Como ve el verdadero ministro a la gente.

Como ve el verdadero ministro a la gente.
Mensaje basado en 2 Corintios 12:14-18
La semana pasada estuvimos viendo los versículos del 11 al 13, y Pablo particularmente en el versículo 11 está
diciéndole a los corintios que él se convirtió en un necio.
No porque fuera ignorante o que no supiera lo que estaba diciendo, no porque fuera falto de razón realmente; pero
porque al exaltarse así mismo, estaba actuando como un necio, pues solo una persona así, haría tal cosa.
A Pablo le dolió mucho que aun teniendo él todas las “marcas” de un verdadero apóstol, los corintios dudaran y
hubieran dejado que los falsos apóstoles pusieran en tela de duda quien era realmente Pablo.
Al punto de decir que lo perdonaran por no haber sido un agravio hacia ellos; esto claramente es un sarcasmo, pues
no hay razón real porque disculparse de no ser una carga para los corintios.
Pablo los amaba, eran sus hijos espirituales y él quería lo mejor para ellos, hoy vamos a ver más de este tema
precisamente.
Y en los versículos de esta mañana vamos a seguir viendo las características de un verdadero ministro de Cristo.
[14] He aquí, por tercera vez estoy preparado para ir a vosotros; y no os seré gravoso, porque no busco lo vuestro,
sino a vosotros, pues no deben atesorar los hijos para los padres, sino los padres para los hijos.
v14: El verdadero ministro se preocupa por la gente.
Aunque esto pareciera ser algo demasiado obvio, es una tristeza que hoy en día no se vea así.
El verdadero ministro existe para servir a su congregación, la congregación que Dios le ha entregado.
Prestemos atención a los tres puntos que denota Pablo en este versículo.
1) Dice que los va a visitar una tercera vez y que no va a ser gravoso nuevamente.
a. Una característica del verdadero ministro es la de poner las necesidades de los demás primero.
b. Un verdadero ministro, no está esperando la “ofrenda especial”, no está esperando el regalito para el
invitado especial o cuanta cosa hoy en día se escucha en las iglesias.
i. El verdadero ministro está en el ministerio por amor a Dios y las personas que le ha dejado a
cargo.
ii. Es por eso que en el versículo 13, cuando dice que le perdonen el agravio, es claramente un
sarcasmo. Pablo amaba a los corintios tanto que tomo la decisión de no obtener de ellos
ningún tipo de soporte o algo.
iii. Habían otros hermanos supliendo sus necesidades y con que fueran suplidas las básicas era
suficiente.
[2] Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente;
no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; [3] no como teniendo señorío sobre los que están a
vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. [4] Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores,
vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria. [1 Pedro 5:2-4]
2) Pablo no estaba buscando lo de los corintios.
a. El amor de Pablo era tan grande por los corintios que él los quería a ellos, no sus pertenencias o
bienes. Es por eso que dice: “no busco lo vuestro, sino a vosotros”
b. El verdadero ministro, va a ver el valor de la congregación y la gente que Dios le ha entregado como
la meta.
i. Por lo cual cuando un ministro recibe la paga por trabajar en el ministerio, no se convierte en
una trampa o lazo, para que Satanás desvié su corazón.
ii. La paga principal para el ministro es la satisfacción de ver a la congregación crecer en
santidad y de la mano del Señor.
Segunda Epístola de Pablo a los Corintios
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1. Un ministro que no vive para Dios, nunca va a tener esta satisfacción pues lo que
enseña y siembra es para la carne.
[8] Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio de
Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos. [1 Tesalonicenses
2:8]
[19] Porque ¿cuál es nuestra esperanza, o gozo, o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de
nuestro Señor Jesucristo, en su venida? [20] Vosotros sois nuestra gloria y gozo. [1 Tesalonicenses 2:19-20]
3) Pablo, como padre espiritual de los corintios, buscaba servirles y proveerles.
a. Pablo comenzó la obra en los corintios, por ende, él era el “padre espiritual” de ellos.
b. Esto lejos de ser una forma de controlarlos o sacarles los bienes y demás; era una responsabilidad
para Pablo para cuidarles y proveer para ellos.
c. Si prestamos cuidado, cuando Dios nos salva y pasamos de enemigos a hijos, él se encarga de velar
por nosotros en todas las áreas.
i. Podemos tener plena confianza de que él va a suplir nuestras necesidades y no va a
desampararnos.
ii. Esto no quiere decir, que va a darnos todo lo que queremos o bien que podemos ser ociosos
y vagabundos.
iii. Que Dios provea no es un sinónimo para cruzarnos de brazos y ser mediocres.
d. El ministro debe de razonar y analizar que sería algo balanceando para atesorar.
i. No queremos tener congregaciones demasiado “cómodas”, donde no hay responsabilidad
hacia sus ministros.
ii. Pero tampoco queremos tener congregaciones donde se sienta gravosas.
iii. Esto es algo que solo la Biblia y el continuo andar con Dios, puede ayudar a madurar. Por lo
cual procure ser fiel al Señor en su tiempo de oración y lectura.
[8] porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor
que un incrédulo. [1 Timoteo 5:8]
[15] Y yo con el mayor placer gastaré lo mío, y aun yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras almas,
aunque amándoos más, sea amado menos.
v15: El verdadero ministro se da todo por su gente.
¿Cómo ve usted el servicio a su gente? ¿Piensa que ellos tienen que servirles a usted, o usted a ellos?
Uno de los errores más grandes de la gente que quiere liderar o están en el liderazgo, es la de pensar que la gente a
su alrededor son sus empleados. Si bien es cierto, la ayuda mutua en el ministerio, es necesaria para llevar a cabo las
tareas.
El ministro debe y tiene que ver a su gente, como la meta del sacrificio, Pablo acá lo está dejando muy claro con los
siguientes puntos.
1) El verdadero ministro, tendrá momentos en que tendrá que gastar de lo suyo propio.
a. Ministro si usted realmente ama a su congregación, no va a estar pensando en el dinero o salario;
sino más bien va a querer dar de lo que tenga (tiempo, talentos, dinero y dones) por el beneficio de
los demás.
b. Nuevamente, no hay nada de malo en que el ministro reciba la paga por su trabajo, la Biblia enseña
que esto es lo correcto (1 Timoteo 5:17-18) e inclusive cuando no cumplimos, estamos siendo
desobedientes (1 Corintios 9:4-18, específicamente el 14).
i. Pero tenemos que entender, que cuando un ministro se enfoca más en esta área que en
servir y darse por la congregación; está poniendo todas las piezas en orden para caer en los
lazos de Satanás.
2) El verdadero ministro está dispuesto hasta dar su vida por la congregación.
a. Si realmente aman a su congregación, no van a estar pensando en obtener abundancia física; si no
que se van a dar en todo lo que puedan físicamente por los demás.
Segunda Epístola de Pablo a los Corintios
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b. Pablo estaba dispuesto hasta a morir por que los corintios estuvieran con bien. Esto puede que suene
extremo, pero si usted debe de imitar a Cristo, porque iba a ser de sorprenderse que Pablo hablara de
un amor tan sacrificial. ¿Acaso no murió Cristo en la cruz por amor? ¡Bueno tome la cruz del
ministerio y haga lo mismo!
3) El amor de Pablo era incondicional, aunque esto implicara no recibir nada a cambio, incluido el recibir el
desprecio de muchos.
a. Lo que le paso a Pablo fue precisamente esto, él se sacrificó, no siendo gravoso para los corintios y
los corintios respondieron poniendo en duda su apostolado.
b. Cómo él tenía que corregirlos, los falsos maestros estuvieran poniendo en duda si Pablo realmente
los quería, diciendo que si así fuera, no sería tan fuerte con ellos.
[16] En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner
nuestras vidas por los hermanos. [1 Juan 3:16]
[16] Pero admitiendo esto, que yo no os he sido carga, sino que como soy astuto, os prendí por engaño,
[17] ¿acaso os he engañado por alguno de los que he enviado a vosotros?
[18] Rogué a Tito, y envié con él al hermano. ¿Os engañó acaso Tito? ¿No hemos procedido con el mismo espíritu y
en las mismas pisadas?
V16-18: El verdadero ministro no engaña a su gente.
El verdadero ministro no engañaría a su congregación. Si una persona puede decirle a la congregación mentiras para
poder sacar provecho de ella, no es de Cristo, es un falso maestro, profeta y hermano.
Pablo en el versículo 16 vuelve a su tono sarcástico, si leemos. Si leemos este versículo sin el contexto de los
versículos anteriores y del versículo 17, no vamos a comprender el sentido.
Pablo no engaño a nadie, precisamente Pablo, lo que más buscaba era el bien de todos los corintios, diciéndoles
cómo mejorar sus vidas y como enderezarse según Dios.
Si Pablo hubiera querido sacar provecho de los corintios, él no hubiera dicho que lo dado por los macedonios era
suficiente.
[9] Y cuando estaba entre vosotros y tuve necesidad, a ninguno fui carga, pues lo que me faltaba, lo suplieron
los hermanos que vinieron de Macedonia, y en todo me guardé y me guardaré de seros gravoso. [10] Por la
verdad de Cristo que está en mí, que no se me impedirá esta mi gloria en las regiones de Acaya. [2 Corintios
11:9-10]
Es muy simple, si Pablo hubiera estado buscando obtener ganancia de los corintios, hubiera obtenido ayuda de los
macedonios y solicitado a los corintios que pusieran su “granito” también. Pero no fue así, claramente en los
versículos anteriores podemos ver como él dice que no quiso serles gravosos y por eso no los molesto.
En el versículo 13, Pablo habla del asunto de manera sarcástica también.
[13] Porque ¿en qué habéis sido menos que las otras iglesias, sino en que yo mismo no os he sido carga?
¡Perdonadme este agravio! [2 Corintios 12:13]
Ahora, en el versículo 17, Pablo va más allá e incluye en el engaño a terceras personas. No que realmente hubo
engaño si no que, está diciendo, que entonces los otros también engañaron a los corintios
Recordemos que Pablo mando a Timoteo a ver como estaban los corintios comportándose, esta comitiva tenía como
misión darles un recordatorio de que Pablo iba a ir a visitarles pronto y que estuviera en la fe.
[17] Por esto mismo os he enviado a Timoteo, que es mi hijo amado y fiel en el Señor, el cual os recordará mi
proceder en Cristo, de la manera que enseño en todas partes y en todas las iglesias. [1 Corintios 4:17]
[10] Y si llega Timoteo, mirad que esté con vosotros con tranquilidad, porque él hace la obra del Señor así
como yo. [1 Corintios 16:10]
Segunda Epístola de Pablo a los Corintios
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Luego, en el versículo 18, menciona a Tito, como otro que les visito. Preguntándoles si entonces Tito y el otro
hermano (posiblemente Silas) también fueron a engañarlos.
Claramente Tito no engaño a nadie, más bien Tito regreso dando buenas noticias y confirmando el amor que él les
tuvo a los corintios también.
En el versículo 6 del capítulo 8 vemos como se envía a Tito a ver el estado de los corintios.
[6] de manera que exhortamos a Tito para que tal como comenzó antes, asimismo acabe también entre
vosotros esta obra de gracia. [2 Corintios 8:6]
Y en los siguientes versículos podemos ver el estado con el que Tito regreso y respondió a los corintios.
[16] Pero gracias a Dios que puso en el corazón de Tito la misma solicitud por vosotros. [17] Pues a la
verdad recibió la exhortación; pero estando también muy solícito, por su propia voluntad partió para ir a
vosotros. [2 Corintios 8:16-17]
El verdadero ministro de Cristo, no va a engañar a su congregación, si no que la va a amar y será trasparente con
ella.
Para terminar, el mensaje de esta mañana debió poder ayudarle a entender, que si usted es un verdadero ministro;
usted debería de preocuparse por la gente, darse todo por ellos y nunca engañarlos. Un verdadero ministro tiene el
carácter de Cristo, y el entendimiento de sacrificio debería de ser algo que práctica a diario.
Segunda Epístola de Pablo a los Corintios
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