Diálogo Argentino

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El Diálogo interreligioso y el dialogo ciudadano,
como método de paz
El caso Argentino
por Juan Carlos Mazzini
Director de Relaciones Internacionales
Defensor del Pueblo de la Nación Argentina
ANTECEDENTES
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Convocado por el Defensor del Pueblo de la Nación
Argentina y la Iglesia Católica en enero del año 2002 se
reunió el Diálogo Argentino e interreligioso en medio de una
crisis político-social que amenazaba con la disgregación de
nuestro país, y la posibilidad cierta de una guerra civil. Este
diálogo contó con el apoyo técnico del Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
El punto de partida fue un presente de grave exclusión social,
un presente de injusticias extremas.
El Diálogo Argentino fue un proceso que mediante la amplia
participación de la sociedad ha buscado contribuir a la
reconstrucción de las bases de la conviencia social frente a la
profunda crísis político-institucional, económica y social que
sufría la República Argentina.
El Diálogo Ciudadano fue un espacio integrado por los credos
y un grupo de organizaciones sociales, orientado a propiciar
el diálogo y la reflexión con la ciudadanía aportando ideas y
propuestas de acción consensuadas para mejorar las
oportunidades de inclusión social y las condiciones de
equidad y justicia. invitando a participar a funcionarios y
dirigentes políticos. Pretendió recuperar el sentido del bien
común y la legitimidad de la institucionalidad democrática
Se trató que la participación amplia de todos los sectores con
un sentido pluralista y práctico, en cada localidad, municipio,
provincia, la nación toda, descubrieran y planificarn sus
prioridades de tal manera que las aspiraciones y los cambios
propuestos se conviertan en realidad.
Estas prioridades deberían integrarse a mediano plazo en
una Agenda Pública de Inclusión Social constituyéndose en
un compromiso básico para los dirigentes políticos de todo el
país con el objetivo de concretarlas en políticas públicas. Se
puede transferir la metodología a entidades locales
interesadas en replicar la experiencia en sus ámbitos de
acción.
La preservación y ampliación del Diálogo es una decisión
estratégica que respondió al deseo de canalizar las
demandas de la sociedad, recrear la promoción del bien
común, e impulsar las acciones necesarias para alentar la
profundización de las transformaciones institucionales
manifestadas durante la primera etapa del diálogo y contribuir
a la construcción conjunta de la transformación del país.
Diálogo Argentino
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Durante su primer mes y medio de funcionamiento
participaron del Diálogo Argentino más de mil personas
pertenecientes a un centenar de organizaciones religiosas
políticas sindicales, empresariales, financieras, de la
educación, de la cultura, de la salud y de distintos sectores
de la sociedad.
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En ese rico proceso de escuchar las diversas opiniones y
experiencias pudo apreciarse la demanda unánime por
recuperar la paz social, el respeto interreligioso y un profundo
deseo de colaboración y participación.
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La respuesta más urgente y necesaria frente a la situación
indicada era la lucha contra la pobreza que estaba
destruyendo millones de hogares, y la inseguiridad.
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La publicación de este documento significó la conclusión de
una primera etapa del Diálogo Argentino que arrojó un
conjunto
de
resultados
positivos,
entre los cuales se destacan: la recuperación del diálogo
como instrumento de generación de consensos, la
contribución a la pacificación social, los esfuerzos por
recuperar valores esenciales para la vida en sociedad
(sentido ético de lo público y compromiso con el bien común),
acciones para atender la emergencia social y reformar la
política social (Programa Jefes y Jefas, políticas y programas
de salud, reanudación de programas paralizados de
viviendas), y el avance en la identificación de los consensos
básicos que rigen hasta la fecha.
Mesa Ampliada del Diálogo Argentino (18 de octubre
2010)
La Asamblea Extraordinaria de obispos y el Defensor del
Pueblo de la Nación años mas tarde, dispuso el inicio de una
segunda etapa del Diálogo Argentino. La misma presenta las
siguientes novedades:
Las entidades de la sociedad civil, el Programa de Naciones
Unidas para el desarrollo y el Episcopado, incorporando a
todas las comunidades religiosas: judía, musulmana y las
distintas confesiones cristianas, asumirán, como Mesa
Ampliada, la continuidad y convocatoria del Diálogo
Argentino.
La Mesa Ampliada contará con un Comité Ejecutivo del cual
es parte el Defensor del Pueblo de la Nación, encargado de
diseñar e implementar las acciones necesarias para el
cumplimiento de los objetivos de esta etapa del Diálogo que
se mantiene hasta nuestros días.
La Comisión de Justicia y Paz del Episcopado propuso a los
Obispos de Argentina donar un tema a la sociedad que
aglutinara a la mayoría de los ciudadanos e instituciones y
que permitiera lograr consensos que derivaran en Políticas
de Estado, teniendo a la vista los Bicentenarios de Argentina
como metas de encuentro y reconciliación de su población.
El tema prioritario que la Comisión eligió como aglutinante
hacia la generación de consensos fué el de la INCLUSIÓN
SOCIAL.
A partir de la convocatoria del Defensor del Pueblo de la
Nación Argentina y de la Comisión Nacional de Justicia y
Paz se reactivaron las reuniones del Diálogo Argentino, y se
inició una etapa bajo la denominación Diálogo Ciudadano,
tomando como punto de partida el documento “De Habitantes
a Ciudadanos” preparado por la Comisión.
El documento, con el subtítulo Propuesta de Trabajo para la
Participación, tomó como tema prioritario y eje para la
reflexión, la “inclusión social”.
En dicho documento se propone una lista de 10 temas
prioritarios para un debate en busca de consensos que se
mantiene hasta el presente.
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Lista de temas prioritarios:
Salud
Educación
Justicia y Seguridad Ciudadana
Política Social
Reforma Política y del Estado
Medio Ambiente
Organización Económica, Integración regional y Mundial
Trabajo/Empleo decente
Tierra, Infraestructura y Habitat
Libertad y Responsabilidad Ciudadana
Distinguidos miembros, en forma sucinta he querido reflejar la
importancia del rol de nuestras instituciones en la
reafirmación del diálogo como metodología para avanzar en
nuestros respectivos conflictos y el logro de soluciones
concretas.
Muchas gracias
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