La deriva política como inicio de la “decadencia” del bloque

tema del día
el observador
martes 14 de enero de 2014
“Es hora de hacer funcionar la institucionalidad.
Llegó la hora de que Paraguay y Uruguay
empiecen a decir esto no va y lo veto”
Contrapunto entre Porto y Batlle
en el momento de las preguntas, el vicecanciller luis porto fue consultado sobre la postura de Uruguay ante la suspensión de paraguay del mercosur, y señaló que se siguió los lineamientos establecidos por el bloque. el expresidente Jorge Batlle le salió al cruce respondiéndole que con el caso de paraguay se violó el tratado de asunción. el moderador debió intervenir para seguir con otra pregunta.
Luis Alberto Lacalle
expresidente de UrUgUay
economía de Uruguay, el Mercosur
no significa mucho. Detalló que en
valor agregado, representa el 6,3%
del PIB, y si se saca el turismo, la
construcción y algunos servicios
financieros y profesionales, en
números gruesos queda solo un
1% del PIB.
“Depende de nosotros”
En una visión más optimista, el
expresidente del Banco Central
de Argentina (BCA), Alfonso Prat
Gay, dijo en el foro realizado en el
Conrad que no hay que desechar
el Mercosur como tal, donde se
encuentra la región con la mayor
producción de alimentos del mundo y con unas reservas acuíferas y
energéticas como pocas en el globo. “Depende de nosotros si queremos que funcione, aunque es
obvio que por ahora no funcionó”,
indicó quien dirigió el BCA durante las presidencias de Eduardo Duhalde y Néstor Kirchner.
Prat Gay, también exdiputado
de la Coalición Cívica ARI, mencionó que el ingreso de Venezuela
ha sido “beneficioso para todos”
desde el punto de vista económico. “No podemos ver con el prisma
político de cada nación, ya va a
terminar el chavismo y el kirchnerismo”, aseveró. “La raíz es mucho más profunda, hay 20 años
sobre los cuales hay que seguir
construyendo. ¿Dónde estarían
hoy Grecia, España, Irlanda e Italia si el trabajo previo no hubiera
fructificado en la alianza política,
social y económica que tiene hoy
Europa’”.
Por su parte, la empresaria paraguaya Fátima Morales calificó
de alentadora la incorporación
de Venezuela al Mercosur, pese
a que Paraguay vetó largo tiempo sumar ese país al bloque y que
luego se metió por la ventana, en
oportunidad en que los paraguayos fueron suspendidos del conglomerado tras la destitución por
parte del Congreso guaraní del
presidente Fernando Lugo. Para
Morales, presidenta de la cadena de farmacias Farmacenter, la
presencia venezolana sirve desde el punto de vista económica y
también para disminuir las “enormes” asimetrías del Mercosur.
“Brasil y Argentina aumentaron sus exportaciones a Venezuela. Paraguay y Uruguay también
aumentaron y exportan a ese
país US$ 417 millones, 34 veces
más que en 1995”, detalló esta
química farmacéutica. “En términos económicos no hay duda
que conviene el ingreso de Venezuela, es una economía a la que
le falta todo, como los alimentos,
y es un mercado de 30 millones
de personas”. De cualquier modo,
concuerda con la visión de que el
bloque camina con suma dificultad. “En estos momentos, el Mercosur no existe”. l
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La deriva política como inicio
de la “decadencia” del bloque
expresidentes llaman a retomar el enfoque comercial de la alianza
E
l segundo ciclo de
Política y Economía
organizado por El
Observador, bajo el
título de Mercosur,
entre la región y el mundo, fue
redondeado por los comentarios
de dos expresidentes de Uruguay,
Luis Alberto Lacalle y Jorge Batlle, del embajador Julio Lacarte
Muró, y el diputado paraguayo
Óscar Tuma. Básicamente, hicieron un llamado a revisar las bases del bloque, para que retome la
senda de una alianza comercial.
Algunos lo hicieron con cierta
dureza.
“La deriva política inició la
decadencia del Mercosur”, espetó el expresidente Lacalle, cuyo
período al frente del Ejecutivo,
entre 1990 y 1995, vio nacer el
Mercosur, que tenía el cometido
de establecer un conglomerado
regional a nivel comercial. “Se
dice que hay que ser el espejo de
la Unión Europea (UE); no sé por
qué a alguien se le ocurrió que el
Mercosur iba a ser algo parecido
o igual a la UE. La UE, que calma
la mala conciencia comercial con
donaciones, contribuyó sin dolo
con recursos para crear el Parlamento del Mercosur. Y quién dijo
que necesitábamos un Parlamen-
“inventó” el Mercosur político fue
“nuestro amigo” Fernando Henrique Cardoso, expresidente brasileño. Transformó el bloque en un
“proyecto político, no comercial,
y eso quitó margen de maniobra”
a Uruguay.
Acuerdos modestos
Los expresidentes Luis Alberto Lacalle y Jorge Batlle. m. Umpiérrez
to para el Mercosur. Así comenzamos a enredarnos en discusiones
políticas”, dijo Lacalle.
El exmandatario señaló que
el bloque hoy está sumergido en
“enredos” entre lo comercial y lo
político, y que existe una visión
que prioriza las solidaridades
entre gobiernos, cuando lo que
debería primar es la asociación
de países.
Lacalle llamó a Uruguay y Paraguay a utilizar el instrumento
del veto para presionar y hacer
sentir sus posiciones, en un Mer-
cosur en el que han prevalecido
las posturas y opiniones de Argentina y Brasil. “Es hora de hacer
funcionar la institucionalidad”,
señaló. Añadió que el actual vínculo no da para más, “ni siquiera
para Brasil”.
El también expresidente Jorge
Batlle dijo coincidir con el punto
de vista de Lacalle y agregó que
Uruguay, dentro del Mercosur,
tiene poco margen de maniobra.
“Hoy para participar hay que
formar parte de una región más
grande, si no, no estás en el juego”,
afirmó. Batlle recordó que quien
El diplomático y exministro de Industria, Julio Lacarte Muró, dijo
que el lanzamiento del Mercosur
debía significar una inserción a
nivel internacional y negociar
acuerdos a escala global. Eso se
cumplió en parte, señaló Lacarte Muró. “El Mercosur ha hecho
acuerdos modestos con algunos
países, al margen totalmente de
las corrientes mundiales actuales”, aseveró. “Había una propuesta de Rusia y de China (para
acuerdos de libre comercio), y que
yo sepa, no pasó nada”.
“Hay que refundar el Mercosur, tocamos fondo”, dijo resueltamente Óscar Tuma, diputado del
oficialismo paraguayo. El político
indicó que “todo lo malo” le sucedió con el Mercosur, e indicó a la
cláusula 32, la que establece que
no se pueden hacer acuerdos comerciales con países por fuera del
bloque, como traba fundamental
para avanzar. l
en línea k ALfonso PrAt GAy
“El destrato argentino hacia Uruguay era impensado”
En su exposición comentó que
todo va a cambiar después de
las elecciones presidenciales
de 2015 en Argentina, porque
nada puede ser peor. ¿Por qué
no puede haber ajustes antes?
tilla que repetían todo el tiempo
era que se trataba de más de lo
mismo y de la profundización del
modelo. Y el modelo hace rato que
no funciona.
Porque no tienen la capacidad
técnica, política y moral para
desandar las propias medidas
que tomaron. Son los que instauraron la mentira del Indec
y cómo van a dar vuelta eso.
Dicen que no hay inflación, y
si no reconocés el problema difícilmente lo puedas resolver.
Además en la práctica, no solo
no reconocen los errores sino
que han ido profundizándolos con orgullo. En el último
cambio de gabinete la mule-
Los saqueos que empezaron en
Córdoba, ¿no alcanzan para que
el gobierno tome nota?
Los episodios de diciembre
dejaron en claro la ausencia
total del Estado más allá del
discurso que tiene el gobierno de la década ganada. Han
despreciado a las fuerzas de
seguridad, han desaparecido de
los sectores donde tenían que
estar. Es un populismo trucho,
hay un Estado muy extenso pero
muy débil, y lo vemos en estas
situaciones, donde se notaba lo
que sufrían estos ciudadanos.
Esta es la foto del fracaso de esta
última década. No me parece
que sea la foto de una situación
social, que por cierto es delicada,
sino de un Estado que a pesar de
tener los mayores recursos de la
historia se borró de las principales responsabilidades.
Te doy un ejemplo, cuando
asumió (Raúl) Alfonsín, hace 30
años, la recaudación tributaria
era de más o menos entre 13 y
14 puntos del PIB, y hoy está en
40 puntos del PIB. Tener estas
fotos, con tres veces más recursos que teníamos al inicio de la
democracia, es porque sos un
animal, no hay otra explicación.
En ese sentido, las trabas
argentinas a las importaciones
y las medidas contra Uruguay,
como las de los puertos, ¿proseguirán su camino?
Sí, toda la política exterior
de Argentina en esta última
década es estar en el chiquitaje,
hablarle a la tribuna con un
discurso que no es verdadero,
es mirarse al ombligo, y ni
siquiera considerar a nuestros
socios naturales y amigos.
El destrato que ha tenido la
política exterior argentina
hacia Uruguay en los últimos
10 años era impensado y es una
de las cosas que cualquier otro
gobierno, de cualquier signo, va
a cambiar.