VargasN_7

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Universidad Nacional Autónoma de México
Facultad de Filosofía y Letras
Colegio de Filosofía
Materia: Textos Filosóficos 6
Trabajo Final: La relación entre pasión y razón.
Alumna: Vargas Martínez Nancy
Ordinario
11/Junio/2010
Introducción.
I. ¿Cómo coexisten las pasiones con la razón?...................................3, 4, 5, 6…
II. ¿Cómo influye el hábito en las acciones de los seres humanos?...7
III. La simpatía como parte fundamental de las relaciones humanas…8,9, 10…
IV. La imaginación como parte influyente en las decisiones humanas…11, 12,13…
V. Conclusiones……………………………………………………………….14
Bibliografía……………………………………………………………………..15
Introducción
En el trabajo presente pretendo hablar sobre la relación existente entre la razón y
las pasiones, hacer un análisis de ambas, ¿Cómo es que las dos coexisten entre sí?
¿Cómo se manifiestan en el hombre?, ¿En qué consiste una pasión? y ¿Qué es lo que
la hace tranquila o violenta?, para así aclarar la idea de que la razón es esclava de las
pasiones en Hume, debido a que el hombre se ve afectado en sus acciones por ambas
cuestiones al tomar decisiones para hacer algo y que repercuten en su vida diaria.
Al mostrar cómo se manifiestan las pasiones y la razón en el hombre, se podrá ver
que ambas coexisten e intervienen en las acciones del hombre, además explicare
también cómo es que el hábito y la simpatía son parte fundamental de dichas
acciones, y cómo es que sentimos mayor afección por las personas que se encuentran
más cercanas a nosotros que por las que se encuentran lejos, por medio de la
simpatía.
Explicare brevemente como la imaginación puede intervenir en la toma de
decisiones respecto a las pasiones y a la razón y como por la contigüidad entre
espacio-tiempo, nos vemos más conectados con una relación u objeto que con otro.
I. ¿Cómo coexisten las pasiones con la razón?
Existe una lucha constante entre las pasiones y la razón, en los seres humanos las
pasiones se manifiestan fuertemente antes de que el hombre haga uso total de la
razón, ésta razón que actúa en el hombre no basta ni es suficiente para manifestarse
como acción o intervenir de manera directa en la voluntad porque no puede oponerse
completamente a las pasiones, y tampoco es causa propia de esa voluntad, Hume
sostiene que los seres humanos nos guiamos por experiencias que se acumulan, de
las cuales obtenemos conocimientos por medio del hábito que surgen de esas mismas
experiencias.
El razonamiento se divide en
un entendimiento que está fraccionado en
probabilístico y demostrativo, éste entendimiento no influye en las acciones del hombre,
sólo le ayuda a mejorar su desempeño como ser humano pero de manera indirecta
respecto a juicios provenientes de causas y efectos, por eso la razón no es capaz de
preferir entre una pasión o emoción, ya que en ella no está la última decisión.
Es por lo tanto necesario aclarar en qué consiste la pasión humeana, ésta es una
existencia que se encuentra en un estado de continuo movimiento por lo cual se
modifica, pero que a la vez es única porque no tiene cualidades que la hagan copia
igual o parecida a otra pasión o existencia, por lo que existen diversos tipos de
pasiones como las tranquilas, las débiles las fuertes y las violentas, estás pasiones no
son totalmente contradictoria a la verdad, si afirmamos que lo que siento en
determinado momento es lo que vivo y lo que sucede en ese instante, la verdad de lo
real aquí es su vigencia, por lo que las pasiones sólo son contrarias a la razón si tienen
un juicio que intervenga en ella, un ejemplo es que por sentirme atraído por una
afección me encuentro alterado por ésta y creo que realmente existe dicha afección
aunque no sea así, también cuando actuamos y buscamos todos los medios para
obtener un fin que deseamos mucho, nos engañamos al forzar los medios para que nos
proporcionen dicho fin, entonces es así cómo se engaña nuestro juicio relativo a
causas y efectos.
Es entonces aquí donde la razón actúa, el ser humano al verse engañado por
un juicio que afecta su pasión y ver que ésta se encuentra influenciada o sentada en
bases de falsedad, la razón entra en acción e inicia un análisis de manera indirecta, se
da cuenta que el supuesto o la falta de medios para el fin es erróneo o falso, por lo que
entonces el hombre al razonar interviene en las pasiones sin ninguna oposición.
El ser humano puede anhelar o querer realizar algo para obtener un fin que le sea
beneficioso pero al darse cuenta que el deseo a realizar es secundario y totalmente
falso, o que al realizarlo le traerá más problemas y será contraproducente, entonces el
deseo que se quiere realizar se convierte en indiferente para el ser humano y éste
opta por ya no querer hacerlo.
Por lo dicho anteriormente podemos afirmar que existen diversos tipos de deseos
unos que se encuentran dentro del ser humano implantados en él desde su naturaleza,
como los que producen estabilidad, armonía , equilibrio, que por lo común generan bien
o beneficio y otros que están fundados en la pasión violenta, los deseos que producen
estabilidad actúan de manera pasiva y tranquila por lo que no producen ninguna
alteración en el hombre y son tomados como determinaciones de la voluntad y a veces
de la razón, también las pasiones violentas intervienen sobre el hombre y su voluntad,
que alteran al hombre, por lo que depende de cada individuo optar por lo que más le
convenga y ver que decisiones puede tomar ante sus pasiones, según el carácter que
posea cada individuo,
Cuando las pasiones tranquilas prevalecen ante las violentas son consideradas
como fortalezas del alma o del carácter, y a pesar de que son las que producen
estabilidad, se sabe también que ningún hombre queda exento de realizar alguna
pasión o deseo ya que se ve tentado por ellas, por lo que entonces es difícil tomar una
decisión cuando existe una oposición entre los motivos y las pasiones ya que el ser
humano no puede estar todo el tiempo en un estado total de tranquilidad y paz y
tampoco de violencia y malestar, por eso necesita un equilibrio para mantenerse en
armonía y así puedan coexistir las pasiones con la razón.
Las pasiones cuando suceden continuamente se ven afectadas por la costumbre
y el hábito, se convierten en principio habitual de acción formando así las
características principales y predominantes de alguna persona por lo que al
acostumbrarse el ser humano a ellas ya no siente la misma agitación sensible y
constante que sentía en un principio, sino que se vuelve común en él, es por eso que
cuando el ser humano tiene una sensación o emoción nueva se ve atraído por ella. La
costumbre que se entraña por la repetición y la fuerza del hábito hace que el hombre
en sus acciones se dirija hacía una tendencia sin oposición y emoción de algún gusto
momentáneo, pero optara por la que más le guste y le beneficie.
Al hablar de la lucha de contrarios las pasiones ahí se encuentran unidas, para
entender esta relación se necesita ver el entrelazamiento entre impresiones e ideas,
así una pasión es capaz de producir otra aún si se encuentran separadas e
independientes, el hombre está consciente de que existen y que son diferentes entre sí,
por lo que ambas se mezclan a pesar de no tener algo en común, y debido a que la
pasión más fuerte es la que domina a la más débil la absorbe y la asimila y la convierte
en sí misma, uniéndose una con otra, todo esto es lo que hace que una pasión sea
tranquila y violenta, encontrar sus diferencias para después entenderlas y crear una
nueva.
“Toda nueva emoción, por consiguiente, que procede de los primeros aumenta,
como es natural, el valor, de la misma manera que una emoción idéntica,
procediendo del último, aumenta el miedo, por la relación de ideas y la conversión
de la emoción inferior en la predominante”.1
Debido a esta mezcla entre pasiones a pesar de ser distintas unas de otras,
son capaces de transformarse y mutar entre ellas mismas para dar lugar a otras
pasiones, por lo que al existir al mismo tiempo adquieren una nueva fuerza y dan
lugar a un nuevo sentir, de la misma forma se puede dar una pasión más fuerte
sólo que en éste caso sí por lo general un objeto produce un efecto o emoción
continua,
y de manera imprevisible produce efectos contrarios a los comunes,
entonces se da una nueva emoción que
toma fuerza y se convierte en una
pasión. Por ende es natural desear más las cosas prohibidas,
ya que al
experimentar lo prohibido se da un placer que nunca antes se había sentido y al
ser nuevo y romper con las leyes y las reglas lo hace más placentero.
1
David Hume, El tratado de la naturaleza humana, 2.3.8, p 193.
II. ¿Cómo influye el hábito en las acciones de los seres humanos?
Todas estas ideas anteriores se encuentran fundamentadas en las
conversiones entre dolor–placer y placer-dolor, que se dan por el hábito y la
repetición, donde esta repetición produce una facilidad y gusto hacía el placer
hasta cierto punto y hasta ciertos límites, pero cuando se superan esos límites lo
que producía placer deja de hacerlo y lo convierte en dolor y desagrado, se pasa
de un lugar a otro rápidamente.
El hábito entonces es parte importante y constitutivo de las pasiones porque
es capaz de hacer desagradables las cosas que eran agradables, debido a que
una emoción al ser tan repetitiva, continua y demasiado frecuente, pase de ser lo
más importante a lo más indiferente, y toda la emoción que produce estabilidad se
convierte en desagradable, las acciones se vuelven débiles, dejan de interesar y
se vuelven frágiles, es por eso que el hábito debe mantenerse activo y no pasivo,
se debe cambiar continuamente para que prevalezca en lo agradable y no caer en
lo inactivo que causa debilidad.
“Nada posee un mayor influjo en el aumento y disminución de
nuestras pasiones, en la conversión del placer en dolor y del dolor en
placer, que el hábito y la repetición”.2
2 Ibídem, 2.3.5, p
196.
III. La simpatía como parte fundamental de las relaciones humanas
El motor principal de las pasiones y de las acciones del ser humano son el placer
y el dolor, estos actúan en el hombre, en su pensar y en su sentir, por lo que es capaz
de tomar decisiones propias y acercarse o alejarse más a lo que le es agradable o
desagradable, lo que le gusta o lo que no le gusta, así es capaz de sentir alegría,
temor, pena, esperanza, entre otras sensaciones, todas ellas dependen del gusto,
afición, placer o dolor que sienta un hombre por determinada situación, de la misma
manera surgen las pasiones indirectas como el amor y el odio, el orgullo y la humildad,
que provienen de una relación doble entre impresiones e ideas que conllevan al placer
o al dolor, por lo tanto para Hume lo que nos produce placer o satisfacción es virtuoso y
lo que nos produce dolor es vicioso.
Depende de cada persona que sea virtuosa o viciosa, ya que sus principios son
capaces de extenderse hasta la conducta total de su propio carácter, las acciones por
sí mismas no son capaces de tener influencias sobre el amor, la humildad, el odio y el
orgullo, sólo por su cualidad, forma o carácter, la acción es capaz de afectar los
sentimiento de un individuo.
Hume sostiene que debido a que los sentimientos de los hombres son similares
entre sí, pueden ser influidos por una afección y sentir cosas parecidas, parece ser
entonces que lo que guía a los hombres para convivir y sobrellevar su vida entre ellos
mismo es la simpatía.
“Ninguna pasión de otro sujeto se descubre por sí misma inmediatamente al
espíritu. Solamente somos sensibles a sus causas y efectos. De estos inferimos
la pasión y por consecuencia, éstos son los que dan lugar a la simpatía”. 3
El placer aquí cumple otra función con relación a la simpatía de acuerdo con Hume,
debido a que lo bello produce placer, los hombres tienden hacía lo que les gusta y
hacía lo que es bello tomando la consideración anterior, así entonces sienten agrado
por alguien que siente placer debido a la simpatía.
Por lo que respecta a las virtudes artificiales como la justicia que se estima
demasiado por que produce un bien al género humano, al igual que la modestia y el
actuar de buena manera, estas ideas son artificios creados para mantener estable a la
sociedad, por lo que agradar y gustar al ser humano son cosas que competen a la
simpatía, que los seres humanos sienten al saber que hay algo bueno que pueden
compartir con los demás, por ello la simpatía es el origen de estima a las virtudes
artificiales.
3
P Ibídem,3¡ 3. 3.1, p 380.
Los hombres son capaces de saber lo que les produce un bien o un mal, lo que les
parece censurable o probable, por lo que son capaces de hacer distinciones morales
que surgen de las tendencias hacia intereses sociales, por lo que la simpatía es la base
y fundamento de la naturaleza humana ya que influye sobre las virtudes artificiales y
sobre el sentido de la belleza, es capaz de mostrar lo que puede ser desaprobado o
aprobado según sea el caso.
Por lo tanto cuando en alguna situación se tiende hacia el bien del ser humano
como cualidad, nos gusta, nos agrada y aprobamos ciertas determinaciones porque en
ellas se encuentra establecida la idea de placer, ésta nos afecta porque nos interesa
debido a la simpatía que nos hace sentir algo en común con los demás, ya que
pertenece al género del placer, y debido a que esta simpatía cambia constantemente
por la variación en los sentimientos, nos parece más favorable y simpatizamos más con
la idea de que la gente más cercana a nosotros
o que pertenece a nuestro circulo
social salga más beneficiada que con la que se encuentra más lejos de nosotros.
IV. La imaginación como parte influyente en las decisiones humanas
La idea de proximidad entre los seres humanos varia continuamente, somos
capaces de comunicarnos por medio de lenguajes, y debido a la influencia del
carácter de una persona sobre otra, el hombre se ve afectado por los juicios
emitidos de uno a otro si son diferentes o distan respecto a un punto de vista, por
lo tanto las ideas pueden ser concordantes o discordantes, entre cada individuo,
se censuran o se exaltan y a pesar de no tener una relación cercana de simpatía
o de convivencia, es permisible un grado de egoísmo entre cada individuo ya
que es natural en el ser humano ser de esa forma, por lo que se puede corregir
sentimientos censurables que surgen por oposición, pero esto no es común, por lo
que razón en ciertas situaciones necesita ser imparcial y no dejarse
llevar
fácilmente por las pasiones sino encontrar un equilibrio entre pasión y razón.
La imaginación también es parte influyente en las decisiones del hombre
porque experimenta diversas pasiones que tienen distintos grados de vivacidad
que son independientes de la existencia real de los objetos y son inferiores a las
creencias.
A pesar de que la simpatía es fuerte porque es un bien de los seres
humanos no es el origen de la estima de la virtud ya que cuando el hombre
aprueba algún cometido es porque la virtud en ese cometido logra un fin y
proporciona un bien pero cuando no es así se convierte en medio imperfecto, por
lo que la bondad sólo tiene merito cuando los medios son perfectos para producir
un buen fin.
Existe una relación fuerte entre la imaginación y las afecciones, ya que si
alguna idea posee una nueva vivacidad las pasiones se vuelven más violentas y
la imaginación comienza a trabajar en ellas.
Al tener una imagen de un placer pasado, saber que antes ya se había
experimentado y tener conocimiento sobre lo que consiste ese placer, entonces
el
placer futuro se puede enlaza con el placer pasado por una relación de
semejanza por lo que actúa con más vivacidad; así un placer que ya se haya
vivido excita más los deseos que uno extraño, un ser humano puede saber por si
mismo que es lo que le puede gustar más o que le puede gustar menos, pero si
se ve excitado en la imaginación por lo que le gusta más, las ideas trabajadas en
la imaginación hacia lo que le gusta adquieren más fuerza que las otras y las
que gustan menos sólo tienen una influencia débil sobre la voluntad y las
afecciones.
En ésta parte vuelve a participar la simpatía ya que si un individuo tiene
cierta pasión por algo y alguien más lo incita a seguir en esa pasión le produce
una idea que influye en su pasión, por lo que la comunicación y simpatía están
presentes ya que existe una cercanía entre una persona y otra, así ésta simpatía
es una impresión por la fuerza de la imaginación más que sólo una idea en una
impresión.
A pesar de que la imaginación es capaz de exaltar una idea y llevarla al
pasado y al futuro, el hombre ésta consciente de que existe el espacio y el tiempo
donde vive, y aunque la imaginación se ve atendida hacia objetos que no están
en ese momento físicamente visibles, debe reflexionar sobre el presente que vive.
El hombre es capaz de reconocer dos géneros de objetos los contiguos y los
remotos, los contiguos se aproximan a impresiones fuertes y vivaces, los remotos
son débiles e imperfectos, estos aparecen así ante la imaginación, mientras exista
una pequeña distancia en el pasado, hay un efecto mayor que debilita e
interrumpe la concepción que tiene el hombre respecto a una situación más
grande en el futuro, así el efecto sobre la imaginación se deriva por su influencia
sobre la voluntad y las pasiones por lo que la fantasía es capaz de adelantar el
curso de las cosas y considerar hacia donde debe dirigirse, así el hombre elijé
hacía qué tiempo interpuesto puede fijar y dirigir su pensamiento, si hacía un
presente, un futuro y un pasado o hacía un pasado un presente y un futuro, etc.
“…Siguiendo lo que parece la sucesión natural del tiempo, procedemos del
pasado al presente y del presente al futuro, por lo que concebimos el futuro
como aproximándose cada momento más a nosotros y el pasado como
apartándose”.4
4
Ibídem, 2.3.8, pp. 208, 209.
Conclusiones
Los seres humanos tienen pasiones y razones que los ayudan a dirigirse y
actúan ante la vida, todos tienen distintas formas de actuar, distintas formas de ser, de
percibir el mundo, cada causa y efecto de las pasiones que son tranquilas y violentas
dependen de esas formas de actuar, del temperamento y disposición que cada
individuo tiene, a pesar de que las pasiones violentas tienen una influencia más fuerte
sobre la voluntad las tranquilas son fortalecidas por la reflexión y más deseadas porque
son capaces de dominarse en sus más fuertes movimientos, a pesar de que una
parece distar de la otra ambas coexisten ya que una puede transformarse fácilmente y
pasar de una a la otra, por lo que la pasión más débil es absorbida por la más fuerte y
se asimilan una a la otra.
La lucha constante entre la pasión y la razón son cotidianas en la vida del ser
humano, los transforman, los diversifican y hacen que sean diferentes unos de otros,
ambas tanto razón como pasión dependen una de otra, por lo que al tomar una
decisión las pasiones y la razón no pueden deslindarse una de otra, ambas se
compenetran o avienen para coexistir
para así poder resolver los problemas del
hombre y así pueda equilibrar su vida.
1. Este trabajo no tiene mucha coherencia en la manera de abordar los temas.
Pasas de un tópico de estudio –pasiones, razón, virtudes, imaginación- sin
detenerte mucho en explicar la unidad temática a lo largo del mismo
2. No es claro argumentativamente: no hay citas, hay muchas frases sueltas, no
hay mucha continuidad entre las ideas de un párrafo a otro. Al principio, planteas
un objetivo de trabajo, pero no lo desarrollas claramente.
Bibliografía
1) HUME, David.
Tratado de la naturaleza humana.
Traductor: Félix Duque.
Técnos, Madrid, 2005.
Cuarta edición.
P 447.
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