mi primer altavoz y mis primeros discos

MI PRIMER ALTAVOZ Y MIS PRIMEROS
DISCOS
Esta foto corresponde a la fiesta de la boda de mis primos
Neftalí y Carmiña, celebrada el 16 de Julio de 1954 en
Viana del Bollo (Viana do Bolo, en gallego) en la
provincia de Orense.
Es una foto muy querida para mí, porque estoy con mis
padres ... y ¡con mi primer altavoz!
Este altavoz, junto con otro igual que no se ve y un
amplificador a válvulas, era el equipo de sonido, de un tío
mío llamado Teolindo García. Ese sistema acústico, era el
soporte musical de las fiestas de salón que se hacían en
Viana por aquellas épocas. Había bailes en Carnaval, Fin
de año, Reyes, algún sábado y en fiestas familiares, como
la boda de mi prima en este caso. También se usaban en la
Semana Santa para que hablasen los curas y en alguna ocasión parecida.
El equipo constaba además, de un pick-up eléctrico que leía discos de 78 r.p.m. y
enviaba una señal monofónica a la entrada de “Phono” del amplificador. Éste a su vez
movía dos bafles con sendos altavoces electromagnéticos marca Jensen de 12 pulgadas
cada uno.
También teníamos dos bocinas exponenciales de aluminio para las fiestas en la calle,
que se colgaban en farolas, árboles o balcones. Sonaban más fuerte, pero su sonido era
peor, a mí me gustaban más los bafles. Este equipo de música y la mayoría de los
discos, se compraron en Vigo en Discos Giráldez, en frente del Cine Fraga.
Yo ayudé en muchas ocasiones a transportar aquellos equipos y aprendí a conectarlos.
Por cierto, era todo mucho más sencillo que ahora. Recuerdo que lo que más pesaba era
el amplificador de válvulas y la caja con todos los largos cables.También teníamos un
micrófono de cápsula de carbón con su cable y su pie. Se utilizaba para anunciar la
emisión de alguna dedicatoria, la llegada de un nuevo disco, la petición de una canción
determinada o el final de la fiesta.
En la foto se aprecia claramente lo guapos que eran mis padres ... mi madre parece Ava
Gardner y mi padre, Humphrey Bogart.
La foto tiene más contenido: Se pueden apreciar las características de los bafles que
estaban hechos artesanalmente y de madera, con su asa en la parte superior para el
transporte y unas cuerdas fijadas a ella, por si se colgaba en algún sitio alto. En este
caso, uno de ellos está colocado sobre una silla. Fíjense en el detalle del pañito entre la
silla y el bafle y fíjense también en la ranura horizontal sobre el altavoz en la parte
frontal, para la salida de las frecuencias graves, realizada por el carpintero que
construyó los bafles.
Jesus García, el Beatle
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Pero ¡por favor! fíjense también en las chicas apoyadas en la pared de la izquierda ...
están nerviosas esperando que algún mozalbete las saque a bailar y no saben donde
colocar sus manos ... en fin, en aquella época, las mujeres pensaban en casarse como
una meta en sus vidas. Las bodas, bailes y eventos festivos que se celebraban en Viana,
con la música de mi tío, eran buenas ocasiones para buscar novio o ... marido.
Recuerdo muchas canciones de aquella época y de más adelante: El Continental, Night
and day, Patricia, Mambo nº 5, Siboney, El negro zumbón, Beguin the beguine, La
cumparsita, Te para dos, Andalucía, Francisco Alegre, España cañí, Clavelitos
madrileños, Cerezo rosa, etc.
Recuerdo a intérpretes y compositores como Cole Porter, Nat King Cole, Bing Crosby,
Jorge Negrete, Pérez Prado, Ernesto Lecuona, Xavier Cugat, Imperio Argentina,
Mantovani, Luisa Linares y Los Galindos, Alfredo Brito, la Orquesta Siboney, Los Xey,
etc. Los editores de esos discos eran las marcas RCA Victor, Decca, Mercury, Odeon,
La Voz de su Amo, América y Columbia.
Todas estas canciones e intérpretes que oí de niño por aquel viejo sistema acústico,
configuraron desde el principio mi formación musical. Con el tiempo, fui seleccionando
a mis favoritos, pero respetando ciertos principios básicos que capté en los artistas que
he citado antes. También fui “ajustando la oreja”, haciéndome cada vez más exigente
con el sonido final.
Finalmente, en la década de los 60, se produjo el acontecimiento musical más
importante de mi vida. La aparición de The Beatles fue algo de índole sobrenatural que
me conmocionó, dejándome tocado para siempre. Fue algo tan decisivo como
presenciar un milagro. Todavía hoy me pregunto cómo es posible que podamos tener
entre nosotros canciones tan bellas, tan bien construidas y de tal calibre ... sigo
buscando las respuestas, pero sobre todo sigo disfrutando de cada una de ellas.
Yo he nacido y he vivido con los Beatles; somos de la misma quinta. Esto es algo
inmenso. Me hace muy feliz poder decir a los que son más jóvenes, la gran suerte que
he tenido por coincidir en la historia y ser contemporáneo de sus vidas y de su
grandísima e irrepetible obra. Nuestros nietos y todos los que vengan detrás, años y
siglos más tarde, nos envidiarán, aunque ya estemos muertos. Los que sean sensibles
para valorar y catalogar la música sublime, o simplemente los estudiosos de la historia
global o contemporánea del arte de la música, querrán haber vivido lo que nosotros
hemos tenido.
La vida de cada persona es como una película de cine: Un principio y un final con risas
y llantos por el medio, dentro de un amplio y denso guión, casi siempre imprevisible,
pero que en su mayor parte, puede escribirlo su protagonista. Todas las películas tienen
su banda sonora. Puedo decir bien alto (y lo ratificará quien me conozca bien) que todas
las canciones de los Beatles, constituyen la banda sonora de la película de mi vida.
¡Gracias!
Jesus García, el Beatle
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