Introducción AOD Acontecimientos Internacionales en el año 2001 En el mundo en que vivimos, marcado por la globalización, con todo lo positivo y negativo que implica, los acontecimientos internacionales cobran especial relevancia, en la medida en que sus consecuencias se dilatan, afectando a una población numerosa que habita regiones diversas. Por este motivo, hemos querido iniciar este año el Informe de la Cooperación para el Desarrollo realizada por las Administraciones Públicas Madrileñas, haciendo un breve recorrido por los principales acontecimientos internacionales relevantes para el tema que nos ocupa, acaecidos en el 2001. Frente al año 2000, repleto de buenas intenciones y compromisos internacionales, y en especial la Cumbre del Milenio y los objetivos de desarrollo que surgieron de ella, el año 2001 supuso una valoración más objetiva de los complejos problemas que sufren los países del Sur. Porto Alegre fue la plataforma de debate respecto de las causas de esta problemática, poniendo de manifiesto los efectos perjudiciales del proceso de globalización. Tras los acontecimientos del 11 de septiembre, la inestabilidad política y la crisis económica afectaron en mayor medida a las economías más débiles de los países del Sur, empeorando su situación ya de por sí precaria. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) afirma que, mientras la integración global está procediendo a gran velocidad y con alcance asombroso, la mayoría del mundo no participa de sus beneficios. Las nuevas reglas de la globalización, y los actores que las escriben, se centran en la integración de los mercados globales, descuidando las necesidades de las personas que los mercados no pueden resolver. Este proceso concentra aún más el poder y margina a aquellas personas que disponen de menores recursos económicos. Bajo el lema de “ O t ro mundo es posible”, el Foro Social Mundial de Porto Alegre nació como alt e rnativa al Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), aunque finalmente su repercusión social ha sido mucho mayor. En oposición a la doctrina del pensamiento único, la creencia de que otra globalización es posible, reunió a unas veinte mil personas de todo el mundo en busca de propuestas alternativas: “Estas alternativas surgidas en el seno del Foro tienen como meta consolidar una globalización solidaria que, como una nueva etapa en la historia del mundo, respete a los derechos humanos universales, a todos los ciudadanos y ciudadanas de todas las naciones y al medio ambiente, apoyándose en sistemas e instituciones internacionales democráticos que estén al servicio de la justicia social, de la 11 igualdad y de la soberanía de los pueblos”.1 La tarea, por tanto, no es combatir de forma quimérica un proceso irreversible, sino tratar de encauzarlo, para que se produzca con ética, equidad, inclusión, sostenibilidad, desarrollo y transparencia. En otro orden de cosas, en el año 2001 se cumplieron 40 años de la creación del Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD). En 1961 la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), compuesta por aquellos países considerados desarrollados, creaba este comité con el objetivo de promover la coordinación, la eficacia y una adecuada financiación de los esfuerzos internacionales a favor del desarrollo económico y social de los países en desarrollo.2 Desde su creación, el CAD ha sido un órgano fundamental en el diseño de estrategias de cooperación y en la valoración y evaluación de las políticas de cooperación de los principales países y organismos donantes. En sus diversas revisiones de la ayuda oficial al desarrollo de los donantes, el CAD comprueba el grado de cumplimiento de los compromisos asumidos por cada país en materia de cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria y formula una serie de recomendaciones para la mejora de la eficacia de la ayuda. De la misma manera, las directrices fijadas en diversas materias tales como la igualdad entre mujeres y hombres y la definición de la Estrategia de Asociación para el Desarrollo, asumida también por la CAM, se han convertido en marcos de referencia internacional. Casualmente, en el 2001 se celebraba un segundo aniversario: los diez años del ingreso de España en este Comité. En poco tiempo, nuestro país transformó notablemente su posición en la esfera internacional: mientras que en 1979 todavía era considerado por el Banco Mundial país en vías de desarrollo y, por lo tanto, potencial receptor de ayuda, en 1991 se integraba en el CAD como donante. Diez años después, cuenta con su propia ley de cooperación internacional al desarrollo y ha consolidado su lugar dentro del CAD, distinguiéndose de otros donantes por el peso significativo que tiene en nuestro país la ayuda descentralizada. Esta singularidad ha sido resaltada por el Comité en sus sucesivas revisiones de la AOD española, hasta el punto de sugerir que podría ser fuente de inspiración para otros donantes. El Comité ha destacado la evolución creciente de los fondos procedentes de entidades autonómicas y locales como uno de los principales logros de la AOD española en la década de los noventa, suponiendo un 25% de la ayuda bilateral en el año 2000. El CAD reconoce asimismo el papel que la ayuda descentralizada ha jugado en la consecución de una población española más sensibilizada, implicando a las ONG y a la ciudadanía en general en las acciones de cooperación. Y SIN EMBARGO SE MUEVE Reflexiones en torno al II Foro Social Mundial celebrado en Portoalegre La muchedumbre de martillo, de violín o de nube, ha de gritar aunque le estrellen los sesos en el muro, ha de gritar frente a las cúpulas, ha de gritar loca de fuego, ha de gritar loca de nieve, ha de gritar con la cabeza llena de excremento, ha de gritar como todas las noches juntas, ha de gritar con voz tan desgarrada hasta que las ciudades tiemblen como niñas y rompan las prisiones del aceite y la música. Porque queremos el pan nuestro de cada día, flor de aliso y perenne ternura desgranada, porque queremos que se cumpla la voluntad de la Tierra que da sus frutos para todos” Federico García Lorca 12 A finales de enero de 2002 se celebraba en la ciudad brasileña de Portoalegre el II Foro Social Mundial, nacido como punto de encuentro, foro de propuestas y alternativas a un mundo injusto, a una economía globalizada y desigual y a un planeta cada vez más sucio y enfermo. Bajo el lema “Um outro mundo e possivel!” y durante cinco días, los cerca de 20.000 delegados oficiales y un total de personas de todas partes del mundo que rondaba las 60.000, debatimos, acercamos y expresamos nuestras propuestas de construcción alternativa de un mundo más justo para todos sus habitantes. El Foro Social tiene como antecedentes cercanos las respuestas de la ciudadanía mas o menos organizada a la cumbre de la OMC en Seattle (1999) al Por otra parte, se apuntan ciertos riesgos y retos de futuro. Aún reconociendo la importancia de respetar la autonomía de las entidades locales y autonómicas cooperantes, el comité señala la necesidad de mayor consistencia y complementariedad en los programas de ayuda implementados por los distintos actores. De esta manera, se apunta el riesgo de que el incremento de los fondos desemboque en una proliferación de nuevos actores, hecho que genera a su vez nuevos retos en la coordinación. Asimismo, el CAD recomienda fomentar el fortalecimiento de los procedimientos de gestión, incluyendo mayor asesoramiento para los sistemas de seguimiento y evaluación, que actualmente se limita a visitas a proyectos y controles financieros. El 2001 pasará también a la historia como el Año Internacional del Voluntariado, cuyos objetivos eran, entre otros, dar a conocer y promover el trabajo voluntario y otorgar un merecido reconocimiento a las personas que colaboran desinteresadamente en acciones sociales en todo el mundo, así como la creación de redes para intercambiar experiencias e información. Las diversas Administraciones Públicas madrileñas se han eco de esta celebración, a través de la organización de numerosas actividades. En España, la catástrofe provocada por el Huracán Mitch en Centroamérica en el año 1998 puso de manifiesto la capacidad de respuesta solidaria de la sociedad española: el registro de donaciones alcanzó los 27.000 millones de ptas (162.273 ), muy por encima de los 17.000 del resto de la Unión Europea. En particular, dentro de las organizaciones no gubernamentales de desarro l l o (ONGD) españolas, es indiscutible el peso específico del voluntariado: el trabajo voluntario representa aproximadamente un 69% del total del personal, frente a un 31% personas contratadas, según datos de 1999.3 Finalmente, señalar que en el año 2001, de nuevo las catástrofes naturales afectaron gravemente a diversos países del Sur, causando mayores pérdidas humanas y económicas de las que provocarían en un país del Norte en las mismas circunstancias. Los terremotos de El Salvador, Perú y la India y la sequía causante de hambrunas en Guatemala y Honduras dejaron patente este hecho. Por otra parte, continuaron numerosos conflictos bélicos como el de Colombia y se iniciaron otros nuevos, como el de Afganistán, afectando a un número importante de población civil. 1 Carta de Principios del Foro Social Mundial. www.forumsocialmundial.org.br Mº de Asuntos Exteriores. "El Comité de Ayuda al Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos: Doctrina y Actividades". Madrid. 2000 3 CONGDE. "Directorio de ONGD-1999". Madrid. 2000 2 Foro Económico Mundial de Davos o a los diferentes encuentros y cumbres de líderes mundiales que periódicamente se celebran y nace como expresión del desencanto y la impaciencia con unas instituciones y organismos mundiales que, si bien fueron creados con buenas intenciones (FMI, Banco Mundial, OMC, etc.) no han sabido, podido o querido dar respuesta a esas mas de dos terceras partes de la humanidad que viven en la pobreza. Eso sí, estos contraforos aparecen con la idea de no quedarse solamente en la critica sino también de proponer soluciones, intentando marcar límites con otro tipo de manifestaciones con carácter más violento y contestatario. El primer Foro social , también celebrado en Brasil en el año 2001 tuvo como foco principal el tema de la riqueza y la democracia. Portoalegre 2002 estuvo centrado en cuatro grandes ejes de discusión (producción de riqueza y reproducción social; afirmación de la sociedad civil y conquista de espacios públicos; acceso a la riqueza y a la sostenibilidad y poder político y ética en la nueva sociedad) que trataban de dar respuesta a cinco grandes retos: • Cuales debe ser las estrategias y líneas de trabajo frente a las exclusiones que hace el poder mundial • Cuáles deben ser las relaciones entre las ONG, los llamados nuevos movimientos sociales y las organizaciones políticas • Cuáles deben ser las tácticas de protesta y movilización y con que estilo • Qué propuestas concretas existen para acabar con la concentración de la riqueza • Servir de foco de convergencia de experiencias mundiales respecto a estos temas. 13 EL CAMINO HACIA EL CUMPLIMIENTO DE LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO DEL MILENIO El compromiso de la Comunidad Internacional en torno a una serie de objetivos que contribuyeran a la erradicación de la pobreza en el mundo, los llamados Objetivos de Desarrollo del Milenio, supuso en el año 2000 un hito histórico. Por primera vez, existía un consenso general en torno a una serie de problemas prioritarios de los países del Sur que había que atajar y se fijaban metas concretas que debían estar cumplidas para el año 2015. Un año después, se ha pasado del optimismo inicial a una visión más realista de la situación. Si bien 55 países con el 23% de la población mundial previsiblemente cumplirán al menos tres cuartas partes de los objetivos, 33 países con el 26% de la población mundial no alcanzarán a cumplir ni siquiera la mitad. África Subsahariana presenta especiales dificultades, donde tan sólo diez países siguen la pauta para cumplir al menos la mitad de los objetivos. Complementariamente a esta especie de programa de carácter más o menos oficial, tratado en los seminarios, talleres o conferencias lo cierto es que el Foro del año 2002 ha tenido además tres grandes impresiones o creencias no escritas pero que empapaban en gran medida todas las intervenciones. En primer lugar, la constatación de que los hechos acontecidos el 11 de septiembre han supuesto en cierta medida que se sustituyan libertades por seguridades en la prioridad de las agendas políticas. En segundo lugar, que escándalos financieros como el de la quiebra de la empresa Enrón son, una vez más, la comprobación de que el modelo neocapitalista no funciona y que la transparencia de los mercados es un mito. En tercer y último lugar, que la crisis de Argentina es una nueva prueba de la quiebra ideológica y organizativa de unas instituciones mundiales que nacieron con vocación de ayuda al desarrollo de los países más empobrecidos y que sin embargo a veces no hacen sino agravar aún más la situación de los mismos. En Portoalegre nos dimos cita movimientos y personas de todas partes del mundo, aunque se 14 Se observa que los países están realizando más progresos en unos objetivos que en otros. En materia de matriculación universal y equidad de género en la enseñanza, muchos serán capaces de alcanzar las metas previstas. La mortalidad infantil, sin embargo, se presenta como la meta más dificil de alcanzar: 85 países con más del 60% de la población mundial van atrasados en cuanto al objetivo fijado. Por otra parte, el cumplimiento de ciert o s objetivos no puede supervisarse por falta de información, esto sucede con las metas fijadas respecto de la pobreza, el VIH/SIDA y la mortalidad materna, ámbitos donde la mayor parte de la población afectada es femenina. La carencia de datos no sólo afecta a algunos objetivos, sino que existe también carencia de información respecto a todos los objetivos de un número significativo de países. Este hecho reviste especial importancia, puesto que posiblemente se trate de aquellos que tengan los peores resultados. De esta manera, su ausencia en el cómputo total puede dar una imagen exagerada del número de países que están progresando. siga echando de menos en estos encuentros una presencia más activa y representativa del Sur y su realidad y sus iniciativas y se siga percibiendo un cierto toque euro c é n t r i c o . Comercio justo y consumo responsable y sostenible; movimientos por una justicia accesible a todas las personas; sindicatos; colectivos por la abolición de la deuda externa; iniciativas de economía solidaria basada en las personas; iniciativas de banca ética y ahorro solidario de proximidad; colectivos que proponen un libre acceso a la información y movimientos de software libre y accesible a todas las personas; asociaciones y grupos de defensa de los derechos humanos, de los pueblos indígenas, etcétera etcétera. Todos exponiendo y compartiendo su quehacer cotidiano, su trabajo diario y concreto y demostrando que, aunque sea a escala pequeñita, otra economía es posible, otra justicia, otro consumo, otro ahorro...otro mundo está siendo ya posible. Lo cierto es que las agendas de la mayoría de las cumbres, encuentros, foros y conferencias suelen ser parecidas en sus contenidos. Sin ir Fuente: PNUD más lejos, en el Foro Económico Mundial de Davos, (que este año se celebró en Nueva York y del que Portoalegre pretende ser su alter ego desde la ciudadanía), también se habló de pobreza, mujer, educación y solución de conflictos. Sin embargo los asistentes, las propuestas, los estilos y las conclusiones son muy diferentes. Mientras en Portoalegre globalización significa redistribuir la riqueza, en Davos-Nueva York significa, de alguna forma, blindarla mucho más. En definitiva, el Foro Social Mundial es uno de los mejores ejemplos que tenemos de que es necesario seguir enredando. En los dos sentidos. En el de hacer red y en el de seguir liando al poder con propuestas de que “Otro Mundo (mejor, no lo olvidemos) es posible”. Así, tras Portoalegre 2002, han nacido los foros sociales continentales y locales, más apegados a realidades concretas y al trabajo en lo cotidiano, y la promesa de continuar con un III foro Social Mundial en enero de 2003. Sin embargo, de nada sirve tanto encuentro y foro si los nuevos movimientos sociales no saben encontrar su sitio entre las esferas políticas, sociales y económicas y hacer oír su voz y sus propuestas. Portoalegre, una vez afianzado su papel como contrapoder ciudadano, debe ser creo yo realmente un foro, un ágora (social y mundial) que tenga voz reconocida y que sin dejar de lado su pluralidad (que es su riqueza) sea voz de los sin voz y de los que proponen y demuestran soluciones. Sino, corre el riesgo de morir de éxito. De un éxito de participación y lugar de encuentro, debate y enriquecimiento de la muchedumbre de martillo, de violín o de nube pero que no sabe abrirse a otras realidades, ni cambiar de escala y proponer soluciones para el mundo. Creo que, hoy por hoy, el lema real de Portoalegre está siendo “otros pequeños mundos son posibles” y que el gran reto está en unir esos pequeños mundos para que lo que sea realmente posible sea otro mundo, otro planeta. Carlos Ballesteros García Profesor Propio Adjunto de la Universidad Pontificia Comillas (artículo elaborado para la FONGDCAM). 15 PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE DESARROLLO HUMANO (PNUD) - INFORME 2001, Poner el Adelanto Tecnológico al servicio del Desarro l l o Humano. En este informe, el PNUD reflexiona sobre las interrelaciones entre innovación tecnológica y desarrollo humano. Su objetivo es señalar algunas de las acciones necesarias para hacer que la tecnología beneficie a todos y todas. Entre estas acciones, cabe destacar la superación de obstáculos para que la tecnología responda a las demandas de crecimiento económico y desarrollo humano de los Países del Sur y la reivindicación de un mayor protagonismo del Estado para regular y redistribuir los beneficios de la innovación tecnológica. Analizando la situación mundial, queda patente la situación de desventaja en esta materia de los países del Sur frente a los del Norte, conocida como “brecha tecnológica”. Con un porcentaje del 14% de la población mundial, los países del Norte se atribuyeron el 86% del total de patentes presentadas en 1998 y un 85% de los artículos aparecidos en publicaciones técnicas especializadas. No sólo es importante destacar el acceso reducido a internet en África Subsahariana (tan sólo llega a un 0,4% de la población), sino la existencia de carencias más elementales, como la falta de acceso a electricidad de 2000 millones de personas. Por otra parte, es significativo que, a pesar de los avances que la medicina ha realizado durante el siglo XX, todavía un tercio de la población mundial carezca de acceso a la penicilina. Frente a estos datos, el PNUD afirma que, aunque el mercado impulsa el progreso tecnológico, se ha mostrado incapaz de crear y difundir las tecnologías necesarias para la erradicación de la pob reza. Por un lado, el mercado no entiende de equidad y, por lo tanto, las innovaciones tecnológicas se guían por la búsqueda de beneficios y no por criterios solidarios. Por otro lado, la tecnología por sí sola no acabará con la pobreza, puesto que ésta responde a condiciones e intereses económicos, políticos, sociales e históricos, entre otros. Finalmente, el informe incorpora un nuevo instrumento de medición: el índice de adelanto tecnológico. Por medio de cuatro indicadores (la creación de tecnología, la difusión de innovaciones recientes, la difusión de viejas invenciones y la cantidad y calidad de conocimientos especializados) se pretende medir el grado de innovación tecnológica de 16 los países. Más allá de la utilidad que pueda tener el cálculo numérico de las disparidades tecnológicas manifiestas entre los países del Sur y los del Norte, la importancia radica en prestar la atención necesaria a un problema que está impidiendo a muchos países avanzar adecuadamente en la consecución de un mayor desarrollo humano. COMITÉ DE AYUDA AL DESARROLLO (CAD) - INFORME SOBRE COOPERACIÓN AL DESARROLLO 2001 Este informe se centra en el debate internacional sobre la eficacia de la ayuda, formulando una serie de propuestas con el fin de promover su mejora. El CAD insiste en la importancia de la fijación de compromisos cuyo cumplimiento implique tanto a los países del Norte como a los del Sur. Se afirma que, sin unos niveles de corresponsabilidad mucho mayores en las relaciones entre donantes y receptores, el aumento del volumen de AOD ni se producirá, ni estará justificado. Según los cálculos del CAD en relación con los Objetivos de Desarrollo del Milenio, sería necesario que la ayuda se doblase en el 2012 para que fueran alcanzables. Lejos de estas cifras, la ayuda descendió desde el 0,24% de 1999 al 0,22% de 2000, distanciándose aún más del pretendido 0,7%. Para el CAD, el incremento de la ayuda ha de condicionarse al cumplimiento de una serie de requisitos, tales como un buen gobierno, una política económica adecuada y una mayor calidad de las estrategias sectoriales del país, especialmente las dedicadas a educación y salud. Al mismo tiempo, se afirma que el éxito de estas estrategias depende en gran medida de los compromisos de los donantes a medio plazo. Una visión cortoplacista de la ayuda por parte del donante, impide al receptor formular estrategias adecuadas, puesto que genera incertidumbre respecto a los recursos totales de los que dispondrá para implementarla. El informe señala, asimismo, las contribuciones a una mayor eficacia de la ayuda realizadas por el CAD durante el año 2000. Entre ellas, se destaca el Acuerdo de Ayuda no Ligada a los Países Menos Adelantados y la adopción de directrices en cuatro nuevos ámbitos: en reducción de la pobreza y coherencia en las políticas, en estrategias de desarrollo sustentable, en prevención de conflictos y en desarrollo de la capacidad comercial.