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guía EDELVIVES DE LECTURA La obra Título Rumbo sur / Autor Manuel L. Alonso / Ilustradora Elena Odriozola / ADV, 50 / 114 páginas El autor Manuel L. Alonso nace en Zaragoza en 1948. Empezó publicando relatos en distintas revistas a la edad de quince años. Nunca le gustó acomodarse en ningún lugar concreto, de ahí que haya vivido en muchas partes distintas. Ha recibido numerosos premios. En 2005, esta novela fue galardonada con el XVI Premio Ala Delta de Literatura Infantil y tiene además publicados otros dos títulos en la misma colección en la Serie Azul. Argumento Temas Clara tiene diez años y una vida complicada. Está fuera de su casa de acogida con un permiso de quince días para estar con su padre que ha salido de la cárcel y a quien no ha visto desde hace mucho tiempo. La recuperación de la relación entre ambos pasará por hacer un largo viaje. Juntos comenzarán un recorrido rumbo sur sin apenas dinero y teniendo que hacer autoestop, pero con un final de trayecto cargado de momentos emotivos. • Las relaciones paternofiliales. Comentario • La música. • La mendicidad. • Los atracos. • La necesidad de afrontar retos. • Los viajes. • El mar. • El abandono en la infancia. • Las casas de acogida. • Los ríos y ciudades. La lectura nos sitúa en ese instante en que Clara sale de la casa de acogida tras obtener un permiso de la juez para quince días. Fuera, la espera su padre a quien no ve desde hace muchos años. Los primeros momentos son tensos, Clara se muestra reacia a recuperar la relación con su padre. Pero poco a poco las tensiones se van diluyendo, en el transcurso de un intenso viaje que servirá como vehículo para recuperar la relación entre ambos. Cargado de una sensibilidad y naturalidad extraordinarias, el autor presenta a los lectores la compleja infancia de una niña que solo tiene diez años. El lector simpatiza con la vida de la protagonista; también con la difícil situación del padre, y alivia la pena que siente cuando padre e hija finalmente se reencuentran. Reflexiones Nada más salir de la casa de acogida con un permiso de la juez de quince días, Clara tendrá que afrontar los primeros retos. Comenzar de nuevo a relacionarse con un padre al que no ve hace muchos años y al que tiene varias cosas que reprocharle. El hogar en el que ahora vive el padre, algo destartalado y en mitad de la nada, representa una vez más, como metáfora de su infancia, el abandono. El autor aleja al lector de esta idea cuando padre e hija emprenden un viaje en el que, no obstante, la ausencia de la madre también se hace patente. Los recuerdos de una vida pasada entre ambos les vienen a la mente en dos momentos, el primero con la música de Haydn y el último frente al mar en su llegada a Zahara de los Atunes. Actividades de aproximación 1. Una nueva casa Tras salir de la casa de acogida, Clara tiene que afrontar los primeros retos: vivir con su padre en una casa aislada y sin ningún entretenimiento aparente. Describe qué harías en un entorno como el que retrata la lectura, sin ordenador, Internet, etc. 2. Los autoestopistas El autoestop mediante el cual padre e hija recorren distintas ciudades y pueblos es una práctica que puede resultar peligrosa. Por fortuna, durante el viaje que realizan, no tienen grandes percances. Piensa sin embargo en este hecho. ¿A qué peligros podrían haberse enfrentado? Explica tu respuesta. Actividades de profundización 1. Recorriendo la misma ruta sobre el mapa Dibuja un mapa de España y localiza los siguientes lugares visitados por Juan y Clara: Toledo, Zamora, Salamanca, Ávila, Córdoba y Cádiz. 2. Aprovechando que el Tormes pasa por Salamanca…. Averigua qué otros ríos pasan por estas ciudades. Relaciona mediante flechas. Toledo Manzanares Córdoba Pisuerga Zamora Tajo Madrid Duero Orense Guadiana Mérida Guadalquivir Valladolid Miño Actividades de cierre 1. La vida de los compositores El padre de Clara sabía tocar muy bien la trompeta. Su hija recordaba cómo en su niñez le escuchaba interpretar piezas musicales tan magníficas como las de Haydn. Averigua datos sobre la vida de estos famosos compositores: Joseph Haydn, Mozart y Beethoven. 2. Instrumentos… ¿de cuerda o de viento? Investiga cuál de los siguientes grupos de instrumentos pertenecen a la familia de cuerda o de viento. Escribe sus nombres sobre las líneas. Taller de creatividad 1. La ciencia es alucinante Realiza el siguiente experimento. Hincha un globo con el aire de tus pulmones. Átalo. Después frótalo con fuerza sobre tu ropa. Coloca el globo encima de tu pelo… ¿qué ocurre? Vuelve a hacer la misma operación desde el principio, pero esta vez cuando acabes de frotar el globo colócalo rápidamente junto a una pared… ¿no es asombroso? Investiga cuál es el fenómeno físico que provoca estas reacciones. 2. Para ser conductor de primera… Vamos a ver qué tal andas de señales de tráfico. Coloca debajo de estas señales su significado. Inventa después una nueva señal. Sugerencia de actividades Actividades de aproximación Con las propuestas que aparecen bajo este epígrafe se pretende presentar el libro de una manera lúdica que estimule la lectura. • Los huertos urbanos. Juan, el padre de Clara, pretendía cultivar la parcela de terreno que le habían cedido los dueños de la casa. Es el momento en que la lectura ofrece al lector el siguiente título del libro que el protagonista sostiene entre sus manos, El agricultor autosuficiente. A partir de este breve relato se puede invitar a los alumnos a que conozcan un huerto urbano y, ¿por qué no?, tal vez pueda proponerse crear un espacio así en la escuela. • La mendicidad. Este tema se aborda en la lectura de dos maneras muy distintas. Primero, presentando el caso del mendigo que finalmente acaba por robar al padre de Clara. Pero el libro también narralos robos del padre y su mendicidad, y cómo oculta este hecho a su hija por vergüenza. La novela nos ofrece posibilidades para hablar acerca de este tema tan presente en nuestra realidad social. • El tabaco. En esta lectura también tienen cabida temas como el del tabaco, aunque muy de soslayo. Los niños que conviven cerca de personas fumadoras perciben el olor que desprenden los cigarros. Se puede abrir un debate en la clase para conocer cuál es la visión que tienen en torno a este asunto, los peligros que acarrea y la responsabilidad que los agentes sociales tienen sobre ello. • Adivina, adivinanza. Juan y Clara establecen un divertido juego a partir de las antiguas matrículas de coches. Se puede emprender una dinámica muy entretenida inventando otras nuevas palabras a partir de los ejemplos que la propia lectura ofrece. Actividades de cierre Una vez que los chicos y chicas hayan terminado de leer el libro también podemos sugerir actividades. En este bloque de sugerencias encontraremos actividades que podemos ir presentando en el aula a medida que nuestros alumnos y alumnas lean el libro. • Balada de la trompeta. Juan era un gran trompetista; él dice que no es un Miles Davis o un Dizzy Gillespie, pero es capaz de interpretar bien. Es un magnífico pretexto para dar a conocer a los alumnos las piezas musicales de estos genios, sin olvidar también al célebre maestro Louis Armstrong. • De lectura en lectura. El autor deja abiertas las puertas hacia otro tipo de literatura también fascinante y, a través de una recomendación: Clara acaba leyendo el libro Mi familia y otros animales de Gerald Durrell. Es una gran sugerencia para los alumnos. • Yo le pongo sazón, zon, zon… Como aperitivo podríamos comenzar con el ritmo de la gran cantante cubana Celia Cruz. Su música, nos puede servir como hilo conductor para conocer a otros grandes músicos cubanos: Compay Segundo, Rita Montaner… Actividades de profundización Solucionario Actividades de profundización 2. Toledo Manzanares Córdoba Pisuerga Zamora Tajo Madrid Duero Orense Guadiana Mérida Guadalquivir Valladolid Miño Fragmentos especiales —He hecho lo que he podido. He vuelto a la ciudad y he alquilado esta casa para que la juez me permitiera tenerte. Señalaba la casa más pequeña y más vieja. Clara, que se había hecho ilusiones al ver la grande, suspiró con desaliento. Dejó la mochila y le chaquetón en la entrada y se puso a inspeccionar la casa sin esperar a que su padre se la enseñase. (pág.11) Entonces apenas podía pronunciar el apellido del autor de aquella música, Haydn, pero ahora sabía incluso cómo se escribía. Nunca, en aquellos siete años, había vuelto a escuchar aquel concierto de Haydn. En ninguno de los hogares de adopción tenían el disco ni había querido ella pedir que se lo compraran. Y sin embargo, en ese momento, las notas del principio del concierto, la parte llamada allegro, sonaban dentro de su cabeza como si las estuviera oyendo. Así continuaron mientras el sol bajaba en el cielo tan lentamente como si aquel día no se fuera a acabar nunca. Clara procuraba no pensar, sobre todo no preguntarse cuánto tiempo tendrían que andar aún. No levantaba la vista porque confiaba en encontrarse de pronto con la sorpresa de que estaban entrando en un pueblo. (pág.65) EDELVIVES (pág.34)
