>> [entrevista] Con nombre propio / Carmen Alcaide > Audaz hasta donde la prudencia y las convicciones personales imponen, Carmen Alcaide posee una biografía marcada por su compromiso con el tiempo familiar y la estabilidad profesional necesaria para poder respetarlo. Con un acusado sentido de la responsabilidad, la actual presidenta del INE siempre ha cumplido sus cometidos profesionales con discreción, rigor y pragmatismo. Desde el respeto y el apoyo a quienes han formado en cada momento su equipo de trabajo, Carmen Alcaide posee una habilidad especial, labrada desde el seno familiar, para la organización y dirección de grupos humanos. Su cargo actual la sitúa bajo unos focos que no ansía, pero el reto de conducir la armonización europea del sistema de información estadístico español es un proyecto demasiado sugerente para esta mujer especializada en estadística y de espíritu renovador CARMEN Una forma práctica de entender la vida 70 BOLSA DE MADRID MARZO 2003 [Con nombre propio] > Carmen Alcaide / Con nombre propio > ALCAIDE PRESIDENTA DEL INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA (INE) Carlos Humanes y Rafael Alba Periodistas er la mayor de 19 hermanos, incluidas tres parejas de mellizos, constituye una realidad que debe marcar toda una vida. Es el caso de Carmen Alcaide, la primera mujer que ocupa la dirección del Instituto Nacional de Estadística (INE), una profesional de los números de larga trayectoria, que aprendió en su más tierna infancia el significado de la palabra orden. "Vivíamos en Madrid, en un piso grande en la Avenida de Reina Victoria que, año a año, se iba poblando con, al menos, la incorporación de un nuevo hermano. De esa etapa recuerdo una vida muy organizada, muy regular, del colegio a casa, y cuando empezó la televisión, lo justo para ver un rato los dibujos animados y a la cama". Con semejante prole se imponía la disciplina casi regimental con horarios y tareas previamente establecidos en unas cuartillas que eran fijados en las puertas de los cuartos de baño para público recordatorio de la aguerrida prole que veía crecer, entre la sorpresa y la ternura un S padre, Julio Alcaide Inchausti, quien ya, a finales de los años 50, comenzaba a despuntar como el economista español que más en serio se tomaba la entonces considerada excéntrica disciplina de la estadística. Carmen, digna sucesora de las inquietudes paternas, pasó su infancia en los alrededores del Estadio Metropolitano donde con un graderío excavado en un desmonte, el antiguo Atlético de Aviación, comenzaba a construir su fama de cultivador de desgracias y generador de emociones sin cuento, entre una afición castiza que jugaba a la automarginalidad de quien se niega, por principio, a incorporarse al triunfo fácil y al brillo social que caracteriza a los seguidores del denostado oponente deportivo, domiciliado ya en el aristrocrático Paseo de la Castellana. Hasta el curso de ingreso en el bachillerato, la educación de Carmen Alcaide, como la mayor parte de las niñas de su generación, estuvo entregada a manos eclesiásticas. Las Monjas Dominicas, vecinas también de la zona, tutelaron sus primeros contac- > MARZO 2003 BOLSA DE MADRID 71 > Con nombre propio / Carmen Alcaide > > tos con los libros de texto. Después, y por aquello del orden, hermanos y hermanas Alcaide fueron matriculados en una de las pocas instituciones de enseñanza mixta que conseguían sobrevivir en aquella época donde la promiscuidad de sexos marcaba la frontera de la depravación moral, según la doctrina nacional-católica imperante. La Institución Hamer también estaba avencindada en aquellos altos de la Ciudad Universitaria que, pocos años después, serían objeto de los afanes de unos inversores vascos que agrupados en la Inmobiliaria Metropolitana, bajo los auspicios del Banco de Vizcaya, reurbanizarían la zona, consolidando así su presencia en la capital donde habían "tomado" la Plaza de España, con sus dos edificios más emblemáticos, la Torre de Madrid y el Edificio España, y serpenteaban Gran Vía (entonces Avenida de José Antonio) arriba, en busca de cuantos edificios se pusieran a tiro, en esa vía que había pretendido ser el tributo a la modernidad racionalista del "poblachón manchego" capitalino en los últimos años del siglo XIX. UN ACUSADO SENTIDO DE LA RESPONSABILIDAD N LOS PRIMEROS PASOS PROFESIONALES E n 1967, con la licenciatura calentita bajo del brazo, Carmen Alcaide comienza a trabajar como interina, precisamente en el INE, y se casa. Posiblemente esa rápida inmersión en el mundo laboral, la también veloz asunción de responsabilidades familiares (su primera hija nacería al año del matrimonio) y la disciplina casi marcial que se respiraba en la casa paterna expliquen ese tránsito universitario al margen de la convulsa situación estudiantil de la época. El interinato en el INE dura apenas un año. Su padre, que había sido fichado por el Banco de Bilbao para realizar las primeras aproximaciones de la teorizante estadística a la praxis del negocio bancario, consigue que se incorpore a su equipo. "Mi padre llegó al Servicio de Estudios del Banco de Bilbao reclamado por José Angel Sánchez Asiaín que entonces era el responsable del departamento. Se trataba de desarrollar un trabajo sobre la distribución de la renta en España. Este trabajo acabaría constituyendo una de las referencias más importantes de su vida profesional. Para iniciarlo sólo contaba con una secretaria y un calculista. Cuando llegué yo, que tenía un poco más de nivel académico, lo que tenía que hacer era ayudarle. La verdad es que fue una situación poco común. En el banco no se veía bien que familiares trabajasen juntos, pero consintieron. Fueron años de aprendizaje y maternidad". o es difícil imaginar a una apenas adolescente Carmen Alcaide, responsable y formal, contribuyendo a que la expedición de la columna Alcaide, en el tránsito diario de casa al colegio, mantuviera el orden necesario para sortear los peligros que representaba un tráfico rodado que comenzaba a ser creciente. De COMPROMETIDA CON LA IGUALDAD DE ahí la responsabilidad, un rasgo que anida en lo más recóndito del OPORTUNIDADES PARA HOMBRES Y MUJERES carácter de nuestra protagonista y por el que, en muchas ocasiores hijas en dos años y medio de matrimonio. Carmen cumplía nes, se la percibe como distante o poco dada al trato social. De exquisitamente con la acreditada facilidad reproductiva famihecho, Carmen se mueve con mucha más liar así que, llegados a ese punto, decisoltura en ambientes profesionales que en dió que ya había cumplido sus obligaciocualquier sarao al uso. Acceder a ella no nes para con la perpetuación de la esperesulta fácil. Se esconde en un eterno cie humana en general, y la de los Alcaiejercicio de ocultar su lado humano. Un de en particular, y se dedicó a mejorar perfil que apenas descubre cuando se le profesionalmente. Son los años en que, enciende la mirada para hablar de sus hia la salida del banco, se desplaza a la jas. facultad de Ciencias Políticas para im"Cuando terminé el preuniversitario mi mapartir clases, como Profesor No Numeradre me dijo que eligiera. O me matriculaba rio (PNN), a iletrados funcionales en en la Universidad o me dedicaba a ayudarle cuestiones económicas y estadísticas. en casa. Le agradecí mucho aquella oportuFolgado recha- Recordando aquellos años, Carmen Alnidad y empecé Económicas". La facultad caide exige un alto en la conversación: estaba entonces en la calle San Bernardo. zó tajantemente esa posibilidad y "Mi opinión personal es que hoy en día Se conocía entre los estudiantes como 'Galas mujeres se equivocan al afrontar la empecé a trabajar. Soy una mujer lerías Castañeda', mitad en honor al fenómaternidad. Esperan demasiado para temeno comercial que comenzaban a repre- cauta antes de tomar decisiones. ner los hijos y cuando deciden ser masentar las grandes superficies, cuyo mas No me fío de las primeras impresio- dres su situación profesional es más acreditado representante en la época era compleja. A partir de los 30 o 35 años es Galerías Preciados, y mitad a mayor gloria nes. Yo conocía los productos de muy duro combinar la profesión y la made los temibles exámenes orales de un jupiternidad. Hay mujeres directivas que INE intensamente, pero el organisterino José Castañeda, que reinaba con indeciden ser madres y no pueden atender discutida majestad desde el olimpo de su mo, por dentro, evidentemente no a sus hijos. No se trata de que no vayan cátedra de Teoría Económica. "Tuve muy lo dominaba, así que era importante a tener una persona que se ocupe de buenos profesores (recuerda una Carmen ellos, sino de que no van a poder vivir la Alcaide que no recuerda haberse visto en- no apresurarme. infancia de sus hijos y eso es duro, muy vuelta en las algaradas estudiantiles que duro. Pero cuidado, no estoy reclamancomenzaron a proliferar aquellos años): Juan Velarde, Luis Angel do privilegios para las mujeres. Yo siempre he pensado que un priRojo o Ramón Tamames nos daban una formación extraordinaria". vilegio se acaba volviendo en contra. Cuando se dan privilegios a “ T Solo puse una condición antes de aceptar el nombramiento en el INE: quería saber si el Gobierno tenía alguna restricción con respecto a las cifras del PIB. “ 72 BOLSA DE MADRID MARZO 2003 una mujer sólo por su condición, se convierte en presa fácil. Yo soy mucho más partidaria de que se ayude a las familias. Es indudable que una mujer tiene que parir a los hijos, pero una vez recuperada del parto, el biberón se lo puede dar exactamente igual el padre. De todas formas a mí la palabra igualdad me gusta regular. No creo en el concepto de la igualdad entre los sexos sin más. A mí me gusta ser mujer y creo que las mujeres somos diferentes a los hombres. Ahora bien, lo importante es que esa igualdad se dé en el tratamiento legal que recibimos como individuos integrados en una sociedad. Es importante que exista una igualdad de oportunidades real, con independencia del sexo", y Carmen Alcaide concluye, "el hombre es un buen complemento, generalmente necesario". LOS PRIMEROS TRABAJOS PARA EL BANCO DE BILBAO M ientras vamos encajando el alegato, retomamos el hilo de los recuerdos profesionales en las épocas heroicas en que Julio Alcaide y su hija, desde su despacho en la madrileña calle de Jacometrezo, a un costado del imponente edificio neoclásico rematado con los aúrigas de la victoria con que la rama de la oligarquía de Neguri, encuandrada en el Banco de Bilbao, hacía notar su presencia en la minúscula city madrileña que se desarrollaba entorno a la plaza de Sevilla. Esa oligarquía, representada por Gervasio Collar como presidente del banco, había decidido en la segunda mitad de los 60 modernizar la entidad y para ello había contratado a unos cuantos profesionales ajenos al negocio bancario, de entre los que pronto destacó un José Angel Sánchez Asiaín que, a pesar de su prometedor futuro en el aristocrático Bilbao, se presentó y obtuvo una cátedra en la Universidad de Valladolid adonde los directivos vascos le fueron a rescatar para colocarle en la dirección general, cuando una enfermedad degenerativa devastaba las capacidades de Collar y las familias tradicionales no habían sido capaces de designar a un heredero para el "trono" presidencial. Se abría así paso al acceso de los gestores profesionales a los puestos de máxima responsabilidad en las entidades bancarias nacionales. Pero a 350 kilómetros de la villa del Nervión, los Alcaide permanecían ajenos a las luchas sucesorias y continuaban impertérritos desarrollando la singular tarea encomendada. "Resultó muy agradable ver cómo nuestro trabajo comenzaba a tener resultados prácticos para el banco. Por ejemplo, recuerdo que detectamos la necesidad de iniciar una expansión de la red por Levante. Había comenzado el fenómeno del turismo. Y el Bilbao apenas tenía implantación en la zona. En Benidorm, por ejemplo, el banco no tenía ni una sola oficina. También detectamos la necesidad de expandirse por los cinturones de las grandes capitales. Empezaba a fraguarse el nacimiento de las "ciudades dormitorio", con todo lo que eso representa de desplazamiento demográfico y de rentas. Eran unos tiempos de expansión acelerada. Se abrían muchísimas sucursales y nuestros criterios se tenían bastante en cuenta a la hora de ubicarlas". VIENTOS DE CAMBIO: LA IMPORTANCIA DE LUIS ANGEL LERENA EN SU TRAYECTORIA PROFESIONAL C on los nuevos vientos que soplaban en el Banco de Bilbao, llegó a la dirección del servicio de estudios un profesional sin cuya aportación el futuro de la entidad habría sido probablemente distinto. Con su aire de profesor de Berckeley despistado, las gafas amenazando permanentemente con deslizarse hasta el final de una breve nariz y un mechón de cabello rebelde con el que su propietario mantenía una pugna permanente y desigual, Luis Angel Lerena se encargó de aportar los primeros elementos de la "economía política" al sanedrín bancario vasco. Faltaban más de dos décadas para que fuera decretada la busca, captura y abatimiento de los economistas bancarios por un Gobierno bastante poco amigo de las críticas. Sánchez Asiaín ya había intuido que el final del franquismo represen- > MARZO 2003 BOLSA DE MADRID 73 > > 74 taría también un cambio en los usos y costumbres de la apolillada banca nacional. Los primeros síntomas de modernización al sector llegan de la mano del Banco de Bilbao coincidiendo con la devastadora crisis que afectó a la banca española a finales de los años 70. Los supervivientes ya nunca fueron iguales. Tuvieron que adaptarse a un entorno social que se movía a velocidad de vértigo y aceptar los nuevos modos que imponía la democracia. Para esas mutaciones, el Banco de Bilbao era, inicialmente, el mejor preparado gracias a la savia nueva que le había inyectado Sánchez Asiaín. "Me llevé muy bien con Lerena desde el principio. Es una persona que me dio muchísimas oportunidades. Siempre digo que tuve mucha suerte con que el que fuera mi jefe cuando se jubiló mi padre, pero supongo que yo también tendría algún mérito porque aproveché las ocasiones que me brindó", apunta Carmen Alcaide. Estamos ya en la primera mitad de los 80 y Julio Alcaide decide jubilarse. Nunca había sido realmente el director del Servicio de Estudios del Banco de Bilbao, aunque siempre tuvo esa consideración en Madrid, y desde la capital vasca nadie se tomó la molestia de desmentirlo. En esa época, los altos ejecutivos del banco iniciaban una discreta éxodo hacia la capital del reino. La presión del terrorismo etarra y la concentración del negocio en Madrid definieron este impulso. Luis Angel Lerena es de los primeros en cambiar el húmedo aire del "Bocho" por la sequedad de la Meseta. Viene prácticamente sólo y se muestra interesado en ver qué se puede aprovechar del equipo de Alcaide. Así se encuentra con Carmen, históricamente opacada tras la totémica figura de su padre, y decide apostar por ella. Lerena es un artista de la neutralidad multidireccional y comprende que la hija del catedrático está dispuesta a asumir un papel de es- BOLSA DE MADRID MARZO 2003 caso relumbrón pero estratégicamente imprescindible. Así, poco a poco, y sin que resulten necesarias grandes declaraciones de intenciones, la eficaz Carmen Alcaide se va haciendo responsable de la cocina del que ya era el más prestigioso servicio de estudios del país, mientras su titular se dedica a labores de asesoramiento de la presidencia del banco, mientras se entretiene planteando sugerentes combates a florete dialéctico con los sucesivos ministros de Economía. El talento natural de Lerena impidió que la sangre llegase nunca al río en estas escaramuzas, al mezclar sus críticas a la política económica del ministro de turno con su socarronería norteña y una estudiada expresión de inocencia en su rostro aniñado. COLUMNISTA "ESPECIAL" DE EL PAÍS P ero Lerena era además consecuente con quienes le rodeaban. "Surge la posibilidad de hacer una página semanal de coyuntura económica en el suplemento de los domingos de El País. En el periódico exigían que fuese firmada y como Luis Angel me encargó a mí su elaboración, me dijo que firmase yo esa página. Me sorprendió muy agradablemente su decisión. Es bastante habitual que los jefes te encarguen algo y luego se firme a medias. Pero en este caso no. Yo escribía la página en cuestión y yo la firmaba. La verdad es que fue toda una experiencia. Resultaba que trabajabas mucho, en distintos frentes, te enfrentabas a situaciones muy complicadas, bueno, pues la gente de lo único que te hablaba era de lo que habías escrito en El País. Para mí representó toda una oportunidad de la que le estoy muy agradecida a Lerena y al propio banco. Si hubieran querido, yo nunca hubiera firmado esa colaboración. No hay más que ver lo que pasa hoy", comenta una Carmen Alcaide a quien se adivina conmovida por estos recuerdos. > Carmen Alcaide / Con nombre propio CARMEN ABANDONA EL BANCO DE BILBAO DESPUÉS DE 28 AÑOS U na inesperada enfermedad se abate sobre Luis Angel Lerena y cuando la sesentena apuntaba ya en su horizonte vital, tiene que abandonar su actividad profesional. Carmen Alcaide se había consolidado por méritos propios como la segunda del Servicio de Estudios del entonces ya BBVA y tenía sus lícitas aspiraciones sucesorias. Además llevaba mas de un cuarto de siglo en el banco. "Yo no había hecho ningún movimiento táctico para conseguir la dirección del Servicio de Estudios. Pero de repente me entero, por algunos amigos, de que hay un head hunter ofreciendo a compañeros míos, coyunturalistas como yo, el puesto. Eso resultó muy doloroso para mí, pero como soy muy pragmática decido abandonar el Servicio y busco una salida dentro del propio banco. Así terminé en el Departamento de Mercados, haciendo una labor similar a la que había venido haciendo en Estudios" (se revuelve inquieta Carmen, a quien disgustan estos recuerdos ) " y allí sigo unos cuantos meses hasta que Fernando Becker me hace una oferta para irme con él al Instituto de Crédito Oficial. Salí bien del banco, y eso era algo que me preocupaba porque llevaba trabajando ahí casi 28 años. Mi llegada al ICO me hizo ilusión, estaba todo por hacer, había que crear un Servicio de Estudios prácticamente desde la nada y eso me permitía poner en práctica lo que había aprendido a lo largo de los años. >< profundidad, a los profesionales que allí prestaban sus servicios y en eso Antonio Martinez me prestó una ayuda impagable", concluye nuestra protagonista. Su irrupción en el INE causó conmoción. Una mujer al frente de la estadística nacional era algo nunca visto y además era una mujer que había recuperado el gusto por la vida. Su progresiva emancipación le había hecho adoptar formas de vestir poco acordes con los tonos pardos y grises que imperaban, monocordes, en los ternos de los funcionarios y además lucía unas sugerentes mechas de un tono bermellón subido entre su melena cobriza y corta, fruto, probablemente, del asesoramiento de alguna de sus tres hijas que en definitiva deben estar encantadas con la derrota que ha tomado la vida profesional de su progenitora, a la que, por cierto, se han encargado de hacer abuela. RETOS EUROPEOS E INDEPENDENCIA PROFESIONAL P ero no sólo su presencia física conmocionó los opacos despachos del Instituto. Las crecientes demandas de información estadística que genera la Unión Europea imprimieron un nuevo ritmo de trabajo al organismo. Eso y las modificaciones en las bases tabuladas. Se trataba de adecuar la expresión de los estudios a una realidad social y económica cambiante. Una de las batallas que actualmente libra con más ardor Carmen Alcaide es la que se refiere a la independencia del INE : "En el Instituto tenemos una independencia total para elaborar las estadísticas. Esto no es algo que yo EL GOBIERNO LE OFRECE LA PRESIDENCIA DEL INE uando llevaba un par de años en el Instituto, me llamó José Folme invente, es que lo dice la ley. Además, los estadísticos de vergado y me ofreció la Dirección General del Instituto Nacional de dad son unos profesionales excelentes que tienen como orgullo su Estadística. Me dijo que si no aceptaba me tiraba por la ventana". independencia. Nosotros hemos protagonizado algunos cambios en Comienza así la última etapa profesional, la metodología a la hora de elaborar las hasta el momento, de Carmen Alcaide. estadísticas. Pero estos cambios han teElla había coincidido durante bastante nido siempre un origen técnico. La única tiempo con el secretario de Estado de Prepresión que admito haber recibido es la supuestos en el consejo editorial de la rede las autoridades europeas que plantevista Futuro y se había creado un ambienan una demanda creciente de datos". te de confianza mutua, bajo las miradas Con estas afirmaciones se le colorea el cómplices del más dandy de los jefes de rostro, se muestra beligerante a la hora Esto no es algo de defender la profesionalidad y la indeestudios bancarios: Jorge Hay, el titular del servicio en el Banco Hispano Americaque yo me invente, es que lo dice pendencia de los facultativos del Instituno, y del hoy consejero del Banco Central to y, puestos a reconocer, se limita a la ley. Además, los estadísticos de aceptar el efecto inflacionista del euro. Europeo, Eugenio Domingo Solans. "Solo puse una condición antes de aceptar verdad son unos profesionales ex- Pero aporta su visión: "efectivamente la el nombramiento: quería saber si el Goimplantación de la moneda única ha gecelentes que tienen como orgullo bierno tenía alguna restricción con resnerado subidas injustificadas en los prepecto a las cifras del PIB. Folgado rechacios, pero no ha sido a causa del redonsu independencia. zó tajantemente esa posibilidad y empedeo, sino porque los usuarios no percicé a trabajar. Bueno no exactamente, ben la magnitud de la moneda y se crea porque tomé posesión el 2 de julio y rápidamente me tomé unos un efecto de ilusión monetaria. Tendrá que producirse el ajuste, días de vacaciones en agosto. Soy una mujer cauta antes de tomar porque dos euros puede parecer que son poco dinero, pero si los decisiones. No me fío de las primeras impresiones. Yo conocía los vale una lechuga, pues igual es una lechuga muy cara. Hay sectores productos de INE intensamente, pero el organismo, por dentro, evicomo la hostelería que se han aprovechado de esta situación y si dentemente no lo dominaba, así que era importante no apresuraren algún sector hay competencia es en el de la hostelería, así que me. Así apareció Antonio Martínez, a quien ya conocía y que me dio por la situaciones de monopolio no será el grueso de la subida de un recibimiento emocionado. Era un hombre con amplia experienprecios", concluye. cia dentro de la casa y a quien terminé nombrando mi jefe de gabiEl tiempo de la entrevista termina y mientras nos despedimos connete. Yo no quería engordar la nómina del Instituto con grandes fitinuamos ensimismados en el "efecto placebo" del euro. Tenemos chajes externos, así que se imponía conocer primero, en cierta que volver a preguntar. Pero eso será otro día. C “ En el Instituto tenemos una independencia total para elaborar las estadísticas. “ MARZO 2003 BOLSA DE MADRID 75