Morir, Dormir o Tal vez soñar Al inicio del día me levante, las ventanas abiertas y los ventiladores encendidos, pero parecía que el calor no se iba a terminar nunca. Mis amigas me han dicho que no las dejan salir porque hay una especie de enfermedad que da por exponerse al sol, pero yo no les creo y salgo a patinar todos los días, si es que el tiempo me lo permite, en ocasiones llego con un fuerte dolor en los brazos y la piel enrojecida pero no importa, me es divertido. En la ciudad se corren rumores de una evacuación por la supuesta cercana erupción del volcán, patrañas, yo creo que nada de eso es cierto, solo lo hacen para alertar a la gente y quedarse con las cosas que tenemos ¿Dónde piensan ellos que vamos a vivir? ¿De qué creen que vamos a trabajar? Bueno, yo no trabajo pero mis papás tienen aquí su negocio y no lo podemos trasladar. Hoy tenemos prohibido salir, dijeron en el noticiario que el nivel de radiación y de la contaminación del aire está un 20% por arriba de lo máximo que nuestro cuerpo puede aguantar, admito que me duele la cabeza, pero sucede tan seguido que ya me cansé de todo el tiempo tener las ventanas cerradas y pasar semanas enteras en mi casa sin salir por culpa de todo esto. Por fin ha terminado este día tan patético y aburrido, enserio un ser como yo necesita moverse pero ni hablar así son las reglas, es hora de cenar y escuchar los relatos de mi madre algunos son muy cursis pero la noche pasada me contaba historias que su bisabuela al igual que ella a mi le contaba antes de dormir, todo era verde, el cielo era azul, la comida germinaba del piso y había árboles por todos lados, hermosas playas con un oleaje tan ligero que podías quedarte dormida en la arena por horas y sentir una manta de agua cálida, había grandes bosques. - ¡Ja!, seguro eso sí era vida.- Mis rommies me miran con ojos de extrañeza, lo dije un poco fuerte. Ellas parecen no entenderme, todo el tiempo tienen miedo de estar bajo el sol, separan su basura, beben solo los dos vasos permitidos al día y duermen las 8 hrs. obligatorias que estableció el gobierno para disminuir el estrés y la necesidad de agua y comida, la última escasea desde que el suelo se tornó infértil por culpa de los pesticidas y la sobre explotación del suelo; dicen que aún faltan cientos de años para que algunos centímetros de suelo se creen y que están buscando los agentes biológicos necesarios para que sean solo una decena de décadas más, pero todos ya nos dimos cuenta que no viviremos demasiado para verlo. No conocí a mi bisabuelo, pero por lo que cuenta mi abuela era un hombre con bastantes agallas, el era del campo, le gustaba cultivar la tierra, ver crecer las plantas, cosechar los alimentos acompañados de unos cuantos animales domésticos para que posteriormente mi abuela los cocinara en su gran fogón de leña, que vida tan distinta tenían mis bisabuelos a la mía, muero de sueño, será mejor que cierre mis ojos. !oh cielos! ¿dónde estoy? que sensación tan rara ¿acaso estoy volando? espera esto se me hace conocido ¡claro¡ es agua estoy dentro de un cubo enorme de agua, es fresca, tan relajante, sabia que yo si podría disfrutar de ella, !que colores tan hermosos! son tan parecidos a la descripción de los relatos de mi abuela, son brillantes, al parecer no necesitaré mas estas gotas para los ojos, esto es fabuloso, voy a ir a aventurarme por este paraíso. Ya vieron que árboles tan grandes con tan suculentas frutas seré muy tonta si no como de ellas, solo será una, ¡que delicioso sabor! otra más mmm quiero otra, seré muy egoísta si no le llevo algunas frutas a mi madre. -!oye¡ me lastimas niña mal educada , ¿no crees que ya has cortado demasiados de mis frutos, eres apenas una niña y ya casi terminas con todos ellos, a las 12 del día viene mi compadre el ave a comer de mis frutos y ahora gracias a ti no tendré que ofrecer - replicó el enorme árbol frutal. -Perdone pero usted tenia demasiados frutos aparte hay mas arboles donde su compadre el ave puede comer, no entiendo porque es usted tan egoísta- dijo Emilia . -La egoísta aquí eres tú al llevarte todos mis frutos, acaso no ves que mi compadre el ave solo puede comer de mis frutos, los demás arboles le ocasionan un mal en su organismo te pido que te alejes de aquí- el árbol frutal estaba sumamente enojado con Emilia. Emilia dio media vuelta molesta con en árbol le pareció muy grosera su actitud, pero siguió con su aventura. al caminar se percató de unos prados hermosos con muchas flores, ella corrió hacia ellos, brincaba, bailaba, recordó las fotos de su abuela con unas flores parecidas y decidió cortar algunas para llevárselas a su abuela. -¡Auch! algo me picó, que cosas tan raras son esas, vuelan y zumban- Emilia se alejó de aquellos seres, pero ellas no dejaban de perseguirla. -Perdona que la molestemos, pero usted se a llevado parte de nuestro trabajo entre sus brazos, no nos podemos retirar a casa sin haber polinizado aquellas flores, le hicimos una llamada de atención con un pequeño piquete pero es un ser demasiado necio. -¿Quieren ustedes las flores? pero son un regalo para mi abuela- Contesto Emilia desconcertada y comenzando a asustarse de su entorno. -Por favor devuélvelas esas flores son parte de nuestro trabajo hay mas seres que necesitan de ellas y ellas de nosotros - comentaron aquellos seres extraños. Emilia realmente quería llevarle flores a su abuela así que devolvió todas las flores a excepción de una, al caminar de aquel lugar uno de los extraños seres se percató de que Emilia no había devuelto todas las flores y su reacción fue perseguirla con agresividad, a tal acción la aventurera chica corrió, comenzó a distinguir una gran colina y decidió adentrarse en el follaje del denso bosque, al parecer había dejado atrás a aquel extraño ser, se recargó en un enorme encino, aquella carrera la había agotado y decidió sentarse sobre todas las hojas secas de aquel encino que eran como una especie de colchón. Emilia se sentía desconcertada, aquellos seres eran realmente agresivos con ella, celosos de sus frutos, flores. -Este lugar es muy hermoso totalmente nuevo para mi, muy parecido a lo que relatan mis abuelos, y a lo que siempre quise conocer, pero al parecer estos seres son estrictos, no debieron picarme de esa manera, este dolor es realmente punzante, no se si realmente vale la pena estar aquí sola, yo pertenezco a un sitio donde la gente no ríe, todos somos como robots cumpliendo las leyes del gobierno para ¨ser sanos¨ realmente estoy confundida y demasiado triste- Emilia desolada se acorruco en aquel enorme encino y soltó a llorar. -¿Qué te ocurre pequeña? preguntó otro ser que Emilia jamás había visto era pequeño y peludo, muy ágil para su edad, con dientes grandes, una cola esponjada y gustaba de comer bellotas. Emilia se presentó amablemente y contestó a la pregunta de aquel ser, le contó todo lo que le había ocurrido desde su llegada, realmente no comprendía su actitud de aquellos seres. -Creo que les hice un daño, pero no era mi intención a cambio de esto recibí un gran piquete, me duele demasiado, fue de un ser muy pequeño con alas, de color amarillo con negro muy mal humorado por cierto- contestó Emilia a su pregunta. -Ese ser se llama abeja , no te preocupes estarás bien, son muy trabajadoras y cualquier acto de indisciplina las pone de mal humor, y también a mi me miras demasiado raro mi nombre es Ali y soy una ardilla vivo aquí en el bosque- Le explicó Ali amablemente a Emilia -Gracias Ali ya me siento más tranquila, te molestaría si me explicas un poco de este lugar. -Por supuesto que no Emilia ven te daré un paseo pero ya no llores por favor. Ali era una ardilla muy sabia, comprendía muchas cosas de los hombres con la naturaleza. -Mira el árbol frutal no quiso ser rudo contigo pero te terminaste todo sus frutos hay ciertas especies como su compadre el ave que solo comen aquellos frutos, si tu dejas esta ave sin comer, ellas morirán de hambre y todo nuestro hogar se verá alterado, que es lo que pasó en el lugar donde tú vives, no hay que comer mas de lo que el árbol puede dar, siempre recuerda esta regla Emilia, no seas tan glotona, los seres humanos deben de aprender a controlar sus impulsos de querer tener todo para ellos sin darse cuenta que hay mas seres que también necesitamos de aquellos alimentos, en cuanto a las abejas como te mencionaba ellas son muy trabajadoras y muy disciplinadas ya que tienen una gran responsabilidad con nuestro hogar, ellas llevan a cabo la polinización de las plantas son las encargadas de que nazcan muchos seres vivos, no estés molesta con ellas es solo que su trabajo es estricto y no pueden fallar son muy buenas, estoy seguro que te llevaras bien con ellas he notado que eres una chica inteligente y valiente. Rin rin, sonó el despertador, es hora de que Emilia acompañe a su mamá a comprar los alimentos antes de que el sol salga y dañe la piel. Emilia se levantó sumamente desconcertada, ese sueño había sido maravilloso y había aprendido muchas cosas, porque ahora ella tenia que vivir en un mundo tan perturbado, los humanos exterminan todo a su paso tal vez sea por su instinto, comprendió que una acción por mínima que sea altera todo el medio y esa pequeña alteración juega un papel tipo efecto mariposa, el simple hecho de cortar una flor influyó en que el aire en el que ahora ella vive ya no fuese puro ¿cuánto influyó? no lo sabemos, ni Emilia la niña curiosa lo sabe ni los grandes académicos que ahora trabajan en sus oficinas cerradas que los protegen de tan potentes rayos.