TRIBUNAL SUPERIOR DEL DISTRITO SALA DE JUSTICIA Y PAZ Medellín, veintitrés de octubre de dos mil catorce Rdo. 11-001-60-00253-2007-82700 Delitos: Concierto para delinquir y otros Postulados: Juan Fernando Chica Atehortúa y otros 1. El impedimento está concebido para que el juez se separe del conocimiento del asunto cuando tiene nexos o relaciones con él o cuando pueden haber o suscitarse sospechas legítimas sobre su imparcialidad para conducir el juicio. Las causas de impedimento o recusación, entonces, no sólo tienen como fin garantizar la imparcialidad, sino la apariencia de imparcialidad, que pueden verse comprometidas bien por el interés personal del Juez en el asunto (conflicto de intereses), o bien por su relación o vínculo con los hechos que debe juzgar o con las partes que intervienen en el proceso o ligadas a él, o bien por su ánimo o disposición subjetiva hacia el caso, los hechos o las partes. En ese sentido la Corte Suprema de Justicia ha establecido que, “. . .el concepto de debido proceso supone, entre otras exigencias, la rectitud e imparcialidad de la justicia que el Estado debe impartir para el cumplimiento de sus fines, a través de funcionarios cuya autoridad no puede sobrepasar los límites impuestos en la Constitución y la ley, pues sus juicios no pueden estar determinados por circunstancias objetivas o subjetivas que pongan en tela de juicio la rectitud de su actuar”1. 2. La imparcialidad significa “que el juez es y debe ser un tercero ajeno a la controversia y los intereses de las partes que acuden a él para definir su diferencia (tercero imparcial o neutral). La imparcialidad también significa que no puede formarse o tener una opinión o juicio anticipado sobre el caso que debe decidir, ni dejarse guiar por juicios preconcebidos sobre el asunto (exento de prejuicios), ni puede inclinarse a favor de una de las partes en el curso de los debates, antes de adoptar una decisión (no tomar partido) y debe darles igual trato y oportunidades para presentar y probar su caso (igualdad de trato) y examinar objetivamente las pruebas y alegaciones de cada una para decidir con base en la verdad establecida en el juicio y de la manera más justa (decidir con objetividad y justicia)”2. (resaltado fuera del texto). Como ha dicho la Corte Interamericana, “[l]a imparcialidad del Tribunal implica que sus integrantes no tengan un interés directo, una posición tomada, una preferencia por alguna de las partes y que no se encuentren involucrados en la controversia”3 y/o también “supone que el Tribunal o juez no tiene opiniones preconcebidas sobre el caso sub judice”4. 1 Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Auto del 27 de junio de 2.007. Ponente: H. Magistrado Marina Pulido de Barón. 2 Tribunal Superior de Medellín, auto del 24 de noviembre de 2.008. Magistrado Ponente: Rubén Darío Pinilla 3 Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Paramana Iribarne vs. Chile (2005). Citado en: Corte Constitucional, Sentencia C-881 del 23 de noviembre de 2.011. Ponente: H. Magistrado Luis Ernesto Vargas. 4 Informe No. 17 de 1.994, Guillermo Maqueda, Argentina, OEA/Ser. L/V/II.85, Doc. 29, 9 de febrero de 1994, párr. 28. No publicado. Citado en: Ídem 2 3. La Corte Suprema de Justicia tiene establecido que los conceptos u opiniones emitidas por el juez en ejercicio de sus funciones ordinariamente no son causal de impedimento, pues éste se presenta cuando ha expresado una opinión sobre el caso por fuera del proceso. Sin embargo, de manera excepcional, ha admitido que el juez o magistrado puede estar impedido cuando ha juzgado o intervenido en un asunto en una ocasión o condición diferente, si en dicha oportunidad comprometió su criterio y emitió un juicio o una opinión anticipada sobre el asunto que debe decidir. En tal caso, el juez ya tiene un vínculo con los hechos que debe juzgar y no está exento de prejuicios y, por tanto, se pone en entredicho su imparcialidad. Así lo ha reconocido la Corte en los casos en que el juez se pronuncia sobre la solicitud de preclusión en el proceso acusatorio, caso en el cual el juez queda impedido para conocer del juicio. “En el caso en estudio, de las diligencias allegadas para que la sala decida sobre el asunto, se puede constatar que los magistrados confirmaron la decisión que negó la preclusión, lo que conllevó un examen de fondo, por cuanto se debía decidir con relación a la responsabilidad de la procesada, que ahora ha preacordado con la fiscalía, preacuerdo que no fue aceptado por el Juez de conocimiento, el cual es motivo de apelación. “Debe entenderse que la intervención de los dos magistrados que conocieron y decidieron sobre la negación de preclusión en virtud del recurso de apelación, realizaron una actuación con efectos trascendentales dentro del proceso, acorde con el fin de la norma, teniendo en cuenta que debieron hacer valoración de fondo que se extendió a los elementos materiales probatorios o de información susceptible de convertirse en prueba, lo que conlleva, la concurrencia de la causal descrita, misma que fuera invocada por el juez colegiado que la peticionó”5. (Subrayas fuera del texto). 5 Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Auto del 8 de junio de 2.010, Rdo. 37.297. 3 “Decisión (la negación de preclusión de investigación) -dijo en otra ocasión- que por gravitar generalmente sobre puntos de derecho sustancial, impide que el juez que decide la solicitud pueda adelantar el juicio y dictar sentencia, precisamente por haber comprometido su criterio apreciando los elementos materiales de prueba, lo cual pone en tela de juicio su independencia e imparcialidad, como valores supremos de la administración de justicia”.6 En tales casos, la Corte ha sostenido que “. . .el género de argumentación que se exige incluye especificar las circunstancias o condiciones en que se produjo la participación del funcionario judicial en el proceso original o en alguno de los procesos derivados por la ruptura de la unidad procesal; y si la actividad del Juez –individual o colegiado- se extendió ya a la valoración de elementos probatorios o de información susceptible de convertirse en prueba, se precisa indicar cómo y de qué manera las apreciaciones anteriores inciden en el ánimo del juzgador al conocer el asunto en ocasiones posteriores, frente a cada uno de los implicados o situaciones concretas por resolver. . . menester resulta que se advierta en concreto y de manera específica que comprometió su criterio respecto del tema ahora objeto de debate, todo lo cual permite deducir fundadamente que no está en condición de garantizar la necesaria imparcialidad en la decisión que le corresponda adoptar”7. En armonía con lo anterior y en el mismo sentido, la Corte Constitucional ha establecido que, “Una postura previa al juicio oral, asumida por el juez de conocimiento acerca de la proyección de la acción penal, la responsabilidad del imputado, la tipicidad del hecho, la materialidad fáctica del mismo, o la intervención del investigado en el hecho, afecta de manera significativa la posición de neutralidad y equilibrio que debe mantener el juez dentro del modelo adversarial. Por ello resulta razonable y necesaria, en procura de preservar su imparcialidad, la 6 Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Auto del 29 de agosto de 2.006, Rdo. 25.775. Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Auto del 27 de junio de 2.007. Ponente: H. Magistrado Marina Pulido de Barón. 7 4 preceptiva que obliga a que se margine de un proceso en el que se ha pronunciado negativamente sobre una solicitud de preclusión del fiscal”8. Aunque la Sala no negó una solicitud de preclusión, las similitudes con ese caso son evidentes. Al negar la preclusión, el juez hace un juicio sobre el hecho o la responsabilidad del imputado que compromete su criterio e imparcialidad en caso de juzgar a éste. Al excluirlos, los suscritos Magistrados emitimos un juicio sobre el cumplimiento de los requisitos de elegibilidad de los postulados en este proceso que compromete nuestro criterio en caso de dictar sentencia respecto de los mismos y decidir sobre el cumplimiento de los requisitos para acceder a la pena alternativa y ese juicio lo hicimos con base en un examen exhaustivo de la misma prueba que debemos examinar en la sentencia y sin que en ese momento pudiéramos hacerlo. 4. La Corte también ha admitido que el Juez está impedido cuando el concepto u opinión constituye un exceso en el ejercicio de sus funciones, siempre y cuando dicha opinión sea sustancial, vinculante y un acto de prejuzgamiento del acto que debe conocer. “Lo que obliga a aceptar las circunstancias de inhibición es que el funcionario haya incurrido con ocasión de sus funciones, en pronunciamientos anticipados acerca de aspectos sustanciales que no estén vinculados con lo que es objeto de su conocimiento, y que, por tanto, constituyen auténticos actos de prejuzgamiento, que implican compromiso indiscutible de su criterio y pretenden su imparcialidad para resolver el asunto futuro”9 (Subrayas fuera del texto). 8 Corte Constitucional, op. cit. Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal. Auto del 12 de abril de 2.011. Rdo. 36.146. Ponente: H. Magistrado Julio Enrique Socha Salamanca. 9 5 Eso ocurrió en un caso analizado por la Corte Suprema de Justicia, en el que los Magistrados de una Sala de Decisión Penal del Tribunal Superior de Medellín se declararon impedidos para conocer de la apelación de un proceso penal porque en una acción de tutela previa ya habían analizado la variación de la calificación jurídica, tema que necesariamente iba a ser objeto de estudio al momento de resolver el recurso de apelación interpuesto contra la sentencia de primera instancia que debían conocer. En ese caso, aunque el criterio fue emitido con ocasión de sus funciones, la Corte determinó que, “. . .no puede tenerse como tangencial o sin compromiso de criterio alguno tales apreciaciones, puesto que para respaldar la actuación del Juez necesariamente debió asumir una postura jurídica frente a la variación de la calificación y sus consecuencias, tema al que precisamente se verá enfrentada la Sala de Decisión que deba resolver el recurso de apelación contra la sentencia” 10. Y concluyó que los Magistrados estaban impedidos porque “comprometieron de fondo su criterio frente a un tema del que necesariamente deberán abordar a la hora de resolver la apelación interpuesta contra la sentencia de condena”11. 5. En tal caso, el Juez está impedido cuando ha tenido un amplio acceso a la información y evidencia sobre el problema central que debe resolver y su intervención anterior tuvo la entidad suficiente para comprometer su criterio e imparcialidad o, en otros términos, siempre que la situación sea idéntica y se discutan los mismos hechos y la misma cuestión jurídica. 10 Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal. Auto del 19 de octubre de 2.006. Ponente: H. Magistrado Julio Enrique Socha Salamanca 11 Idem 6 “si -dijo la Corte- constituye causal de impedimento para el funcionario judicial la manifestación pública de su opinión sobre el asunto materia del proceso, a fortiori lo debe ser la expresión de su concepto en una providencia judicial con fuerza vinculante en un caso, respecto de otro en donde se discutan los mismos hechos e idéntico problema jurídico, pues indudablemente compromete el equilibrio del juicio que debe emitir al sentirse atado por su postura inicial, que naturalmente tiende a reiterarse, lo que va en contra del derecho que le asiste a la parte interesada de ser escuchada sin preconcepto alguno. Con mayor razón si entre los dos casos existe comunidad de prueba, o si el funcionario [que] se siente impedido actúa en última instancia o definiendo un recurso extraordinario”12. 6. En este caso, por medio de providencia del 4 de septiembre de 2.013, la Sala Mayoritaria excluyó a los postulados Juan Fernando Chica Aterhortúa, Edilberto de Jesús Cañas Chavarriaga, Néstor Eduardo Cardona Cardona, Édgar Alexander Erazo Guzmán, Mauro Alexander Mejía Ocampo, Juan Mauricio Ospina Bolívar y Wander Ley Viasus Torres, desmovilizados del bloque Cacique Nutibara. Al conocer de la apelación contra dicha providencia, mediante decisión del 23 de julio de 2.014, la Corte Suprema de Justicia anuló dicho auto, pues “la Sala de Justicia y Paz excedió su competencia al excluir oficiosamente a los postulados”13. En dicha decisión, independientemente de nuestra opinión, la H. Corporación estableció que la Sala se excedió en sus funciones porque de conformidad con el artículo 11 A de la Ley 1592 de 2.012, “la potestad de solicitar la exclusión quedó taxativamente atribuida a la Fiscalía General de la Nación y la decisión de la misma se le asignó a la Sala de Conocimiento de los Tribunales de Justicia y Paz, razón por la cual éstos operadores jurídicos no pueden 12 Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal. Auto del 2 de marzo de 2.012. Rdo. 37.915. Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Auto del 23 de julio de 2.014. Rdo. 43.005. Ponente: H. Magistrada María del Rosario González Muñoz. 13 7 expulsar oficiosamente a los postulados, pues siempre deberá mediar petición del ente acusador”. 7. En cumplimiento de esa decisión, le corresponde a la Sala adelantar el incidente de reparación integral y dictar sentencia en contra de los postulados en mención. En ejercicio de esa competencia, deberá verificar, evaluar y decidir si los postulados tienen derecho a los beneficios de la Ley de Justicia y Paz, entre ellos, a la pena alternativa por haber cumplido los requisitos previstos en los artículos 10 y 11 de la Ley 975 de 2.005. Sólo que los suscritos ya comprometimos anticipadamente nuestro criterio sobre dicho asunto, que ahora va a ser objeto de debate, pues en la decisión del 4 de septiembre de 2.013, mediante la cual la Sala excluyó oficiosamente a los postulados, examinó y valoró in extenso y a fondo las pruebas allegadas a la actuación y con fundamento en ellas se pronunció sobre el cumplimiento de los requisitos de elegibilidad por parte de los postulados, para concluir que no los cumplían. En efecto, después de examinar y analizar en detalle las pruebas, los suscritos concluimos que “la desmovilización del Bloque Cacique Nutibara no se hizo de buena fe, ni constituyó una garantía de no repetición y su estructura no se desmontó, ni se desmanteló, ni se desarmó real y efectivamente”, que tampoco “restituyó, ni devolvió los bienes que fueron objeto de despojo”, que “interfirieron en el libre ejercicio de los derechos políticos y las libertades públicas de los ciudadanos” y no cesaron la actividad delictiva después de su desmovilización. Igualmente concluimos que no sólo “no se han confesado las desapariciones, ni se han revelado los nombres de los desaparecidos, ni se les ha dicho a sus familias que suerte corrieron y donde están sus cuerpos”, sino que su confesión no fue completa y veraz. 8 De allí que concluimos que la desmovilización de los postulados “no cumplió con los objetivos y requisitos de elegibilidad consagrados en la Ley de Justicia y Paz”. Los suscritos fijamos entonces nuestro criterio sobre el cumplimiento de los requisitos de elegibilidad de los postulados, con la entidad suficiente para comprometer nuestro juicio e imparcialidad antes de dictar la sentencia sobre un tema que debe ser resuelto en ésta, pues en ella la Sala deberá determinar si los postulados cumplieron con los requisitos de la ley y, en consecuencia, si tienen derecho a la pena alternativa, entre otros beneficios de ésta, pues el artículo 25 de la Ley 1592 de 2.012 establece que a la Sala de Conocimiento de Justica y Paz le corresponde “evaluar el cumplimiento de los requisitos previstos en esta ley para acceder a la pena alternativa”. Pero, además, conforme a la decisión de la Corte, lo hicimos excediéndonos en las funciones o, en otras palabras, sin poder ni deber hacerlo o por fuera de las funciones estrictamente asignadas en la ley. Así, la imparcialidad que debe garantizarse en este caso está seriamente afectada por la opinión o criterio anticipado asumido por los suscritos Magistrados, el cual es sustancial y relevante y afecta el debido proceso de los postulados. 8. La cuestión sería distinta si la Corte hubiera revocado la decisión de la Sala Mayoritaria y hubiera concluido que los postulados cumplían los requisitos de elegibilidad previstos en la ley. En tal caso, la Sala simplemente debería acatar esa decisión y dictar sentencia en los términos ordenados por el superior, incluida la pena alternativa, dado que conforme a su decisión cumplirían los requisitos respectivos. 9 Pero, la Corte no revocó la decisión, sino que la anuló. En esas condiciones, aunque los postulados continúan en el proceso de justicia y paz al desaparecer la decisión que los excluía, el juicio emitido por la mayoría de la Sala sobre el cumplimiento de los requisitos no fue examinado, ni revisado por la Corte y continúa intacto o incólume. 9. Los suscritos Magistrados somos conscientes que en ocasiones anteriores rechazamos una recusación y declaramos infundados unos impedimentos en apariencia similares. Sin embargo, entendemos que éste tiene características diferentes porque i) se trata de los mismos postulados respecto de los cuales ya nos pronunciamos antes, ii) lo hicimos en exceso de nuestras funciones, o sin poder hacerlo y por fuera de las funciones estrictamente asignadas en la ley, según concluyó la H. Corte Suprema de Justicia y iii) después de hacer un análisis y valoración exhaustivos de la misma prueba que debemos examinar ahora en caso de dictar sentencia. Por lo menos, para los suscritos Magistrados es preferible estar equivocados al juzgar nuestro impedimento para seguir conociendo del proceso a continuar un juicio con inquietudes e incertidumbres sobre la concurrencia de una causal de impedimento y la imparcialidad para conocer de él, pues el artículo 56 numeral 4 de la Ley 906 de 2.004 prevé que el funcionario judicial estará impedido para conocer de un caso cuando “haya dado consejo o manifestado su opinión sobre el asunto materia del proceso”. En consecuencia, de conformidad con el artículo 56 numeral 4 de la Ley 906 de 2.004, los suscritos Magistrados nos declaramos impedidos para conocer de la actuación seguida a los postulados Juan Fernando Chica Aterhortúa, 10 Edilberto de Jesús Cañas Chavarriaga, Néstor Eduardo Cardona Cardona, Édgar Alexander Erazo Guzmán, Mauro Alexander Mejía Ocampo, Juan Mauricio Ospina Bolívar y Wander Ley Viasus Torres, desmovilizados del bloque Cacique Nutibara y ordena remitir la actuación al Magistrado Juan Guillermo Cárdenas Gómez y proceder al sorteo y designación de conjueces para resolver sobre el impedimento. CÚMPLASE RUBÉN DARÍO PINILLA COGOLLO MARIA CONSUELO RINCÓN JARAMILLO 11