Modificaciones propuestas a la NIIF 9 – Clasificación y

Modificaciones propuestas
a la NIIF 9 – Clasificación y
valoración
Preparación para un nuevo modelo
de negocio
Diciembre 2012
IN THE HEADLINES
Número 12
kpmg.es
“Los bancos, las aseguradoras y
otras entidades financieras serán
probablemente las más afectadas
por los cambios propuestos.
Algunas entidades esperarán una
reducción general de la volatilidad
de los resultados, aunque en el
caso de otras podría aumentar la
volatilidad del patrimonio neto y el
capital regulatorio. ”
Preparación para un nuevo modelo de
negocio
El 28 de noviembre de 2012, el IASB publicó un proyecto de
norma (ED por sus siglas en inglés) en el que se proponen
modificaciones limitadas a la NIIF 9 (2010) Instrumentos
financieros sobre la clasificación y valoración de activos
financieros y pasivos financieros. El ED introduce:
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Andrew Vials, responsable global de IFRS Financial
Instruments de KPMG
una nueva categoría de valoración a valor razonable
con cambios en otro resultado global para los activos
financieros;
un nuevo modelo de negocio, junto con una nueva guía de
aplicación del concepto de modelo de negocio;
una comprobación de la “relación económica modificada”
para activos en los que la relación económica entre
principal e intereses está sujeta a cambios; y
permiso para aplicar anticipadamente solo los
requerimientos de crédito propio para pasivos financieros
valorados según la opción del valor razonable, sin necesidad
de aplicar anticipadamente la NIIF 9 en su totalidad
Necesidad de aplicar nuevos juicios de
valor
La categoría de valoración a valor razonable con
cambios en otro resultado global
La NIIF 9 (2010) incluye en la actualidad dos categorías
principales de valoración para activos financieros: a coste
amortizado y a valor razonable con cambios en resultados.
La introducción de una tercera categoría, valoración a valor
razonable con cambios en otro resultado global, con su
propia definición de modelo de negocio, puede exigir la
aplicación de nuevos juicios de valor para garantizar que los
activos financieros se clasifican en la categoría adecuada. En
lugar de tener que determinar si un activo se encuentra en
un modelo de negocio “mantenido para cobrar”, la entidad
tendría que determinar ahora si se encuentra en un modelo
de negocio “mantenido para cobrar”, en un modelo de
negocio “mantenido tanto para cobrar como para vender” o
ninguno de los dos.
Así pues, las entidades podrían tener que replantearse
cómo definir sus modelos de negocio para la adquisición y
mantenimiento de activos financieros. A su vez, esto podría
llevarles a replantearse cómo se gestiona el negocio, cómo
evalúa el rendimiento el personal clave de la dirección de
la entidad y cómo se remunera a los gestores del negocio
(por ejemplo, en función del valor razonable de los activos
gestionados).
Es posible que las entidades también tengan que actualizar
sus sistemas contables para garantizar que son capaces de
captar información tanto del valor razonable como del coste
amortizado (por ejemplo, el cálculo del deterioro del valor)
para activos valorados a valor razonable con cambios en otro
resultado global.
Comprobación de la “relación económica modificada”
Evaluar si los flujos de efectivo son únicamente pagos
de principal e intereses requerirá, en algunos casos, una
comprobación de la “relación económica modificada”. Esta
comprobación requerirá aplicar más juicios de valor, en lo que
respecta a estas dos definiciones: qué es un instrumento de
“referencia” y cuándo los flujos de efectivo en una relación
modificada son “diferentes de forma más que insignificante”
con respecto a un instrumento de referencia.
Es posible que las entidades tengan que llevar a cabo una
revisión completa de su documentación sobre préstamos y
las condiciones de sus títulos de inversión a fin de identificar
los términos contractuales que modifican la relación
económica entre principal e intereses.
Se vislumbran cambios en la
volatilidad de los resultados,
especialmente para las entidades
financieras
La introducción de la categoría de valoración a valor
razonable con cambios en otro resultado global puede
reducir la volatilidad de los resultados si las entidades:
mantienen activos financieros en modelos de negocio sin
intención de negociar, pero
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poseen una mayor actividad de ventas en lo que respecta
a frecuencia y volumen de ventas en comparación con los
modelos de negocio cuyo objetivo es mantener activos
financieros únicamente para cobrar flujos de efectivo
contractuales.
Los bancos, las aseguradoras y otras entidades
financieras serán probablemente las más afectadas por las
modificaciones limitadas. Los bancos pueden destinar los
activos financieros a cubrir diversas necesidades de liquidez,
y las aseguradoras para financiar sus pasivos derivados
de contratos de seguros o para ajustarse a la duración de
sus pasivos por seguros a largo plazo. Las modificaciones
limitadas pueden ejercer un impacto significativo sobre
la clasificación y valoración de dichos activos financieros,
y pueden desencadenar un cambio en la volatilidad de
los resultados. No obstante, la dirección de dicho cambio
dependería de la clasificación y la valoración de los activos
financieros de conformidad con los requisitos vigentes y
propuestos.

Los bancos son los que más utilizan la opción del valor
razonable para los pasivos financieros. La aplicación
anticipada de los requerimientos de crédito propio contribuiría
a reducir la volatilidad de los resultados con este origen con
más prontitud de la que sería posible en otros casos.
Pueden surgir consecuencias
inesperadas
Requerimientos de capital regulatorio
Aunque podría disminuir la volatilidad de los resultados en
algunos activos, las modificaciones podrían producir un
impacto significativo en el cómputo de los requerimientos
de capital de la entidad. Por ejemplo, los activos que la
entidad quizá hubiera previsto valorar a coste amortizado
previamente podrían tener que valorarse a valor razonable
con cambios en otro resultado global, y toda pérdida del valor
razonable no realizada reduciría su capital regulatorio.
Las entidades podrían querer buscar ajustes para el cálculo
de determinados requerimientos de capital regulatorio si
se vieran afectadas por las propuestas. Asimismo, podrían
tener la intención de gestionar las expectativas de las partes
interesadas comunicando estos impactos antes de la fecha
de entrada en vigor de las modificaciones limitadas
Otras consecuencias
Los activos híbridos que comparten características de
instrumentos de patrimonio neto y de deuda se valorarían
a valor razonable con cambios en resultados, lo cual puede
arrojar resultados contables dispares en instrumentos
similares.
El IASB no ha propuesto ningún requerimiento especial
en el caso de préstamos con tipos de interés sujetos a
regulación. Si no superan la prueba general de “principal e
intereses”, deberán valorarse a valor razonable con cambios
en resultados. El IASB recabará más comentarios sobre esta
cuestión.
Las entidades que clasifican sus activos a valor razonable con
cambios en otro resultado global, en lugar de hacerlo a coste
amortizado o a valor razonable con cambios en resultados,
podrían ver afectados sus procesos de contabilidad de
coberturas.
Preparación para el cambio y
disposiciones transitorias
Las entidades que ya han aplicado, o prevén aplicar de
manera anticipada, la NIIF 9 (2009) o la NIIF 9 (2010) podrían
tener que rediseñar el proceso de conversión para tener en
cuenta las propuestas.
Aunque no se exigiría a las entidades que reexpresasen los
datos comparativos, podrían tener que:
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desarrollar, probar e implantar nuevos procesos y sistemas
antes de la fecha de entrada en vigor de la NIIF 9, el 1 de
enero de 2015; y
ejecutar dichos sistemas y procesos de forma paralela a los
sistemas existentes.
Las entidades deben evaluar los procesos y sistemas
vigentes para garantizar que son capaces de cumplir los
nuevos requerimientos de clasificación y valoración en la
fecha de aplicación inicial.
.Las
modificaciones no son tan
“limitadas” en la práctica
Estas modificaciones podrían ejercer un notable impacto
en la organización, particularmente si se considera que
los diferentes factores que impulsan la volatilidad de los
resultados y del patrimonio neto podrían afectar al precio de
la acción y la valoración del negocio. Es necesario comenzar
a evaluar y gestionar proactivamente el proceso en su
conjunto desde ya.
“La nueva categoría ‘a valor
razonable con cambios en otro
resultado global’ tendrá una buena
acogida por parte de muchas
compañías de seguros, pues su
propósito es estar en consonancia
con la decisión provisional del IASB
de que los cambios en pasivos
derivados de contratos de seguros
impulsados por variaciones en los
tipos de descuento se excluyan
también de los resultados. No
obstante, proseguirá el debate
sobre si el IASB ha encontrado el
mejor paquete general para intentar
minimizar las asimetrías contables.”
Chris Spall,
KPMG’s global IFRS Financial Instruments deputy leader
Antecedentes de las propuestas
Calendario1
Según la NIIF 9 (2010), un activo financiero se valora a coste amortizado si se
mantiene en un modelo de negocio cuyo objetivo es mantener activos para cobrar
flujos de efectivo contractuales y sus flujos de efectivo son únicamente pagos
de principal e intereses. Todos los demás activos financieros se valoran a valor
razonable, siendo los cambios en valor razonable reconocidos en resultados (salvo
algunas inversiones en el patrimonio neto cuyos cambios en el valor razonable se
reconocen en otro resultado global).
28 de noviembre de 2012
Publicación del proyecto de norma
28 de marzo de 2013
Fin del periodo para enviar comentarios
La propuesta introduce una tercera categoría de valoración, conforme a la cual un
activo financiero debe valorarse a valor razonable con cambios en otro resultado
global si:
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sus flujos de efectivo son únicamente pagos de principal e intereses; y
se mantiene en un modelo de negocio en el que se gestionan los activos tanto
para cobrar flujos de efectivo contractuales como para vender.
1 de enero de 2015
Las ganancias y pérdidas que genere dicho activo se reconocerían en otro
resultado global (a excepción de ingresos por intereses, reversiones/pérdidas
por deterioro del crédito, y ganancias y pérdidas por diferencias de cambio, que
se reconocerían en resultados de la misma forma que los relativos a activos
financieros valorados a coste amortizado). Cuando se dé de baja el activo
financiero en las cuentas, el resultado acumulado reconocido previamente en otro
resultado global se reclasificaría a resultados.
Fecha de entrada en vigor
31 de diciembre de 2015
Primeros estados financieros anuales en los que se
aplicarían las propuestas
La opción existente en la NIIF 9 de valorar un activo a valor razonable con cambios
en resultados a fin de reducir una asimetría contable estaría disponible para activos
financieros que, en caso contrario, se valorarían obligatoriamente a valor razonable
con cambios en otro resultado global.
.
Más información
Si desea más información sobre las propuestas, consulte la Nota de prensa del
IASB o acuda a su persona de contacto habitual en KPMG.
Este documento es una traducción del documento original en inglés elaborado por el International Standards Group de KPMG
(perteneciente a KPMG IFRG Limited).
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Suponiendo un cierre de ejercicio a 31 de diciembre y la adopción
anticipada de las modificaciones