La sublevación republicana de Jaca

86 San Lorenzo
Diario del AltoAragón - Domingo, 10 de agosto de 2014
Cultura
Acceso al castillo de
San Pedro de Jaca
La sublevación
republicana de Jaca
José BIBIÁN CARRERA
Licenciado en Derecho. Universidad de Zaragoza
L COMIENZO del Siglo XX, trajo consigo numerosos disturbios y algaradas. En
1901 trajo manifestaciones anticlericales en toda España. En 1909, se regula
el derecho de huelga, la semana trágica de Barcelona y fusilamiento del anarquista Francisco Ferrer, tensiones en las
relaciones con la Santa Sede. Los anarquistas fundan la Confederación Nacional del Trabajo (CNT). Huelga general
revolucionaria. Escalada del terrorismo
en Barcelona. Nace el Partido Comunista de España y en 1921, se produce el desastre del Annual, en Marruecos, donde
un curioso personaje Abd el Krim, que
vivía del presupuesto de España, conocía la organización militar de España,
se levanta en armas contra quien le pagaba, ocasionando miles de bajas en el
ejército español. Este episodio merece
un comentario, pues en los años 70 del
pasado siglo, un militar me lo contó con
todo lujo de detalles, pues participó en
aquellos lamentables hechos.
No se entiende muy bien cómo este líder rifeño, pudo tener acceso a archivos,
documentación reservada, en suma burlar las Juntas Militares de Defensa. Según mi confidente, los camiones llenos
de víveres para las tropas, eran desviados del tránsito, y lo mismo ocurría con
los vagones de tren. El famoso Informe
Picasso demostró negligencias graves
del mando militar, pero el asunto se cerró en falso sin castigar esta falta grave.
Fermín Galán estuvo interno en el Colegio de Huérfanos de Guadalajara, veía
a su madre los fines de semana y en los
periodos vacacionales. En esos colegios
se les inculcaba los valores castrenses y
la mayoría de los alumnos optaban por
niente Galán con su tropa la realizó con
gran orden y pericia militar, después de
tener muchas bajas, demostrando arrojo, gran valor y coraje.
Se propuso la concesión de la Laureada, ya que la calificación de las heridas,
se definieron como graves. Tal vez le pudo la vanidad y posiblemente la envidia.
Lo cierto es que la solicitud de honores
fue desestimada. Sería en 1931, una vez
proclamada la República, el Ministro de
la Guerra don Manuel Azaña, quiso conocer cómo se encontraba el expediente
de solicitud. Se examinó el Expediente
Picasso, que había entregado al Consejo y en él se reconocía que eran coincidentes con los postulados que en los
diferentes artículos del Reglamento de
la Orden de San Fernando contemplaba
para conceder la distinción aunque las
heridas no eran de la magnitud que los
diferentes Partes de Campaña decían,
aunque se reconocía el valor y esforzada
conducta del Capitán de Infantería y que
el número de bajas era inferior a las manifestadas. También que luchó en defensa propia y de su tropa, que tuvieron que
soportar numerosos ataques de los rifeños, en un terreno quebradizo que los
rifeños conocían a la perfección. Sea como fuere, lo cierto es que al Capitán Galán se le concede la Cruz Laureada.
De su experiencia en Marruecos, el
Capitán Fermín Galán además de curtirle en lo personal, vio los desmadres
y excesos del mundo militar, algo debía
hacerse, pues se caminaba en la mala dirección. En el último quinquenio se producen numerosos atentados, la mayoría
de ellos en Barcelona. En los salones reservados de Termas Pallarés se quiso variar la historia de España. Era verano de
1923; Torcuato Luca de Tena de la saga
de los fundadores del ABC, solía tomar
las aguas, esta vez para aliviar una bronquitis; llamó a su hijo Juan Ignacio, que
estaba en Madrid, y le conmino a reunirse con él y el General Sanjurjo, en ese
balneario. Así lo hizo y se encontró con
el General, que era en aquel tiempo Gobernador Militar de Zaragoza. Almorzaron los tres juntos y después el General
se encerró con don Torcuato en un salón
privado. La entrevista duró una hora y
Sanjurjo marchó a Zaragoza. El padre le
conminó de forma tajante:
-¡Nos vamos a Madrid!
-¿Pasa algo? Le preguntó el hijo.
-No puedo decirte, pero nos vamos a
Madrid.
En el viaje apenas hablaron, pero al
padre se le veía preocupado. Días después Juan Ignacio se enteró del asunto.
Sanjurjo había ido a Alhama para comunicar al amigo y confidente su propósito
de sublevarse contra el poder constitu-
ingresar en las Academias para seguir la
carrera de las Armas. Ese colegio, cuando Galán, tenía 250 alumnos, se levantaban a las 6 de la mañana, desayuno y
a las 9 comenzaban las clases. Comida
a las 13,30 y antes sesión de gimnasia.
Por la tarde, estudio, cena y a las 9 todos
en la cama. El uniforme era azul marino,
doble botonadura y en el cuello las siglas
CH (Colegio Huérfanos).
Fermín Galán estudió hasta 1915, en
que ingresa en la Academia Infantería de
Toledo. Su madre decía que era persona
reservada, amigo de leer y pensar, más
que de hablar. Galán juró
fidelidad
a la Bandera el 31 de octubre de 1915 y las prácticas de la Academia
de 1916 fueron
premiadas por
el Rey Alfonso
XIII. El Rey visiNo se entiende muy
tó el Campamenbien cómo este líder
to, y pernoctó
allí. En ese lugar
rifeño pudo tener acceso
se erigió un moa archivos, documentación
numento conmemorativo, era de
reservada, en suma burlar las
granito y sobre
Juntas Militares de Defensa
él se posaba un
águila de bronce, que con una
garra sostenía los
escudos de España y de la Casa de Bor- yente, encarnado por don Manuel Garbón, y con la otra una rama de laurel. cía Prieto del Partido Liberal. Al mismo
Miguel Primo de Rivera, ordenó el re- tiempo, en Barcelona el Capitán Gepliegue en Marruecos (1924), en la zona neral Miguel Primo de Rivera también
donde se encontraba la Unidad de Ga- conspiraba, que fue quien consiguió su
lán, zona sur de Tetuán, allí fue herido propósito. Galán también se sumo a la
y terminó su aventura marroquí . Varias “sanjuanada”, pues algo debía hacerse
veces –como he dicho- intentó ascender para cambiar la imagen de España. En
Fermín Galán por méritos de guerra, pe- 1926, había sido ascendido a Capitán
ro ya fallecido por fusilamiento le distin- por los méritos. Jaca, tenía en 1930 unos
guieron con toda clase de honores. Así 7.000 habitantes, era ciudad tranquila,
es la vida de cruel. La retirada del Te- donde casi nunca pasaba nada y además
era cabeza de diócesis, aunque el ambiente positivo era más bien republicano, por eso cuando llego el 14 de abril
del 31, la expulsión de la Monarquía se
la bautizó como la cuna de la República.
El socialista Largo Caballero acudió en
más de una ocasión a dar conferencias a
sus miembros.
La población de la provincia era un 38
por ciento analfabeta, según dice Eloy
Fernández Clemente, en su libro “Aragón Contemporáneo”, y en el aspecto
cultural uno de sus hijos, el catedrático
de la Universidad de Zaragoza Domingo Miral, fundó en 1927 la primera Universidad de Verano de España, siendo
en la actualidad un lugar de gran actividad cultural estival. Galán se presenta en su destino, el acuartelamiento de
la “Victoria”. En 1930, el orden público
estaba encomendado a la Guardia Civil,
y es Aduana de un destacamento de Carabineros, era por tanto el lugar idóneo
para derribar la monarquía de Alfonso
XIII. Tenía una fiel amistad con Ramón
Acín y mucho tiempo para preparar la
sublevación, y con ello contó con la inestimable ayuda del Partido Alianza Republicana de Manuel Azaña y el Radical
de Marcelino Domingo. Fermín Galán
y García Hernández coinciden en Jaca.
Se creó un Comité de trabajo en el que
García Hernández hizo gran labor, pues
era persona leal, disciplinado, ordenancista y honrado. La CNT quería que el
golpe se hiciera a mediados de octubre,
es detenido ‑entre otros‑ Luis Companys
y sucedió lo de siempre, todos querían
mandar y participar del pastel y las noticias llegaron a las esferas del Gobierno.
Era Gobernador Militar el General Lasheras, al que dedicaron y tiene una calle
en Huesca. Se enteraron que las fuerzas
del golpe bajaban unas en tren y otras en
numerosos camiones que debían juntarse en Ayerbe. El General Lasheras, había
recibido alarmantes noticias del jefe de
la Estación de Orna y salieron al encuentro de los sublevados, acompañados en
su coche oficial de otras autoridades.
Al pasar por Ayerbe recibió en la Casa
Cuartel las novedades que se estaban
produciendo en Jaca. Reiniciaron el viaje hacia Murillo, junto a los Mallos de Riglos y después de sobrepasar Anzánigo,
se encontraron de bruces con el primer
vehículo que bajaba de Jaca. Luego se
toparon con dos autobuses y ordenó que
bajaran sus ocupantes. Se produjo un rifirrafe y la columna de Galán se desplegó
en guerrilla, produciéndose las primeras
víctimas.
El General Lasheras fue herido y trasladado a Triste, donde le dejaron ropa seca.
Las heridas parecían superficiales, pero
trasladado a Huesca falleció a los ocho
días del suceso. Ramón Acín salió al encuentro de la columna de Galán y comunicarles el fracaso del levantamiento en
Huesca y resto del país. Permaneció en
Cillas, y luego escondido con otros compañeros en el carrascal de Prebedo. Galán decidió tomar la iniciativa, a pesar
que las vías del tren se habían cortado
por orden del general Heredia de Zaragoza, cumpliendo órdenes de Madrid.
Fracasó la sublevación, Galán y otros se
entregan; juicio sumarísimo, apenas duró una hora, los cargos contra ellos eran
muy graves y la sentencia delito consumado de rebelión militar, contra el Gobierno legalmente establecido. Galán y
Hernández condenados a la pena capital y a otros cuatro militares a la pena de
reclusión perpetua. Las sentencias fueron redactadas por el auditor Casado, no
admitiéndose petición de clemencia. La
ejecución no se hizo de rogar, trasladados desde el Regimiento Valladolid 74,
al Polvorín de Fornillos. Momentos tristes, donde los dos amigos se fundieron
en un abrazo.