Tema 3 – Escuchar los clamores de la vida

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Seglares “Amor de Dios”
Formación en los grupos / comunidades
Octubre de 2013-Junio de 2014
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CELEBRANDO EL 150 ANIVERSARIO
¡Grande es el amor de Dios!
Te m a 3
Escuchar los
clamores de la vida
“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
TEMA 3 – ESCUCHAR LOS CLAMORES DE LA VIDA
PRESENTACIÓN
Continuamos viviendo el tiempo jubilar por la gran celebración
del 150 aniversario de la Familia “Amor de Dios” – 27 de abril de
2014. Es tiempo de gracia, de regalo del Señor. Acogemos juntos
la invitación que nos llega a vivir el Carisma “Amor de Dios” en
fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo. Con los
dos primeros temas, hemos profundizado en el don carismático,
descubriendo sus características, sus rasgos y acogiendo sus
llamadas.
Entramos ahora en la segunda parte: es don, no para nosotros
mismos, sino para la Iglesia y el mundo, es regalo de Dios a través
de nosotros. Para ello, el tema que ahora se nos propone:
ESCUCHAR LOS CLAMORES DE LA VIDA.
¿Cuál es el objetivo?
Adentrarnos en el corazón del mundo y contemplarlo desde la
mirada de Dios. El contenido del tema pretende motivarnos para
mirar la realidad en la que estamos insertos, descubrir sus
anhelos y aspiraciones, es decir, las semillas del Verbo que laten
en ella, así como sus problemas y sus oscuridades, consecuencias
del pecado, y leerlos e interpretarlos desde Jesucristo, a la luz de
carisma “Amor de Dios” y el testimonio de Jerónimo Usera.
A este mundo nuestro, con sus luces y sombras, e inmensamente
amado de Dios, nos envía el Señor para anunciar el evangelio del
amor. Somos llamados a ser testigos de este evangelio con gozo y
esperanza. Que el Espíritu nos guíe en la búsqueda de los caminos
para vivir en la Iglesia una nueva evangelización.
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
¿Cómo es su estructura?
 Encuentro inicial: Comunicación de vida.
 Subtemas:
I.
Maestros en la mirada y escucha de la realidad
II.
1. Jesús
2. Jerónimo Usera
Lectura cristiana de la realidad
III.
1. Clave de lectura
2. Algunas condiciones para la lectura cristiana de la
realidad
Los escenarios donde la vida clama
1. El escenario cultural: tendencias secularizantes
2.
3.
4.
5.
6.
7.
El gran fenómeno migratorio
Los medios de comunicación
El escenario económico
La investigación científica y tecnológica
La política
Escenarios propios de la realidad donde está
inserto el grupo / comunidad
 Cuestionario para compartir en el encuentro del grupo /
comunidad y ofrecer su aportación en orden a la
preparación del XV Capítulo General de las Hermanas del
Amor de Dios.
 Celebración final: Revisando y concluyendo.
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
¿Cómo podemos trabajar el tema?
Distintos momentos:
 Celebración en el grupo para iniciar el tema.
 Trabajo personal: cada miembro del grupo acoge con gozo
la invitación a la lectura, reflexión y oración personal de las
dos partes del tema; y, teniendo en cuenta el Cuestionario,
prepara el compartir que ofrecerá en el encuentro del grupo
/ comunidad.
 Encuentro del grupo para, siguiendo el Cuestionario que se
propone, compartir y profundizar, y desde ahí elaborar su
aportación en orden a la preparación del XV Capítulo
General de las Hermanas del Amor de Dios.
Nota 1: El grupo puede ir teniendo encuentros después de cada
uno de los subtemas o tener un solo encuentro al final del tema.
 Envío de la aportación del grupo / comunidad al equipo de
Gobierno provincial / viceprovincial.
Nota 1: Se agradece este envío, si es hecho hasta el final de la
primera quincena de abril.
Nota 2: Se hace un único envío con la aportación comunitaria
relativa al tema en su totalidad, según el Cuestionario.
Nota 3: Estas aportaciones serán consideradas cuando se elabore
el Instrumento de Trabajo para el Capítulo General.
 Celebración final de conclusión.
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años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
 ENCUENTRO inicial: Comunicación de vida.
(Esto podría durar unos 30 minutos, dependiendo de cada grupo /
comunidad)
1. Canto
2. Se coloca un trozo de papel continuo o una cartulina en la
mesa. En el papel o cartulina está escrito: “Los clamores de la
vida”. Se invita a hacer una “lluvia de ideas” con estas dos
preguntas: ¿Dónde clama la vida? Y ¿qué clama?
3. Se escriben las respuestas en el papel. Después se lanzan
estas preguntas:

¿Tengo yo algo que ver con esos clamores?

¿Tiene nuestro grupo /comunidad algo que ver con esos
clamores?
4. Tiempo de reflexión personal
5. Tiempo para compartir
6. Se entrega el cuadernillo del tema 3 y se presenta la dinámica
de trabajo: Lectura en el grupo de la Presentación (pág. 2-4)
y se decide cómo llevar adelante la formación.
7. Canto final
Nota: Guardar el mural para ser utilizado en la celebración final.
 SUBTEMAS:
I.
Maestros en la mirada y escucha de la realidad
1. Jesús
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
Son muchos los textos bíblicos en los que Jesús aparece
contemplando la realidad y dejándose conmover por ella. No es
indiferente ante lo que acontece a su alrededor. Él va siempre en
camino y en este camino es capaz de escuchar las llamadas donde
la vida clama por ser escuchada y atendida.
Mateo 15, 21-28
Saliendo Jesús de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón. Y he
aquí una mujer cananea que había salido de aquella región
clamaba, diciéndole: “!Señor, Hijo de David, ten misericordia de
mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio”. Pero
Jesús no le respondió palabra. Entonces, acercándose sus
discípulos, le rogaron, diciendo: “Despídela, pues da voces tras
nosotros”. Él, respondiendo, dijo: “No soy enviado sino a las
ovejas perdidas de la casa de Israel”. Entonces ella vino y se
postró ante él, diciendo: “!Señor, socórreme!” Respondiendo él,
dijo: “No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los
perrillos”. Y ella dijo: “Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las
migajas que caen de la mesa de sus amos”. Entonces,
respondiendo, Jesús dijo: “Oh mujer, grande es tu fe; hágase
contigo como quieres”. Y su hija fue sanada desde aquella hora.
Comentario
Una mujer grita, clama a Jesús por la vida de su hija, ante la
aparente indiferencia de Jesús: Los discípulos le increpan, parece
ser, no para responder a la necesidad de la mujer, sino para
quitársela de encima. Ante la insistencia de la mujer y en diálogo
con ella, Jesús se deja cuestionar y conmover. Es así como se
amplía su mirada más allá de concepciones religiosas o
ideológicas y da el paso a la salvación universal, allí donde la vida
clama ser ofrecida, defendida, dignificada.
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
Para la reflexión personal
Leo, medito y oro con algunos de los textos bíblicos siguientes: Mc
1,39-45; Mt 8,2-4; Mc 10, 46-52; Jn 9,1-41; Lc 9,11-17; Mt 9, 18;
Mt 9,27; descubriendo en ellos:
a. La situación en la que la vida clama.
b. La actitud de Jesús que le lleva a descubrir este clamor.
c. La respuesta de Jesús.
2. Jeronimo Usera
No podemos olvidar el legado del Padre Usera, un hombre de
Dios que supo contemplar la realidad y responder a sus clamores.
Son varios los testimonios en los que el primer paso para el
anuncio del Evangelio es el análisis de la realidad en la que se
encuentra, para responder desde la fe y el amor profundo a la
persona, al clamor de la vida en todas sus llamadas y necesidades.
Hacemos referencia a uno de estos testimonios: Memoria de la
Isla de Fernando Poo, Introducción (en Escritos, pág. 137-138):
“Al trazar una memoria de nuestra isla de Fernando Poo,
no debo vanagloriarme de haber realizado un trabajo
completo en su clase….
Me limito al presente a nuestra isla de Fernando Poo por
ser la más interesante bajo todos los conceptos: hablando
en primer lugar de su descubrimiento y adquisición para
España, a su situación y dimensiones. La fertilidad y bellas
producciones de la isla ocuparán una parte de esta
memoria, así como una descripción de sus moradores,
número de habitantes y la buena índole de los mismos.
Trazaré lo mejor que pueda su capital, presentando un
diseño de su bahía y clase de la población.
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
No menos ofrecen un grande incentivo a mi pluma las
costumbres de aquellos isleños, su clase de gobierno y
modo de enjuiciar, pareciéndome oportuno presentar la
semblanza de algún otro de los primeros personajes de la
isla.
Y la hablar de la religión que siguen los no convertidos,
me veo por consiguiente precisado a discurrir sobre los
misioneros baptistas ingleses, que cuentan con un buen
establecimiento en aquella.
El comercio es también uno de los artículos preferentes de
esta memoria…
Servirá como apéndice de todo este trabajo un pequeño
diccionario, que contenga las voces más comunes del
idioma, que usa la raza originaria de Fernando Poo,
llamada “Bubi.”
En las siguientes palabras escritas en el lenguaje de la época, el
Padre Usera refleja los motivos profundos y el fin que le condujo
a este país, al que conoció para ser fiel en las respuestas que
precisaba.
“Pues ningún otro fin me condujo a aquellos remotos
países que el contribuir con mis escasos conocimientos y
buen celo al bienestar de sus sencillos habitantes,
dándoles a conocer las ventajas de la civilización, cuando
va acompañada de los consuelos de la gracia, y luminosos
conocimientos, que trae en pos de sí la religión del
Crucificado” (Id. pág. 137)
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años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
Para la reflexión personal
a. De la lectura que he hecho, señalo los aspectos en los que, en el
análisis de la realidad, se fija el Padre Usera.
b. ¿En qué otras ocasiones el P. Usera pone de manifiesto esta
mirada contemplativa de la realidad y escucha el clamor de la
vida?
c. El Padre Usera ha aprendido de Jesús a contemplar la realidad.
¿Cómo la contemplo yo?
II.
Lectura cristiana de la realidad
(El texto que sigue es una adaptación del artículo: Lectura cristiana de la
realidad, de Luis González Carvajal.
Tomado de Internet: www.arquidiocesissalta.org.ar – Escuela de Formación
para Animadores Misioneros – Pastoral Misionera Arquidiocesana – Salta)
1. Clave de lectura
El momento presente es la gran oportunidad en la vida de cada
persona y de cada grupo o comunidad. Es, igualmente, la gran
oportunidad de la misión eclesial en el mundo. Hay un tiempo ya
pasado que podemos investigar para conocer la respuesta
evangelizadora que la Iglesia ha dado en las diversas
circunstancias de la historia. El conocimiento del pasado genera
sabiduría y ofrece experiencia. En ambas se basa la madurez.
Pero la gran cuestión le viene siempre a la Iglesia del presente y
de los desafíos del mismo. Este presente es el tiempo, kairós, en
el sentido más genuino de la expresión, es decir, el tiempo vivo en
el que acontece la vida humana y la historia. En este tiempo vivo
es cuando la Iglesia realiza su misión evangelizadora.
La fe es la luz que ilumina la misión evangelizadora; la caridad es
el fruto más precioso de la misma; y la esperanza es la
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
manifestación de la fe y la fuerza cotidiana que empuja a amar.
Fe, esperanza y amor son las tres realidades que sintetizan el
objetivo final de la lectura cristiana de la realidad: ofrecer un
instrumento que ayude a leer los acontecimientos a la luz de la fe
para poner de manifiesto la esperanza que hay en los mismos y
para alentar el amor.
Para la reflexión personal
¿Desde qué clave contemplo la realidad de mi entorno? ¿Cuál es el
objetivo final de mi lectura de la realidad?
2. Algunas condiciones para la lectura cristiana de la realidad
La lectura creyente de la realidad es el esfuerzo comunitario de
los cristianos encaminado a hacer, en el momento presente, la
síntesis de la experiencia cristiana vivida en el pasado y el
trampolín de esperanza colectiva que impulsa hacia el futuro. La
línea de fondo es el seguimiento de Jesucristo. La lectura cristiana
de la realidad sólo puede hacerse adecuadamente con un espíritu
y talante evangélicos. Esto requiere cierta sensibilidad y algunas
condiciones que favorezcan ese talante evangélico. Destacamos,
por su importancia, tres condiciones:
1.ª La Importancia del silencio activo
Por silencio activo entendemos la superación de todos aquellos
ruidos exteriores e interiores que nos impiden ser nosotros
mismos.
 Cuando vivimos sometidos a los ruidos que nos rodean no
somos nosotros mismos quienes vivimos; somos esclavos de
los eslóganes, de la publicidad, de las modas, de las consignas
que circulan en la coyuntura social que nos toca vivir...
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida

Cuando vivimos sometidos a los ruidos interiores somos
esclavos de las emociones pasajeras, de los resentimientos,
de la superficialidad, de los egoísmos que nos traicionan, del
afán de poder, de la coyuntura personal en que nos
encontramos...
El silencio activo sólo puede existir cuando superamos esos dos
tipos de ruidos. El silencio no es ausencia, sino presencia:
presencia del propio yo que, habiendo eliminado todos los ruidos,
es capaz de descender a lo más profundo de su interioridad y ser
consecuente con ella. El silencio activo es, por tanto, la antítesis
de la pasividad; es la creación de aquellas condiciones que nos
permiten vivir con autenticidad, asumir la propia autonomía y
responsabilidad, ser solidarios, gozar de la propia originalidad y
manifestar, con los hechos, la imagen de Dios que somos cada
uno de nosotros.
2.ª Importancia del pensar
Pensar no equivale, simplemente, a dar muchas vueltas a las
cosas. Significa, fundamentalmente, perder el miedo a la vida. El
miedo se manifiesta:
 en la incapacidad de contemplar con libertad los
acontecimientos y de descubrir sus entrañas;
 en la incapacidad de permitirse buscar alternativas a lo que
está establecido;
 en la incapacidad de asumir la originalidad propia.
La superación de estas incapacidades no significa superioridad
sobre otros; significa tomar conciencia de que sólo lo que surge
de lo más profundo de uno mismo es verdaderamente humano y
puede conducir a una autonomía solidaria. Cuando superamos el
miedo a la vida nos permitimos conocer la realidad sin
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
condicionamientos, asumir la propia autonomía y optar por la
solidaridad. Ésta es la música de fondo que nos ayuda a superar la
superficialidad y a penetrar en las capas más profundas de la
existencia humana; sin esto, no es posible hacer una lectura de la
realidad que sea auténticamente cristiana.
Cuando hay libertad para pensar se produce un doble
movimiento:
 el primero va de la vida al evangelio y plantea a la fe eclesial
las verdaderas cuestiones de la vida;
 el segundo va del evangelio a la vida y aporta la luz de la
revelación de Dios a la vida concreta, verifica los
planteamientos de la fe y contempla las huellas de la creación
de Dios en todos los acontecimientos humanos.
La libertad aporta una gran riqueza a la lectura cristiana de la
realidad, pues puede utilizar todos los elementos que le dan
altura y calidad a dicha lectura.
3.ª Importancia de la organización y del trabajo colectivo
La razón es muy sencilla: la lectura cristiana de la realidad debe
ser lo más objetiva posible. Esto supone superar la subjetividad,
para lo cual es menester la aportación de la comunidad, el
contraste de pareceres y el trabajo en equipo. Es lo que se suele
decir con la expresión de que “cuatro ojos ven más que dos”.
En este sentido es importante destacar el papel que desempeñan
muchas organizaciones que buscan vivir el evangelio a partir de la
vida y en estrecha relación con la realidad. Los miembros de estas
organizaciones unen sus esfuerzos para observar con acierto la
realidad, analizarla, discernirla a la luz del evangelio y
comprometerse en su transformación. En ellas se vive la
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
solidaridad en su significado más genuino, es decir, se construye
con solidez.
El método de la revisión de vida, por ejemplo, es una de las
plasmaciones concretas más acertadas de la lectura cristiana de la
realidad.
Para la reflexión personal
¿Se dan en mi grupo / comunidad las condiciones para hacer lectura
cristiana de la realidad? Intento concretar con ejemplos.
III.
Los escenarios donde la vida clama
(Adaptación del nº 6 de los Lineamenta del Sínodo de los Obispos sobre la
Nueva Evangelización para la transmisión de la Fe)
En el mundo de hoy se dan varios escenarios donde acontece la
vida del ser humano, donde se ponen en juego dimensiones de
nuestro ser y hacer, determinados por las consecuencias de una
serie de políticas sociales y económicas que mueven los hilos de
nuestra historia y mundo. Para realizar la nueva evangelización es
necesario observar estos escenarios, estos fenómenos, sabiendo
superar el nivel emotivo de juicio defensivo y de miedo, para
comprender objetivamente los signos de lo nuevo, junto a los
desafíos y a las fragilidades. Destacamos los siguientes escenarios:
1. El escenario cultural: tendencias secularizantes
La secularización se presenta hoy bajo la imagen positiva de la
liberación, de la posibilidad de imaginar la vida del mundo y la
humanidad sin trascendencia. La secularización ha permitido
invadir la vida cotidiana de las personas y desarrollar una
mentalidad en la que Dios está, de hecho, ausente, en todo o en
parte, de la existencia y de la conciencia humana.
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
Las características de un modo secularizado de entender la vida
deja sus huellas en el comportamiento cotidiano que se muestra
frecuentemente influenciado por la cultura de la imagen con sus
modelos e impulsos contradictorios. La mentalidad hedonista y
consumista predominante conduce a la persona hacia la
superficialidad y el egocentrismo. “La muerte de Dios” cede el
lugar al culto del individuo.
2. El gran fenómeno migratorio
El gran fenómeno migratorio impulsa cada vez más a las personas
a dejar sus países de origen y vivir en contextos que modifican la
geografía étnica de nuestras ciudades. Este fenómeno provoca un
encuentro y una mezcla de culturas. Se están produciendo formas
de contaminación y de desmoronamiento de los puntos de
referencia fundamentales de la vida, de los valores, de los mismos
vínculos a través de los cuales cada individuo estructura la propia
identidad y tiene acceso al sentido de la vida. El resultado cultural
de estos procesos es un clima de extrema fluidez y “liquidez”
dentro del cual hay siempre menos espacio para las grandes
tradiciones, incluidas las religiosas, cuya función es estructurar en
modo objetivo el sentido de la historia y la identidad de los
sujetos. Con este escenario social se relaciona el fenómeno de la
globalización, realidad no fácilmente descifrable, que exige de
parte de los cristianos un fuerte trabajo de discernimiento.
3. Los medios de comunicación
Los medios de comunicación hoy ofrecen enormes posibilidades y
representan uno de los grandes retos para la Iglesia. Este
escenario influye en todos los países, también en los que están en
vías de desarrollo. Esta cultura trae indudables beneficios: mayor
acceso a la información, mayor posibilidad de conocimiento, de
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
intercambio, de formas nuevas de solidaridad… Sin embargo
tiene sus riesgos, se manifiesta una profunda concentración
egocéntrica sobre sí mismo y sólo sobre las necesidades
individuales, se afirma la exaltación de la dimensión emotiva en
las relaciones y de los vínculos sociales, se difunde una progresiva
alienación de la dimensión ética y política de la vida. Finalmente
estos riesgos pueden conducir a lo que es llamado la cultura de lo
efímero, de lo inmediato, de la apariencia, es decir, una sociedad
incapaz de memoria y futuro.
4. El escenario económico
El Magisterio de la Iglesia ha denunciado los crecientes
desequilibrios entre norte y sur del mundo en el acceso y
distribución de los recursos, así como también en el daño a la
Creación. La larga crisis económica actual indica el problema del
uso de las fuerzas materiales que no encuentra fácilmente las
reglas de un mercado global capaz de tutelar una convivencia más
justa. No obstante la comunicación cotidiana de los medios
reserve cada vez menos espacio para una lectura de estas
problemáticas a partir de la voz de los pobres, de las Iglesias se
espera aún mucho en términos de sensibilización y de acción
concreta en este campo.
5. La investigación científica y tecnológica
No cesamos de admirarnos por los maravillosos pasos que la
investigación ha sabido superar en estos campos, todos podemos
experimentar los beneficios de estos progresos. Todos
dependemos cada vez más de tales beneficios. De este modo, la
ciencia y la tecnología corren el riesgo de transformarse en los
nuevos ídolos del presente. Nos encontramos frente al surgir de
nuevas gnosis que asumen la técnica como una forma de
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
sabiduría en la búsqueda de una organización mágica de la
existencia que funcione como el saber y el sentido de la vida.
Asistimos a una afirmación de nuevos cultos. Estos proponen en
modo terapéutico prácticas religiosas que los hombres están
dispuestos a vivir, estructurándose como religiones de la
prosperidad y de la gratificación instantánea.
6. La política
Vivimos en una situación rica en posibilidades, pero también
plena de nuevas tentaciones de dominio y de poder. En este
escenario, existen temas y sectores que han de ser iluminados por
la luz del Evangelio: el empeño por la paz, el desarrollo y
liberación de los pueblos; el mejoramiento de las formas de
gobierno mundial y nacional; la construcción de formas posibles
de escucha, convivencia, diálogo y colaboración entre diversas
culturas y religiones; la defensa de los derechos de la persona y
de los pueblos, sobre todo de las minorías, la promoción de los
más débiles; la protección de la creación y el empeño por el
futuro de nuestro planeta.
7. Escenarios propios de la realidad donde está inserto cada
grupo / comunidad
Cada grupo / comunidad analizará los escenarios específicos de la
realidad donde está inserto. Se podrá tener en cuenta para este
estudio, el análisis realizado por la Iglesia local: sínodos,
documentos de las Conferencias episcopales…
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida
Conclusión
La nueva evangelización nos requiere trabajar en nuestras Iglesias
locales para construir caminos de lectura de estos fenómenos
teniendo la audacia de formular la pregunta sobre Dios. La nueva
evangelización exige que nos confrontemos con estos escenarios,
no permaneciendo cerrados en los recintos de nuestros grupos /
comunidades y de nuestras parroquias, sino aceptando el desafío
de entrar en estos fenómenos para tomar la palabra y ofrecer
nuestro testimonio desde adentro. La Iglesia se edifica aceptando
confrontarse con estos desafíos, siendo cada vez más la
constructora de la civilización del amor.
Para la reflexión personal
La vida clama en lo que necesita ser redimido, salvado y en lo que
empuja hacia adelante la historia de la salvación, es decir, en los
signos de la presencia del Dios de la vida.
a. ¿Qué sentimientos y pensamientos despierta en mí la lectura de
este apartado?
b. ¿Qué huellas de Dios reconozco en la realidad que estoy viviendo?
c. ¿Qué llamadas siento que hace Dios a mi grupo / comunidad?
d. ¿Con qué movimientos del entorno social y cultural me relaciono?
¿Y mi grupo/ comunidad?
e. ¿Qué transformación social se está produciendo desde mi grupo /
comunidad?
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“El Carisma, don para la Iglesia y el mundo”
 CUESTIONARIO
para el compartir en el encuentro del grupo / comunidad y
ofrecer su aportación en orden a la preparación del XV
Capítulo General de la Congregación de Hermanas del Amor
de Dios.
A. Comunica los aspectos de este tema 1 que más te han
motivado y han tenido en ti una especial resonancia.
B. ¿Qué signos de la presencia o de la ausencia de Dios
percibes en la realidad de tu entorno, que puedes
considerarlos auténticos clamores de vida? Desarróllalos
brevemente.
C. Después de haber profundizado este tema, ¿qué retos se
nos plantean para dar respuesta desde el Carisma “Amor
de Dios”? Indícalos en cada uno de los tres subtemas.
I.
Maestros en la mirada y la escucha de la realidad
II.
Lectura cristiana de la realidad
III. Los escenarios donde la vida clama.
Después del compartir de todos los miembros, se elabora la
aportación del grupo/ comunidad, siguiendo los puntos del
Cuestionario, y se envía al equipo de gobierno del Organismo
Mayor. (Nota: hasta el final de la primera quincena de abril)
 CELEBRACIÓN final del tema: revisando y concluyendo
1. Ambientación:
Se coloca en un lugar visible:
 El mural que se confeccionó el día que se comenzó el
tema.
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años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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Tema 3: Escuchar los clamores de la vida


La cruz de la Congregación – Caritas Christi urget nos
Música de fondo.
2. Reflexión personal:
Contempla tu vida en tres situaciones de las que estén descritas
en el mural y, con la fuerza de “Caritas Christi-Urget nos”, trata
de sentir qué estás haciendo, qué está haciendo tu grupo.
3. Oración compartida:
Puede ser en sus formas de perdón, acción de gracias y petición.
4. Terminar rezando juntos esta oración: “ CADA MAÑANA”
Cada mañana me sumergiré en Ti, agua de la vida,
antes de ser vaso, nutriente en el surco,
juego en la fuente, sosiego en el lago.
Cada mañana me afinaré en Ti, Palabra del Padre,
antes de ser susurro al oído, discurso en el aula,
anuncio en el viento, silencio en la escucha.
Cada mañana me orientaré en Ti, camino del Reino,
antes de ser paso en la calle, ruta en la frontera,
pausa en la espera, salto en el aire.
Cada mañana me reposaré en Ti, sabiduría encarnada,
antes de ser vigilia en el sueño, flecha en el arco,
sutura en la herida, cansancio en tu mano.
Cada mañana me miraré en Ti, imagen del Padre,
antes de ser alegría en el rostro, fuerza en los brazos,
caricia en los ojos, luz en el barro.
Benjamin González Buelta
Celebrar el amor de Dios que se ha manifestado en la historia de la Congregación en estos 150
años y que nos urge a vivir el Carisma en fidelidad renovada como don para la Iglesia y el mundo.
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CASA GENERAL DE LAS HERMANAS DEL AMOR DE DIOS
ASURA 90 – 28043 MADRID (ESPAÑA)
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