Profesor: Mauricio A. López Tello Depto. Lenguaje y Comunicación Guía de trabajo de Filosofía: “Filósofos Clásicos: Sócrates, Platón y Aristóteles” Objetivo: Conocer, comprender, reflexionar, aplicar y valorar el legado filosófico de Sócrates, Platón y Aristóteles. Sócrates (470/469 – 399): Si los sofistas eran extranjeros, Sócrates era ateniense. Pertenecía a una familia modesta (se dice que su padre era escultor y su madre comadrona) y nunca quiso dedicarse a la política ni ambiciono salir de su pobreza material. ¿Quién fue Sócrates? Aunque parece que en un principio, se le podría considerar como un sofista más, la Apología de Sócrates, de Platón, le presenta con rasgos excesivamente divergentes. No escribe libros, renuncia a la oratoria, no cobra a sus discípulos. Y no presume sabiduría. Cierto es que un amigo suyo fue a Delfos a preguntar a la pitonisa si había algún hombre más sabio que Sócrates, y que la pitonisa contesto que no. Pero Sócrates interpreto el oráculo de la siguiente manera: solo la divinidad es sabia, para nada vale la sabiduría humana, y que el como él, Sócrates, sabe que “no sabe nada”, está más cerca de la sabiduría que los que –como los sofistas- creen que lo saben todo. Sócrates es, pues un hombre que busca la verdad; y a ello se siente impulsado por la voz de un espíritu (dáimon) interior. Así, dedica toda su actividad a examinarse a sí mismo y a los demás. Acerca del bien del alma, la justicia y la virtud en general, pensando que la vida sin tal género de examen no merece la pena de ser vivida. Sócrates prefirió esta actividad filosófica a todas las preocupaciones de sus contemporáneos. Figura inquietante e incómoda, se compara a si mismo con un tábano que aguijonea a los demás para que no se duerman y presten atención a la virtud. Intelectualismo Ético: Todo el interés de Sócrates parece, pues, haberse centrado en los problemas éticos, sobre la esencia de la virtud y la posibilidad de enseñarla. La doctrina de Sócrates suele ser calificada como un “intelectualismo ético”: el saber y la virtud coinciden; el que conoce lo recto, actuara con rectitud, y solo por ignorancia se hace el mal. Esta doctrina parece excesivamente optimista y alejada de la realidad (no basta conocer el bien para practicarlo…) y ya fue criticada por Aristóteles. Pero hay que tener en cuenta que Sócrates defiende también un utilitarismo moral: lo bueno (moralmente) es lo útil. Todo el mundo busca la felicidad y la utilidad, y la virtud consiste en discernir qué es lo más útil en cada caso. Este saber-virtud puede, evidentemente, ser enseñado y aprendido: no bastan, pues, las disposiciones naturales para ser bueno y virtuoso. La Mayéutica: Sócrates entiende la filosofía como una búsqueda colectiva y en dialogo. El no pretende poseer ya la verdad, ni podré encontrarla por sí solo. Cada hombre posee dentro de sí una parte de la verdad, pero debe descubrirla con la ayuda de los otros. Así se explican las dos partes del método socrático. La ironía, en primer lugar, es el arte de hacer preguntas tales que hagan descubrir al otro su propia ignorancia: el que cree saber cae en la cuenta – acorralado por las preguntas de Sócrates- de que no sabe nada. Entonces comienza un proceso nuevo: la mayéutica (arte de la comadrona, por alusión al oficio de su madre), consistente en un arte de hacer preguntas tales que el otro llegue a descubrir la verdad en sí mismo. Sócrates, pues no comunica doctrina alguna, ni parece tener doctrina propia: ayuda a los demás y busca con ellos. Esta búsqueda en común y esta modestia inicial contrastan fuertemente con el individualismo y la autosuficiencia de los sofistas. “Yo nada sé, y soy estéril; pero puedo servirte de partera, y por eso hago encantamientos para que des a luz tu idea” (Teeteto, 151). La Apología: Se acusa a Sócrates por no honrar a los dioses que honra la cuidad y por introducir dioses (demonios) extraños, y también por corromper a la juventud. Con pena de muerte fue condenado finalmente Sócrates. Los acusadores esperaban que Sócrates se exiliara voluntariamente antes del proceso, pero no fue así; tampoco pidió conmutación de la pena. Condenado a beber la cicuta, rehusó la huida que le habían preparado sus amigos y discípulos y pasó sus ultimas horas discutiendo con ellos acerca de la inmortalidad del alma y las ventajas de morir. Dicho acontecimiento es narrado a través del dialogo de Platón La Apología. Platón (427-347): Aristocles -llamado más tarde “Platón” por lo ancho de sus hombros o de su frente- nació probablemente en Atenas. Su familia pertenecía a la aristocracia ateniense. En 407, cuando tiene 20 años, sucede el acontecimiento fundamental en su vida: conoce a Sócrates, a quien permanecería ligado intensamente hasta la muerte del maestro. Son los años más agitados de la vida política de Atenas. En 404 Esparta impone el gobierno oligárquico de los Treinta Tiranos, entre los que figuraban dos parientes de Platón, Carmides y Critias. Más tarde (399), la democracia restaurada condena a muerte a Sócrates. Estos acontecimientos van a orientar definitivamente la actividad de Platón. Desde joven se sentía inclinado hacia la acción política. El proyecto filosófico de Platón, tiene pues una finalidad claramente política. Y también su actividad externa: la fundación de la Academia pretende educar a esos futuros gobernantes-filósofos. Esto ambiciona Platón: crear un Estado en el cual los hombres se guíen por las ideas y virtudes y no por sus pretensiones materiales. Teoría de las ideas: Tres son al menos las menciones en esta teoría: En primer lugar, la intención ética. Platón siguiendo a Sócrates, quiere fundar la virtud den el saber. Para ser justo, por ejemplo, es preciso conocer que es la justicia. Frente al relativismo moral de los sofistas, Platón –con Sócrates– reclama la existencia de una Idea eterna e inmutable de Justicia. Es el tema de los primeros diálogos, aunque en ellos todavía no se llegue a formular expresamente la teoría de las ideas. En segundo lugar, se muestra una intención política: los gobernantes han de ser filósofos que se guíen no por su ambición política, sino por ideales trascendentes y absolutos. En tercer lugar, aparece con un sentido científico: la ciencia (episteme) solo puede versar sobre objetos estables y permanentes. Si queremos hacer ciencia, esos objetos han de existir. Y como todos los objetos sensibles están sujetos a cambios permanentes, habrá que buscar otro tipo de objetos para la ciencia: las Ideas. Dice Platón, que existe el bien, la justicia y la belleza en-sí. Además de las Cosas existen las Ideas. Las ideas no son solo simplemente conceptos o representaciones mentales: son realidades que existen con independencia de las cosas. Más aún son una realidad misma. Cada idea es única, eterna, inmutable e inalterable, solo captable por la inteligencia, posee evidentemente los atributos del Ser de Parménides. Además, las ideas son causas de las cosas y fundamentos de todos los juicios que formulamos sobre ellas: una cosa es bella gracias a la idea de belleza y por eso podemos también decir que lo “es”. En cambio, las cosas son múltiples sometidas a un flujo cambiante, poseen menos realidad, no podemos decir que “son” sino únicamente que “han sido” o que “serán”, son captables por los sentidos, pero no son propiamente inteligibles, las ideas si. Los dos mundos: Platón, realiza una duplicación del Mundo: el mundo inteligible y plenamente real de las Ideas, y el mundo sensible de las cosas (dominado por el devenir de que hablo Heráclito). La relación entre ambos mundos es descrita por Platón con el término de participación o imitación. Esta teoría aparece explicada en el texto de Platón La Republica, a través del famoso mito de la caverna. En este mismo dialogo se afirma la primacía absoluta de la idea del Bien por encima de todas las demás Ideas y como causa última de la verdad y del ser de las cosas del mundo sensible. La Apología: Platón relata en su texto la condena hacia Sócrates, en la cual se le acusa de no honrar a los dioses que honra la cuidad, y también por introducir nuevos dioses (en este caso, denominados como” demonios”) y también por corromper a la juventud, con sus enseñanzas. Fue condenado finalmente Sócrates a la pena de muerte. Sócrates, no pidió conmutación de la pena. Condenado a beber la cicuta. Dicho acontecimiento es narrado a través del dialogo de Platón La Apología. Aristóteles (384-322): Nació en Estagira, en la península de Calcídica. Aristóteles era hijo de Nicómaco, médico del rey Amyntas II de Macedonia. Quedo huérfano muy pronto y cuando tenía diecisiete años su tutor lo envío a estudiar a Atenas, a la Academia de Platón, donde permaneció veinte años. Esta larga estancia junto a Platón marcara su vida y pensamiento, que girara siempre en torno a los problemas planteados por su maestro. Aristóteles así, al parecer no heredo de su maestro el interés por las matemáticas, pero si la pasión por los problemas metafísicos. La Lógica: Aristóteles fue el creador de la lógica, aunque la dialéctica de Platón constituye un importante precedente. Aristóteles no dio un nombre especial a sus escritos sobre esta materia. El termino “lógica” aparece posteriormente en los escritos estoicos, y el termino órganon (instrumento), Aristóteles consideraba a la lógica no como ciencia sino como una propedéutica a la ciencia. Según Aristóteles la función de la lógica es mostrar como en la ciencia se resuelve la problemática planteada por los presocráticos y por Platón (la relación entre lo uno y lo múltiple, o lo universal y los particular). El silogismo: es la estructura formal que permite realizar esa conexión (entre los particular y universal). Aristóteles define al silogismo como “un discurso de palabras o locuciones, en el que, una vez concedidas ciertas cosas, se siguen o concluyen necesariamente otras distintas”. El silogismo consta de tres términos: primer término o “mayor”, último término o “mayor” y término medio. Con estos tres términos Aristóteles constituyo tres “figuras” o esquemas del silogismo. La Metafísica: Se trata aquí, de una ciencia que Aristóteles llama “sabiduría” o “filosofía primera” (el nombre metafísica, se debe a un nombre propuesto más tarde por Andrónico de Rodas). Al hablar sobre una “filosofía primera”, presupone Aristóteles que existen también las “filosofías segundas”, lo cual es ya una novedad. Para platón no había sino una única filosofía, que era, al mismo tiempo, actividad virtuosa que conduce a la felicidad y que coincide, sin más con la “sabiduría”. Para Aristóteles en cambio, la sabiduría es una ciencia más. ¿Sobre qué trata la “filosofía primera”? no hay ciencia sino de lo universal. Por tanto, esta ciencia trata de lo más universal que existe el ser en cuanto ser y sus atributos esenciales. Las demás ciencias tratan del ser únicamente desde un cierto punto de vista, por lo que se les llama “ciencias particulares”, por tanto la “filosofía primera” es una ontología (ciencia del ser). Sin embargo, en otros pasajes de la Metafísica, Aristóteles dice que “la ciencia por excelencia debe tener por objeto al” ser por excelencia, es decir Dios. Entonces, la “filosofía primera” aparece como una teología. El Ser: Hay muchas acepciones del ser, pero todas ellas se refieren a un término único y a una misma naturaleza. Aristóteles presupone, pues, que entre todas las cosas que se llaman “ser” existe una unidad del ser: el ser y la unidad son una misma cosa. Pero no se trata de la unidad del ser que pretendía Parménides (que es más bien unicidad: el ser es único). No, para Aristóteles hay formas de ser, pero todas ellas se refieren a una forma primordial, al ser propiamente dicho: la substancia. Además, la substancia no es única, existen muchas substancias (muchos seres, por tanto). Todas las demás formas de ser no son sino modificaciones o accidentes de la substancia: cantidad, cualidad, relación, lugar, tiempo, posición, estado, acción y pasión. Substancia y accidentes son los “géneros supremos” del ser (llamados por Aristóteles “categorías”), unificados por su común referencia a la substancia. La substancia: es el ser propiamente dicho, el individuo concreto, por ejemplo: Sócrates o ese caballo. Aristóteles distingue dos tipos de substancia: substancia primera (el individuo concreto, Sócrates o ese caballo) y substancia segunda. (La especia y el género, como hombre o animal). La materia y la forma: Aristóteles sostiene que la substancia y por tanto el ser o individuo concreto, es un compuesto de materia y forma. La forma: es la esencia de la cosa, (la substancia segunda), la especie y es según Aristóteles eterna, pero no existe sino en la materia. La materia: es por templo, el bronce o “esta carne y estos huesos”. Aristóteles, también denomina a una materia, materia primera, la que se refiere a algo totalmente indeterminado, carente de forma, cualidades o extensión, es incapaz de existir independientemente. Recuerda pues, al apearon de Anaximandro. Actividad: -Sócrates: 1- Inferir y aplicar un ejemplo sobre 3 ideas principales del llamado intelectualismo ético. 2 – Crear ejemplos del método de la mayéutica (a través de un dialogo imaginario con otra persona) y explicar cómo usted pudo llegar a la “verdad”. 3 – Evaluar el comportamiento de Sócrates en el momento previo a su muerte, según el momento de su condena y el no renegar de sus ideas. ¿Qué habría hecho usted frente a estas acusaciones, se retractaría o defendería ideales? Argumente. Platón: 1 – Explique con sus palabras en qué consiste la teoría de las ideas (basándose en el texto anterior). 2 – Según las intenciones a los que ahonda la teoría de las ideas (que son 3 específicamente), refiérase a cuál cree usted es la intención más importante y argumente el porqué. 3- Evalúe el pensar de Platón, y realice una crítica valorativa a lo complejo de su teoría de la duplicación de los mundos. 4- Recuerde y anote 10 símbolos que aparecen en “La alegoría de la caverna” y escriba la interpretación. 5- Aplique los diez símbolos a la época actual; para ello critique nuestra era de consumo. Aristóteles: 1 – Según Aristóteles, ¿Cuál es el objeto de estudio de la Metafísica? 2 – Infiera por qué se afirma (en el texto y según Aristóteles), ¿por qué el ser y la unidad son una misma cosa? 3- Realice un ejemplo de cada tipo de substancia (substancia primera y substancia segunda), que no sean los que aparecen en la guía.