La financiación de la colonia militar británica

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FOTO: nasa
E S PA Ñ A
por Ángel Liberal Fernández
lA financiación
DE LA colonia
Número 22 ·
Atenea
eL CAMPO
de
Gibraltar
Gibraltar lleva más
de tres siglos en
poder de los británicos. La situación
colonial -concepto
jurídico establecido por la ONU- no
ha variado en este
tiempo. Pero en los
últimos años han
aparecido nuevos
factores en lo que se
refiere a la financiación de la colonia
L
a financiación de la base militar británica en su colonia
de Gibraltar nos presenta
una situación llamativa. Si hace
unos 30 años el Gobierno británico
tenía que dar ayuda económica a la
colonia, que se encontraba al borde
de la quiebra (por el cierre de la verja), hoy es la colonia la que ayuda
al Ministerio de Defensa (MOD)
para que éste pueda continuar en
la base: se han invertido los papeles. Sin embargo, la economía de
Gibraltar depende a su vez de la
fluidez del tránsito por la verja y de
la colaboración española de forma
que, si volviesen las dificultades,
esa economía podría estancarse y
como resultado, la presencia militar británica podría verse en dificultades.
En estas líneas se explica esta
situación pero, centrándonos en el
siglo XX y en lo que va del XXI, a sabiendas de que la economía de Gibraltar tiene sus orígenes –basados
en el contrabando- en la ocupación
en 1704 y tuvo su mayor expansión
en las épocas de paz entre España y
Gran Bretaña como han explicado,
entre otros, los catedráticos Juan
Velarde Fuertes y Rafael Sánchez
Mantero.
El contrabando
En la primera mitad del siglo XX,
para conseguir la mayor eficacia
de la base, los británicos necesitaban la buena voluntad española así
como la mano de obra procedente
de la comarca del Campo de Gibraltar y la mayor fluidez posible en el
militar británica
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el eufemismo de LA
Los militares británicos tienen dificultades para
seguir en Gibraltar y tratan de conseguir que
el coste de su presencia les resulte próximo a
cero. Para ello reciben lo que podríamos denominar subvenciones de la economía local. Esta
economía puede calificarse de virtual, depende
de la fluidez del tránsito por la verja y puede
verse estancada por medidas muy simples que
se adopten en La Línea; también puede verse
perjudicada por las medidas legales que adopten para protegerse los países hacia los que dirige Gibraltar su atención. Por ello creemos que
no puede decirse, con propiedad, que la presencia militar esté bien asegurada. Sin la ayuda
de la economía local, que a su vez necesita la
colaboración española, los militares británicos
seguirían en Gibraltar pero a un coste superior
fotos: CÉSAR DEL BARRERO
tránsito por la verja de los bienes
de consumo, víveres frescos y agua
que procedían de España.
Para conseguirlo, hicieron los
mayores esfuerzos para ganarse los
corazones y las mentes de los españoles, sobre todo de las autoridades
de la comarca, y promovieron que
el Campo de Gibraltar dependiese
económicamente de la colonia británica. El contrabando masivo de
bienes de consumo contribuyó a facilitar todo esto y enriqueció tanto
a la población local como a la de la
comarca haciendo que un gran número de personas se viesen atraídas
hacia la bahía de Algeciras.
Cuando el gobierno de Primo de
Rivera [1923-1930] decidió reforzar
la vigilancia fiscal, provocó una
fuerte reducción en el tráfico de
contrabando que se originaba en
Gibraltar y se redujo también la relación de dependencia que existía
entre Gibraltar y su Campo.
En julio de 1936 –como antes y
después- la fluidez del tránsito de
bienes de consumo y de mano de
obra a través de la verja, constituyó una prioridad absoluta para las
autoridades británicas. El éxito que
consiguieron aumentando el contrabando les ayudó a ganarse de
nuevo los corazones y las mentes
de la población del Campo. 70 años
después vuelve a oírse eso de ganarse los corazones y las mentes aunque dirigido a todos los españoles.
De los años 60 a los 80
Al cerrarse la verja en los años 60,
cambió el modelo económico de la
Comarca pasando de la prestación
de servicios a Gibraltar y del contrabando, a la industrialización; lo
que supuso que una parte de la población de La Línea tuviese que emigrar. Gibraltar llegó a estar al borde
de la quiebra y necesitó ayuda financiera del Gobierno británico.
Al abrirse la verja a finales de
1982 -primero para peatones y en
1985 también para vehículos y
mercancías- la economía de Gibraltar comenzó a resurgir y reapareció
el contrabando. Pero esa economía
se manifestó vulnerable a la fluidez
del tránsito por la verja hasta el punto de que unos controles (los dobles
filtros, formados por una pareja de
la Guardia Civil) establecidos por el
entonces Gobernador Civil de Cádiz César Braña durante varios meses de 1995 en La Línea, cerca de la
salida de Gibraltar, llevaron a esta
economía al estancamiento, provocaron la caída del gobierno local y
consiguieron la desaparición de las
lanchas contrabandistas.
En términos generales, la economía local siguió progresando
amparada por sus peculiaridades
en la Unión Europea y gracias a la
asimetría fiscal de que goza respecto a la Comarca. Poco a poco se
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dependencia mutua
y quizá, podrían llevar a la práctica lo que ya dijeron, que no pueden seguir allí a cualquier precio, o admitir que se ha roto el formato actual.
Creemos que la denominada dependencia mutua, en términos económicos, entre Gibraltar y la
Comarca, no es más que un eufemismo para ocultar
el que, otra vez –como hasta los años 60 del pasado siglo- se utiliza a la Comarca para asegurar la
expansión de la economía de Gibraltar y, en consecuencia, la presencia militar británica. De esta
forma, la población de la Comarca y quienes participan en el negocio de Gibraltar (en la Comarca
y lejos de ella) contribuyen a perpetuar (al mínimo coste económico) la presencia militar británica
en Gibraltar, con su aeródromo en el istmo ocupado ilegalmente y sus submarinos nucleares en los
muelles Z, entre otras importantes capacidades.
restablecieron los lazos de dependencia que existían antes del cierre de la verja y muchos españoles
encontraron un puesto de trabajo
en Gibraltar en la construcción,
en el comercio o en los servicios,
sin contar los que pasaron a beneficiarse directamente de las actividades de contrabando. También
encontraron allí su sitio empresas
españolas (como CEPSA) y además, las ramificaciones de las actividades económicas de Gibraltar se fueron extendiendo hasta
varios centenares de kilómetros
al norte de Despeñaperros en lo
que se ha llamado el negocio de
Gibraltar.
base no fundamental
A principios de los 90, el fin de la
Guerra Fría y la disminución de
los presupuestos militares provocaron dificultades en el MOD para
mantenerse en Gibraltar. No tuvo
más remedio que reducir la presencia permanente de unidades, la de
personal y la de instalaciones activadas. En 2007 los británicos reconocieron que no podían permitirse
mantener Gibraltar a cualquier
precio y en 2009 informaron que
la base es útil pero no fundamental
para el Reino Unido añadiendo que
Por formato entendemos la relación eficacia/coste, de manera
que, si la eficacia fuese muy baja
y el coste elevado cabe pensar que
Gibraltar dejaría de serles útil. Sin
embargo, aunque la eficacia sea
baja, si el coste es también bajo o,
especialmente, si les resulta gratuito, entonces podrían perpetuar
La economía de Gibraltar depende
del tránsito por la verja y
de la colaboración española
no se discute de una forma especialmente fuerte [de donde se deduce que sí se discute] si debemos estar aquí o no porque es útil para la
defensa en su formato actual pero
también induciría a error pensar
que [la base de Gibraltar] es un factor fundamental en la defensa del
Reino Unido o de la OTAN.
su presencia. Nos referiremos al
coste económico pero también
existe el coste político. La eficacia no debe confundirse con la
utilización –mucha o poca- de la
base en un momento determinado pues las capacidades militares
–bien conocidas- están ahí, se utilicen o no.
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Creemos que la única forma de
reducir sus gastos es con una financiación ajena al MOD, por ejemplo,
por parte de quienes utilicen la
base (como los norteamericanos, lo
que no parece realista) o bien, por
parte de la economía local.
Parece lógico que los militares
traten de obtener su parte en los beneficios económicos de Gibraltar.
Si continuar allí les cuesta dinero,
resulta razonable que se lo pidan al
Ministro Principal como compensación por su presencia. Sería como
si le hubiesen dicho: si no nos pagas, nos marchamos y entonces te
quedas sin nada.
provocó tal revuelta popular que
llegaron a asaltar el edificio del
Mando. El problema se solucionó
gracias a un acuerdo con las autoridades locales por el cual la Royal
Navy consiguió aliviar su nómina
en unos 400 trabajadores mediante
jubilaciones anticipadas y la transferencia de parte de sus empleados
a la nómina del Gobierno local y a
la de una compañía privada. Por el
nuevo contrato, el Gobierno local
se responsabilizó de la generación
y distribución de energía eléctrica,
de la distribución de agua y de los
servicios de contra-incendios.
àSubvencionando al Royal Army:
Los militares británicos tienen dificultades
para seguir en el Peñón y tratan de
que el coste les resulte próximo a cero
Alguna relación deben tener con
lo anterior las palabras que el Ministro Principal pronunció en Londres en octubre de 2010 cuando expresó su seguridad de que la recién
publicada Revisión Estratégica de
la Defensa no afectará a la presencia militar en Gibraltar y añadió: La
hospitalidad que ofrece Gibraltar a
la base naval es una forma de reinvertir algo en la familia de la Gran
Bretaña, de la que Gibraltar es una
parte integral. Esta reinversión la
hacen por medio de una especie de
subvenciones.
Las subvenciones
Por lo que sabemos, el pago lo hacen, por lo menos, como se indica:
àSubvencionando a la Royal
Navy: Cuando en 2007 la marina
británica tuvo que privatizar los
servicios logísticos de la base, se
En julio de 2009 se estableció una
unidad de cadetes para favorecer
–entre la juventud local- el reclutamiento en beneficio del Royal
Army; está financiada del Gobierno
local. En junio de 2010 se informó
que los miembros del Regimiento
de Gibraltar podrían participar en
las operaciones en Afganistán, una
vez resueltos los problemas de financiación del seguro que cubre
las posibles bajas; no se informó
sobre los detalles pero nos imaginamos que la economía local puede haber contribuido a la solución,
como lo hacen los 30 empresarios
que tienen contratados a unos 150
soldados del Ejército Territorial encuadrados en el Regimiento. Estos
soldados suponen un tercio del Regimiento, sirven al Ejército a tiempo parcial y a sus patronos el resto
de su tiempo; por ello, el apoyo por
parte de los empresarios locales es
importante.
àSubvencionando a la RAF: En
2007 se anunciaron las obras del
aeródromo militar para adaptarlo
a las necesidades derivadas de su
utilización conjunta civil hispanobritánica. La situación creada en
torno al aeródromo llevó a que el
MOD firmase un acuerdo con las
autoridades locales por el que éstas,
entre otras obligaciones, abonan el
50% del coste de mantenimiento
de los servicios aeroportuarios que
se utilizan tanto por los aviones
militares como por los civiles. Entre las obras –costeadas por la economía local- se incluyen no sólo
edificios como la nueva terminal,
sino también, la reubicación de los
polvorines de la RAF y la construcción de una carretera entre la terminal y el campamento de la Torre
del Diablo, además de depósitos de
combustible que serán la reserva
estratégica para aviones civiles y
militares. También existe una unidad de cadetes para la RAF; no ha
trascendido si está o no subvencionada, por ahora.
àSubvenciones conjuntas: Se refieren a la energía y el combustible;
su futuro se encuentra en estudio
pero se prevé la desaparición de las
instalaciones militares dedicadas
a estos fines. También está en desarrollo la disolución de la policía
militar cuyas funciones y personal
pasan a ser asumidos por la policía
civil.
El coste de la base militar fue de
unos 60 millones de libras anuales
entre 1997 y 2004; el valor de las
propiedades militares es de 143 millones de libras. No parecen unas
cifras desorbitadas por lo que creemos que la presencia militar podría
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el peñón en atenea
El tema de portada del nº10 de la revista Atenea estuvo dedicada a la situación colonial del Peñón. Varios autores -Juan Velarde, Manuel de Ramón, Antonio Manzano- analizaron la situación
desde diferentes puntos de vista: la situación actual, que es la
eterna roca en el zapato español, el problema de defensa y la
historia desde que los británicos ocuparon Gibraltar por la fuerza. También se dio noticia de la aparición del libro ‘Gibraltar
base militar. El interés anglo-americano por el Peñón’, del que
es autor Ángel Liberal, que también firma el presente artículo.
www.revistatenea.es
resultar gratuita al MOD si, además
de lo que ya subvenciona, el Gobierno local se hiciese cargo de la nómina de todos los militares destinados
en Gibraltar pues son sólo 260 los
profesionales británicos y otros
200 los profesionales permanentes
del Regimiento. Como sabemos, el
resultado de un cociente en el que
el divisor es cero, es infinito.
sin recursos naturales
En septiembre de 2009 fue presentado el Informe Fletcher que trata
de la dependencia económica entre
Gibraltar y el Campo de Gibraltar.
Fue elaborado, en 2007, para estudiar el impacto de la interacción
económica transfronteriza. Respondiendo a preguntas de los asistentes, el presentador dijo que si
no fuese por el buen clima político
de relaciones transfronterizas, el
cuadro sería “muy negativo” y, recordó los años en que estuvo César
Braña como Gobernador Civil de la
provincia de Cádiz que, según dijo,
llevaron al “estancamiento de la
economía”.
En un discurso pronunciado en
julio de 2010, el jefe de la oposición
dijo que la economía local tiene
cuatro pilares. Los que citó de forma alegórica fueron: el tabaco (entendemos el contrabando de tabaco), el suministro de combustible
a los buques, los juegos de azar por
Internet y la evasión de impuestos.
La economía local, sin recursos
naturales, parece una economía
virtual que está a merced de las disposiciones legales que adopten los
países a los que se dirige su atención, por ejemplo, regulando las
apuestas por Internet (de empresas como Bwin, Victor Chandler,
888 Holdings y PartyGaming entre
otras), eliminando los paraísos fiscales o como eventualmente se les
denomine, implantando controles
medioambientales efectivos sobre
el bunkering, reprimiendo el contrabando de tabaco etc.
En septiembre de 2009, el entonces alcalde de La Línea estableció
unos controles de tráfico que afectaron a la fluidez del que se dirigía
a Gibraltar. Esto fue considerado
como una provocación, ocasionó
la alarma entre la población y, por
enésima vez, la prensa de la colonia
destacó la dependencia que tiene la
Comarca respecto a Gibraltar por el
número de trabajadores españoles
que encuentran allí su sustento y
que podrían ver afectado su puesto
de trabajo. También se reconoció
que las medidas adoptadas en esa
ocasión podían llegar a interrumpir
el comercio y provocar un impacto
negativo en la economía local.
Algo similar ocurrió en agosto
de 2010 cuando el nuevo alcalde
de La Línea anunció su intención
de implantar una tasa ecológica al
tránsito de vehículos procedentes
de Gibraltar. Se repitieron las voces
de alarma, las referencias a César
Braña y las amenazas a los puestos de trabajo de los españoles en
Gibraltar. Pudimos ver de nuevo
cómo el Foreign Office expresaba
su preocupación y declaraba como
asunto prioritario el que se mantenga la fluidez en el tránsito por la
verja.
Otra vez se puso de manifiesto
la fragilidad de la economía local y
el Ministro Principal reconoció en
una entrevista que: siempre estamos a punto de volver, con un solo
incidente, a lo que consideramos
los malos viejos tiempos. n
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