ACCIÓN POPULAR – DERECHOS COLECTIVOS A LA MORALIDAD ADMINISTRATIVA, DEFENSA DEL PATRIMONIO PUBLICO Y LIBRE COMPETENCIA ECONOMICA – Celebración de contratos interadministrativos de tiquetes aéreos nacionales en rutas de SATENA / TIQUETES AEREOS NACIONALES E INTERNACIONALES DE OTROS OPERADORES – Violación del derecho colectivo a la libre competencia En ese orden, AVIATUR es la beneficiaria de la modalidad de contratación directa adoptada por SATENA y los entes públicos vinculados a la presente acción, pues por esta vía se sustraen de los canales de selección previstos por la ley para adjudicar los contratos de suministro de tiquetes aéreos, lo cual se traduce en una restricción de la libre competencia. En efecto, tratándose de los entes públicos ya mencionados los competidores de AVIATUR no pudieron acceder a la porción de mercado que ellos representan en el suministro de tiquetes aéreos puesto que dicho segmento fue “capturado” por AVIATUR merced a los convenios interadministrativos suscritos entre SATENA y los entes públicos vinculados a la acción (ministerios, superintendencias, establecimientos públicos, etc.). En virtud de lo anterior, para la Sala es claro que la suscripción de los convenios interadministrativos entre los entes públicos vinculados a la acción y SATENA constituyen un acuerdo contrario a la libre competencia, pues dicho contrato convierte a SATENA en un intermediario de AVIATUR para ejercer la actividad comercial de suministro de tiquetes aéreos, restringiendo la participación, en igualdad de condiciones, de los demás actores del mercado (otras agencias de viaje), los cuales tienen el derecho de participar en el proceso licitatorio correspondiente. Esta conducta está tipificada como un acuerdo contrario a la libre competencia según se desprende de lo previsto en el artículo 47 del Decreto 2153 de 1992: “ARTICULO 47. ACUERDOS CONTRARIOS A LA LIBRE COMPETENCIA. Para el cumplimiento de las funciones a que se refiere el artículo 44 del presente Decreto se consideran contrarios a la libre competencia, entre otros, los siguientes acuerdos: (…) Numeral adicionado por el artículo 16 de la Ley 590 de 2000. El nuevo texto es el siguiente:> Los que tengan por objeto o tengan como efecto impedir a terceros el acceso a los mercados o a los canales de comercialización.” (Destacado por la Sala). En razón de lo anterior, la Sala considera que la conducta desplegada por SATENA y las diferentes entidades estatales vinculadas a la presente acción configura violación del derecho colectivo a la libre competencia, motivo por el cual la Sala así lo declarará y dispondrá las medidas del caso. En consecuencia, la Sala ordenará a SATENA y a las entidades estatales vinculadas a la presente acción (i) abstenerse en lo sucesivo de celebrar contratos interadministrativos que no tengan relación con el objeto social de SATENA; y (ii) no continuar con la ejecución de los vigentes cuyo objeto consista en el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales de operadores distintos a SATENA. Esta última orden deberá cumplirse pasados seis (6) meses de la ejecutoria de la presente sentencia, término dentro del cual los entes públicos vinculados a la presente acción (ministerios, superintendencias, establecimientos públicos, etc.) deberán efectuar los procesos de contratación pública que legalmente correspondan. TRIBUNAL ADMINISTRATIVO DE CUNDINAMARCA SECCIÓN PRIMERA SUBSECCIÓN “A” Bogotá D.C., diez (10) de abril de dos mil catorce (2014) Magistrado Ponente: Dr. LUIS MANUEL LASSO LOZANO Referencia: Exp. No. 25000-23-24-000-2011-00136-01 Demandante: CARLOS NELSON DUQUE CUADROS Demandado: SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES SATENA Y OTROS ACCIÓN POPULAR SENTENCIA Agotados los trámites procesales, procede el Tribunal a proferir sentencia de primera instancia dentro de la acción popular interpuesta por el señor Carlos Nelson Duque Cuadros contra la empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales SATENA (en adelante SATENA), en procura del amparo de los derechos e intereses colectivos a la moralidad administrativa, defensa del patrimonio público y libre competencia económica1[1]. 1[1] 3). Derechos colectivos enunciados en el escrito de subsanación de la demanda (Fl. 1142 C. N° La demanda El demandante formuló las siguientes pretensiones 2[2] (Fl. 1 C. N° 1): “Primera. Solicito se ordene como MEDIDA CAUTELAR, previa verificación de los hechos y con base en las pruebas aportadas al proceso, el CESE en forma inmediata, de la contratación ilegal que viene presentándose entre la empresa comercial del Estado – SATENA y la agencia de viajes AVIATUR, para la ejecución de contratos interadministrativos. SEGUNDA. Solicito se ordene a SATENA como MEDIDA CAUTELAR, previa verificación de los hechos y con base en las pruebas aportadas al proceso, CESAR en forma inmediata la celebración de contratos interadministrativos que no cumplan exclusivamente con su objeto comercial. Tercera. Que se declare que la Empresa Comercial del Estado SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES-SATENA., representada por su apoderado general, o por quien haga sus veces, ejerce una actividad contractual diferente a su objeto fundamental y que dicha actividad es violatoria de la moralidad administrativa, que transgrede los principios constitucionales de la función pública y afecta los derechos colectivos de la libre competencia económica y la defensa del patrimonio público, creándole así de manera ilegal un monopolio económico a la Agencia de Viajes AVIATUR. CUARTA. Que de acuerdo con la pretensión anterior, se ordene a la empresa comercial del Estado demandada SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES-SATENA, que centre su actividad exclusivamente en lo que le ordenan sus estatutos, que es la prestación de servicio aéreo de transporte y carga en sus propias rutas para las regiones menos desarrolladas del país. QUINTA. Que como consecuencia de la anterior declaración, CESE en forma inmediata y definitiva, la celebración de contratos interadministrativos para el suministro de tiquetes aéreos nacionales, internacionales y nacionales e internacionales de OTROS OPERADORES. SEXTA. Que se declare que al celebrar contratos interadministrativos para el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales de otras rutas y de otros operadores, la Empresa Comercial del Estado SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES-SATENA está El texto de las pretensiones tercera y sexta se toma del escrito de subsanación de la demanda (Fl. 1142 C. N° 3). 2[2] afectando el patrimonio público; al afectar su propio patrimonio y el patrimonio de las entidades estatales contratantes. SÉPTIMA. Que la sociedad demandada Empresa Comercial del Estado demandada (sic) SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES-SATENA acate inmediatamente la orden que su despacho le imparta, según lo dispone el artículo 39 de la ley 472 de 1998.” Las anteriores pretensiones tienen fundamento en los hechos que la Sala pasa a resumir. La empresa SATENA fue creada con el objeto de desarrollar la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo adopte el gobierno para las regiones menos desarrolladas del país. Desde el año 2007 SATENA viene celebrando contratos interadministrativos con diferentes entidades del Estado, cuyo objeto es el suministro de tiquetes aéreos nacionales en sus rutas de operación y tiquetes aéreos nacionales e internacionales de otros operadores. En el año 2010 SATENA celebró contratos interadministrativos para el suministro de pasajes aéreos nacionales e internacionales de otros operadores con el Ministerio de Educación, la Cancillería, la Presidencia de la República, la Dirección General de la Policía Nacional, el ICBF, la Fuerza Aérea Colombiana, el Comando de las Fuerzas Militares, la Superintendencia de Notariado y Registro, el DAS y el Fondo Libertad. De conformidad con lo dispuesto en el literal c) del artículo 2° de la Ley 1150 de 2007 las entidades públicas están autorizadas por la ley para celebrar contratos interadministrativos siempre y cuando tengan relación directa con el objeto de la entidad ejecutora. Al celebrar contratos interadministrativos para el suministro de tiquetes aéreos nacionales en sus rutas de operación, la empresa SATENA está cumpliendo con su objeto, sin embargo cuando celebra este tipo de contratos para el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales de otros operadores se desvía de su objeto; además celebra un contrato que no está en condiciones de ejecutar puesto que sus rutas son limitadas a nivel nacional y está beneficiando a otras aerolíneas que en el mercado de transporte aéreo son su competencia directa. La celebración de estos contratos interadministrativos obedece a intereses ocultos y fraudulentos demostrables que solo persiguen el beneficio de un tercero. El artículo 14 de la Ley 1150 de 2007, relativo al régimen contractual de las Empresas Industriales y Comerciales del Estado, establece que dichas empresas están sometidas al Estatuto General de Contratación de la Administración Pública, excepto las que compiten con el sector privado, las cuales se rigen por las disposiciones aplicables a su actividad económica y comercial, sin perjuicio de lo previsto en el artículo 13 de dicha ley. SATENA es una Empresa Comercial del Estado que compite con el sector privado, en este caso Avianca, Aerorepública, Aires, Ada, Easy Fly, entre otras, por lo que cabe preguntarse la razón por la cual vende pasajes de dichas aerolíneas. La actividad de SATENA debe limitarse a vender sus tiquetes y llenar los cupos de sus aviones; vender pasajes de sus competidores no hace parte del giro ordinario de su actividad comercial. SATENA vende tiquetes de sus competidores para beneficiar los intereses económicos de la agencia de viajes AVIATUR (en adelante AVIATUR), basándose en una figura que bautizaron como “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial”, la cual no existe ni en el Código de Comercio ni en el Código Civil, por lo que no cabe duda que dicha figura fue creada para ejecutar los contratos interadministrativos que celebra con las demás entidades, es decir, AVIATUR suministra los tiquetes aéreos nacionales e internacionales de otros operadores aéreos a las diferentes entidades públicas. La ley ordena que dichos contratos se deben suscribir siempre que las obligaciones derivadas de los mismos tengan relación directa con el objeto de la entidad ejecutora señalado en la ley o sus reglamentos, por lo que la actividad de SATENA se aparta de su verdadera actividad comercial. El artículo 13 de la Ley 1150 de 2007, que trata de los principios generales de la actividad contractual, dispone que las entidades no sometidas al Estatuto General de Contratación deben aplicar los principios de la función administrativa y de la gestión fiscal previstos en los artículos 209 y 267 de la Constitución Política. SATENA viola estos postulados al favorecer de forma exclusiva a la agencia de viajes AVIATUR con la entrega directa de transacciones millonarias para la ejecución de todos los contratos interadministrativos, por lo que se aleja de la finalidad de los principios constitucionales y transgrede la normatividad aplicable. Con el fIn de captar nuevos clientes en beneficio de la agencia de viajes AVIATUR, SATENA se dirige a las entidades públicas presentando una oferta de suministro de servicios aéreos, donde además de ofrecer tiquetes en rutas operadas por SATENA también ofrece los servicios de agencia de viajes para el suministro de tiquetes nacionales e internacionales en rutas de otros operadores. SATENA no actúa en desarrollo de su actividad comercial, esto es, el transporte aéreo de pasajeros y de carga en sus propias rutas a las regiones menos desarrolladas del país según sus estatutos y lo dispuesto en la ley. A pesar de que en el país existen otras agencias de viajes con igual o mayor capacidad que AVIATUR, SATENA le entrega a esta exclusivamente la ejecución de los contratos interadministrativos, creando así un monopolio ilegal. SATENA no tiene ningún convenio con otras aerolíneas, de modo que está ofreciendo servicios de agencia de viajes que no puede prestar, pero se los cede a AVIATUR, además que ofrece los servicios de suministro de tiquetes internacionales con el propósito de favorecer los intereses de AVIATUR. La adjudicación directa de contratos millonarios de SATENA a AVIATUR para ejecutar todos los contratos interadministrativos de suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales, además de afectar la moralidad administrativa también causa lesión de los derechos a la igualdad y a la libre competencia económica, por cuanto este monopolio aísla a las demás agencias de viajes del país que están en capacidad de prestar el mismo servicio, en razón de su capacidad económica, financiera, logística, infraestructura etc. En aplicación de los principios que rigen la contratación pública, lo correcto sería que SATENA realizara la venta de sus tiquetes en forma tal que los funcionarios públicos viajen en rutas de SATENA, es decir, que esta ejecute directamente los contratos. Por otra parte, las empresas deberían realizar un proceso licitatorio para el suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales donde participen las diferentes agencias de viajes del país en condiciones de igualdad y libre competencia. AVIATUR no siempre ha ganado los procesos licitatorios a los que se ha presentado, lo que desvirtúa el pretexto de SATENA según el cual es la agencia de viajes más grande del país. La alianza descrita está creando un monopolio por parte de AVIATUR, valiéndose de la figura de los contratos interadministrativos y utilizando a SATENA como medio para así adjudicarse de manera directa los contratos para el suministro de pasajes aéreos nacionales e internacionales que requieren las entidades públicas. La actividad ilegal de SATENA y AVIATUR afecta el patrimonio de las diferentes agencias de viajes del país puesto que estas licitaban en sana competencia y lograban la adjudicación de los contratos para el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales a las diversas entidades públicas, pero hoy en día han perdido el derecho de licitar en esas entidades como consecuencia de dicha actividad ilegal. También se está afectando el patrimonio público de SATENA y de las demás entidades públicas que suscriben los contratos interadministrativos, puesto que AVIATUR cobra a SATENA en cada “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” conceptos que comprenden gastos directos, gastos financieros y costos de ventas. En consecuencia, cuando las entidades públicas compran tiquetes bajo esta modalidad, sólo obtienen el descuento que otorgan las aerolíneas pero no se benefician de los descuentos que las agencias de viajes suelen dar como contratistas cuando se realizan licitaciones. Esto se demuestra con los pliegos de condiciones que se aportan con la demanda, donde se evidencia que las diferentes entidades solicitan descuentos y se da un valor como factor calificable a la agencia de viajes que ofrezca el mayor porcentaje de descuentos en la propuesta. A las entidades públicas les sale más costoso comprar tiquetes a través de SATENA – AVIATUR, pues los costos que esta cobra a aquella imposibilitan que SATENA pueda ofrecer descuentos, los cuales sí obtenían las entidades públicas cuando contrataban con otras agencias de viajes a través de licitación pública. Lo que SATENA aparentemente gana con los mencionados contratos lo pierde al pagar todos los costos a AVIATUR. Adicionalmente la responsabilidad en caso de cualquier siniestro la está asumiendo SATENA, pues está comprometiendo su responsabilidad como aerolínea y al carecer de interline 3[3] está comprometiendo su responsabilidad en forma directa, pues si se accidenta cualquier avión de otra aerolínea comercial con un pasajero que hubiese embarcado SATENA, es esta la que asumiría las consecuencias legales que se derivan del contrato de transporte. El monopolio organizado por SATENA y AVIATUR puede llevar a la quiebra a muchas agencias de viajes por falta de la libre competencia económica. En la práctica SATENA hace una cesión a AVIATUR de los contratos interadministrativos a los que se ha hecho mención. En el año 2007, cuando se inició este monopolio, AVIATUR tenía un capital de trabajo negativo en $-2.040´000.000.oo, un nivel de endeudamiento de 84.1% y un índice de liquidez de 0.96%, El actor popular define interline como el convenio que realizan las diferentes aerolíneas a nivel nacional e internacional que hacen parte de la IATA, consistente en que dependiendo de los itinerarios de los vuelos, los pasajeros de una aerolínea pueden viajar en vuelos de otras que hagan parte del convenio. 3[3] lo que significa que no podría ser adjudicataria en ningún proceso licitatorio compitiendo con otras agencias, pues sus índices financieros no le permiten ser un fuerte competidor. Coadyuvancia El señor Onofre Varón Velandia coadyuvó la demanda manifestando que le asistía razón al demandante ya que SATENA, con su actuación, desconoció los principios que rigen la administración pública, viola normas administrativas y, además, transgrede normas penales relacionadas con los delitos contra la administración pública (Fl. 1165 C. N° 3). También coadyuvó las pretensiones de la demanda el señor José Armando Villarraga, quien manifestó que SATENA se apartó de su objeto con la irregular celebración de los contratos aludidos, violando el derecho a la moralidad administrativa, la igualdad y la libre competencia económica, pues también afecta a las demás agencias de viajes del país (Fl. 1168 C. N° 3). Contestaciones de la demanda Por conducto de apoderada judicial, la NACIÓN – MINISTERIO DE DEFENSA – POLICÍA NACIONAL contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1196 C. N° 3). La Policía Nacional contrata con SATENA de acuerdo con lo preceptuado en el literal c) del numeral 4° del artículo 2° de la Ley 1150 de 2011 y el artículo 89 del Decreto 2474 de 2008, el cual establece que las entidades señaladas en el artículo 2 de la Ley 80 de 1993 pueden celebrar directamente contratos entre ellas, siempre que las obligaciones de los mismos tengan relación directa con el objeto de la entidad ejecutora. Si bien existen varias aerolíneas en el país, estas no contratan directamente con la Policía Nacional por cuanto no cubren la totalidad de las rutas requeridas por la institución motivo por el que el suministro de pasajes se contrata con SATENA por cuanto ofrece mayor cobertura y sus tarifas son más económicas que las otras. La Policía Nacional, para celebrar este tipo de contratos, se basa en un estudio de mercado, de necesidad y conveniencia, acogiéndose al mejor oferente y aprovechando los beneficios de la libre competencia. La Policía Nacional es ajena a la relación entre SATENA y AVIATUR. Excepciones: - Libre competencia. La libre competencia resulta de la concurrencia libre al mercado de oferentes que producen bienes o servicios y consumidores que toman decisiones libres. La Policía Nacional contrató con SATENA el suministro de pasajes aéreos aplicando el principio de la libre competencia, observando el mejor servicio y la mejor economía para la institución policial. - Falta de legitimación en la causa por pasiva. La Policía Nacional contrata directamente el suministro de pasajes aéreos directamente con SATENA, y esta aerolínea es libre de ejecutar el contrato con la agencia que estime pertinente, sin que dicha relación sea del resorte de la Policía Nacional. Por conducto de apoderado judicial el DEPARTAMENTO NACIONAL DE PLANEACIÓN contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1209 C. N° 3). El Departamento Nacional de Planeación suscribió con SATENA únicamente el contrato N° DPN-498-10, contrato interadministrativo regido por la Ley 80 de 1993, la Ley 1150 de 2007 y sus decretos reglamentarios. Para la suscripción de este contrato la entidad tuvo en cuenta que SATENA es una empresa comercial del Estado, vinculada al Ministerio de Defensa Nacional, dotada de personería jurídica, autonomía administrativa y financiera y capital independiente, por lo que puede celebrar toda clase de actos y contratos en cumplimiento de sus funciones, inclusive constituir sociedades o compañías con otras personas naturales o jurídicas. En virtud del principio de colaboración y coordinación previsto en la Ley 489 de 1998, las autoridades administrativas deben garantizar la armonía en el ejercicio de las respectivas funciones con el fin de lograr los cometidos y fines estatales. En consecuencia prestarán su colaboración a las demás entidades para facilitar el ejercicio de sus funciones. Los convenios interadministrativos son el mecanismo por medio del cual se hace eficaz el principio de colaboración. SATENA ha celebrado contratos interadministrativos para la prestación del servicio de transporte aéreo y suministro de tiquetes en rutas nacionales e internacionales conforme a los esquemas de servicios requeridos por las entidades públicas, actuando también como mandatario para gestionar el suministro de entrega de tiquetería en las rutas nacionales e internacionales operadas por otras aerolíneas donde SATENA no tenga operación. De acuerdo con el literal c) del numeral 4 del artículo 2 del Decreto 1150 de 2007 y el 78 del Decreto 2474 de 2008, las entidades del Estado pueden celebrar contratos bajo la modalidad de contratación directa, siempre que las obligaciones derivadas del mismo tengan relación con el objeto de la entidad ejecutora. Adicionalmente, de acuerdo con el inciso segundo del artículo 40 de la Ley 80 de 1993, las entidades pueden celebrar los contratos y acuerdos que permitan la autonomía de la voluntad y requieran el cumplimiento de los fines estatales. Estas razones sirvieron de fundamento jurídico para que el Departamento Nacional de Planeación celebrara el contrato antes aludido. El Departamento Nacional de Planeación no es competente para revocar actuaciones contractuales o limitar el objeto de SATENA, puesto que no posee control jerárquico ni por vía de tutela. No existe elemento probatorio alguno que demuestre que el Departamento Nacional de Planeación haya afectado o puesto en peligro derechos e intereses colectivos, toda vez que las valoraciones hechas por la parte actora parten de la premisa errada de incumplimiento de las competencias de cada uno de los entes demandados. No basta la simple denuncia de una conducta imputable a título de aparente omisión o de acción no ajustada a la normatividad para dar por establecida la vulneración del derecho a la moralidad administrativa, toda vez que se debe demostrar una conducta contraria a los principios y fines de la administración pública. Lo que el actor pretende es que se limite o se revoquen actos de naturaleza contractual de SATENA, mezclando impropiamente varias competencias administrativas, además no ha demostrado cuál es el nexo causal entre la supuesta conducta imputable a las demandadas a título de omisión y la no demostrada afectación a los derechos colectivos. No existe siquiera demostración del daño. Por conducto de apoderado judicial, la Nación, MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1221 C. N° 3). Las funciones de SATENA están previstas en la Ley 80 de 1968, cuyo artículo 2 literal d) prevé como función de esta entidad la de transportar funcionarios públicos y pasajeros, entre otros. El artículo 2 numeral 4°, literal c) de la Ley 1150 de 2007 permite a las entidades públicas regidas por la Ley 80 de 1993, como es el caso del Ministerio de Defensa Nacional, celebrar contratos interadministrativos con entidades que tengan un objeto directamente relacionado con el objeto del contrato. Con el fin de facilitar la ejecución de los contratos de transporte aéreo, con beneficios para la Fuerza Aérea de Colombia, SATENA tiene toda la capacidad para celebrar contratos en cuenta comercial con agencias de viajes, lo cual no implica exclusividad, además que dicho contrato no afecta la relación de SATENA y el Ministerio de Defensa Nacional – Fuerza Aérea de Colombia. Las empresas estatales no reguladas por la Ley 80 de 1993 y la Ley 1150 de 2007 tienen total libertad contractual, por expresa disposición del artículo 16 de la Ley 1150 de 2007, y para desarrollar sus objetos contractuales pueden acudir a todas las figuras del derecho privado. La falta de tipificación del “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” no significa que no exista este tipo de contrato, toda vez que son múltiples los contratos atípicos que todos los días se celebran en el contexto mercantil, en donde la voluntad de las partes es el ente regulador de los mismos. Los contratos que el Ministerio de Defensa Nacional ha celebrado con SATENA han tenido por objeto el servicio de transporte aéreo en el marco de las funciones que la Ley 80 de 1968 asignó a SATENA. Los señalamientos del actor popular son contradictorios puesto que inicialmente indica que AVIATUR es un monopolio que aísla a las demás agencias de viajes y posteriormente señala que existen otras agencias de viajes que están en capacidad de prestar iguales o mejores servicios, caso en el cual, de ser cierta dicha afirmación, no hay lugar a hablar de monopolios. Las actuaciones derivadas de alianzas comerciales y /o estratégicas no constituyen prácticas restrictivas de la competencia, sino integraciones empresariales para aunar esfuerzos con el fin de ser competitivos en un contexto de globalización, de libre competencia, de libertad de empresa y de iniciativa económica que no puede interpretarse como desleal. SATENA es una empresa comercial del Estado, vinculada al Ministerio de Defensa Nacional, creada por la Ley 80 de 1968, modificada por el Decreto 2344 de 1971 y 2180 de 1984 entre otros, y el Acuerdo N° 002 de 2001. De acuerdo con las funciones asignadas por la ley y los estatutos, SATENA puede celebrar toda clase de actos y contratos en cumplimiento de sus funciones. Al tenor de lo previsto en el artículo 85 de la Ley 489 de 1998, entidades como SATENA realizan actividades de naturaleza industrial o comercial y de gestión económica, lo que significa que estas empresas desarrollan funciones que no son tradicionalmente propias del Estado sino de los particulares. SATENA realiza dos tipos de contratación, una de índole comercial y otra de gestión administrativa, sujetándose la primera a las disposiciones del derecho privado. Conforme a lo dispuesto por el artículo 16 de la Ley 1150 de 2007, la contratación relacionada con la administración y funcionamiento de la entidad se rige por las disposiciones legales aplicables a su actividad, razón por la que SATENA no está sujeta al Estatuto de Contratación de la Administración Pública. La ley 1427 de 2010 modificó la naturaleza jurídica de SATENA, quedando organizada como sociedad de economía mixta por acciones del orden nacional. Para dar cumplimiento a la política de renovación empresarial, desde el año 2007 SATENA creó una unidad de negocios para lo cual suscribió un contrato de “Oficina en Cuenta Comercial” con AVIATUR, la agencia de viajes más grande del país, que cuenta con la infraestructura, experiencia, tecnología y recurso humano adecuado para atender este tipo de negocios. Por tratarse de un negocio que se rige por las disposiciones del derecho privado, la contratación se hizo directamente con AVIATUR. A través del “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” SATENA está en condiciones de ofrecer los servicios de transporte aéreo de pasajeros en sus rutas de operación, y para el suministro de tiquetes nacionales e internacionales de otros operadores (en donde SATENA no opera), conforme a los esquemas de servicios requeridos por las entidades públicas. En aplicación de los principios constitucionales que rigen la función pública, las autoridades administrativas deben coordinar sus actuaciones para el adecuado cumplimiento de los fines del Estado. La Ley 489 de 1998 determina de manera prioritaria el desarrollo del principio de coordinación entre las autoridades administrativas y los organismos del respectivo sector, en consecuencia deben prestar su colaboración a las demás entidades para facilitar el ejercicio de sus funciones. Uno de los mecanismos por medio del cual se hace eficaz dicha colaboración es el convenio interadministrativo, que consiste en la coordinación de esfuerzos al interior del Estado para lograr sus fines. El accionante no demostró que dentro de los contratos suscritos por SATENA y algunas entidades públicas se hayan producido conductas contrarias a derecho y en detrimento patrimonial, su escrito consiste en meras apreciaciones subjetivas mas no de hechos concretos que demuestren que los funcionarios públicos actuaron en forma arbitraria y alejada del fundamento legal de las normas a las cuales debe atenerse el administrador público. Para que se concrete violación del derecho a la moralidad administrativa debe existir conexidad con otros derechos y principios y transgresión al orden jurídico, sumado a la existencia de prácticas corruptas, dolo o mala fe por parte del servidor público, desviación de poder y favorecimiento de intereses individuales. Por conducto de apoderado judicial la entidad DEPARTAMENTO ADMINISTRATIVO DE SEGURIDAD Y SU FONDO ROTATORIO, contestó la demanda en los términos que a continuación se exponen (Fl. 1281 C. N° 3). El Departamento Administrativo de Seguridad, en cumplimiento de la misión institucional de producir inteligencia estratégica para garantizar la seguridad interior y exterior del Estado, así como las funciones establecidas en la ley, requiere el desplazamiento de funcionarios o contratistas a diferentes puntos del territorio nacional y en algunos casos fuera del país, razón por la que es necesario acudir a una empresa de las características de SATENA con el fin de que la misma preste el servicio de transporte aéreo. El Departamento Administrativo de Seguridad cumplió a cabalidad con la etapa contractual y precontractual que originó la suscripción del contrato con SATENA, desde el momento que se presentó la necesidad, siguiendo con la disponibilidad presupuestal para el efecto, su conveniencia, justificación, solicitud de la propuesta, especificaciones técnicas, celebración del contrato, acta de iniciación, adiciones etc., todo lo cual está debidamente soportado. Actuando a través de apoderado judicial, la entidad MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES contestó la demanda en los términos que a continuación se resumen (Fl. 1340 C. N° 3). El Ministerio de Relaciones Exteriores celebró con SATENA el Contrato Interadministrativo N° 031 de 28 de enero de 2010, cuyo objeto consistió en la prestación del servicio de agencia de viajes y suministrar los tiquetes aéreos nacionales e internacionales para el desplazamiento de funcionarios, dependientes y contratistas del Ministerio de Relaciones Exteriores y su Fondo Rotatorio. Las pretensiones de la demanda resultan improcedentes teniendo en cuenta que su prosperidad depende de la prueba irrefutable de la violación o amenaza a los derechos colectivos, de modo que deben configurarse todos los elementos del daño como una lesión injusta, evidente, cierta, actual o futura de tales derechos y, además, debe probarse que la parte demandada es la causante del daño. En ningún caso se presenta una amenaza o puesta en peligro de un derecho colectivo por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores, pues las manifestaciones del accionante de ninguna manera demuestran que dicha entidad haya actuado de manera contraria a la Constitución Política y a la ley. En lo que respecta al derecho a la moralidad administrativa, no se demostró que las actuaciones del Ministerio de Relaciones Exteriores contradigan los intereses de la colectividad y, específicamente, el desarrollo de los fines estatales, pues aún cuando se evidenciara una irregularidad de orden legal, lo cierto es que por ese simple hecho no se configura violación de este derecho colectivo. En el caso bajo estudio el accionante no demostró que el Ministerio de Relaciones Exteriores haya actuado por razones de conveniencia u oportunidad para satisfacer algún interés particular, además que tampoco está acreditado que esa cartera haya producido detrimento patrimonial. Frente al derecho a la libre competencia económica, no es posible determinar que determinada conducta interrumpe el ejercicio de este derecho, hasta tanto dicha conducta sea estudiada y se concluya que, efectivamente, restrinja la competencia. Excepciones: - Inepta demanda por falta de los requisitos señalados en el artículo 137 del C.C.A. La parte actora omitió relacionar los fundamentos de derecho de sus pretensiones, expresar las normas violadas y explicar el concepto de su violación. - Falta de legitimación por pasiva. Se debe demostrar con pruebas suficientes que el Ministerio de Relaciones Exteriores ha contrariado el ordenamiento jurídico, - Moralidad administrativa. En los hechos narrados por el accionante no se observa con claridad la acción u omisión específica por parte de las entidades públicas demandadas, especialmente por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores. Por conducto de apoderado judicial la entidad INSTITUTO COLOMBIANO DE BIENESTAR FAMILIAR (ICBF), contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1396 C. N° 3). El ICBF tiene con SATENA un contrato interadministrativo vigente, cual es el N° 061 de 21 de febrero de 2011, cuyo objeto es el suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales para los servidores públicos, contratistas y menores que requieran la adopción de medidas especiales de protección, el cual está justificado técnica y jurídicamente. En el presente caso no se configuró violación o amenaza de ningún derecho colectivo, sino que por causa de una información tendenciosa y sin fundamento por parte de un ciudadano se pretende generar desconfianza en las actuaciones administrativas del ICBF, sin tener en cuenta las consecuencias que de ello se derivan en detrimento de una adecuada administración de justicia. Excepciones: - Falta de legitimación en la causa por pasiva. El accionado no es el ICBF sino SATENA. La relación del ICBF con SATENA obedece a un contrato interadministrativo cuyo objeto es el suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales para el ICBF, contratistas y menores que requieran medidas especiales de protección. - Inexistencia o falta de causa para demandar. Se deben tener en cuenta las justificaciones técnicas y jurídicas planteadas por el ICBF, ya que los actos proferidos dentro del proceso contractual interadministrativo se fundaron en razones existentes, obedeciendo a una causa que en todo caso se sujetó al orden establecido. - Inexistencia de violación y transgresión de normas constitucionales y legales. No se vulneraron los derechos colectivos a la moralidad administrativa, al patrimonio público y a la libre competencia económica ya que se ha cumplido cabalmente la normatividad aplicable a la contratación que se cuestiona. Actuando a través de apoderada judicial la CÁMARA DE REPRESENTANTES contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1429 C. N° 3). La narración de los hechos expuesta en la demanda sólo se refiere a la empresa SATENA y a la empresa AVIATUR, por lo que la Cámara de Representantes no puede responder por los mismos. La Cámara de Representantes tiene suscritos los contratos N° 154 de 29 de abril de 2010 y 057 de 11 de febrero de 2011 con la agencia de viajes Subatours, para la adquisición de pasajes aéreos tanto nacionales como internacionales, razón por la cual no existen razones jurídicas ni elementos fácticos que permitan o justifiquen su vinculación al presente asunto. Por conducto de apoderado judicial la entidad SUPERINTENDENCIA DE NOTARIADO Y REGISTRO contestó la demanda en los términos que a continuación se resumen (Fl. 1461 C. N° 3). La Superintendencia de Notariado y Registro suscribió el Contrato Interadministrativo N° 113 de 2010 con SATENA, con el cual la entidad pretende cumplir las funciones previstas en el Decreto 412 de 2007, algunas de las cuales exigen el desplazamiento de sus funcionarios a las diferentes zonas del país, tal y como se justificó en la Resolución N° 5768 de 28 de junio de 2010, en virtud de la cual se justificó la contratación directa a través del contrato mencionado. La Superintendencia de Notariado y Registro realizó un estudio completo sobre la contratación de pasajes para sus funcionarios, encontrando en la propuesta de SATENA una oferta conveniente para la entidad. Por intermedio de apoderado, la entidad MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1476 C. N° 3). Los contratos interadministrativos celebrados por el Ministerio de Educación Nacional y SATENA se ajustan a la ley. La entidad se ha visto beneficiada de dichos contratos teniendo en cuenta que no cuenta en su planta con personal especializado para realizar los desplazamientos de sus funcionarios, además que obtiene descuentos que permiten a los comisionados desplazarse con las tarifas más económicas. Durante el año 2010 se adquirieron 779 tiquetes con la aerolínea SATENA para los diferentes destinos a los que tiene cubrimiento, lo que representa una participación del 16.03% con relación al total de tiquetes expedidos. La expedición de tiquetes depende de muchos factores, entre ellos que el comisionado pueda atender sus compromisos y cumplir con los horarios de la comisión. El Ministerio de Educación Nacional celebró con la empresa SATENA los contratos N°s 236 de 2008, 525 y 263 de 2009 y 102 de 2010, este último para el suministro de tiquetes aéreos nacionales en sus rutas de operación y nacionales e internacionales de otros operadores, como también los servicios bajo la modalidad de vuelos charter para el desplazamiento de los directivos, servidores y/o invitados especiales del Viceministerio de Educación Preescolar, Básica y Media y sus dependencias, del Viceministerio de Educación Superior y sus dependencias, y el despacho de la Ministra de Educación Nacional. El Ministerio de Educación Nacional, de conformidad con lo dispuesto en el literal c) del numeral 4° del artículo 2 de la Ley 1150 de 2007, reglamentado por el artículo 78 del Decreto 2474 de 2008, está facultado para suscribir contratos interadministrativos. Excepciones: - Improcedencia de la acción popular para el caso concreto. Las pretensiones de la demanda no tienen cabida o manera de prosperar, ni sustento técnico para demostrar la necesidad del objetivo que persigue, ni el actor es directamente afectado o actúa como apoderado de alguno de los presuntos perjudicados, ni ha demostrado el daño contingente o el peligro que es necesario hacer cesar. - Falta de pruebas. El demandante no presentó prueba alguna que demuestre la violación de los derechos colectivos, menos aún está legitimado para actuar en representación de algún afectado ni ha demostrado la existencia de algún perjudicado de la comunidad. - Improcedencia del incentivo económico. Es necesario recordarle al actor que la Ley 1425 de 2010 derogó los artículos 39 y 40 de la Ley 472 de 1998, que tratan de los incentivos en las acciones populares y de grupo. La EMPRESA INDUSTRIAL Y COMERCIAL DEL ESTADO SERVICIO AÉREO A TERRITORIOS NACIONALES (SATENA) compareció por conducto de apoderado judicial, quien contestó la demanda en los siguientes términos (Fl. 1490 C. N° 3). Se observa una interpretación subjetiva del demandante en cuanto al objeto social de SATENA, pretendiendo hacer ver que la empresa se está desviando del mismo, desconociendo por lo demás la sentencia del Consejo de Estado, Sección Quinta, con ponencia del doctor Darío Quiñones Pinilla. Debe tenerse en cuenta que el objeto de SATENA consiste en la prestación del servicio de correo, carga y pasajeros y éste es el servicio contratado bajo la modalidad de convenio interadministrativo. De acuerdo con las funciones previstas en la Ley 80 de 1968, en su artículo 2, no existen limitaciones en las rutas a nivel nacional. SATENA, como empresa comercial del Estado, debe desplegar toda su actividad comercial de conformidad con el derecho privado, tal como se explica en la Sentencia C-352 de 1998 de la Corte Constitucional. SATENA ha suscrito alianzas estratégicas para desarrollar su objeto social, el cual no se traduce en la prestación de un servicio aéreo en zonas subdesarrolladas como lo interpreta el accionante. Cada contrato celebrado por SATENA se encuentra soportado no sólo en el desarrollo de su objeto social, sino además dentro de las normas que rigen los mismos, como el caso del artículo 93 de la Ley 489 de 1998. SATENA desarrolla su objeto social de acuerdo al régimen de derecho privado que le corresponde, por tanto debe comportarse como un particular, máxime cuando de su actividad y gestión comercial depende su autosostenibilidad. SATENA, en cuanto a su desarrollo y gestión comercial, no se regula por el Estatuto de Contratación Estatal, pues la misma de acuerdo con la Ley 1150 de 2007 fue excluida del mismo. Entre SATENA y AVIATUR se suscribió el “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” el cual si bien no está contemplado en el Código de Comercio o el Código Civil, también lo es que corresponde a un contrato innominado o atípico, el cual es legal dado que impera la voluntad de las partes y no contraría normas de orden público, más aún cuando SATENA lo celebró con base en lo reglado en el artículo 93 de la Ley 489 de 1998, en la medida en que el mismo contribuye al desarrollo de su objeto social. A través del Ministerio de Defensa Nacional se creó el Grupo Social Empresarial del Sector Defensa (GSED), al cual pertenece SATENA, cuyo objetivo estratégico corporativo consiste en dirigir y orientar a las empresas pertenecientes hacia la competitividad y la productividad, con un fin común que es el de apoyar la misión de la Fuerza Pública, velar por el bienestar y la seguridad social de sus miembros, para lo cual se generan y desarrollan alianzas estratégicas. SATENA, en el año 2007, determinó hacer una alianza con AVIATUR, teniendo en cuenta que dicha agencia contaba con reconocimiento, tecnología y la infraestructura requerida que le permitía a SATENA tener confianza en el servicio ofrecido. SATENA tuvo en cuenta que AVIATUR contaba con licencias IATA, Registro Nacional de Turismo, Certificado de Calidad Turística ICONTEC aprobado el 30 de noviembre de 2006, Certificación ISO 9001:2000 aprobado el 25 de mayo de 2005, un amplio portafolio de servicios, entre ellos central de reservas 24 horas los 365 días del año, cobertura a nivel nacional e internacional, apoyo de proveedores de servicios como Avianca, Aerorepública, etc. La contratación con AVIATUR significó muchas ventajas, entre ellas posicionamiento de la marca en las entidades estatales, prestación de un excelente servicio, manejo y control de un solo proveedor, incremento en ventas de las rutas de SATENA, crecimiento en ingresos bajo esta contratación y ofrecimiento de tarifas reales con el compromiso de otorgar las más económicas. Teniendo en cuenta que durante el lapso 2007 – 2009 se observó un incremento en las solicitudes y crecimiento de las negociaciones realizadas, en enero de 2010 se invitó a varias agencias de viajes que cumplieran con los requisitos de experiencia, cumplimiento, tecnología e infraestructura similar a la que se manejaba con AVIATUR, para establecer la viabilidad de contar con más proveedores. Se recibieron propuestas de las agencias BDC Travel y Expreso Viajes y Turismo, no obstante, después de realizar el estudio respectivo, se advirtieron desventajas como mayor carga administrativa para SATENA, menor margen de utilidad y, además, que no contaban con la cobertura del servicio a nivel nacional e internacional. Por el contrario, la relación de SATENA con AVIATUR ha representado acogida por parte de las entidades estatales, incremento de las negociaciones año tras año e incremento anual del ingreso por utilidades bajo esta contratación. SATENA no está abusando del poder dominante, simplemente se comporta como un comerciante habilitado por la ley. Excepciones: - Inexistencia de las acciones u omisiones que conlleven a la vulneración de los derechos colectivos por parte de SATENA. SATENA es una empresa comercial del Estado, vinculada al Ministerio de Defensa Nacional, creada por la Ley 80 de 1968 y su Decreto 2344 de 1971, cuenta con autonomía y patrimonio propio y dentro de sus funciones, entre otras, se encuentran: a) Prestar el servicio aéreo de carga, pasajeros y correo, en las regiones menos desarrolladas del país, b) Vincular apartadas regiones del país a la economía y vida nacional por medio del servicio aéreo. A través del Ministerio de Defensa Nacional se creó el Grupo Social Empresarial del Sector Defensa (GSED), al cual pertenece SATENA, cuyo objetivo estratégico corporativo consiste en dirigir y orientar a las empresas pertenecientes hacia la competitividad y la productividad, con un fin común que es el de apoyar la misión de la Fuerza Pública, velar por el bienestar y la seguridad social de sus miembros, para lo cual se generan y desarrollan alianzas estratégicas. SATENA, en el año 2007, determinó hacer una alianza con AVIATUR, teniendo en cuenta que dicha agencia contaba con reconocimiento, tecnología y la infraestructura requerida que le permitía a SATENA tener confianza en el servicio ofrecido y, además, por cuanto se trata de un negocio que se rige por las disposiciones del derecho privado por corresponder a la actividad comercial de SATENA. En este tipo de contratación no se da aplicación a lo dispuesto en la Ley 80 de 1993 y sus decretos reglamentarios. A partir de la expedición de la Ley 1150 de 2007 ningún tipo de contratación que lleve a cabo SATENA se rige por la normatividad de contratación pública. A través del “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” SATENA está en condiciones comerciales para ofrecer los servicios de transporte aéreo de pasajeros en sus rutas de operación y para el suministro de tiquetes nacionales e internacionales de otros operadores (en donde SATENA no opere), conforme a los esquemas de servicios requeridos por las entidades públicas. Como ya se dijo, SATENA es una empresa comercial del Estado, vinculada al Ministerio de Defensa Nacional, creada por la Ley 80 de 1968, modificada por los decretos 2344 de 1971 y 2180 de 1984 y el Acuerdo N° 002 de 2001, hoy en transición a Sociedad de Economía Mixta acorde a lo reglado en la Ley 427 de 2010. Dentro del catálogo asignado en las leyes y estatutos, SATENA puede celebrar toda clase de actos o contratos en cumplimiento de sus funciones, inclusive constituir sociedades o compañías con otras personas naturales o jurídicas, conforme a las disposiciones legales vigentes sobre la materia. De conformidad con el artículo 85 de la Ley 489 de 1998 este tipo de entidades desarrollan actividades de naturaleza industrial o comercial y de gestión económica, lo que significa que desarrollan actividades que no son tradicionalmente propias del Estado sino de los particulares. Del contenido de las disposiciones antes anotadas, se concluye que tanto el constituyente como el legislador le otorgan a la colaboración efectiva entre las autoridades administrativas una importancia en la consecución de los fines del Estado. Uno de los mecanismos por medio del cual se hace eficaz esa colaboración es a través de los convenios interadministrativos que materialicen la coordinación de esfuerzos al interior del Estado para lograr sus fines. Teniendo en cuenta que la finalidad del actor no es la salvaguarda de los derechos e intereses colectivos, sino su desacuerdo con SATENA por no haber suscrito el contrato con las firmas Calitours y Subatours, es pertinente manifestar que mediante Oficio N° 89112 de 23 de noviembre de 2008 el Director de Vigilancia Fiscal de la Contraloría General de la República dio respuesta a la denuncia instaurada por el señor Orlando Guevara Silva, por los mismos hechos que hoy son objeto de cuestionamiento, de lo cual se evidencia que el actor pretende desnaturalizar el objeto de la acción popular y más bien tratar de proteger intereses de terceros. - Nadie puede ser obligado a cumplir con lo imposible. SATENA no puede ser obligada a aplicar el Estatuto de Contratación Administrativa, cuando la misma ley la exceptúa de tal cumplimiento. - Buena fe. SATENA ha actuado bajo los postulados de la buena fe que rige el Estado Social de Derecho. Por conducto de apoderada judicial, la AGENCIA DE VIAJES Y TURISMO AVIATUR S.A contestó la demanda en los siguientes términos (Cuaderno adjunto). SATENA no adjudica contratos a AVIATUR ni exclusivamente ni de manera sistemática como lo manifiesta el demandante. SATENA y AVIATUR tienen vigente un “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” desde el 3 de mayo de 2007, mediante el cual AVIATUR presta los servicios de agente de viajes de SATENA. La doctrina y la jurisprudencia han reconocido la existencia de contratos atípicos o innominados, en razón a la costumbre y la falta de reglamentación. La libertad de empresa, la autonomía privada y la costumbre mercantil constituyen el fundamento de validez para la existencia de contratos atípicos, apoyados además en el artículo 333 de la Constitución Política y el 1602 del Código Civil. La operación en virtud de la cual AVIATUR presta a SATENA servicios de agencia de viajes es una unidad de negocios de SATENA, conformada bajo la potestad comercial y económica de esta última, la cual se apoya en servicios de tercerización u “outsourcing” prestados por AVIATUR, entre ellos el de expedir tiquetes aéreos en rutas nacionales de SATENA y otros operadores, así como internacionales de otros operadores, tramitar las solicitudes de pasaportes que sean requeridos, ejecutar la reserva en las rutas e itinerarios que solicite SATENA o sus delegados, efectuar reserva de hoteles y porción terrestre nacional e internacional, efectuar reembolsos o acreditar en cuenta su valor, de aquellos pasajes que por cualquier causa no fueren utilizados, previo descuento de las penalidades por reembolsos impuestas por las aerolíneas, recepción de pasajeros en vuelos internacionales que lleguen a Bogotá D.C cuando se solicite por SATENA y asesorar el diligenciamiento de documentos que sean requeridos para viajar fuera del país y tramitar las visas en los consulados que así lo permitan. De la oferta de servicios de AVIATUR se destaca que cuenta con más de 200 oficinas sucursales a nivel nacional, servicios directos de atención en los principales aeropuertos del país, central de reservas con atención 24 horas los 365 días del año, emisión de informes estadísticos y de gestión pormenorizados y garantía de tarifa aplicada. La unidad de negocio de SATENA asume los costos y gastos de operación, cuya liquidación mensual le reporta a SATENA el resultado final a su favor, constituyéndose en un balance importante en beneficio de la entidad, tal como se verifica en las liquidaciones mensuales que se aportan. Mensualmente SATENA percibe en promedio la suma de $200´000.000.oo como beneficio directo para dicha entidad. El demandante desconoce los antecedentes y motivaciones jurídicas y económicas que sustentan el contrato celebrado, además que SATENA tiene plenas facultades para elegir la agencia que más se ajustara a sus necesidades por cuanto la ley le reconoce la posibilidad de realizar actividades comerciales e industriales bajo la órbita de las actuaciones de los particulares y no como establecimiento público, según lo disponen los artículos 85 y 93 de la Ley 489 de 1998. En ese orden, para efectos de la contratación entre SATENA y AVIATUR no se aplica la Ley 80 de 1993 sino la normatividad contenida en la Ley 489 de 1998, en concordancia con la Ley 1150 de 2007, las cuales permiten a SATENA celebrar los contratos de derecho privado con particulares por corresponder al ejercicio de su actividad comercial como empresa industrial y comercial del Estado. El demandante hace referencia a la conformación de un monopolio, no obstante esta afirmación es equivocada si se tiene en cuenta que el servicio de tiquetes aéreos nacionales e internacionales no lo presta de manera exclusiva la empresa SATENA. De hecho otras entidades oficiales han abierto aproximadamente 170 procesos licitatorios (cuantías superiores a $70´000.000,oo cada una en promedio). El suministro de tiquetes aéreos y demás servicios turísticos corresponde a una labor de intermediación entre el proveedor y el cliente, salvo en el caso en que SATENA actúa directamente como proveedor. Las entidades estatales tienen plena autonomía de acoger o no la propuesta de SATENA, así como la de abrir el proceso licitatorio en cumplimiento de las normas que rigen este aspecto. Es importante destacar que en cada proceso licitatorio inciden diferentes requisitos según cada pliego, tales como índices, experiencia, capacidad de contratación, entre otros. Si todas las agencias tuvieran las mismas posibilidades y la misma capacidad, todos los procesos se resolverían por el azar, lo cual no ocurre en la práctica. A manera de ejemplo, en el reciente proceso licitatorio FGN-003-2011 adelantado por la Fiscalía General de la Nación, en audiencia de 8 de junio de 2011 se declaró desierta la licitación en atención a que ninguno de los tres proponentes (Calitour, Subatour y Mayatur) cumplían con los requisitos. Si bien el demandante afirma que en diferentes pliegos de las licitaciones las entidades oficiales solicitan descuentos, no allega prueba alguna que demuestre esa afirmación, toda vez que tales descuentos y beneficios, no menciona cuáles, no son ciertos ni evidentes y no se dan en la práctica. Se reitera que SATENA recibe los ingresos resultado de la liquidación de la operación del contrato. La entidad oficial que celebra el contrato interadministrativo con SATENA se beneficia en lo que concierne a las tarifas, puesto que son las más económicas disponibles. En el año 2007 se emitieron 10157 cupones (trayecto de un tiquete aéreo), de los cuales el 93.62% fueron expedidos en tarifa promocional, lo que significó para las entidades estatales un ahorro de $1.313´638.805.oo, respecto de la tarifa plena. En el año 2008 se emitieron 57631 cupones nacionales de los cuales el 91.06% fueron expedidos en tarifa promocional representando para las entidades oficiales un ahorro de $6.495´452.891.oo. En el año 2009 se emitieron 101208 cupones nacionales, de los cuales el 87.33% fueron expedidos en tarifa promocional, representando para las entidades oficiales un ahorro de %8.634´824.304.oo. En el año 2010 se emitieron 115694 cupones nacionales, de los cuales el 93.65% fueron expedidos en tarifa promocional, representando para las entidades oficiales un ahorro de $8.825´215.397.oo. Al no tener que abrir un proceso de licitación la entidad oficial se evita incurrir en los gastos que implica este tipo de trámite. Es oportuno manifestar que el “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” celebrado entre SATENA y AVIATUR es de carácter reservado, por lo que se solicita al H, Magistrado que, de considerarlo, requiera al demandante para que explique cómo obtuvo el contrato o, en su defecto, en el momento de valorar la prueba tenga en consideración esta circunstancia. No existe prueba que demuestre que SATENA no está vendiendo tiquetes de sus rutas y tampoco es cierta la afirmación del demandante según la cual a AVIATUR le resulta más rentable vender tiquetes de otras aerolíneas. Es preciso aclarar que los contratos interadministrativos que celebra SATENA con diferentes entidades oficiales tienen por objeto el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales, no el transporte aéreo de pasajeros directamente, el cual es materia del contrato de transporte como tal, ajeno e independiente del primero en cuanto a sus obligaciones y responsabilidades de cada uno de los contratantes. De acuerdo con lo dispuesto en el Decreto 2150 de 2005, los convenios o contratos interadministrativos no requieren publicación en el diario único de contratación. Excepciones: - Improcedencia de la acción popular. De ninguno de los hechos de la demanda se puede inferir violación de los derechos e intereses colectivos. El demandante está abogando por los intereses particulares de las agencias Calitour y Subatour con fundamento en juicios, interpretaciones, conclusiones subjetivas y faltas a la verdad, como la supuesta afectación del patrimonio de las diferentes agencias de viajes del país, la supuesta afectación al derecho a licitar en sana competencia. - No hay demostración de la supuesta vulneración o amenaza de los derechos colectivos, de la moralidad administrativa ni la defensa del patrimonio del Estado ni de la libre competencia económica. Habiéndose demostrado que la presente acción popular está fundamentada en el interés particular de las agencias Calitour y Subatour, los derechos colectivos a la moralidad administrativa, la defensa del patrimonio público y la libre competencia económica no se encuentran vulnerados ni amenazados. Actuación procesal La demanda fue radicada el día 23 de febrero de 2011 en la Oficina de Apoyo de los Juzgados Administrativos de Bogotá D.C, correspondiendo por reparto al Juzgado Veinte Administrativo del Circuito de Bogotá D.C (F. 1134 A C. N° 2). Por auto de 23 de febrero de 2011 el Juzgado Veinte Administrativo del Circuito de Bogotá D.C ordenó la remisión del proceso por competencia a esta Corporación (Fl. 1136 C. N° 2). El proceso correspondió por reparto al Magistrado Ponente, quien través de auto de 15 de marzo de 2011 inadmitió la demanda (Fl. 1140 C. N° 2). Subsanada la demanda, mediante auto de 29 de marzo de 2011 se dispuso su admisión y la vinculación del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, la Policía Nacional, la Superintendencia de Notariado y Registro, el Departamento Nacional de Planeación, el Ministerio de Educación Nacional, el ICBF, el Departamento Administrativo de Seguridad, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Defensa Nacional y la Cámara de Representantes (Fl. 1156 C. N° 3). En dicho proveído se negó la medida cautelar solicitada. Por auto de 23 de junio de 2011 se reconoció a los coadyuvantes de la acción popular, se citó a las partes a audiencia de pacto y se reconoció personería a varios apoderados (Fl. 1641 C. N° 3). Mediante providencia de 18 de agosto de 2011 se dio inicio a la etapa probatoria (Fl. 1686 C. N° 3). Por medio de auto de 15 de septiembre de 2011 se resolvió un recurso de reposición interpuesto contra el auto de 18 de agosto de 2011, en el sentido de no reponerlo respecto de SATENA, se rechazó por improcedente el recurso de apelación interpuesto por el mismo sujeto procesal, se dejó sin valor y efecto una constancia y se accedió a decretar unas pruebas solicitadas por AVIATUR (Fl. 1723 C. N° 3). Mediante auto de 3 de noviembre de 2011 se aceptó la excusa del perito designado y se nombró su reemplazo (Fl. 2133 C. N° 4). Por auto de 1° de diciembre de 2011 se dispuso no aceptar la excusa por la auxiliar de la justicia designada y se le ordenó tomar posesión del cargo (Fl. 2139 C. N° 4). Mediante proveído de 19 de enero de 2012 se decretaron los gastos de pericia y se reconoció personería a un apoderado (Fl. 2159 C. N° 4). A través de providencia de 9 de febrero de 2012 se requirió a la parte actora para que diera cumplimiento a la carga impuesta de sufragar los gastos de la pericia (Fl. 2162 C. N° 4). Por auto de 26 de marzo de 2012 se requirió a la perito designada para que rindiera el dictamen pericial y se reconoció personería a un apoderado (Fl. 2172 C. N° 4). Mediante proveído de 23 de abril de 2012 se concedió la prórroga solicitada por la auxiliar de la justicia para rendir el dictamen encomendado (Fl. 2180 C. N° 4). Por medio de auto de 14 de junio de 2012 se concedió una última prórroga a la auxiliar de la justicia para rendir el dictamen pericial (Fl. 2193 C. N° 4). A través de proveído de 2 de agosto de 2012 se ordenó requerir a la perito designada para que rindiera el dictamen pericial y se reconoció personería a una apoderada (Fl. 2206 C. N° 4). Mediante auto de 18 de septiembre de 2012 se ordenó correr traslado a las partes del dictamen pericial rendido por la perito designada (Fl. 2247 C. N° 4). A través de proveído de 17 de octubre de 2012 se accedió a la solicitud de aclaración del dictamen pericial presentada por la apoderada de SATENA (Fl. 2250 C. N° 4). Por auto de 11 de marzo de 2013 se ordenó correr traslado a las partes de la aclaración al dictamen rendida por la auxiliar de la justicia designada (Fl. 2268 C. N° 4). Mediante auto de 2 de mayo de 2013 se limitaron unos testimonios, se requirió al actor popular para que aclare el objeto de una prueba por él solicitada y se ordenó el envío de unos oficios (Fl. 2270 C. N° 4). Mediante proveído de 12 de septiembre de 2013 se ordenó requerir a la parte actora para que acreditara el pago de los honorarios de la perito designada, se ordenó el envío de unos oficios, se ordenó reiterar otros y se puso en conocimiento de las partes la respuesta a unos oficios (FL. 2312 C. N° 4). A través de providencia de 25 de noviembre de 2013 se ordenó poner en conocimiento de las partes las respuestas a unos oficios, se otorgó un último plazo a las partes para que aporten los documentos faltantes y se reconoció personería a un apoderado (Fl. 2391 C. N° 4). Por auto de fecha 10 de febrero de 2014 se dispuso correr traslado a las partes para alegar de conclusión (Fl. 2399 C. N° 4). Audiencia de pacto de cumplimiento La audiencia especial de pacto de cumplimiento se llevó a cabo el día 2 de agosto de 2011 la cual se declaró fallida debido a la inasistencia de los apoderados del Ministerio de Educación Nacional y de la Cámara de Representantes (Fl. 1666 C. N° 3). Alegatos de conclusión Los apoderados de AVIATUR, (Fl. 2400 C. N° 4), el Departamento Administrativo de Seguridad (Fl. 2406 C. N° 4), el Ministerio de Defensa Nacional (Fl. 2415 C. N° 4), SATENA (Fl. 2436 C. N° 4), ICBF (Fl. 2451 C. N° 4), la Cámara de Representantes (Fl. 2453 C. N° 4), el Departamento Nacional de Planeación (Fl. 2456 C. N° 4), y el Departamento Nacional de Planeación presentaron sus escritos de alegaciones finales. Los demás sujetos procesales no alegaron de conclusión. Concepto del Ministerio Público El ministerio público no rindió concepto. Consideraciones de la Sala Cuestión previa La Sala entrará a resolver las excepciones propuestas por las demandadas. La excepción de falta de legitimación en la causa por pasiva propuesta por los apoderados de la Policía Nacional, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el ICBF se tendrá por no probada teniendo en cuenta que si bien SATENA y AVIATUR celebraron el denominado “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” cuestionado en la presente acción, no debe perderse de vista que otro señalamiento de la demanda se refiere al hecho de que SATENA celebró varios contratos interadministrativos con las entidades vinculadas al proceso las cuales, en criterio del actor popular, se abstuvieron de abrir convocatorias para un licitación pública, que es la dinámica que según su versión solía acogerse por parte de dichas entidades, impidiendo con ello que las demás agencias de viajes pudieran ser eventuales adjudicatarias de los contratos de suministro de pasajes aéreos. Lo anterior amerita la vinculación de estas entidades como extremo pasivo de la presente acción popular. La Sala advierte que el apoderado de la Cámara de Representantes puso de presente que esa Corporación no tenía contratos suscritos con la empresa SATENA sino con la agencia de viajes Subatours Ltda, lo cual se verifica al examinar el contenido de los contratos N°s 154 de 2010 y 057 de 2011 (Fls. 1442 y 1438 respectivamente C. N° 3). Sin embargo, examinado el expediente encuentra la Sala que esa Corporación suscribió con SATENA el Contrato Interadministrativo N° 117 de 20094[4], cuyo objeto consistió en “suministrar tiquetes aéreos nacionales e internacionales en sus rutas de operación y otros operadores, conforme al requerimiento escrito hecho por el supervisor del contrato o quien este delegue (…)”, razón por la cual debe comparecer a este proceso. La Sala observa que los demás medios exceptivos propuestos tienen el propósito de contradecir el reconocimiento del derecho pretendido, esto es, no se oponen al trámite procesal, razón por la cual serán resueltas desde la perspectiva del estudio de fondo que corresponde. El problema jurídico El problema que se plantea radica en determinar si se configuró violación de los derechos colectivos a la moralidad administrativa, la defensa del patrimonio público y la libre competencia económica. Teniendo en cuenta lo anterior la Sala determinará en lo relacionado con cada uno de estos derechos e intereses colectivos lo siguiente: Moralidad administrativa La Sala deberá establecer si la empresa SATENA está facultada legalmente para contratar directamente con otras entidades estatales el suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales, inclusive aquellas rutas en donde la empresa no presta el servicio. Para resolver lo anterior se estudiará el objeto social de SATENA de acuerdo con la normatividad que dispone su creación con el objeto de determinar si puede prestar el servicio de suministro de tiquetes aéreos en rutas que no le son propias. Así mismo, la Sala deberá establecer si la empresa SATENA puede ejecutar los contratos suscritos con las entidades estatales, a través de la agencia de viajes que estime pertinente, o si debe convocar, mediante un proceso licitatorio, a las distintas agencias de viajes del país. Con base en lo anterior, la Sala determinará si la actuación de SATENA viola la moralidad administrativa por cuanto su actuación, según el planteamiento del actor popular, se estaría 4[4] Fl. 112 C. N° 1. orientando al favorecimiento de los intereses de la empresa AVIATUR, alejándose del cumplimiento del cometido estatal. Defensa del patrimonio público La Sala deberá determinar si el patrimonio de las entidades estatales que han celebrado contratos de suministro de tiquetes aéreos con la empresa SATENA ha sufrido disminución o pérdida por la presunta inconveniencia económica de dichos contratos. Establecido lo anterior, se determinará si el patrimonio de SATENA se ha visto menguado por la presunta inconveniencia económica que representa el hecho de que la empresa AVIATUR sea quien ejecute el objeto de los contratos interadministrativos suscritos por SATENA con las entidades estatales. Libre competencia económica Se determinará si la actuación de SATENA configura violación del derecho colectivo a la libre competencia económica. Establecido lo anterior, la Sala efectuará el análisis de fondo en los términos que a continuación se exponen. Análisis del caso concreto En cuanto al contenido y alcance del derecho colectivo a la moralidad administrativa el Consejo de Estado ha fijado los siguientes presupuestos: “La moralidad administrativa, se refiere al ejercicio de la función administrativa conforme al ordenamiento jurídico y a las finalidades propias del cumplimiento de las funciones públicas, determinadas por la satisfacción del interés general y no por intereses privados y particulares, sin que cualquier vulneración al ordenamiento jurídico, en el ejercicio de tal función, lleve consigo de manera automática, vulneración a la moralidad administrativa, por cuanto, no toda violación al principio de legalidad, implica automáticamente violación del derecho colectivo a la moralidad administrativa. Con este propósito es importante precisar que en veces la violación al principio de legalidad, que se traduce en el no acatamiento de la normatividad en el ejercicio de la función administrativa, puede conducir a concluir también la vulneración a la moralidad administrativa, porque a la ilegalidad de la actuación se une la conducta antijurídica de quien la ejerce, en tanto actúa no con el ánimo de satisfacer el interés general, sino con el claro propósito de atender intereses personales y particulares, esto es, se vale de la función que ejerce como servidor del Estado, en provecho propio. Pero no siempre la ilegalidad conduce a la vulneración a la moralidad administrativa y corresponde al demandante en la acción popular la carga procesal de precisar el aspecto en el cual radica la trasgresión a este principio, endilgando acusaciones propias de su vulneración y no solo de ilegalidad. Igualmente al juez de la acción popular le corresponde superar los límites de la revisión de ilegalidad de la actuación con la que según la demanda se vulnera la moralidad administrativa, para extender su análisis a las motivaciones que llevaron al funcionario a ejecutar la actuación. Se evidencia entonces, que si bien el concepto de moralidad administrativa se subsume en el principio de legalidad, son conceptos diferentes, en tanto aquel concepto atañe a que de por medio se ventilen intereses diametralmente contrarios a la función administrativa. En síntesis, los cargos que se imputen en la demanda deben ser fundados en conductas que no solo se alejen de la ley, sino que deben ser acompañados de señalamientos de contenido subjetivo contrarios a los fines y principios de la administración como lo serían la deshonestidad o la corrupción, cargos que deben ser serios, fundados y soportados en medios probatorios allegados oportunamente al proceso, dado que cualquier imputación sobre inmoralidad administrativa en la que estén ausentes las acusaciones de tal aspecto, no tiene vocación de prosperidad.” (Negrillas y subrayas fuera de texto). De acuerdo con la providencia transcrita el contenido y alcance del derecho colectivo a la moralidad administrativa debe ser analizado desde dos perspectivas a saber: (i) el ejercicio de la función administrativa conforme al ordenamiento jurídico y (ii) que dicho ejercicio busque el cumplimiento del cometido estatal. Debe tenerse en cuenta que el mero desconocimiento del orden jurídico no implica violación del derecho a la moralidad administrativa, pues se requiere que dicho alejamiento de la normatividad tenga el propósito de satisfacer intereses distintos de la finalidad que se persigue con el ejercicio de la función pública. Por lo tanto, se requiere la demostración de que la persona a quien se endilga la conducta haya obrado en forma deliberada con el propósito de quebrantar la ley y ello con el fin de procurar para sí o para un tercero un provecho indebido. En ese orden de ideas, la lesión o puesta en peligro del derecho colectivo a la moralidad administrativa se configura con el acaecimiento de dos circunstancias inescindibles, a saber, (i) el desconocimiento del orden jurídico (elemento objetivo) y (ii) que dicho desconocimiento se lleve a cabo con el fin de satisfacer intereses diversos al cumplimiento de los fines del Estado (elemento subjetivo). Por lo anterior la Sala deberá precisar el objeto social de la entonces Empresa Comercial del Estado SATENA 5 [5] de acuerdo con los términos de la normatividad de creación de esta empresa para establecer la normatividad aplicable en materia de contratación. En ese orden, la Ley 80 de 1968, “Por la cual se reorganiza el servicio de Aeronavegación a Territorios Nacionales “SATENA” dispuso: ARTÍCULO 1o. A partir de la vigencia de la presente ley, el Servicio Aéreo Territorios Nacionales “Satena” funcionará como establecimiento público, con personería jurídica y patrimonio propio, adscrito al Ministerio de Defensa Nacional. ARTÍCULO 2o. Son funciones del Servicio Aéreo Territorios Nacionales “Satena”: La Ley 1427 de 2010 estableció en su artículo 1°: “NATURALEZA JURÍDICA, DENOMINACIÓN Y SEDE. Autorizar a la empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales (Satena), empresa industrial y comercial del Estado del orden nacional, con personería jurídica, autonomía y capital propio de acuerdo con lo establecido en el Decreto 2344 de 1971, la emisión de acciones para que sean colocadas en el mercado y puedan ser adquiridas por personas naturales o jurídicas. Una vez emitidas y colocadas total o parcialmente las acciones de que trata la presente ley, la sociedad quedará organizada como sociedad de economía mixta por acciones del orden nacional, de carácter anónimo, vinculada al Ministerio de Defensa Nacional, se denominará Satena S. A. su domicilio principal será la ciudad de Bogotá, D. C., y podrá establecer subsidiarias, sucursales y agencias en el territorio nacional y en el exterior.”. Tal circunstancia se materializó a través de la Escritura Pública N° 1427 de 9 de mayo de 2011, de la Notaría 64 del Circulo de Bogotá D.C. Link: http://www.satena.com/aymsite/aym_document/aym_marco_legal/ESCRITURA_1427.pdf 5[5] a) Prestar el servicio de transporte aéreo en las regiones subdesarrolladas del país; b) Colaborar con las campañas asistenciales, de incremento agrícola y pecuario, de colonización y fomento económico y social de tales territorios, de acuerdo con los prospectos del Gobierno; c) Vincular a la economía nacional apartadas regiones del país; d) Transportar funcionarios públicos y pasajeros, correo y carga oficial o particular.” (Destacado por la Sala). Mediante el Decreto 2344 de 1971 se reorganizó el servicio Aéreo a territorios nacionales SATENA, modificando la Ley 80 de 1968 en el siguiente sentido: “ARTÍCULO 1. El Servicio Aéreo a Territorios Nacionales “SATENA” creado por la Ley 80 de 1968, en lo sucesivo funcionará como una empresa comercial del Estado, vinculada al Ministerio de Defensa, esto es, con personería jurídica, autonomía administrativa y capital independiente, encargada de desarrollar la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo para las regiones menos desarrolladas del país adopte el Gobierno Nacional. PARAGRAFO: La Empresa “SATENA”, tendrá domicilio en Bogotá, pero podrá establecer sucursales en otras ciudades del país. ARTÍCULO 2. La Empresa Servicios Aéreo a Territorios Nacionales “SATENA”, tendrá las siguientes funciones: a) Prestar el Servicio de transporte aéreo de carga, pasajeros y correo, en las regiones menos desarrolladas del país. b) Colaborar con las entidades especializadas del ramo respectivo, en lo correspondiente a la formulación y ejecución de los programas relacionados con asistencia técnica, sanitaria y educativa, incremento agrícola, pecuario e industrial, fomento y apoyo de colonizaciones, y desarrollo económico y social en general, en las regiones menos desarrollas del país. c) Vincular apartadas regiones del país a la economía y vida nacional, por medio del servicio aéreo. d) Adquirir, en el país, de preferencia, o en el exterior, materiales, elementos equipos, combustibles, repuestos, accesorios y demás artículos indispensables para cumplir sus finalidades. e) Las demás que le señalen las disposiciones legales vigentes. (…) ARTÍCULO 18. En desarrollo de las actividades que le asigna la Ley 80 de 1968 y el artículo 2° del presente Decreto, la Empresa Servicios Aéreos a Territorios Nacionales, podrá adquirir y enajenar bienes muebles e inmuebles, contratar empréstitos internos y externos, gravar sus bienes en garantía de las obligaciones que contraiga, y en general celebrar toda clase de actos o contratos de administración o de disposición. También podrá constituir sociedades o compañías con otras personas naturales o jurídicas previa autorización de la Ley o del Gobierno Nacional. (…) ARTÍCULO 19. Los actos y hechos que realice “SATENA”, para el desarrollo de sus actividades comerciales, están sujetos a las reglas del derecho privado y jurisdicción ordinaria, conforme a las normas de competencia sobre la materia. Aquellos que realice para el cumplimiento de las funciones administrativas que le haya confiado la ley, son actos administrativos y se someten a la Justicia Contencioso- administrativa. (…) ARTÍCULO 20. Los contratos que celebre “SATENA”, no están sujetos salvo disposición en contrario, a las formalidades que la Ley exige para los del Gobierno y sus cláusulas serán las usuales en los contratos entre particulares, pero podrá pactar en su favor el derecho de declarar administrativamente la caducidad y deberá incorporar, en su caso, las disposiciones sobre reclamaciones diplomáticas.” (Destacado por la Sala). Posteriormente la Ley 2180 de 1984 modificó los artículos 2° 18 y 20 del Decreto 2344 de 1971 de la siguiente manera: “El artículo 2o quedará así: En cumplimiento de su objetivo y dentro del marco de las normas legales vigentes, Satena podrá desarrollar las siguientes funciones: a) Colaborar con el Ministerio de Defensa Nacional en la ejecución de la política y de los planes generales en materia de acción cívico-militar; b) Colaborar con el Ministerio de Relaciones Exteriores u otros organismos del Estado en la ejecución de la política y de los planes generales en materia de fronteras; c) Colaborar con el Departamento Administrativo de la Aeronáutica Civil, en la ejecución de la política y de los planes generales en esta materia; d) Colaborar con el Departamento Administrativo de Intendencias y Comisarías y con las entidades especializadas del ramo respectivo en lo correspondiente a la formación y ejecución de los programas relacionados con asistencia técnica, sanitaria, educativa, incremento agrícola, pecuario e industrial, fomento de colonizaciones y desarrollo económico y social en general, en las regiones de menor desarrollo relativo del país; e) Administrar directa o indirectamente los bienes muebles e inmuebles y los recursos de capital que constituyen el patrimonio de la Empresa, o aquellos que, sin ser de su propiedad se le confíen a su manejo; (…) El artículo 18 quedará así: La Empresa para el cumplimiento de sus funciones podrá celebrar toda clase de actos y contratos. Igualmente, constituir sociedades o compañías con otras personas naturales o jurídicas, previa autorización del Gobierno Nacional mediante decreto ejecutivo. El artículo 20 quedará así: Salvo disposición legal en contrario, en los contratos que celebre Satena regirán las normas usuales de los contratos entre particulares.” (Destacado por la Sala). De acuerdo con las disposiciones transcritas la Sala concluye que SATENA, para la época de suscripción del denominado “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” y los contratos o convenios interadministrativos con las entidades estatales vinculadas a esta acción, era una empresa industrial y comercial del Estado 6 [6], vinculada al Ministerio de Defensa, con personería jurídica, autonomía administrativa y capital independiente. En los términos del artículo 1° del Decreto 2344 SATENA está encargada de desarrollar la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo para las regiones menos desarrolladas del país adopte el Gobierno Nacional. Lo anterior permite concluir que el objeto social de SATENA consiste en el transporte aéreo a las regiones menos desarrolladas del país, de acuerdo con las políticas generales en materia de transporte aéreo que adopte el Gobierno Nacional. Reiterando que en la actualidad es una Sociedad de Economía Mixta por acciones del orden nacional. 6[6] No obstante la anterior precisión, la Sección Quinta del Consejo de Estado, al resolver una acción de cumplimiento en la que se demandaba que SATENA debía sujetarse estrictamente a lo previsto en el objeto social fijado por la Ley, señaló lo siguiente 7[7]: “En primer término, es claro que el objeto de la Empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales, SATENA, es “desarrollar la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo para las regiones menos desarrolladas del país, adopte el Gobierno Nacional” (at 1° del Decreto Ley 2344 de 1971, reiterado en el artículo 5° del Estatuto Interno de esa Empresa, adoptado mediante el Acuerdo número 002 de 2001 de la Junta Directiva de la misma). Tampoco hay duda de que en el marco de dicho objeto general, a la Empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales, Satena, le han sido asignadas precisas funciones (artículo 2° del Decreto Ley 2344 de 1971), que, para el cumplimiento de su objeto de “desarrollar la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo para las regiones menos desarrolladas del país, adopte el Gobierno Nacional”, se encuentra habilitada para prestar el servicio público de transporte aéreo. Ahora, de lo dispuesto en las normas transcritas no surge, con claridad, si, como lo sugiere la Asociación demandante, esa actividad comercial la debe desarrollar solamente en las regiones menos desarrolladas del país, bajo condición de que en ellas ese servicio “no sea prestado por los particulares, o se presenten prácticas monopolísticas u oligopolísticas que afecten los intereses de los usuarios” (numeral 2° del artículo 3° de la Ley 105 de 1993). Para la Sala es claro que tales limitaciones a la finalidad de fomento que orienta la actividad de la Empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales, Satena, no se desprende del contenido normativo de las disposiciones transcritas, máxime si se tiene en cuenta que en la determinación del objeto de esa entidad es necesario conocer “la política y los planes generales que en materia de transporte aéreo para las regiones menos desarrolladas del país” haya adoptado el Gobierno Nacional y se encuentre vigente, dado que al desarrollo de esa política gubernamental debe encaminarse la gestión comercial de la empresa demandada. De manera que no es válido sostener, como lo hace la asociación demandante, que en virtud de las normas vigentes que regulan el objeto de la Empresa Servicio Aéreo a Territorios Nacionales, Satena, esta entidad “sólo esté facultada para viajar a ciudades de poco desarrollo y a prestar el servicio en aquellas regiones que no son servidas por empresas particulares”, pues, de conformidad con el recuento normativo expuesto, es claro que prohibiciones de esa naturaleza no hacen parte de las reglas que definen el objeto legal al cual debe someter su actividad comercial como aerolínea. En otras palabras. En este caso no es posible derivar del contenido material del deber legal cuyo cumplimiento se exige, una limitación de la actividad comercial de la Empresa demandada en los términos planteados por la Asociación demandante. (…)” (Negrillas y subrayas fuera de texto). Teniendo en cuenta lo anterior, considera la Sala que las disposiciones legales y reglamentarias de SATENA no limitan su actividad comercial a la prestación del servicio de transporte aéreo hacia las regiones menos desarrolladas del país, como lo plantea el demandante, pues además del transporte aéreo a dichas regiones, SATENA puede prestar este servicio a otros lugares del territorio nacional, independiente de si estos son o no desarrollados. Consejo de Estado. Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Quinta. Sentencia de nueve (9) de junio de dos mil seis (2006). Radicación número: 25000-2325-000-2005-00731-01. Consejero ponente: Darío Quiñones Pinilla. (Fl. 1577 C. N° 3). 7[7] Sin embargo la Sala precisa que el objeto social de SATENA debe entenderse limitado por su actividad comercial como aerolínea, tal como lo precisa la jurisprudencia transcrita, razón por la que la actividad que se cuestiona a través de la presente acción popular, a saber, el suministro de tiquetes aéreos de rutas que no son propias de SATENA, no tiene relación con su objeto social, toda vez que las mencionadas actividades son propias de una agencia de viajes. Esto se pone de manifiesto al revisar el contenido del “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” suscrito entre SATENA y AVIATUR en distintos periodos8[8], en el que se observa que el objeto del mismo siempre consistió en que “AVIATUR se compromete con SATENA, a prestar a nivel nacional los servicios de agente de viajes conforme a las actividades que a continuación se describen a) Expedir tiquetes aéreos en rutas nacionales de SATENA y otros operadores, así como internacionales de otros operadores, a solicitud de SATENA o de la persona o entidad que esta designe (…)” (Destacado por la Sala). En desarrollo de esta alianza comercial se han suscrito varios contratos interadministrativos entre SATENA y algunas entidades estatales de cuyo objeto se advierte que SATENA llevó a cabo el ejercicio de una actividad que no corresponde con su objeto social. Como ejemplo la Sala trae a colación el texto del Contrato Interadministrativo N° 65 celebrado entre el Ministerio de Defensa Nacional- Armada Nacional – Dirección de Abastecimientos y SATENA, en el que se pactó lo siguiente (Fl. 119 C. N° 1): “CLÁUSULA PRIMERA: OBJETO: SATENA se obliga para con la DIRECCIÓN DE ABASTECIMIENTOS a proveer tiquetes aéreos Nacionales en sus rutas de operación y en rutas nacionales e internacionales operadas por otras aerolíneas a través de su unidad de negocios durante la ejecución del contrato, de acuerdo a requerimiento de la Dirección de Personal de la Armada Nacional.”. (…) “CLÁUSULA DÉCIMA TERCERA: CESIÓN: El presente contrato no podrá ser cedido por SATENA a persona alguna, natural o jurídica, nacional o extranjera sin la autorización previa otorgada por escrito por la DIRECCIÓN DE ABASTECIMIENTOS, sin que resulte obligado a informar las razones que le asistan para negarla. Sin embargo, no se considera que haya cesión en los casos en que SATENA subcontrate bajo su plena y total responsabilidad, el objeto del presente contrato. (…)”. Situación que se repite en el “Contrato Interadministrativo N° 061” celebrado entre el ICBF y SATENA (Fl. 1421 C. N° 3): “CLÁUSULAS: PRIMERA: OBJETO: Suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales para el ICBF, contratistas y menores que requieran de la adopción de medidas especiales de protección. ALCANCE DEL OBJETO: SATENA suministrará al ICBF tiquetes aéreos nacionales en sus rutas de operación, así como nacionales e internacionales en otros operadores, conforma el requerimiento escrito hecho por el ICBF a partir de la fecha de perfeccionamiento de este contrato.” (…) 8[8] Se revisaron los contratos suscritos el 1° de febrero de 2010 (Fl. 1820 C. N° 3), 30 de abril de 2009 (Fl. 1836 C. N° 3), 30 de mayo de 2008 (Fl. 1846 C. N° 3) y 30 de mayo de 2007 (Fl. 1860 C. N° 3). NOVENA.- SUBCONTRATACIÓN Y/O CESIÓN: Previa autorización de EL ICBF, SATENA podrá subcontratar parcialmente la ejecución del contrato con personas naturales o jurídicas que tengan idoneidad y capacidad para la actividad subcontratada.”. En el Contrato Interadministrativo N° 031-2010, suscrito entre el Fondo Rotatorio del Ministerio de Relaciones Exteriores y SATENA también se pactó el mismo objeto contractual (Fl. 1374 C. N° 3): “CLAUSULA PRIMERA.- OBJETO: En virtud del presente contrato, EL CONTRATISTA se obliga para con LA ENTIDAD, con plena autonomía técnica y administrativa, a suministrar tiquetes aéreos nacionales en sus rutas de operación y nacionales e internacionales de otros operadores para el desplazamiento de funcionarios, dependientes y contratistas del Ministerio de Relaciones Exteriores y su Fondo Rotatorio, de conformidad con la propuesta presentada por EL CONTRATISTA, (…)”. Similar objeto se pactó en el Contrato Interadministrativo N° 165 de 2011, suscrito entre el Ministerio de Educación Nacional y SATENA (Fl. 67 C. Anexos): “CLÁUSULA PRIMERA. OBJETO: Prestar los servicios de transporte aéreo sus rutas e itinerarios, y gestionar el suministro de pasajes aéreos en las rutas nacionales e internacionales operadas por otras aerolíneas en donde SATENA no tenga operación; prestar los servicios bajo la modalidad de vuelos charter, y en general, todos aquellos servicios conexos tendientes a garantizar el desplazamiento de los directivos, servidores, y/o invitados especiales del Ministerio de Educación Nacional, que en desarrollo de las actividades programadas deban desplazarse fuera de su sede habitual de trabajo. (…) CLAUSULA DÉCIMA. DE LA CESIÓN DEL CONTRATO INTERADMINISTRATIVO. EL CONTRATO INTERADMINISTRATIVO no podrá ser cedido a ningún título por SATENA sin la previa autorización del Ministerio de Educación. No obstante, es claro que SATENA podrá subcontratar el suministro materia del presente contrato interadministrativo.” Como bien puede observarse en los contratos interadministrativos suscritos entre SATENA y diferentes entidades estatales se ha pactado la gestión y/o el suministro de tiquetes aéreos en rutas nacionales e internacionales operadas por otras aerolíneas y operadores actividad que no se encuentra contemplada dentro del objeto social de SATENA, razón por la cual la Sala concluye que la empresa mencionada carece de autorización legal para llevar a cabo las actividades en mención. Vistas así las cosas, SATENA y las distintas entidades estatales con las que ha tenido o tiene vínculos contractuales desconociendo el objeto social de esta aerolínea se apartaron de lo previsto en las normas aplicables propias de la licitación pública para adoptar un mecanismo de selección vía contratación directa, lo cual resulta impropio por cuanto el objeto contratado no tiene relación directa con el objeto social de SATENA. De acuerdo con lo anterior, en los términos del literal c) del numeral 4° del artículo 2 de la Ley 1150 de 2007, vigente para la época en que se celebró el denominado “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” y los contratos interadministrativos con las entidades vinculadas a la presente acción popular, SATENA sólo puede adoptar la modalidad de contratación directa mediante contratos interadministrativos, siempre y cuando estos contratos tengan relación directa con el objeto social señalado en la ley y sus reglamentos: “ARTÍCULO 2o. DE LAS MODALIDADES DE SELECCIÓN. La escogencia del contratista se efectuará con arreglo a las modalidades de selección de licitación pública, selección abreviada, concurso de méritos y contratación directa, con base en las siguientes reglas: (…) 4. Contratación directa. La modalidad de selección de contratación directa, solamente procederá en los siguientes casos: a) Urgencia manifiesta; b) Contratación de empréstitos; c) Contratos interadministrativos, siempre que las obligaciones derivadas de los mismos tengan relación directa con el objeto de la entidad ejecutora señalado en la ley o en sus reglamentos. Se exceptúan los contratos de obra, suministro, encargo fiduciario y fiducia pública cuando las instituciones de educación superior públicas sean las ejecutoras. Estos contratos podrán ser ejecutados por las mismas, siempre que participen en procesos de licitación pública o de selección abreviada de acuerdo con lo dispuesto en los numerales 1 y 2 del presente artículo.9[9] (…)” (Destacado por la Sala). Conforme fue expuesto, la Sala reitera que los actos propios de un agente de viajes no hacen parte del objeto social de SATENA, de modo que los contratos interadministrativos suscritos con ese fin no se ajustan a derecho. Si bien esta conducta por sí sola no puede interpretarse como lesiva del derecho colectivo a la moralidad administrativa, puesto que no está demostrado el ánimo de satisfacer intereses opuestos o lesivos del interés general (elemento subjetivo), la misma sí debe interpretarse como violatoria del derecho a la libre competencia económica, toda vez que la empresa AVIATUR es quien finalmente se encarga, a través de SATENA, del suministro de los tiquetes aéreos en las rutas nacionales e internacionales de otras aerolíneas, es decir, a través de SATENA ejerce su actividad de agente de viajes de las diferentes entidades estatales que han celebrado contratos interadministrativos con SATENA, valiéndose de la modalidad de contratación directa adoptada por SATENA y por las entidades vinculadas a esta acción popular. En ese orden, AVIATUR es la beneficiaria de la modalidad de contratación directa adoptada por SATENA y los entes públicos vinculados a la presente acción, pues por esta vía se sustraen de los canales de selección previstos por la ley para adjudicar los contratos de suministro de tiquetes aéreos, lo cual se traduce en una restricción de la libre competencia. Inciso 1o. modificado por el artículo 92 de la Ley 1474 de 2011. El nuevo texto es el siguiente: Contratos interadministrativos, siempre que las obligaciones derivadas del mismo tengan relación directa con el objeto de la entidad ejecutora señalado en la ley o en sus reglamentos. 9[9] Se exceptúan los contratos de obra, suministro, prestación de servicios de evaluación de conformidad respecto de las normas o reglamentos técnicos, encargos fiduciarios y fiducia pública cuando las instituciones de educación superior públicas o las Sociedades de Economía Mixta con participación mayoritaria del Estado, o las personas jurídicas sin ánimo de lucro conformadas por la asociación de entidades públicas, o las federaciones de entidades territoriales sean las ejecutoras. Estos contratos podrán ser ejecutados por las mismas, siempre que participen en procesos de licitación pública o contratación abreviada de acuerdo con lo dispuesto por los numerales 1 y 2 del presente artículo. En efecto, tratándose de los entes públicos ya mencionados los competidores de AVIATUR no pudieron acceder a la porción de mercado que ellos representan en el suministro de tiquetes aéreos puesto que dicho segmento fue “capturado” por AVIATUR merced a los convenios interadministrativos suscritos entre SATENA y los entes públicos vinculados a la acción (ministerios, superintendencias, establecimientos públicos, etc.). En virtud de lo anterior, para la Sala es claro que la suscripción de los convenios interadministrativos entre los entes públicos vinculados a la acción y SATENA constituyen un acuerdo contrario a la libre competencia, pues dicho contrato convierte a SATENA en un intermediario de AVIATUR para ejercer la actividad comercial de suministro de tiquetes aéreos, restringiendo la participación, en igualdad de condiciones, de los demás actores del mercado (otras agencias de viaje), los cuales tienen el derecho de participar en el proceso licitatorio correspondiente. Esta conducta está tipificada como un acuerdo contrario a la libre competencia según se desprende de lo previsto en el artículo 47 del Decreto 2153 de 1992: “ARTICULO 47. ACUERDOS CONTRARIOS A LA LIBRE COMPETENCIA. Para el cumplimiento de las funciones a que se refiere el artículo 44 del presente Decreto se consideran contrarios a la libre competencia, entre otros, los siguientes acuerdos: (…) 10. <Numeral adicionado por el artículo 16 de la Ley 590 de 2000. El nuevo texto es el siguiente:> Los que tengan por objeto o tengan como efecto impedir a terceros el acceso a los mercados o a los canales de comercialización.” (Destacado por la Sala). En razón de lo anterior, la Sala considera que la conducta desplegada por SATENA y las diferentes entidades estatales vinculadas a la presente acción configura violación del derecho colectivo a la libre competencia, motivo por el cual la Sala así lo declarará y dispondrá las medidas del caso. En consecuencia, la Sala ordenará a SATENA y a las entidades estatales vinculadas a la presente acción (i) abstenerse en lo sucesivo de celebrar contratos interadministrativos que no tengan relación con el objeto social de SATENA; y (ii) no continuar con la ejecución de los vigentes cuyo objeto consista en el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales de operadores distintos a SATENA. Esta última orden deberá cumplirse pasados seis (6) meses de la ejecutoria de la presente sentencia, término dentro del cual los entes públicos vinculados a la presente acción (ministerios, superintendencias, establecimientos públicos, etc.) deberán efectuar los procesos de contratación pública que legalmente correspondan. De otro lado, en cuanto hace al derecho colectivo a la defensa del patrimonio público, el Consejo de Estado ha explicado su contenido y alcance de la siguiente manera 10[10]: “Ahora bien, sobre el derecho colectivo a la protección del patrimonio público, también ha manifestado la Corporación que: “Se ha entendido que el concepto de patrimonio público cobija la totalidad de bienes, derechos y obligaciones, que son propiedad del Estado y que se emplean para el cumplimiento de sus atribuciones de Consejo de Estado. Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Primera. Sentencia de veintidós (22) de abril de dos mil diez (2010). Radicación número: 52001-23-31-000-2004-0162501(AP). Consejero ponente: Marco Antonio Velilla Moreno. 10[10] conformidad con el ordenamiento normativo. La defensa del patrimonio público, conlleva a que los recursos del Estado sean administrados de manera eficiente, oportuna y responsable, de acuerdo con las normas presupuestales, evitando con ello el detrimento patrimonial. Por ello, se concluye que la afectación de patrimonio público implica de suyo la vulneración al derecho colectivo de la moralidad administrativa. De acuerdo con el alcance que la jurisprudencia le ha dado al derecho colectivo al patrimonio público, cuya vulneración ha vinculado a la falta de honestidad y pulcritud en las actuaciones administrativas en el manejo de recursos públicos, no se encuentra en este caso que las conductas omisivas (...) hayan vulnerado o amenacen vulnerar el patrimonio público, como quiera que no se evidencia la existencia de detrimento al patrimonio estatal, ni la amenaza de que pueda presentarse tal detrimento. El concepto de patrimonio público es un concepto genérico que involucra todos los bienes del Estado, y que comprende en ellos los de todas sus entidades, a nivel central, o descentralizado territorialmente o por servicios. Habrá detrimento de ese patrimonio, cuando se produzca su mengua en él como consecuencia de una actividad no autorizada en la norma, pero no se presenta el detrimento, cuando una entidad estatal deja de hacer a otra de la misma naturaleza, una transferencia de sus recursos en los términos dispuestos en el ordenamiento jurídico, porque en ese caso, no habrá habido mengua en el patrimonio estatal.” La actora tampoco allega pruebas o menciona siquiera si existen razones para considerar que las actuaciones adelantadas por las demandadas atentan contra el patrimonio público, como tampoco lo hace sobre el derecho a la moralidad administrativa, razón por la cual no puede entenderse como vulnerado el derecho colectivo.” (Negrillas y subrayas fuera de texto) Con fundamento en la postura jurisprudencial transcrita considera la Sala que la lesión del derecho colectivo al patrimonio público se configura cuando el mismo sufre detrimento. A efectos de complementar la interpretación del derecho colectivo a la defensa del patrimonio público, es preciso tener en cuenta la definición de daño patrimonial al Estado contenida en la Ley 610 de 2000: “ARTICULO 6o. DAÑO PATRIMONIAL AL ESTADO. Para efectos de esta ley se entiende por daño patrimonial al Estado la lesión del patrimonio público, representada en el menoscabo, disminución, perjuicio, detrimento, pérdida, uso indebido o deterioro de los bienes o recursos públicos, o a los intereses patrimoniales del Estado, producida por una gestión fiscal antieconómica, ineficaz, ineficiente, inequitativa e inoportuna, que en términos generales, no se aplique al cumplimiento de los cometidos y de los fines esenciales del Estado, particularizados por el objetivo funcional y organizacional, programa o proyecto de los sujetos de vigilancia y control de las contralorías. 11[11] Dicho daño podrá ocasionarse por acción u omisión de los servidores públicos o por la persona natural o jurídica de derecho privado, que en forma dolosa o culposa produzcan directamente o contribuyan al detrimento al patrimonio público.” (Negrillas y subrayas fuera de texto) La censura del actor popular consiste en señalar que se produjo lesión al derecho colectivo a la defensa del patrimonio público porque a SATENA le resulta inconveniente, en términos económicos, ejecutar el denominado “Contrato de Oficina en Cuenta Comercial” con la agencia de viajes AVIATUR, por cuanto esta última es quien percibe la mayor parte de las utilidades, debido a los pagos que recibe por varios conceptos relacionados con la ejecución del mencionado contrato. Apartes tachados declarados INEXEQUIBLES por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-340-07 de 9 de mayo de 2007, Magistrado Ponente Dr. Rodrigo Escobar Gil. 11[11] No obstante lo anterior, la Sala considera que tal afirmación carece de sustento, en la medida en que la auxiliar de la justicia designada para rendir el dictamen pericial destinado a probar la afirmación del actor, estableció el margen de ganancia obtenido por SATENA y AVIATUR, en el marco de la ejecución de los contratos que aquí se censuran, durante el lapso comprendido entre el año 2007 y el año 2011 (Fl. 2223 C. N° 4): CONCEPTO AÑO 2007 AÑO 2008 AÑO 2009 AÑO 2010 AÑO 2011 Resultado neto operación 419.266.127 1.660.370.167 2.879.835.204 3.129.187.282 707.138.970 Total Admon Central 118.377.666 390.336.448 658.639.873 835.115.412 Saldo a favor Satena 300.888.461 1.270.033.719 2.221.195.331 2.294.071.870 471.541.054 % Utilidad Satena 71.77% 76.49% 77.13% 73.31% 66.68% % Utilidad Aviatur 28.23% 23.51% 22.87% 26.69% 33.32% 235.597.917 Es destacable que el margen de utilidad que percibe SATENA es superior al de AVIATUR lo que indica que la aerolínea estatal se beneficia económicamente con la ejecución de los contratos mencionados. La auxiliar de la justicia también estableció el monto de los ingresos y gastos resultado de la ejecución de los contratos de oficina en cuenta comercial de la siguiente manera (Fl. 2224 C. N° 4): AÑOS INGRESOS GASTOS RESULTADO 2007 532.855.822 76.675.074 456.180.749 2008 2.112.827.317 444.558.614 1.668.268.704 2009 3.915.880.836 1.017.767.907 2.898.112.930 2010 4.405.435.307 1.239.943.232 3.165.492.074 TOTALES 10.966.999.282 2.778.944.827 8.188.054.455 Se observa cómo en cada periodo de ejecución de los contratos el margen de ingreso siempre fue superior al margen de gasto, lo que significa que el resultado de la ejecución fue satisfactorio. En esas condiciones encuentra la Sala que, contrario a lo afirmado por el actor, no se presentó lesión del derecho colectivo al patrimonio público y, por el contrario, SATENA se ha beneficiado de esta relación comercial, lo que se traduce en el ingreso percibido debido a la ejecución de los contratos cuestionados. En lo que respecta a la relación contractual entre SATENA y las entidades estatales vinculadas a la presente acción, la Sala encuentra que no se demostró por parte del actor que las relaciones contractuales censuradas hubieren representado detrimento patrimonial para dichas entidades. Lo anterior teniendo en cuenta que, además de las afirmaciones de los entes vinculados en relación con los beneficios percibidos por la ejecución de estos contratos, la auxiliar de la justicia advirtió que no tuvo a disposición los soportes de esta contratación, por lo que no fue posible emitir concepto al respecto (Fl. 2226 C. N° 4). Cabe señalar que según sentencia de 8 de junio de 2011, el Consejo de Estado, Sección Tercera, indicó que la sola violación de las normas sobre gestión del patrimonio constituye su detrimento; sin embargo la Sala considera, reiterando la definición legislativa prevista en la ley 610, artículo 6° de 2000, que dicha circunstancia se presenta cuando hay desmedro, mengua o disminución de los haberes del Estado. En tales condiciones examinada la pericia que se acreditó en el proceso, que no fue objetada por la partes, según la cual SATENA no sufrió afectación en su patrimonio; y la circunstancia de que no se demostró lesión al de los ministerios, superintendencias y establecimientos públicos concernidos; la Sala concluye que no hay lugar, en el presente caso, a declarar la violación del derecho de que se trata. Conforme a las consideraciones, la Sala estima que no se demostró la violación o puesta en peligro del derecho colectivo a la defensa del patrimonio público. Personería El abogado Hugo Armando Granja Arce presentó renuncia al poder otorgado para representar al Ministerio de Relaciones Exteriores (Fl. 2464 C. N° 4). Al citado profesional del derecho le fue conferido poder por parte de la doctora Ivett Lorena Sanabria Gaitán, quien para ese momento ostentaba la condición de Jefe de la Oficina Asesora Jurídica de dicho ministerio, y se le reconoció personería para actuar a través de auto de 19 de enero de 2012 (Fl. 2159 C. N° 4). la actual Jefe de la Oficina Asesora Jurídica de esa cartera ministerial, doctora Claudia Liliana Perdomo Estrada, confirió poder al doctor John Alexander Serrano Bohórquez (Fl. 2466 C. N° 4), no obstante no se le reconocerá personería a este profesional del derecho teniendo en cuenta que no se allegaron los soportes que acrediten la calidad con la que actúa quien confiere el poder. DECISIÓN En mérito de lo expuesto, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Sección Primera, Subsección “A”, administrando justicia en nombre de la República y por autoridad de la ley, FALLA PRIMERO.- DECLÁRANSE NO PROBADAS la excepciones propuestas. SEGUNDO.- DECLÁRASE la violación del derecho colectivo a la libre competencia económica. TERCERO.- En consecuencia, ORDÉNASE al Servicio Aéreo a Territorios Nacionales SATENA y a las entidades estatales Policía Nacional, Departamento Nacional de Planeación, Ministerio de Defensa Nacional, Departamento Administrativo de Seguridad y su Fondo Rotatorio, Ministerio de Relaciones Exteriores, Instituto Colombiano De Bienestar Familiar (ICBF), Cámara de Representantes, Superintendencia de Notariado Y Registro y Ministerio de Educación Nacional lo siguiente: a) abstenerse en lo sucesivo de celebrar contratos interadministrativos que no tengan relación con el objeto social de SATENA; b) No continuar con la ejecución de los contratos vigentes cuyo objeto consista en el suministro de tiquetes aéreos nacionales e internacionales de operadores distintos a SATENA. Esta orden deberá cumplirse pasados seis (6) meses de la ejecutoria de la presente sentencia, término dentro del cual los entes públicos antes mencionados deberán efectuar los procesos de contratación pública que legalmente correspondan. CUARTO.- En firme esta providencia, por Secretaría, ENVÍESE copia de la misma al Registro Público Centralizado de Acciones Populares y de Grupo de conformidad con el artículo 80 de la Ley 472 de 1998. NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE Discutido y aprobado en la Sala de la fecha. Acta No. -. LUIS MANUEL LASSO LOZANO Magistrado CLAUDIA ELIZABETH LOZZI MORENO Magistrada FELIPE ALIRIO SOLARTE MAYA Magistrado