Las inteligencias múltiples de Howard Gardner Por el Psic

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Las inteligencias múltiples de Howard Gardner
Por el Psic. Fernando Reyes Baños
La teoría de las inteligencias múltiples, como resultado de las investigaciones
hechas por el Proyecto Zero sobre el desarrollo del potencial humano en la
Universidad de Harvard [1], fue propuesta por el Dr. Howard Gardner.
Este autor revolucionó con su definición de inteligencia la forma tradicional
con que hasta el momento se había conceptualizado este término, al decir
que ésta es “la capacidad de resolver problemas o elaborar productos que
sean valiosos en una o más culturas”. ¿Por qué esta definición resultó ser tan
“revolucionaria”? Básicamente, por dos razones:
a) Al definir la inteligencia como una capacidad Gardner, sin negar el
componente genético, la conceptualizó como una habilidad que puede ser
desarrollada, rompiendo con ello la concepción de que la inteligencia es
innata e inamovible, debido a lo cual podría considerarse que: todos nacemos
con potencialidades marcadas por la genética, pero que pueden ser
desarrolladas gracias a los estímulos procedentes del medio ambiente, a
nuestras experiencias, a la educación que recibimos, etc.[2], y
b) La teoría de Gardner explica que no existe una sola inteligencia sino varias
(8 hasta el momento, según la propuesta más actual) y que todos poseemos
capacidades similares, con la particularidad de que siempre somos más
hábiles para hacer unas cosas que para hacer otras [3], todo lo cual se
contrapone, con otras concepciones que se habían enraizado fuertemente en
la psicología hasta el momento: que la inteligencia es unitaria (propiedad por
la que Ch. Spearman denominó Factor general o factor "g" al componente de
la inteligencia que, según sus investigaciones de 1904, justificaba la
correlación positiva entre cualquier medida del rendimiento intelectual [4]),
que es posible medirla por medio de pruebas estandarizadas, que es
hereditaria de un 40% a 80%, etc. (concepciones recopiladas en un libro
polémico de Richard J. Herrnstein y Charles Murray llamado The Bell
Curve) [5].
Revisemos a continuación, brevemente, de qué tratan cada una de estas
inteligencias:
Lingüística. Es la capacidad para leer, escribir y comunicarse con palabras.
Con ella, utilizamos las palabras con efectividad para procesar, con rapidez,
mensajes lingüísticos, ordenar palabras y dar sentido lúcido a los mensajes.
Es común encontrarla en escritores, científicos sociales, profesores de
humanidades, políticos, secretarias, poetas, periodistas, etc. Shakespeare,
Dante Alighieri y Sor Juana Inés de la Cruz, entre otros, representan
personas que probablemente desarrollaron y explotaron esta inteligencia.
Lógico-matemática. A menudo conocida como “pensamiento científico”
debido, principalmente, a que la persona que la posee razona y calcula para
pensar de manera lógica y sistemática, representa la “capacidad para
manejar números, relaciones y patrones lógicos de manera eficaz, así como
otras funciones y abstracciones de este tipo” [6] Es común encontrarla en
economistas, ingenieros, científicos, actuarios, contadores, administradores,
etc. Albert Einstein, Galileo Galilei y René Descartes son algunos ejemplos de
quienes representan mejor esta capacidad.
Vale la pena citar aquí, algunas ideas que el propio Gardner ha expresado
acerca de estas dos primeras inteligencias y el modo cómo han sido
valoradas, históricamente, por las instituciones educativas: “(...) estoy
convencido de que las siete inteligencias (actualmente ocho) tienen el mismo
grado de importancia. En nuestra sociedad, sin embargo, hemos puesto las
inteligencias lingüística y lógico-matemática, en sentido figurado, en un
pedestal. Gran parte de nuestro sistema de evaluación se basa en esta
preponderancia de las capacidades verbales y matemáticas (cuando) el
objetivo de la escuela debería ser el de desarrollar las inteligencias y ayudar
a la gente a alcanzar los fines vocacionales y aficiones que se adecuen a su
particular espectro de inteligencias. La gente que recibe apoyo en este
sentido se siente, según mi opinión, más implicada y competente y, por ende,
más proclive a servir a la sociedad de forma constructiva” [7]
Musical. Es la capacidad para cantar bien, ejecutar instrumentos musicales,
componer; comprender y apreciar la música. Se manifiesta por la facilidad
para identificar sonidos diferentes, distinguir los matices de su intensidad,
captar su dirección, así como también por cantar una tonada, recordar
melodías, tener buen sentido del ritmo o, simplemente, disfrutar de la música.
Es común encontrarla en ingenieros de sonido, músicos, cantantes, disc
jokeys, afinadores de piano, terapeutas musicales, etc. Algunos
representantes famosos son: Mozart, Beethoven y Bach.
Espacial. Es la capacidad para pensar en imágenes; incluye imaginación,
orientación espacial y destreza para representar la realidad gráficamente.
Esta inteligencia permite diferenciar formas y objetos, distinguir y administrar
la idea de espacio, elaborar y utilizar mapas, plantillas y otras formas de
representación, identificar y situarse en el mundo visual con precisión,
transformar las percepciones, imaginar un movimiento, una escena, visualizar
imágenes mentalmente, etc. Es común encontrarla en pintores, escultores,
arquitectos, inventores, navegantes, geógrafos, etc. Frank Lloyd Wright,
Picasso y James Cook son algunos de los que mejor representan esta
habilidad.
Cinestésico-corporal. Capacidad para utilizar el cuerpo con destreza para
resolver problemas, crear productos o presentar ideas o emociones, así como
“... sus particularidades de coordinación, equilibrio, destreza, fuerza,
flexibilidad y velocidad... Se aprecia en personas que se destacan en
actividades deportivas, danza, expresión corporal y/o en trabajos de
construcción, utilizando diversos materiales concretos. También en aquellos
que son hábiles en la ejecución de instrumentos.” [8] Es una capacidad
importante para escultores, cirujanos, actores, atletas y bailarines. Algunos
ejemplos representativos de esta capacidad son: Michael Jordan, Charlie
Chaplin, Jack Roosevelt Robinson y Rudolf Nureyev.
Interpersonal. Es la capacidad para trabajar de manera efectiva con la
gente, de relacionarse con ella demostrando empatía y comprensión. Esta
capacidad implica “... entender a otras personas: lo que les motiva, cómo
trabajan (y) cómo trabajar con ellos de manera cooperativa.” [9] Es común
encontrarla en vendedores, docentes, administradores, terapeutas y personas
que se dedican a las relaciones públicas, a la mercadotecnia o que realizan
actividades en ministerios religiosos. Mahatma Gandhi, Martin Luther King y
Oprah Winfrey son algunos ejemplos que representan esta capacidad.
Intrapersonal. Capacidad correlativa a la interpersonal, pero orientada hacia
adentro. Es “... la habilidad de la introspección, y de actuar
consecuentemente sobre la base de este conocimiento, de tener una
autoimagen acertada, y capacidad de autodisciplina, comprensión y amor
propio. La evidencian las personas que son reflexivas, de razonamiento
acertado y suelen ser consejeras de sus pares.” [10] Suele estar presente en
filósofos, psicólogos y sacerdotes. Algunos representantes de esta capacidad
son: Carl Jung, Platón y Sigmund Freud.
Naturalista. Es la capacidad para hacer distinciones en el mundo de la
naturaleza y usar este conocimiento de manera productiva. Con ella, el sujeto
se orienta al redescubrimiento del mundo natural, para develar los misterios
del planeta y sus elementos. Es común encontrarla en veterinarios, biólogos,
antropólogos,
ecologistas,
agrónomos,
botánicos,
etc.
Algunos
representantes de esta inteligencia son Edward Osborne Wilson, Charles
Darwin y Gregor Johann Mendel.
El mapa mental que se presenta a continuación [11] resume, gráficamente, la
información que presentamos anteriormente sobre las 8 inteligencias de la
teoría de H. Gardner:
Haz clíc en la imagen para verla más grande
La importancia de la teoría de Howard Gardner sobre las inteligencias
múltiples puede apreciarse mejor si la contrastamos con lo que todavía ocurre
en muchas de las escuelas de nuestro tiempo con lo que el mismo Gardner
vislumbra como la escuela ideal para el futuro.
¿Cómo enseñamos los profesores actualmente? De forma muy parecida al
pasado, con cierto apoyo de un arsenal tecnológico más o menos bien
utilizado (más o menos bien comprendido), pero igual que hace años, como si
nuestro mundo y las personas que transitan en él no hubieran cambiado
siquiera un poco. Intentamos que todos los estudiantes aprendan los mismos
contenidos, exactamente de la misma forma y que obtengan, en las pruebas
objetivas que les aplicamos, resultados que reflejen un buen desempeño
académico. Seguimos concibiéndonos como “transmisores” y pensando que
los estudiantes son como recipientes vacíos que debemos llenar con nuestros
conocimientos. Seguimos pensando, con ingenuidad, que nuestro saber
puede aún representar todo lo que puede aprenderse para ejercer una
profesión.
La teoría de las inteligencias múltiples de Gardner se contrapone
precisamente, a estas concepciones tradicionales; de hecho, al ocuparse del
diseño de lo que podría ser la escuela ideal para el futuro según su
perspectiva, Gardner adelanta la necesidad de trabajar, primero, de acuerdo
a dos hipótesis fundamentales:
a) “No todo el mundo tiene los mismos intereses y capacidades; no todos
aprendemos de la misma manera” [12] (esto último _podríamos adelantarlo
desde ya, aunque por ahora sólo hagamos mención de ello_ hace referencia,
evidentemente, a estilos de aprendizaje particulares presentes en cada
individuo).
b) “... en nuestros días nadie puede llegar a aprender todo lo que hay para
aprender. Todos querríamos, como los hombres y mujeres del Renacimiento,
conocer todo, o por lo menos, crecer en la posibilidad de llegar a conocerlo
todo; sin embargo, este ideal ya no es posible. Por lo tanto, la elección se
hace inevitable, y una de las cosas que quiero argumentar es que las
elecciones que hacemos para nosotros mismos, y para la gente que está a
nuestro cargo, pueden ser elecciones informadas.” [13]
¿Cómo sería una escuela que, habiendo trabajado ya con estas hipótesis,
valorara las diferencias de sus estudiantes con relación a las inteligencias
que los caracterizara individualmente? El mismo Gardner tiene la respuesta:
“Una escuela centrada en el individuo tendría que ser rica en la evaluación de
las capacidades y de las tendencias individuales. Intentaría asociar
individuos, no sólo con áreas curriculares, sino también con formas
particulares de impartir esas materias. Y después de los primeros cursos, la
escuela intentaría también emparejar individuos con los diversos modelos de
vida y opciones de trabajo que están disponibles en su medio laboral.”
En suma, la teoría de las inteligencias múltiples de Gardner tiene aplicaciones
importantes para la enseñanza. Martín P. Llapa Medina, por ejemplo, en su
artículo en línea La educación y la teoría de las inteligencias múltiples de
Howard Gardner comenta que: “... el conocimiento de la teoría de
inteligencias múltiples tiene un propósito esencialmente educativo, y por ello,
la tarea de concientizar a los docentes de la existencia de otras formas de
manifestación de la inteligencia humana es sumamente importante.” [14]
Llapa Medina propone algunas actividades que, según afirma, podrían servir
para evaluar a los estudiantes e identificar en ellos las inteligencias que
poseen. Veamos a continuación, algunas de ellas (en nuestro caso,
complementaremos su aportación con las actividades que la Psic. Irene
Martínez Zarandona describe a propósito de la inteligencia naturalista [15], ya
que Llapa Medina no menciona en su artículo qué actividades educativas se
relacionan con esta inteligencia
INTELIGENCIAS
ACTIVIDADES
Lingüística
Exposiciones orales, discusiones en
grupo, uso de procesadores de
texto, debates, etc.
Lógicomatemática
Problemas matemáticos,
demostraciones científicas,
resolución de ejercicios lógicos,
juegos y rompecabezas, etc.
Musical
Uso de música de fondo, canto en
grupo, creación de melodías,
interpretación musical, etc.
Espacial
Uso de mapas mentales y otros
organizadores visuales, gráficas,
videos, películas, modelos
tridimensionales, etc.
Cinestésicocorporal
Excursiones, teatro en el salón,
juegos cooperativos, actividades
manuales, etc.
Interpersonal
Mediación de conflictos, enseñanza
entre compañeros, clubes
académicos, actividades
cooperativas, etc.
Intrapersonal
Estudio independiente, proyectos
individuales, reflexión de un minuto,
instrucción programada, etc.
Naturalista
Visita a sitios de interés, coleccionar
objetos para su clasificación,
identificación de objetos,
investigación de sucesos naturales
o históricos al aire libre, etc.
Notas
[1] Desarrollo Estratégico Integral y Coordinación General de Programas de Innovación e
Intervención Educativa (2002). Guía metodológica del docente. México: Secretaría de
Educación Guerrero.
[2] Robles, Ana (2007). Inteligencias múltiples. Consultado en octubre 16, 2008. En
http://www.galeon.com/aprenderaaprender/intmultiples/intmultiples.htm.
[3] Martínez Zarandona, Irene (2008). Inteligencias múltiples. Consultado en octubre 16,
2008 en http://sepiensa.org.mx/contenidos/f_inteligen/intro_1.htm.
[4] Andrés Pueyo, Antonio (1999). Manual de psicología diferencial. McGraw-Hill: España.
[5] Colaboradores de Wikipedia (2008). The Bell Curve. Consultado en agosto 23, 2008. En
http://es.wikipedia.org/wiki/The_Bell_Curve.
[6] Giorgis, Nidia (2007). Perfil de inteligencias múltiples. Boletín electrónico No. 05.
Consultado en octubre 23, 2008 en http://ingenieria.url.edu.gt/boletin/URL_05_BAS03.pdf.
[7] Gardner, Howard (1995). Inteligencias múltiples. Paidós: España.
[8] Giorgis, Nidia. Op. cit.
[9] Ibid.
[10] Ibid.
[11] Fuente de la imagen: Domingo, Federico A. (2008). Inteligencias múltiples. Sinergia
Creativa.
Consultado
en
octubre
23,
2008
en
http://sinergiacreativa.wordpress.com/2008/04/25/inteligencias-multiples/.
[12] Gardner, Howard. Op. cit. Pág. 27.
[13] Ibid. Pág. 27.
[14] Llapa Medina, Martín Pedro (2007). La educación y la teoría de las inteligencias
múltiples
de
Howard
Gardner.
Consultado
en
octubre
24,
2008
en
http://www.unjbg.edu.pe/revistas/limite6/pdf/articulo07.pdf.
[15] Martínez Zarandona, Irene (2008). Inteligencia naturalista. Consultado en octubre 24,
2008 en http://sepiensa.org.mx/contenidos/f_inteligen/f_intelinatural/smarts_1.htm.
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