Between the Worlds

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‫יד ושם‬
YAD VASHEM
‫רשות הזיכרון לשואה ולגבורה‬
The Holocaust Martyrs’ and
Heroes’ Remembrance Authority
The International School for Holocaust Studies
‫ביה"ס המרכזי להוראת השואה‬
Rumania
País del este de Europa creado en 1859 como resultado de la unificación de los
antiguos principados de Valaquia y Moldavia. Estas dos áreas juntas eran
conocidas como el Regat (el Viejo Reino). Durante y después de la Primera
Guerra Mundial, Rumania se expandió de manera significativa al anexar tres
regiones: el sur de Dobruja, que era de Bulgaria; Transilvania, de Hungría, y
Besarabia, de Rusia. Estas nuevas zonas tenían un gran porcentaje de judíos, a
veces hasta el 30% de la población.
Entre las dos guerras mundiales, la falta de estabilidad política en Rumania
condujo a la creación de partidos políticos de derecha nacionalistas y antisemitas,
como la Guardia de Hierro, y al aumento del antisemitismo. Asimismo, cuando
los nazis llegaron al poder, impulsaron medidas antijudías también en Rumania.
Hacia el final de 1937, el Ministerio de Asuntos Exteriores de los nazis, dirigido
por Alfred Rosenberg, contribuyó a la formación del gobierno de Goga-Cuza, de
muy corta duración. Octavian Goga y Alexandru Cuza gobernaron Rumania
durante solo 40 días, pero hicieron todo lo posible para convertir en realidad sus
ideales antisemitas. El gobierno parlamentario que se estableció a continuación
era tan débil que el rey Carol II estableció una dictadura en febrero de 1938. La
situación de los judíos empeoró aún más bajo este régimen: la nueva
constitución rumana incluía varias secciones que permitían la discriminación
racial contra ellos.
En marzo de 1939, Rumania firmó un acuerdo comercial con Alemania. Esto fue
seguido por varios nuevos acuerdos que le daban poder a Alemania sobre la
economía rumana. Además, cuando Alemania y la Unión Soviética firmaron su
pacto de no agresión en el verano de 1939, Alemania acordó ceder, a la Unión
Soviética, Besarabia y el norte de Bucovina, ambas pertenecientes a Rumania y,
además, obligó a esta última a devolver el norte de Transilvania a Hungría y el
sur de Dobruja a Bulgaria. Estos cambios causaron graves problemas a los judíos
de esas áreas. En Bucovina y el norte de Moldavia, los pobladores y las tropas
rumanas en retirada descargaron su ira sobre los judíos, matando centenares. En
la misma época, los rumanos, que querían complacer a los alemanes,
establecieron leyes que privaban de la ciudadanía a la mayoría de los judíos y
prohibían el matrimonio entre judíos y rumanos. Con la devolución de los
territorios a la Unión Soviética, a Hungría y a Bulgaria, la población judía de
Rumania se redujo de 760.000 a 342.000.
En septiembre de 1940, el general Ion Antonescu le pidió al rey Carol II que
estableciera un nuevo gabinete pro alemán. Al huir Carol de Rumania, fue
substituido por el hijo, que se convirtió en rey sólo nominalmente, y Antonescu
tomó el poder como dictador fascista, destruyendo cualquier resto de
democracia. Instituyó un gobierno con los miembros de la Guardia de Hierro y
con oficiales del ejército. Bajo la dirección de Antonescu hubo asaltos masivos a
la propiedad de los judíos, a quienes se les quitó el derecho a votar y se les
prohibió comerciar.
En enero de 1941, la Guardia de Hierro intentó tomar control absoluto del
gobierno. Esta sublevación fue sofocada por el ejército de Antonescu, pero fue
acompañada por disturbios antijudíos, durante los cuales 127 judíos fueron
asesinados. Después de aplastar la rebelión, el gobierno aprobó más leyes
antijudías que apuntaban a eliminar la participación de los judíos en la vida
rumana. Antonescu, ayudado por el organismo que respondía a Adolf Eichmann
estableció un "Centro nacional de rumanización" que organizaba, con apoyo
oficial, actos de terrorismo contra los judíos. La policía y una unidad especial de
inteligencia perseguían a los opositores al régimen de Antonescu, incluidos los
comunistas y los judíos.
Los alemanes atacaron a sus aliados soviéticos en junio de 1941. Los rumanos
apoyaron a los alemanes con la esperanza de recuperar los territorios que se
habían visto obligados a devolver a la Unión Soviética. De esta manera, Rumania
recupero, en efecto, parte de su territorio, pero volvió a perderlo en 1944 frente
a los soviéticos. Durante este período, Antonescu ordenó la expulsión de 40.000
judíos de los pueblos y ciudades. Algunos fueron enviados a campos de
detención, mientras que otros fueron trasladados a diversas zonas.
Antonescu trataba a los judíos de las diferentes zonas de modos distintos. Exigía
el exterminio de los judíos de Besarabia y Bucovina, pero no de los del Regat
(Viejo Reino). Cuando Rumania se unió a Alemania en la guerra contra la Unión
Soviética, Hitler comunicó su plan de exterminar a los judíos de Europa a
Antonescu, quien dio su acuerdo. Se le ordenó al ejército rumano encarcelar a los
judíos de las ciudades, mientras que la policía tenía instrucciones de matar a
cualquier judío hallado en zonas rurales. Las unidades del ejército alemán y del
rumano, auxiliados por los Einsatzgruppen (grupos de acción), llevaron a cabo el
exterminio de los judíos rumanos. Alrededor de 160.000 personas fueron
aniquiladas en la primera etapa, con la participación de pobladores rumanos y
ucranianos en las matanzas. Decenas de miles de judíos ucranianos fueron
también asesinados por la policía y por el ejército rumano. En septiembre de
1941, Antonescu ordenó que los 150.000 judíos que quedaban fueran expulsados
a Transdniéster y decenas de miles murieron en el camino.
Durante 1942, Antonescu comenzó a dudar si Alemania ganaría la guerra.
Además, los líderes de la comunidad judía de Rumania lo presionaban para que
ayudara a los judíos. Estos hechos convencieron a Antonescu de que cancelara la
etapa siguiente, con la que había estado de acuerdo en un comienzo: la
deportación de la mayoría de los restantes 292.000 judíos a Belzec. En lugar de
eso, decidió que la solución para los judíos rumanos era que salieran de
Rumania. Autorizó, a cambio de una enorme suma de dinero, la emigración de
70.000 judíos. Sin embargo, Eichmann evitó la concreción del proyecto y menos
de cinco mil llegaron a Palestina. Una vez abortados los planes de exterminio, las
organizaciones judías lucharon denodadamente por el retorno de los judíos que
habían sido deportados a Transdniéster. A fines de 1943, se repatriaron los
primeros sobrevivientes de las deportaciones y el resto regresó en 1945 y en
1946.
El gobierno de Antonescu fue derrocado el 23 de agosto de 1944 por un grupo
antifascista llamado Bloque Democrático Nacional. En septiembre, el nuevo
gobierno firmó un acuerdo con la Unión Soviética donde se reconocía
formalmente que Rumania ya no era aliada de Alemania.
En total, murieron en el Holocausto cerca de 420.000 judíos que, en 1939, vivían
en Rumania. Este número incluye los que fueron asesinados por el ejército
Rumano, los que murieron en Transdniéster o durante el traslado, las víctimas de
los pogromos y los que fueron eliminados en Auschwitz provenientes del norte de
Transilvania, ocupado por Hungría. No están comprendidos en esta cantidad los
habitantes judíos del territorio soviético anexado por Rumania durante la guerra,
quienes también murieron durante el Holocausto.
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