MOVIMIENTOS MIGRATORIOS, SUSTRACCIÓN INTERNACIONAL DE MENORES Y MARCO REGULATORIO. LIC. JOSÉ TOMAS CAMPOS CASTORENA INTRODUCCIÓN En las últimas décadas el mundo ha presenciado un fuerte movimiento poblacional que se realiza del campo a la ciudad y viceversa o de país a país, motivado más que nada por cuestiones de carácter económico que obliga a los habitantes de un país a cambiar su residencia. En México se presentan tres formas de migración a saber: - Origen de trabajadores hacia Estados Unidos; - Destino de migrantes de un gran número de países y, - Tránsito de centroamericanos y asiáticos que se dirigen a los países de América del Norte. Por lo que se refiere a nuestro país, cabe puntualizar que los principales problemas que presenta el fenómeno migratorio, lo es la pérdida de mano de obra calificada y en edad productiva que podría desempeñar un papel útil en el desarrollo del país, lo que provoca que poblaciones enteras se vean disminuidas por éste fenómeno, ocasionando que en éstas queden solo mujeres, ancianos y niños. Lo anterior es así, porque en algunas ocasiones los migrantes se olvidan de la familia y asumen otras costumbres en el lugar donde se establecen, y llega a darse el caso que aquellos, o vuelven a contraer nuevas nupcias o viven en unión libre con un tercero. También ocurre que en algunas ocasiones retornen por su pareja y los hijos habidos con ella para trasladarse a otro país con la intención de encontrar mejores condiciones de vida para la familia, pero ocurre que se da la separación y los menores quedan bajo el cuidado de algunos de sus progenitores y en este caso, alguno de ellos llega a retornar a su lugar de origen, y no obstante de carecer del derecho de guarda y custodia del menor y lo llevan consigo en forma ilícita, lo que origina el fenómeno de la sustracción internacional. SUSTRACCIÓN INTERNACIONAL Se identifica como sustracción inter parental de menores aquella acción que realiza cualquiera de los progenitores con el objeto de sustraer, retener u ocultar al menor para impedir que el otro progenitor ejercite el derecho de convivencia o custodia, mismos que fueron establecidos mediante algún convenio celebrado por los padres o alguna decisión judicial, y es provocado porque la intención del que sustrae al menor es con el objeto de tenerlo consigo y radicarse en otro país, sin el consentimiento del otro progenitor, lo que no solo afecta a éste sino al propio menor, lo que hizo necesario que los Estados regularan ésta situación mediante la creación de varias disposiciones relacionadas con el tema, tales como el Convenio de la Haya sobre aspectos civiles de la Sustracción Internacional de menores en 1980; el Convenio de Luxemburgo de 1980; el Reglamento 2201 de 2003 del Consejo de la Unión Europea y la Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de menores. MARCO REGULATORIO El Convenio de la Haya sobre aspectos civiles de la sustracción internacional de menores, tiene como objetivo proteger el Interés Superior del Menor, y en base a eso a no ser trasladado o retenido, por lo que el procedimiento establecido para el caso de sustracción es precisamente que la restitución se lleve a cabo en el menor tiempo posible, con el fin de evitarle traumas al menor de edad y respete el derecho de visita y custodia establecidos en forma inicial, es decir, regresar las cosas al estado que guardaban antes de la sustracción. Dicha convención está dividida en seis capítulos relativos a su campo de aplicación, las autoridades encargadas de su cumplimiento, la restitución del menor, el derecho de visita, la disposición generales y las clausulas finales. Conforme a tales apartados el derecho de Custodia está considerado como “el derecho relativo al cuidado de la persona del menor y, en particular el de decidir sobre su lugar de residencia “, el de visita esta entendido como “el derecho de llevar al menor, por un periodo de tiempo limitado a otro lugar diferente a aquel en que tiene su residencia habitual”, lo anterior está contemplado en el artículo 5º del Convenio de la Haya. En ese orden de ideas, el artículo 3º establece que un traslado o retención de un menor se considera ilícito cuando se realiza con infracción al derecho de custodia atribuido, separada o conjuntamente a una persona, una institución, o cualquier otro organismo en el Estado en el que el infante tenía su residencia habitual inmediatamente antes de su traslado o retención. Para el funcionamiento del Convenio, cada estado debe nombrar una autoridad central que se encargue de darle cumplimiento y de ejercer lo siguiente: - Localizar al menor trasladado en forma ilícita. - Prevenir en lo posible que el menor sufra menos daños o que las partes interesadas resulten perjudicadas adoptando para tal efecto las medidas provisionales que se requieren. - Garantizar la restitución voluntaria del menor o facilitar una solución amigable. - Facilitar información general sobre la Legislación del país relativa a la aplicación del convenio. - Facilitar la información relativa a la situación social del menor, si se considera prudente. - Incoar o facilitar el inicio de un procedimiento judicial o administrativo con el objeto de conseguir la restitución del menor y en su caso permitir que se regule o se ejerza de manera efectiva el derecho de visita. - Conceder o facilitar asistencia judicial y jurídica en la que se incluya la participación de un abogado, de ser necesario desde el punto de vista administrativo la restitución del menor sin peligro. - Mantenerse mutuamente informados sobre la aplicación del convenio de la Haya y eliminar en lo posible cualquier obstáculo que se vaya presentando oponible a su aplicación. Así, el convenio de La Haya nos remite como parte del procedimiento en su artículo 2º, el recurrir a los procedimientos de urgencia de que dispongan los estados contratantes en su territorio respectivo, y establece que, para determinar la existencia de un traslado o de una retención ilícita, las autoridades judiciales o administrativas del estado requerido podrán tener en cuenta directamente la Legislación y las decisiones judiciales o administrativas, estén reconocidas formalmente o no en el Estado de la residencia habitual del menor, sin tener que recurrir a procedimiento concretos para probar la vigencia de esa legislación. México al poseer dentro de su normativa convencional, los dos tratados cumbres en materia de Restitución, como lo son el Convenio de la Haya sobre aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de menores y la Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de menores poco recurre a su normatividad interna, además que no se cuenta con una Legislación acorde para aterrizarla. En el Estado de Aguascalientes se contempla, que para el caso de que se vean afectados los intereses de un menor, éste pueda emitir su opinión cuando esté en condiciones de formarse un juicio propio. Así, el artículo 242 Bis del Código de Procedimientos Civiles establece que para que ello se lleve a cabo el juzgador deberá encontrarse asistido por un perito en psicología, deberá encontrarse presente el Agente del Ministerio Público de la adscripción, así como un tutor previamente designado, pero sin la presencia de las partes ni sus abogados patronos, y hecho esto y valorado que sea al menor, el psicólogo emitirá un dictamen en el que externe la madurez intelectual del menor y si éste ha expresado libremente su opinión, así como el sugerir aquellas medidas que resulten necesarias, según sea el caso, en aras del interés superior del menor. Además, el artículo 186 del mismo ordenamiento legal mencionado, faculta al Juzgador a intervenir de oficio en los asuntos que afecten a la familia, y en especial, tratándose de menores de edad o de alimentos. En su caso el Código Civil Federal establece: “Las leyes mexicanas rigen a todas las personas que se encuentren en la República, así como los actos y hechos ocurridos en su territorio o jurisdicción y a aquellos que se sometan a dichas leyes, salvo cuando éstas prevean la aplicación de un derecho extranjero y salvo además, lo previsto en los tratados y convenciones de que México sea parte.” Más allá de eso, no existe un sistema regulatorio respecto a la sustracción de un menor, por lo que, aquellos jueces que forman parte de la Red de Jueces de la Haya y Autoridades Centrales sobre Sustracción Internacional de Menores, en la reunión celebrada en la Ciudad de México, del veintitrés al veinticinco de febrero del año en curso, obtuvieron como logros el desarrollo de una ley modelo regional sobre procedimiento para la aplicación de los convenios sobre Sustracción Internacional de Niños, la cual, si bien aún, no tiene la calidad de obligatoria en los estados ratificantes, establece como principios rectores que la demanda o solicitud de restitución deberá ajustarse a los requisitos establecidos por los artículos 8º de la Convención de La Haya sobre los aspectos civiles de la sustracción internacional de menores y 9º de la Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de Menores, la cual podrá ser presentada en forma directa ante el Tribunal competente, vía exhorto o carta rogatoria o solicitud directa ante la autoridad central, por lo que presentada ésta procederá la calificación de las condiciones de admisibilidad y titularidad activa, según las definiciones del artículo 1° y 4° de esta ley modelo y conforme a ello el peticionante deberá acreditar la veracidad de su derecho demostrando que se encuentra en el ejercicio de la guarda o custodia. La presentación de la demanda marcará la fecha del inicio del procedimiento de restitución del menor y admitida la demanda en veinticuatro horas el Tribunal despachara mandamiento de restitución y le otorgara un término de diez días al requerido para que oponga excepciones, siendo válida la oposición para la restitución que se demuestra que la persona, institución u organismo que se hubiera hecho cargo de la persona del menor no ejercía de modo efectivo el derecho de custodia en el momento en que el menor fue trasladado o retenido o que en su caso otorgó consentimiento de ello o en forma posterior aceptarlo; también deberá probar como excepción que existe un grave riesgo de que la restitución del menor lo exponga a un peligro físico o psíquico o que de cualquier otra manera ponga al menor en una situación intolerable, además de demostrar que el propio menor por el grado de madurez con el que cuente al emitir su opinión se exprese de forma contraria a la restitución, por lo que cualquier otra excepción que se oponga deberá de ser rechazada. Contestada la demandada o vencido el término señalado al oponente se convocará a una audiencia a celebrarse dentro del término de tres días y en donde se resolverá lo relativo a los medios probatorios ofrecidos por las partes, siendo en el caso de los testigos, a limitarse a un número de tres por cada parte. La audiencia será presidida por el Tribunal y dejara de celebrarse por la audiencia de los citados, abordando en forma inicial la etapa conciliatoria y se oirá al menor cuando a juicio del Tribunal esté en condiciones de formarse un juicio propio, y oyendo a las partes y al representante social si se hallare presente, audiencia que podrá ser prorrogada por el Tribunal hasta por veinticuatro horas. La sentencia deberá pronunciarse sobre la restitución ordenándola cuando se trataré de un menor de dieciséis años que haya sido trasladado o retenido ilícitamente en violación de un derecho de custodia, efectivamente ejercido al momento del hecho en el país de su residencia habitual, y si ha transcurrido más de un año entre la fecha de solicitud o demanda de restitución y la de sustracción o retención ilícitos podrá ordenarse también la restitución, salvo que demostrada que fuera esta circunstancia el menor ha quedado integrado a su nuevo ambiente, además de que la permanencia de éste infante le resulte favorable al interés superior de dicho menor. CONCLUSIONES El fenómeno de la sustracción Internacional, vulnera los derechos de las niñas, los niños y adolescentes que se ven involucrados en el, toda vez que el padre sustractor lo realiza con una concepción egoísta de la tenencia del menor, al instrumentarla para causarle daño al otro progenitor, pasando por alto el interés superior del infante, y la afectación que pudiera ocasionarle con ello, pues lo sustrae de su residencia habitual, lo que realiza en forma subrepticia, ingresando a otro país de manera ilegal, lo que también expone al menor a otros peligros, sobre todo cuando esto se realiza en territorios que se encuentran inmersos en conflictos bélicos, con problemas de guerrilla o de narcotráfico, lo que obliga a que los Estados instrumenten medidas encaminadas a restituirlo a la brevedad posible, garantizando una respuesta pronta y expedita a esta demanda de justicia. BIBLIOGRAFÍA ● “El tema migratorio una experiencia mexicana”.- Ignacio Ríos y Martha Patricia Camacho de la Vega.- CELADE.-División de población.CEPAL.● “Movimientos Migratorios”.- sin autor, consultable en el sitio web perseo.sabuco.com/geografía/MOVIMIENTOS%20MIGRATORIO S.pdf.● “La Restitución Internacional de menores sustraídos por sus propios padres”.- Jinyola Blanco- Rodríguez y Raúl Santacruz-López”.Revista Estudios Socio- Jurídicos, volumen 11, número 2, julio-diciembre 2009.- Universidad del Rosario Colombia.● “Convenios sobre Restitución y Tráfico Internacional de menores”.- Eillen Matus Callero..- Instituto de Investigaciones Jurídicas UNAM.● “Protección de menores, Restitución de Menores”.- Adriana Pérez Canales.- Ponencia para el Instituto de Investigaciones Jurídicas en el marco del Congreso Internacional de Derecho de Familia, UNAM, noviembre de 2005. ● “Protección de los menores en el Derecho Internacional Privado Mexicano”.Jurídicas UNAM 2006.- Sonia Rodríguez.- Instituto de Investigaciones ● “Convención sobre los aspectos civiles de la sustracción de menores”.- Aprobada por el Senado el trece de diciembre de 1990 y entró en vigor el primero de septiembre de 19991.● “Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de Menores”.- Aprobada por el Senado en México el veintidós de junio de 1994 y entro en vigor el cinco de noviembre de 1994.● “Ley Modelo sobre normas procesales para la aplicación de los Convenios sobre Sustracción Internacional de niños.● Reunión Interamericana de la rede de Jueces de la Haya y autoridades Centrales sobre sustracción Internacional de menores. Coorganizada por la Conferencia de la Haya de Derecho Internacional Privado, el Instituto Interamericano del niño y la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.● “Código de Procedimientos Civiles en Aguascalientes” ● “Código Civil Federal en México”.- RESUMEN EJECUTIVO Los movimientos migratorios, que se han venido sucediendo en el transcurso de las últimas décadas ha traído importantes repercusiones sociales, económicas, demográficas, creando entre otras cosas, el fenómeno conocido como Sustracción de menores, que es aquella acción que realiza cualquiera de los progenitores con el objeto de sustraer, retener u ocultar al menor para impedir que el otro progenitor ejercite el derecho de convivencia o custodia, mismos que fueron establecidos mediante algún convenio celebrado por los padres o alguna decisión judicial, y es provocado porque la intención del que sustrae al menor es con el objeto de tenerlo consigo y radicarse en otro país, sin el consentimiento del otro progenitor, lo que no solo afecta a éste sino al propio menor, lo que hizo necesario que los Estados regularan ésta situación mediante la creación de varias disposiciones relacionadas con el tema, tales como el Convenio de la Haya sobre aspectos civiles de la Sustracción Internacional de menores en 1980; el Convenio de Luxemburgo de 1980; el Reglamento 2201 de 2003 del Consejo de la Unión Europea y la Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de menores. México al poseer dentro de su normativa convencional, los dos tratados cumbres en materia de Restitución, como lo son el Convenio de la Haya sobre aspectos Civiles de la Sustracción Internacional de menores y la Convención Interamericana sobre Restitución Internacional de menores poco recurre a su normatividad interna, además que no se cuenta con una Legislación acorde para aterrizarla. Los estados que han ratificado ambos convenios no cuentan con un marco regulatorio en su legislación local, por lo que, aquellos jueces que forman parte de la Red de Jueces de la Haya y Autoridades Centrales sobre Sustracción Internacional de Menores, en la reunión celebrada en la Ciudad de México, del veintitrés al veinticinco de febrero del año en curso, obtuvieron como logros el desarrollo de una ley modelo regional sobre procedimiento para la aplicación de los convenios sobre Sustracción Internacional de Niños que trata de establecer un procedimiento expedito a efecto de restituir a la brevedad posible a aquel menor que ha sido sustraído ilícitamente de su residencia habitual, con las afectaciones que ello le ocasiona y a los peligros a que se ve expuesto el menor al transitar por lugares que se encuentran inmersos en conflictos bélicos, con problemas de guerrilla o de narcotráfico, lo que obliga a que los Estados instrumenten medidas encaminadas a restituirlo a la brevedad posible, garantizando una respuesta pronta y expedita a esta demanda de justicia. LIC. JOSÉ TOMAS CAMPOS CASTORENA