Proyecto: “Trabajo, sociabilidad e integración social

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 PROGRAMACIÓN PICT 1998 Proyecto: “Trabajo, sociabilidad e integración social. Dilemas de la Argentina de hoy” Director: Silvio Feldman Grupo responsable: Luis Beccaria, Inés González Bombal, Gabriel Kessler, Miguel Murmis, Maristella Svampa ID Asistente: Mariana Luzzi Becarias ANPCyT: Gabriela Wyczykier, Carla del Cueto Estudiantes asistentes: Mariana Barattini, Marina García, Fabiana Leoni 1
I. El Debate Teórico En las últimas décadas la Argentina ha conocido un gran aumento de nuevas y viejas formas de pobreza, de la precariedad laboral y, más recientemente, de tasas de desempleo hasta entonces nunca alcanzadas en el pasado. Al mismo tiempo que la estructura económica se fue modernizando, una enérgica reforma neoliberal modificó de raíz el rol del Estado en la producción de bienestar y la distribución del ingreso se volvió más inequitativa. Transformaciones económicas, políticas, sociales y culturales están, sin lugar a dudas, modificando las distintas facetas de la sociedad, y, quizás particularmente, las pautas de integración y de exclusión social. Ahora bien, no se trata de un problema exclusivo de nuestro país, sino que el acelerado proceso de reestructuración acompañado por altas tasas de desempleo, la crisis generalizada de las diversas variantes del Estado de bienestar y el aumento de las formas de exclusión social han suscitado en este fin de siglo, una importante producción sociológica en los países centrales. Particularmente en el contexto europeo, donde encontramos autores como Robert Castel, Jacques Donzelot, y Pierre Rosanvallon, quienes coinciden en señalar que la disyunción entre las esferas de la economía y lo social estaría marcando el nacimiento de una "nueva cuestión social". Los autores señalados reflexionan sobre una de las cuestiones centrales de nuestro tiempo, esto es, los peligros de la fractura social o la pérdida creciente de cohesión social en sociedades complejas, que hoy enfrentan procesos de cambios. En palabras de Castel, la cuestión social es definida como "una aporía fundamental sobre la cual una sociedad experimenta el enigma de su cohesión e intenta conjurar el riesgo de fractura".1
La cuestión crucial a destacar en los tres autores es en qué punto sitúan el "fondo" de la nueva cuestión social. Para Donzelot, es "el famoso vacío social entre el individuo y el Estado", que ya en siglo XIX había sido el blanco de la crítica liberal (p.ej. Tocqueville), que ponía de manifiesto el poder centralizador del estado y la ausencia de asociaciones intermedias. 2 Para Rosanvallon, la actual crisis remite a la separación progresiva de los universos de la seguridad social y de la solidaridad, cuya convergencia evolucionó en este siglo hacia el modelo del Estado de Bienestar.3 Finalmente, para Castel, asistimos hoy a la crisis de la sociedad salarial en tanto formación social y a la aparición de crecientes procesos de vulnerabilidad social. En particular es Castel quien se propuso desarrollar históricamente la hipótesis general acerca 1
Castel, R., (1997), pág 18.
Donzelot, J., (1994), pág, 226.
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Rosanvallon, P., (1995).
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de la "correlación entre el lugar ocupado en la división social del trabajo (la mayor o menor integración por el trabajo) y"la densidad de la inscripción relacional en los tejidos familiares y de sociabilidad" 4 De ese modo, existirían diferentes "zonas" de cohesión social caracterizadas por la integración (trabajo estable + sólida inserción relacional), zonas de desafiliación (ausencia de actividad productiva + aislamiento relacional), y zonas de vulnerabilidad, intermediarias e inestables, caracterizadas por la precariedad laboral y la fragilidad relacional. Un punto destacable es la contraposición entre la noción de "exclusión" ( de carácter estático), que responde al modelo de una sociedad dual, y aquélla de "desafiliación" (de carácter dinámico), que acentúa el proceso mismo de caída e invalidación social. Por supuesto, la desafiliación y la vulnerabilidad social son fenómenos que deben ser comprendidos desde un horizonte mayor que señala la precariedad del lazo social en las sociedades contemporáneas y, más precisamente, la pérdida del poder integrador del Estado a partir de la crisis de la sociedad salarial. La insistencia de Castel por analizar los desajustes y quiebres en los mecanismos de integración social nos remite a la impronta profundamente durkheimiana que adoptan sus preocupaciones sociológicas, en especial a partir de la concepción social del Estado: "la intervención del Estado permite a los individuos conjurar los riesgos de anomia que Durkheim había visto bien, y que están inscriptos en el desarrollo de las sociedades industriales. Para esto, aquellos tenían como interlocutor principal y en el límite único, al estado y sus aparatos". Sin embargo, el que se halla en crisis es este modelo de integración social, que asumió la forma de la sociedad salarial, ese "zócalo sociológico" sobre el cual reposa la democracia de tipo occidental" 5
La sociedad salarial es vista como el tipo de formación social que controlaba la vulnerabilidad de las masas y aseguraba una participación en valores comunes. Ante sus crisis, las sociedades contemporáneas son sociedades en constante pérdida de solidaridad orgánica,déficits de integración, desafiliación masiva, caídas en diversas formas de anomia. El diagnóstico, nuevamente inspirado en Durkheim, insiste sobre los riesgos del "individualismo negativo", caracterizado por una pérdida de identidad social, una suerte de "desinstitucionalización" o separación en relación con los marcos objetivos que estructuran la vida de los sujetos. Más allá de aciertos o errores, algo se ha hecho evidente: en el contexto de fuertes transformaciones estructurales en las ciencias sociales se ha repuesto un tema clásico, la integración social. 4
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Castel, R., (1997), pág 414.
Castel, R., (1997), pág 395 y 451
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II. ¿Cómo opera la dimensión del capital social en procesos de integración en la sociedad argentina actual? Nadie puede dudar que la Argentina se encuentra frente a procesos de transformación profunda en lo económico y lo social, sin embargo cabe preguntarse:¿Cuál es la pertinencia de los enfoques teóricos señalados para interpretar la realidad argentina y esclarecer las diferentes dimensiones del cambio social que estamos atravesando? Estos análisis, provenientes de los países centrales, establecen un fuerte paralelismo entre la fragilización de las relaciones de trabajo y el debilitamiento de los vínculos sociales. Se describe un nuevo escenario en el que los individuos han sido despojados de sus marcas identitarias tradicionales y cuyas nuevas demandas no encuentran canales de contención en un Estado Benefactor en crisis. Pero, a su vez, largas décadas de protección estatal habrían contribuido a debilitar los lazos horizontales de solidaridad por lo que hoy, cuando éstos serían más necesarios, los sujetos se hallan desprovistos de marcos relacionales y con una sociabilidad empobrecida, es decir, propensos a caer en un "individualismo negativo". Convicciones como ésta, que tienen como referencia la experiencia europea, han alimentado los diagnósticos más apocalípticos sobre la exclusión social como horizonte temido frente a la crisis de la sociedad salarial. Por el contrario, tradicionalmente se describió la situación en América Latina como una imagen invertida de lo anterior. Ni el Estado fue tan protector, ni la sociedad salarial tan extendida. Frente al déficit de los Estados en su rol de garantes de la seguridad social, en cambio, se verificaba la supervivencia y vitalidad de lazos sociales que buscaban atender en lo posible tales carencias, desde la familia, las comunidades, las organizaciones de base. Y en relación con la esfera del trabajo, se constataba la proliferación de pequeñas unidades económicas, formas varias de cooperación social, y en especial un extendido espacio de trabajo informal. ¿Cómo se sitúan los cambios operados en la Argentina reciente en un figurado continium entre estos modelos diferentes de integración social? En la actualidad, la integración social, desde los enfoques teóricos citados, es pensada a partir de la articulación de dos ejes: la inclusión en el mercado de trabajo y la inserción en redes de sociabilidad o "marcos relacionales". En relación al trabajo, existe en la Argentina ya un cierto corpus de investigaciones sobre los cambios operados en el nivel del trabajo y algunos de sus efectos sociales más relevantes tales como heterogeneidad de la pobreza, el crecimiento del fenómeno de la nueva 4
pobreza, los efectos psico‐sociales del desempleo, etc.6 Existe menor desarrollo sobre el eje de los marcos relacionales y su utilidad para favorecer procesos de movilidad social ascendente o atenuar la vulnerabilidad que puede provocar los cambios en la esfera del trabajo. Cabe citar la siguiente reflexión como hipótesis orientadora del proyecto propuesto: "¿Hasta dónde esos lazos sociales se han roto, hasta dónde las viejas reglas de solidaridad desaparecen? (..) Es necesario más conocimiento empírico ya que las respuestas pueden variar según las sociedades y las tradiciones culturales. Considero que en la Argentina, uno de los recursos más valiosos que existen es, precisamente, la persistencia de toda una serie de relaciones interpersonales que no sólo no consiguen ser destruidas por la crisis, sino que en algunos casos son revitalizadas por esta crisis 7 " El concepto de marcos relacionales que plantea Castel puede ser enriquecido con la noción de "capital social" de Bourdieu que alude al "conjunto de recursos actuales o potenciales ligados a la posesión de una red durable de relaciones más o menos institucionalizada (...) o en otros términos, la pertenencia a un grupo concebido como un conjunto de agentes que no sólo están dotados de propiedades comunes sino también unidos por relaciones permanentes y útiles". En esta concepción, el capital social puede descomponerse en dos elementos: a) las relaciones sociales en sí mismas que permiten al individuo acceder a recursos de sus asociados; b) la cantidad y calidad de los recursos en tanto tales. En estos términos, el capital social explicaría el rendimiento desigual que diferentes individuos o grupos sociales obtienen de su capital económico, cultural y simbólico. Por eso, este concepto se vuelve relevante a la hora de explicar diferencias para el aprovechamiento de oportunidades ocupacionales, adaptación a la pobreza, preservación frente a la vulnerabilidad, o a la inversa para facilitar la movilidad social ascendente. El capital social puede ser abordado también desde su estructuración en redes. El estudio de las redes sociales ha tenido un importante desarrollo en las ciencias sociales en las últimas décadas que pensamos pueden recuperarse para analizar nuevas formas de sociabilidad y su incidencia en términos de integración social. En la literatura anglosajona el concepto de "capital social" fue profundamente tratado por Coleman quien lo define a partir de sus funciones facilitadoras de las acciones entre actores ‐sean 6
Beccaria, N. y López, N. (1996), Minujín, A. (1993), Minujín, A. y Kessler, G. (1995), entre otros .
Murmis Miguel, "Pobreza y Exclusión Social: Sobre algunos problemas teóricos y de medición de la situación argentina".
Ponencia ante el V Congreso Argentino de Antropología Social. Panel de Antropologia Urbana, mimeo, 1997.
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éstos personas o actores corporativos‐ dentro de una estructura. El autor añade al concepto la cuestión normativa que en Bourdieu está ausente. Su noción de "clousure" señala la existencia de lazos al interior de un grupo constituido para garantizar la observancia colectivas de normas. Es la internalización de las mismas lo que permite los intercambios al interior de una comunidad o red sin necesidad de contratos formales ya que los mismos están garantizados por el cumplimiento de normas compartidas. 8
Mas recientemente, A. Portes ha indicado dos tipos de motivaciones intervinientes en la eficacia del "capital social": consumatorias e instrumentales. En los primeros, es la internalización de la norma misma lo que resulta un recurso valioso para la vida colectiva. Pero además, puede operar una motivación de tipo instrumental en la que los donantes proveen recursos pues poseen la expectativa de acumular obligaciones (o favores) que pueden ser canjeados en algún momento. Los estudios americanos muestran, a su vez, otra arista interesante: los aspectos negativos implícitos en la utilización del capital social como por ejemplo, la exclusión o discriminación de aquéllos no insertos en las redes; el poder excesivo del control social atentando contra la libertad personal; la existencia de normas niveladoras descendentes en casos donde las normas grupales son un freno a la movilidad ascendente (como la comunidad de jóvenes negros), etc. La aplicación del concepto de "capital social" al estudio de formas de sociabilidad en el caso argentino no puede ser mecánica; deberá tener en cuenta diversos factores que complejizan la problemática. En primer lugar, la diferencia entre capital social efectivo y potencial, es decir entre aquellas relaciones efectivamente utilizadas y todo el arsenal de recursos que podrían ser movilizados bajo ciertas condiciones, pero que efectivamente en el presente no lo están. En segundo lugar, el hecho de que los cambios en el contexto social provocan trastocamientos en el valor del capital social acumulado que puede no adaptarse a las nuevas circunstancias (este tópico se vuelve particularmente relevante en el caso de las clases medias que han acumulado capital social en vistas a una movilidad social ascendente y el mismo se vuelve ineficaz para adaptarse al descenso). Finalmente, cabe advertir que si bien la sociedad argentina parece preservar todavía lazos sociales consistentes, sin embargo, éstos no se asemejan (en general) a esos lazos comunitarios que el concepto de "capital social" toma como referentes en el caso americano. 9 III. Delimitación del objeto y Metodología El proyecto indagará sobre las fuentes, recursos y formas de generación, potenciación o 8
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Coleman (1993, 1990)
Kessler, G., (1998).
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pérdida de capital social en diversos estratos sociales considerados significativos para un abordaje sociológico sobre la integración social en la Argentina actual: las formas de sociabilidad, redes de intercambios y marcos relacionales de sectores informales y de sectores medios tanto en procesos de ascenso social como de descenso. El conjunto de los investigadores nombrados vienen trabajando como equipo desde 1996 a través de un Seminario interno titulado “La Cuestión social ayer y hoy” en el cual se han abordado estos temas. Las clases medias fueron históricamente consideradas un rasgo particular de la estructura social argentina en el contexto latinoamericano y un factor esencial en el modelo de integración social. Por su parte, los sectores informales también revistieron características muy propias para el caso argentino ya que la informalidad en el pasado aseguraba niveles de ingresos y empleo que diferenciaban a este sector de sus equivalentes latinoamericanos. Existen estudios que muestran que estas tendencias se están revirtiendo.10
Miguel Murmis y Silvio Feldman profundizarán los resultados provisorios alcanzados en un estudio sobre sectores informales, que han desarrollado con equipo integrado por alumnos e investigadores asistentes en el Area de Ciencias Sociales del Instituto de Ciencias de la UNGS. Maristella Svampa, Gabriel Kessler e Inés González Bombal abordarán el estudio de las formas de sociabilidad en redes correspondientes a sectores medios en ascenso y descenso social reciente. En todos los casos, el punto de observación no serán los individuos estrictamente, sino las redes u organizaciones en las que éstos están insertos. La investigación tendrá como insumo fundamental el seguimiento de variables vinculadas a la evolución del trabajo y la distribución del ingreso que Luis Beccaria desarrolla en el Area de Ciencias Sociales del Instituto de Ciencias de la Universidad Nacional de General Sarmiento. En particular, el impacto en términos de brecha de ingresos y precarización de relaciones laborales que ha tenido sobre la población la experiencia de la rápida apertura y liberalización de los mercados a partir de la década de los noventa. Los resultados de este seguimiento y su análisis en términos de cambios en la posición relativa de los diversos segmentos servirá para situar las nuevas condiciones de los sectores sociales bajo estudio En nuestro trabajo desarrollaremos metodologías de tipo cualitativo, como la entrevista en 10
Kessler, G., “Algunas consecuencias de la desocupación para el individuo y su familia”, en Beccaria, N. y López, N.,
(1996).
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profundidad, informantes calificados, observación, y la intervención sociológica, sobre grupos de actores participantes en las organizaciones elegidas. El trabajo cualitativo, como es sabido, no tiene por objeto concluir en una muestra representativa, la que solo podría lograrse con el concurso de otras metodologías. Sin embargo, trataremos de complementar el análisis con otros métodos (sondeos de opinión, encuestas cuando fuera posible, o el tratamiento de fuentes de datos que las organizaciones dispongan) a) Los sectores informales Los sectores informales han sido definidos como aquellos que desarrollan actividades a partir del control sobre un escaso capital, en las cuales el trabajo propio y familiar tienen un peso muy relevante, en áreas que no están situadas ni forman parte del centro o de los núcleos dinámicos del proceso de acumulación. Existe una visión muy difundida de que su capacidad de organización es muy débil. ¿Esto es realmente así? ¿Cómo contribuyen su inserción en redes u organizaciones a la movilización de diverso recursos para posibilitar o potenciar el desarrollo de sus actividades económicas y sus resultados? ¿En que medida ayudan a movilizar recursos para la atención de sus necesidades básicas y las de sus familias? ¿Contribuyen a estimular o facilitar el desarrollo de vínculos e interacciones diferentes con otros sectores sociales? ¿De qué modo? El estudio de los sectores informales debe partir del reconocimiento de su muy alta heterogeneidad interna y, por ende, de la gran diversidad de organizaciones que los agrupan. En base a una tipología previamente construida, se seleccionarán seis casos a estudiar –cuanto menos uno de cada tipo‐. Se ha previsto incluir uno o dos de ellos localizados en el interior del país. 11 a.1. Organizaciones exclusivas de trabajadores informales, por ejemplo un sindicato de vendedores ambulantes, una asociación o cooperativa de feriantes, una asociación de artesanos, o una organización de microempresarios. a.2. Organizaciones empresarias que incluyen titulares de microemprendimientos con poco capital, por ejemplo asociaciones de talleristas a domicilio, peluqueros, etc. a.3. Organizaciones sindicales que incluyen asalariados de microemprendimientos de poco capital, como por ejemplo de obreros de la industria del vestido, o de comercio. a.4. Organizaciones sindicales que incluyen trabajadores por cuenta propia, por ejemplo de conductores de taxis, de fotógrafos y afines, etcetera. 11
Silvio Feldman, La organización y representación de quienes desarrollan actividades en el sector informal en
Argentina, Brasil, y Perú. Informe preparado para la Task Force on Industrial Relations, OIT, Ginebra. Buenos Aires
1996; y Silvio Feldman, Miguel Murmis y colaboradores, Diversidad y organización de trabajadores en actividades
informales: análisis de algunas experiencias pertinentes, Seminario sobre informalidad y exclusión Social,
SIEMPRO-OIT, 27 y 28 de agosto de 1998.
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Se incluye también formas de organización no estrictamente ocupacionales y otras que se desarrollan sin institucionalizarse formalmente. a.5. Organizaciones que sirven de apoyo o brindan servicios importantes a sectores informales, como por ejemplo organizaciones vecinales, mutuales, o cooperativas de servicios. a.6. Redes y formas organizativas o dispositivos de cooperación, sin estructura formal, que canalicen intereses de sectores informales, como por ejemplo red de apicultores, o grupo de vendedores ambulantes de ferrocarril. Los estudios de casos darán cuenta de aspectos relevantes en lo que se refiere a los recursos sociales que logran vehiculizar y al capital social que activan las redes y organizaciones consideradas, así como sus campos de acción, en particular: • regulación de la actividad, pautas o reglas para su desarrollo y para las interacciones entre quienes las realizan y con otros, reglas o dispositivos para el ingreso; • acceso a información relevante, a insumos y a servicios útiles para el desarrollo de las actividades; • atención de necesidades personales y familiares, actividades recreativas; • representación y defensa de intereses; su agregación en sectores mas amplios • la movilización de recursos, experiencias en organización , y activación del capital social –
incluso experiencia en beneficio de los asociados y, en especial, de otros sectores de la comunidad. b) Los sectores medios b.1) Sectores medios en ascenso social: la cuestión urbana y las nuevas clases medias Dado los importantes cambios que se han producido en la estructura social argentina en las últimas décadas y, sobre todo, a la luz de los profundas modificaciones que ha sufrido los sectores medios (empobrecimiento, heterogeneidad), el estudio de las nuevas clases, aquellos "que ganaron" se revela hoy como necesario. Sobre todo, si partimos de una constatación mayor, como lo es la notoria ausencia de un adecuado tratamiento por parte de la literatura sociológica contemporánea de los cambios que en distintos niveles se vienen operando en aquellos sectores medios‐altos de la "nueva" estructura social argentina. El estudio de los procesos de movilidad social se han concentrado, casi exclusivamente, sobre los "nuevos pobres" y los "pobres estructurales". Sin embargo, estos estudios excluyen el análisis de las nuevas prácticas y discursos que alimentan las estrategias de distinción de los sectores medios y medios altos de nuestra sociedad, actualmente 9
abordados sólo en trabajos periodísticos o estudios de marketing. A través de la selección de dos casos de "countries" o "barrios cerrados", el trabajo se centrará en la red de relaciones de estos sectores sociales en ascenso (sectores medios y medios altos profesionales, empresariales, etc.), y pondrá el énfasis en el estudio de las prácticas sociales y culturales. La consolidación de nuevas prácticas sociales, formas de consumo culturales y estilos de vida serán analizado principalmente desde el ángulos de la producción de nuevos mecanismos de segregación urbana. El objetivo central es el estudio de los nuevos estilos de vida, que implican la aceleración y profundización de nuevas estrategias de segregación urbana, en cuya base se instala una frontera física entre "ellos" y "nosotros", (sobre todo a partir de la fuerte expansión de los barrios cerrados y los countries en la zona norte y oeste del Area Metropolitana de Buenos Aires). Las preguntas que nuestra investigación intentará responder apunta, entre otras, a dar cuenta de los rasgos mayores de este "nuevo estilo de vida residencial" y, sobre todo, del tejido de relaciones sociales sobre el cual se asienta. b.2) Sectores medios en descenso: Se abordará el estudio de dos casos de organizaciones que cristalizan redes sociales representativas de estrategias para enfrentar el empobrecimiento de clases medias en situaciones cercanas a la "nueva pobreza" tales como el "Club del Trueque" y programas solidarios como los emprendidos por las diversas entidades de la comunidad judía que se han interconectado en una alianza para enfrentar situaciones de emergencia social de sus miembros. El "Club del Trueque" es una iniciativa de profesionales en situación de desempleo que nació en 1993 y se ha extendido notoriamente a todo el país ampliando el espectro de participantes. Ha recibido el apoyo de gobiernos como el de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para realizar un evento anual, pero su accionar es permanente en el tiempo. Lo peculiar del caso es que los intercambios no están mediados por el dinero sino que por medio del trueque se establecen contraprestaciones de servicios u objetos entre los participantes. Según manifestaciones de sus miembros, la función esencial que cumplen estos intercambios es la de romper el aislamiento y proveer de nuevas relaciones sociales a quienes están atravesando situaciones de desempleo, precariedad laboral, es decir situaciones cercanas a lo que podemos definir como "nueva pobreza". El trueque pareciera restablecer lazos sociales más colectivos y romper con un individualismo negativo al que pueden ser propensos sujetos con cierto capital cultural pero sin trabajo y con una acentuada pérdida de ingresos. 10
Los programas solidarios, tal como el que emprendieron entidades de la comunidad judía, resultan significativos ya que esta comunidad ha sido clásicamente identificada como representativa de una clase media en ascenso en la Argentina del pasado. En este caso, es posible que los lazos sociales estén reforzados por una común pertenencia a una minoría cultural y/o religiosa y por una tradición asociativa muy fuerte en la comunidad judía. En este caso será importante reconstruir la historia de este emprendimiento, las organizaciones que involucra, quiénes reciben y quiénes otorgan ayuda y los modos en los que estos intercambios se efectúan. Ambos casos pueden servir para establecer una comparación ya que en el "Club del Trueque" se establece una red extensa entre participantes heterogéneas y desconocidos entre sí y en cambio en el programa solidarios se parte de una red más intensa por la común pertenencia a una comunidad y probablemente afecte a segmentos más homogéneos. En los casos seleccionados cabe hipotetizar acerca del surgimiento de nuevos patrones de integración emergentes de la crisis, de respuestas desconocidas entre sectores medios en descenso social y que sin embargo re‐generan lazos sociales que evitan el aislamiento y la consecuente exclusión social. IV. Objetivos del Proyecto A través del seguimiento de la evolución de estos segmentos sociales en base a información estadística y el estudio exploratorio de casos de organizaciones, el proyecto del grupo de investigadores de Area de Ciencias Sociales del Instituto de Ciencias de la UNGS intentará responder a los siguientes interrogantes: ¿Cuales son las modalidades concretas que asume el capital social en diversos sectores en la Argentina de hoy y cómo éste incide en los patrones de integración social? ¿Qué peso tiene el mismo para explicar estrategias de supervivencia y/o de patrones de movilidad ascendente o descendentes en los diversos sectores sociales? ¿Qué rol cumplen las redes sociales y/o las organizaciones en estos procesos complejos de sociabilidad y construcción de capital social? ¿Cuáles son los principales recursos que se movilizan y las fuentes de dónde provienen? ¿Qué formas asumen las distintas transacciones posibles (reciprocidad, clientelismo, 11
instrumental, "don" sin contrapartida, etc.) y sus reglas respectivas en los diversos casos bajo estudio)? V. Resultados a alcanzar
Se espera que el proyecto solicitado colabore en la consolidación de un grupo de investigadores que se ha radicado recientemente en el Area de Ciencias Sociales del Instituto de Ciencias de la Universidad de Gral. Sarmiento. El mismo servirá como ámbito para el perfeccionamiento de un graduado así como para el inicio en la formación en la investigación de alumnos avanzados en las carreras de Ciencias Sociales que dicta la Universidad. La temática abordada es de gran valor, a su vez, para la transferencia a la docencia ya que existen cursos en la currícula de la UNGS tales como Problemas Socio‐Económicos Contemporáneos I y II, así como el Laboratorio Específico 3, donde estas problemáticas son tratadas y cuyos profesores son participantes de este proyecto; a su vez, los alumnos realizan bajo la supervisión de los docentes pequeños trabajos de campo en organizaciones situadas en el área de influencia de la Universidad. En cuanto a las actividades de difusión, está previsto realizar un seminario al año de inicio del proyecto presentando los avances preliminares de los casos bajo estudio. Al cabo de los dos años se organizará otro seminario para presentación de los resultados de la investigación. Está prevista la preparación de una publicación final en forma de libro. VI. Cronograma previsto Se contempla un plazo de dos años para la culminación del proyecto. El plan de trabajo considera las siguientes etapas: 1) Primera etapa: seis meses Conformación de un Plan de Trabajo detallado. Revisión bibliográfica. Selección de los casos definitivos a ser investigados. Elaboración de guías de trabajo de campo, realizando un primer testeo de las mismas. 2) Segunda etapa: seis meses Se dará inicio al trabajo de campo. Los investigadores tendrán reuniones mensuales de intercambio y sistematización de la información recabada. Se preparará un informe preliminar sobre el progreso de la investigación y los instrumentos desarrollados para el estudio de casos. Se realizará 12
un primer seminario convocando a colegas especialistas en temáticas afines. 3) Tercera etapa: seis meses Se culminará con el trabajo de campo analizando información adicional de otras fuentes secundarias. Se analizarán los resultados definitivos y se trabajará en una presentación que demuestre coherencia interna y comparabilidad entre los estudios de casos. 4) Cuarta etapa: seis meses Se procederá a la redacción final del marco teórico y las conclusiones. Se preparará y editará la publicación de un libro. Finalmente, se realizará un seminario de presentación y actividades de difusión. VIII. Bibliografía Altimir, O. y Beccaria, L. (1998), Efectos de los cambios macroeconómicos y de las reformas sobre la pobreza urbana en la argentina. Serie de Documentos de Trabajo de la Universidad de General Sarmiento (en prensa), Buenos Aires. Auyero, J., (1997), Favores por votos? Buenos Aires, Losada. Beccaria, L., (1998), “El mercado de trabajo bajo el nuevo régimen económico en Argentina,” Presentado al Seminario de Mercado de Trabajo y PYMES UNGS/Universidad de Toronto/IDES, Buenos Aires. Beccaria, L. y N.López, (1996), Sin Trabajo, Las características del desempleo y sus efectos en la sociedad argentina, Bs.As., Losada‐Unicef. Béjar, H., (1993), La cultura del yo, Madrid, Alianza. Bourdieu, P.,(1979), La distinction, Paris, Minuit. Bourdieu, P., (1980), Le sens pratique, Paris, Minuit. Bourdieu, P., (1980), “Le Capital social”. En Actes de la Recherche en Sciences Sociales, N. 28, 1‐4. Bourdieu, P. y Passeron, J.C., (1970), La Reproduction, Paris, Minuit. Carbonetto, D, (1997), “El sector informal y la exclusión social”, en Empleo y Globalización. La nueva cuestión social en la Argentina, Bs.As., Universidad Nac.de Quilmes, 1997. Castel, R., (1997), La metamorfosis de la cuestión social, Bs.As., Paidós. 13
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