimarios. A pesar de la normatividad existente a nivel nacional y los convenios internacionales suscritos por Colombia, la violencia de género sigue presente en el país, por lo que el magisterio debe preguntarse, qué podemos hacer desde la escuela, para enfrentar esta grave violación a los Derechos Humanos de las mujeres, cómo educar y capacitar a padres y madres de familia y al estudiantado, para que nuestras niñas, niños y jóvenes puedan disfrutar de una vida libre de violencias. No es un problema sencillo de abordar, requiere de investigación y estudio, para diseñar una estrategia que nos coloque en condiciones de asumir el tema de la discriminación, los estereotipos de género y la desigualdad entre hombres y mujeres, como un asunto político, ligado con la democracia, la participación y la representación de la mitad de la población colombiana, que somos las mujeres. No se requieren más cifras y estadísticas; organizaciones como Medicina Legal, Fiscalía, Derechos Humanos, Oficinas de Equidad y organismos internacionales, registran año tras año las diferentes formas de violencia contra las mujeres y en esta fecha se publican causando estupor y rechazo, que a las pocas horas se olvidan, porque nos estamos acostumbrando a ellas, hasta tal punto, que algunas personas buscan justificarlas, culpabilizando a las propias víctimas. La Federación Colombiana de Educadores, Fecode, a través de la Secretaría de la Mujer, expresa su rechazo categórico a cualquier manifestación violenta contra las mujeres, exige respeto a su dignidad y llama a sus organizaciones filiales a fortalecer el trabajo de Mujer y Género, organizando los Equipos de Trabajo y dotándolos de los elementos necesarios para su funcionamiento, de manera que puedan aportar al desarrollo de una escuela democrática e incluyente, con pleno reconocimiento de los Derechos Humanos de todas y todos, donde se reconozcan las diferencias como una oportunidad y se cierre el paso, a cualquier forma de discriminación y de violencia. COMITÉ EJECUTIVO SENEN NIÑO AVENDAÑO Presidente LUIS EDUARDO VARELA Secretario General BERTHA REY CASTELBLANCO Secretaria de la Mujer