Erwing Goffman nació en Canadá en 1922. Obtuvo su primer título universitario (Bachelor of Arts) en la Universidad de Chicago, donde se graduó de Master of Arts en 1949 y de Philosophical Doctor en 1953. Vivió por espacio de un año en una de las pequeñas islas Shetland, reuniendo material para una tesis sobre esa comunidad. Más adelante actuó como científico invitado en el Instituto Nacional de Salud Mental de Washington. Goffman es autor de varios artículos y reseñas bibliográficas, aparecidos en Psychiatry, American Journal of Sociology y otras publicaciones periódicas, y entre sus obras principales se destacan La presentación de la persona en la vida cotidiana (1956), Relaciones en público (1971), Internados ( 1961), Estigma .La identidad deteriorada (1964), Interaction Ritual (1967) y Forms of Talk (1981). Fue miembro del Departamento de Sociología de la Universidad de Berkeley, y Profesor de Sociología en la Universidad de Pensilvania. En 1982 es nombrado presidente de la American Sociological Association. Fallece meses después en Filadelfia, Pensilvania, Estados Unidos. Sobre Internados… En Internados. Ensayos sobre la situación social de los enfermos mentales (1961) asistimos al intento del autor por esclarecer la situación del paciente internado. Esta obra consta de 4 ensayos que parten de fuentes sociológicas distintas y se refiere a las instituciones totales en general, y a un caso particular de ellas: los hospitales psiquiátricos. Con el objetivo de aprender algo sobre el mundo social de los pacientes hospitalizados, Erwing Goffman desarrolló un trabajo de campo durante un año en el Hospital St. Elizabeth de Washington. Cita el autor desde el Prefacio de este trabajo: “Me inicié en el rol de asistente del director de gimnasia, si me apuraban, confesaba ser en realidad un estudiante de las actividades recreativas y la vida de la comunidad. De este modo podía pasar todo el día con los pacientes evitando todo contacto social con el personal y prescindiendo de llevar una llave conmigo. No dormía en las salas y la dirección del hospital estaba enterada de mis fines. Creía entonces y sigo creyendo, que cualquier grupo de personas (…) forma una vida propia que, mirada de cerca, se hace razonable y normal; y que un buen modo de aprender algo sobre cualquiera de esos mundos consiste en someterse personalmente, en compañía de sus miembros, a la rutina diaria de las menudas contingencias a la que ellos mismos están sujetos”. Fuente: GOFFMAN, E. (1961): Internados. Ensayos sobre la situación social de los enfermos mentales. Amorrortu Editores, Buenos Aires.