EL AMPURDAN LA MUERTE Para las 10 de la noehe del lunes estaba anunciada la conclusión de la Exposición de Bellas Artés, que tanto éxlto ha obtenido, con una conferencia de nuestro conciudadano el joven pintor don Salvador Dali. Al acto asistió una concurrència extraordinària que llenó a rebosar el salón del Casino Menestral donde estaba instalada la mas nutrida colección de obras de arte. La conferencia de Dalí, interesante por la novedad de sua discutidas concepciones, desarroUóse completamente avalorada con proyecciones y al terminar esta, tomo la palabra el alcalde que presidia el importante acto junto con la comísión organizadora. El Sr. Bassols declaro clausurada la exposición de arte y pintura y en brillantes pàrrafos dirigió caluroso elogio a su amigo el pintor don Ivo Pascual cuyo arte atraia sus preferencias; y al confereneiante Sr. Dali; y cnsalzó la labor de la Comisión organizadora de las exposicionesy conferencias que levantaba el ni vel de la ciüdad, «hemos de confesar, dijo, que por muclio tiempo a ras de tieri'a» y al que parecian abrirse ahora nuevos horizontes de esplendor y que no ya desde el puesto de alcalde, en que se consideraba sierapre interino, sinó en su caràcter permanente de figuerense y ampurdanés se sumaba gozoso a tal campana, a orientación y a euanto en tal sentído pudiera idearse, por lo que felicitaba a pintores y expositores y a la eoraisión organizadora especialmente al Presidente y carísimo amigo suyo Sr. Puig Pujadas. Las breves però elocuentes frases del Alcalde fueron muy aplaudidas, y al descender ràpidamente de la tribuna presidencial se tambaleó desvanecido y cuatro médicos seiiores Junyer, Bruses, Vidal y Malleu que se hallaban presentes y prestaren sus celosos cuidados le daban por muerto a los pocos instantes. Es inútil ponderar la impresión que en los presentes al acto del Casino Menestral produjo la terrible noticia. En muchos ojos aparecieron las làgrimas sobre todo cuando al poco rato la camilla de la Cruz Roja trasladaba a su domicilio el cadàver de quién hacia tan poco babÍH entusiasmado al auditorio con sus palabras llenas de sinceridad y de vida. LA IMPKE$IÓN D E LA CIUDAD El martes por la manana no se hablaba de otra cosa que del triste acaecimiento de la noche anterior en el Casino y en los comentaries de todos patentizàbase la relevante figu- Diputació de Girona — Servei de Biblioteques 26 Mayo 1928 ra que el Sr. Bassols se habia conquistado entre sus conciudadanos. En el Ayuntamiento y otros lugares públicos púsose la bandera nacional a media asta y el balcón principal de la Casa de la Ciudad aparecio severamente enlutado. Durante la mafiana la casa particular era un eontinuado jubileo de toda clase de personas que iban a ofrecer el pésame al hijo del malogrado alcalde D. Luis y a los allegados de la família Sres. Pagès, Dalfó y Fages. Por la tarde a las 6 fué trasladado el cadàver del Alcalde a la CAPILLA ARDIENTE instalada en el Salón de Sesiones de la Casa Consistorial, en el centro de la cual en rico ataud descansaba el cuerpo inanimado del Sr. Bassols. Hasta altas horas de la noche el publico se aglomeraba para rendir el ultimo tributo al difunto, firmando en los pliegos colocados en el vestíbulo todas las clases sòciales. Velando el cadàver habia religiosas de San José, mierabros de la familia, empleades municipales y gran número de amigos, los que rezaron el santó rosario dirigido por nuestro arcipreste Dr. Arolas en sufragio del alma del primer magistrado de la ciudad. En la mafiana del miércoles incrementóse todavia la asistencia del pueblo visitando la capilla ardiente, en la cual celebràronse misas a las 9 y a las 11. A las 10 tuvo lugar en el templo parroquial la celebración de un oficio de «corpore insepulto» después del cual trasladóse el clero con cruz alzada a la capilla ardiente para entonar un responso ante el cadàver. EL S E P E L I O A las 3 de la tarde la plaza de la Constitución presentaba imponente aspecte. Toda la ciudad puede decirse que tomaba parte en el sentimieuto por la pérdida sufrida, cerrando el comercio unànimamente sus puertas a la hora del entierro. A las 3 de la tarde púsose en marcha la fúnebre comitiva en la que figuraren ademàs de todos los sacerdotes de la ciudad, religiosas de S. José y los ancianes del Asilo Vilallonga. Fué muy elogiado el hecho de haber asistido a rendir un postrer tributo a la primera autoridad ciudadana una nutrida sección del Colegio de la Inmaculada. Seguia el féretro llevado en el coche de gran lujo del que pendian gasas sostenidas por el teniente de alcalde Sr. Jou, por el Ayuntamiento, se-