PATIENT EDUCATI N The American College of Obstetricians and Gynecologists WOMEN’S HEALTH CARE PHYSICIANS La Atención Durante el Trabajo de Parto, el Parto y el Postparto • SP087 Trabajo de parto prematuro y parto prematuro U n embarazo normal dura aproximadamente 40 semanas desde el primer día del último período menstrual. Cuando el trabajo de parto comienza antes de la semana 37 del embarazo, se le llama trabajo de parto prematuro. Casi la mitad de todos los partos prematuros en Estados Unidos son precedidos por trabajo de parto prematuro. Este folleto explica •los riesgos para la salud de un parto prematuro •los factores de riesgo y el diagnóstico •el manejo del trabajo de parto prematuro y el parto prematuro •qué puede hacer si corre el riesgo de tener un parto prematuro Trabajo de parto prematuro y parto prematuro El trabajo de parto prematuro se define como contracciones regulares del útero que dan lugar a cambios en el cuello uterino y que comienzan antes de la semana 37 del embarazo. Estos cambios incluyen borramiento (cuando se adelgaza el cuello uterino) y dilatación (cuando el cuello uterino se abre para que el feto pueda entrar en el canal de parto). Cuando el parto ocurre entre la semana 20 y la semana 37 del embarazo, este se denomina parto prematuro. Riesgos para la salud de un parto prematuro Un parto prematuro es una situación preocupante ya que los bebés que nacen antes de tiempo no se han desarrollado completamente. Podrían nacer con problemas graves de salud. Algunos problemas de salud, como la parálisis cerebral, pueden durar toda la vida. Otros, como los problemas de aprendizaje, aparecen posteriormente en la niñez o incluso en la adultez. El riesgo de que ocurran problemas de salud es mayor en los bebés que nacen antes de la semana 34 del embarazo. No obstante, los bebés que nacen entre la semana 34 y la semana 37 del embarazo también corren peligro. Es importante saber si existen factores de riesgo para un parto prematuro, reconocer las señales y los síntomas de trabajo de parto prematuro y recibir atención médica desde un principio si presenta señales y síntomas. El trabajo de parto prematuro puede cesar por su cuenta. Si esto no sucede, se pueden administrar tratamientos que pueden aplazar el parto y reducir el riesgo de complicaciones para el bebé. Factores de riesgo Algunas mujeres corren un mayor riesgo de tener un parto prematuro que otras. Las mujeres que han tenido un parto prematuro previo corren el mayor riesgo. El riesgo también es elevado en las mujeres con un cuello uterino corto. Mientras más corto sea el cuello uterino, mayor será el riesgo de que ocurra un parto prematuro. Otros factores que se han asociado con un parto prematuro son problemas médicos obstétricos y ginecológicos previos, complicaciones en el embarazo actual y factores del estilo de vida (vea el cuadro “Factores de riesgo para un parto prematuro”). Diagnóstico Las señales y los síntomas de trabajo de parto prematuro aparecen en el cuadro “Señales de advertencia de trabajo de parto prematuro”. Si presenta alguna de estas señales o síntomas, no espere. Llame al consultorio de su obstetra o de otro profesional de atención médica o vaya al hospital. Aun si las contracciones son regulares, solo se puede diagnosticar trabajo de parto prematuro cuando se detectan cambios en el cuello uterino. Su obstetra u otro profesional de atención médica puede realizar un examen pélvico para determinar si el cuello uterino ha comenzado a cambiar. Es posible que sea necesario examinarla varias veces durante un período de unas horas. También se podría dar seguimiento a las contracciones. Manejo del trabajo de parto prematuro Es difícil para los profesionales de atención médica pronosticar cuáles mujeres que presentan trabajo de parto prematuro tendrán un parto prematuro. Solo alrededor de un 10% de las mujeres que presentan trabajo de parto prematuro dan a luz dentro de un plazo de 7 días. En casi 30% de las mujeres, el trabajo de parto prematuro cesa por su cuenta. Señales de advertencia de trabajo de parto prematuro Llame a su proveedor de atención médica de inmediato si observa alguna de estas señales o síntomas: • Cambio en el tipo de secreción vaginal (líquida, con mucosidad o hemorrágica) • Aumento en la cantidad de secreción • Presión pélvica o en la parte inferior del abdomen • Dolor constante y sordo en la espalda • Cólicos abdominales leves, con o sin diarrea • Contracciones regulares o frecuentes u opresión uterina, a menudo sin dolor • Ruptura de membranas (romper fuente, ya sea que el líquido salga a chorros o poco a poco) Si presenta síntomas de trabajo de parto prematuro, su obstetra u otro profesional de atención médica podría ordenar ciertos exámenes. El examen de ecografía (ultrasonido) transvaginal puede utilizarse para medir la longitud del cuello uterino. Se podría medir el nivel de una proteína que se llama fibronectina fetal en las secreciones vaginales. La presencia de esta proteína está asociada con partos prematuros. Los resultados de estos exámenes pueden determinar si debe ser hospitalizada o si necesita atención especializada de inmediato. Sin embargo, los resultados de los exámenes no pueden pronosticar si llegará a tener un parto prematuro. Si el trabajo de parto prematuro continúa, la manera en que se maneja se basa en lo que se Factores de riesgo para un parto prematuro A pesar de lo que se sabe sobre estos factores de riesgo, es mucho lo que queda por aprender sobre el trabajo de parto prematuro y el parto prematuro. Muchas mujeres que tienen un parto prematuro no presentan factores de riesgo específicos. Historial obstétrico y ginecológico • Parto prematuro previo • Cuello uterino de longitud corta según la medida obtenida por ecografía (ultrasonido) transvaginal • Historial de ciertos tipos de cirugía del útero o del cuello uterino • Intervalo breve entre embarazos Complicaciones del embarazo • Embarazos múltiples • Sangrado vaginal durante más de un trimestre de embarazo • Infecciones durante el embarazo Factores del estilo de vida • Bajo peso antes del embarazo • Fumar durante el embarazo • Abuso de sustancias durante el embarazo Otros factores • Edad menor de 17 años o mayor de 35 años • Raza afroamericana • Nivel socioeconómico bajo considere mejor para su salud y la de su bebé. Si existe la posibilidad de que su bebé se beneficie al aplazar el parto, se podrían administrar medicamentos para 1) promover el desarrollo de los pulmones y otros órganos del bebé (corticoesteroides), 2) ayudar a reducir el riesgo de que ocurra parálisis cerebral (sulfato de magnesio) y 3) ayudar a prolongar el embarazo para que los primeros dos medicamentos tengan tiempo para actuar (tocolíticos). Cuando el trabajo de parto prematuro ha llegado a un punto en que no se puede detener o si hay motivos para que su bebé nazca antes de lo previsto, es necesario dar a luz al bebé. Corticoesteroides Los corticoesteroides son medicamentos que atraviesan la placenta y ayudan a acelerar el desarrollo de los pulmones, el cerebro y los órganos digestivos del bebé. Es más probable que estos medicamentos beneficien a su bebé cuando se administran entre la semana 24 y la semana 34 del embarazo. Si es probable que dé a luz dentro del plazo de 1 semana, se administrará un solo ciclo de corticoesteroides. Los mayores beneficios de los corticoesteroides ocurren al cabo de 2 días de haber administrado la primera dosis, aunque algunos pueden ocurrir después de 24 horas. Sulfato de magnesio El sulfato de magnesio es un medicamento que se puede administrar si ha estado embarazada por menos de 32 semanas, presenta trabajo de parto prematuro y corre el riesgo de dar a luz dentro de las próximas 24 horas. Este medicamento puede reducir el riesgo de que ocurra parálisis cerebral asociada con partos muy prematuros. El sulfato de magnesio puede producir efectos secundarios leves en la mujer, como náuseas, diarrea y debilidad. Aunque pueden ocurrir complicaciones graves, estas ocurren raras veces. Tocolíticos Los tocolíticos son medicamentos que se usan para aplazar el parto por un período breve (hasta por 48 horas). Estos medicamentos permiten que transcurra más tiempo para administrar corticoesteroides o sulfato de magnesio o para trasladarla a un hospital que ofrezca atención especializada para bebés prematuros. Además de su función para proteger contra la parálisis cerebral, el sulfato de magnesio también se puede usar como medicamento tocolítico. Los medicamentos tocolíticos pueden causar efectos secundarios. Algunos de ellos pueden ser graves. Los efectos secundarios dependen del tipo de medicamento. Los tocolíticos se administran cuando se considera que los beneficios del tratamiento son mayores que los riesgos. Las mujeres que presentan síntomas de trabajo de parto prematuro pero no revelan cambios en el cuello uterino no se benefician del tratamiento tocolítico. Tampoco es beneficioso seguir administrando tocolíticos después de que se haya detenido el trabajo de parto. Manejo del parto prematuro Si el trabajo de parto no cesa y parece que dará a luz a su bebé antes de lo previsto, usted y su bebé generalmente recibirán los cuidados de un equipo de profesionales de atención médica. Este equipo podría disponer de un neonatólogo, un médico que se especializa en el tratamiento de problemas de recién nacidos. Los cuidados de su bebé dependen de cuánto tiempo antes de lo previsto nace el bebé. Las unidades de atención intensiva neonatal (NICU) de alto nivel ofrecen estos cuidados especializados a bebés prematuros. Estas unidades están mejor equipadas y disponen de médicos y enfermeras con capacitación avanzada y experiencia para cuidar de bebés prematuros. La podrían trasladar a un hospital que ofrece esta atención especializada si presenta trabajo de parto antes de tiempo. Es más seguro dar a luz a un bebé prematuro en estos hospitales que trasladar al bebé después del parto. Después de que nace el bebé, el o ella podría necesitar seguir recibiendo cuidados intensivos. Algunos bebés permanecen en la NICU durante semanas y a veces meses. Si corre el riesgo de presentar trabajo de parto prematuro Si ha tenido un parto prematuro previo y planea otro embarazo, puede ser útil tener un examen médico antes de la concepción para ayudarla a lograr el mejor estado de salud posible antes de quedar embarazada. Cuando quede embarazada, asegúrese de comenzar a recibir atención prenatal desde un principio. Le podrían recomendar acudir a un profesional de atención médica con experiencia en el manejo de embarazos de alto riesgo. Su profesional de atención médica examinará su historial de embarazos y los detalles de su embarazo actual. Es probable que deba acudir a su profesional de atención médica con frecuencia durante su embarazo para vigilar de cerca su estado de salud. También hay tratamientos que se pueden administrar para ayudar a evitar que ocurra un parto prematuro si tiene factores de riesgo, como un parto prematuro previo o cuello uterino corto. Los siguientes tratamientos se podrían recomendar según su situación individual: • Inyecciones de progesterona: Si dio a luz a un solo bebé durante el parto prematuro previo y está embarazada ahora con un solo bebé, podría recibir inyecciones de progesterona entre la semana 16 y la semana 24 del embarazo. Esta es una hormona que puede prevenir que ocurra otro parto prematuro. Estas inyecciones se siguen administrando semanalmente hasta el parto o hasta la semana 37 del embarazo. • Cerclaje: Si tiene el cuello uterino corto y ha tenido un parto prematuro previamente, también se puede realizar un procedimiento que se llama cerclaje. En este procedimiento, el cuello uterino se cierra con suturas. El cerclaje se recomienda en las mujeres con embarazos de un solo bebé únicamente ya que puede aumentar el riesgo de que ocurra un parto prematuro si se realiza en embarazos múltiples. • Progesterona vaginal: Este tratamiento se puede administrar si no ha tenido un parto prematuro previo pero se determina que el cuello uterino es muy corto antes o en la semana 24 del embarazo. La progesterona vaginal es un gel que usted misma se coloca en la vagina todos los días hasta el parto o hasta la semana 36 del embarazo. En las mujeres embarazadas con un solo bebé, este tratamiento puede reducir el riesgo de dar a luz antes de la semana 35 del embarazo en casi la mitad. Por último... Es importante poder reconocer las señales y los síntomas de trabajo de parto prematuro. Si presenta señales de advertencia de trabajo de parto prematuro, llame al consultorio de su obstetra u otro profesional de atención médica de inmediato. Si tuvo un bebé prematuro previamente, su riesgo de tener otro parto prematuro es mayor. Acuda a su obstetra u otro profesional de atención médica antes del embarazo y frecuentemente durante el mismo para dar seguimiento a su salud y la de su bebé. Si en efecto ocurre trabajo de parto prematuro, hay medidas que se pueden tomar para prolongar el embarazo. Si su bebé nace antes de tiempo, se pueden administrar tratamientos e internarlo en la unidad NICU para ayudar a reducir el riesgo de que sufra problemas de salud a largo plazo. Glosario Atención prenatal: Programa de atención médica para una mujer embarazada antes del nacimiento del bebé. Cerclaje: Procedimiento mediante el cual se cierra la entrada del cuello uterino con suturas para evitar o aplazar un parto prematuro. Corticoesteroides: Hormonas que se administran para promover el desarrollo de los pulmones del feto, para la artritis o para otros problemas médicos. Cuello uterino: El extremo inferior y más estrecho del útero ubicado encima de la vagina. Ecografía (ultrasonido) transvaginal: Tipo de ecografía que usa un instrumento especialmente diseñado para colocarlo en la vagina. Examen pélvico: Examen físico de los órganos reproductores de la mujer. Feto: Organismo que se desarrolla en el útero desde la novena semana del embarazo hasta el final del embarazo. Fibronectina fetal: Proteína que contribuye a que el saco amniótico permanezca conectado a la parte interior del útero. Neonatólogo: Médico que se especializa en el diagnóstico y tratamiento de trastornos que afectan a bebés recién nacidos. Obstetra: Médico que se especializa en los cuidados de las mujeres durante el embarazo, el trabajo de parto y en el período de posparto. Parálisis cerebral: Discapacidad a largo plazo del aparato nervioso que afecta a los niños pequeños donde el control de los movimientos o la postura es anormal y no se produce a causa de una enfermedad reconocida. Placenta: Tejido que sirve para alimentar al feto y eliminar sus desechos. Progesterona: Hormona femenina que se produce en los ovarios y prepara el revestimiento del útero para el embarazo. Sulfato de magnesio: Medicamento que puede evitar que ocurra parálisis cerebral cuando se administra a mujeres en trabajo de parto prematuro que corren el peligro de dar a luz antes de la semana 32 del embarazo. Tocolíticos: Medicamentos que se usan para desacelerar las contracciones del útero. Trimestre: Cualquiera de los tres períodos de 3 meses en el que se divide el embarazo. Útero: Órgano muscular ubicado en la pelvis de la mujer que contiene al feto en desarrollo y lo nutre durante el embarazo. Este Folleto Educativo para Pacientes fue elaborado por el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists). Diseñado para ayudar a los pacientes, presenta información actualizada y opiniones sobre temas relacionados con la salud de las mujeres. El nivel de dificultad de lectura de la serie, basado en la fórmula Fry, corresponde al grado escolar 6to a 8vo. El instrumento de Evaluación de Idoneidad de Materiales (Suitability Assessment of Materials [SAM]) asigna a los folletos la calificación “superior”. Para asegurar que la información es actualizada y correcta, los folletos se revisan cada 18 meses. La información descrita en este folleto no indica un curso exclusivo de tratamiento o procedimiento que deba seguirse, y no debe interpretarse como excluyente de otros métodos o prácticas aceptables. Puede ser apropiado considerar variaciones según las necesidades específicas del paciente, los recursos y las limitaciones particulares de la institución o tipo de práctica. Derechos de autor enero 2016 por el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists). Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación podrá reproducirse, almacenarse en un sistema de extracción, publicarse en Internet, ni transmitirse de ninguna forma ni por ningún método, sea electrónico, mecánico, de fotocopiado, grabación o de cualquier otro modo, sin obtener previamente un permiso por escrito del editor. ISSN 1074-8601 Las solicitudes de autorización para hacer fotocopias deben dirigirse a: Copyright Clearance Center, 222 Rosewood Drive, Danvers, MA 01923. Para pedir Folletos de Educación de Pacientes en paquetes de 50, sírvase llamar al 800-762-2264 o hacer el pedido en línea en sales.acog.org. The American College of Obstetricians and Gynecologists 409 12th Street, SW PO Box 96920 Washington, DC 20090-6920