El ejercicio de este Derecho no tiene carácter absoluto

220-065653 del 18 de Noviembre de 2005
Ref: Derecho de inspección – El ejercicio de este Derecho no tiene carácter absoluto.
Me refiero a su comunicación radicada con el número 2005-01-159870, mediante la cual expone una serie de
hechos que han ocurrido en una sociedad de Responsabilidad limitada con cuatro socios, cada uno con el veinticinco
por ciento (25%) de participación, en la que uno de ellos después de ser empleado de la compañía durante diez
años, hace cuatro meses renunció y a partir de ese momento ejerce su derecho de inspección en forma abusiva
asumiendo las siguientes actitudes:
1.
No asiste personalmente a las juntas de socios, inspecciones ni conciliaciones, lo hace a través de un
hermano quien se caracteriza por ser altanero, vulgar y atrevido, en mas de una ocasión ha tenido encontrones con
los empleados de la empresa ya que arguye que el hermano (el socio) por ser dueño del veinticinco por ciento
(25%) de la compañía también lo es de la copropiedad.
2.
Cuando acude a las inspecciones, increpa de forma atrevida y con palabras de alto calibre al representante
legal acusándolo de estar confabulado con los otros socios afirmando estar en consorcio para defraudar a la
compañía. Pide , para inspeccionar, documentos de tres (3) años atrás como por ejemplo declaraciones de RENTA,
IVA BALANCES Y CONTRATOS, presumo, esperando encontrar errores para proceder a denunciarlos a las
autoridades como efectivamente lo ha hecho. Porque: Para que más? Queda claro que su intención es la de causarle
daño a la compañía.
3.
Escribe molestos mensajes de texto vía celular a uno de los socios exigiéndole respuesta de algunos asuntos
propios de la administración de la compañía aun cuando el socio, hermano, conoce las respuestas.
4.
Realiza llamadas telefónicas tratando de impartir instrucciones a la secretaria enterándola de sus actitudes
(Que fue a la fiscalía, que el Gaula viene etc), molestándola continuamente.
5.
Lleva a las instalaciones de la compañía personalmente a funcionarios del GAULA quienes investigan un
presunto delito de extorsión y estafa en contra del socio.
6.
Y lo que es más grave acude a donde proveedores a denigrar de la compañía solicitándoles supuestamente
amparado en la ley copias e los contratos suscritos para revisarlos invitándolos a que no nos realicen los pagos
directamente proponiéndoles constituir fiducias.
Al respecto, consulta hasta donde llega el deber para la compañía de seguir soportando toda esta situación,
amparada en el ejercicio del derecho de inspección, lo que le ha que le ha impedido a la compañía continuar
trabajando y ejerciendo su actividad comercial, con el agravante que el socio no quiere vender sus aportes.
Antes de responder las inquietudes por usted formuladas, considero del caso tener en cuenta que la Constitución
Política en el título ll, consagra un capítulo de los Derechos Fundamentales, entre los que está incluido el contenido
en el artículo 16 que consagra el “ el libre desarrollo de la personalidad de las personas, cuyo límite lo
imponen los derechos de los demás y el orden jurídico.
Ahora bien, el derecho de inspección consagrado en el derecho comercial societario, es acorde con los principios que
regulan los derechos fundamentales en la Constitución Política y no constituye una excepción al referido principio;
éste corresponde a la consagración legal del derecho derivado de la condición de socio que tiene como finalidad en
las sociedades de responsabilidad limitada, al tenor del artículo 369 del Código de Comercio, el de permitirles
examinar en cualquier tiempo por sí o por medio de un representante, la contabilidad de la sociedad, los libros de
registro de socios y de actas y en general todos los documentos de la compañía, a fin de puedan ejercer su derecho
a votar en las reuniones del máximo órgano social, con un mayor conocimiento de la gestión de los negocios
sociales, en aras a contribuir al mejor desarrollo de los fines de la empresa.
Igualmente, por ser éste un derecho subjetivo y personalísimo, su ejercicio necesariamente debe estar acorde con
la función de colaboración que se impusieron los socios en el momento de la constitución de la sociedad, fecha en la
que se comprometieron a entregar unos aportes para la realización de una empresa social mediante el esfuerzo
común, con el fin de obtener utilidades.
En torno al derecho de inspección, la Superintendencia en el libro de doctrinas y conceptos del año 2000, página
200 ha sostenido lo siguiente: “ Este derecho desde luego no tiene carácter absoluto, como quiera que no puede
convertirse en un obstáculo permanente que atente contra la buena marcha de la empresa (por lo que resulta viable
su reglamentación), como tampoco extenderse según las voces del artículo 48 de la Ley 222 de 1995,a documentos
que versen sobre asuntos industriales o cuando se trate de datos que puedan ser utilizados en detrimento de la
sociedad… ..
En este orden de ideas, tenemos entonces que si bien los asociados gozan del derecho de inspección que de manera
expresa les concede la ley, es claro que no por ello pueden excederse en su ejercicio, en cuanto se refiere a lesionar
los derechos de otros, como tampoco pueden so pretexto de llevar a cabo su ejercicio, poner en peligro el
funcionamiento de la empresa, y en consecuencia cualquier acceso a determinados documentos o fotocopias de los
mismos queda sometido a la voluntad de los asociados” (Oficio 220-81029 del 31 de agosto de 1999)
Así las cosas, cualquier acción que desdibuje la finalidad planteada, lejos de permitir el ejercicio invocado, podría
acarrear serios trastornos en el funcionamiento de la empresa y perjuicios a la sociedad, por lo que a juicio de éste
Despacho, en el caso descrito además de la necesidad de adoptar al interior de la empresa los correctivos a que
haya lugar para reglamentar su ejercicio, el ordinal 3°, artículo 358 del Código de Comercio, consagra: que “ la
representación de la sociedad y la administración de los negocios sociales corresponde a todos y cada uno de los
socios; estos tendrán, además de las atribuciones que señala el artículo 187, las siguientes: “ ordenar las acciones
que correspondan contra los administradores, el representante legal, el revisor fiscal o cualquiera otra persona
que hubiere incumplido sus obligaciones u ocasionado daños o perjuicios a la sociedad “ . (la negrilla no
es del texto)
Esperamos que la anterior información sea de gran utilidad para los fines perseguidos, no sin antes manifestarle que
los efectos del presente pronunciamiento son los descritos en el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.