5. HORMONAS Y REPRODUCCIÓN Los cambios físicos que experimenta el organismo durante la pubertad son producidos por el aumento de los niveles sanguíneos de ciertas hormonas. Las hormonas son sustancias químicas que son vertidas a la sangre por órganos especializados llamados glándulas endocrinas. Las hormonas actúan como mensajeros químicos, es decir, viajan a través de los vasos sanguíneos hacia un órgano o tejido determinado, donde cumplen alguna función. Al comenzar la pubertad aumentan los niveles sanguíneos de la hormona luteinizante (LH) y la hormona folículo estimulante (FSH). Ambas hormonas son secretadas por la glándula hipófisis y actúan sobre los ovarios y testículos. Las gónadas responden a este estímulo secretando hormonas sexuales, que son los estrógenos, la progesterona y los andrógenos (entre estos últimos se encuentra la testosterona). En las mujeres, los ovarios incrementan la producción de estrógenos y progesterona, que permiten la maduración de los ovocitos para que estén en condiciones de ser fecundados y preparan al organismo para el embarazo. En los hombres, los testículos aumentan la producción de testosterona y producen espermatozoides. 5.1. ACCIÓN HORMONAL EN EL HOMBRE. En los testículos, la pared de los tubos seminíferos está formada por células a partir de las cuales se desarrollan los espermatozoides y también por las llamadas células de Sertoli, que les brindan soporte y nutrientes. Por fuera de los tubos seminíferos se encuentran las células de Leydig que producen testosterona. La acción de las hormonas LH y FSH ocurre de la siguiente manera: la LH actúa sobre las células de Leydig que responden produciendo testosterona, mientras que la FSH actúa en las células de Sertoli, estimulando la espermatogénesis. La testosterona, a su vez, actúa sobre diversos tejidos corporales, promoviendo y manteniendo los caracteres sexuales secundarios y también actúa sobre la hipófisis regulando los niveles de hormona que dicha glándula libera. De este modo, se forma un mecanismo de control hormonal que evita excesos o carencias tanto en la producción de espermatozoides como en la concentración de hormonas. HIPOTÁLAMO ADENOHIPÓFISIS TESTÍCULO GnRH 5.2. ACCIÓN HORMONAL EN LA MUJER: CICLO SEXUAL FEMENINO. En la pubertad comienza la edad reproductiva de la mujer que se prolonga hasta la menopausia, alrededor de los 50 años de edad. Durante la edad reproductiva se lleva a cabo el ciclo reproductor o ciclo sexual, con una periodicidad de alrededor de 28 días, aunque varía en cada mujer, incluso existen mujeres cuyos ciclos no son regulares. En este ciclo ocurren dos procesos importantes: • La maduración del ovocito en el ovario y • El engrosamiento de las paredes del útero. Ambos procesos preparan al sistema reproductor femenino para una posible fecundación y embarazo. En el ciclo reproductor femenino participan las hormonas LH, FSH, estrógenos y progesterona. A continuación se explica un ciclo cuya periodicidad es de 28 días aproximadamente. • El ciclo se inicia con la menstruación, que consiste en la eliminación de sangre y tejido del endometrio a través de la vagina. Puede durar entre 3 y 5 días. • Durante los primeros 14 días del ciclo, la hormona FSH estimula el crecimiento de las células foliculares que rodean al ovocito, hasta formar un folículo maduro o folículo de Graaf. El folículo en desarrollo produce estrógenos, que estimulan la maduración del ovocito que se encuentra en su interior y la secreción de LH por parte de la hipófisis. • Alrededor del día 14 del ciclo, el brusco aumento en los niveles sanguíneos de LH desencadena la ovulación, es decir, la rotura del folículo, con la salida del ovocito a las trompas de Falopio. Los días cercanos a la ovulación, corresponde al período fértil de la mujer. Si en esos días ocurre una relación sexual, podría quedar embarazada. • Tras liberar al óvulo, las células remanantes del folículo de Graaf forman el cuerpo lúteo, el cual produce progesterona, hormona que promueve el engrosamiento del endometrio. Si no ocurre la fecundación, el ovocito muere; el cuerpo lúteo degenera y deja de producir progesterona con lo cual el endometrio se desprende y comienza una nueva menstruación.