EL ECO DE FIGÜERA^^. conocíamos eu todos sus detalles, però del que tal vez no nos habríainos ocupado para no berir la susceptibilided del i n t e resado. Réstanos emperò hacer una pequeüa recti&cacioa que esperamos no tomarà à mal el r e ferido colega, y es, que el accidente no sucedió eü ningun aoto quefueraen aquel momeoto al Servicio de la empresa. EUo no obstante no creemos sea obstàculo para que dicba e m presa dó una prueba mas de sus ievantados sentimientos en pró de este iafeliz operario. REMITIDO. POTPCRM GONGORlN0-GR\Gi4NESGO CUENTO DE V I E J A S . Muy pronto, Rafael, quizà, Por mas que de e\lo te espantes, Cuai Homero un tararà, Serà un turiírú Cervantes. (Campoamor.) Era una tenebrosa, horripilante y fatídica nocbe, un frio màs que glacial se dejaba sentir en todo el àmbito de la comarca, el huracanado é hidrófobico viento amagaba derrumbar las culminantes chimeneas de la poblacionX.jVaunquees verdad. que en tan cruda estacion no suelen presentarse tempestades, sia embargo el cielo se disponia à dasatar sus furibandas cataratas, exbimióndonos nosotros de describir la vivisima y deslumbradora luz de los relàmpagosy el horrísono són del retumbante trueno. En una de sus calles de màs que regulares dimensiones y recta como un bramante en su mayor tensioa, traüsitaba un sér perteneciente à la exorbitante família de los bimanos, que poco despues supimos era un medico, quien se dirijia à prodigar su ciència y cuidados à algun necesitado; y , mientras pensaba quizà en el venturoso pasado }• en el triste presente y en el tótrico pervenir d e i a via pública q u e pisaba,— si àlguien no lo remedia,—a} Diputació de Girona — Servei de Biblioteques llegar àcierto sitio de lamisma, víó salir de UQ soportal à dos pwrsonajes vestidos con el traje talar, no euteramente igual, pues el primero que à sus ojos se ofreoe lleva el habito de sacerdote, y el otro el de las ordenes r e ii^iosas. Perpiejo, estupefaoto y atónito quedóse el paisano ante aquelles hombres, semejantes à dos estàtuas por su afectada gravedad y absoluta carència de movimiento; màs pronto desvaneciose su ilusion al ver jque pausadamente se adelantaban y con la mayor cortesia, le pedian un breve rato de amistosa plàtica. Figuróse el modesto E s culàpio que necesitarian de los auxilies de la medicina, si no para sí, cuando ménospor alguno de los moradores de aquella casa; però superlativa fuó su sorpresa, al decirle que ellos eran séres del otro mundo y que habian venido por permision del Omnipotente à este miserable valle de làgrimas, cou el solo y único objeto de resucitar y hacer prevalecer cierta jerga, que ya haee cerca de UQ siglo duerrae un prolongado ó inmerecido sueno, manifestàndole ademàs que se llamaban, en éste y ea el otro mundo, el primero D. Luis y su companero D. Lorenzo, y si bien el apellido de ambos no era el mismo, comenzaba no obstante con la misraa letra. [Dijéronle asímismo que ellos on vida h a bian aumentado y embellecido ei pàtrio idioma, dotàndole de un siu número de voces nuevas, sonoras, cultas y màs deslumbrantes que los vivísimos resplandores de la moderna pirotècnica; pues,3por lo que atane à la radiante luz del astro diurno, les importaba un ardite; anadieron que, aun cuando sus escrites estuviesen casi siempre vacíos de sentldo, esto era lo de ménos, pues lo que iuteresaba, para agradar à la multitud y dar realço y esplendor à una uacion, consistia eu que las dicciones y frases estuviesen dotadas de souoridad, fiuidóz y redundància, y las clàusulas se prolongasen casi hasta lo iufinito. Verdad es, continuaren con cierta amargura y Uenàndose sus ojos de làgrimas, que à últimus del pasado siglo dos escrlt)res, que feneoieron en estrangero suelo, secundades pot sus coetanecs, levantaron una tremenda cruzada contra nosotros, dando al traste con n u c s t r a fraseologia; però, para consuelo, aunque'/ exígü.0, no lograron por mas esfuerzos que hiiíierou tornar las cosas à su pristlno estado, r e sintiéadose muy mucho las publicaoiones posteriores del pernicioso inílujo de los vecioos transpirenàicos. Y en vista de tan audàz como atentatoria ingerència ^no es preferible à todas luces nuestra bella y pomposa locucion, à lo ménos nacida del propio suelo ó del materno, à la de estos sonores que la corrompeu con dicciones extrangeras?' No pudiendo ya sufrir màs el olvido en que se cos ba tenido tanto tiempo, con satisfaccioD y beneplàcito del Altísimo, hemos dejado nuestras tétricas tumbas para lograr nuestro propósito; però nadie hasta el presente se ha dignado oirnos y aúnque la Córte y demàa ciudades populosas é instruidas se han hecho el sordo à todo ruego, sin embargo nosotros no cejaremos ea tan culiüinante, beneficiosa y loable empresa. Admirado quedo el tal paisano ante tan estrafios razonamieutos, a v e u t u ràndose à preguntaries, lo que sa proponian en esto rincon del mundo. Ahora lo sabrà V., contesto el de la coguUa: en la casa de enfrente mora un simpàtico jóvea y concomitacte amigo nuestro, acórrimo entasiasta, admirador hasta el sufnmum desideràtum y leyente asíduo de nuestras obras; y de tal modo, que ya antes de terminar sus estudiós acadé'iiicos, ostentaba en sus conversaciones y eomposiciones una terminologia tan singular, que hasta Uegamcs à creer si nos ha superado. En este Instante acabamos de conferenciar con él largamente, promeiléudonos bajo su palabra que en touas sus elucubraciones íilosóíico- metafísico- socialis s e guirà la brillaute senda que ha eniprendido, à despecho de todog los Moratines habidos y por haber. ISosotros le hemos alentado en su digna resolocion; y el caso està ea que alguno comiencej pues, dado el primer paso, lo àerà, si no con el al ménos con ra conduir, tt à V. antes tia sombría de vo. m anfi^a^i»wt ._SLÍ:jèi"^ri m e ro co u qaiea ^ ^ B l ^ ^ j ^ a lo^ q u e t e n g a à biflQ d l i ^ ^ f S t a i^-^cÀd, de ósta nuestra enií^íW·a·'·í sus o.onvecinos y clientes, pnr» rpe se enorgullezcan rlo í·.nph'r entre ellos à un mancebo tan aprovechado, honra y préz de h. caduca y otra vez naciente l i t e ratura. Y, en diciendo esto, desaparecierou como por ensalmo los del traje iargo: y el del traja corto, despues de haber acudido à doude su profesion le Uamaba y de haberse acostado algo m o hino lo que de la noche restaba, viuo al siguiente dia à referirnos este suceso, no hallàndose sin embargo bien seguro de si decia verdad, ó si habia sido víctima de una vana pesadilla. FRASQUITO. Península de Cutistauriforme antes de los Idus de Octubre del ano (el ano està borrado). MERCADO DRI, DIA 10 DE OCTIIBBÍÏ DE 1 8 7 8 Maximo. Micln.o, Géneroa. Modldas Ptaa Cs. Ftas C i Trigo.. - . hect. 26'88 26'25 22'50 21'25 Mezcladizo. • )> 19'38 Centeao. . 11 12'50 Cebada. . • 1) 10' Aveua. )i 17'E0 16'88 Maiz. . . 11 18'75 Mijo. . . 11 Paiiizo. . ITSO 11 36'88 Habicuelas 11 41'88 Garbanzos. 1' 18'75 Habas. • 11 20' liabones. 11 35'53 6T84 Auardiante 1» 105' Aceite. 15 FIGURRiS. Imprenta de José Bosch y Batlle, calle "Nueva, níim. '^3.