1. Análisis de resultados. Datos nacionales En este apartado se analizan los resultados obtenidos en las Tablas del documento Tablas nacionales. Módulo 2003. En el cuadro 1 se observa que el total de personas de 16 y más años que ha cursado estudios de enseñanza reglada en los últimos 12 meses asciende a 3.324.200. De éstas 1.581.500 son hombres y 1.742.700 son mujeres. Por nivel de formación alcanzado y grupo de edad, se aprecia que para el intervalo de 16-19 años el 59,3 por ciento de los que han cursado estudios reglados, declaran que su nivel de formación alcanzado corresponde a estudios de primera etapa de educación secundaria. Para el intervalo de 20-40 años, el 66 por ciento tiene como nivel de formación alcanzado, estudios de segunda etapa de educación secundaria; para los de 25-44 años el mayor porcentaje de los que han realizado estudios en los últimos 12 meses, con un 61,1 por ciento corresponde a aquellos cuyo nivel de formación alcanzado es el de educación postsecundaria o superior; para los de 45-54 años el máximo porcentaje, 60,5 por ciento, se concentra también en aquellos que tienen nivel de estudios postsecundarios o superior, mientras que para el grupo de 55 y más el máximo se alcanza en los que tienen estudios de educación primaria con un 58,8 por ciento. Por sexo, para los grupos de 16-19, 20-24 y 25-44 años la distribución de personas que ha cursado estudios de enseñanza reglada en los últimos 12 meses, según nivel de formación alcanzada, es muy similar. Sin embargo, para los grupos de 45-54 y 55 y más no. En el primero, mientras que para los hombres el 80,5 por ciento afirman haber alcanzado estudios de educación postsecundaria y superior, para las mujeres tan solo el 44,6 por ciento alcanza ese nivel; siendo mayor el porcentaje de mujeres que de hombres con estudios de educación primaria y primera y segunda etapa de educación secundaria que están cursando estudios reglados. En el grupo de 55 y más, el nivel de formación alcanzado para los hombres que cursa estudios reglados se reparte principalmente entre estudios de educación primaria, con un 38,9 por ciento y de educación postsecundaria y superior, con un 34,1 por ciento. Para las mujeres hay un 62,2 por ciento con estudios de educación primaria y un 18,3 por ciento analfabetas. El cuadro 2 analiza la población de 16 y más años por el nivel de los estudios reglados cursados en los últimos 12 meses a 1 dígito y por sexo. De los 3.324.200 personas que han cursado estudios reglados, 1.524.400 se concentra en la enseñanza universitaria de primer y segundo ciclo, lo que supone un 45,9 por ciento del total. Seguido de estos estudios se encuentran los de Bachillerato y COU con un 21 por ciento respecto al total. Por sexos, el porcentaje de los que han cursado enseñanza universitaria es del 44,8 por ciento en hombres y del 46,8 por ciento en mujeres. En términos absolutos, hay casi 110.000 mujeres más que varones cursando estudios reglados de nivel superior. El cuadro 3 muestra la población de 16 y más años que ha cursado estudios reglados, por sector de los mismos (a 1 dígito) y sexo. El sector que corresponde a un mayor número de cursos es el de Programas Generales con un 35,6 por ciento. En este sector se concentran los estudios de educación primaria, educación secundaria, bachillerato y COU. El siguiente sector que corresponde a más cursos es el de ciencias sociales, enseñanza comercial y derecho con un 20,1 por ciento, seguido del de ingeniería, industria y construcción con un 12,1 por ciento. Por sexo se observa una distribución distinta de tal forma que, para hombres el que corresponde a un mayor porcentaje es el de programas generales (35 por ciento) seguido del de ingeniería, industria y construcción (20,4 por ciento). Para mujeres sin embargo, el de programas generales (36,2 por ciento) va seguido del de ciencias sociales (23,4 por ciento) y el de ingeniería queda por debajo de otros como: salud y servicios sociales, humanidades, ciencias, educación o servicios. En el cuadro 4 se observa que el total de personas que ha recibido algún curso de enseñanza no reglada en los últimos 12 meses asciende a 3.070.600. De ellos, 1.448.000 son varones y 1.622.700 mujeres según nivel de formación alcanzado, los porcentajes más elevados de personas que han cursado estudios se concentran en estudios de educación postsecundaria y superior (44,9 por ciento), segunda etapa de educación secundaria (23,3 por ciento) y en los que poseen estudios de primera etapa de educación secundaria (21,9 por ciento). Por grupos de edad, una distribución similar a la anterior se mantiene para los tramos de 25-44 y 45-54 años, sin embargo para los de 16-19 años el 61 por ciento se concentra en estudios de primera etapa de educación secundaria. En el grupo de 20-24 se reparte entre los mismos niveles que el total pero, el porcentaje de los que han alcanzado estudios de postsecundaria y superior desciende del 44,9 al 33,4 por ciento. Por último, para el grupo de 55 y más, el máximo porcentaje corresponde a los que poseen estudios de educación primaria, con un 43,2 por ciento frente al 9,6 por ciento del total. En los cuadros 5 y 6 se puede ver que un total de 2.438.000 activos han recibido algún curso de enseñanza no reglada en los últimos 12 meses, 1.248.700 hombres y 1.189.300 mujeres. Los ocupados ascienden a 2.073.900, de los cuales 1.118.500 son hombres y 955.400 mujeres. Comparando con el cuadro 4, se aprecia un comportamiento similar por nivel de estudios. Según el cuadro 7 los 3.070.600 de personas que cursan estudios de enseñanza no reglada están muy repartidos en los distintos intervalos que indican el número de horas dedicadas a ellos, si bien los porcentajes más elevados se concentran en el de 51 a 100 (22,9 por ciento) y en el de 26 a 50 horas (21,5 por ciento). Por sexos, la distribución es muy parecida aunque el porcentaje de personas que realiza estudios de un mayor número de horas es algo más elevado en mujeres que en hombres. Por grupos de edad se comprueba que, a mayor edad, menor es el número de horas dedicadas a los cursos de 200 horas en adelante. El cuadro 8 nos muestra la población de 16 y más años que ha recibido algún curso de enseñanza no reglada, por número de cursos, sexo y grupo de edad. De un total de 3.070.600, pertenece al grupo de edad de 25-44 1.795.100 personas; tienen de 45-54 años 432.300 personas y entre 20-24 años 412.800 personas. Analizando el número de cursos realizados por cada grupo de edad y su distribución entre uno, dos, tres o más de tres cursos, se aprecia que a mayor edad, mayor es el porcentaje de personas que realizaron un número más elevado de cursos. Así por ejemplo, mientras que el porcentaje de personas que realizan un curso es mayor en los grupos de 16-19 (88,9 por ciento) y 20-24 (82,6 por ciento), el de aquellos que realizan más de tres es superior en los grupos de 25-44 (2,4 por ciento) y 45-54 (3,4 por ciento). Dicho comportamiento, observado para ambos sexos, se mantiene para cada uno de ellos por separado. En el cuadro 9 se observa que el número de activos que recibió algún curso de enseñanza no reglada en los últimos 12 meses es de 2.438.000. De ellos, 1.610.000 se concentran en el grupo de 25 a 44 años, seguidos de 375.600 en el grupo de 45 a 54 y 281.100 en el de 20 a 24 años. Analizando el número de cursos realizados por cada grupo de edad y su distribución entre uno, dos, tres o más de tres cursos, se aprecia el mismo comportamiento que en el cuadro 8 para la población de 16 y más, es decir, a mayor edad, mayor es el porcentaje de personas que realizaron un número más elevado de cursos. Dicho comportamiento se mantiene también para hombres y mujeres por separado. En el cuadro 10 se observa que el número de ocupados que recibió algún curso en los últimos doce meses es de 2.073.900. De ellos 1.390.100 pertenecen al grupo de edades comprendidas entre los 25 y los 44 años. 345.700 pertenecen al grupo de 45 a 54 y 201.500 al de 20 a 24. La interpretación hecha para los cuadros 8 y 9 es válida para éste pues se mantiene el comportamiento por grupos de edad para los ocupados, tanto para ambos sexos como para cada uno por separado. En el cuadro 11 se presenta el número de cursos de enseñanza no reglada por sector de estudios y relación con la actividad. En caso de que la persona hubiera realizado más de un curso, sólo se tendrán en cuenta los tres primeros porque sólo para ellos se dispone de información acerca de los sectores. El total de cursos realizados por personas de 16 y más años asciende a 3.742.700, mientras que los realizado por activos son 3.006.200 y por ocupados 2.571.000. Se observa que el porcentaje de activos (1,2 por ciento) u ocupados (1 por ciento) que realizaron nuevos cursos de desarrollo personal es inferior al del total de personas de 16 y más años (2,1 por ciento). Lo mismo ocurre con los estudios de artes, lenguas extranjeras o servicios personales. Por el contrario, el porcentaje de activos (5,7 por ciento) u ocupados (5,8 por ciento) que realizaron cursos de mecánica, electrónica y otra forma técnica supera al de la población de 16 y más años (4,9 por ciento). Análogamente para los servicios de seguridad y formación de personal docente y ciencias de la educación. Se observa también que los cursos de enseñanza comercial y administración tienen un mayor peso para los activos (12 por ciento) y para los ocupados (12,1 por ciento) que para la población de 16 y más años (10,7 por ciento). Según el cuadro 12 la población de 16 y más años que utilizó algún método de aprendizaje (aparte de los cursos de enseñanza reglada o no reglada) en los últimos 12 meses asciende a 5.513.300, de los cuales 2.685.200 son hombres y 2.828.100 son mujeres. Para ambos sexos, del total de personas que utilizó algún método de aprendizaje, el 51,6 por ciento fue a través de material impreso, el 25,7 por ciento a través de vídeos o cassettes, el 16,8 por ciento mediante ordenadores o vía internet y el 5,9 por ciento restante fue realizando visitas educativas. Analizando el comportamiento de cada sexo por separado, se observa que la distribución en porcentajes es muy similar, si bien las mujeres utilizan en mayor medida el aprendizaje mediante material impreso, en detrimento del que utiliza vídeos o cassettes. Por grupos de edad se comprueba que, a mayor edad, mayor es el porcentaje de personas que utilizan el material impreso como método de aprendizaje, pasando del 48,8 por ciento para el grupo de 16 a 19 años al 69,7 para el de 55 y más. Lo contrario ocurre con las visitas educativas de tal forma que, el porcentaje más alto se alcanza en el grupo de 20-24, con un 7,3 por ciento y en el grupo de 55 y más desciende al 2,3 por ciento. Según el cuadro 13, el número de activos que utilizaron algún método de aprendizaje en los últimos 12 meses asciende a 3.530.100, de los cuales 1.885.200 son hombres y 1.644.900 son mujeres. El comportamiento por sexos es análogo al del cuadro 12, referido al total de personas de 16 y más. Sin embargo, por grupos de edad varía, de tal forma que, mientras para el total de la población de 16 y más (cuadro 12), cuanto mayor es la edad, mayor el porcentaje de personas que utilizaron material impreso como método de aprendizaje, en el caso de los activos, el mayor porcentaje se da en el grupo de 16 a 19 años con un 57,9 por ciento. Respecto a los otros 3 métodos la distribución porcentual por grupos de edad está más próxima a la del total en el caso de los activos (cuadro 13) que en el de la población de 16 y más (cuadro 12). Según el cuadro 14 el número de ocupados que utilizaron algún método de aprendizaje en los últimos 12 meses, asciende a 3.093.500 de los cuales 1.712.000 son hombres y 1.381.500 son mujeres. La distribución tanto por sexos como por grupos de edad, es muy similar a la de activos de la tabla 13, si bien en el grupo de edad de 16 a 19 años se observa que el porcentaje de ocupados que utiliza material impreso como método es del 64,9, mientras que para activos era del 57,9. Para los métodos basados en el uso de ordenador y visitas educativas sin embargo, el porcentaje de ocupados que los utilizan (10,4 por ciento y 0,6 por ciento respectivamente) es menor que el de activos (15 por ciento y 3,6 por ciento respectivamente). En el cuadro 15 se observa que el total de métodos de aprendizaje utilizados por personas de 16 y más años es de 9.757.600, de los cuales 4.829.800 fueron utilizados por hombres y 4.927.900 por mujeres. El porcentaje de métodos utilizados es mayor para las mujeres en los grupos de edad de 16 a 19, 20 a 24 y 25 a 44 años, sin embargo en los de 45 a 54 y 55 y más es superado por el de hombres. El total de métodos de aprendizaje utilizados por activos, según el cuadro 16, es de 6.297.000 de los cuales 3.391.200 fueron realizados por hombres y 2.905.800 por mujeres. En el caso de los activos, teniendo en cuenta los grupos de edad y sexo en hombres han utilizado un mayor número de métodos de aprendizaje en todos los tramos de edad, salvo en el de 20 a 24 años que, con un 45,8 por ciento, son superados por el 54,2 por ciento de las mujeres. Según el cuadro 17, el número de métodos realizados por ocupados es de 5.492.600, de los que 3.064.800 corresponden a hombres y 2.427.800 a mujeres. Por grupos de edad y sexo los hombres utilizan más métodos de aprendizaje que las mujeres, salvo en el grupo de 20 a 24 años, como ocurría en el caso de los activos (cuadro 16). 2. Análisis de resultados. Datos por comunidades autónomas A continuación se lleva a cabo un análisis de resultados de las tablas del documento Datos por Comunidades autónomas. Módulo 2003. En el cuadro 1 se muestra la población de 16 y más años que ha cursado estudios de enseñanza reglada en los últimos 12 meses, por nivel de formación alcanzado, sexo y comunidad autónoma. Atendiendo al nivel de formación alcanzado, los que terminaron la segunda etapa de educación secundaria se elevan a 1.323.400, lo que supone un 39,8 por ciento del total de personas analizadas. Los que terminaron la primera etapa de secundaria les siguen en cuantía, sumando 995.500 personas, que equivale a un 29,9 por ciento del total. Por último, cabe destacar el número de los que alcanzaron un nivel de educación postsecundaria o superior, 699.700, que equivale a un 21 por ciento del total. Por comunidades autónomas predominan los mismos niveles si bien, en el caso de estudios de primera etapa de educación secundaria el porcentaje (comparado con el del total nacional) aumenta para algunas entre las que cabe destacar: Illes Balears (46,6 por ciento), Ceuta y Melilla (45,4 por ciento) y Extremadura (37,8 por ciento). Para los estudios de segunda etapa de educación secundaria, el 39,8 por ciento del total se incrementa hasta un 47,4 por ciento en el caso de La Rioja. Por último, mientras que a nivel nacional, el porcentaje de personas que alcanzaron un nivel de educación postsecundaria o superior era del 21 por ciento, según lo apuntado arriba; por comunidades cabe destacar entre las que quedan por debajo de este valor a: Illes Balears (12,6 por ciento), Ceuta y Melilla (13,8 por ciento) y Extremadura (15,1 por ciento). En el caso de País Vasco y Navarra, sin embargo, los porcentajes superan el 21 por ciento, concretamente alcanzan el 28,8 y 28,5 respectivamente. Por sexo, las mayores diferencias entre hombres y mujeres a nivel de comunidad autónoma se aprecian en aquellos cuyo nivel de formación alcanzado es el de segunda etapa de educación secundaria de tal forma que, por ejemplo en Cataluña, mientras el 38,6 por ciento de los hombres que en los últimos 12 meses han cursado estudios de enseñanza reglada tienen ese nivel, el porcentaje de mujeres alcanza el 45,5. En el cuadro 2 se analiza la población de 16 y más años por estudios reglados que ha cursado en los últimos 12 meses y comunidad autónoma. La distribución según los diferentes estudios reglados es similar para todas las comunidades autónomas si bien, el porcentaje de los que han cursado estudios de enseñanza universitaria supera al del total nacional en algunas comunidades entre las que destacan: Rioja (54,1 por ciento), Aragón (con 51,6 por ciento), Navarra (49,1 por ciento), Galicia (48,8 por ciento) y C. Valenciana (47,9 por ciento), 5 Por el contrario destacan por debajo del 45,9 por ciento del total nacional en dichos estudios: Ceuta y Melilla (37,3 por ciento), Illes Balears (37,6 por ciento), Canarias (38,4 por ciento) y Cantabria (41,5 por ciento) El cuadro 3 muestra la población de 16 y más años que ha cursado estudios reglados en los últimos 12 meses según sector de los mismos (a 1 dígito) y comunidad autónoma. Cabe destacar las siguientes discrepancias en porcentajes entre comunidades autónomas y total nacional: Para el sector de programas generales, mientras que el porcentaje a nivel nacional es del 35,6 por ciento, en las comunidades de Ceuta y Melilla, Extremadura y Castilla-La Mancha, aumenta a un 45,4, 42,7 y 42 por ciento, respectivamente. Por el contrario, se reduce en Aragón (30,1 por ciento), La Rioja (29,6 por ciento) y Galicia (30,9 por ciento). El sector de educación supone un 4,1 por ciento a nivel nacional, disminuyendo hasta el 2,2 por ciento en Asturias o el 2,8 por ciento en Cantabria. En Castilla-La Mancha asciende al 6,3 por ciento. El sector de humanidades, que a nivel nacional representa el 6,3 por ciento, se eleva al 8,9 por ciento en Navarra, al 7,7 por ciento en Canarias o al 7,6 por ciento en Cataluña. El sector de ciencias sociales, enseñanza comercial y derecho a nivel nacional (20,1 por ciento) es superado en porcentaje por comunidades como Aragón (25,2 por ciento) o Galicia (22,3 por ciento), quedando por debajo otras como Illes Balears (16 por ciento) y Ceuta y Melilla (16,6 por ciento). El sector de ciencias disminuye respecto al porcentaje del total nacional (9,3 por ciento) en Canarias (5,2 por ciento) y País Vasco (6,2 por ciento), incrementándose por el contrario en Asturias (13,9 por ciento) y Madrid (13,2 por ciento). El sector de ingeniería, industria y construcción alcanza el 12,1 por ciento a nivel nacional. Este nivel es claramente superado por País Vasco (21 por ciento) y La Rioja (17,5 por ciento). Por el contrario disminuye en el caso de Ceuta y Melilla (3,6 por ciento). El sector de agricultura supera al total nacional en porcentaje (1,7 por ciento) en: La Rioja (4,7 por ciento), Navarra (3,9 por ciento), Castilla y León (3,4 por ciento) y Galicia (2,9 por ciento) entre otros. El sector salud y servicios sociales incrementa su porcentaje respecto al total (6,3 por ciento) en Illes Balears (9,1 por ciento) o Navarra (8,4 por ciento), entre otras. Por último, el sector servicios (3,9 por ciento) mientras que en comunidades como La Rioja (0,6 por ciento) o Extremadura (1,9 por ciento) no tiene tanto peso como a nivel nacional, en Illes Balears (6,3 por ciento), Canarias (5,9 por ciento) y Ceuta y Melilla (6 por ciento) lo supera. 6 En el cuadro 4 se presenta la población de 16 y más años que ha recibido algún curso de enseñanza no reglada en los últimos doce meses, por nivel de formación alcanzado, sexo y comunidad autónoma. Por diferencias respecto al total nacional, cabe destacar Cantabria (14,7 por ciento), Comunidad de Madrid (13,9 por ciento), País Vasco (12,5 por ciento) y La Rioja (12,0 por ciento) con porcentajes de personas que han cursado estudios (cuyo nivel de formación es la primera etapa de educación secundaria) más bajos que los del total (21,9 por ciento). Para los que tienen estudios postsecundarios o superiores, mientras que para el total nacional, el porcentaje de los que ha hecho algún curso de enseñanza no reglada es de 44,9 por ciento; para Illes Balears (36,7 por ciento) o Castilla La Mancha (35,9 por ciento) es inferior. Por el contrario, para La Rioja (60,1 por ciento), la Comunidad de Madrid (56,3 por ciento), País Vasco (55,2 por ciento) y Navarra (53,6 por ciento) el porcentaje es superior al nacional. El cuadro 5 es análogo al 4, salvo que en él se analiza el colectivo de activos en vez de la población de 16 y más años. En general, para todas las comunidades es mayor el porcentaje de los que han cursado estudios, teniendo como nivel de formación una enseñanza postsecundaria o superior, que en el caso del cuadro 4 referente a la población de 16 y más. El cuadro 6 es análogo al 5 pero teniendo en cuenta el colectivo de ocupados en vez del de activos. En general, para todas las comunidades es mayor el porcentaje de los que han cursado estudios teniendo como nivel de formación una enseñanza postsecundaria o superior, que en el caso del cuadro 5 para activos. El cuadro 7 analiza la distribución de la población de 16 y ,más años que ha recibido cursos de enseñanza no reglada en los últimos doce meses, según el número de horas dedicadas a ellos, por comunidad autónoma y por sexo. Las mayores discrepancias en porcentaje de horas dedicadas a cursos, por comunidades autónomas respecto al total nacional, se señalan a continuación: Para el intervalo de 0 a 10 horas, mientras que el porcentaje para el total nacional es del 6,4 por ciento, quedan por debajo comunidades como Cantabria, con un 0 por ciento y Asturias, con un 2,6 por ciento. Para el intervalo de 26 a 50 horas, el porcentaje del total nacional es del 21,5 por ciento. Entre las comunidades que lo superan destacan: La Rioja (33 por ciento), Galicia (26,9 por ciento) y Murcia (26,4 por ciento). Para el intervalo de 51 a 100 horas, comunidades como Murcia o Cantabria superan el 22,9 por ciento del total nacional, alcanzando el 30,2 por ciento y el 30,3 por ciento respectivamente. 7 En el intervalo de 101 a 200 horas, Asturias con un 27,2 por ciento supera el 16,5 por ciento de media. La Rioja con un 10,8 por ciento queda por debajo. En el intervalo de 201 a 400 horas, Cantabria alcanza el 25,8 por ciento, muy por encima del 11,6 por ciento de media. Quedan por debajo: Cataluña con un 6,8 por ciento o Ceuta y Melilla con un 8,5 por ciento. Por último, en el intervalo de 401 y más, Asturias con un 14,6 por ciento, Andalucía con un 11,5 por ciento y País Vasco con un 10,2 por ciento superan el 7,9 por ciento de media. Por sexo, cabe destacar que, para hombres, en el intervalo de 11 a 25 horas el porcentaje de Illes Balears (21,9 por ciento) supera con creces al del total nacional (15 por ciento). En el intervalo de 51 a 100 horas, las mayores variaciones en porcentaje, respecto del total nacional se producen en Murcia y Cataluña, mientras que en mujeres es en Cantabria e Illes Balears. El comportamiento señalado para ambos sexos, en el intervalo de 101 a 200 horas en el que destacaba por encima de la media Asturias y por debajo La Rioja, se debe en gran medida a los hombres, pues analizando su tabla por separado se observa un aumento en las diferencias. En el cuadro 8 se analiza la población de 16 y más años que ha recibido algún curso de enseñanza no reglada por número de cursos, sexo y comunidad autónoma. Las comunidades en las que más personas de 16 y más años realizaron cursos son:, Cataluña con 479.500 seguida de Andalucía con 467.200 personas personas. Entre las comunidades con un menor número de personas que cursan estudios de enseñanza no reglada destacan: Cantabria con 7.500 personas, Ceuta y Melilla con 9.800 y La Rioja con 10.700. Analizando la población de cada comunidad que realizó estudios y su distribución entre uno, dos, tres o más de tres cursos, las mayores discrepancias respecto a los porcentajes del total nacional se presentan en: Para los que realizaron 1 curso, las comunidades de: Cantabria (85,6 por ciento) y Castilla La Mancha (83,6 por ciento) que superan al 78,1 por ciento de personas que realizaron un curso, a nivel nacional. El hecho de que el porcentaje de Cantabria esté por encima del nacional se debe al comportamiento de los hombres que supone un 93,7 por ciento frente al 77,3 por ciento en las mujeres. Para los que realizaron 2 cursos, las comunidades de: La Rioja (20,1 por ciento), Navarra (18,9 por ciento) y Comunidad Valenciana (17,6 por ciento) superan el total nacional en porcentaje (15,1 por ciento). 8 Por sexo, en Cantabria se aprecian diferentes comportamientos en los que realizaron 2 cursos, de tal forma que mientras para hombres el valor relativo quede muy por debajo del nacional (3,5 por ciento frente a 14,3 por ciento) en mujeres lo supera con creces (22,7 por ciento frente al 15,9 por ciento). Para los que realizaron 3 cursos, Aragón, con un 7,7 por ciento, Navarra con un 5,9 por ciento y Canarias con un 5,6 por ciento superan el 4,5 por ciento nacional. En Cantabria el porcentaje es del 0 por ciento. Por sexo, se aprecian diferentes comportamiento en Illes Balears, así mientras el porcentaje de hombres que hicieron este número de cursos está por debajo del nacional, en mujeres lo supera. Para los que hicieron más de 3 cursos, de nuevo destaca Navarra con un 4,1 por ciento frente al 2,2 por ciento nacional. Analizando este hecho por sexo, se comprueba que esta diferencia se debe a las mujeres pues en dicha comunidad el 5,2 por ciento realizaron más de 3 cursos mientras que a nivel nacional el porcentaje es de 1,9 por ciento. El análisis hecho para la población de 16 y más años en el cuadro 8 es válido para el cuadro 9 referido a activos pues el comportamiento por comunidades tanto para ambos sexos como para cada uno de ellos por separado es similar. El análisis del cuadro 10 es semejante al realizado en el cuadro 8 para la población de 16 y más años, si bien para los que hicieron 2 cursos cabe destacar Cantabria que con un 19,4 por ciento supera al 16 por ciento del total mientras que en el caso del estudio de la población de 16 y más años (cuadro 8), el porcentaje de esta comunidad quedaba por debajo del porcentaje a nivel nacional. Este resultado es fruto del elevado porcentaje de mujeres de dicha comunidad (34,5 por ciento) que realizaron 2 cursos frente al del total nacional (16,8 por ciento). Para los que realizaron 3 cursos, Asturias, con 7,3 por ciento supera al total nacional (5,4 por ciento), mientras que en el cuadro 8 su dato es igual al de la media nacional. Al igual que en el caso anterior, es el grupo de mujeres el que eleva el porcentaje. En el cuadro 11 se observa que el total de cursos de enseñanza no reglada realizados por persona de 16 y más años es de 3.811.700. En realidad esta cifra es una cota inferior del valor real pues, estamos suponiendo que los que afirmaron haber realizado más de 3 cursos, realizaron 4. Por comunidades destacan: Andalucía con 579.300 cursos, Cataluña con 571.600, Comunidad Valenciana con 415.600 y Madrid con 399.200. La comunidad en la que se realizaron menos cursos es Ceuta y Melilla, con 12.300. El análisis de la distribución de cursos según el número de horas dedicadas a ellos, por comunidad autónoma es similar al realizado en el cuadro 7 para la distribución de la población 16 y más que realizó cursos según el número de horas, por comunidad. 9 En el cuadro 12 se presenta la distribución del número de cursos de enseñanza no reglada realizados por activos, según intervalo de horas de duración y comunidad autónoma y en el cuadro 13, la misma distribución pero para ocupados en vez de para activos. Para ambos, al igual que ocurría con el cuadro 11, los totales son cotas inferiores de los verdaderos valores pues, estamos suponiendo que los que afirmaron haber realizado más de 3 cursos, realizaron 4, cuando en realidad podían haber realizado 5 o más. Según el cuadro 12, de los 3.069.900 cursos realizados por activos, 790.800 duraron de 26 a 50 horas, 632.300 de 11 a 25 horas y 557.300 de 51 a 100 horas. La interpretación hecha para el cuadro 7 de personas de 16 y más que realizaron cursos de enseñanza no reglada según el número de horas dedicadas, por comunidad autónoma, es válida para este cuadro. Según el cuadro 13, el número de cursos de enseñanza no reglada realizados por ocupados en los últimos 12 meses es de 2.630.000. De ellos, 715.700 duraron de 26 a 50 horas, 595.700 de 11 a 25 horas y 475.700 de 51 a 100 horas. El porcentaje de cursos de 51 horas en adelante disminuye si se compara con el de activos y el de éstos a su vez se reduce también si se compara con los realizados por la población de 16 y más años. Por el contrario, aumenta el porcentaje de los cursos de 50 horas o menos. La interpretación por comunidades es análoga a la del cuadro 7 si bien, los cursos de 201 a 400 se ven claramente afectados por una reducción en Cantabria (comparando con el total de cursos en dicha comunidad). En los cuadros 14-16 se analiza el total de cursos de enseñanza no reglada realizados por personas de 16 y más años, activos u ocupados, según principales motivos, por comunidad autónoma pero, en caso de que la persona hubiera realizado más de un curso, se tendrán en cuenta únicamente los tres primeros realizados ya que, sólo de ellos se tiene información sobre principales motivos por los que lo llevo a cabo. Por tanto, de nuevo volvemos a considerar una cota inferior del número real de cursos realizados. En el cuadro 14 se observa que a nivel nacional el 55,6 por ciento de los cursos realizados por personas de 16 y más años fueron por motivos relacionados con el trabajo; el 39,7 por ciento por interés personal y el 4,7 por ciento restante por otros motivos. Por comunidades autónomas se mantiene el mayor porcentaje de cursos realizados por motivos relacionados con el trabajo salvo en Asturias (36,3 por ciento frente al 52,2 por ciento por motivos personales) y en Navarra (47,1 por ciento frente al 49,9 por ciento por motivos personales). En comunidades como Illes Balears se iguala prácticamente al porcentaje de cursos realizados por interés personal, concretamente suponen el 49,1 por ciento frente al 49,2 por ciento. 10 En el cuadro 15 se aprecia que de los 3.006.200 cursos realizados por activos, 1.993.200 se llevaron a cabo por motivos relacionados con el trabajo, lo que supone el 66,3 por ciento de cursos, 912.000 fueron por interés personal y los 101.000 restantes por otros motivos. Comparando con el cuadro 14, referido a los cursos realizados por la población de 16 y más años, para los activos aumenta el porcentaje de los realizados por motivos relacionados con el trabajo, pasando del 55,6 por ciento al 66,3 por ciento. Los de interés personal pasan del 39,7 por ciento al 30,3 por ciento y los que se deben a otros motivos, del 4,7 por ciento al 3,4 por ciento. Por comunidades se mantiene el comportamiento que experimenta el total nacional salvo en el caso de Asturias y Navarra. Con respecto al primero (Asturias) se igualan los porcentajes de los 2 motivos más importantes con un 46,9 por ciento para los relacionados con el trabajo y un 44,5 por ciento para los de interés personal. En el caso de Navarra, el porcentaje de motivos relacionados con el trabajo es algo mayor (57.4 por ciento) que el referido a motivos personales (40,3 por ciento). En el cuadro 16 se observa que del total de cursos realizados por ocupados el 71,3 por ciento se llevaron a cabo por motivos relacionados con el trabajo, el 26,3 por ciento por interés personal y el 2,3 por ciento restante, por otros motivos. Comparando con el cuadro 15 se aprecia que el porcentaje de cursos realizados por motivos de trabajo en el caso de los ocupados es mayor que en el caso de los activos y según se comprobó al comparar éstos con la población de 16 y más años (cuadro 14) el porcentaje de cursos realizados por activos por el mismo motivo, supera a su vez al de cursos realizados por la población de 16 y más. En todas las comunidades es claramente mayor el porcentaje de cursos realizados por motivos de trabajo frente a los de interés personal. El cuadro 17 muestra la distribución de la población de 16 y más años que utilizó algún método de aprendizaje en los últimos 12 meses, por comunidades autónomas y sexo. Analizando las tablas que nos dan las distribuciones en porcentajes se observa una gran diferencia de comportamientos entre unas comunidades y otras. Así por ejemplo, tomando como base el dato para el total nacional, mientras que el aprendizaje realizado a través de material impreso supone un 51,6 por ciento del total; en comunidades como La Rioja, Canarias o Andalucía desciende al 30,1 por ciento, 35,8 por y ciento y 39,9 por ciento respectivamente. En Madrid, Ceuta y Melilla e Illes Balears, sin embargo, asciende al 74,4 por ciento, 65,5 por ciento y 67,6 por ciento respectivamente. Por lo que se refiere al aprendizaje llevado a cabo a través de videos o cassettes, para el total nacional supone un 25,5 por ciento del total de métodos, sin embargo para comunidades como La Rioja, Asturias o Murcia asciende al 55, 38,7 y 31,5 por ciento, respectivamente. Desciende sin embargo para Madrid y Cataluña, con un 18 y un 21,8 por ciento, respectivamente. 11 En cuanto a las personas que utilizaron como método el ordenador y más concretamente el aprendizaje a través de internet, para el total nacional suponen un 16,8 por ciento. Sin embargo en comunidades como Ceuta y Melilla, Castilla La Mancha, Illes Balears y Aragón el porcentaje desciende al 5,7 por ciento, 6,7 por ciento, 8,2 por ciento y 7,8 por ciento respectivamente. Por el contrario, en Canarias, País Vasco, Cataluña y Murcia asciende hasta el 29,8 por ciento, 22,3 por ciento, 20,8 por ciento y 19,7 por ciento respectivamente. Por último, el aprendizaje realizado a través de visitas educativas, para el total nacional supone el 5,9 por ciento, sin embargo en Andalucía o Navarra asciende al 12,4 y 10,5 por ciento respectivamente. La Rioja, Ceuta y Melilla, Illes Balears, Cataluña, Madrid descienden al 0 por ciento, 0,7 por ciento, 1,1 por ciento, 1,4 por ciento y 2,3 por ciento, respectivamente. En el cuadro 18 se observa la distribución de los activos que utilizaron algún método de aprendizaje en los últimos 12 meses, por comunidad autónoma y sexo. En porcentaje, el comportamiento es muy parecido al de la población de 16 y más del cuadro 17, si bien se aprecia en Cantabria un aumento en el porcentaje de activos que utilizaron algún tipo de material impreso como método de aprendizaje, pasando del 50,6 por ciento (del cuadro 17) al 56,7 por ciento. En Galicia, los activos que utilizaron el ordenador como método suponen un 15,8 por ciento mientras que para la población de 16 y más (cuadro 17) ascendían al 18,1 por ciento. En Navarra, el porcentaje de activos que utilizó material impreso, como método de aprendizaje es del 53,1 por ciento, lo que supone 10 décimas más que en el caso de la población de 16 y más (cuadro 17). Sin embargo, el porcentaje de activos que utilizó el ordenador como método es del 10 por ciento; por debajo del 15,1 por ciento de personas de 16 y más que lo utilizaron como método (cuadro 17). El cuadro 19 muestra la distribución de ocupados que utilizaron algún método de aprendizaje en los últimos 12 meses por comunidad autónoma. La distribución en porcentajes es análoga a la de activos del cuadro 18 por tanto, los comentarios hechos para ese cuadro son válidos también para éste. El cuadro 20 muestra el total de métodos de aprendizaje utilizados por personas de 16 y más años, según sexo y comunidad autónoma. Se observa que mientras para el total nacional es mayor el porcentaje de métodos utilizados por mujeres (50,5) que por hombres (49,5), en Andalucía, Comunidad Valenciana, Extremadura, Murcia, Navarra, País Vasco y Ceuta y Melilla ocurre lo contrario. 12 13 43